Arabia Saudí ha puesto la pasta para que Rafa Nadal sea su embajador del tenis y así limpiar su imagen ante el mundo, ya ha comprado a multitud de deportistas que anteponen los petrodólares a los derechos humanos y no será porque necesiten el dinero, luego van dando lecciones morales.
1.Asegúrate de que tengas vocaci��n por la carrera.
2.Cultiva la disciplina:cualquier carrera exige cierto nivel de compromiso, la materia de Derecho implica conocer la ejecución de normas, leyes y materias legales cuyos procesos pueden llegar a ser tediosos
3.No faltes a clase
4.Organiza un plan de estudios:Algunos estudiantes señalan que tener un calendario u organigrama donde apuntar exámenes y lecturas les ha permitido prepararse mejor para cada clase.
5.Aprende a expresarte bien:Pese a que tu conocimiento se basa en buena parte del material teórico, tu capacidad de hablar y relacionarte con otros es una herramienta imprescindible para ejercer.
6.Participa en actividades extracurriculares:El aprendizaje también ocurre fuera del aula. Mira qué opciones extracurriculares tienes a la mano y desarrolla nuevas habilidades.
7.Ten una actitud de servicio:Tu trabajo es, al fin de cuentas, un servicio que ofreces a la comunidad, por lo que debes ser un agente de cambio para ella.
8.Esfuérzate por trabajar duro:Todo compromiso trae recompensas. La calidad de tu trabajo se verá reflejado en tu misión para obtener los mejores resultados de tus futuros clientes.
9. Continúa tu formación:Un buen profesional jamás deja de aprender. Sigue capacitándote en áreas que complementen tu formación y mejora tus cimientos laborales.
10.Desarrolla un gusto por la lectura:El Derecho se basa en una buena parte teórica que debes conocer a la perfección para después llevarlo a la práctica. El experto sabe de su área porque se ha dedicado a conocerla a detalle.
Se trata del primer condenado a muerte en Estados Unidos que es ajusticiado con este controvertido método, del que no hay registros oficiales en otros países.
"Esta noche, Alabama hace dar a la humanidad un paso atrás" fue la última frase de Smith, quien murió a los 58 años tras casi tres décadas en el corredor de la muerte.
Smith fue ejecutado por las autoridades del estado sureño la noche del jueves mediante hipoxia de nitrógeno.
En su último día de vida, Smith recibió la visita de miembros de su familia, dos amigos, su consejero espiritual y su abogado.
Su última comida fue bistec y huevos con croquetas de papa.
Smith fue declarado culpable del asesinato de Elizabeth Sennett en 1988. Según la sentencia, la apuñaló y la golpeó hasta la muerte por instrucción de su marido, Charles Sennett, un predicador endeudado que orquestó el plan para cobrar el dinero del seguro.
Las últimas palabras de Kenneth son una clara crítica a la política de Alabama, una excepción en la tendencia general de Estados Unidos que cada vez aplica menos la pena de muerte.
Repulsa internacional y fuertes críticas por la ejecución por primera vez de un preso en Estados Unidos mediante la asfixia con gas nitrógeno. El reverendo que lo acompañó durante el proceso ha negado que fuese indoloro y ha relatado que pasó minutos retorciéndose: “Tenemos que hacer todo lo posible para que esto no vuelva a pasar”, ha pedido en una rueda de prensa posterior
La oficina de derechos humanos de la ONU ha alertado de que el nuevo método podría equivaler a tortura o tratos inhumanos según la legislación internacional. La Unión Europea ha recordado que se opone firmemente a la pena de muerte porque es una violación del derecho a la vida y “la negación definitiva de la dignidad humana”
La Dra. Mary-Claire King le enseña a las Abuelas de Plaza de Mayo cómo se calcula el Índice de Abuelitud, un instrumento genético-estadístico que permite determinar el parentesco de una persona con sus abuelos cuando sus padres no están. Por ejemplo, cuando fueron secuestradora por la dictadura.
«La paz es, a su vez, el presupuesto necesario para el reconocimiento y la efectiva protección de los derechos humanos, tanto en los Estados como en el sistema internacional. Al mismo tiempo, el proceso de democratización del sistema internacional, que es el camino obligado para la realización del ideal de la «paz perpetua», en el sentido kantiano de la palabra, no puede avanzar sin una extensión gradual del reconocimiento y protección de los derechos humanos por encima de los Estados. Derechos humanos, democracia y paz son tres elementos necesarios del mismo movimiento histórico: sin derechos humanos reconocidos y protegidos no hay democracia; sin democracia no existen las condiciones mínimas para la solución pacífica de los conflictos. Con otras palabras, la democracia es la sociedad de los ciudadanos, y los súbditos se convierten en ciudadanos cuando se les reconoce algunos derechos fundamentales; habrá una paz estable, una paz que no tenga la guerra como alternativa, sólo cuando seamos ciudadanos no ya solamente de este o aquel Estado, sino del mundo.»
Norberto Bobbio: El tiempo de los derechos. Editorial Sistema, págs. 14. Madrid, 1991