#he estado evitando mencionar algo

[flash56-chase05]

Casi me da algo mientras veía el partido 😅.

De mientras, me he acordado del pequeño drabble que escribí meses después de que Argentina hubiese ganado el Mundial masculino, en el que España se debatía entre quién tenía más ganas de que ganase después del partido entre Francia e Inglaterra, y que le terminaba deseando a Argentina que evitase que Francia se alzase con la victoria.

Pues... ahora ha tenido su oportunidad de evitar que Inglaterra lo hiciese. Y lo hemos conseguido.

[yinnydegoxs]

¿Amor o amistad? Parte 22

Gaster desvió la mirada, había estado evitando mencionar a la reina de cualquier forma posible, porque no quería recordarle aquella promesa, aun así, sabía que algún día lo recordaría. Respiró hondo mientras levantaba la vista.

—Lo recuerdo, ¿no le dirás al rey o sí?

—Su orden era no decir a los niños, yo ya no soy eso y, de todos modos, ¿no he guardado el secreto del sótano todos estos años?

—Bueno. Tienes un punto. —Tira la cabeza para atrás. —¿Qué es lo que sabes hasta ahora?

—Pues, no demasiado, lo que todos, que era la reina de los monstruos, una madre amorosa y buena esposa, que cedió su título por estar de luto y ¿eh, que más…?

—Veo que todos dicen lo mismo… —suspira con fastidio.

—¿Qué tanto de lo que dicen es verdad?

—Diría que solo una sola de esas cosas es cierta, dos como mucho… bajo mi punto de vista.

—¿De verdad? Solo suéltelo doc.

Él realmente dudo que estuviera bien decir aquello, más cuando el rey mismo había prohibido hablar sobre la verdad de Toriel, lo cual realmente lo hacía enojar. Se permitió a sí mismo desobedecer las órdenes del rey, primero divagando un poco, afirmando que era cierto, sin duda alguna, que efectivamente fue una buena madre, pero cuando quiso hablar muy por arriba sobre lo del luto, simplemente, explotó.

Despotricó todo lo que guardaba, que la realidad era que ella desecho la idea del rey, de que ella prefería una forma pacífica de conseguir las almas y como no había podido obligar al rey a seguir su ilógica idea, abandono el cargo maldiciendo a Asgore por ser un asesino a sangre fría. No podía negar que lo era, ¿pero los humanos que bajaron hasta ahora le dieron una opción pacífica? Sus manos temblaron de rabia de solo recordar su estupidez.

Intento que las palabras dejaran de salir, sin embargo ahora que había abierto la caja de pandora, no podía cerrarla; habló de las puertas de las ruinas, donde su magia aún estaba tan fuerte como el día que la encontró, magia de un monstruo jefe, magia para sellar a quienes podían, o no, estar de acuerdo con su fanatismo de paz al nivel de lo absurdo, de cómo suponía que ella no solo tuvo el primer contacto con los humanos que llegaron, sino que no le impidió el paso a ninguno ni mucho menos se atrevió a poner su plan en marcha. Que no tenía las agallas para matar un humano para cruzar la barrera, no las tenía para salir, sino que solo quería arriesgar la salud mental y física de Asgore a cambio de que ella mantuviera la suya.

—N-No debería decir más… —murmuró al final, tenía que callar, debía hacerlo.

Luego de por fin poder decir lo que pensaba, había sido como librarse de un gran peso de sus hombros, la sensación no duro tanto como le gustaría cuando sintió el ruido de una lanza clavarse en el suelo y como un destello rojo salía del faltante ojo de la chica.

La había cagado.

—¡Undyne! —La tomó del brazo antes de que pudiera hacer algo —¡Ten un poco de control!

—¡¿En serio espera que lo tenga luego de saber eso?! ¡Ella de verdad nos traiciono a todos!

—¡Shh! —Uso su magia azul para hacerla sentar de golpe —si al final te conté esto no es para que hagas una locura, ¡el rey me matara si sabe que te enteraste de la verdad!

—¡¿Por qué demonios aguanto tanto sin hacer o decir nada?!

—Porque el rey no necesitaba otra razón para preocuparse y no quiero que la tenga ahora.

—¿Por qué demonios el rey encubriría la traición de la reina?

—Porque la ama…

La chica simplemente murmuró alguna especie de palabras malsonantes sin llegar a entenderse del todo, pero era obvio que estaba maldiciendo, después de lo que podía considerarse la hora más larga de sus vidas, finalmente su magia se apagó y su lanza desapareció. El mayor solo pudo suspirar con cierto alivio y al final se volvió a sentar.

—El grandote realmente es solo una maldita bola de pelos y amor a pesar de todo.

—Si, lo es…—no pudo evitar sonreír por esa conclusión —y es el rey, no le digas grandote.

—Oh vamos, —respira hondo —va a ser jodidamente difícil mantenerme tranquila.

—Bienvenida a mi mundo, te acostumbraras.

—Maldición, si sabía que era así de jodido ¡agh!

El esqueleto no pudo evitar reír por lo bajo mientras la chica hacía una rabieta.

—Es frustrante, sí.

—Hey… —lo miró un momento —bueno, se puede decir que al menos ya está mejor ¿no doc?

—Ah… —la miró con sorpresa —vaya… quien lo diría, eres muy buena distrayendo.

—Si pude distraer a Papyrus con clases de cocina puedo distraer a quien sea.

—Sobre eso, ¿por qué tiene que ser una explosión de tomate para hacer salsa?

Undyne se quedó tensa un momento, rascando su nuca en un vago intento de no contestar, Gaster la miró con insistencia, pero después solo rio mientras se limpiaba la cara. Se lo dejaría pasar, prefería que su cocina fuera una zona de guerra a que Papyrus estuviera en una verdadera.

—Por cierto, doc, ya que seguramente no hablaremos de esto de nuevo, hay una pequeña cosita que me quedo picando.

—Suena justo, ¿qué es?

—Soltó toda la mierda que tenía dentro, pero… bueno, solo me da la impresión de que esquivo aclarar si era una buena esposa.

—Pff… —miró a otro lado —por supuesto que no lo era, esa maldita perra egoísta.

—Wow, ni siquiera en eso puede haber una buena opinión ¿huh?

—Bueno, ya me caía de mala manera el modo en el que no dejaba que el rey cargara a su propio niño o que no lo dejara entrenar, por dios, ni siquiera se ocupaba de Asgore cuando era su…

Se tapó la boca de inmediato, frenando en seco lo que iba a decir y miró de reojo a Undyne, que parecía haberse quedado pensando la última palabra que faltaba.

—¡Esta de puta coña! ¡Ella nunca…!

—Diablos —le tapó la boca —ni se te ocurra decir eso a NADIE, juro que antes que el rey me mate yo te mato a ti.

—Ugh, ¡agh! Hasta yo sé que eso es una sentencia de muerte ¿pero cómo demonios lo sabe?

—Ah, se lo pregunte al rey… solo surgió de un momento a otro y me entere de ese detalle…

—¿Es por ello que estaba mal hace un rato?

—Tiene que ver, hace… hace tiempo le pedí a su majestad que me… permitiera ayudarlo, pero actualmente es como su trato con la reina, no me ha permitido acercarme cuando es su celo.

—Bueno, se puede decir que es más atrevido con el tiempo ¿eh doc?

—Ugh, por dios, —se cubrió la cara con una mano, muerto de vergüenza —juro que si esta conversación sale de aquí te asesino.

—¡JA! Quiero ver que lo intente.

—No juegues con fuego, mocosa.

—Pff, vamos, —se levantó de un salto —soy buena guardando secretos, nada saldrá de aquí doc.

—Eso espero —se levanta también —Y Undyne… —la chica lo miró, curiosa. —Gracias.

—No hay de que doc, y no espere que lo deje volver al laboratorio.

—Lo sé, volveré a casa, Papyrus debe estar preocupado.

Dicho aquello, el esqueleto tomó su camino por lo que quedaba de Waterfall para llegar a la zona nevaba y sin mucho más llegar a casa, bostezó en el trayecto un par de veces, no se dio cuenta de que paso toda la noche en el laboratorio, prefería no volver a pensar cuanto tiempo se estuvo atormentando y no lo haría ahora. Cuando llegó a la puerta se pensó que quizá necesitaba primero cerciorarse de que su cara no estaba tan marcada por lo de antes, quizá era un poco tarde, podía haberse lavado en el río y decir que se entretuvo en horario nocturno entre las montañas de basura y se le había pasado el tiempo.

Ya era un poco tarde para ese plan.

—Estoy en casa.

Apenas terminó de pronunciar esas palabras, Papyrus se tiró a él con la fuerza de una avalancha, lo que hizo que ambos terminaran enterrados en la nieve de la entrada, con los años su pequeño esqueleto había pegado varios estirones, llegando a medir más que él por unos pocos centímetros, esperaba que se quedara en algún punto fijo tarde o temprano.

Después de un minuto o quizá dos, le permitió levantarse y limpiar la nieve de su ropa, mientras estaba ocupado en aquello, pudo sentir como era observado insistentemente por su joven esqueleto, para fortuna suya, Papyrus no solía usar los lentes que le permitían ver perfectamente, solo lo hacía para ver las recetas o leer, pero el resto del tiempo lo hacían ver menos “cool” o así le decía. Probablemente aprendió eso de Undyne o de algún juego de palabras de Sans.

Si tenía la suficiente suerte, podría no notar las marcas de su cara.

Pensaba que el joven querría pasar el día entrenando con puzles o poniendo a prueba su barra de vida con nuevas recetas de espaguetis, o incluso ver el programa de Mettaton que, por desgracia, estaba la mayor parte del día, no es que hubiese muchos que quisieran estar en la televisión. Sin embargo, termino siendo cargado por su hijo y llevado adentro, siendo regañado de camino, él se había convertido en la autoridad en casa cuando se trataba del orden o la salud, de comer bien, de dormir lo adecuado, siempre peleaba con Sans por dormir demasiado y con él todo lo contrario, a pesar de su mala visión, sus ojeras lo delataban la mayoría de las veces.

No podría decir que no estaba cansado, emocionalmente estaba agotado y físicamente debía decir que también ya que no había tomado nada de café para mantenerse lúcido, habría sido una mala opción, solo habría hecho que su ansiedad y sus ideas negativas fueran mucho más fuertes.

Antes de darse cuenta, Papyrus lo dejo en la cama y seguía con su discurso de como descansar lo adecuado era indispensable para que los puzles salieran de forma eficiente. Solo se quedó escuchando, eso de ser demasiado trabajador lo había sacado de él y lo de ser tan entusiasta con todo probablemente lo aprendió de Undyne mientras le deseducaba en el arte de la cocina para hacerlo un arte de pasión, guerra y destrucción.

Se dejo caer de lado, quizá debía aprovechar que lo dejaría descansar, al menos hasta que Sans volviera y tuvieran de nuevo la discusión de no tener su cuarto en orden. Tampoco fue de sus mejores ideas enseñarle a hacer un tornado perpetuo donde tiraba las cosas menos útiles para hacerlas girar eternamente hasta que Papyrus entrara a limpiar y gritarle por ello, otra vez.

Bostezo suave, parpadeando lento, normalmente escuchaba las reprimendas completas, pero esta vez realmente prefería dormir. O más bien desmayarse, así se sentía.

—Ugh…

Se despertó por la madrugada o al menos eso intuía mirando que las luces aún no se encendían del todo afuera, Papyrus seguramente se había aguantado reñir a su hermano, o simplemente estaba tan muerto por dentro que no escucho absolutamente nada; se sentó despacio y miró a su escritorio, con una hamburguesa en un plato, probablemente del bar, quizá su niño pensó que una de esas fría no cambiaba demasiado el sabor y no querría desperdiciar una comida recién hecha de casa siendo esperada a su lado, suspiró y la tomó, dando el primer bocado. Sin kétchup, así que estaba seguro de que era de parte de Papyrus.

Se preguntó por un momento si Sans lo habría visto en algún momento que hubiese entrado al cuarto a revisar formulas del trabajo, sinceramente, esperaba que hubiese sido flojo en esta ocasión y solo se fuera a dormir.

Decidió no pensar más de lo necesario, si al final lo vio, terminaría por decirle en algún momento, soltándolo como si nada cuando estuvieran solos para que Papyrus no se preocupara. Terminó de comer su cena-desayuno y, ahora que estaba del todo despierto, se percató de una especie de nota encima de sus papeles. Escrito en la muy reconocible tipografía del más joven, algo sobre que había visto los papeles, no entendiendo del todo las fórmulas pero que quizá su experimento necesitaba algo más "genial" y había un gran dibujo de una especie de calavera de dragón esquelético, al menos creía que eso era.

Entonces un foco imaginario se prendió en su cabeza.

—Realmente es un genio… —murmuró para sí mismo.

En todo ese tiempo había intentado mantener la magia concentrada en un punto pequeño dentro de sus manos mágicas y dispararlo como aquella arma humana, pero recordando a los ancestrales monstruos como los dragones, acumulando el fuego en sus fauces para luego expulsar todo como una llamarada, ¿podría funcionar? Además, tenía como modelo base el extractor de determinación, ya que esta era muy similar a una cabeza, podría hacer un hibrido entre ambas ideas, quizá incluso una cosa así sería más fácil de enseñar a Sans para crear.

Agitó la cabeza, se estaba emocionando demasiado, más era imposible contener la emoción, una epifanía como aquella no llegaba todos los días… o años. Se acomodó la bata antes de salir lo más silenciosamente posible, no quería despertar a Papyrus tan temprano.

Justo cuando cruzó el umbral se chocó de lleno contra algo, o alguien más bien, se frotó la cara un momento antes de levantar la vista a quien sea que estuviera en su puerta a ese horario.

—¡¿Ma-Majestad?! —dio un salto en el lugar.

—Ah, Dings, al fin —suspiró con cierto alivio.

—¿Q-Qué hace aquí afuera a esta hora? E-Es muy temprano.

—La verdad es que vine poco después de que te fuiste, Papyrus me dijo que no habías regresado, pensé en darte algo de espacio y Undyne me dijo que te había sacado colgando para traerte a casa ayer.

—A-Ah sí, entró gritando que era mi día libre…

—También que quizá debía dejar que… ah, bueno, que se calmara todo, pero no podía dormir pensando en que quizá dije algo malo.

—Ah, no, no… quiero decir… bueno… —miro a un punto muerto especifico—por favor pase, recuerde que hay cámaras por todos lados su majestad y esto es… un tema más privado.

Dicho esto, dejó a Asgore pasar a la casa, por suerte los pasos del rey eran suaves y silenciosos así que, no había riesgo de despertar a sus hijos, rápidamente fue a la cocina, curiosamente impecable, pero con un ligero olor a orégano y salsa. Puso el agua a calentar mientras buscaba las bolsitas de té que tenía por casa, no era tan conocedor de las hojas para hacer un té casero, aun así, no esperaba que fuera un problema. Asomó su cabeza por la pared, viendo que su majestad lo esperaba pacientemente, sin sentarse, solo ahí de pie.

—Veo que tu hogar esta más organizado.

—¿Ah? ¡Ah! Sí, Papyrus es un maniaco del orden a veces —se froto el brazo un momento —majestad… ¿desde hace cuánto que está afuera?

—Un par de horas.

—¡¿H-Horas?! ¿por qué no paso a la casa?

—Les dije a tus niños que me iría… lo hice, pero cuando estaba de camino por Waterfall volví a esperar, no quería molestarlos así que solo espere fuera.

—M-Majestad podía haber pasado, no tenía que quedarse en el frío.

—Oh, el frío no es problema para mí.

—N-No lo digo por eso, ah, solo… —se llevó una mano a la cara —lo siento…

—¿Lo sientes?

—Yo, sé que actúe de forma irracional, no sé qué cable se me cruzo de la cabeza…

—Yo soy el que debería disculparse, sabía que el tema era delicado y… no estoy desmereciendo que te esfuerces para… ah, mi celo.

El esqueleto sintió la magia subir a su cara, claramente avergonzado por aquello.

—Y-Yo… a-ah solo… solo me… sentí… quizá ¿muy frustrado?

—¿Frustrado? —levantó la vista, curioso de ello.

—E-Es decir… no me malentienda, solo… sentí que me empujaba a no… dejarme pasar su celo con eso de la resistencia… y ahora que voy consiguiéndola, supongo que mi cabeza tuvo la idea de que… tal vez no… no era de su agrado o algo así y no quería decírmelo directamente.

—¡¿Qué?! N-No lo dije por eso Dings, solo no quería que te exigieras demasiado… —suspiró por lo bajo —solo… no quiero que tengas un accidente o algo que no quieras mientras… entrenas.

—Estoy siendo cuidadoso majestad.

—Lo sé, solo… me preocupa, ¿puedes prometer que serás más cuidadoso?

—No es necesario, estoy siéndolo su majestad. —Insistió por lo bajo.

—Solo quiero asegurarme.

Antes de seguir con la conversación se oyó el silbido del agua hirviendo, haciendo que el esqueleto fuera de inmediato a sacarlo del fuego antes de que hiciera más ruido. Preparo las tazas para servir el agua, con los pequeños sacos de té y algo de azúcar, dejándole un momento para pensar mientras estaba en ello, ¿cuidadoso? No es que no existiera la posibilidad de lastimarse, siempre podía pasar si no usaba suficiente lubricante. Resopló, no quería pensar en ello o se pondría demasiado nervioso frente al rey, simplemente tomó las tazas y las llevo a la sala.

—Sé que no es como el té que solemos tomar en nuestras reuniones…

—Oh, es bueno ver que no tienes café aquí también. —Tomó una de las tazas.

—Papyrus me obligo a llevar la cafetera al laboratorio. —Refunfuñó por lo bajo.

Se sentó en el sillón, soplando suave, realmente no quería hablar demasiado del tema, más de lo que ya lo habían hecho, no quería que su mente volviera a hacer otra jugarreta, menos porque no tenía donde huir ahora. Asgore se sentó a su lado, tomando el té con pequeños sorbos, no quería poner nervioso al esqueleto, pero a la vez necesitaba concretar lo que vino a hacer, respiró hondo, pensando seriamente lo que iba a decir.

—En invierno, si lo quieres, podemos probar…

Gaster hizo el amago de escupir por la sorpresa, pero trago de golpe mientras su cabeza se volvía una bombilla roja y brillante, antes de mirar entre sorprendido y avergonzado al rey.

—¿M-Majestad…?

—Solo… sé que seguirás entrenando demasiado y eso me ah… —bufó por lo bajo, tal vez molesto —pero como te dije, soy muy intenso y no quiero lastimarte, así que te lo pregunto de nuevo, ¿realmente quieres arriesgarte?

—A-Ah yo… —sintió que su voz se hacía un hilo — si quiero…

—Bien. Le diré a los guardias que te permitan el paso y se retiren cuando vengas y si sientes al final que no estas preparado, también lo entenderé…

—¡E-Estaré listo!

Asgore terminó su té, no muy seguro de si había tomado la decisión correcta al permitirle estar en su celo, incluso perdía un poco de control cuando era el del esqueleto, tampoco sabía cómo reaccionaría cuando sintiera sus feromonas, podía ser demasiado para él. De todos modos, ya estaba hecho, ya lo había dicho y de haber vuelta atrás sería decisión de Gaster ya no suya.

Gaster despidió al rey luego de unos momentos de silencio, cuando ninguno de los dos sabía que decir y que era mejor que el rey fuera a descansar un poco mientras él asimilaba la idea, no sabía cómo sentirse al respecto, aún tenía el rostro rojo, con una sonrisa tonta y nerviosa en la cara que no podía borrar ahora que estaba solo.

Lo había conseguido.

Decidió quedarse en el sillón durante un rato, al menos el suficiente para poder recuperar la compostura, ahora, si bien tenía ideas nuevas para el proyecto de armamento, optaría por ir primero por su interés personal, sobre todo porque era algo que no quería dejar pasar, Asgore lo autorizó, sí, pero aún había posibilidad de que se retractara.

Tenía que ponerse a entrenar más su resistencia o al menos su aguante, un poco de ambas si era posible, ya que tenía poco tiempo antes de que el siguiente celo llegara, aunque se lo tomaría con un poco más de calma, solo para no terminar por hacerse daño, eso mantendría al rey tranquilo.

Cuando quiso darse cuenta, los primeros días de invierno acababan de llegar y él sabía que significaba eso, suspiró nerviosamente mientras tomaba su bolso para retirarse luego de su turno de trabajo, al último para que nadie viera a donde iba, su reporte semanal había sido cancelado y su día libre era justo al siguiente, así que tenía toda esa noche y posiblemente el día entero libre.

Ya les había dicho a sus hijos que probablemente trabajaría toda la noche y se iría a Waterfall como voluntario de recolección de materiales, si se lo permitían. Sans sabía reconocer sus mentiras, pero no ganaba nada diciendo a Papyrus de ello, ambos preferían mantener su inocencia el máximo tiempo posible.

Caminó lentamente por todo New Home, viendo como solo los lugares de comidas seguían abiertos, pero ya el lugar estaba casi desierto, eso era un alivio. No es que realmente fuera raro verlo por las noches en aquella zona, más si podía ser una molestia y un inicio de malos rumores si sabían a donde se dirigía. Se enderezo cuando llegó donde estaban los guardias de la entrada del laboratorio, tomando el turno para restringir el paso a la casa del rey o de ir al castillo.

—¿Qué lo trae por aquí doctor?

—¿Su majestad les dijo que hacer si yo venía?

—Sí, ¿está seguro de entrar?

—Si estoy aquí la respuesta es obvia, ¿no les parece? Ahora, ¿podrían seguir la orden de su majestad de qué hacer cuando yo viniera?

Ambos guardias se miraron y solo asintieron antes de retirarse.

Una vez tenía vía libre se permitió dejar la seriedad de lado y temblar un poco, en parte emocionado, en otra asustado, no quería tomar las palabras de Asgore a la ligera, sabía que podía pasar con un celo, ya lo había visto dominante antes, pero ya estaba ahí como para retractarse de sus pasos. Hizo el ademán de tragar saliva mientras tiraba del cuello de su suéter con los dedos, ahora los nervios lo achacaban, sin embargo, había estado preparándose física y mentalmente para este día.

Así que se armó de valor y fue hasta la puerta, abriendo despacio.

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Parte 21

Parte 23

[46snowfox]

Black Wolves Saga Last Hope Memory 133: El tiempo límite de la vida [Ruta humana]

Zara regresó junto a Elza, y a un hombre oso desconocido que vestía una bata de laboratorio.

Un rato después de que Zara se fue de la habitación.

Él volvió tras reunir a unas personas.

Uno era alguien que yo conocía.

Mi subordinado, quien fue a ver el estado en el que se encontraba la capital real y que luego llegó a Bialess en el momento perfecto, Elza.

Elza: ¡¿Estás bien Nesso?!

Nesso: Sí, estoy bien, No te preocupes.

Y la otra persona era un hombre oso que vestía una bata blanca.

No me es familiar.

Zara: Nesso, esta persona es Kyle-sensei. Es un oso y un doctor.

Nesso: Soy Nesso Galland. Es un placer conocerlo.

Kyle: Yo soy Kyle Bayer. He estudiado el zodiva durante mucho tiempo.

Nesso: ¿El zodiva...?

Kyle: Sí.

Nesso: Agradezco eso y me reconforta saberlo... ¿Pero qué hace usted aquí?

Es alentador ver a alguien que investigue el zodiva en un momento como este, pero me parece que es demasiado oportuno.

Al parecer mi pregunta logró ser recibida por todos.

Elza: Permíteme ser yo quien lo explique.

Nesso: ...Entendido. Infórmame.

Elza: Fui a ver el estado de la capital...

Elza: Pero Mejojo ya había empezado a efectuar unos preparativos bastante llamativos.

Nesso: ¿Llamativos...? Creo que ya ha sido bastante llamativo... ¿Qué hizo?

Elza: ...

Nesso: Elza, no te preocupes. Habla por favor.

Elza: Ha acusado oficialmente al conde Galland de traición.

Elza: Por no hablar de que le han confiscado su título, su territorio, sus enseres domésticos... ahora todo le pertenece a la familia Garibaldi.

Nesso: ...

Nesso: (Estaba preparado para esto... pero en verdad lo hizo.)

Nesso: ¿Qué hay de mi padre?

Elza: Parece que Edgar-sama sigue atrapado en el castillo de Weblin.

Nesso: ...Así que el resto de nobles han actuado.

Elza: Lo entendiste de inmediato. Es que esta situación fue demasiado repentina.

Elza: Es por eso que tanto los aristócratas, incluido el marqués Galland le han pedido a su majestad que aclaren la verdad sobre esta situación.

Nesso: ...Así que mi tío ha actuado. Ya veo.

Este evento ha sido ejecutado completamente por Mejojo y Auger.

La única evidencia existente de mi traición en contra de la familia real es el testimonio de esos dos.

Y Mejojo se está aprovechando para aplastar a una de las familias más importantes.

No importa cómo se vea, se trata de una situación inusual. Si sus planes salen tal y como quieren, entonces el resto de aristócratas no se quedarán callados.

Nesso: (Ya que ellos podrían ser los siguientes.)

Podrían tacharlos de traidores y arrebatarles sus casas, posesiones, fortuna, todo.

No pueden pasar por alto este acto tan indignante.

Nesso: (¿Cuánto tiempo podremos ganar con la resistencia de mi tío...?)

Por más que Mejojo y Auger formen parte de la realeza, no pueden ignorar la voluntad del resto de aristócratas.

Nesso: (No, ¿en tal caso van a destruirlos...?)

Pueden usar sus poderes para castigar a mi padre y usarlo de ejemplo.

Nesso: ¿Qué más?

Elza: Como el conde Galland ha sido tachado oficialmente de traidor, ustedes también son considerados de esa forma.

Nesso: ...Ya veo. Mientras más escucho más acorralado me siento.

Zara: Tampoco es así.

Nesso: ¿A qué te refieres?

Zara: Debido a que tú y la señorita han sido oficialmente marcados como traidores muchos de tus conocidos han empezado a moverse. Por ejemplo, tus subordinados.

Nesso: ¿Mis subordinados? Han empezado a moverse... ¿Qué están haciendo?

Elza: ...Me disculpo de antemano por poseer la mitad de la culpa al moverlos sin tu permiso.

Nesso: ...

Tuve un mal presentimiento.

Elza parece haber hecho algo sin mi permiso... Y espera que lo apruebe.

Elza: Me traje a todos aquellos que se mostraban escépticos ante las acciones de Mejojo y Auger.

Nesso: Pff.

Me sorprendí.

Nesso: ¡Cof! ¡Cof, cof!

Zara: ¿Estás bien Nesso?

Nesso: E-Estoy bien... Tú, eso es...

Una completa rebelión.

Nesso: (Ahora que lo pienso...)

Antes de perder el conocimiento en Bialess, vi a Elza dirigir a una gran cantidad de soldados.

Pensé que solo había vuelto junto a los caballeros que se dirigían a Grimwald...

¿De verdad estaban mezclados junto a los caballeros que se trajo de la capital real?

Zara: Por cierto, algunos aristócratas y caballeros que creen en tu inocencia se están dirigiendo hacia acá.

Nesso: Oye, oye...

Zara: Además, médicos y farmacéuticos que no están de acuerdo con la política de aislar a los pacientes de zodiva también se están reuniendo en este fuerte.

Zara: Kyle-sensei es uno de ellos.

Tras escuchar a Zara observé a Kyle, quien se hallaba a su lado.

Nesso: ...Escuchen. Lo dicen como si no fuera nada... pero es algo bastante grave.

Zara: Es verdad. Ahora eres un verdadero traidor.

Nesso: ¿...Verdad?

Nesso: (No había... pensado en esto.)

Hasta ahora, el conflicto solo había sido entre nosotros y su majestad Mejojo.

...No, podría decirse que era solo entre su alteza y yo.

Era un conflicto entre Mejojo, quien deseaba obtener rápidamente a Fiona, y yo, quien no deseaba entregársela.

Nuestra historia se volvió más turbia el día en el que aquel joven lobo apareció.

Nesso: (Lo desató todo...)

Las cosas empezaron a empeorar cuando Mejojo comenzó a mencionar a los lobos para usarlos en mi contra,

Nesso: (Inclusio si fue su majestad quien me acusó de traidor primero.)

Nesso: (No imaginé que se volvería una realidad.)

Mejojo usó el poder de la familia real para involucrar a mi familia.

Y como resultado, aristócratas, caballeros, médicos y farmacéuticos se han rebelado y han decidido aliarse conmigo.

Nesso: (Esto... ya es una completa rebelión.)

Nesso: (Ser el mejor caballero que ha de dedicarse a defender el reino es un dolor de cabeza...)

Solté un leve suspiro.

Solo me queda reír. No puedo hacer algo tan leve como huir al extranjero.

Parece que de ahora en adelante... Debo de prepararme para derribar el reino.

Kyle: Quiero creer que ya entiendes por qué me encuentro aquí.

Nesso: Sí. Entonces... lo preguntaré solo por las dudas. ¿Conoces algún método que nos permita curar el zodiva?

Kyle: ...No. Lamentablemente no puedo asentir.

Nesso: ...Ya veo.

¿Y si alguno de los médicos y farmacéuticos que se han reunido saben cómo elaborar una cura para el zodiva?

Supongo que eso sería anhelar demasiado.

Kyle: Sin embargo, Nesso-kun. Yo sé que existe una posibilidad.

Nesso: ¿Posibilidad?

Kyle: Yo... No, nosotros hemos estado estudiando el zodiva desde hace diez años, desde la primera vez que se desarrolló en este reino.

Nesso: ¿Nosotros...?

Nesso: (¿Significa que lo estudió en grupo?)

De ser así, ¿entonces Kyle es el representante de ese grupo investigativo?

Kyle: ...Hace unos años. Nosotros logramos crear un profilaxis para el zodiva.

Nesso: ¡...! ¿Un profilaxis? ¿Como lo que hizo Zara?

Kyle: Sí, así es... Aún no podíamos salvar a aquellos que ya se habían contagiado de zodiva...

Kyle: Pero tomar ese profilaxis reduciría considerablemente a los pacientes de zodiva.

Kyle: Como es de esperar, fuimos al castillo real a informar los resultados de nuestra investigación

Nesso: ...Oye.

Nunca había oído hablar de esto. Ni siquiera conocía la existencia del inhibidor que Zara había hecho.

¿Pero ya habían creado un profilaxis hace años...?

Kyle: El castillo real se puso en contacto con todos los miembros que habían trabajado en la investigación, dijeron que iban a producir en masa los medicamentos, así que les pidieron que llevaran los materiales necesarios.

Nesso: (...No puede ser.)

Quería creer que sus majestades no harían algo tan espantoso.

Kyle: ...Y entonces, nadie volvió del castillo.

Kyle: Robaron todos los resultados de nuestras investigaciones.

Nesso: ...

Exhalé un humeante aliento.

En verdad llegaron tan lejos.

Los príncipes gemelos destruyeron el profilaxis para el zodiva.

Y es probable que también hayan asesinado a los investigadores que fueron al castillo.

Por lo que son los únicos que pueden usar el profilaxis.

Kyle: De pura casualidad me encontraba enfermo a causa del cansancio producido por la investigación.

Kyle: Así que no fui al castillo.

Kyle: El castillo pidió que todos los relacionados con la investigación asistieran.

Kyle: Así que mis compañeros borraron mi nombre de la lista de involucrados.

Kyle: ...Dijeron que cuando acabaran la producción en masa escribirían mi nombre, por lo que no debía preocuparme.

Usaron esa lista para reunir a todos los investigadores en el castillo--... y los exterminaron.

Kyle: Tras ser dejado atrás no entendí qué había sucedido.

Kyle: Descansé, me recuperé--... pero por más que esperara, mis compañeros no regresaban del castillo.

Kyle: Y no habían señas de que fueran a anunciar el profilaxis contra el zodiva.

Kyle: Aun así seguí creyendo, pensaba que mis compañeros estaban trabajando en el castillo para producir en masa el profilaxis.

Kyle: Creía que con el tiempo sus esfuerzos serían reconocidos y que los habitantes del reino tendrían el profilaxis en sus manos.

Nesso: ...

Elza & Zara: ...

Seguimos escuchando su conversación mientras guardábamos silencio.

Kyle: Mi nombre había sido borrado de la lista.

Kyle: Quería ir a ayudar, pero no tenía el valor suficiente.

Kyle: Además, mis compañeros habían sido considerados conmigo.

Kyle: Por lo que los estuve esperando en el laboratorio. Aguardaba su regreso.

Kyle: Cierto día, cuando fui al laboratorio como de costumbre--... Vi como este se incendiaba.

Nesso: ¡...! ¿Le prendieron fuego?

Elza: Que horror...

Kyle: En aquel momento lo entendí. Que el profilaxis para el zodiva no sería dado a conocer públicamente.

Kyle: Y que mis compañeros no regresarían.

Kyle: Tras eso viví evitando a los demás.

Kyle: Escuché de tu rebelión, Nesso-kun.

Kyle: Y pensé que a tu lado podría pelear en nombre de mis viejos compañeros.

Nesso: ...Ya veo.

Kyle: Y ahora he conseguido a un nuevo compañero, a Zara-kun. Yo solo no podría lograrlo...

Kyle: Pero si estoy con Zara-kun, entonces puede que esta vez consiga desarrollar una cura para el zodiva.

Nesso: ¡¡...!!

Una cura para el zodiva. Con eso podría salvar a Fiona.

Nesso: Se lo ruego. Por favor cree una cura para el zodiva. Yo, quiero proteger a mi hermana menor.

Kyle: ...Yo también quiero salvarla. Pero para eso necesito los materiales de nuestra investigación.

Elza: ...Los materiales de la investigación resguardados en el castillo. ¿No puede empezar la investigación desde cero?

Kyle: Incluso así podría crear una cura para el zodiva. Pero...

Kyle: No la crearía a tiempo para salvar a esa chica.

Nesso: ¡¡...!!

Kyle: Ella ya tiene los moretones del zodiva. Ustedes también lo saben, ¿no?

Kyle: Zodiva es una enfermedad que cuando empieza a desarrollarse arrebata la vida de su portador en una semana.

Kyle: A esa chica ni siquiera le queda una semana.

Nesso: ...Zara. Es por eso que estabas apresurado.

Zara: ...Sí.

Zara: Pensando en tu salud, sabía que lo mejor era esperar antes de empezar un ataque.

Zara: Sin embargo, de esa forma no podríamos salvar a la señorita... Lo lamento.

Zara se disculpó por estarme sacrificando.

Pero conociéndome, estoy seguro de que habría hecho lo mismo.

Es más, si Zara se hubiera preocupado por mi salud y me hubiera ocultado la verdad--...

Entonces es probable que yo hubiera asesinado a Zara.

De saber que existía una forma de salvarla, pero en vez de hacerlo gasté mi tiempo curándome sin saber nada, entonces.

Estoy seguro de que no podría perdonarme.

Nesso: ...Gracias Zara. Gracias a ti, creo que podré pelear.

Me he decidido. Recuperaré los materiales de la investigación del zodiva que se encuentran en el castillo.

Y salvaré a Fiona.

Tenemos una semana.

Esta semana determinará nuestro futuro.

Nesso: Elza, quiero confirmar ahora mismo cuántas son las fuerzas que se han reunido aquí.

Nesso: Haz una lista de todos los que puedan pelear y tráemelos.

Elza: ¡Entendido...!

Nesso: Zara, Kyle. Ustedes quédense aquí y prosigan con la investigación del zodiva.

Nesso: Para que puedan desarrollar la cura tan pronto como les traigamos los materiales.

Nesso: Y... Zara. También te encargo que cuides de Fiona.

Zara: ...Entendido. Yo vigilaré a la señorita.

Nesso: Deja que yo me encargue del plan.

Eso es todo lo que puedo hacer.

Es lo único que puedo hacer al no ser ni un médico ni un farmacéutico…

Solo puedo pelear por Fiona y recuperar los materiales de la investigación que se encuentran en el castillo.

Nesso: (Por eso... tú también esfuérzate.)

Solo le queda una semana de vida.

*luego*

Estoy en una profunda, profunda oscuridad

En donde mi ansiedad se propaga.

Fiona: (¿En dónde estoy?)

Fiona: ¿No hay nadie?

No lo sé. No escucho la voz de nadie. Y mi voz... no alcanza a nadie.

Estoy segura de que estoy soñando.

Fiona: (...Sí, es un sueño.)

Llegué a esa conclusión con tal de ahogar mi ansiedad.

Fiona: ¿...?

Fiona: ¿...Hay alguien allí?

De repente creí haber escuchado una voz y miré hacia atrás.

Y quien estaba allí era--

-Nesso  ⇨ [134 El caballero del sueño]

-Zara  ⇨ [135 El mayordomo del sueño]

(siguiente)

-Pearl & Richie  ⇨ [136 Los perros guardianes del sueño]

-Elza  ⇨ [137 El caballero león del sueño]

(atrás)

Anterior: [132 Posibilidad]

[Masterpost]

[guardianasdelrpg]

Admito que estoy bastante nerviosa. No soy de participar en este tipo de comunidades y es la primera vez que hago una denuncia pública. Me he decidido porque creo que esto está yendo ya un poquito lejos, y con mi silencio sólo estaré beneficiando a quien va a seguir perjudicándome. Resumiendo la historia antes de entrar en detalles: una chica con la que tuve problemas en el pasado está consiguiendo que me baneen inmediatamente de cada foro al que intento entrar. Este amable anon arroja algo de luz sobre las posibles historias que ella ha hecho circular sobre mí: amenazas y acoso a varias personas por MP, aun cuando estas “han hecho todo lo posible para evitarme” (que expuesto así, me banearía hasta yo misma –se ríe-).

Soy la usuaria de discord Akane#5066. Hace unos años conocí a una chica que se identificaba como Nami o Heith, hoy día administradora de Numen, Renegade y Crystal Worlds. Lo que ocurrió entre ella y yo realmente es nuestra vida privada y no debería haber involucrado a admins de foros ajenos, pero en vista de lo ocurrido me veo obligada a explicar nuestro pasado brevemente.

Fuimos cercanas hace años, hasta que llevamos a rivales en un rol y empezó a tratarme como a una enemiga. Se mostró increíblemente manipuladora y dañina, propensa a tirar piedras y esconder la mano, a calumniar por la espalda y conseguir que todo el mundo me creyera un monstruo y a ella mi víctima; vamos, la misma historia que voy a denunciar hoy, aunque fueron tiempos bastante peores. Para comprender mis reacciones recientes, es importante dejar claro que esta persona me hizo pasar por unos seis meses muy duros hasta que yo misma corté vínculos, que siempre la he considerado peligrosa, y que no oculto mi enfado con ella. La actualidad. El nacimiento del MP de la discordia.

Vayamos ya al tiempo presente. Hace más de un año me uní al ahora difunto foro FE Houses, donde encontré una comunidad estupenda y roles geniales. Ocurrió que un día apareció un pj que reconocí al 99% como Nami. Me asusté, pero sabía que sólo era un desafortunado accidente carente de intencionalidad por su parte, y que yo tendría que apechugar. Decidí que cuanto menos le haría saber de mi presencia para que estuviera al tanto, y así roleé en su primer libre y le dejé un pequeño mensaje offrol; algo así como “espero que no te importe si entro en tu libre, me gusta mucho cómo escribes, y me recuerdas a alguien que odio pero que me gusta mucho cómo escribe” (no tengo captura de esto pero tampoco me parece relevante). Su reacción inmediata fue borrar su presencia y marcharse sin decir nada. Hubiera entendido que se quedara porque ella no tiene tampoco la culpa de encontrarme allí sin querer, pero sentí un gran alivio con su marcha. Nos seguimos evitando y todo en paz.

Peeero, no sé qué pasó con su afán de “hacer lo posible por evitarme”, pues inexplicablemente insistió en volver un mes después, esta vez con uno de sus amigos. Trataron de ocultar sus identidades, y conociéndola como la conozco, aquello fue extremadamente incómodo y sospechoso para mí. No fui a hablarle de mis vivencias con ella a los admins ni quise buscarle problemas con la comunidad. Me tocaba apechugar de nuevo. Lo que sí hice fue mandarle un fatídico MP (único medio de contacto que tenía) para al menos mostrarle mi descontento. Al ser algo privado y personal no se incumplía ninguna norma de un foro que incluso había permitido conflictos públicos, y además me considero en pleno derecho de decirle cómo me siento a una persona que me ha hecho tantísimo daño, y de cuyas intenciones dudo. Del MP tengo una captura de un copia-pega, y más adelante expondré otra captura de un admin que lo verifica [Captura del copia-pega]. Dejo constar que mi MP es una carta de amor comparado con los MPs que sus aliados me mandaron a mí hace años, y es que para comprender realmente la situación hace falta todo ese contexto extenso que Nami SÍ posee y el resto del mundo obviamente no.

Me respondió y yo no volví a responder. Y aunque en mi MP expongo que no puedo impedirle que se quede y que me lo tendré que comer con patatas, ella decidió volver a marcharse. No sin antes ir a los admins de por aquel entonces y conseguirme un ban de diez días, que, bueno, dentro de lo que cabe me pareció una mejor alternativa a la posibilidad de sufrir la misma toxicidad de antaño en mi nueva comunidad. Aclaro que no recuerdo haber mandado jamás ningún otro MP de esta índole, pues considero a esta chica la única enemiga propiamente dicha que tengo.

Muchos meses después, tras el éxodo de la gente de “FE Houses” a “FE Exodus” (foro que recomiendo), llegó un momento en que mis principales compañeros de tramas y yo necesitábamos vacaciones por circunstancias de nuestra vida privada, y decidimos marcharnos por un tiempo. Mi calvario comenzaría más tarde, cuando otro amigo de Exodus me pidió entrar con él en cierto foro y yo no quise defraudarle.

Segundo ban: El misterio de Alenthe.

Mi compañero llevaba ya días en el discord de Alenthe, y fue cuando apenas acababa de entrar yo que recibí este mensaje del admin, en el que dice tener pruebas de mis difamaciones en privado hacia los admins de Bravely Tactics (BT) y Fire Emblem (FE), y que no soy bienvenida en su foro de paz [Captura preciosa]. No me dejó responder nada porque fui baneada inmediatamente, y luego baneó a mi compañero por asociación.

Como ni yo ni nadie teníamos constancia de esas acusaciones, mis amigos de Exodus comenzaron a investigar. Los admins de BT casualmente estaban roleando en Exodus (y aunque no éramos cercanos, creo que tampoco nos llevábamos mal); se mostraron tan confusos como nosotros y negaron tener algo que ver con esto. Uno de los admins de Exodus (con quien podéis confirmarlo todo) se ofreció a ayudar en la investigación e intentó sonsacarle información al admin de Alenthe. Éste cambió por completo su versión de la historia (???) [captura incomprensible] y por más que mi admin le insistiera para ver las pruebas que decía poseer, o al menos conocer el nombre del staff de FE contra el que, según él, arremetíamos en las capturas que decía haber visto, el de Alenthe puso mil excusas evasoras para no enseñar ninguna captura ni dar tampoco ningún nombre. Sólo pudimos concluir que esas pruebas no existían.

Considerando que la denunciante era una persona que conocía BT y FE, y que también debía ser malintencionada conmigo y manipuladora para acusar falsamente, mis compañeros consideraron la posibilidad de que Nami estuviera detrás. Que a ver, yo he tenido conflictos con varias personas a lo largo de mi vida rolera, pero sólo ella era dada a este tipo de maquinaciones, y sólo ella y sus aliados podían saber que yo estuve en ambos foros; no tenía sentido que fuera nadie más. Sin embargo, no pudimos confirmar que ella estuviera en Alenthe, así que quedó en un caso de bullying misterioso. [Algunas capturas de cierta conclusión final]. Debo agradecer una vez más la labor de mis compañeros de FE y de mi admin, que se volcaron mucho conmigo.

Tercer ban. Todo empieza a encajar.

Pasé dos meses sin ganas de rolear por lo ocurrido, hasta que recientemente decidí que quería intentarlo en un foro que me había gustado: Gran Siniestra. ¡Cuál fue mi sorpresa cuando, poco después de unirme al discord, recibo un mensaje parecidísimo al anterior por parte de uno de los admins! A saber: que habían recibido denuncias y tenían pruebas de mis “actitudes hacia otros usuarios en otros foros” (mucho plural y muy plural), que quieren mantener su foro libre de toxicidades, y que no soy bienvenida. Otra vez la misma historia.

En este caso he de decir que el admin fue mucho más amable y sí quiso escucharme. En cuanto él mencionó tener capturas de MPs, todo encajó dentro de mi cabeza y pude confirmar que, en efecto, quien estaba detrás de todo era Nami. Al principio me creyeron, pero de pronto cambiaron de opinión por causas no esclarecidas aunque sí relacionadas con dicho MP. Me temo que debo pasar la conversación íntegra con perdón del admin, que reitero que fue muy comprensivo y aprecio que quisiera considerar mi testimonio (y su foro está muy currado, al César lo que es del César). [Capturas adorables].

Recalcando algunos puntos interesantes…

1-      En ambos casos, admins de dos foros distintos vinieron a mí con la intención de banearme directamente, sin conocer ni preguntar siquiera por mi versión, cosa que me resulta extraña. Así mismo, tampoco se pidieron mis pruebas para verificar mi versión, por lo que entiendo que fui baneada sin ningún tipo de investigación.

2-      Ambos mostraron un notable interés en ocultar a toda costa la identidad de la (los) denunciante(s), llegando al extremo de mentir (en un caso más que en el otro) sobre las pruebas reales que poseían. El de Alenthe parece que se lo inventa todo sin pudor alguno. El de GS, bastante más amable, comienza diciendo tener un par de capturas de varios MPs de acoso a varios usuarios en varios foros, para más tarde mencionar sólo “el mensaje” como razón tanto del indulto como de mi ban final. Entiendo, pues, que he sido indultada y baneada por “el mensaje” que le mandé a Nami y sólo a Nami; un solo mensaje, a una sola usuaria, en un solo foro. ¿Qué necesidad había, pues, de tergiversar esto?

3-      El de GS confiesa que la información le ha venido “por terceros” que “han oído historias”. Esto explica que ella no necesite estar en ninguno de los foros para perjudicarme. Inevitablemente, esto también implica que me ha estado poniendo de vuelta y media ante completos extraños que, admitan o no conocerla, tienen una captura de mi MP y/o una historia triste acompañándolo. Ya tiene que ser una buena difamación para que dichos extraños me reconozcan rápidamente tan pronto piso un foro, sin haberme visto antes; y ya tienen que ser bastantes personas para haberme topado con ellas dos veces seguidas en dos foros distintos. Qué miedo, ¿he hecho enfadar a la cabecilla de una mafia?

4-      Ambos admins dicen hacer esto para evitar toxicidades en sus foros. Para ello se permite el chismorreo y la difamación de usuarios nuevos mediante pruebas manipuladas, dificultando o directamente impidiendo la defensa de la acusada. Debo entender que nada de eso es tóxico en lo más mínimo.

5-      Como dato curioso, al menos en GS las normas permiten (y paso captura) que los conflictos personales se resuelvan por medios privados como el MP. Casualmente el mío era un conflicto privado, por MP, y de un foro ajeno. Y esto me lleva al último punto.

6-       Por alguna razón que ninguno de los dos aclara, la palabra de la denunciante vale más que la mía, y las historias que cuenta sobre mis maltratos tienen mucho poder. Que un solo MP de índole personal, en el que encima explico mi enfado como una consecuencia de todo el mal que esa persona me ha hecho a mí, baste para que se me acuse de amenzar y acosar a mucha gente en muchos foros, es para mí un auténtico misterio. Y ese es el verdadero problema de todo este asunto; si el MP en sí no les gusta por alguna razón, me hubiera parecido bien mientras fueran honestos, que hasta un "te baneo porque me caes mal" hubiera sido comprensible para mí. Lo que no puedo pasar es que se recurra a la injuria y a la mentira para justificar mis constantes bans, porque estaremos de acuerdo en que eso ya es innecesariamente mezquino.

  Y quisiera, antes de terminar, decir un par de cosas. Lo primero es que sí, claro que Nami me cae mal. Y claro que la prefiero lejos y no me fío un pelo de ella por razones que, a estas alturas, creo que ella misma ha retratado. Y me considero con derecho a enfadarme con quien me hace mal, y me considero con derecho a mostrarlo y a gritarlo si hace falta; todos hemos tenido conflictos y quien diga lo contrario, miente. Pero no, este tipo de cosas no deberían ser asunto de ningún admin. Si yo me peleo con ella o me dejo de pelear es asunto de MI vida privada y MI historia con esta persona en particular, SIEMPRE que no rompa ninguna norma ni se produzca un acoso real, que no es el caso. Y si un admin desea convertirlo en asunto suyo por alguna razón, que al menos sea honesto sobre ésta y no tergiverse la realidad.

Y lo segundo: si esta chica hubiera estado accidentalmente en alguno de los foros a los que me he unido, sólo tenía que hacérmelo saber y yo, gustosa, me hubiera apartado del camino en mutuo interés y sin mayor problema, porque yo SÍ quiero evitarla, y por eso a mí jamás se me ocurriría meterme en un foro donde sé que está ella. Pero resulta que ella me está causando problemas en foros en los que… ¡ni siquiera está! Apañándoselas no sólo para convertirme en un peligro público que va por ahí pegándole a viejecitas, sino también para que no se sepa nunca que la mano que tira de los hilos es la suya y así no se la pueda desmentir. Comprendo que esté enfadada y que quiera vengarse, pero vamos a llamar las cosas por su nombre: esto SÍ es acoso, y es bullying, y que no uno sino varios foros permitan y participen de algo así con tanta soltura y tan poca honestidad me produce auténtico pavor. Comprobar esta historia de "amenazas y acoso" es tremendamente fácil además: desde que salí de la comunidad de Nami, sólo hay dos foros en los que he estado un tiempo considerable y donde he interactuado con la comunidad, BT y FE (Houses/Exodus). Los de FE me conocen desde hace un año, y los admins de BT están roleando allí también. Sed libres de preguntarles por mis terribles actitudes hacia otros usuarios.

En fin, no dudo de que la venganza de esta chica a través de sus aliados será terrible, y que muy probablemente se usará esta denuncia para probar lo problemática que soy; que ya nos conocemos. Pero no tengo nada que perder, pues no tengo intención de volver a entrar a ningún otro foro sin conocer quién lo dirige, y quien ya me conoce a mí no va a caer en estas tonterías. Yo sólo quería rolear. En paz. Sin cuentos.

¡Gracias por leer todo este tostón a quien lo haya logrado!

[mino-diabolik]

Ecstasy Prólogo

[Ubicación: Patio — Banmaden]

Mystic: ¡Escuchen, señores, todos tienen un descanso de 30 minutos!

[Los ghouls sueltan un suspiro de alivio simultáneamente; algunos se sientan justo donde estaban parados y se recuestan. Me sonrío a mi mismo y me doy la vuelta, cargando los estuches de las espadas hacia la puerta.]

[Levanto la mirada levemente, solo para darme cuenta de Kazuha, quien está recargada contra el marco de la puerta. Pongo los estuches contra el muro y la miro.]

Hola, Kaz.

Kazuha: Hola...

Mystic: [Se queda callada, evitando mirarme.]

¿Ne... necesitas algo?

Kazuha: [Agita la cabeza.] Nada.

Mystic: [Me inclino, tomando el mango de una de las espadas en su estuche y se la ofrezco. Finalmente, Kazuha voltea la mirada a mi.]

Kazuha: Mi padre nos matará.

Mystic: Sabes perfectamente que esa es la única razón por la que haz venido hasta acá.

Kazuha: . . .

Mystic: [Kazuha sonríe y toma la espada. Tomo otra para mi mismo y suelto una risa.]

＊

[Ubicación: Habitación de Shin — Banmaden]

DJ: (¿Qué es todo ese alboroto?)

[Me levanto de la cama, bajando el libro que tenía, sobre la mesa. Me aproximo a la ventana y la abro.]

Varios Ghouls: [Alentando.]

DJ: ¿ . . . ?

(Son... ¿¡Kazuha y Mystic!? Están en un dúo, aunque no parece ser nada serio. Más bien, parece ser que se están divirtiendo.)

Fufu〜

(¿Me pregunto si el Señor Carla sabe que está pasando ahora mismo?)

[¡Clang! ¡Clang!]

DJ: Kazuha no es nada mala con la espada. Y con esos poderes suyos... si el Señor Carla no fuese tan subordinado, estoy segura de que ganaríamos la guerra.

[Cierro la ventana nuevamente; el sonido del patio se torna en simples murmuros. Me doy la vuelta y comienzo a caminar hacia la puerta.]

(Tengo que hablar con el Señor Carla.)

[Monólogo de DJ]

Con una sola meta en mente, me encuentro enfrente de la puerta de la habitación del Señor Carla.

Mi mano tiembla cuando la levanto para tocar. Pauso por un segundo y me cuestiono entre sí hacerlo o no. Aprieto mi mano en un puño y bajo la cabeza—la acerco y toco.

Carla: ¿Si?

DJ: Soy yo, Señor Carla. Necesito hablar con usted.

Carla: . . . Pasa.

DJ: [Tomo la perilla y abro la puerta, entrando a la habitación.]

[Ubicación: Habitación de Carla — Banmaden]

DJ: ¿Estaba ocupado?

Carla: No hay problema. ¿Qué necesita?

DJ: . . . Querio que reconsidere dejar a Kazuha pelear en la guerra contra los Víbora.

Carla: . . .

Creí haber sigo claro en mi decisión.

DJ: Señor, lamento si digo algo que pueda ofenderlo, pero debe de darse cuenta de que simplemente está siendo obstinado. La Señorita Kazuha es probablemente la miembro más fuerte entre los Fundadores. Y creo que no debería de mencionar que es saludable, al contrarío de su estado, señor.

Debe de ver la imagen completa.

Carla: . . . Largo de aquí.

DJ: No me iré a ningún lado hasta que se de cuenta de la verdad, señor. Tengo un respeto inmenso por usted, pero debe darse cuenta que si es usted el que va a la guerra... morira.

Carla: ¡Fuera! ¡He dicho que no cambiaré de parecer...!

DJ: [Levanto la mano, bloqueando el ataque del Señor Carla. La brisa que hace mi brazo hace que mi flequillo se mueva, dejando ambos de mis ojos a la vista.]

Tendré que recordarle que mi familia también está involucrada en ésta guerra... y estoy dispuesta a hacer todo lo que esté en mi poder para mantenerlos a salvo.

Carla: ¿Y mandando a mi hija a la cabeza de la guerra es parte de ese plan?

DJ: No es eso a lo que me refiero. La Señorita Kazuha se ofreció para poder protegerlo a usted y a la familia... ¿por qué no puede simplemente aceptar que ella se ha vuelto una mujer que no tiene la necesidad de que alguien escoja por ella?

Si no fuese por qué usted es el rey, la señorita estaría marchando a la guerra justo en este momento.

Carla: . . .

DJ: . . . Eso era todo lo que quería decirle. Tenga un buen día, y espero que tome la decisión correcta.

[Abro la puerta y pauso—esperando por una respuesta de último momento—pero el Señor Carla simplemente mantiene su silencio. Salgo de la habitación y cierro la puerta detrás de mi.]

[Fin del: Ectasy Prólogo]

＊

Mun!Danny: Vale, ¡ya, ahora si! Vamos a empezar con el romance gay >:D

[maeda-ai]

Ella es... _C5_

Anime: Shaman King

Rating: M

Pareja: Horo Horo & Anna

Sinopsis: Para él, ella era la mujer más hermosa, fría, pero fina y frágil al mismo tiempo, misteriosa e inalcanzable, única. Su amor imposible, ella era Anna Kyouyama... ella era su todo.

Advertencia: Lemon (NSFW)

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Por: Maeda Ai.

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.:: Capítulo 5: “Haremos que esto funcione” ::.

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.

Miraba el paisaje que le ofrecía el ventanal de su recamara; las personas ir y venir, uno que otro auto. Y aunque pareciera hacerlo atentamente, en realidad estaba desinteresada.

 Ya tenía dos semanas de haber regresado de sus “tranquilas” vacaciones en la playa.

  ““Y el muy valiente no me ha llamado siquiera.””

 Pensaba la rubia, frunciendo el ceño y buscando algo con que desquitarse. . . nada!.

* ¿Qué estoy haciendo?, no debería importarme. *

 Pero Anna no podía entender por qué la realidad estaba completamente alejada de sus palabras.

¿Qué no le preocupaba?, ¡por favor!, si en el momento en que Horokeu le explicó que debía irse por compromisos deportivos, ella misma se ofreció a acompañarlo. Así que regresaron juntos a Tokio, dejando a Ren y Pilika, sin siquiera darles la más mínima explicación.

  * Un torneo. *

 Susurró la chica, recordando las exactas palabras que el peliazul le dijera aquella vez.

Claro, Horo Horo es un jugador de tennis que tenía poco tiempo de haber incursionado en el terreno profesional, aunque ya se había hecho de cierta reputación.   Incluso, había quienes decían que el muchacho tenía mucho futuro y podía llegar a ser de los mejores, hasta tenía un grupo de admiradoras.

  * Niñas tontas y resbalosas. *

 Definitivamente, a Anna le disgustaba imaginar a ese hombre rodeado por mujeres que le gritaban que lo amaban.

  Kyouyama estaba bastante furiosa. ¿Por qué?, bueno, había varias razones para ello. . .

Pensar en quién sabe cuantas chicas se arrojarían desesperadas sobre el peliazul, sin mencionar que interrumpieron sus vacaciones. O quizás, el hecho de que todo aquello no tenía por qué interesarle, y sin embrago. . . así era.

 Pero lo que más la hacía rabiar, era que Horo Horo no la había visitado en esas dos largas semanas. . . ¡vamos!, ni siquiera la había llamado.

  * Maldición, ese idiota. . . después de lo que pasó entre nosotros, al menos debería tener la decencia de llamarme para saber como me va. *

  La rubia apretó los dientes, abandonando el borde de la ventana y comenzando a caminar por toda la habitación, cuál animal enjaulado, analizando la situación.

Estaba realmente ansiosa y molesta consigo misma; nunca dependió mucho de las personas a su alrededor, ni siquiera de Yoh. Tampoco recordaba haberse comportado como una chiquilla celosa, posesiva e irremediablemente enamorada. . .

 Anna de pronto se detuvo.

Sus ojos más abiertos de lo normal. Las dos últimas palabras que pasaron por su mente la hicieron dudar.

  * ¿Qué me está pasando?. *

  Preguntó a nadie en especial, al aire, a ella misma.

Confundida y desesperada, tomó su cartera y salió con el único propósito de despejar todas sus dudas. Quería saber que había cambiado en ella después de acostarse con Horokeu Usui.

~*~

~*~

~*~

Cuando escuchó que golpeaban la puerta, no imaginó que se trataba de Anna Kyouyama, quien, por cierto, estaba furiosa. Bastaba con percatarse de la mirada malévola y asesina que ella le dedicaba.

  * Ah, hola, Anna. . . *

* Ah, hola. . . ¿eso es lo mejor que me puedes decir, baka?. *

  Después del caluroso saludo de la bella rubia, Horo Horo muy amablemente la invitó a pasar.

Nótese el sarcasmo, pues la chica prácticamente empujó al muchacho, abriéndose paso al interior del departamento, cómo si estuviese en su propia casa.

 * Te pasa algo?, ¿por qué estás tan enojada?. *

 Las preguntas del peliazul parecieron enfadar más a Kyouyama, pues la ira en sus negros ojos se volvió más intensa. Pero no dijo nada, la mejor arma de Anna era el silencio.

 Horokeu comenzaba a sudar frío, por más que pensaba, no podía explicarse porque la mujer había venido con ese humor de los mil demonios.

  ““Si precisamente esto era lo que había venido evitando.””

 Pensó el muchacho. Y entonces, la escuchó. . .

  * Creí que eras diferente, Horo Horo, confié en ti. *

 La voz de la rubia se escuchaba más tranquila, sin embargo, un aire de tristeza no pudo pasar desapercibido para el joven peliazul, quien, con una seriedad en la cara que realmente daba miedo, preocupado, le preguntó qué le pasaba.

 * ¿Qué me pasa?. JA!!. . . Que eres como todos los hombres, una vez que consiguen lo que quieren, botan a las mujeres y fingen que nada pasó. *

* A, a qué te refieres?. Anna, no cre . . . *

* No has ido a verme, no has llamado, ni siquiera has dejado un mensaje. . . ¿Sabes cuántas veces me he quedado junto al teléfono esperando una llamada tuya?, o qué cada vez que tocan a la puerta, espero que seas tu.   Creí que algo había surgido entre nosotros, pero ya veo que. . . *

 Anna simplemente no pudo continuar, aunque estuvo agradecida por ello, pues de haber seguido seguramente habría terminado llorando.

Horo Horo la había abrazado así nada más, de pronto y sin decirle nada. Tan solo el impulso de su loco corazón que latía intensamente por las palabras de Anna.

  * Disculpa, nunca quise hacerte daño. *

 Él le susurró al oído, una sonrisa irónica cruzando su rostro.

Era gracioso, es cierto que la había estado evitando en lo posible desde que habían regresado. . . no quería verla. Pensaba que Anna simplemente no estaba interesada en él, aun a pesar del hecho de haberse acostado un par de veces. . . cinco para ser exactos.

  * Creí que para ti no había significado nada y que no estaba en tus planes hacerlo de nuevo, no conmigo al menos. *

* ¡Baka!. *

 En realidad, la joven no podría culparlo, después de todo, no hace mucho ella misma no estaba interesada en el peliazul.

Pero ahora. . .

  * Supongo que intentaremos hacer que esto funcione. *

 Decía la chica, cerca del oído del muchacho produciéndole una corriente eléctrica muy agradable y, de paso, ocultando su rostro adornado en matices rojizos.

  * Y supongo también, que haremos el amor más seguido. *

 Usui estaba seguro de que Anna le hubiese dado un golpe que lo dejase tumbado en el suelo por semejantes palabras. Pero esta vez, tan solo sintió como ella lo abrazó con más fuerza, refugiándose en sus fuertes y cálidos brazos.

 Con una sonrisa cómplice y unas cuantas palabras que, aunque no lo demostrase, significaban simplemente que ella compartía los mismos planes y deseos del apuesto joven.

  * Eres un hentai. *

   Sin finalizar.

*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

Anna poniendo las cosas en claro. Dejando a un lado la inseguridad del ainu, esta relación avanza.

Así que, próximo capitulo, como no, LEMON.

—I love HOROxANNA—.

~*~

Este fanfiction fue escrito por MAEDA Ai. Y es material de “Fallen Angel”.

Totalizado el 03 de Julio de 2006.

La dama del Hentai: Maeda Ai.

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  || Capítulo 6 ||

[noticiasq]

Beneficios del Pilates para embarazadas

Nuevo articulo publicado en https://heltia.es/beneficios-del-pilates-para-embarazadas/

Beneficios del Pilates para embarazadas

Algo que tenemos claro hoy en día es que el embarazo no es una enfermedad, y que por tanto la mujer embarazada no es una enferma, aunque sí es un periodo en el que se suceden una serie de cambios o evoluciones físicas, fisiológicas e incluso psicológicas, que deben ser tenidas en cuenta. Antes incluso de mencionar dichos cambios y los beneficios que la práctica del Pilates para embarazadas puede proporcionar en relación a ellos, es importante remarcar que la práctica de cualquier ejercicio físico, y en él se incluye la técnica Pilates, siempre debe estás precedida por la autorización expresa del médico u obstetra que lleve el seguimiento del embarazo. Hay por tanto particularidades y enfermedades, previas o que aparecen en ese periodo, que hacen no aconsejable la práctica de ejercicio físico.

Con dicho el permiso en la mano podemos plantearnos qué tipo de ejercicio físico es el que mayor beneficio va a aportarnos, es necesario valorar el estado físico previo al embarazo, si se ha llevado una vida sedentaria, quizás se realizaba algo de ejercicio, o incluso si se ha dedicado profesionalmente a algún deporte o actividad de esfuerzo físico. Para los tres casos planteados la práctica del Pilates para embarazadas es beneficiosa, ya que permite la adaptación de los grados de esfuerzo y la exigencia física, con la utilización de máquinas, como el Reformer o bien con toda la serie de accesorios, como pelotas, discos o aros, que pueden ayudarnos a adaptar los ejercicios de forma beneficiosa para cada objetivo.

Durante los 9 meses que suele durar el periodo de gestación

El útero aumenta su tamaño para permitir el crecimiento del feto, y este no solo aumenta su tamaño y peso, también cambia su colocación adaptándose al espacio y buscando en las últimas semanas la posición adecuada para el parto. Todos estos cambios provocan adaptaciones en la postura de la futura madre, el centro de gravedad se altera desplazándose hacia delante, la columna aumenta sus curvas produciéndose comúnmente una hiperlordosis lumbar y la pelvis bascula hacia delante, realizando una anteversión respecto a la cabeza del fémur. La zona lumbar y sacra se puede ver muy comprimida, produciéndose dolor en la región lumbar, lumbalgias, o pinzamientos, generalmente de los nervios ciático y sacro-iliaco.

Con el trabajo de la técnica Pilates para embarazadas todas estas molestias pueden disminuir e incluso desaparecer por completo, gracias a que los ejercicios van enfocados al trabajo de la movilidad y la elasticidad de toda la musculatura de la zona, y al fortalecimiento controlado de la musculatura anti gravitatoria, que funcionan sosteniendo el torso, mejorando la postura y el equilibrio.

Las clases de Pilates para embarazadas

Es evidente que toma protagonismo la pelvis, su estructura y su musculatura, imprescindible para tener una buena gestación, parto y postparto. En nuestras clases se focaliza el trabajo de movilidad pélvica, relajando cierta musculatura y flexibilizando los ligamentos que permiten la expansión ósea, favoreciendo el aumento de diámetro del cuello del útero. Estos ejercicios de movilidad en forma de rotaciones y básculas ayudan también a desarrollar la propiocepción, sentido de percepción física.

Con los sentidos ya despiertos se trabaja la musculatura del suelo pélvico, en forma de contracción, relajación y apertura, en ejercicios que van cambiando conforme la gestación avanza. La mejora en la tonicidad de la musculatura pélvica tiene múltiples beneficios, aparte de mejorar la ya mencionada hiperlordosis, ayuda a sostener el vientre, de manera que este realice menos presión sobre la vejiga, disminuyendo la frecuencia de la necesidad de orinar, cuando hay dicha sensación la base del suelo pélvico reacciona más eficazmente, evitando las pérdidas de orina. Se mejora la percepción, la capacidad de contracción y de relajación, necesarios en el parto. La suma del aumento de la flexibilidad y la fuerza muscular pueden reducir el esfuerzo y por tanto el dolor en el momento del parto natural. Toda esta activación y movilización aliviará también la tendencia al estreñimiento, muy común en las mujeres embarazadas, favoreciendo los movimientos del aparato digestivo.

Trabajando todo el cuerpo para el embarazo

Aunque se mantiene el enfoque en el centro, el cuerpo no deja de trabajarse en su globalidad. Los ejercicios de los miembros inferiores mejorarán la fuerza muscular, para que sea más fácil la movilidad con el aumento del peso del abdomen, mejorará también la circulación sanguínea, ayudando a evitar los problemas del retorno venoso como la hinchazón en piernas, tobillos y pies, disminuyendo los calambres y la posibilidad de que se produzcan varices.

Aunque parezca muy secundario el trabajo de brazos en esta etapa, tiene su importancia también. Los ejercicios tendrán como objetivo mantener y mejorar el tono muscular de los brazos, intentando a su vez destensar los trapecios y la zona cervical, y como sucede en las piernas, mejorar la circulación, de manera que disminuya la posibilidad de sufrir el síndrome del túnel carpiano durante el embarazo. Cuando aparece, este síndrome puede alargarse una vez el bebé ha nacido, haciendo que el hecho de sostenerlo en brazos sea causa de dolor.

La morfología

El sedentarismo o los malos hábitos alimentarios, contribuyen a que muchas mujeres aumenten en exceso su peso corporal durante la gestación, esto tendrá repercusiones negativas a corto y largo plazo, como hipertensión o diabetes gestacional, está demostrado que la realización de ejercicio físico controlado disminuye los riesgos, mejorando el llamado bienestar fetal. Hay estudios que aseguran que hay una relación entre el ejercicio físico que realiza la madre y el incremento de los movimientos fetales, se reduce además la posibilidad de que el bebé tenga exceso de peso al nacer.

La respiración

La he dejado para lo último porque está presente durante todo el trabajo y los ejercicios mencionados anteriormente. En la técnica Pilates para embarazadas la respiración se trabaja de una manera consciente, utilizándola siempre a favor de los objetivos de cada ejercicio o movimiento.

Durante el embarazo aumenta la presión de la caja torácica a medida que el abdomen aumenta su tamaño, la movilidad del diafragma disminuye provocando que la inspiración pueda ser más costosa, sobre todo en el tercer trimestre. La sangre necesita llevar oxígeno a la placenta, lo que puede hacer que aumente la frecuencia respiratoria. Cuando se produce una sensación de falta de aire o problemas para respirar bien se le denomina disnea, esta percepción de ahogo puede aparecer sin haber un problema de salud previo.

El ejercicio físico, en general, mejora la frecuencia cardiaca, y con el trabajo específico de respiración que realizamos en las clases de Pilates para embarazadas se aprenden, además, las diferentes maneras en que podemos dirigir el aire en las inspiraciones y exhalaciones, adecuándonos a cada estado y necesidad. Los movimientos respiratorios elastifican la zona a la cual dirigimos la inhalación, de manera que podemos ayudar a relajar aquellas partes que están más tensionadas, por ejemplo la zona lumbar. El control del uso de la respiración será también de mucha importancia en los momentos previos al parto, para controlar y reducir el dolor de las contracciones y en el momento del parto, utilizando la respiración para mejorar la fuerza muscular necesaria para el empuje.

Como conclusión el Pilates para embarazadas es una técnica que se adapta perfectamente a las necesidades de la mujer embarazada, aportándole movilidad, elasticidad, fuerza, equilibrio y coordinación. Dedicarse al menos una hora de clase a la semana, mejora el estado de ánimo, reduce las molestias físicas, y ayuda a la futura madre a conocer y percibir su mejor su cuerpo, incrementando además el vínculo con el bebé antes de haber nacido.

[dentrodelassombras]

Capítulo VIII Sgyn

La mirada severa de Íimë hizo que Loki sonriera orgulloso, parecía que molestarla había sido divertido para él.

-No quise molestarte …

Le dijo a pesar de que la joven había percibido lo contrario.

-Mi hermano Thor es bueno para difundir rumores, así que he oído mucho sobre ti ...

Írimë lo miró seriamente, pero después de escucharlo mencionar a Thor, pensó que no tenía sentido ocultar la verdad, especialmente porque él encontraría la forma de volver a su cabeza y un día descubrirua que ella estaba allí en contra de su voluntad. .

-Mi señor Manwe ha pensado que enviarme en esta misión de paz era una buena idea y no soy quién para desobedecerlo, pero no soy vuestra amiga ...

Su aspecto era divertido, incluso cuando la conversación estaba lejos de serlo.

-Y dime Írimë, ¿siempre eres tan obediente?

Las palabras de Loki adoptaron un tono sarcástico y aunque Írime no pudo entender su travesura, ella sabía que se estaba burlando.

-Si lo fuera, no me hubieras llamado como me llamaste, pero tal vez haya desobedecido las órdenes de mi gente demasiado tiempo ...

Y ella dijo esto agachando la cabeza como si admitiera que realmente la habia hecho sentir avergonzada.

Y aunque esto no sucedía muy a menudo, Loki se sintió profundamente conmovido.

-Si eres mejor que mi hermano para guardar secretos, él nunca sabrá que siempre te he admirado ...

Sus palabras la hicieron levantar la cabeza de inmediato.

-Siempre pensé que eras muy valiente ...

Dijo mostrando una sonrisa más amable y ella preguntó casi en un susurro.

-¿Por proteger a los Jötnar o por enfrentarte a tu hermano?

“Ambos, aunque admito que al principio pensé que hacer una cosa u otra era realmente estúpido, con el tiempo y al ver que cada ataque a Jotunheim era un fracaso, comencé a preguntarme quién sería el héroe capaz de humillar a un ejército de asgardianos liderado por el gran Thor ... comenzó a ser muy divertido y pensé que algún día podríamos llevarnos bien ...

Írimë lo observó confundida, había algo en él que era atractivo y enigmático al mismo tiempo. Tenía esa manera descuidada de decir las cosas, como si no fuera importante si causaban un mal efecto y respondia de la misma manera, no se inmutaba ante el más mínimo comentario.

-Nunca pensé que lastimar a tu gente era divertido, solo defendía a los míos, eso es todo ...

-Los tuyos... ...

Repitió él y ella asintió con la cabeza

Esta vez, Loki la observó atentamente, era posible que intentara meterse en su cabeza, eso fue lo que sintió Irimë ante la insistencia de su penetrante mirada, después de unos segundos suspiró como si se resignara.

-Realmente no son monstruos para ti ...

Dijo como si hubiera confirmado algo que era obvio pero que tal vez se negaba a creer.

-Veo monstruos en Asgard ...

Le respondió ella, adoptando esa manera descuidada de decir las cosas. Loki asintió con aprobación.

-Mi señor es muy sabio y habla con las palabras del Creador, es por eso que he aceptado venir a tu mundo, quiero creer fervientemente que existe la posibilidad de una tregua, que hay un lugar en el corazón de Odin para la paz…

Y  respiró hondo antes de continuar

-Pero si no tenemos éxito y las esperanzas se desvanecen, si hay una guerra entre ambos mundos ...

Y levantó la cabeza aún más dándole a su rostro una expresión de majestuosidad

-Entonces no estaré del lado de Asgard ...

Loki asintió nuevamente e inclinó la cabeza mientras estaba en silencio, Írimë tuvo que hacer un esfuerzo para no disculparse, el silencio de Loki le causó una gran tristeza.

Cuando volví su mirada a la mirada de Írimë había un destello diferente, algo de esa apariencia inamovible había desaparecido, sus ojos mostraban una luz más brillante.

-Tienen suerte ...

Le dijo.

Írimë no respondió de inmediato, lo observó de nuevo con esa extraña curiosidad. 

Volvió a enfocarse en esa nueva luz que emanaba de sus ojos, lo hacía parecer encantador y quizás un poco vulnerable, sin ella, sin esa luz radiante, cualquiera podría haber dicho que albergaba un destello de maldad, pero Írimë había aprendido a ver más allá.

-Ojalá pudiéramos vivir en paz ...

Ella dijo casi como pensar en voz alta.

- ¿Crees que los Jotnar tienen el mismo deseo?

Ella lo miró en silencio y luego se encogió de hombros.

No…

dijo finalmente y él asintió porque sabía que  diría eso.

-Entonces esta misión estaba condenada desde el principio.

Írimë sacudió la cabeza con un gesto de desaprobacion. El fracaso era algo con lo que no podía lidiar, no otra vez, y por eso había aprendido a vivir con una abrumadora esperanza que la obligaba a vivir incluso después de sentirse sin vida.

-La esperanza es el arma de los valientes, sin ella nunca se atreverían a luchar, porque los más valientes son los que tienen más miedo pero lo enfrentan, ¿sabes cómo lo hacen?

Dijo con lágrimas en los ojos.

-Con esperanza, se aferran a ella porque es más poderosa que cientos de lanzas y sin eso no tendría sentido luchar ...

Ella había dicho eso en un tono desgarrador y Loki lo había escuchado sin bromas, sin sarcasmo porque podía ver en sus palabras un dolor antiguo que no podía entender pero que sabía que estaba allí.

-Es por eso que triunfan ... con esperanza en sus corazones son los dueños de la victoria ...

Loki se reclinó en el borde del balcón de piedra, puso uno de sus brazos sobre él y la miró fijamente, pensó que era realmente valiente.

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El atrio estaba lleno de invitados. La ceremonia de bienvenida unía de algun modo a ambos mundos. Había música, comida, bebida, todo era espléndido. 

Írime estaba sentada al lado de su señora Elbereth, observando a los que bailaban alegremente. Todos parecian divertirse, pero Írime no se divirtia. Había olvidado cómo hacerlo hacia mucho tiempo. Cada vez que algo le causaba felicidad, pensaba en su pequeño Jotun abandonado y toda alegría desaparecía. Se preguntó dónde estaría, porque podía sentirlo dentro de su alma y sabía que no era feliz, donde sea que estuviera, estab sufriendo y por eso no podía contentarse con sentir felicidad, incluso cuando quería eso con toda su alma. -No dejes que tu dolor destruya tu corazón.

Su señora le dijo en un cálido susurro que la sacó de sus oscuros pensamientos.

-Debes mantenerte entera...

Írimë trató de sonreír.

-Mi señora ... ¿puedo hacerte una pregunta?

Elbereth movió la cabeza afirmativamente.

- ¿De verdad cree que hay esperanza de que esta misión tenga éxito?

Elbereth la miró unos segundos y luego dijo.

- ¿Sigues esperando encontrar a tu protegido nuevamente?

Írim sintió que su corazón se encogía, escucharla hablar sobre eso la sorprendió.

-Nunca la perdí.

Le dijo

-Porque la esperanza no proviene de nuestros pensamientos, sino de nuestros corazones ... ¿entiendes?

La Istari asintió, hablar con su radiante dama de Oeste siempre le devolvia la vida a su alma.

Los ojos de Írimë no podían dejar de observar al príncipe, incluso cuando él se volvió para mirarla, porque lo hizo, era difícil para ella mirar hacia otro lado. Era un sentimiento nuevo y no estaba segura de poder manejarlo.

Elbereth sonrió cuando lo notó y aunque Írime no se dio cuenta de esto, la dama de Oeste suspiró inmensamente feliz.

Ninguna de ellas vio a Thor, el hijo de Odin, acercándose hasta que estuvo parado frente a ellas.

-Señoras…

Dijo inclinándose en una suave reverencia

-Quería darles la bienvenida personalmente, es un placer tenerlas en Asgard.

Y luego miró a Írime¨ que lo observaba  seriamente.

-Si vamos a hablar de treguas debemos dar el ejemplo

Dijo mirando a la Istari, ella asintió con la cabeza, ese  frío volvió a invadirla, definitivamente debian ser los Jotnar quienes le estaban provocando aquello.. Trató de no pensar en eso y le mostró respeto respondiendo a la reverencia, pero no pudo pronunciar una palabra porque la voz de Loki le impedío hacerlo.

-Si me permites hermano ...

 Dijo haciendo a un  lado a Thor

-Me llevaré a la Protectora de los Jotnar, creo que si la invito a caminar y te impido hablar, tal vez ella no decida arrancar tus pies del piso ...

Írime sonrió y Thor frunció el ceño cuando lo escuchó, tal vez la broma no fue muy divertida para el gran Thor.

Loki extendió su mano hacia Irime y ella la tomó. En el momento en que sus manos se tocaron, ambos sintieron algo extraordinario. Fue como un estallido inesperado, ninguno de los dos había estado preparado para sentirlo. Pero además de eso, Írimë se dio cuenta de que su piel estaba asombrosamente fría. Él apretó su mano entre la suya evitando que la soltara porque había previsto que el frío la sorprendería. Sostuvo su mano firmemente  unos segundos y luego Írime notó que estaba tan caliente como su propia mano.

Fuera del gran salón se detuvieron y ambos se miraron con curiosa insistencia.

-¿A donde vamos?

Preguntó Írime y supo que le gustaba que Loki todavía le tomara la mano.

-Deberías agradecerme por salvarte ...

Dijo con la mirada fija en ella y la joven se tomó un tiempo para responder, pero pronto recobró la lucidez.

-Para empezar, no estoy segura de que fuera necesario rescatarme ... y no iba a hacer lo que dijiste ...

Loki se rio en voz baja.

-Qué pena, hubiera sido divertido ...

Írime sacudió la cabeza con un gesto de desaprobación.

-Para ti las peores cosas son divertidas ...

El solo sonrió. Se sentía cómoda con su mano en la de él, el recuerdo de ese toque frío regresó a su mente, no parecía natural para ser asgardiano, pero no mencionó el tema.

Los ojos de Loki cruzaban su rostro de una manera encantadora, con esa sonrisa traviesa que la volvía loca y luego se fijaron en sus ojos y los atravesaron como una espada incandescente.

-Pensé que te gustaría salir un poco, no me siento cómodo entre muchas personas y no pensé que te estubieras divirtiendo.

Ella no respondió

-¿Te gusta leer?

la joven Istari asintió 

-Conozco el lugar perfecto

- ¿Está bien alejarse de la fiesta?

Ella preguntó

-Bueno, digamos que el que necesitaba ser rescatado era yo ...

Írime no pudo evitar sonreír al escucharlo y aceptó su invitación dejándose conducir por los jardines del palacio.

Írimë amaba los libros, adoraba las bibliotecas porque eran el corazón de la sabiduría. Había pasado su infancia en esos hermosos lugares e incluso su alma estaba encantada de hacerlo.

Las bibliotecas de Alfheim eran majestuosas, las paredes estaban cubiertas de miles de estanterías que parecían infinitas. La biblioteca del palacio de Asgard no era menos majestuosa.

Ambos se detuvieron al mismo tiempo al cruzar el umbral del enorme recinto, ambos sintieron la necesidad de reverenciar en el silencio a un lugar tan maravilloso.

Fue en ese momento cuando Loki se dio cuenta de que todavía sostenía la mano de Istari, por lo que la soltó suavemente y le hizo un gesto que era una verdadera caricia, ella se estremeció de nuevo pero trató de no mostrarlo.

Ella trató de distraer su mente con la imagen que se elevaba frente a sus ojos y respiró hondo.

-Siempre me encantará este olor.

Dijo respirando profundamente.

-Es el perfume de la inteligencia ...

Loki le dijo en un susurro y ella lo miró sonriendo.

- Nunca pensé que los asgardianos ... ...

Dijo, pero se detuvo rápidamente porque no quería ofenderlo, pero él se adelantó a sus disculpas.

¿Que los asgardianos puedan amar la cultura?

Estaba a punto de decir algo, pero Loki continuó

-La mayoría piensa que es mejor pasar tiempo en la arena haciendo ejercicio para la batalla, pero hay algunos que ... prefieren ejercitar otras partes del cuerpo ...

Írime volvió a sonreír.

-Es un lugar hermoso

Dijo suavemente mientras avanzaba y caminaba mirando las enormes paredes tapiadas con libros. Algunos solo estaban suspendidos en el aire, esosespecialmente llamaron su atención.

-Esos son los de mágia ...

Dijo mientras la seguía de cerca. Írime observó el grupo de libros que giraban en una especie de círculo suspendido sobre su cabeza, fue maravilloso.

La joven se estaba fascinada y recorria la enorme sala,

 Loki se quedó allí solo para observarla. 

-Es muy hermosa ... - pensó. Había una magia especial en ella que lo fascinaba, era delicada y aunque su apariencia era la de alguien que vivía en el dolor, había una vitalidad casi infantil en ella, en ese momento podía ver que había una niña dentro de su alma. , una pequeña chica que quería ser feliz.

Irime se había alejado, distraída por los miles de estantes, riéndose a cada paso y acariciando suavemente los lomos de los libros, y Loki había decidido acercarse y caminar con ella. De repente, ese extraño frío la invadió nuevamente y desapareció todo vestigio de felicidad. Loki se dio cuenta y se apresuró a correr hacia el otro lado de la biblioteca, no quería eclipsar la escena que tanto lo había complacido.

-¡Oh! aquí encontrarás libros sobre los Nueve Reinos ... a ver ...

Dijo agudizando sus ojos hacia los estantes que estaban más abajo en el lado opuesto de la habitación.

-Aquí está ... Reino de Jotunheim de los Gigantes de Escarcha ...

Írimme lo observó agacharse y luego ponerse de pie con un enorme libro en sus manos, el frío se había ido.

-Ven…

Él le dijo y ambos fueron a una enorme mesa dorada en el centro de la habitación, colocaron el libro sobre él y lo abrieron. El frío volvió, pero Íirme no le prestó atención porque estaba alucinada con los hermosos dibujos en movimiento que aparecían en las páginas, eran imágenes con vida propia y parecían estar narrando una historia.

Írime¨se quedó deslumbrado por eso. Acarició las letras grabadas en las páginas con una delicadeza extraordinaria.

-Yo no entiendo este idioma …

-Es muy viejo ... ya no se usa en Asgard ...

-Pero lo sabes ...

Loki asintió

-He aprendido a hablarlo pero no con fluidez ...

Y poniendo su mano muy cerca de la suya comenzó a leer:

- “Más allá de las raíces del Yggdrasil, se eleva el Reino de los Gigantes de Escarcha, es un lugar frío y el sol nunca brilla en sus cielos, hay valles oscuros y profundos y picos montañosos donde siempre es invierno. El viento azota con ira a aquellos Paisajes sombríos. Írime lo miraba mientras leía. Su voz era dulce y melodiosa y tenía una majestuosa dignidad de rey, la cadencia y el ritmo que atribuía a sus palabras los convirtió en música.

Loki continuó leyendo sin darse cuenta de la mirada dulce que Írimë había adoptado.

- "El hielo lo cubre todo, desde las montañas más altas, hasta los bosques congelados son su mayor belleza ..."

La Istari sacudió la cabeza en un gesto de desacuerdo cuando lo escuchó pronunciar esas palabras cuya belleza solo estaba en su forma de pronunciarlas y no en lo que querían decir.

-No siempre ha sido así ...

 dijo

- Hubo un tiempo, hace mucho, tal vez demasiado, en el que los ríos eran claros y fluían a través de campos inmensamente verdes y frondosos, con montañas de picos helados y valles verdes ... había pájaros en sus cielos y peces en sus ríos ... "

Loki la observó por un momento en silencio, como si no hubiera querido interrumpir sus pensamientos.

-Nunca he visto ese Jotunheim ...

Írime volvió a sonreír con esa dulce tristeza que comenzaba a conmover cada vez más el espíritu de Loki.

-Yo si... y era hermoso ... pero nadie recordará eso aquí ...

Loki frunció el ceño en un gesto confuso.

-¿Cuantos años tienes?

Írime¨lo sonrió ahora

-Mi edad no es algo que puedas entender fácilmente, como mi verdadera naturaleza, no contamos los años como ustedes, ni siquiera los contamos realmente, no vivimos como mortales porque no lo somos ...

-Nosotros vvimos miles de años pero tú eres inmortal ...

Dijo como si eso le pareciera fascinante.

-No es un regalo para nosotros, la inmortalidad puede ser muy triste cuando has visto tanto...

Habia tristeza en sus palabras

-Algunos de nuestra gente han decidido renunciar

Loki casi se rio.

- Renunciar  a la inmortalidad, ¿por qué hacer algo así?

-"Por amor", dijo en un suspiro, "mucha de mi gente ha sentido amor por algún mortal y una vez que sientes amor te vuelves verdaderamente eterno, no puedes imaginar una vida si no es con quien amas ... hubieron algunos que eligieron esa eternidad.

Loki no respondió a eso, aunque no pudo entender completamente sus palabras, pensó que eran hermosas.

Írimë miró el libro como si quisiera cambiar el tema de conversación y una imagen le llamó la atención, la magestuosa y radiante figura del primer asgardiano que había conocido al llegar a Asgard apareció en esa página.

-¿Qué sabes sobre él?

Dijo señalando al armero blanco brillante, Loki miró a la figura y resopló.

-Heimdall, el portero

Dijo con desprecio

- ¿Por qué está él en este libro?

Loki resopló otro

-Heimdall, el hijo de las nueve madres, está en todas partes, es un miron y no te permite guardar ningún secreto, puede escucharte incluso si estás parado en el mundo más distante, y lo que digo no es figurativo ...

Írime dijo

- ¿Nos está viendo y oyendo ahora?

Loki sonrió con un gesto de satisfacción.

- No, porque no se lo permito ... de hecho ... - dijo lentamente - nadie puede vernos ni oírnos ... estamos ocultos a los ojos de todos ...

La Istari lo miró en silencio.

-Pero no temas ... No soy tan malvado como para lastimarte aunque digan lo contrario de mí.

El Istari sonrió de nuevo.

-No creo lo que dicen, sé que no eres malvado.

Y aunque Irime lo dijo porque hacía referencia a su poder interior que no le advertía de un peligro inminente, y le decia que no era peligroso, Loki lo tomó como un elogio y respondió con una suave reverencia.

El volvio ss ojos a la figura de Heimdall.

-¿Por qué preguntaste por él?

Írime se encogió de hombros.

-En primer lugar, me gustaria entender  que hace en un libro que habla sobre Jotunheim ...

-Es fácil de explicar, él es el guardia del puente Bifrost y dado que este puente comunica a Asgard con Midgard, su otro lado concluye bajo las raíces del Yggdrassil cerca de la fuente de la sabiduría, algunos piensan que los Gigantes de Escarcha podrían usarlo. para cruzar Asgard y Heimdal debe evitarlo ...

Qué absurdo ...

Irime dijo riendo.

-¿Y en segundo lugar?

Loki le preguntó que había estado muy atento a sus palabras, Irime suspiró al recordar ese primer encuentro confuso, pero no le dijo la sensación de miedo que le había transmitido.

-No lo sé, cuando llegamos y nos dieron la bienvenida me llamó de una manera extraña, me dijo Sigyn ... ¿sabes lo que podría significar?

Loki se rio.

-No te confundió con ninguna de sus chicas, estoy seguro de que no tiene ninguna, no sale mucho de casa.

Y se rio de nuevo de una broma que solo él entendía.

"Lo siento", dijo, aclarándose la garganta. "Ya has notado que no somos amigos ..."

Y se rio de nuevo.

-Pero ya veremos ... Sigyn ...

Y frunció los labios en un gesto divertido que indicaba que estaba pensando, Irime pensó que era encantador.

-No creo que sea una palabra, en realidad es un tipo bastante extraño pero ... la primera parte suena familiar ... déjame ver.

Fue a otro rincón de la gran sala y buscó algunos libros. Írime dejó de sentir el frío que había estado sintiendo y frunció el ceño nuevamente, miró el libro y puso su mano en sus páginas, pensó en los Jotnar, no quería dejar de sentir eso, le recordaba a sus seres queridos. No funcionó esta vez. Por fin, Loki pareció encontrar lo que estaba buscando y sacó su libro y lo abrió colocándolo sobre la mesa, ella todavía estaba acariciando las páginas del otro libro y de repente el frío regresó, el Istari suspiró feliz.

-Este es un libro de idiomas muy antiguos, aquí hay palabras que nadie recuerda ... y tú dices Sigyn y me recordó a Sigr ... lo que significaba ...

Y buscó con sus dedos largos y delicados en un índice de palabras.

-Aquí está, sí, es "victoria". Sigr es victoria y el final de la palabra "Yn ... Solo sé que cuando escucho me recuerda la palabra amiga, una" amiga ", pero estoy seguro de que está escrito de manera diferente, déjame ver ...

Y el estaba mirando

-Aquí, -dijo por fin- la palabra es "Vina" pero se pronunciaría como "Sig", podría haberte llamado "Amiga de la Victoria" y esto puede haber sido un buen deseo para tu misión, es bastante esperanzador ...

Irime frunció el ceño no tan convencida.

-Pero él me lo dijo solo a mí, debería haberle dicho eso a Elbereth, no a mí ... y realmente quería que me diera cuenta que estaba dirigiendose a mi ...

Loki suspiro

-Del el extraño Heimdall todo es posible.

Irime sintió una curiosidad extrema, algo le dijo que había más en esas palabras de lo que ella imaginaba y que no se refería a la misión de su gente, era algo que la involucraba personalmente, tal vez la suya era una victoria diferente, tal vez sus señores. no la había elegido porque sí, de repente sintió una terrible necesidad de descubrir lo que eso significaba.

-Dime más sobre Heimdal por favor ...

Loki la miró con un gesto mezclado con sorpresa y desaprobación, pero asintió a su pedido.

-Si tu quieres…

Y la joven sonrió.

[kaori-angel]

💘 ; eight months together🌻🌼🌻🌼🌻🌼🌻🌼🌻🌼🌻🌼🌻🌼🌻.

ㅡ ¡Ya son ocho meses juntos, hyung! 💘.

Aún parece increíble ¿no? Pensar que hemos estado tantos días, hablando día y noche, aprendiendo un poquito más del otro con el paso del tiempo, y ahora cuidando a los gatitos que hicimos con tanto amor. Todo suena como un cuento de hadas, o al menos para mí suena así, como si todo lo bonito del mundo se resumiera en un nombre "Dante"♡. Hoy, en nuestro cumplemes que llevo varios días esperando, decidí hacerle algo diferente, aunque quizá no es tan bonito como usted espera, pero pensé que sería una buena idea. La vez anterior, le regalé muchas fotografías, luego llegó la noticia de nuestros bebés, y ahora, me gustaría dedicarle unas poquitas frases de muchas películas / novelas / series que me gustan mucho y que me han hecho pensar en usted desde el primer momento. Así que, sin más preámbulos, le advierto que este es un post lleno de cursilerías y cositas rosas y bonitas♡.

Eleanor & Park.

"¿Cuáles son las probabilidades de conocer a alguien así? ¿Alguien a quien pudieras amar para siempre, y te amara por siempre de regreso? ¿Y qué haces cuando esa persona nació medio mundo lejos de ti?"

Este libro es muy especial para mí. Lo leí antes de conocerlo, y hasta ese entonces, no tenía idea de que se podía sentir un amorcito tan fuerte como el de los protagonistas de ese escrito, ya que yo no había experimentado nada igual. No tenía las respuestas a ninguna de las preguntas que Park se hacía a sí mismo, referente sus sentimientos sobre Eleanor, pero ahora creo entenderlo muy bien. Yo tuve la oportunidad de que la probabilidad de uno en un millón estuviera de mi lado, ya que pude conocer a una personita que me ama tanto como yo a él. Y lo mejor, es que haber nacido medio mundo más lejos el uno del otro no fue un impedimento para que nuestro amor comenzara, porque los mensajitos preciosos siempre ayudan y nos hacen sentir más cerquita♡.

"Él sabe si me gustará una canción antes de que la haya oído. Se ríe de mis chistes antes de que haya terminado de contarlos. Hay un lugar en su pecho, justo debajo de su cuello, que hace que quiera cumplir las promesas que le hago.  Solo hay uno como él."

A veces me da cositas en la pancita el cómo usted parece conocerme tan bien, sabiendo qué canciones harán que quiera llorar de amorcito, o comprando dulces que sabe que me gustan demasiado, incluso cuando conversamos parece recordar cada pequeño detalle de las cosas que le digo y créame que cositas así me hacen darme cuenta de la suerte que tengo de estar con un chico precioso como usted. Quiero cumplir todas las promesas que le he hecho por la garrita, por todas nuestras garritas, mejor dicho, porque usted merece eso y ser feliz. Sé que jamás encontraré una personita tan buena como lo es hyung conmigo, y quiero cuidarlo siempre.

"Sostener la mano de Eleanor era como sujetar una mariposa. O un latido. Como tener en la mano algo completo y vivo."

Esa es una idea que ronda por mí cabecita cada vez que lo veo siendo un niño chiquito al que le emocionan incluso los cachorritos que hemos en la calle: ¿Cómo puede existir una persona tan pura, hermosa y llena de vida? Porque aunque usted no lo crea, deslumbra rayos de sol y magia por donde mire, y quiero mantener ese brillo en usted, no quiero que vuelva apagarse por cosas malas del pasado, lo protegeré con mi vida.

"Tú eres interesante... / —Ya —se burló Eleanor—. Ojalá estuviera bebiendo leche, y ojalá tú estuvieras aquí para poder ver cómo la escupo por la nariz al oír eso. "

¡Esto! Así exactamente me siento cuando usted comienza a nombrar cada pequeña cosa que ha encontrado en mí, y es bastante impactante ¿sabe? Ya sabe que jamás había encontrado cosas buenas en mí, me miraba y era un chico más del montón que fácilmente podría pasar desapercibido ante la mirada de la gente, pero usted llegó y desde el primer momento me hizo sentir especial, cosa que jamás había sucedido antes. Usted fue quien me coloreó de rosa y dejó que mis sueños y esperanzas crecieran como plantitas. Usted me dio lo mejor de mí, y siempre le agradeceré por eso.

"Ni siquiera puedo respirar cuando no estamos juntos —susurró ella—. Y eso significa que, cuando te veo los lunes por la mañana, tengo la sensación de que llevo sesenta horas sin coger aire. Seguramente por eso refunfuño tanto y te contesto mal. Cuando estamos separados, me paso el tiempo pensando en ti, y cuando estamos juntos me invade el terror. Porque cada segundo cuenta. Y siento que he perdido el control. No soy dueña de mí misma, soy tuya. ¿Qué pasa si de repente te das cuenta de que ya no te gusto? ¿Cómo voy a gustarte tanto como tú me gustas a mí?"

Ush, seguro no se imagina todas las veces que me he preguntado eso, ya que la sola existencia de su gusto por mí me parece un milagro. Es todo tan lindo y ah, realmente pareciera que revive mi alma siempre que estamos juntos, pero es sólo cuando estoy con usted. Puede igualar la magnífica experiencia de la danza, lo especial de la fotografía, los nervios de las presentaciones, la perfección del arte y la pintura, y de repente, me veo a mí mismo perdido en el mar interminable de su amor, aquel que jamás quiero abandonar.

Grey's Anatomy.

"Pero cuando nos besamos, fue como, tengo que decirte, como si nunca hubiera besado a otra mujer antes. Era como mi primer beso. El beso correcto."

Bueno, creo que sabe que yo antes de usted jamás había besado a nadie. Así que evitando esa partecita de esta cita, me gustaría destacar que nuestro primer beso fue así, el beso correcto en el momento correcto. Algo tan especial que me hizo sentir mil y un cosas a la vez, incluso siendo yo el que dio el primer paso (cosa que me da vergüencita) pero había esperado tanto por ese choque de nuestros labios, que jamás me arrepentiré de ello y ah, me pregunto cuántos besitos habrán pasado desde eso... seguro más de miles, hyung bonito.

“Meredith es la mejor madre que un niño podría tener. Ella ama a Zola y también me ama a mí, y ​​si tiene algún defecto, es que ella ama tanto a la gente que haría lo que fuera por ellos”.

Se me hizo correcto destacar este pedacito, ya que para mí, desde la primera vez que hablamos sobre bebés gatitos nuestros, ha quedado claro que usted es el padre perfecto y cada día lo compruebo más al verlo compartir con Naomi y Thiago, nuestros príncipe y princesa. Usted haría lo que fuera por verlos felices, y lo que fuera por verme feliz a mí, pero dejando eso de lado, quisiera también mencionar que usted siempre se preocupa de todos los que están a su alrededor, se lleve bien con ellos o no, siempre ha sido muy preocupado, y eso es algo que me gusta mucho de usted. Quizá lo hace inconscientemente, no lo sé, pero es tan bonito ver cómo protege a cualquiera de las personitas que usted considera importantes, es maravilloso♡.

“Quiero casarme contigo. Quiero tener hijos contigo. Quiero construirnos una casa. Quiero sentar cabeza y envejecer contigo. Quiero morir cuando tenga 110 años en tus brazos. No quiero 48 horas ininterrumpidas. Quiero una vida contigo”.

Quiero que está frase se le quede muy grabada en su memoria ¿bueno? Porque yo quiero todo eso y más. Nosotros tenemos un amor como el de Meredith y Derek, y a pesar de que hemos hecho ya la mitad de esas cosas, yo aún quiero compartir mi vida con usted, siempre y para siempre. No quiero alejarme por nada del mundo de usted, en cambio, necesito y deseo que este amorcito tan bonito que hay entre nosotros crezca cada día más hasta ser lo más grandecito del mundo. Lo que tenemos es especial, y mucho más memorable que cualquier amor de novela o serie de televisión.

Winnie The Pooh.

"Si algún día nos llegamos a separar, mantenme en tu corazón, me quedaré ahí para siempre".

Es difícil pensar que algún día estaremos separados, ya que ambos debemos continuar después nuestros estudios superiores y tendremos que esperar hasta la tardecita para poder hablar, pero quiero que en esos momentos, pueda pensar que yo siempre viviré en su corazoncito. Jamás lo dejaré sólo, y estaré esperando por usted en casa con nuestros bebés cada día que pueda, mi amor, se lo prometo desde ahora.

"Tan pronto te vi, supe que las mejores aventuras venían en camino".

¡Y es cierto! Somos dos niños chiquitos que ya han tenido millones de mejores aventuras, y ahora se vienen aún más por la llegada de nuestros bebés. De igual forma, sé que cualquier día que pase a su lado, será el mejor del mundo.

"Un día contigo es mi día favorito. Así que hoy es mi nuevo día favorito".

¿Esto no le hace recordar a nada? ¡Sí, exacto! ¡A nuestros mejores días de la historia! Cada día que tengo la oportunidad de pasar a su lado, cuenta para mí como mi nuevo día favorito. No todos tienen la suerte de pasar sus días con el conejito más precioso de todos ¿No?🐰💘.

The Nightmare Before Christmas.

"Tenerte frente, hoy y por siempre. Pues nuestro amor es una realidad, hasta la eternidad."

Bueno, no hay mucho que comentar acerca de esta frase, ya que es algo que hemos ido descubriendo juntos cada vez que nos preguntamos cositas y quedamos impactados al saber que nos gustan casi las mismas cosas. Estábamos destinados a ser, tal como Sally y Jack en aquella película. Y claro, yo tengo más que seguro que usted es la personita por la que arriesgaría todo para salvarlo, tal como Sally se enfrentó a Oogie Boogie sólo por ayudar a la personita (¿esqueleto?) que más amaba en la vida u u♡.

El Chico de las Estrellas.

"Cada vez que su piel coincidía con la mía nacía una estrella en el cielo."

Creo que ya hemos creado varias galaxias con todo este tiempo, porque así es un hecho para mí que cada vez que nosotros estamos juntitos, un nuevo astro precioso se forma en nuestra pequeña galaxia. Su piel desprende magia y bueno, cómo la estrellita más brillante y especial de todo el universo no podría crear nuevas estrellitas para que podamos admirar, aunque ninguna que se compare con su total belleza.

Desde mi Cielo.

"Si pudiera comprar una hora de amor. Si eso es todo lo que se me diera. Una hora de amor sobre ésta Tierra... Te daría todo mi amor."

Esto me hace sentido siempre que pienso en las limitadas horas libres que tengo después de la escuelita, horas que realmente quiero que sean para usted. Quiero gastar hasta el último precisado segundo de mi vida en estar con usted, y poder seguir aprendiendo, creando, riendo y disfrutando de la alegría que me da cada día, hyung, porque usted hace que mis días sean mejores, rosas y bonitos con su magia de príncipe.

Your Name ㅡ Kimi No Na Wa.

"Antes de todo esto, mi vida era una página en blanco. Él viejo yo que lloraba, ahora mismo estaría de alegría al verme."

Usted llegó a cambiar mi vida para bien, a escribir con besos en mi piel las historias más bonitas jamás contadas, llegó para quitarme el dolor, como un milagro en medio del abismo. Me hizo levantarme, sacudirme el polvo y ponerme curitas en las heridas de mis rodillas por todas las caídas anteriores, y me enseñó que eso no es todo en la vida, que hay muchas cosas hermosas que yo aún no había conocido y que pude apreciar gracias a su mera existencia. Ya no soy ni la sombra del niño triste de antes y todo es gracias a usted y su amor que crean cositas demasiado grandes y extraordinarias. Créame que usted es mi vida, y que cada día intentaré pagarle todo lo bueno que ha hecho por mí.

¡Felices ocho meses preciosos a su lado, Dante-hyung! Un mes más de muchísimos que nos quedan aún por vivir🌼🐱💘🐰🌻.

[venirducoeur]

• 3 de junio, 2019.

— Me debes algo. – ¿Un masaje? — Un masaje. – ¿Cuál es el tobillo débil...? — El izquierdo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ — Mm-hm. De acuerdo, tomo nota. Pero antes… Cierra los ojos. — Sugirió, con una sonrisita en los labios: dejando caer parte de su peso sobre el torso del americano, con actitud melosa. — Por favor. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ — ¿Puedo confiar en ti? — Articuló con el tono de voz tan débil como calmado, al mismo tiempo que remolcaba las yemas de su mano derecha sobre el semblante femenino: en concreto, sobre el perfil. De arriba a abajo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ — Puedes, ¡y debes! — Enfatizó las dos últimas palabras, sin perder aquella expresión infantil del rostro; esperando, de ese modo, poder salirse con la suya. — Porfi… — Murmuró, modificando un poquito el tono de voz a medida que se elevaba de puntillas y le hacía pucheros. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ — Está bien... — Murmuró prácticamente para sí mismo, a medida que asentía con un movimiento de cabeza y gesticulaba con los brazos, desvelando su futura rendición. Apenas unos segundos más tarde, el americano se privó voluntariamente del sentido de la vista. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Un beso fortuito acabó sobre la boca masculina, a modo de agradecimiento: fue un visto y no visto. Inmediatamente después, la fémina rodeó al americano hasta posicionarse tras su espalda. Desde allí, nuevamente de puntillas, acertó a colocar y anudar un pañuelo sobre los ojos para incapacitar totalmente el sentido de la vista. — Ahora, despacito. Sígueme… — De vuelta en el punto de partida, Eleanor agarró las manos masculinas para atraerle e indicarle el camino hasta el interior del dormitorio. Con sumo cuidado y lentitud, sin sobresaltos. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Con motivo de la muestra de afecto que había recaído sobre sus labios, el muchacho se sorprendió a sí mismo sonriendo. ¿Se habría producido algún tipo de transferencia a pesar de la fugacidad del momento? Pero, volviendo sobre el tema en cuestión, ¿qué estaría tramando Eleanor? Muy a su pesar, no tenía ni la más mínima idea. Se escapaba, literalmente, a su entendimiento. No obstante, y a pesar de la dificultad que entrañaba la ausencia de visión, se mostró colaborador y participativo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Durante el trayecto del pasillo hasta la habitación principal, la veinteañera cuidó de cada paso que el americano daba en su dirección: evitando de ese modo posibles desvíos hacia los muebles que lo decoraban. (…) — Quieto aquí. — Ordenó, aunque con voz serena a medida que deshacía la unión entre sus manos para, acto seguido, disponerse a abrir de par en par la puerta que daba acceso al dormitorio. Pese a que el americano no fuese testigo, éste estaba iluminado tan sólo por un par de rayos solares que se filtraban (a propósito) por unas de las ventanas y velas aromáticas. La cama estaba perfectamente hecha, con sábanas limpias y con ese característico olor a suavizante. Un par de toallas. Lo necesario para un masaje. Sin mediar palabra, la joven volvió sobre sus propios pasos para agarrar al veinteañero, en esta ocasión, por la cintura. — Vete quitando la camiseta – dijo, a medida que ella misma introducía sus manos bajo la tela de ésta para ayudarle con la tarea –, pero, ¡chst! Sólo los brazos. No quiero que hagas trampas. — Advirtió, con una sonrisa en los labios a medida que lo atraía hacia sí para que ingresara también en el dormitorio. Finalizaría el trayecto junto a los pies del colchón. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ ¿Podía decirse que se encontraba emocionado...? Podía decirse. — Eleanor... — Expresó con cierta contrariedad e impaciencia en el tono de voz, nada más escuchar la orden ajena. No sólo no podía contar con el sentido de la vista sino que, además, la libertad de movimiento le era vetada. ¿Qué estaría sucediendo a su alrededor? La curiosidad estaba comenzando a carcomerle cuando, de forma inesperada, la constitución de unas nuevas palabras femeninas lograron sonsacarle una sonrisa. Otra más. — Espero que esto que me estás pidiendo lo hayas hecho con tu propia ropa. — Murmuró con aquella característica complicidad, a medida que propiciaba la lenta retirada de la primera de las mangas. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Más temprano que tarde, la habitación comenzó a llenarse de las carcajadas de la muchacha que, tras oír al americano, ni siquiera pudo contenerse. Definitivamente, era un caso perdido. Tal vez por eso, con una gigantesca sonrisa en los labios, la morena negaba repetidamente. — Sh… — Siseó para pedir silencio, antes de tomarse el atrevimiento de deshacer el nudo que mantenía sujeto aquel pantalón de chándal. Aflojada la prenda, la fémina optó por arrodillarse para ayudarle con el calzado y comenzar a aflojar los cordones. — No te la quites del todo, ¿eh? Que de eso me encargo yo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ — Si esto se trata de un ejercicio de paciencia... — Aquella incipiente advertencia fue reprimida entre los carnosos labios del veinteañero hasta que logró silenciarla. (Pero) Qué mal toleraba la impaciencia. Y qué poco ayudaba la morena a paliar el estado de excitación en el que se encontraba sumido. — No te molestes. — Espetó con celeridad antes de inhabilitar la maniobra que hasta aquellos instantes estaba teniendo lugar sobre la lazada de su pantalón. — Creo que puedo arreglármelas yo mismo. — Fue en esos precisos instantes cuando recordó las palabras que, durante el devenir de la tarde, Eleanor había compartido con su persona: ella no hacía trampas. Pero jugar, jugaba sucio. He ahí la evidencia. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Cordones desatados. Deportivas aflojadas... Sin duda, el calzado masculino en aquel punto de la ecuación; ya sobraba. Aprovechándose de que él mismo quiso encargarse de su pantalón (sin que ella rechistara o se opusiera), la veinteañera volvió a colocarse de pie para terminar de despojarle de la camiseta. Lo hizo con tantísimo cuidado que ni siquiera rozó el pañuelo que le cubría los ojos. — Perfecto. — Murmuró, para sí misma a medida la lanzaba hacia cualquier lado y recolocaba el calor de sus manos sobre los costados de la anatomía contrario y, de ese modo, lo obligaba a voltearse para ser él quien tuviese a su espalda la mullida superficie. — Déjalos caer, y acomódate, ¡va! Te los termino de quitar yo junto con los calcetines. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Consciente de que sus lamentos habían sido omitidos deliberadamente, al muchacho no le quedó más remedio que economizar saliva y proceder con la labor que le había sido encomendada, aunque a regañadientes: lo que le llevó a preguntarse interiormente, ''¿quién era el niño pequeño ahora?''. Una vez se hubo acomodado sobre la superficie correspondiente, desplazó con lentitud sendas manos hasta el pañuelo que todavía en ese momento continuaba imposibillitándole la vista. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Con aires de profesionalidad, la fémina se acuclilló durante un breve lapso de tiempo: lo justo para deshacerse finalmente del pantalón y, seguidamente, hacer lo propio con los calcetines. Aunque con una lentitud y parsimonia nunca antes vistas. Quizá (y sólo quizá) se tomó más segundos de los necesarios en admirar a su –en la práctica– ex pareja tendido sobre el colchón. Pero qué bueno estaba… Por el amor de Dios. « Ser tan atractivo debería de ser ilegal », pensó para sus adentros a medida que reconducía sus pasos a la mesita habilitada con aceites, cremas y un recipiente con varios cubitos de hielo. Apenas había alcanzado el primer producto, cuando observó las manos del veinteañero, y que pudo, gracias al cielo, interceptar a tiempo. — Párate, cabrón. — Espetó, con un tono guasón, casi riéndose. Sin embargo, no le dio tregua. Alcanzó el pareo de baño del día anterior y con agilidad (además de habilidad) ató las muñecas masculinas para después reforzar aquel nudo con el que haría sobre los barrotes del cabecero. — Así aprenderás a estarte quieto cuando te lo digo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ No podía ser cierto. — Espera, ¿qué haces? — Consultó, ligeramente desconcertado ante el estruendoso rumor de una figura cada vez más y más cercana. — ¿QUÉ? TAN SÓLO ESTABA ACOMODÁNDOLO CORRECTAMENTE. — Aquel drástico repunte en el volumen de sus palabras evidenciaba, a la perfección, el estado de frustración en el que se encontraba sumido el americano. ¿Es que acaso no había tenido suficiente con impedirle la visión? — Juro que te vas a arrepentir de esto. — Confesó, tan desafiante como amenazante, a medida que tironeaba del elemento inmovilizador. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ En esta ocasión, la morena sí que pudo (y consiguió, aunque a duras apenas) contener las carcajadas que se le quedaron, una a una, atascadas en la garganta. Pero qué frustrado estaba, ¿no? Con los labios apretados uno contra otro: la muchacha optó por alejarse unos centímetros y, cómo no podía ser de otro modo, admirar aquella obra de arte. Al cabo de unos segundos, dio media vuelta sobre su propio eje y sonrió, mirando al objetivo. En efecto, estaba filmando la escena. ¿Qué sensación debería experimentar primero? ¿Frío o calor? Hmm… Optaría por un preliminar agradable. Así pues, y tras verter aceite sobre una de sus manos, anduvo hasta el final de la cama, se subió sobre ésta y se acomodó próxima a su objetivo: la extremidad izquierda, y más concretamente, la zona afectada. Con estima y sumo cuidado, apoyó el talón masculino sobre uno de sus muslos: acto seguido, deslizó con lentitud las manos sobre empeine, planta y talón para ir esparciendo el producto por toda la superficie. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ ... — ¿Sabes a quién me recuerdas? — Recitó, deshaciendo el silencio que se había instaurado en la intimidad del dormitorio. — A mi madre. A mi madre cuando era pequeño. — Agregó, prácticamente de inmediato. — En ocasiones solía dejarme hablando solo. Tal vez esa sea la razón por la que tanto le gustas. — Con el sentido de la vista inoperativo. Inmovilizado junto al cabecero... Y, ahora, ignorado. ¿Qué (más) podía faltar? Una vez fue consciente del desinterés femenino, el muchacho hizo de tripas corazón y a continuación, se convenció a sí mismo de la estrategia a seguir: a partir de ese momento, tampoco hablaría. Ni siquiera para mencionar la agradable sensación que estaba comenzando a experimentar a la altura del tobillo. Eleanor acababa de desbloquear a su yo más terco, infantil y cabezón. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Tuvo que morderse muy fuerte la lengua para no hacer algún comentario al respecto de aquella repentina y refunfuñona confesión. Francamente, se lo había dejado a huevo para rebartirle. No obstante, al cabo de unos segundos (y todavía en silencio): desvió la mirada momentáneamente hasta el semblante ajeno y no pudo más que sonreír al atisbar aquellas muecas y/o marcas de expresión. Qué niño era. La veinteañera, poquito a poco, fue abarcando con ambas extremidades la zona externa e interna del tobillo. Lenta y paulatinamente. Sin ejercer siquiera presión, tan solo acariciando; mimando la articulación. Tras unos segundos dedicándose con esmero a la zona, incluyendo alguna que otra suave opresión, Eleanor se inclinó un ápice para alcanzar un cubito de hielo. Enrollado el hielo sobre un trapo finísimo, ésta comenzó (sin previo aviso) a hacerlo resbalar sobre el empeine, ejerciendo sobre esta zona en cuestión algo más de fuerza… Para que sintiese más abruptamente el cambio de temperatura. Al mismo tiempo, y tras el necesario cambio de manos, la muchacha alcanzó el bote de aceite. ¿Por qué razón? Pronto lo descubriría... ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Aquello... Aquello se sentía, para ser sinceros, bien. Realmente bien. La calculada compresión... La cadencia y armonía de los agasajos. La fluidez y naturalidad de los movimientos... estaban consiguiendo hacerle disfrutar. E, incluso, olvidarse por unos instantes de las molestias que desde hacía dos semanas arrastraba consigo. La temperatura de aquellos dedos era reconfortante. Anestésica, si cabe. En ellos, tal vez, encontrase el remedio a sus males. La cura a su lesión. Quizás por esa razón, no manifestó rechazo ni contrariedad cuando el frío se abrió paso en su piel: continuaba experimentando consuelo. Continuaba sintiéndose como un bálsamo. ▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬ Una vez colocado el bote de aceite entre sus muslos: la morena aprovechó para continuar durante unos segundos (o minutos, mejor dicho) desplazando aquel cubito de hielo. Imitando las maniobras anteriormente reproducidas, empezando por las zonas libres de lesiones, hasta centrar aquella baja temperatura sobre la articulación. Primero sobre la cara externa, después sobre la interna. Con calma. Sin prisa, sin pausa. Recogiendo cada gota con la extremidad vacante, que se encargaba de mimar y contrastar las temperaturas…, las intensidades y opresiones que llevaba a cabo. Midiendo siempre que se aproximaba a la zona afectada. No obstante, pronto el silencio comenzó a llenarse con la voz femenina. — Dame un segundo. — Buscó una excusa rápida con la que pausar la tarea, y cubrir la zona masajeada con una toalla. Acto seguido, y sin ningún tipo de preámbulo, la muchacha (ya con el bote de aceite abierto) se inclinó sobre la anatomía ajena –colocada entre sus piernas, al término de éstas– para derramar el líquido desde el muslo masculino hasta el tobillo. Primero en la parte izquierda, después en la derecha. Incluso se tomó su tiempo para cerrar el producto y trasladar sus manos hasta los muslos, importándole nada y menos que parte del aceite pudiese haber acabado sobre las sábanas. Ejercida una nítida presión sobre la zona mencionada, la muchacha comenzó a esparcir y deslizar las manos sobre aquella resbaladiza y embadurnada piel. Palmas abiertas. Arrastrando la yema de los dedos; presionando, hincando incluso las uñas desde ese pequeño tramo hasta las rodillas. Arriba y abajo. Abajo..., y arriba. En este caso, lo hacía de un modo más..., erótico. Pasional.

[rafafeldespato]

El Perverso Pánico al Plástico

John Tierney

2 de Marzo de 2020

 ¿Por qué nuestros líderes políticos quieren quitar nuestras bolsas de plástico y pajitas? Esta pregunta es aún más desconcertante que una relacionada que he estado estudiando durante décadas: ¿por qué quieren que reciclemos nuestra basura?

Las dos obsesiones tienen algunas raíces comunes, pero el pánico moral sobre el plástico es especialmente perverso. El movimiento de reciclaje tenía una lógica superficial, al menos al principio. Los funcionarios municipales esperaban ahorrar dinero reciclando basura en lugar de enterrarla o quemarla. Ahora que el reciclaje ha resultado ser extremadamente costoso y ha logrado poco o ningún beneficio ambiental, algunos funcionarios locales, los pragmáticos al menos, de nuevo envían la basura directamente a los vertederos e incineradores .

El pánico al plástico nunca ha tenido sentido y se está intensificando incluso a medida que aumenta la evidencia de que no solo es un desperdicio de dinero sino también perjudicial para el medio ambiente, sin mencionar a los humanos. Ha sido un movimiento en busca de una justificación durante medio siglo. Durante la década de 1970, los ambientalistas como Barry Commoner querían que el gobierno restringiera el uso de plástico porque estaba hecho de petróleo, que necesitábamos atesorar porque pronto nos quedaríamos sin él. Cuando la "crisis energética" resultó ser una falsa alarma, los ambientalistas buscaron nuevas razones para entrar en pánico.

Denunciaron el plástico por no ser biodegradable en los vertederos. Lo culparon por ensuciar el paisaje, obstruir los desagües de las alcantarillas y contribuir al calentamiento global. El plástico de nuestra "sociedad de usar y tirar" estaba matando a un gran número de criaturas marinas, según Blue Planet II , una serie documental de la BBC de 2017 que se convirtió en un éxito internacional. Sus representaciones de tortugas marinas, delfines y ballenas en peligro llevaron a la Reina Isabel II a prohibir las pajitas y botellas de plástico en las propiedades reales, y el documental ha galvanizado a tantos otros líderes que los verdes celebran el efecto “Blue Planet ".

Más de 100 países ahora restringen las bolsas de plástico de un solo uso, y el Papa Francisco ha pedido la regulación global del plástico. El parlamento de la Unión Europea votó a favor de prohibir las pajitas, platos y cubiertos de plástico de un solo uso en todo el continente el próximo año. En los Estados Unidos, cientos de municipios y ocho estados han prohibido o regulado las bolsas de plástico de un solo uso. Nueva York y otras ciudades han prohibido los envases de alimentos de espuma plástica, y se están preparando más edictos radicales. Los verdes en California están impulsando un referéndum para exigir que todos los envases de plástico y los cubiertos de un solo uso en el estado sean reciclables y la UE ha presentado un plan similar. Las celebridades y los políticos fotografiados con el contenedor de bebidas o la pajita malditos ahora sufren en línea "vergüenza plástica".

Algunos reformadores tienen buenas intenciones, pero están perjudicando su propia causa. Si Vd desea proteger a los delfines y las tortugas marinas, debe tener especial cuidado al colocar su plástico en contenedor de la basura, no en el de reciclaje. Y si le preocupa el cambio climático, apreciará esas bolsas de supermercado una vez que conozca los hechos sobre el plástico.

Al igual que el movimiento de reciclaje, el pánico al plástico ha sido sostenido por populares conceptos erróneos. Los ambientalistas y sus defensores en los medios han ignorado, sesgado y fabricado hechos para crear varios mitos generalizados.

Tus pajitas de plástico y bolsas de supermercado están contaminando el planeta y matando animales marinos. La creciente cantidad de desechos plásticos en los mares es un problema genuino, pero no es causada por nuestra "sociedad de usar y tirar". Los grupos ambientalistas citan una estadística de que el 80 por ciento de los desechos plásticos en los océanos proviene de fuentes terrestres, pero la buena evidencia nunca ha respaldado esa estimación, y las investigaciones recientes pintan una imagen diferente.

Después de analizar minuciosamente los residuos en el norte del Océano Pacífico central, donde las corrientes convergentes crean el "Gran Parche de Basura del Pacífico", un equipo de científicos de cuatro continentes informó en 2018 que más de la mitad del plástico provenía de barcos de pesca, principalmente redes desechadas y otros equipos. . Estos descartes son también la mayor amenaza para los animales marinos, que mueren no por bolsas de plástico sino por enredarse en las redes. Otro estudio, publicado el año pasado por investigadores canadienses y sudafricanos, rastreó los orígenes de las botellas de plástico que habían aparecido en la costa de la acertadamente llamada Isla Inaccesible, una masa terrestre deshabitada en medio del sur del Océano Atlántico. Más del 80 por ciento de las botellas provienen de China y deben haber sido arrojadas de barcos de Asia atravesando el Atlántico.

Algunos plásticos desechados en la tierra terminan en el océano, pero muy poco proviene de los consumidores en los Estados Unidos o Europa. La mayoría de las etiquetas en los envases de plástico analizados en el Gran Parche de Basura del Pacífico provienen de Asia, la mayor fuente de lo que los investigadores llaman " desechos mal administrados ". Del plástico transportado a los océanos por los ríos, un estudio de 2017 en Nature Communications estimó que el 86 por ciento proviene de Asia y prácticamente todo el resto de África y América del Sur. Los países en desarrollo aún no tienen buenos sistemas para recolectar y procesar los desechos, por lo que parte de ellos simplemente se vierten en los ríos o cerca de ellos, y las instalaciones de procesamiento primitivo de estos países permiten que el plástico se filtre en las vías fluviales.

Es cierto que algo del plástico en Estados Unidos acaba en las playas y calles, y parte de él termina en los desagües de alcantarillado. Pero los investigadores han encontrado que las leyes que restringen las bolsas de plástico (que representan menos del 2 por ciento de la basura) y los envases de alimentos no reducen la basura (la mayoría de los cuales consiste en colillas de cigarrillos y productos de papel). Los recursos desperdiciados en estas campañas contra el plástico se gastarían mejor en más programas para desincentivar arrojar basura y favorecer la recogida todo lo que se desecha, un enfoque directo que ha demostrado ser efectivo.

Cuando Vd recicla plástico, evita que contamine los océanos. Este mito se basa en el persistente engaño de que el plástico de los contenedores de la acera se puede convertir de manera eficiente en otros productos. Pero clasificar las cosas es tan oneroso y laborioso, y los materiales resultantes de tan poco valor, que reciclar plástico es irremediablemente improductivo en los Estados Unidos y Europa. Los municipios esperaban ganar dinero vendiendo sus desechos plásticos a los recicladores locales, pero en lugar de eso tuvieron que pagar para deshacerse de ellos, principalmente enviándolos a países asiáticos con bajos costos laborales. El principal destino durante muchos años fue China; pero hace dos años, China prohibió la mayoría de esas importaciones, por lo que los desechos plásticos se han desviado a países como Malasia, Indonesia, Tailandia y Vietnam.

Eso significa que parte del plástico de su contenedor de reciclaje probablemente haya terminado en el océano porque se ha ido a un país con una alta tasa de "mal tratamiento de residuos". En las rudimentarias plantas de reciclaje en Asia, parte de los desechos plásticos se filtran al medio ambiente, y gran parte de los desechos importados ni siquiera llegan a una planta de reciclaje legítima. Periodistas y ambientalistas han estado recopilando historias de horror en Malasia e Indonesia sobre plásticos occidentales que se acumulan en vertederos ilegales y arrojan toxinas cuando se queman en las cocinas de los patios traseros. Las personas que viven cerca de los vertederos y las operaciones de reciclaje se quejan de que los plásticos extranjeros ensucian su aire y contaminan sus ríos.

La buena noticia es que estos países están comenzando a compartir la renuencia de China a aceptar las cosas de nuestros contenedores de reciclaje. Los gestores de residuos en Estados Unidos y Europa lamentan que sus almacenes se desborden con pacas de reciclables de plástico que nadie les quitará de las manos, y se han visto obligados a enviar las pacas a los vertederos e incineradores locales. Hubiera sido más inteligente hacerlo en primer lugar en lugar de ejecutar un costoso programa de reciclaje, pero al menos están evitando que el plástico contamine el océano. Puede hacer su propio esfuerzo por los animales marinos, y el presupuesto de su ciudad, arrojando su plástico directamente al contenedor de la basura.

Las bolsas de plástico de un solo uso son la peor opción ambiental en el supermercado. Incorrecto: son la mejor opción. Estas bolsas de polietileno de alta densidad son una maravilla de la eficiencia económica, ingenieril y ambiental: económicas y convenientes, impermeables, lo suficientemente fuertes como para almacenar alimentos, pero tan delgadas y livianas que requieren poca energía, agua u otros recursos naturales para su fabricación y transporte. Aunque se llaman de un solo uso, las encuestas muestran que la mayoría de las personas las reutilizan, generalmente como bolsas de basura.

Una vez desechadas, estas bolsas ocupan poco espacio en el vertedero, y el hecho de que no sean biodegradables es una ventaja, no una desventaja, porque no liberan metano ni ningún otro gas de efecto invernadero, como lo hacen las bolsas de papel y algodón en descomposición. La pequeña cantidad de carbono de las bolsas, extraída del gas natural, vuelve al subsuelo, donde puede ser secuestrada de manera segura de la atmósfera (y del océano) en un vertedero moderno con un revestimiento resistente.

Cualquier otra bolsa de supermercado tiene un mayor impacto ambiental, como lo demuestran repetidamente los análisis del ciclo de vida ambiental de las bolsas y las encuestas de comportamiento del consumidor. Las bolsas de papel y las bolsas reutilizables requieren más agua para fabricarse y más energía para producirlas y transportarlas, lo que significa una mayor huella de carbono. Para compensar esa huella inicial más grande de una bolsa de papel, según la agencia ambiental del Reino Unido , tendría que reutilizarla al menos cuatro veces, lo que prácticamente nadie hace. La bolsa de papel típica se usa solo una vez (y ocupa 12 veces más espacio en el vertedero que una de plástico).

 Las personas reutilizan las bolsas de asas, pero no tanto como es su intención. Una encuesta encontró que los consumidores olvidan llevar las bolsas al supermercado casi la mitad de las veces. Para compensar la huella de carbono inicial de una bolsa de algodón, tendría que usarla 173 veces, pero la bolsa típica se usa solo 15 veces, por lo que el efecto neto es aproximadamente nueve veces más emisiones de carbono que una delgada bolsa de plástico.

Ambientalistas que han analizado estos números aconsejan a los verdes que eviten las bolsas de algodón (incluso sus queridas orgánicas) en favor de las bolsas de plástico, porque una bolsa de polipropileno no tejido debe usarse solo 14 veces para compensar su huella de carbono inicial. A primera vista, parece una pequeña ventaja neta para la atmósfera, dado que el bolso típico se usa 15 veces. Pero ese beneficio desaparece una vez que considera otra consecuencia observada en lugares que han prohibido las bolsas de un solo uso: cuando los consumidores se ven privados de las bolsas que usaban como bolsas de basura, comienzan a comprar sustitutos de plástico que son más gruesos que las bolsas de supermercado prohibidas, y por lo tanto tienen una mayor huella de carbono.

En consecuencia, el efecto neto de prohibir las bolsas de plástico es más calentamiento global. Exactamente cuánto más depende de qué análisis escojan los investigadores del ciclo de vida de las bolsas, pero definitivamente hay más aportación de dióxido de carbono a la atmósfera, como concluyeron Julian Morris y Brian Seasholes de la Fundación Reason. Utilizando el rango de análisis disponibles calcularon que la prohibición de las bolsas de plástico de San Francisco había causado que las emisiones de efecto invernadero relacionadas con las bolsas de comestibles aumentaran al menos un 9 por ciento, y posiblemente más del doble.

Además, como señalan los investigadores de Reason, esos cálculos subestiman el impacto sobre el efecto invernadero porque se basan en análisis que omiten un factor importante: la necesidad de lavar las bolsas para evitar contaminar los alimentos con bacterias que se filtraron de los comestibles de la semana pasada. La mayoría de los compradores no se molestan en limpiar sus bolsas, un estudio realizado en supermercados en California y Arizona encontró grandes cantidades de bacterias en casi todas las bolsas reutilizables, pero las autoridades sanitarias aconsejan lavarlas semanalmente en agua caliente para evitar enfermedades transmitidas por los alimentos. Si las personas limpian a mano o tiran las bolsas en la lavadora y la secadora, consumen energía y agregan aún más dióxido de carbono a la atmósfera.

Si nuestros objetivos son reducir las emisiones de carbono y la contaminación plástica, podemos tomar algunas medidas obvias. Dejen de obligar a los consumidores a usar bolsas de supermercado y otros productos que aumentan las emisiones. Dejen de exportar desechos plásticos a países donde no se evita que lleguen al océano. Ayuden a esos países a establecer sistemas modernos para recolectar y procesar sus propios desechos plásticos. Envíe los desechos plásticos directamente a los vertederos e incineradores. Intensifique la aplicación de las leyes y tratados que restringen a las naciones contaminar el océano y que prohíben a los marinos ensuciar los mares.

Pero los políticos y los ambientalistas tienen otras ideas. Están redoblando sus errores al prohibir más productos de plástico y exigir alternativas que sean más caras, menos convenientes y peores para el medio ambiente. Incluso los expertos familiarizados con los hechos sucumben al pensamiento mágico. Sí, reconocen, no deberíamos exportar nuestros desechos plásticos a Asia, pero la solución es reciclarlos en casa. Y sí, eso no es práctico hoy, pero todo cambiará después de que creemos una "economía circular", que simplemente requiere una transformación de la sociedad. Guiados por sabios planificadores centrales, los fabricantes rediseñarán sus productos y reorganizarán sus fábricas para que todo pueda reutilizarse o reciclarse, y los consumidores clasificarán minuciosamente todo en el contenedor de reciclaje adecuado,

Esta fantasía no es simplemente una pérdida de tiempo y dinero. Está interfiriendo con soluciones prácticas para lidiar con la contaminación plástica. La mejora de los sistemas de saneamiento era tradicionalmente una prioridad para los funcionarios de salud pública y los donantes de ayuda extranjera, pero se ha descuidado ya que han redirigido el dinero y la atención a los esquemas de "desarrollo sostenible" para reciclar y conservar el agua y la energía. Este cambio en las prioridades ha obstaculizado el desarrollo de sistemas efectivos de gestión de residuos que mantendrían el plástico fuera de los océanos, según Mikko Paunio, epidemiólogo en Finlandia que ha estudiado programas de salud pública en países ricos y pobres de todo el mundo.

"Los ecologistas motivados ideológicamente en la década de 1980 y sus sueños de reciclaje y una 'economía circular' son la causa última del problema de los desechos marinos" , concluye , "porque han desalentado el desarrollo de esquemas de desechos municipales en Asia y África, y porque han alentado a las naciones desarrolladas a utilizar esquemas de gestión que hacen que sea difícil o costoso tratar con los desechos y, por lo tanto, tienden a "filtrarse" al medio ambiente, a veces de manera catastrófica ".

Incluso si el sueño de una economía circular fuera posible, lograría notablemente poco, a un costo enorme. Supongamos que ocurre una revolución milagrosa en el comportamiento del consumidor. Suponga que usa las bolsas con la huella de carbono más baja (las de polipropileno no tejido) cada vez que va al supermercado, y lava las bolsas a conciencia con agua calentada por paneles solares en su techo. En el transcurso de un año, calculan los investigadores de Reason, usted reduciría sus emisiones de carbono en menos de la cantidad arrojada por el automóvil típico en dos viajes al supermercado. Podría haber hecho más por el planeta eliminando esos viajes en automóvil, y hay una manera conveniente de hacerlo con mucha más frecuencia que dos veces al año: solicite sus compras en línea de un servicio como FreshDirect o Peapod. Ingenieros de la Universidad de Washingtonestimar estimaron que las compras de comestibles en línea pueden reducir las emisiones de carbono relacionadas en al menos la mitad, claramente un método más efectivo que prohibir las bolsas de plástico de comestibles.

Entonces, ¿por qué los ecologistas engañan a los consumidores sobre las bolsas de plástico en lugar de instarlos a comprar en línea? ¿Por qué no enfocarse en algo que no solo reduce las emisiones de efecto invernadero sino que también facilita la vida de las personas? La respuesta corta: porque el pánico al plástico no trata realmente de salvar el planeta, y ciertamente no trata de facilitar la vida de las personas.

He estado intentando entender la psique verde desde 1996, cuando establecí un récord para el correo de odio en la revista New York Times con una historia de portada titulada " Reciclar es basura ". Era obvio entonces que la forma más barata de deshacerse de la basura era enterrarla en un vertedero, y que nunca habría una escasez de espacio en el vertedero, sin embargo, la gente clamaba por pagar más por el privilegio de clasificar sus propios desechos. Llegué a la conclusión de que reciclar era un sacramento para expiar la culpa, un rito de expiación por el pecado de comprar demasiadas cosas. Posteriormente encontré apoyo para esa teoría en el análisis de 2002 de James B. Twitchell sobre las pasiones de los consumidores, Llévanos a la tentación. "Si bien afirmamos que estamos casados ​​con el consumo responsable", escribió, "pasamos mucho tiempo amonestando. La basura es una mancha de lápiz labial en el cuello, un pelo rubio delator". Reciclar es nuestra forma de decir: "Lo siento, cariño".

El pánico al plástico también implica la culpa del consumidor, pero eso explica solo una pequeña parte. Si bien los programas de reciclaje han disfrutado durante mucho tiempo de un amplio apoyo público (incluso cuando la economía ha empeorado ), no existe un entusiasmo similar por restringir el plástico. Los investigadores de mercado han descubierto que solo el 15 por ciento de los consumidores se preocupan lo suficiente por los problemas ambientales como para cambiar sus hábitos de compra y que el 50 por ciento cambiará solo si no tiene ningún costo adicional o molestia. Sin embargo, los políticos siguen prohibiendo ansiosamente las bolsas de plástico y buscando más formas de molestar a los votantes, como la nueva ley de California que prohíbe a los hoteles proporcionar artículos de tocador de plástico desechables.

¿Por qué la legislatura y el gobernador de California privarían a sus electores de esas pequeñas botellas de champú? Me pareció extraño hasta que descubrí el análisis de los eruditos sobre este tipo de pequeña tiranía en el pasado. Las prohibiciones plásticas de hoy representan un renacimiento de las leyes suntuarias (del latín sumptus, "gasto"), que cayeron en desgracia durante la Ilustración después de una larga e ignominiosa historia que data de la antigua Grecia, Roma y China. Estas restricciones sobre lo que las personas podían comprar, vender, usar y usar proliferaron en todo el mundo, particularmente después de que el comercio internacional aumentara a fines de la Edad Media.

Preocupados por la avalancha de nuevos bienes de consumo y por la creciente afluencia de comerciantes y artesanos, los gobernantes de toda Europa promulgaron miles de leyes suntuarias entre los siglos XIII y XVIII. Éstas incluyeron reglas exquisitamente detalladas que regían los vestidos, calzones, medias, zapatos, joyas, carteras, bolsos, bastones, muebles para el hogar, comida y mucho más, a veces cubriendo a toda la población, a menudo clases sociales específicas. Los botones dorados se prohibieron en Escocia, y la seda estaba prohibida en las cortinas y manteles portugueses. En Padua, ningún hombre podía usar medias de terciopelo, y nadie más que un caballero podía adornar su caballo con perlas. Era ilegal en las cenas en Milán servir más de dos platos de carne u ofrecer cualquier tipo de dulce. Ninguna inglesa bajo el rango de condesa podría usar raso con rayas de plata u oro,

Las autoridades religiosas consideraron estas leyes esenciales para frenar "el pecado de lujo y de placer excesivo", en palabras de Fray Hernando de Talavera, el confesor personal de la reina Isabel de España. "Ahora apenas hay un pobre agricultor o artesano que no se vista de lana fina e incluso seda", escribió, haciéndose eco de la queja común de que los lujos importados estaban alterando el orden social y haciendo que todos gastaran más de lo que podían. Al justificar sus edictos suntuarios, la reina Isabel I de Inglaterra se lamentó de que el consumo de bienes importados había llevado a "el empobrecimiento del Reino, al traer diariamente mercancías foráneas fútiles e innecesarias".

Pero al igual que los estadounidenses que siguen usando bolsas de plástico, los súbditos de la reina se negaron a renunciar a sus "productos innecesarios". Las leyes suntuarias no tuvieron mucho impacto en Inglaterra ni en ningún otro lugar, a pesar de los mejores esfuerzos de los gobernantes. Sus agentes rondaban las calles e inspeccionaban casas, confiscaban lujos tabú y castigaban a los infractores, generalmente con multas, a veces con flagelaciones o encarcelamiento. Pero el consumo conspicuo continuó. Si se prohibía la seda, la gente encontraba otra tela costosa para alardear. Los gobernantes tuvieron que seguir modificando sus edictos, pero se mantuvieron un paso atrás y, a menudo, las leyes fueron burladas tanto que las autoridades renunciaron a los esfuerzos para hacerlas cumplir.

Para los historiadores, el gran enigma de las leyes suntuarias es la razón por la cual los gobernantes siguieron emitiéndolas durante tantos siglos a pesar de su ineficacia. Las explicaciones específicas varían de un país a otro, pero hay un tema común: las leyes persistieron porque beneficiaban a las personas adecuadas. En una colección reciente de ensayos académicos, El derecho a vestirse, Maria Giuseppina Muzzarelli, historiadora medieval de la Universidad de Bolonia, resume el atractivo de las leyes: "Cualquiera que haya sido el propósito original o prevaleciente de los legisladores, las leyes suntuarias fueron útiles instrumentos de gobierno ".

Las leyes no frenaron el apetito pecaminoso del público por el lujo ni contribuyeron a la prosperidad nacional, sino que consolaron a la élite social, protegieron intereses especiales, enriquecieron los cofres de la iglesia y el estado, y en general ampliaron el prestigio y el poder de la clase dominante. Para los nobles cuya riqueza fue eclipsada por los nuevos comerciantes ricos, las leyes reforzaron su estatus social. Las restricciones a los lujos importados protegían a las industrias locales de la competencia. Las multas recaudadas por violaciones proporcionaron ingresos para el gobierno, que podrían compartirse con los líderes religiosos que apoyaban las leyes. Incluso cuando una ley no se aplicaba ampliamente, podría usarse selectivamente para castigar a un enemigo político o un plebeyo que se volviera demasiado engreído.

Las leyes persistieron hasta la disminución de la soberanía real y la autoridad de la iglesia, a partir del siglo XVIII. A medida que los intelectuales promovieron nuevos derechos para los plebeyos y exaltaron los beneficios económicos del libre comercio, las leyes suntuarias se consideraron un anacronismo vergonzoso. Sin embargo, la necesidad de gobernar a los inferiores nunca desaparece.

Las prohibiciones plásticas actuales son incluso menos racionales que las antiguas leyes suntuarias, pero también benefician a las élites. Los productos de plástico baratos han sido una bendición para los pobres y la clase media, lo que hace que el plástico parezca aún más vulgar para sus superiores sociales. Los vástagos de familias adineradas que solían unirse al clero hoy hacen su predicación como activistas verdes, y tienen el poder de imponer sus preferencias ahora que el ambientalismo es esencialmente la nueva religión del estado en fortalezas progresistas. Pueden imponerlo a la clase mercantil moderna: las corporaciones intentan desesperadamente ganarse el favor social promocionando sus credenciales ecológicas y haciendo la reverencia financiera adecuada. El pánico al plástico da a los políticos y a los verdes el poder de extraer contribuciones a compañías que temen ser reguladas fuera del negocio. Proporciona propuestas de recaudación de fondos para verdes y subsidios para empresas ambientalmente correctas y grupos sin ánimo de lucro.

Lo más importante es que el pánico al plástico da a los gobernantes políticos de hoy y a la nobleza moderna un renovado sentido de superioridad moral. Con su media docena de residencias regias, la reina Isabel II tiene una de las huellas de carbono más grandes del mundo, pero ahora que ha prohibido las botellas y pajitas de plástico, puede compartir la consternación de la primera reina Isabel por el "desordenado exceso " de sus súbditos. No importa cuánto combustible quemen los políticos y los ecologistas en sus vuelos a las conferencias internacionales sobre el clima, aún pueden sentirse virtuosos al emitir sus edictos a los compradores de comestibles.

Por ahora, su poder parece seguro, pero quizás el público finalmente llegue a estar de acuerdo con Adam Smith. En 

The Wealth of Nations

 , rechazó las leyes suntuarias como no solo una economía terrible, sino también como una hipocresía. "Por lo tanto, es la más alta impertinencia y presunción, en reyes y ministros, pretender vigilar la economía de las personas privadas y restringir sus gastos, ya sea mediante leyes suntuarias o prohibiendo la importación de lujos extranjeros", escribió Smith. "Ellos mismos son siempre, y sin excepción, los mayores derrochadores de la sociedad. Que cuiden sus propios gastos y tengan confianza en que las personas corrientes harán lo propio con los suyos". Incluso se podría confiar en nosotros con nuestras bolsas de plástico y pajitas.

[kirah69]

[Fanfic] La niebla

Calificación: +14 Advertencias: Descripción gráfica de violencia Categoría: M/M Fandom: Teen Wolf (TV) Relación: Peter Hale/Stiles Stilinski Tags: Creature Stiles, Witches, Mythical Beings & Creatures Idioma: Español, Palabras: 5499

Era tarde por la noche cuando una densa niebla comenzó a cubrir la ciudad. Resultaba extraño porque era casi verano y el tiempo había sido cálido todo el día y la previsión anunciaba que seguiría siéndolo toda la semana.

Stiles cerró la ventana de la habitación y se sentó en la silla de su escritorio con el móvil en la mano.

A Scotty » Crees que la niebla sea algo sobrenatural?

De Scotty » No todo lo q pasa tien q ser sbn

A Z-wolf » Crees que la niebla sea algo sobrenatural?

De Z-wolf » No lo descartaría. Estoy investigándolo.

Esa era una de las muchas diferencias entre los dos alfas, Scott esperaba a que las cosas se pusieran realmente mal para comenzar siquiera a investigar mientras que Peter lo hacía a la mínima sospecha de algo raro. Muchas veces no era nada, pero en una ciudad como Beacon Hills siempre era mejor estar prevenido. Y cuando sí resultaba ser algo, Peter ya estaba preparado. Después de que hubieran acordado compartir territorio, siendo Peter el alfa oficial (porque a Scott esas cosas no le interesan, claro), Stiles se había mantenido cuidadosamente neutral, aprovechando la excusa de ser humano para no escoger un alfa. Scott seguía siendo su mejor amigo (incluso si ahora pasaba la mayor parte del tiempo con Allison y Isaac) y Peter... bueno, no sabía qué era Peter, pero algo era. No se le pasaban por alto las insinuaciones disfrazadas de bromas ni el café que dejaba a su lado tras largas horas de investigación preparado justo como a él le gustaba. Stiles tampoco podía evitar reír con sus bromas (con ese humor algo negro que ambos compartían) o quedarse dormido apoyado contra él cuando estaba demasiado cansado tras un enfrentamiento.

Encendió el ordenador y comenzó a buscar criaturas o hechizos que pudiera provocar esta niebla, descartando los artículos que hablaban de la novela de Stephen King (pero haciendo una pequeña nota aparte por si acaso).

No se fue a la cama hasta ya entrada la madrugada y gruñó cuando su teléfono lo despertó con el tono de llamada de Scott antes de que sonara la alarma del despertador.

—¿Quéééé?—respondió con el rostro aún medio sumergido en la almohada.

«Stiles, mi madre no despierta», sonaba desesperado.

—¿Qué?—se incorporó sobre los codos, frunciendo el ceño confuso.

«Mi madre no despierta y no hay nadie en la calle. He llamado al hospital y nadie contesta, incluso a la policía y nada».

Stiles echó las sábanas hacia atrás y salió de la cama de un salto. Entró en la habitación de su padre sin llamar y gritó su nombre cuando lo vio en la cama. El hombre no reaccionó. Se arrodilló en la cama y lo sacudió por ambos hombros llamándolo, pero nada. Cortó la llamada con Scott y marcó otro número.

—Mi padre no despierta—dijo en cuanto descolgó—. Peter, mi padre no despierta, está dormido o inconsciente o en coma. No lo sé.

«Comprueba su pulso», le ordenó Peter con voz serena pero firme.

Stiles colocó dos dedos en el cuello de su padre por debajo de la mandíbula. Allí estaba, lento, pero allí estaba. Suspiró aliviado y limpió un par de lágrimas de su rostro.

«Ahora escucha. Parece que todo el mundo está en el mismo estado. No salgas de casa, estaré allí en quince minutos para traerte a la Casa».

—Puedo ir yo-

«No, Stiles. No te quiero solo en la calle. Estaré allí en quince minutos. No salgas de casa. Llama a Scott y dile que puede venir con su manada a la Casa».

—Vale, de acuerdo. Date prisa—colgó y se sentó junto a su padre, con una mano sintiendo el pulso en su muñeca mientras con la otra llamaba a Scott—. Hey, mi padre está igual, todos están igual. Peter está investigando, dice que puedes llevar a tu manada a la Casa.

«Voy a llamar a todos para que vengan aquí. Trae tus libros y empezaremos a investigar-».

—No, Scott. Voy a ir a la Casa.

«¿Qué? ¿Por qué?».

—Porque mi padre está... dormido o en coma, no lo sé, y Peter es el que tiene la información y que ya está investigando y lleva investigando desde ayer. Te recomiendo que vengas a la Casa, Scott.

Colgó el teléfono y fue a vestirse y a recoger sus libros (incluso si probablemente Peter ya los tenía). Observó la niebla a través de la ventana de su habitación que no le dejaba ni ver la hierva de su jardín. En menos de quince minutos, Peter llamó a su puerta.

—No puedo dejar a mi padre aquí—le dijo nada más abrir la puerta.

Sin intentar replicar ni hacerle cambiar de idea, Peter entró en la casa y subió las escaleras. Un minuto después bajaba con el sheriff en sus brazos. Stiles salió con él y abrió la puerta trasera del coche de Peter para que metiera al sheriff. Se subió después en el asiento del pasajero mientras Peter arrancaba el coche.

—¿Has hablado con Scott?—le preguntó alejándose de la casa.

—Sí... Quería reunir a todos en su casa. Le recomendé que viniera a la Casa, pero no sé si lo hará—y no quería pensar en ese momento por qué consideraba la casa Hale como la casa de la manada mientras que la casa de los McCall era solo la casa de Scott.

—Es su manada, es su responsabilidad.

Stiles lo sabía, pero no podía evitar sentirse también responsable. Scott no sería lo que era si aquella noche no lo hubiera llevado consigo al bosque. El hombre sentado a su lado también era responsable, pero él ya había pagado por ello con su propia muerte y ahora era un buen alfa de nuevo y se comportaba como Stiles pensaba que un alfa debía hacerlo.

Ni siquiera pestañeó cuando Peter apoyó una mano sobre su muslo, apretando suavemente reconfortante.

—Va a estar bien—le aseguró.

Sabía que ya no estaban hablando de Scott. Miró hacia atrás, a la cara dormida de su padre.

Llegaron a la nueva casa Hale, un edificio tan grande como la antigua casa Hale, pero situado a casi un kilómetro de esta (nadie estaba dispuesto a reconstruir sobre las cenizas de tantos recuerdos). La parte superior apenas se podía ver con la niebla y eso que parecía menos densa por la reserva. Peter llevó a Noah en brazos dentro de la casa y lo subió a una de las habitaciones de invitados que el propio sheriff había usado tras alguna fiesta. Stiles entró en la cocina, donde se solían reunir cuando era solo la manada Hale, y Derek le ofreció una taza de café después de sentarse entre Malia y Cora, sacando ya su ordenador. La gran mesa estaba llena de libros abiertos además de otros dos ordenadores.

—¿Qué has encontrado hasta ahora?—le preguntó a Peter en cuanto entró en la cocina.

—Nada exacto—respondió sentándose frente a él al otro lado de la mesa—. Algunas criaturas pueden crear esta clase de niebla, otras pueden hacer dormir a las personas, ninguna con una extensión tan grande ni ambas a la vez. Mi apuesta en este momento sería por un hechizo.

—¿Brujas?

—Puede, pero necesitarían un gran poder para conseguir algo así.

—¿Estarán usando el Nemeton?

Todos se pusieron tensos ante la mención.

—Lo dudo, para conseguir que el Nemeton acceda a algo así deberían haber pasado mucho tiempo con él realizando sacrificios. Mi querido sobrino aquí podrá atestiguar por ello.

Derek arrugó el gesto y Stiles le dio una patada a Peter bajo la mesa.

—Sé bueno—le regañó.

—Sí, cariño—respondió con una sonrisa sin parecer para nada arrepentido, pero no se volvió a mencionar el tema de Jennifer.

—¿Vamos a ir a revisar el Nemeton por si acaso?—preguntó Malia, ignorando el habitual flirteo entre ambos.

—Por supuesto, pero quiero esperar a que venga la manada McCall para comenzar.

—¿Crees que vendrán?—le preguntó Stiles con expresión decaída.

Peter extendió el brazo y tomó su mano a través de la mesa. Stiles no dudó en corresponder, apretando su mano.

—Estoy seguro de que vendrán, es su mejor opción. Lydia es una chica lista y se lo hará ver.

Stiles sonrió, estaba seguro de que si alguno les convencía de venir sería Lydia (por mucho que aún le desagradara Peter, él era quien tenía toda la información).

En ese momento, los cuatro lobos dirigieron la mirada hacia el frente de la casa.

—Ahí están—Peter se levantó dándole un último apretón a su mano antes de soltarla.

Minutos después ambas manadas estaban sentadas en el amplio salón de la Casa. Scott le miraba con expresión algo traicionada, pero en ese momento, con su padre inconsciente en una habitación, a Stiles no podía importarle menos. Junto a Scott en el sofá estaban sentados Isaac y Kira mientras que Lydia se había acomodado en un sillón, apartada ya de la posible disputa que normalmente acompañaba estas reuniones. Los Hale estaban sentados en el sofá opuesto con Derek de pie detrás de su alfa. Stiles caminaba de un lado a otro de la sala evitando ponerse al lado de nadie (y demasiado nervioso como para estarse quieto).

—¿Dónde está Allison?—preguntó Stiles cuando se dio cuenta de su ausencia. No era extraño en otras situaciones, la cazadora no era bienvenida en la casa Hale, pero este era un caso especial.

—También está inconsciente, como Chris—respondió Isaac, que ahora prácticamente vivía con ellos.

—¿Has hablado con Deaton?—le preguntó Peter a Scott.

—No he podido contactar con él, probablemente también esté inconsciente.

—Al parecer esto afecta solo a los humanos—comentó Cora.

���¿Y por qué Stiles está consciente entonces?—preguntó Lydia y todos lo miraron a él.

Stiles sonrió algo nervioso.

—Uy.

—¿Stiles?—preguntó Peter precavido, levantándose.

Scott también se levantó, mirándole confuso. Stiles miró de uno a otro moviéndose inquieto.

—Uh... Hey, resulta que no soy del todo humano. Qué gracia, ¿eh?

—¿Desde cuándo?—preguntó Scott con su expresión traicionada aún más agravada.

—¿Qué eres?—preguntó Malia mirándole con interés.

—¿Quién fue?—preguntó Peter con un gruñido en su voz, sus ojos brillando rojos.

Stiles se acercó de inmediato a él, colocando una mano en su pecho y dejando que acariciara su cuello para tranquilizar a su lobo marcándolo con su olor.

—Hey, tranquilo, no ha sido nadie, al parecer es de nacimiento.

Peter pareció tranquilizarse, pero mantuvo una mano en el hombro de Stiles.

—¿Puedes explicarte ahora que tu lobo se ha calmado?—le pidió Lydia y Stiles ni siquiera pensó en corregirle lo de «tu lobo».

—Um, bueno, resulta que leí en voz alta un hechizo, que no sabía que era un hechizo, que encontré en un libro, algo que hablaba de mostrar la verdadera naturaleza, y, bueno, sucedió.

—¿Qué sucedió?—preguntó Peter y su mirada era casi la de un niño a punto de abrir su regalo de navidad, tranquilo ahora que sabía que nadie le había puesto un dedo encima (que nadie había violado su humanidad, que nadie había tomado lo que a él le había sido negado).

Stiles suspiró y dejó desaparecer la máscara en la que ahora se había convertido su apariencia humana. Su piel se tornó más pálida de lo habitual, aunque la diferencia no era grande; su nariz se volvió algo más puntiaguda, aunque seguía manteniendo su forma característica; su pelo se tiñó de rojo, un rojo intenso más saturado que la sangre; y sus ojos brillaron naranjas antes de apagarse a un tono bronce, solo algo más claro que su color natural.

—Así que ese es tu poder, volverte pelirrojo—dijo Cora con tono serio pero burlón.

—Ja. Ja. Me sienta bien, ¿no crees?—comentó pasándose la mano por el pelo.

Por el gruñido en su pecho y la intensa mirada de Peter, el lobo estaba de acuerdo.

—En serio, ¿qué eres?—repitió Malia.

—Puede que, uh... sea un genio.

—Ya sabemos que eres listo, ¿pero qué tiene eso que ver?—preguntó Isaac.

—No, idiota, un genio, un djinn, ya sabes, de los que conceden deseos. Solo que sería algo más parecido a la versión de Sobrenatural que a la de Aladdin.

—¿Puedes conceder deseos?—preguntó Scott con la boca abierta.

Stiles le miró serio, casi enfadado.

—Vamos a hacer una maratón de Sobrenatural quieras o no—respondió y se giró hacia los demás—. No sé qué clase de genio soy porque no me he atrevido a poner a prueba mis poderes sin supervisión. Por lo que he leído, hay dos tipos básicos de genio y ambos son peligrosos. Uno induce sueños agradables, fantasías, en sus víctimas y mientras están soñando se alimenta de su sangre. El otro provoca pesadillas con tus peores miedos y se alimenta del miedo. Evidentemente no soy un genio completo, soy al menos medio humano, eso suponiendo que mi madre sí fuera una genio completa y esto no venga de más atrás, así que no sé hasta qué punto llegarán mis poderes ni, uh... mi necesidad de alimentarme de humanos, de un modo u otro. Por ahora no me he alimentado de ninguno—se apresuró en decir ante las miradas sospechosas.

—Tengo—Peter se aclaró la garganta porque su voz era más un gruñido—. Tengo varios libros que podrían ser útiles, creo que tengo-

—Gracias, de verdad—le interrumpió Stiles—, pero primero...—señaló con las manos a su alrededor indicando el problema que tenían delante.

—Cierto, cierto—sacudió la cabeza intentando concentrarse—. Vamos a buscar el origen de esta niebla. Derek, irás con Isaac al Nemeton. No creo que tenga que ver, pero quiero asegurarme. Cora, Scott y Kira recorrerán la ciudad buscando algún rastro y Stiles y yo haremos lo mismo por la reserva. Malia, quiero que te quedes aquí protegiendo a Lydia en caso de que recibiéramos un ataque.

—¿Por qué tenemos que hacer nosotros lo que tú digas?—preguntó Scott platándose frente a él con los brazos cruzados y el ceño fruncido como un niño pequeño enfurruñado.

—Vosotros mismos habéis venido aquí porque no sabíais qué hacer. Si quieres marcharte, adelante y mucha suerte. Derek, ve con Cora y Malia al Nemeton. Cuando terminéis allí dirigíos a la ciudad.

—Peter—Stiles le interrumpió con un suspiro—. Scott, tenemos que hacer esto juntos y Peter es el único que sabe lo que hace. ¿Qué vais a hacer vosotros solos?

Scott le miró con expresión herida y ojos de cachorro.

—¿Nosotros? ¿Tú no?—le preguntó el joven alfa.

—No, Scott, yo no. Junto a los Hale tengo más posibilidades de encontrar a los culpables de esto y no voy a sabotearme a mí mismo por tu orgullo cuando la vida de mi padre está en juego. Por favor, vamos a trabajar juntos en esto.

Scott agachó la cabeza y en ese momento incluso Stiles podía oler algo amargo en el aire. Con sus nuevos sentidos era capaz de oler emociones como los hombres lobo, pero aún no sabía distinguirlas. Tampoco lo necesitaba, conocía perfectamente a su amigo y era un libro abierto para él (y realmente para cualquiera que lo mirara).

—De acuerdo, nos quedaremos—respondió finalmente y por suerte estaba de espaldas y no pudo ver las expresiones de alivio en sus compañeros de manada.

Salvo Lydia y Malia, el resto de personas salieron de la casa y se dividieron en los grupos que Peter había indicado al principio.

—No confías en Scott ni en los demás de su manada—dijo Stiles cuando ya no había oídos ajenos cerca para escucharlo mientras caminaban entre la niebla por la reserva.

—¿Por qué dices eso?—preguntó Peter con fingida inocencia, caminando tan cerca de él como podía sin tropezar uno con otro.

—Mantienes a uno de tu manada en cada grupo, podrías haber enviado a tus sobrinos al Nemeton y a Scott con los suyos a la ciudad, pero no te fías de que hagan un buen trabajo así que has enviado a Cora con ellos—miró de reojo al lobo y vio una sonrisa aparecer en su rostro.

—Tan inteligente—comentó con satisfacción—. Por supuesto que no confío en ellos, ninguno sabe rastrear, apenas pelear. Pero eso ya lo sabes, conoces mejor que nadie su penoso historial. De no ser así, no habrías estado de acuerdo con que me convirtiera en el alfa de Beacon Hills.

—Scott es mi mejor amigo, pero quiero una ciudad segura, para mi padre y para todos los demás. Dejar que los enemigos se marchen con una regañina solo hace que parezcamos débiles y vengan más a atacarnos para hacerse con el territorio y con el poder que hay aquí. Además, tú nunca me has dejado atrás por considerarme el frágil humano.

—Yo mejor que nadie sé cuánto odias eso, lo sufrí contigo muchas veces tras regresar de la muerte—era difícil ignorar las quejas constantes del chico cuando todos los demás se iban a luchar contra el malo y lo dejaban a él en el loft con Peter.

—Te recuerdo que tú te quedabas atrás voluntariamente.

—Pero siempre estaba ahí si se me necesitaba—señaló Peter.

—Lo sé, por eso acepté que fueras el alfa. Tu conocimiento nos salvó más veces de las que ellos se imaginan y, aunque no estabas en plenas capacidades físicas, luchaste cuando se te necesitó, por una manada que no te aceptaba como parte de ellos. Y tengo que admitir que has resultado ser mucho mejor alfa que Derek o Scott ahora que estás cuerdo, aunque eso ya lo imaginaba.

Peter rodeó su cintura con un brazo, un gruñido vibrando profundo en su pecho como un ronroneo. Stiles podía oler la excitación emanando de él. Ese era el olor que más rápido había aprendido a reconocer porque lo emitía él mismo cada vez que estaba cerca del lobo.

—Peter...—no estaba seguro de si quería quejarse o quería más.

—Tenemos mucho de qué hablar—le dijo el lobo susurrando en su oído.

—Si esto es porque resulta que no soy humano-

—Cariño, sabes que esto viene de mucho más lejos. El hecho de que pronto cumplas dieciocho tiene mucho más que ver.

—¿Estás esperando a que sea mayor de edad? No puedo creer que te importe algo así—porque siempre había pensado que Peter conseguiría lo que quería cuando lo quería, sin preocuparse por esa clase de cosas.

—Puedo oler el acónito en la pistola de tu padre, no me tomo al sheriff a la ligera.

Stiles se echó a reír y acarició con la nariz la mejilla de Peter, apartándose cuando este intentó aumentar el contacto.

—Cuando esto termine, hablaremos.

Siguieron caminando entre la niebla, sus brazos o sus manos rozándose constantemente.

Derek confirmó que no había nada en el Nemeton, ni rastro de que hubiera ido nadie por allí. Por su parte, Scott les informó de que había zonas en la ciudad por donde apenas se podía ver a un palmo de distancia.

—El que esté realizando un hechizo tan poderoso tendrá que estar cerca del centro del hechizo, probablemente donde la niebla sea más densa—comentó Stiles pensativo.

—Lo sé.

—¿Lo sabes? Espera—se giró y plantó frente a él con un dedo acusatorio—. Sabías que no estarían por la reserva. ¿Por qué hemos venido aquí si sabías que no habría nada?

—No estaba seguro, pero era lo más probable. Alguien tenía que venir a comprobarlo de todos modos y si hubiéramos ido nosotros primero a la ciudad y los hubiéramos encontrado, habrías querido atacar sin esperar a los refuerzos; de este modo ya están esperándonos allí.

Stiles fue a replicar, pero cerró la boca porque se dio cuenta de que tenía razón, probablemente no habría esperado a que llegaran Scott y los demás con el estado en que se encontraba su padre.

—Bastardo manipulador—masculló y se puso en camino hacia la ciudad.

No estaba realmente enfadado, aunque intentaba aparentarlo. Peter no le apartaría de la pelea, pero tampoco pondría en riesgo su vida inútilmente ni le dejaría cometer estupideces. La forma en que Peter lo protegía le hacía sentir algo cálido en su pecho. Aun así, no iba a admitirlo.

Se reunieron primero frente al hospital con Derek y Isaac. Mirando el edificio con luces en muchas de las ventanas solo podían esperar que todos los pacientes estuvieran bien hasta que lograran solucionar esto. Después, se dirigieron hacia el centro, donde se encontraron con el otro grupo.

—No hemos encontrado nada, ningún rastro particular ni signos de... bueno, gente despierta—les informó Cora cuando llegó con Scott y Kira.

—Tampoco sabemos qué estamos buscando exactamente—comentó Derek.

—Como ha dicho Cora, cualquier signo de que alguien está despierto, de gente activa—explicó Peter, aunque sabía que eso no iba a ser de mucha ayuda.

—¿Como un olor de emoción reciente?—preguntó Stiles.

—Sí—el lobo se giró hacia él y vio la expresión pensativa en su rostro—. ¿Qué estás oliendo?

—No estoy seguro.

No era excitación y no era tristeza ni preocupación, básicamente los únicos olores que había aprendido a distinguir hasta ahora. No era olor a comida tampoco, pero hacía su boca salivar. Sin pensarlo, comenzó a caminar, retrocediendo hasta la última calle que habían pasado y siguiendo por ella. Podía imaginar en su mente una escena de dibujos con una tarta enfriándose en una ventana y su olor flotando por el aire y atrayéndolo. Cuanto más avanzaba más intenso se volvía y tenía que contenerse para no echar a correr.

—Oh, ahora puedo olerlo, es miedo—comentó Scott, aunque él no había sido el primero en percatarse, los Hale ya se habían dado cuenta mucho antes.

—Bueno, eso resuelve un misterio—murmuró Stiles sin detenerse.

Esta no era su opción preferida, alimentarse de sangre habría sido más fácil una vez que hubiera conseguido acceso a un banco de sangre, no habría tenido que hacerle daño a nadie. Alimentarse de miedo sería mucho más complicado.

El olor los llevó hasta una casa algo alejada el centro, con un jardín cuidado y una valla blanca, nada como el almacén abandonado que todos esperaban (y que era lo más habitual). Un radio de unos quince metros alrededor de la casa estaba completamente libre de niebla y no había duda de que este era el lugar. Cuando Stiles fue a cruzar la calle para llegar hasta ella, Peter lo detuvo agarrándolo del brazo.

Stiles lo miró molesto, casi siseando entre sus dientes que parecían algo más afilados de lo habitual. Sus ojos brillaban intensos y se encontraron con otros ojos igual de brillantes. Entonces, el joven reaccionó y se dio cuenta de que se había dejado llevar por su nuevo instinto. Cerró los ojos y se forzó a tranquilizarse. Sus ojos se apagaron y sintió sus músculos relajarse. Solo entonces Peter lo soltó.

—Puedo escuchar cuatro latidos desde aquí, uno de ellos parece la víctima que hemos estado siguiendo—les informó Peter y Stiles estuvo agradecido de que no mencionara su falta de control—. Derek, Cora y Isaac irán por detrás, Scott y Kira conmigo por delante. Stiles, quiero que vayas primero y compruebes que no hayan puesto ningún hechizo de protección o alguna barrera.

—¡Eso es peligroso!—intervino Scott.

—De los que estamos aquí, Stiles es el único que tiene cierto manejo de la magia y el único que podrá detectar si hay algún hechizo. Y si hasta ahora ha podido manejar la ceniza de serbal, estoy seguro de que aún podrá atravesar una barrera, a diferencia de nosotros—replicó el alfa. Ignoró cualquier otra queja del chico y se dirigió de nuevo a Stiles—. Pero no entres, espera a que los hayamos reducido para seguirnos.

Stiles agarró la mano de Peter y le forzó a sacar una zarpa. La pasó por el anverso de su antebrazo dejando una superficial línea roja a su paso. Ante sus propios ojos, la piel se fue cerrando hasta que no quedó rastro de la herida.

—Supervelocidad y superfuerza también parecen estar entre mis habilidades, pero aún no las he desarrollado, mis poderes se están despertando poco a poco—le explicó.

El lobo estaba sonriendo con un brillo algo maníaco en sus ojos.

—Entrarás conmigo. Ve.

Stiles cruzó la calle y se acercó lentamente a la casa. Podía sentir la magia emanando de su interior, ese hormigueo que siempre sentía cerca de magia recorría su cuerpo. Sin embargo, no había ningún rastro de hechizos protectores ni de ninguna otra clase alrededor de la casa. Quienes estuvieran dentro estaban muy seguros de que no iba a sucederles nada. Craso error. Les hizo una señal a los demás para que se acercaran. Derek, Cora y Isaac rodearon la casa hasta la puerta trasera mientras los demás se reunían con Stiles en la principal.

Los siguientes minutos fueron un pequeño caos organizado. Ambos grupos echaron las puertas abajo al mismo tiempo y no se detuvieron ni un segundo. Avanzaron por la casa siguiendo los latidos que oían hacia el sótano. Los lobos bajaron las escaleras con uno o dos saltos y en un instante tres mujeres estaban inmovilizadas contra el suelo por los Hale. En la sala había otro cuerpo, el de una mujer joven con piel verde que estaba atada a una mesa. Stiles no era capaz de capaz de captar ningún detalle, apenas era capaz de contenerse. El olor a terror que emitía la chica era... delicioso. Forzó su cuerpo a quedarse inmóvil, apartado contra la pared, mientras Scott y Isaac soltaban a la chica.

—Sacadla de aquí—ordenó Peter, sus ojos fijos en Stiles.

El chico inspiró profundamente cuando pasaron a su lado, pero no se movió, no hacía falta. El olor a miedo llenaba la sala como un denso perfume y Stiles podía saborearlo. Sentía calor en sus dedos, un suave brillo rojizo iluminándolos. Se dio cuenta de que se estaba alimentando del miedo residual.

—¿Así que habéis puesto a dormir a toda una ciudad solo por ella?—escuchó decir a Peter. Había estado hablando con las brujas, pero Stiles no había escuchado nada.

—Habríamos hecho lo que fuera necesario—replicó la bruja, la que parecía la jefa y que se retorcía inútilmente en manos del alfa—. Y si no nos la devolvéis, esta ciudad permanecerá dormida para siempre. No levantaré el hechizo hasta que no tenga mi venganza y si me matáis jamás podréis deshacerlo.

Stiles y Peter cruzaron miradas. El alfa asintió.

Stiles se acercó a la bruja, su rostro frío, pero los lobos podían oler su enfado. Todos sabían que nadie que amenazara la vida del sheriff salía de rositas.

—¿Estás segura de que no quieres replanteártelo? Puedo ser muy persuasivo.

Peter no pudo evitar sonreír al recordar con esa frase esa noche en la que este chico había tenido el valor de rechazarle, incluso si su corazón había delatado la mentira.

—¡Ja! ¿Qué piensas hacer? ¿Torturarme? Adelante, eso no te servirá conmigo—respondió la bruja con una sonrisa.

—Estaba pensando más bien...—levantó la mano hasta que sus dedos flotaron sobre la frente de la mujer envueltos en una luz roja como su pelo. Podía sentir un hormigueo y calor por toda su mano, sabía qué hacer, lo estaba anticipando—. ¿Cuál es tu mayor pesadilla?

Vio la expresión asustada en el rostro de la mujer justo antes de tocar su frente y de que sus ojos se cerraran. El cuerpo de la bruja quedó inerte y Peter lo dejó en el suelo sin mucha delicadeza. Los ojos de Stiles brillaban. Pronto el sótano comenzó a llenarse del olor a miedo que emanaba la bruja. Stiles sentía llenarse. No sabía cómo, pero estaba alimentándose de ese miedo. Y era delicioso.

—Stiles—le llamó Peter suavemente.

El chico reaccionó. Cierto, no la querían muerta, de momento. Tocó de nuevo la frente de la mujer y esta vez despertó.

—Por favor, por favor, por favor—repetía apenas comprensible, aún aturdida por la pesadilla.

Stiles le dio un bofetón y la mujer reaccionó. Le miró con ojos llenos de terror.

—¿Vas a eliminar el hechizo o prefieres regresar a tu fantasía?—le preguntó con una sonrisa.

—No, no, por favor, lo haré, haré lo que sea, por favor—suplicó.

—¿A qué esperas entonces?

La mujer asintió y tras realizar un ritual Isaac y Kira confirmaron desde fuera que la niebla se estaba desvaneciendo.

—¿Qué vamos a hacer con ellas?—preguntó Scott regresando al sótano.

—Yo me encargaré de eso—respondió Peter sin elaborar más.

—¡No puedes matarlas!—replicó el joven alfa.

Stiles y Peter intercambiaron otra mirada.

—Scott, este es el territorio de Peter, es su decisión. ¿No deberías ir a ver cómo está tu madre? ¿Y Allison?—al mencionar a esta última, Scott reaccionó. Por supuesto. Stiles tuvo que evitar poner los ojos en blanco—. Vamos, tengo que ir a ver a mi padre.

Stiles lo acompañó fuera del sótano, asintiendo una última vez a Peter. El lobo haría lo que tuviera que hacer con ellas y a Stiles no podía importarle lo más mínimo que murieran.

La ciudad despertó poco a poco, aquellos que estaban en la cama sin darse cuenta de lo que había sucedido mientras que otros despertaban en el suelo con alguna contusión en la cabeza por la caída. Algunos no despertaron, hubo varios muertos en el hospital. Stiles se encontró con el sheriff saliendo ya de la casa, dispuesto a poner orden en la ciudad después de que las chicas le contaran lo que había sucedido.

—¿Qué te ha pasado en el pelo?—le preguntó Noah nada más verlo.

Ups. Se había olvidado de eso.

—Am... ¿Estás bien, papá? ¿Todo bien?—preguntó, dándole un abrazo.

—Sí, no cambies de tema.

—Luego te lo explico, ¿vale? Creo que pueden necesitarte en la ciudad.

—Luego me explicarás esto—dijo señalando su pelo—, y todo lo demás que ha pasado.

—Sí, papá, lo prometo—le dio otro abrazo, feliz de que estuviera bien. Sabía que tarde o temprano tendría que explicarle su nueva situación, pero le habría gustado tener algo más de tiempo para poder darle más respuestas.

Lydia se llevó al sheriff en su coche y poco después los tres Hale regresaron a la Casa.

—¿Todo bien?—preguntó Stiles, sentado en el sofá junto a Malia. No necesitaba detalles, solo saber que se habían hecho cargo de ello.

—Todo bien—respondió Peter con una sonrisa, contento de que el chico siguiera en su casa (Stiles sabía que el alfa querría asegurarse después de todo de que estaba bien así que no se había marchado con su padre)—. ¿Tenéis hambre? ¿Desayunamos?

—Es un poco tarde para desayunar—replicó Derek.

—Nunca es tarde para desayunar. ¿Tortitas?

Así es como los cinco terminaron desayunando juntos en la cocina de la Casa. Para Stiles era como desayunar en familia (más familia de la que había tenido nunca) y después de la mañana que habían tenido, era agradable algo de paz. Después del desayuno, los tres betas salieron a patrullar los límites del territorio, necesitaban asegurarse de que todo estaba bien, no tanto porque creyeran que había una amenaza sino por sentirse seguros. Todos se despidieron dándole una palmada en el hombro y acariciando su brazo, marcando al chico con su olor mal disimuladamente.

—Estás preocupado—le dijo Peter cuando se quedaron solos en la casa, colocando una mano en su cuello sin molestarse en disimular. El lobo necesitaba asegurarse de que se encontraba bien, siempre era así tras el encuentro con alguna criatura y Stiles se había acostumbrado a ello.

Se sentaron en el sofá, uno junto al otro. Peter lo rodeó por la cintura con un brazo y Stiles no dudó en apoyarse contra él.

—Soy un monstruo que se alimenta de miedo—no había querido admitirlo, no creía poder decirlo frente a nadie más, pero Peter le hacía sentir que no sería juzgado.

—A estas alturas deberías haber aprendido a no utilizar la palabra monstruo a la ligera.

—Una criatura que provoca pesadillas y se alimenta del miedo que estas generan creo que es una buena definición para monstruo—replicó.

—Bueno, no creo que yo sea la persona más adecuada para discutir eso, aunque realmente fueras un monstruo, una bestia o un asesino psicópata, seguiría queriéndote.

Lo decía con tanta naturalidad que Stiles sabía que era verdad.

—Oh~ Yo también, mi lobo zombi—respondió y no le sorprendió darse cuenta de que era sincero.

—Estoy hablando en serio, Stiles.

—Yo también.

Cuando su corazón se mantuvo firme, Peter supo que era verdad. Estrechó su abrazo y besó al chico en la frente, acariciando con el rostro sus cabellos rojos.

—Tres semanas, solo tres semanas más—tres semanas para su cumpleaños, tres semanas para que el sheriff no pudiera poner ninguna pega a que su hijo saliera con un hombre que le doblaba la edad (aunque quizás lo antecedentes criminales eran más importantes que la edad).

—Estas contando los días, ¿verdad?—le dijo riendo, colocando las piernas sobre su regazo, provocándolo un poco. Un gruñido vibró en el pecho del lobo.

—Tengo un calendario en mi habitación.

Stiles se echó a reír a carcajadas.

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　　❖ Reencuentro 　　　› privado, Karma 　　　› junio 06, 2017 　　　› Torre del Reloj

　　　—Lo sabes, ¿verdad? Tienes todo mi apoyo —comenzó el hombre algo mayor posando una de sus manos en el hombro derecho de la adolescente—, pero tienes que volver a estudiar y enfrentarlo. No sé qué pasó entre tú y ese tal Karma pero eres del Wallmapu, una guerrera que no puede dejarse intimidar por un chiquillo de ciudad. ¿Me oíste? Vamos, que también regreso contigo.

　 　　　Eso dijo su padre, sin saber por qué Aneley se escapó del colegio después de haberse ido de vacaciones con el chico, un año mayor. Y es que no le intimidaba realmente, sólo estaba avergonzada después de lo ocurrido en la noche de su primera borrachera; de por sí sus hormonas se encontraban revueltas por culpa del rubio y eso, mezclado con dosis nada recomendables de alcohol para una primeriza hicieron de aquella noche algo que querría borrar por completo de su existencia, aunque sólo porque fue descubierta y puesta en evidencia al regreso. ¿Por qué había tenido que mencionarlo? Podía habérselo guardado para sí mismo y ya, pero no. 　 　　　Y accedió a regresar. Su padre tuvo que disculparse por la falta de disciplina de la joven, en su defensa explicó ser padre soltero y sus orígenes algo "salvajes"; con ello y el compromiso de no volver a hacer algo como eso fue aceptada de regreso para seguir los cursos que se había perdido hasta entonces. 　 　　　Asistió a unas clases y después de un rato, uno que otro cuadro la detuvo. "¡Al fin apareció!", "Pensábamos que ya no volvías", "Ese chico te estuvo buscando bastante, ¿cómo se llamaba? Carmelo", "No, no, Karama", "Karma, Karma, así es", hablaban entre ellos y Aneley sólo reía intentando pasar de largo. 　 　　　Pasaron algunos días desde su llegada hasta que se atrevió a visitar la torre del reloj, francamente había estado evitando a toda costa encontrarse con el rubio; no quería enfrentarlo a pesar de haberle dicho a su padre que lo haría. ¡Pero es que cómo! ¿Tenía que pedir disculpas?, no había sido culpa suya y del otro tampoco, sólo... —sólo tengo que ir a verlo. —Se animó mientras cogía su libreta y un lápiz mientras Maki se hacía bolita en la cama, ésta vez el hurón no parecía con ánimos de acompañarla. 　 　　　—Jamás le enseñé la torre —recordó mientras observaba en su mesa de noche la pequeña réplica del reloj de la escuela, el que había terminado poco antes del viaje y había olvidado por completo mostrarle. Sonrió y lo cogió, metiéndolo con cuidado dentro del bolso antes de emprender rumbo al lugar en el que se habían encontrado por primera vez. 　 　　　Aunque no habían acordado nada, tenía la sensación de que lo encontraría allí y no se equivocó cuando pisó el sitio y lo vio a unos metros, leyendo algún libro que seguramente Aneley encontraría de lo más aburrido pues lo suyo era más lo práctico. Por un momento pensó en huir pero desistió cuando las palabras de su padre llegaron a su mente; no iba a dejarse intimidar, ni por muy vergonzoso que todo hubiese sido. 　 　　　Sacó con cuidado la réplica del reloj de su bolso y dando pasos que apenas se oían se acercó al rubio de espaldas, arrodillándose detrás suyo para poder apoyarse en su espalda y pasar los brazos por sobre sus hombros, sosteniendo su obra de arte. —No te lo había enseñado, ¿verdad? ¿Cierto que quedó igual? —Preguntó, como si nada, fingiendo completa normalidad. No quería tocar el tema, la verdad, se moriría de vergüenza.

　　　 #karma

Como el joven enamorado con el corazón roto que era, a veces iba o hacía cosas que le recordaban a su amor perdido solo por el placer de sufrir un poco más. Hoy le había nacido leer con el tic toc de fondo. Aunque solo sostenía el libro a la altura de sus ojos, estaba más entretenido pensando en qué haría de su vida ahora que tenía que estaba obligado a hacerse de vida social, ahora que comenzaba a resignarse a haberla perdido. ¿Porqué hizo eso? ¿Porqué no podía dejar de pensar en eso? Salió de su espiral de pensamientos ansiosos cuando "alguien" lo sorprendió por detrás. Extrañado, incrédulo ante lo que había escuchado, giró la cabeza para verla por el rabillo del ojo: Aneley. Abrió la boca para pronunciar palabras que jamás tomaron forma. Volvió la mirada a la maqueta en lo que se le ocurría otra cosa que decir—. Es muy bueno la verdad —, aclaró la garganta para hablar a un volumen normal—, pero no da la altura para la cantidad de tiempo que te anduviste escondiendo, con eso pudiste haber hecho una réplica a tamaño real.

　　　 #aneley

Demonios, directo al blanco. No quería mencionar mada sobre su desaparición, todavía no se inventaba un motivo de peso para haberse marchado y no quería decir la verdad, sólo quería olvidarse de que el otro sabía de lo que había hecho. —Aclaro que la dejé lista y no estuve escondiéndome —se quejó apoyando su mentón en el hombro del rubio mientras analizaba su propio trabajo, realmente estaba conforme. —Fíjate dentro —mencionó señalándole el interior del reloj donde se hallaba dos pequeñas figuras humanas; eran ellos, como se veían el día en que se conocieron. —Y como me caes bien, puedes quedártela, ¿no es un buen detalle? Además, supe que me echaste de menos —intentó molestarlo recordando las palabras de los cuadros. —Igual, ¿estuviste buscándome mucho? —Preguntó escondiendo una sonrisita. De algún modo, no se sentía incómoda como pensaba que lo sería y cierto alivio le invadió, con Karma siempre se sentía cómoda. —¿Qué leías? —Volvió a preguntar luego de una pequeña pausa, fijando su vista ahora en el libro que sostenía el otro en su mano. 

　　　 #karma

Arqueó la ceja como retándola a que dijese la verdad, lástima que podía voltear tan poco como para que le viera. Al final regresó la mirada al modelo del reloj. Aunque era difícil concentrarse con Aneley tan cerca, ¡demonios! Olía tan bonito, maldito el momento en que empezó a pensar en ella así porque ahora le costaba parar—. Es lo que uno hace cuando mete la pata: arreglar sus errores —. Suspiró, intentaba ignorar todo el asunto inspeccionando a detalle la maqueta. La tomó para inspeccionarla a detalle y ver cada parte. Pero Aneley no parecía accesible a hablar al respecto, "cobarde"—. Es un libro de anatomía básica, decidí que quiero entrar a la escuela de medimagos de Inglaterra, eso es lo que he estado haciendo todos estos días, ¿tú? No retiraría el dedo de la herida, no dejaría el asunto inconcluso una vez más.

　　　 #aneley

Qué injusto era, no podía creer que continuase echando sal a la herida y es que seguro lo hacía porque no fue él quien fue descubierto haciendo "sus cosas". No había sido culpa de la chica, además, ¿por qué tenía que dejar su ropa tirada? No tenía por qué hacerlo, si hubiese sido más organizado, la muchacha jamás la hubiese cogido, ni habría pasado nada. Pero no podía ignorar el hecho de su aroma, le gustaba bastante. Y ahora que volvía a tenerlo cerca, sabía que no era sólo culpa del acohol pero tampoco iba a admitirlo, Aneley jamás había pensado de esa forma sobre nadie y no entendía qué tenía de diferente en el otro cuervo. ¿Qué lo hacía tan especial? ¿Su sonrisa extraña o su manera tan peculiar de hablar? O sus músculos, quizás era eso. Sí, seguramente sólo era su físico. —Yo... pues nada —mencionó bajando su tono de voz de forma inconsciente hasta que lo notó y se obligó a armarse de valor, supuso que el otro no se detendría hasta escuchar una respuesta verdadera—, quería ver a papá y dejar de sentir vergüenza de mirarte a la cara. Además, ¿por qué no dijiste que estabas despierto? ¿Sabes que eso sólo lo hace un pervertido? Quizás debería alejarme de ti, pareces peligroso. —Habló bastante veloz pero no hizo ni un esfuerzo por apartarse del rubio, sólo quería molestar y cambiar un poco el rumbo del asunto; echarle la culpa se veía más sencillo.

　　　 #karma

Bajó un poco la mirada para pensarlo, ¿porqué no lo hizo? La respuesta era obvia pero no iba a decírselo, no quería quedar como un bruto simio ni mucho menos arruinar lo poco que habían logrado avanzar. Se sintió apenado de no tener una buena excusa a la mano—. Un pervertido se hubiera aprovechado de una muchacha tan linda —sacó la respuesta para el otro lado, uno que lo hiciera parecer alguien menos desagradable, aunque lo de "linda" no fue premeditado. Dejó la maqueta sobre el suelo, con mucho cuidado, y posó su mano sobre la de ella—, al final lo que digamos el otro sacará un "pero", así que... ¿hay algo que pueda hacer para solucionarlo?

　　　 #aneley

¿Había dicho "linda"?, Aneley siempre supo que era la chica más bella del universo, su padre lo decía todos los días y no mentía, sin embargo, de algún modo lo sentía diferente si era le rubio el que lo decía. ¿Le alegraba? Más o menos y por encima de todo, le distrajo. Sonrió unos instantes y luego volvió su atención a las palabras que decía Karma aunque el calor de la mano ajena volvió a interrumpir su intensión de mantenerse enfadada y ofendida. ¿Qué podía hacer? —Tal vez deberíamos estar a mano. —Pensó en voz alta aunque luego se retractó—, No, no. Eso sería aun más pervertido. Lo mejor... —lo meditó unos instantes antes de volver a hablar mientras comenzaba a delinear la palma adversa con la yema de sus dedos—, ¿no sería olvidarnos de que me escuchaste? Por mucho que me moleste o tenga vergüenza no va a cambiar lo que escuchaste. —Agradecía estar a sus espaldas porque a pesar de que sonaba bastante segura y confiada en sus palabras, su cara de seguro estaba en camino a volverse un tomate.

　　　 #karma

¿A mano? ¿O de la mano? Se confundió por un instante, encontraba comfort en sentir la piel de Aneley, era tan suave a comparación de la suya, sus dedos eran tan delgados igual. Era algo que, seguro, le gustaría hacer más seguido. "O podrías lanzarme un hechizo desmemorizante" pensó por un momento, y se notó en su rostro que tuvo una mejor idea por cómo arqueó las cejas, algo sorprendido de que la solución a todo un mes de ley del hielo se hubiera vuelto tan sencilla. Era buena la solución, sonrió, incluso hasta se sentía triunfante—. Creo que será lo mejor —, habló por fin después de un largo minuto de silencio—, olvidaré eso, lo que sea que se supone que debí de haber olvidado —, soltó una risa tonta, le había parecido bueno el mal chiste. Seguía sosteniéndola de la mano, ahora repasando cada uno de sus dedos con la yema de su pulgar, disfrutando del tacto. Aunque lo hubiera dicho le parecía imposible pretender que lo había olvidado, pues desde entonces notó lo bonita que se le hacía su amiga. Y en momentos como ese, tan íntimos, tan tranquilos, era imposible pensar en otra cosa. Hubo un periodo de silencio, donde lo único que se escuchaba era la maquinaria del reloj.

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Dietrine – Pastillas Efectivas Para Bajar De Peso?

Cuántas veces no hemos estado haciendo dieta, queriendo obtener ese cuerpo playero, y pasamos por una tienda de pasteles o de dulces y nuestro estomago nos pide una probada de lo que vimos. Nosotros en nuestro plan de seguir nuestra dieta castigamos a nuestro estomago diciéndole no.

Adicionar algunos alimentos dulces a nuestras dietas se puede considerar sacrilegio ya que contienen una gran cantidad de carbohidratos, los cuales se tratan de evitar en las dietas. Cabe mencionar que los carbohidratos son parte de nuestra alimentación y la idea no es eliminarlos completamente sino controlarlos y evitar que se conviertan en grasa y ésta a su vez no se convierta en esos kilos de más.

Los carbohidratos son parte de nuestra dieta normal y una de sus funciones principales es brindarle energía al cuerpo. Hay tres tipos importantes de carbohidratos dentro de los alimentos que podemos consumir, estos son: azucares,  almidones y la fibra.

Al entrar en el organismo los carbohidratos son procesados por el cuerpo para poder ser transformados en la energía que usamos en nuestros día a día. El cuerpo se encarga de procesar y descomponer los azucares y glucosa para utilizarlos en energía.

Pero si un cuerpo consume más carbohidratos de los que pueden ser procesados y usados en energía esto termina llevando a ese cuerpo a desarrollar grasa, y en la gran mayoría de casos sobre peso. Es precisamente en ese procesamiento de carbohidratos que entran a jugar un papel importante las pastillas para adelgazar.

Lo que casi siempre se busca con las dietas y la actividad física es que el cuerpo genere cetosis, este fenómeno sucede cuando el cuerpo no tiene suficientes carbohidratos para producir energía, entonces pasa a utilizar las grasas sobrantes del cuerpo como combustible.

Que es Dietrine?

Como cualquier otro producto no todos los cuerpos y organismo reaccionan de la misma manera a este tipo de pastillas. Es por eso que se recomienda consultar con tu médico de cabecera antes de comenzar a usar estos productos, en especial si se está en embarazo, se tiene problemas de riñones o problemas de hígado y si sufre de diabetes.

Pero no sólo castigamos a nuestro estomago al no comer algo que se le antoja, sino también a nosotros, porque para bien o para mal nos negamos algo que queríamos en pro de seguir nuestra dieta. Y si te dijera que hay un producto con el que puedes seguir tu dieta pero darte pequeños gustos, un producto te permite no tener dietas restrictivas y que lo mejor de todo es completamente natural, ¿me creerías?

Déjame presentarte a las pastillas para adelgazar Dietrine, éstas son creadas a partir de elementos naturales y orgánicos que te ayudaran a cumplir con ese sueño de tener un cuerpo playero.

La mayoría de los elementos que componen la fórmula de las pastillas para adelgazar Detrine son de origen natural. Son compuestos herbales y orgánicos como el cromo y el vanadio, pero el ingrediente principal, y aquel que hace a estas pastillas para adelgazar muy efectivas, es la Fase 2

La Fase 2 es un compuesto que se extrae de los frijoles blancos y previene que el cuerpo absorba carbohidratos, evitando así que se conviertan en grasas y permitiéndote darte algunos gustos.

Estas pastillas para adelgazar se centran en evitar que los carbohidratos sean asimilados por el organismo y se conviertan en grasas perjudiciales y que nos evitan tener ese cuerpo playero, o en su defecto dañar nuestra dieta.

Es importante tener presente que las pastillas para adelgazar Dietrine cumplen con la función de ser unas inhibidoras de carbohidratos. Esto significa que por medio de sus compuestos naturales, especialmente de la Fase 2, logran que nuestro organismo no procese carbohidratos para convertirlos en energía.

Como ya he dicho antes, cuando consumimos carbohidratos en cualquier alimento estos son procesados y transformados en azucares para que nuestro organismo tenga energía, si ésta no se usa se puede transformar en grasa extra.

Para que todo este proceso de transformación en azucares se pueda completar dentro del cuerpo, es necesaria de la amilasa. Ésta es una enzima producida por nuestro páncreas que genera el proceso de transformación de carbohidratos a azucares.

Conclusion Sobre Dietrine

El gran logro de Dietrine es que evita o neutraliza dicha enzima por medio de la Fase dos, evitando así la asimilación de carbohidratos. Esto quiere decir que Dietrine te ayuda a eliminar aquellos carbohidratos no asimilados, además de que previene que ingieras un exceso de calorías. Todo esto lleva a la meta y al fin último de estas pastillas para adelgazar, que es ayudarte a perder peso.

Pero Dietrine no sólo contiene cromo, vanadio y Fase 2. Este suplemento que te permite bajar de peso también trae en su fórmula algunos antioxidantes como el: Ecoslim y el Chocolite. Pero Dietrine también contiene depurativos, los cuales te ayudan a recuperar energía y vitalidad al tiempo que eliminan toxinas acumuladas por mala alimentación. Por esto es que se recomienda tener una buena hidratación mientras se consume el producto y con esto ayudar a la desintoxicación.

Cabe recalcar que el funcionamiento y efectividad de Dietrine se da con la continuidad del tratamiento, es importante que se consuman las pastillas como se indica en las instrucciones. Podrá apreciar los resultados con una semana de uso.

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