Cada mañana, cuando te despiertes, sé feliz, relájate y ten buen humor. Será un buen comienzo para cada día. Mantener siempre nuestro estado de ánimo. Utilizar una buena actitud como sistema inmunológico para que nuestro corazón se mantenga en la frecuencia de energía positiva. Dite a ti mismo Somos imanes que atraemos buena energía a nuestras vidas.
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Quiero empezar de nuevo
Volver a tener todas esas primeras veces
Nuestro primer beso, el primer te amo, nuestra primera escapada
Volver a encontrar nuestra canción
Tomarte de la mano por primera vez
Volver a sentir mariposas cada que me sonrías
Suspirar cada que me mires
Sentir el tiempo desvanecerse entre tus brazos
Reencontrar ese sentimiento al dormir en tu pecho
Esa sensación de ser amada, querida, protegida
Encontrarnos como extraños
Y darnos cuenta que siempre fuimos destinados a amarnos
Tal vez nuestra historia nunca tenga un final feliz
Pero quizás somos de esos amores fugazes
Esas flamas que arde aun sabiendo que se apagarán
Un par de enamorados que se encuentran brevemente en cada nueva vida
Un extraño y enredado nudo en el hilo del destino
De esos que son imposibles de deshacer
Tal vez lo que vivimos será todo lo que nos toca en esta vida
Pero hay más por venir
Y prometo volver a encontrarte
-R. K “hay que volvernos dos extraños” (11/20/23)
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Se fué llevándose en los ojos la luz de infinitos sueños.
En su lugar la noche llenó el vacío y sus recuerdos dibujados en la luna me llevaron a visitar su lugar en el cielo.
Escalo peldaños de luz buscando reminiscencias de lo que solo en sueños fué y en sus ojos deposité.
Recuerdos brillan en la luna ,
Peldaños de luz escalo,
Noches infinitas busco ,
Mi luz, descansa a su lado.
Supernovatornasol
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Contigo en la azotea quiero estar, poder contemplar el cielo azul y suspirar, poder verte y sentir mi mundo renacer, con el simple hecho de querer, verte sonreír es mi mejor lugar, poder perderme en tu mirar, es lo que me impulso llegar hasta acá.
eiszzen
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Entre los papeles y versos
que aún no he quemado,
te escribo mi última carta
para ponerle fin a nuestra historia
escrita con altibajos, con borradores y correctores,
llena de melancolía y pura de amor.
Es tiempo de darnos un final
(el que te escribo va desde mi perspectiva).
Y es una lástima que, entre nosotros,
no exista un alegre epílogo.
Me llueven los recuerdos
junto a las lágrimas que derrama mi libreta.
¿Sabes? Los versos también lloran.
Los poetas también se despiden de su alma
cuando escriben bajo la luna llena
del día más azul del mes.
Te viví.
Te amé.
Mi verdadero yo te fui.
Me convertí en lo mejor, lo que ahora ves de mí.
Me transformaste en una buena persona
con la luz celestial de tu poesía.
Sanaste cada parte intoxicada de mi alma.
Me enseñaste que no necesito de nadie para completarme,
que yo mismo puedo reunir mis piezas desgajadas
y repararme las veces que me derrumben.
Por eso, en primer lugar, quiero agradecerte.
Te agradezco por amarme, por los hermosos recuerdos,
por mostrarme que el cielo está en la tierra a tu lado,
por enseñarme que incluso un relámpago
puede iluminar el cielo más opaco.
Cuando te conocí, supe que en mi vida
un cambio causarías, lo que no sabía
era si me reconstruirías o me destruirías.
Supongo que hiciste un poco de ambos...
En cierto momento, cuando me hallaba desarmado
por una ruptura que se llevó todo de mí,
dejándome vacío y encerrado en la oscuridad y tempestad,
tú entraste sin miedo a mi corazón
y, sin dudarlo, optimizaste mi pronóstico,
arreglaste todo lo que roto estaba,
recuperaste todo lo que había perdido.
Fuiste enviada como un ángel,
porque pensé en dejar este mundo.
Pues, la relación que tuve antes de ti
lo fue todo para mí,
y que aquello hubiera acabado fue
como haber sobrevivido al fin del mundo.
Cuando lo cierto es que sobrevivir
después de un holocausto es mil veces peor que morir.
Aun así, tú... reconstruyéndome, me encontraste.
Por otro lado, también me rompiste.
Mis piezas se mantenían equilibradas
gracias a la estabilidad que me brindabas.
Por eso, el momento en que tuviste suficiente de mí
y decidiste dejarme, todo volvió a caerse en mi interior.
Y, sin embargo, sigo sin culparte.
Un desastre constante como yo
jamás ha de conocer el permanente reparo.
A pesar de toda la cura y todo el dolor,
yo te deseo paz y libertad, y una sana relación
con quien logre cautivar tu corazón
como en algún momento lo hice yo.
¿Qué será de mí ahora? No te preocupes por eso.
Enfócate en tu presente, que yo soy parte de tu pasado.
No te preocupes por cómo corre el tiempo,
así es la historia, y el pasado hay que superarlo.
Lo único que debes saber de mí
es que permanecerás eternizada en mi poesía,
porque no te lo he dicho,
pero desde el día en que te conocí
supe que en mi musa te convertirías,
supe que serías la fuente de inspiración
de todo lo que, con mis sentimientos, plasmara.
Así termina mi historia contigo:
Amándote.
Viviéndote.
Escribiéndote.
-Dark prince
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