#Las Lindas Pobres

[shemakesnoisefestival]

After Party - She Makes Noise

Siroco Club - 20 Octubre desde las 00h

[hovkinnie]

hoy en la facu le pedi un pucho a una mina (estaba fumando) y me dijo "uh disculpá, solo me quedan dos o tres" y no me combidó. quedé medio shockeada creo que es la primera vez que me pasa, tipo que sos europea?????? aunque sea mentime y decime que no te quedan

[pedriscroquettes]

𝐌𝐄𝐑𝐂𝐀𝐃𝐎𝐍𝐀 ✵ SIMÓN HEMPE

❛ 𝔱𝔲 𝔫𝔬𝔳𝔦𝔞 𝔪𝔢 𝔬𝔡𝔦𝔞, 𝔞 𝔱𝔲 𝔪𝔞𝔪𝔞 𝔩𝔢 𝔢𝔫𝔠𝔞𝔫𝔱𝔞 ❜ `✦ ˑ ִֶ 𓂃⊹

18+

smut, infidelidad, p in v sex, cornudos, mi primer fic en español.

el humo del cigarrillo llena el aire del cuarto de simón mientras te acuestas a lado de el. ya se había hecho costumbre pasar cada minuto del día con el hablando pavadas y fumando. lo veías atentamente mientras te contaba sobre otra pelea con su novia y como ya no la aguantaba a la pobre mina. también ya se había hecho costumbre fingir que te importaba su relación cuando a ti nunca te callo bien la mina.

“pero boludo ya corta con ella si no te llevas bien con ella!” lo regañas.

“amiga o hater?” el bromea.

“bue! tu me pediste mi opinión y te la di.” te quejas.

esta vez no dice nada y nada más te mira atentamente mientras piensa. te pone un poco nerviosa y no aguantas mirarle a los ojos. en un cerrar de ojos se acerca a ti hasta estar encima tuyo. el acto te toma por sorpresa y te acuestas en su cama esperando que te trague el colchón. no ayuda que hace un calor inmenso y no trae la remera puesta. aunque nada más eran amigos no podías negar que simón era un hombre muy guapo.

“a ti nunca te ha caído bien mi novia. porque?” te reta.

“por favor simón.” no lo puedes tomar en serio. “si ella no te caí bien a ti como me va caer bien a mi? deja de fumar te está haciendo mierda la cabeza nene.”

te mira fijamente analizando tu rostro determinado si te cree o no. es un poco intimidante lo bien que te conoce. no tarda en reírse de tu reacción.

“mentira. estas celosa.” se reí como que si hubiera hecho un gran hallazgo.

“pero dale! estas loco nene.” le das un codazo para que se quite de encima.

pero el no se mueve es más se acerca más a ti para tentarte. su cara está a centímetros del tuyo y juras que puedes sentir su respiración mientras el tuyo se corta. es un acto tan intimo y doméstico que te tiene mareada. la proximidad te vuelve loca y te acuerdas de las noches donde dejaban de hacer amigos y ves en sus ojos como el los recuerda también. te trae loca el pelotudo, no lo aguantas más. el comienza a cerrar la pequeña distancia entre los dos y justo cuando se acerca a darte un beso mueves tu cabeza al otro lado.

“simón tienes novia.” le dices para recordarle a él y a ti sobre su novia.

“una novio que no quiero.” murmura.

hay un momento de silencio donde los dos se miran. en solo un instante pierdes tus morales y lo besas. el mueve sus labios contra los tuyos y recuerdas las noches donde te metía a su cuarto a escondidas. entrelazas tus manos en su pelo tratando de acercarte a él. sus manos sostienen tus caderas mientras te come la boca. por un segundo casi pierdes la respiración por cómo los dos se besan como si fuera la última vez.

“estas tan linda.” te dice cuando se separa de ti. elogio te hace sonrojar.

“y tu tan feo.” lo molestas. el simplemente te besa otra vez.

no sabes si es la temperatura o el hecho de que simón te está comiendo la boca pero se siente muy caliente. no aguantas más las ganas y te quitas la blusa exponiendo tu brassiere a tu amigo. ya ni sabias que era simón en tu vida porque los amigos no se comían a besos ni se desquitaban las ganas así. el procede a besar tu cuello, explorando la piel expuesta. no puedes sostener tus gemidos mientras deja marcas en tu cuello.

“simón…” te muerdes los labios tratando de evitar más gemidos.

el se aparta para quitarse la remera exponiendo su pecho a ti. no era una vista que no habías visto antes pero se sentía así. te besa otra vez mientras tus manos exploran su espalda tratando de acercarlo más a ti. la acción causa que su erección rozará contra tu centro. ambos gimieron al placer que causaba y sentías como te mojabas por el.

“dale nena ya no aguanto déjame cogerte.” murmura contra tus labios mientras repite los mismos movimientos para darse placer.

“pero te sales.” lo adviertes y él sonríe. gil.

el no aguanta las ganas y en segundos se baja los pantalones y a ti tus shorts y los panties que traes puestos. dirige su pija hacia tu centro y te mira a los ojos otra vez para asegurase que todavía estás de acuerdo con el. le ofreces una simple sonrisa y el no gasta más tiempo enterrándose adentro de ti. los dos gimen al contacto, tú nunca te habías sentido más llena antes. simón se queda quieto unos segundos asegurándose de que te ajustes a él. lo necesitas y envuelves tus piernas alrededor de su cintura para darle el permiso a moverse.

se mueve para atrás casi sacándose completamente afuera de ti y se meti adentro de ti otra vez para comenzar sus movimientos. no puedes evitar el grito que sueltas a su acción ni como dejas la boca abierta mientras te comienza a coger. sus manos encuentran tu cintura ora asegurase que pueda estar lo más cerca de ti. su cabeza termina en tu cuello mientras se mueve adentro de ti y aprovecha para marcarte más. sus labios contra tu cuello, sus manos enterrándose en tu cintura, y los movimientos de él adentro de ti son intensos y ya puedes sentir como te acercas.

“más rápido simón porfa…” le murmullas a lado del oído.

él obedece y acelera sus estocadas. en el proceso encuentra tu punto g. lo toca una y otra vez mientras te penetra. es todo un montón y en segundos te encuentras corriendo contra su miembro. el siente como lo aprietas duro y se da cuenta que él ya no aguanta más. rápido se salí y termina de pintar tu vientre de su semen. admiras su cuerpo sudoroso y sus jadeos mientras se recupera del sexo.

sientes como alguien se presiona atrás tuyo mientras pones el helado de vainilla en el vaso. sus manos te agarran por tu cintura y te besa las mejillas.

“simón basta. estamos en la cocina.” lo regañas sabiendo que en cualquier momento podría entrar alguien.

“y que? ya lo hemos hecho antes aquí.” te guiñe el ojo.

“que han hecho antes aquí?” su mamá entra por la puerta trasera agarrándole a los dos por desapercibidos.

“una torta de chocolate.” eres rápido en responder.

“y no me dejaron ningún pedazo?” finge estar dolida.

el timbre suena y simón aprovecha a irse a responder al visitante. su mamá nada más se ríe y te dirige una sonrisa pura. te cae muy bien. aunque su sonrisa se va a notar que había llegado la novia de su hijo. igual que a ti. la tensión crecí y notas como la novia te da un look feo. si ella supiera.

“vos deberías ser la novia de mi hijo no esa maleducada.”

[suzukis-posts]

𝗜'𝗺 𝘆𝗼𝘂𝗿𝘀...

𝗠𝗔𝗡𝗝𝗜𝗥𝗢 𝗦𝗔𝗡𝗢 - 𝗕𝗢𝗡𝗧𝗘𝗡

Bonten!Manjiro sano x Male!Reader

𝗔𝗗𝗩𝗘𝗥𝗧𝗘𝗡𝗖𝗜𝗔: Dom!Male!Reader, degradación, estimulación, híbridos, NSFW en general.

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── ¿Sabes, lo que estamos haciendo es ilegal de varias maneras? ── Dijiste observando a tu jefe mientras te bajaba los pantalones junto con tu ropa interior.

── ¿Crees que me importa? Quiero que tengamos sexo y lo quiero ahora. ── Mikey exigió, empujándote en la cama antes de sentarse encima de ti, frotando tu erección semi dura entre su trasero.

Su pequeña y linda nariz se rascaba en el sentimiento, sus orejas de conejo flotando hacia arriba y hacia abajo, su pequeña cola meneando de emoción.

── Por lo menos consigue algo de lubricante. ── Su propia cola esponjosa se movía, el hormigueo que irradiaba de ustedes dos era inmenso.

── No lo necesito, ya me preparé antes. ── Antes de poder hablar sus palabras quedaron atrapadas en su garganta por como Manjiro se hundió en tu enorme miembro.

── Tienes que ser más paciente, Manjiro espera... ── La diferencia de tamaño entre ustedes dos fue humillante para el conejito más pequeño, que apenas podía bajar y ya se sentía tan lleno.

Tus manos se asentaron en la cadera del híbrido, manteniéndolo en su lugar y admirando su pequeño cuerpo en la parte superior del tuyo.

── ¡V-Vamos M-Muévete! ── El más pequeño soltaba gemidos, moviendo su cadera en círculos con la esperanza de conseguir que tu te muevas.

El chico agarró tus orejas de zorro, tirando y frotándolas. Gemidos vinieron de tu boca, la estimulación en sus oídos, las estocadas y el tocar tus orejas lo aún encendió aún mas. Tomas a Manjiro y lo das la vuelta, agarrando sus piernas y empujándolas hasta las orejas.

── He dicho paciencia. ── Bonitos gemidos brotaron de Manjiro, no siendo capaz de manejar tu brusco movimiento. Tomaste sus piernas, obligándolos a permanecer allí mismo antes de empezar a empujar en su pequeño agujero apretado.

── ¡A-ah~! ¡E-espera~! ── No estando preparado para tus duros golpes, Manjiro se quejó, queriendo que disminuyeras la velocidad.

Una sonrisa danzó en tus labios antes de que se incliné y besó al pobre conejito, el sonido de la piel golpeando contra la piel y los ruidos húmedos de tus besos llenaron toda la habitación.

Empujas tu lengua en su boca, inmediatamente tomando el control de la dominación, sin dejar siquiera un poco de espacio para la resistencia.

Las manos de Mikey apretaron tu espalda, aplastando las uñas en tu espalda en el proceso y apretando su miembro.

Sueltas varios gemidos, dejando ir su boca en el proceso. ── Siempre tan ansioso conejito, siempre tomando lo que te doy. ── Una de tus manos exploró su pecho, jugando con sus pezones.

── S-Siempre estoy ansioso por ti... ── Él gaseó, la sensación de tu mano en su pecho lo hizo débil.

── Hmh... creo que sólo debo mantenerte como mi pequeño conejo. ¿Qué piensas de eso, eh? ── Las embestidas se hacían aún más rápidas, dejando a Manjiro con la mente en blanco.

── ¡A-Ah~! ¡Sí! ── Él se quejó, arrojando la cabeza hacia atrás. Aprovechas esta oportunidad, marcando su bonita piel con todo tipo de besos húmedos.

── Más, por favor. ── Aceptas a sus súplicas, empezando a mover tus caderas más rápido y más duro que antes, cada vez que empujas adentro Manjiro temblaba con cada empuje, siendo empujado hacia arriba cada vez.

── ¡S-se siente tan bien! ¡Ni siquiera pienses en p-parar! ── Su mente solo pensaba en como lo penetrabas, estaba en las nubes en este momento por el placer que recibía por tu parte.

── Mmm.. p-por supuesto, Manjiro... ── El nombre se deslizó tan fácilmente de tus labios, con Manjiro buscando aire.

Lo observabas de cerca, mirando cada reacción que venía del muchacho y mirando la protuberancia prominente de tu miembro dentro de él. ── Mira eso, eres tan pequeño, ni siquiera puedo tomar mi polla bien. ── Tu mano dejó su pecho, presionando fuertemente sobre la protuberancia de su estómago.

── ¡A-Ah! ¡No puedo soportarlo! ── Ríes de sus patéticos gritos, sus ojos fueron a rodar por la parte posterior de la cabeza, él puede tomar todo, es un buen conejito, dispuesto a hacer cualquier cosa por ti.

Fue muy divertido ver al jefe de Bonten deshacerse bajo tus órdenes.

[angellen]

Hey angels, como estão? Espero que estejam bem! Hoje, em meios aos meus devaneios diários quando eu estava sem nada pra fazer da vida (o que não é novidade), me peguei pensando: hum, acho que vou fazer um desafio pra mim treinar!

Só que enquanto eu organizava as ideias, eu realmente gostei do desafio e como eu nunca havia postado nenhum (mas sempre tive a vontade), decidi compartilhar com vocês. Inspirado em outros desafios de capas aqui do Tumblr como os da @yoonswan e @opher que fizeram alguns maravilhosos, o Eleven Vibes tem o objetivo de incentivá-los com a produção de novos designs para aprimorar e sair um pouco da zona de conforto.

Certinho, introdução concluída, agora vamos ver como funcionará o desafio? Let’s go!

O desafio consistirá na produção de 11 capas. Cada etapa terá um estilo e uma temática específica, em que vocês poderão fazê-las da maneira que acharem melhor!

Entenderemos melhor na prática, mas antes de ir para ela, dêem uma olhadinha nas informações abaixo, okay?

01. Use a tag #elevenvibes ou #11vibes quando postarem as capas do desafio.

02. Me marquem na publicação pra mim surtar de amores com a capa de vocês.

03. Não há necessidade de seguir a ordem descrita e tampouco fazer todos os dias (nem eu vou seguir isso, gente :D)

04. Vocês podem fazer o que quiserem com as capinhas de vocês (mas se for do g-idle ou do bts, eu tô aceitando que doem pra mim, viu?)

05. Caso não consiga mesmo fazer o que foi proposto, vocês podem estar adaptando para a maneira de vocês ou me chamem se precisarem de ajuda!

06. Dêem like ou reblog pra chegar em outros capistas e fazer a vida dessa pobre camponesa feliz <3

07. E lembrem-se, o intuito do desafio é para que ajudem vocês, que saiam da zona de conforto mas principalmente, que se divirtam, então nada de se cobrar ou se sobrecarregar, okay?

Dita as observações, vamos ver como será o desafio!

Estilo: Clean | Tema: Sobrenatural

Começando com a queridinha de muitos e pesadelos de todos (autocrítica), nessa etapa, vocês farão uma capa no estilo clean com a temática sobrenatural!

Ah mas Lina, sobrenatural não combina melhor com dark?

Quantas capinhas no estilo dark vocês já viram com a temática sobrenatural? E quantas no clean? Isso aí, então vamos inovar galerinha, sair da zona de conforto, chorar um pouco, não faz mal, sabe? Soltem a imaginação!

Estilo: Romântica | Tema: Filmes

Essa tá fácil! Aqui vocês irão produzir uma capa no estilo romântica que seja inspirada em algum filme. Isso, qualquer filme de sua preferência para fazer essa capa, gostaram? Sou boazinha, poxa!

Estilo: Fluffy | Tema: Ballet

Produzam uma capa no estilo fluffy com a temática de ballet. Podem abordar da maneira que vocês preferirem, sem restrições!

Estilo: Divertida | Tema: Desenho animado

Imaginem uma capa no estilo divertida levando como temática um desenho animado, como pica-pau, my little pony, winx club, scooby doo e dentre outros! É isso que irão fazer, vamos voltar à infância e produzir uma capa inspirada em desenhos animados (ou até mesmo contendo os personagens, não se limitem!)

Estilo: Colagem | Tema: Colegial

Para aqueles que gostam de capa no estilo colagem, essa tá fácil, né? Aqui vocês irão produzir uma capa de colagem que tenha o tema colegial. Não tem muito o que explicar, vamo trabalhar!

Estilo: Vintage | Tema: Literatura clássica

Opa! Ouvi um não? Ou será um sim? Isso não é tão complicado quanto parece. Façam uma capa no estilo vintage inspirado em obras da literatura clássica. Vamos voltar no tempo e nos inspirar em clássicos como os de Shakespeare, por que não? Já imaginaram uma linda capa inspirada em Romeu e Julieta? Quero ver, hein!

Estilo: Dark | Tema: Piratas

Outra queridinha de muitos e pesadelos de todos, dessa vez o estilo dark veio acompanhado da temática de piratas!

Piratas do Caribe, Lina?

Talvez hein, gosto da ideia. Explorem o conceito mais sombrio em uma capa com elementos piratas, talvez um tesouro amaldiçoado ou uma ilha misteriosa, que tal?

Estilo: Sexy | Tema: Magia

E vocês podem se perguntar: como eu vou fazer uma capa sexy no tema de magia? Pois bem, eu também estou me perguntando desde que escrevi isso, mas acredito que os bruxos cairiam bem, né? Por que não? Existem diversas maneiras de explorar a magia numa capa mais sensual, vamos botar a cabeça para trabalhar! (incluindo a minha, sos desespero)

Estilo: Angst | Tema: Amor proibido

Essa também não tá difícil, vai! O estilo angst numa temática de amor proibido combina. Expressem a dor do romance proibido em elementos tristes na produção dessa capa, como correntes e vidros quebrados. Usem a imaginação!

Estilo: Manipulada | Tema: Cisnes

E em nossa reta final, chegamos com uma das mais conhecidas, a manipulação! Aqui vocês farão uma capa manipulada com a temática de cisnes. Tem várias maneiras de se inspirar nesse contexto, sejam em clássicos como o lago dos cisnes, colocando uma dualidade do cisne branco com o negro, usem da sua imaginação!

Estilo: Vetor | Tema: Música

Não tão conhecido, mas igualmente lindo, acredito que muitas pessoas não tenham afinidade com capas vetorizadas, que são capas desenhadas de certo modo, mas calmem! Não é um bicho de sete cabeças. Nessa temática, vocês podem fazer a capa vetor de várias formas, seja inspirado em uma música ou com elementos musicais como notas, um guitarrista, cantor, deixem a imaginação fluir! Acredito em vocês, se necessário, pesquisem por watch me edits no YouTube para que possa auxiliá-los.

E então, gostaram do desafio? Mesmo que alguns tópicos possam parecer difíceis, tentem produzir, eu confio no potencial de cada um! Espero que possam ajudá-los de algum modo e enfim, mãos a obra, pessoal!

— Atenciosamente de @angellen 💗

[lleccmte]

WOO DOHWAN ? não! é apenas ARTHUR DUNCAN LECOMTE, ele é filho de ARES do chalé 5, e tem VINTE E SETE ANOS. a tv hefesto informa no guia de programação que ele está no NÍVEL III por estar no acampamento há DOZE ANOS sabia? e se lá estiver certo, ARTH é bastante CATIVANTE mas também dizem que ele é INESCRUPULOSO. mas você sabe como hefesto é, sempre inventando fake news pra atrair audiência.

cnns.

ABOUT. shirts off, and your friends lift you up over their heads. beer sticking to the floor. cheers chanted, cause they said : ' there is no chance, trying to be the greatest in the league. '

Camile Jeon era uma jovem de família pobre que tinha sonhos de grandeza muito além do que os conservadores de sua pequena cidade diziam que poderia alcançar. Via na televisão, as lindas meninas dançando no gelo e queria ser como elas ; mas era diferente - muito diferente. Filha de um caso do pai, professor do ensino fundamental, com uma mente brilhante e um diploma renomado que não lhe conseguiu muito na vida, com a deusa Atena. 

Sempre soube de sua herança divina, o pai solteiro - muito criticado pelas mesmas bocas que diziam que ela não seria nada na vida - , foi honesto consigo sobre a linhagem especial de qual vinha desde que era criança , em partes porque não sabia como lidar sozinho com a excentricidade da filha. Como sempre tinha feito, Camile tomou conta dos dois, e fez as melhores escolhas para que eles pudessem prosperar - sempre com um plano, sempre estrategista. Aos quinze, era uma das campistas mais celebradas do acampamento, missões bem sucedidas e bênção divina para dizer que foi valente e importante para os deuses. 

Porém, aos dezessete, sabia que seu tempo ali tinha acabado - trabalhou incessantemente para se manter acima d'água, podendo tomar conta do pai, e conseguir treinar patinação. Estava além da idade e sabia disto, mas como sempre ; havia um plano para sua vida, e mesmo que fosse cortando caminhos, ela alcançaria glória. 

Pois dito e feito, aos dezoito anos foi convidada por uma treinadora francesa para se juntar ao seu time, e embora tenha - por um instante, que fosse - hesitado em aceitar, sabendo que o pai tinha dificuldade em se virar sem ela ; o plano era o plano. Desta forma, foi para França e começou a se preparar para as Olimpíadas. Contudo, seu caminho, não foi sem adversidade e reconstrução. Primeiro, a morte do progenitor que a deixou sem família, depois uma fratura que a deixou longe da equipe por um ano. Já tinha vinte, já devia ter alcançado sucesso naquela altura e tudo que parecia acumular desde que deixou o acampamento eram fracassos. Contudo, Camile era esperta e inescrupulosa - qualidades que mais tarde passaria ao filho - , e escreveria seu próprio destino, como bem entendesse.

A sorte mudou completamente quando achou em Alistair Lecomte, sua passagem para o tão sonhado êxito. Alistair era um jogador de hockey, que foi forçado a se aposentar cedo por conta de um ligamento rompido, mas não estava fora de forma e mantinha paixão pelo gelo. A filha de Atena encontrou um técnico para os dois, que os transformou em uma dupla formidável, porém era mais que isto. Além de patinar juntos, os dois mantinham um romance público que gerou inveja em todos na França e ao redor do globo, e fez com que torcessem ainda mais para os patinadores, que eventualmente ganharam medalhas e mais medalhas, troféus e mais troféus, fama e mais fama. Juntos, eram imbatíveis - porém, apesar do que acreditavam os tablóides, Camile e Alistair eram apenas melhores amigos, que fingiam estar apaixonados para esconder a verdadeira orientação de Ali da família afluente. 

Depois de se aposentar no topo de suas carreiras, os dois resolveram se casar . Foi o evento do século, casaram-se uma vez em Las Vegas para manter o pretenso de paixão, depois tiveram cerimônias na França e nos Estados Unidos, a mulher decidida a mostrar para todos que duvidaram de si, exatamente o quão longe tinha chegado. 

Na vida particular, Alistair mantinha o homem que amava em segredo e Camile tinha seus casos sem importância - apesar de serem apenas amigos, Alistair era sua pessoa, sua alma gêmea e tudo que precisava. Ela não contava, no entanto, que o deus da guerra fosse tomar interesse por ela, em uma noite de verão, em um cabaré exclusivo em Viena. 

Nove meses depois, uma criança nasceu desse encontro - com uma colher de ouro na boca, e amado tanto por Camile quanto por Alistair, que já tinha dado seu nome a esposa e fez o mesmo com o filho. Afinal, assim via o pequeno Arthur, como o filho que sempre quis ter. 

Camile fez com Arth, o mesmo que o pai tinha feito consigo - foi honesta sobre quem realmente era. Sobre a existência dos deuses, as guerras que este mundo já tinha enfrentado, e a possibilidade de que iria enfrentar muitas outras, fazendo com que ele tivesse de se proteger quando ela e Alistair não fossem o suficiente para mantê-lo seguro. 

Desta forma, como tinha sido com a mãe, Arthur foi para o acampamento meio sangue aos treze, descobrindo então seu poder que antes se manifestava principalmente quando estava no colégio, envolvido em algum esporte, ou se metendo em alguma briga. Odicinese, era como chamavam, comum aos filhos de Ares - podia manipular os sentimentos mais latentes que vinham da guerra , entre eles, a raiva - sua especialidade. No começo, se sentiu perdido sobre como usar aquilo a seu favor, demorando para sair do nível I em seu treinamento - mas como a mãe, era esperto e inescrupuloso, e depois de certo tempo descobriu que encontrava prazer em ver as pessoas lutando contra aqueles que diziam amar, respeitar e venerar.

Por pouco, antes de ter controle sobre o poder, não destruiu o casamento dos pais. Os dois entrando em combates, às vezes até mesmo violentos, levados à loucura por uma força que não podiam nomear . Apesar de amá-lo, a mãe o ressentiu então, por quase tirar de si , a única pessoa mais preciosa que ele - o melhor amigo que lhe trouxe glória. 

Foi no futebol americano que encontrou uma escapatória de sua própria fúria. Aos vinte e dois, já tinha sido contratado pelos 49ers, e jogado um super bowl. Todos faziam festa quando ele estava em campo, estrategista como era, sempre se destacava nas partidas e mais que tudo, quando pegava na bola, os adversários salivavam com competitividade ; era como se estivessem em um campo de batalha e ele gostava assim. 

Apesar de passar as off seasons no acampamento, ou com o pai e seu namorado, Nick , a quem ele e sua mãe adoram, dando apoio para que um dia Alistair venha a público com a verdade, estava no meio de uma temporada de treinamento quando recebeu o chamado de Dionísio. Tentou convencer a mãe a vir consigo, mas sabia que ela jamais iria abandonar o pai, portanto foi com uma despedida, em sua opinião, excessivamente melosa, que se despediu da família, e da vida que sem saber , estava deixando para trás, os 49ers encerrando seu contrato depois de dois meses fora, causando cólera nos fãs - afinal, ele era o melhor na liga. 

MORE.

PODERES: Odicinese, a habilidade de manipular sentimentos e emoções da guerra, como ódio, raiva e medo. Arthur, em especial, se destaca manipulando a raiva, transformando-a em sua maioria em grande competitividade. 

HABILIDADES: sentidos aguçados e força sobre-humana. 

ARMA: ' basileus ' , rei em latim - uma adaga de ferro estígio que ganhou do próprio pai depois de uma missão bem sucedida onde salvou a vida de um irmão. a arma é intrincada com desenhos de batalha em prata, e afiada como é, corta pela pele de qualquer monstro e também qualquer coração, ele imagina - embora nunca tenha a testado em um humano. no dia a dia, ela se parece com um anel que fica no dedo indicador e tem o formato de uma caveira. 

++

 membro da equipe azul do clube da luta, instrutor de combate corpo a corpo e patrulheiro. 

[revistapipazo]

Hueona pobre vs. pobre hueón

A Claudia la conocí quince años atrás en la universidad. Cuento corto: vía Facebook nos hacemos “amigos” de nuevo y un sábado nos juntamos a chupar en Plaza Brasil. Tiene tres hijos a cuestas, pero sigue igual de flaca (que es lo importante).

Meses antes Claudia ha encontrado a su marido y a su mejor amiga follando en el catre de uno de los cabros chicos. Está con el ánimo hecho pico, pero ni tanto dadas las circunstancias; más cagado del mate estoy yo, debo admitir.

Ella es la pareja ideal. Se emborracha con un gin tonic, habla lo justo y necesario, se ríe de mis chistes rancios y no duda en dejar clarito qué chucha es lo que quiere. Y lo obtiene. Sin hacer atados, se va tempranito para su casa en micro; durante la semana saluda un par de veces por messenger, pero nunca pregunta hueás que sabe que no voy a contestar. Desde el principio queda claro que sólo nos veremos los sábados, porque es el único día que puede liberarse del jardín infantil. Durante la semana llego a echarla de menos, cómo será de buena la cabra.

Poco tardo en comprender que Claudia es pobre como una rata y le encanta serlo. Su ex es un actor de medio pelo que “trabaja” haciendo talleres de teatro callejero: un muerto de hambre pasado a sobaco que no la ayuda en ná. No es que ella gane una miseria, pero aparte de los tres guachos debe mantener una casa, a su abuelita de 87 años, un gato y dos perros.

Claudia relata entre carcajadas cómo les inspira lástima a sus colegas para que le regalen ropa y tintura para el pelo; cada mañana se va a la pega esquivando micros en una bici roñosa que recogió literalmente de un basurero. Un día acepta que la vaya a dejar, pero se baja tres cuadras antes porque reconoce que le da vergüenza que vea su covacha digno hogar de madre trabajadora.

Un domingo me cuenta que para el día siguiente tiene planeado viajar dos horas en micro para asistir a una reunión en un ministerio (porque la hueona además es talentosa y asesora a una comisión o algo así). Yo, imbécil, le digo que no sea rata y que al menos tome un colectivo para que no llegue toda transpirada. De paso, aprovecho de recomendarle que use un buen desodorante porque anda medio fuertona. Emputecida, Claudia pesca sus monos y se manda a cambiar. Sigo durmiendo.

Esa tarde me avisa por email que en su blog me ha dedicado unas palabras. Intentaré reproducir el rosario de chuchadas: “Eres un arribista reculiao. Te creís la raja porque tienes una casa con murallas, te quebrai con tu cagá de auto y con tu mierda de bicicleta de marca. Con lo que te gastai en un copete yo alimentaría a mis hijos en una semana. No quiero verte más conchetumadre, tú no entiendes el sufrimiento de los que tenemos carencias. Chao nomás, hediondo hijo de la puta tu madre que te parió”.

Y sería el final de una linda historia de amor.

[carogabi2207]

Hola mis constelaciones. Espero que estén bien.

Bueno Vamos a comenzar sobre mis Aus de Uglydolls que están en emisión y que hay probabilidad de que se emitan.

Bueno empezaremos con mi primer AU.

Different destinations

Estrenado: 21 de septiembre de 2021

Finalizando: ???

Temporadas: 2

Estado: en emisión

Capítulos en la temporada 1: 26 capítulos

Capítulos en la segunda temporada: 5

Es una historia BL de amor y amistad:

Es del Ship de Lou x Nolan.

Nolan💜💚: Un chico Amable, empático, no es muy destacable, un poco torpe amable con su mamá y no es pobre ni rico o famoso Pero le gusta la vida que tiene.

Lou💛💙: Un chico famoso, cantante, rico, no tan empático y no tiene confianza de los demás.

Lou y Nolan son unos dos chicos que están en el último año en la preparatoria con diferencias que al principio no se llevaban bien por solo un mal entendido entre ellos. Pero con el tiempo tuvieron la oportunidad de enlazar una amistad.

Pero no contaban que esa amistad por el tiempo se vuelva un sentimiento de amor.

A ser diferentes hay siempre algo que no llegará a estar juntos ¿Es el destino que les quiere separar? ¿O no?

Antes de crear la serie, todo comenzó con un comentario que me sugirió que haga una serie dedicada a ese Ship en tiktok (La persona esa como amigo aunque ya no está, por suerte que el comentario seguia aquí)

Y ahí comencé a trabajar con la serie y capítulos. Aunque no tenía nombre durante 5 capitulos Pero les diré como se me ocurrió ese nombre.

Un día en ese mismo año estaba dirigiendo hasta la escuela. En el camino que iva era doble via "osea dos caminos en uno solo no me explico bien" Pero la diferencia es que en esa carretera en el otro lado estaba con cementaro o con piedras tipo ladrillos para que no haya mucha polvareda mientras que en otro no era igual sino era tierra y no se que decia pero decia que iva a mi destino que es la escuela no se si es por eso pero es una historia rara.

Y por eso puse ese nombre por lo diferente que son pero con destinos que no saben que serán.

Por ahora está por su segunda temporada Pero no le pude el tiempo y la memoria de mi celular.

La serie le pueden encontrar en mi tiktok que ahí subo los capítulos "Aunque ha pasado un año que no subo nada no me cuelguen"

Y también subo maratones de cinco capitulos a mi YouTube lo pueden encontrar fácilmente ahí.

Pero por ahora trataré de al menos hacer los capítulos aunque no se si lo haré.

Y bueno también está en la segunda temporada Pero no les diré que pasó Pero les dejaré eso dibujos

⚠️ Alerta de Spoiler ⚠️

La segunda temporada es la siguiente con los acontecimientos del final del capítulo "te amo" Que Nolan sufre mucho por lo que le pasó a Lou y lo que hizo Linda.

Y bueno la verdad quiero subír imágenes de la serie Pero tengo límites de imagen Así que lo dejaremos ahí por ahora más tarde voy a subir su segunda parte. De extras.

Datos:

Los personajes de la película casi la mitad aparecieron en la serie y la segunda ya todos aparecen.

Las serie tuvo popularidad en Youtube aunque con pocos likes y visitas y en tiktok casi (Aunque también es la razón que seguirá en emisión)

Hay personajes que son mios aunque en la segunda parece más.

Y bueno con eso me despido más tarde subiré la segunda parte solo por las imágenes. No pensé que haya límites de 10 imagenes.

[zarry-fics]

Sou a sua terapia. - w. Harry Styles

masterlist

Ao pegar os dois copos de café, finalmente saí do carro e travei-o antes de caminhar na direção da entrada do aeroporto. Tive de pedir informações para uma moça que passou bem perto de mim, não saberia como chegar ao portão de desembarque que Harry se encontra.

É a primeira vez que venho buscá-lo depois de uma turnê muito longa com os meninos. Ele está em uma espécie de férias, e fiquei muito feliz e agradecida quando decidiu passar esses dias comigo.

Terminei meu relacionamento há uns dias atrás, e Harry decidiu ficar comigo para me apoiar. Mesmo que não tenha demonstrado muito, amei essa ideia.

Harry é ótimo em me distrair da minha dura realidade. Confesso que preciso dele, além de sentir muitas saudades, afinal, são meses que passamos longe um do outro.

Não estou acostumada com nada disso.

Harry está lindo. Ele veste uma camiseta de botões branca, calças pretas e botas enormes, na cor marrom. Seus longos cabelos estão “presos” para trás por causa do óculos no topo de sua cabeça.

── Harry! ── chamei a sua atenção e quando ele olhou em minha direção, estendi a mão e sorri, me aproximando.

── Nossa, até que enfim! Achei que tinha me esquecido aqui. ── ele reclamou com um biquinho adorável, me tomando nos braços em um abraço caloroso, apertado, repleto de saudades e com direito ao meu nariz enfurnado em seu pescoço, podendo sentir muito bem o seu perfume e o cheiro de xampu em seus cabelos.

── Não seja dramático, Harry. Eu jamais te esqueceria. Você sabe disso. ── semicerrei os olhos e quando nos afastamos, lhe dei um beijinho na bochecha ── senti saudades, muitas saudades! ── mordi o lábio e estendi o café em sua direção. ── Comprei para você no caminho até aqui. É o seu favorito!

── Você como sempre atenciosa! Obrigado, gatinha. ── piscou em minha direção e já foi dando um gole na bebida ── Precisamos sair daqui. Você viu que existem fãs lá fora, não viu? ── perguntou olhando em volta, meio apreensivo.

Só depois notei que seus seguranças estão posicionados ao longe, mas sequer olham para nós dois. ── É... sabe, eu não notei. Mas provavelmente tem sim, afinal, você é o Harry Styles! Quem não iria querer te ver?

── Você não notou? ── questionou abismado e eu passei os dedos pelo cabelo, que está amarrado em um rabo-de-cavalo, nervosa.

Como explicar a ele que meu único foco era encontrar o portão para que pudesse finalmente vê-lo? Minha ansiedade estava a mil. Eu não menti quando disse que estava com muita saudade.

Muita mesmo.

── Ah, Harry. Você sabe... sou meio distraída com essas coisas. Mas enfim, vamos ou vai continuar aí parado? ── começamos a caminhar juntos até a saída, mas dessa vez precisamos pegar um outro caminho, pois haviam muitos fãs tumultuando o aeroporto.

• • •

Quando chegamos no carro, Harry guardou as suas malas e então, dirigi até a minha casa. O que não é bem uma casa, é só um apartamento. ── Desconsidere o tamanho. Você sabe que sou pobre. ── fiz piada e ele revirou os olhos, sorrindo. Abri a porta e Harry entrou, olhando em volta com muita... Admiração?

Que estranho.

── É lindo, S/A. ── elogiou, ainda perdido por estar estudando a decoração. Sua atenção logo prendeu-se numa fotografia acima da lareira.

Na foto, eu o abraço por trás e tenho o meu queixo apoiado em seu ombro, os lábios bem perto da sua mandíbula, simulando um beijo. Harry sorri lindamente nela.

Tiramos essa foto pouco tempo antes de ele viajar em turnê, quando o mesmo foi me visitar quando eu ainda morava com meus pais. ── Não sabia que iria revelá-la. ── Styles comentou, olhando para o porta-retrato com um sorriso bobo ── Ficou linda!

── Eu sei. ── respondi ── Mas como não sabia? Eu te disse no mesmo dia em que tiramos.

── Não sabia que faria isso mesmo. ── rebateu e se virou para me olhar.

Fingi que não o percebi me encarando, e depois de trancar a porta, joguei a chave na cômoda perto desta última. ── Está com fome?

── Sim, estou.

── Fiz um jantar para nós dois. ── e é verdade. Passei a tarde inteira hoje trabalhando numa lasanha, só para agradá-lo. Mas eu não admitiria isso em voz alta, jamais.

── Hmm, gosto de saber disso!

── Você pode ir tomar um banho, se quiser. Vou pôr a lasanha no forno para esquentar. ── propus e Harry concordou, meio contido ── O que foi?

── Não sei onde vou dormir. ── falou com as sobrancelhas erguidas

── Vou te mostrar agora mesmo! ── passei por ele e dei alguns tapinhas em seu braço, caminhando na frente para o guiar. No trajeto até o quarto de hóspedes, fui apresentando a ele os outros – poucos – cômodos em minha casa.

A casa dele em Londres é muito maior que isso aqui, mas fico muito agradecida em saber que ele aceitou passar sua folga comigo, num lugar tão simples como esse.

Esse fato chega até a me envergonhar.

Quando chegamos, o ajudei a levar suas malas para dentro do quarto. Mostrei a ele que precisaríamos dividir um banheiro, mas ele tampouco pareceu ligar para isso. Me agradeceu e então, não demorei mais lá. Voltei para a cozinha.

Pus a lasanha no forno e, ao passo que ela ia esquentando, arrumei a mesa. Coloquei dois pratos, taças, talheres e peguei um vinho no armário. Deixei tudo pronto e assim que ele chegou, só nós sentamos para servimo-nos.

Durante todo o jantar, conversamos sobre muitas coisas. No momento, Harry não falou sobre o meu término recente e eu agradeci internamente por isso.

Não que eu não vá falar sobre com ele (até porque já conversamos sobre), mas esse assunto ainda é uma ferida aberta para mim. Não quero estragar um momento tão especial com o meu melhor amigo com minhas confissões sobre as diversas traições de meu ex, as brigas, entre outros assuntos relacionados.

Ele me contou sobre os meninos, sobre as cidades que conheceu, o comportamento dos fãs em cada show... Harry fala sobre seus admiradores com um brilho nos olhos. Ele se sente muito amado por eles, assim como os ama muito também. Fico muito feliz por todo esse carinho que ele e os meninos recebem. ── Essa lasanha está ótima, S/N. Você cozinha muito bem! ── me bajulou um pouquinho e eu revirei os olhos, tomando um longo gole do meu vinho

── Obrigada, Harry. Fiz especialmente para você, querido. ── pisquei em sua direção e percebi-o sorrir meio que maliciosamente.

Nossa noite seguiu-se dessa forma. Não ficamos acordados até tarde como era costumeiro de se fazer, pois ele estava cansado. Mas fui dormir feliz por saber que, no cômodo ao lado do meu, estava ele.

O meu melhor amigo.

• • •

── Bom dia, linda. ── Harry me cumprimentou com um mega sorriso, às sete da manhã. Me dirigi à cozinha lentamente, a cabeça ainda bem pesada por estar morta de sono. Mas não posso dormir agora, tenho que fazer algumas coisas importantes e não seria educado da minha parte deixá-lo sozinho.

── Bom dia, H. O que está fazendo aí? ── questionei encarando o fogão, onde ele mexe em uma panela. Está sem camisa, a visão de suas tatuagens me fez suspirar, principalmente por causa da luz do sol que entra pela janela. Esta dá um contraste interessante aos traços pretinhos em sua pele branca.

── Ovos com bacon. Por sinal, é só o que eu sei fazer. ── respondeu, totalmente concentrado no que está fazendo ── E torradas também. Você se incomoda? ── me olhou por um segundo e eu dei de ombros, roubando uma tira de bacon do prato que ele já estava montando.

── Claro que não!

── O que faremos hoje? ── perguntou ele, desligando o fogo.

── Não sei. Tem algo em mente?

── Na verdade, por hoje não quero sair. Podemos ficar em casa assistindo filmes? Aliás, ainda temos muito o que conversar. Sobre... Você sabe o quê. ── suspirei e concordei, me sentando no balcão. Apoiei meu cotovelo no mármore frio e meu queixo na palma de minha mão, observando-o se mover enquanto monta os pratos com nosso café da manhã.

Harry é incrível e, por um segundo, eu me pego pensando como seria ter essa visão dele... Todos os dias.

Mas não como o meu amigo.

É estranho pensar dessa forma, Harry nunca demonstrou sentir nada que ultrapassasse a amizade por mim. Ele faz algumas piadinhas às vezes, mas nunca levei a sério.

Quando percebo no que estou pensando, balanço a cabeça como se tentasse espantar de mim esses pensamentos. ── Sei que está triste por saber que aquele cretino te traiu, mas não quero te ver assim. ── ele colocou em minha frente um prato com ovos, bacon e um outro com torradas. Engoli a seco, sentindo meu estômago roncar, tamanha a fome que sinto.

Harry também nos serviu com suco de laranja, sentando-se em minha frente logo após isso. ── Você é linda, uma mulher incrível, gentil, carismática, meiga... você é o sonho de qualquer homem, S/N. Acha mesmo que vale a pena sofrer por aquele traste?

Ele faz parecer tão simples...

── Não é tão fácil, Harry.

── Como não? ── ergueu uma sobrancelha ── Para mim, é muito fácil.

── Só pra você. Passamos muito tempo juntos, ainda dói, sabe? Eu confiei nele, Harry. ── vi o meu amigo bufar e revirar os olhos.

── Acha que vale a pena sofrer por um homem tão insignificante? ── não respondi ── Acha que vale a pena ficar se lamentando quando existem outros caras que dariam tudo para poder ter uma mísera chance contigo? S/N, por favor... Acorda!

── Eu sei que não vale a pena, mas eu não consigo convencer o meu coração disso. ── tomei um pouco do meu suco quando comecei a sentir um nó se formar em minha garganta ── É sério. Acho que preciso de terapia. ── ele riu.

── Não precisa. Eu vou te ajudar. Sou a sua terapia. ── enruguei as sobrancelhas.

── Como assim?

── Disse que vou te ajudar a superar o seu ex, dã. ── ele me fez parecer uma boba.

── Ah, sim? Como seria isso?

── Você vai ver! ── respondeu, misteriosamente.

── Como acha que vai conseguir? Só temos alguns dias, logo você voltará ao trabalho e... Ai, Harry. Não quero nem pensar nisso. ── a ideia de ficarmos longe um do outro novamente me deixa muito mais triste do que já estou.

── Vamos ter tempo. Te garanto que antes de eu ir embora, você já não vai mais lembrar que teu ex passou pela tua vida. ── o sorriso dele demonstra confiança, como se soubesse exatamente o que está fazendo e sabe que vai dar certo.

── É sério, Harry? Faria isso por mim? ── perguntei com esperança.

── É claro que sim. É pra isso que os melhores amigos servem, não é? ── concordei. ── Em duas semanas te faço esquecer esse merda.

Uh, ele realmente se garante muito.

• • •

── “Por toda a minha vida”? ── Harry perguntou a respeito do filme que assistiríamos. Observei a sinopse e roubei dele o balde da pipoca, me acomodando no sofá – ao seu lado.

── Sim. Pode pôr. ── assim que ele deu play no filme, deitou-se ao meu lado. Levei algumas pipocas à boca e me assustei com os braços dele envolvendo o meu corpo, me trazendo para mais perto.

Harry acabou de sair do banho, então consigo sentir tão bem o seu perfume, o cheiro de loção pós-barba me faz delirar. Tento ignorar a minha pulsação cardíaca acelerando mediante seus toques. ── Tudo bem? ── perguntou ao me organizar direitinho e eu concordei.

Harry deixou um beijinho casto em meu cabelo e então começou a acariciá-lo, bem suavemente, com a ponta dos dedos. Fechei meus olhos por um segundo, sentindo o seu peito quente em meu braço, as batidas suaves do seu coração e a respiração dele que consegue ser mais cheirosa que seu próprio corpo.

Esse homem é uma tentação.

── Se você quiser, pode se deitar aqui. ── ele propôs, apontando para o seu colo, onde colocou um travesseiro. Respirei fundo e neguei, me aconchegando melhor em seus braços.

Me sinto tão bem assim.

── Não precisa, Harry. Estou bem aqui. ── respondi e ele assentiu, continuando a me fazer um cafuné bem gostoso.

Comi as pipocas rapidamente, vez ou outra levando algumas aos seus lábios, por suas mãos estarem ocupadas. A textura deles é tão macia, tão macia quando algodão.

É muito difícil me manter concentrada num momento como esse.

Continuamos assistindo o filme em silêncio. Só ouvia o som da respiração de Harry e quando deitei minha cabeça em seu peito, passei a ouvir também as batidas do seu coração. Um sorriso besta pintou os meus lábios. Me pergunto como pude passar tanto tempo sem ele, como suportei todos esses meses longe... Harry faz muita falta mesmo.

Tava tudo tão gostoso que nem notei quando caí no sono. Só acordei no dia seguinte, na minha cama.

• 4° DIA

── Como assim não sabe nadar? ── ele riu alto, me encarando como se não acreditasse no que acabei de lhe dizer.

── Para de rir, Harry! As pessoas estão olhando. ── eu cruzei os meus braços, me sentindo estranha no meio de todo esse pessoal.

Céus. Não consigo mais me lembrar em qual momento eu achei que vir a um parque aquático no fim de semana seria legal. Com Harry, ainda mais. Não sei nadar, tenho pavor de afogamentos e medo de acabar bebendo essa água que não sei o que está misturado nela.

Estamos chamando muito mais atenção por ser ele a me acompanhar. A droga do Harry Styles. Todos estão olhando para nós dois. Olham para ele com admiração e como se eu fosse uma tremenda imbecil. ── Certo, desculpe. ── lamentou, se aproximando da borda da piscina. Ele passou os dedos pelos cabelos e os jogou para trás, colocando as mãos no chão. ── Venha aqui. Vou te ensinar a nadar agora mesmo, querida.

Senti um arrepio subir por minha coluna ao ouví-lo me chamar assim.

── Não sei, eu... ── mordi o lábio, nervosa ── Harry, não sei se é uma boa ideia, não.

── Pode vir. ── ele fez um gesto com a mão, me chamando. ── S/A! Você não confia em mim? ── o cretino fez uma carinha do gato de botas, um biquinho que eu julgo ser irresistível e muito, muito sedutor.

Me surpreende o fato de ele não estar se importando muito com as pessoas à nossa volta, mesmo sabendo que elas estão o admirando muito.

── Claro que confio, Harry!

── Então vem logo.

── Estou com medo! ── arregalei os olhos, assustada com a profundidade desta piscina. Harry, que é do tamanho de um poste, tem a água na altura de seu busto. Imagina eu!

── Não vou te deixar afogar. Confie em mim. ── a passos tímidos me aproximei das escadas que dão acesso à piscina. Pus a minha mão no corrimão dela e antes que pudesse descer, senti uma presença atrás de mim e imediatamente reconheci a presença por ser uma mulher, loira e robusta que ficou ao meu lado, observando o Harry.

── Harry? Harry Styles? ── ela perguntou alto, como se quisesse chamar mais do que a atenção devida. Fechei a minha cara, principalmente ao perceber Harry sorrir lindamente para ela.

── Sou eu, sim. ── respondeu olhando para cima para poder olhar em seu rosto. A mulher se aproveitou disso, e se abaixou na borda da piscina, quase posicionando a vagina na cara dele.

Enruguei as sobrancelhas e estranhei o fato de meu pescoço queimar e minha mandíbula travar, tudo ao mesmo tempo. Mesmo que tenha notado que ele não está olhando. ── Nossa! Que prazer te encontrar aqui. Eu sou muito sua fã, você não tem ideia! ── falou toda oferecida e se esticou para tocar o rosto dele.

Harry me olhou e deve ter percebido a minha expressão fechada, pois sorriu ainda mais. Não que eu não saiba que existam muitas mulheres aos pés dele, mas geralmente prefiro não vê-las praticamente abrindo as pernas na sua frente.

Assim que conversaram um pouco, ela finalmente foi embora (e olha que eu achei que isso não fosse acontecer), me deixando sozinha com ele. ── Quer saber? Na verdade, não tô afim de nadar. ── antes que me afastasse da escada, senti sua mão segurar forte o meu tornozelo, me mantendo no lugar.

── Você vai entrar aqui. Agora. ── meio que ordenou e eu ergui uma sobrancelha ── Venha.

── Está querendo me dar ordens? ── indaguei sem acreditar.

── Sim e você vai me obedecer. Quero te ensinar a nadar. ── engoli a seco e, mediante seu olhar quase penetrante, eu decidi descer e entrar na água. Harry veio para a minha frente, segurando a minha cintura bem firme quando eu quase submergi.

Meus pés ao menos tocam o fundo da piscina e eu começo a entrar em desespero. ── Harry! ── gritei o seu nome assustada, e ele sorriu, me agarrando com muita força.

── Fica calma. ── pediu baixo, bem pertinho do meu ouvido. ── Você não vai se afogar.

── Eu vou s-

── Shhh, S/N. ── me interrompeu, afastando-nos um pouco ── Vou te soltar e te apoiar no chão, entendeu? Você não vai se afogar. Confia em mim. ── bem devagar ele foi me colocando no chão. Estiquei as pernas para tentar alcançar o fundo.

Não consegui imediatamente. Olhei nos olhos de Harry e ele fez a mesma coisa, bem sério enquanto me segura firme até que eu me apoie. Assim que aconteceu, percebi que a água fica um pouco abaixo do meu queixo, ainda assim, precisei ficar na ponta do pé. ── Tudo bem? ── perguntou e eu concordei, ainda me segurando nele pois não confio em mim.

Harry me agarrou pela cintura de novo e meio que virou-me para que eu ficasse em sentido horizontal. ── Caralho! ── eu gritei assustada, me desequilibrando por tentar bater os braços e as pernas feito uma pata descontrolada.

Harry só ria de mim.

── Meu Deus, S/N. Te pedi para ter calma. Eu vou ensinar. Tá tudo sob controle, mulher! ── ele pôs a mão nas minhas costas, me mantendo quieta. ── Vá batendo os braços bem devagar, ao mesmo tempo as pernas. Você sabe... Como se estivesse dividindo a água! ── sorri com a sua explicação.

── Assim? ── perguntei ao tentar fazer o que ele disse.

── Mais devagar. Você ainda está nervosa. ── ele pediu e eu respirei profundamente, tentando me manter mais calma. Quando o fiz, comecei a mover as pernas e os braços do jeito que tem que ser. ── Isso. ── me incentivou e eu sorri. Após alguns segundos, senti o aperto dele afrouxando em minha volta. ── Fica parada aí.

Eu fiquei em pé novamente e Harry se afastou um pouco. ── Vem nadando até aqui. ── pediu e ergueu os braços. Enruguei as sobrancelhas.

── Não consigo!

── Ah, não diga isso! Eu estou bem aqui, você nem vai precisar nadar tanto, S/N. Você precisa tentar! ── suspirei e olhei para o rosto dele. Mesmo sem falar muito, ele me diz tanta coisa. Harry me incitou a “nadar” até ele e assim eu o fiz.

Não preciso nem dizer que fui um fracasso e quase engoli toda a água da piscina. Harry me tomou em seus braços e me apertou com força, me puxando para cima enquanto eu puxo o ar para os meus pulmões, regulando a minha respiração. ── Você foi ótima, minha doce garota ciumenta. ── ele sussurrou em meu ouvido, me causando um frio na barriga.

Merda.

• 6° DIA

── Vamos, S/N!!! Você vai querer ver essas fotos quando eu estiver longe. Te deixo até dormir com elas embaixo do travesseiro se aceitar entrar ali comigo. ── Harry implorou me olhando no fundo dos olhos, apelando com uma expressão fofa no rosto.

Olhei para a cabine de fotos um pouco temerosa. É um lugar fodidamente pequeno e não me sinto confortável em lugares assim. Minha claustrofobia ataca com muita força, mas com ele me pedindo desse jeito é quase impossível dizer não.

Eu só não quero passar vergonha em um lugar tão cheio de pessoas como esse.

Observei seus cabelos amarrados em um coque, então sorri, passando meus dedos suavemente por sua testa. ── Tudo bem! Mas só porque você está muito fofo com o cabelo assim. ── Harry sorriu sem mostrar os dentes e suas bochechas foram ganhando um tom fraco de vermelho.

── Sua boba. Vamos logo! ── ele segurou a minha mão e me levou até a cabine, entrando ali dentro. Mordi o lábio, tentando me controlar para não acabar surtando. ── Eu tô aqui com você. ── apertou bem delicadamente a minha mão e a beijou, ainda olhando em meus olhos.

A primeira foto foi tirada e então, começamos a fazer poses. Abracei-o, beijei a sua bochecha, Harry me agarrou de surpresa e então eu acabei dando um gritinho baixo pelo susto, com certeza a câmera flagrou a careta que fiz no momento.

As expressões de Harry são as melhores. Eu ri tanto e por um momento esqueci do cubículo em que nos encontramos. Ele conseguiu me manter calma e assim que saímos, pegamos as fotos e eu fiquei as admirando (admirando o Harry, na verdade).

Depois dali, fomos comer algo. Harry continuou segurando a minha mão e eu tentei normalizar isso, mesmo que esteja me sentindo uma idiota e feliz por esse momento que estamos tendo.

Passamos por algumas lojas, indo na direção da praça alimentícia. Quando chegamos perto da Victoria Secrets, vi uma silhueta muito conhecida por mim saindo de lá – ironicamente ou não – segurando a mão da mesma mulher com quem me traiu por tanto tempo. Meu ex saiu de lá aparentemente feliz, conversando com a sua atual companheira muito animado, com sacolas da loja que saiu em mãos.

Uma expressão de nojo cobriu o meu rosto. Harry me olhou e eu tentei disfarçar, mas ele me conhece bem para saber que a presença de William me atingiu. De tantos shoppings na cidade, ele tinha de vir logo para esse? ── S/N... ── Harry resmungou e antes que pudesse me falar qualquer coisa, os dois vieram em nossa direção e pararam bem em nossa frente. William, surpreso (de um jeito negativo, claro) e sua mulher, olhando para Harry como se ele fosse um pedaço de carne suculento e ela... uma leoa faminta.

Vadia.

── Harry, vamos. ── eu o chamei e então, saímos andando. Ele continuou olhando para o meu ex fixamente, como se estivesse esperando que ele falasse qualquer coisa, mas não foi o que aconteceu.

── Esse cara não me desce. ── disse irritado e eu suspirei aliviada por estarmos longe dos dois, sorrindo um pouco.

── Não perca seu tempo com ele, Harry. Você é muito melhor que isso! ── eu apertei a sua mão e ele me olhou de novo.

── Você tem razão. ── mordi o lábio e balancei a cabeça. Caminhamos juntos até onde comeríamos e nos sentamos em uma mesa disponível. Existem muitas pessoas aqui e como era de se esperar, vieram conversar com Harry, tirar algumas fotos. ── Sei que não vai superá-lo por agora, mas eu ainda quero tentar, S/A. ── ele falou assim que ficamos sozinhos de novo.

── Como assim? Eu já superei! ── menti na cara dura, até tentei evitar olhá-lo. Como era de se esperar, Harry sabe que eu estou mentindo.

── Não é tão simples assim, S/N. Não precisa mentir para mim. ── ele segurou a minha mão que estava em cima da mesa ── Eu já sabia que seria uma missão difícil, mas não sou do tipo que desiste fácil. ── piscou o olho em minha direção e eu engoli a seco, sorrindo mediante a sua convicção em me fazer superar William.

E eu aceitei. Aceitei de bom grado a sua ajuda, afinal, é o Harry.

• • •

Ao comermos juntos, compramos só umas poucas coisas e então saímos do shopping. Harry teve a ideia de passarmos no parque antes de finalmente voltarmos para casa. Não está tão tarde, mas o dia já está começando a findar.

Harry me comprou um sorvete, e quando chegamos, inalei com muita admiração o cheiro da grama molhada e o ar puro que tem aqui. Segui o Harry, então sentamos em um banco, lado-a-lado, observando as pessoas caminharem nos arredores. ── Senti muita saudade de ter momentos assim com você. ── ele disse me olhando profundamente, sem sequer disfarçar. Sorri pelo nariz e balancei a cabeça, enfiando uma colher com sorvete na boca.

── Eu também senti saudades, Harry. Estou grata pela sua ajuda e por ter escolhido ficar comigo durante suas “férias”. ── admiti e recostei minha cabeça em seu ombro.

Ele passou a mão por minha cintura e me trouxe para bem mais perto. ── Eu escolheria você mil vezes, S/N.

• • •

• 9° DIA

Harry me convidou para visitar a familia dele. Eu aceitei obviamente, até porque amo todos eles e porque faz tempo que não os vejo, mas converso com Gemma vez ou outra, seja por mensagem ou chamada de vídeo.

Entretanto, ela não mora mais com a mãe.

Inicialmente, não achei que seria uma boa ideia acompanhá-lo, porque eles precisam desse momento em família, mas Harry insistiu tanto que acabei aceitando. De onde eu moro até onde eles moram, são só seis horas de carro.

Saímos cedo de casa e chegamos lá antes mesmo de anoitecer. ── Harry, você avisou a eles que eu viria? ── perguntei nervosa e ele concordou.

── Não precisou. Na verdade, minha mãe quem deu a ideia de virmos juntos. Eu disse a ela que não viria sem você. ── respondeu naturalmente e saiu do carro, abrindo o porta-malas para pegar as pequenas malas que trouxemos.

── Que gentileza a sua, Harry. Mas sabe que não precisaria se preocupar comigo, eu poderia ficar lá para dar privacidade a vocês.

── Claro que não, S/N. Ainda estou na minha super-missão, esqueceu? Além do que, tenho planos para nós dois nos três dias que ficaremos aqui. ── confessou e me agarrou pelo ombro, abraçando-me de lado.

Caminhamos juntos até a porta e quando toquei a campainha, não demorou muito para que quem nos recebesse fosse Robin, o padrasto de Harry. Sorri e me afastei um pouco dele para cumprimentá-lo. ── Oi, Robin! Que prazer revê-lo! ── o homem me abraçou subitamente, me surpreendendo. Sorri e apertei o seu corpo no meu, enquanto ele acaricia as minhas costas.

── O prazer é todo meu, querida. Há quanto tempo não nos falamos. É difícil até saber se você está viva! ── alfinetou-me e eu revirei os olhos, rindo mais um pouco.

── Desculpe. Sabe como é, Robin... Tenho estado ocupada com o trabalho. Pedi licença agora na folga de Harry para passar esse tempo com ele. ── respondi sinceramente e depois, percebi que havia me entregado de graça praticamente. Arregalei os olhos e olhei para o Harry, que me encara tão surpreso quanto seu padrasto.

── S/N...?

── Robin, quem... Ah, olá, queridos! ── Anne entra em cena e se aproxima, me abraçando e em seguida, o seu filho. ── Entrem, por favor! Não fiquem aí fora, está ficando muito frio.

Entramos em casa e imediatamente, um maravilhoso cheiro de frango assado invadiu os meus sentidos. ── Que bom que chegaram a tempo do jantar. Preparei algo para comerem, mas não sabia se chegariam hoje ou não... ── ela ficou nos olhando com um enorme sorriso.

── Obrigado pela recepção, mãe. ── Harry agradeceu e acariciou o ombro dela.

── Não é nada. Quero deixar vocês confortáveis, ── ela pensou um pouco e então, pareceu lembrar de algo ── Ah, Robin! Vá mostrar a eles os quartos em que dormirão. Vou checar o frango! ── e assim Robin o fez.

Harry vai dormir em um quarto bem ao lado do meu e dessa vez, não precisaremos dividir banheiro algum. Isso me deixou bem mais confortável e menos envergonhada.

Pus minha mala no canto da cama e aproveitei os minutos que tenho antes do jantar para tomar um banho relaxante e vestir roupas mais confortáveis. Quando terminei, voltei a descer até a cozinha e encontrei a família Styles sentada à mesa. ── S/N, Harry insistiu para que esperássemos você para começar a jantar. Tudo bem? ── Robin disse quando me avistou e eu balancei a cabeça, me sentando ao lado do meu melhor amigo.

Harry me olhou e sorriu, colocando a mão em meu joelho, o apertando suavemente. Dessa forma seguimos o jantar.

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Vesti meu pijama e me joguei na cama, sentindo-me um pouco cansada. Mas antes de dormir, peguei meu celular e comecei a dar uma fuçada nas redes sociais e, bem... meu nome e o de Harry anda sendo muito comentado nas últimas semanas. Fotos nossas no shopping, entrando na cabine de fotos nesse mesmo dia, quando estávamos no parque. Tiraram fotos do exato momento em que recostei minha cabeça no ombro dele, fotografaram nossos olhares nem um pouco discretos...

E, com isso, bem como era de se esperar, começaram a especular um montão de coisas, acreditando que estamos namorando. Até sobre meu ex descobriram, e também acham que eu estava traindo William com Harry.

Não me importei muito, mas foi só ver os comentários me chamando de tudo quanto é nome que minha naturalidade perante os boatos mudou. Me senti ofendido por ser chamada de vadia, infiel, que eu não sou o suficiente para o Harry...

Tentei não me deixar atingir com a insensibilidade das pessoas,, mas cada comentário que eu leio me instiga a procurar ainda mais a respeito. Entretanto, ouvi batidas na porta e essa foi a minha deixa para fechar o twitter e ignorar essas pessoas por enquanto. ── Entra! ── pedi e foi aí que Harry abriu a porta, colocando a sua cabeça para dentro do cômodo. ── O que foi?

── Posso dormir com você? Houve um problema no ar-condicionado do meu quarto e minha mãe aconselhou que eu não dormisse lá.

── Tudo bem, Harry. Venha. ── dei espaço para que ele deitasse ao meu lado na cama. Ele já foi entrando e ao trancar a porta, deitou-se comigo. Entreguei uma parte do meu cobertor a ele.

── Que cara é essa? ── questionou me olhando sério, como se me estudasse. ── O que aconteceu?

── Nada. ── respondi simplesmente, voltando a colocar meu celular na cômoda ao lado da cama.

── É algo sim. Diga o que é.

── Ah, Harry... ── pensei um pouco e depois de um suspiro, decidi falar. ── Já viu suas redes sociais? O que estão falando sobre nós dois? ── o olhei e ele revirou os olhos, ajeitando o travesseiro abaixo de sua cabeça.

── Já sim. ── respondeu-me ── Há muito tempo, mas não ligo. Você liga?

── Não, mas-

── S/N, não precisa se importar com o que estão falando sobre nós dois. ── me interrompeu ── Sempre vão falar mal de qualquer pessoa que esteja comigo, por causa de ciúmes ou algo assim. Mas, querida... ── ele segurou a minha mão e a ergueu, beijando a sua costa ── Se importe mais com o que eu penso ao seu respeito, com o que estamos vivendo. Logo mais vou voltar a trabalhar e eles vão parar mais de falar de ti.

── Você tem razão. ── sorri minimamente e me deitei ao lado dele. Harry me puxou para que deitasse em seu peito e assim o fiz. ── Acho que nunca me senti tão bem com alguém como quando estou com você, H. É por isso que vou ignorar os seus fãs obsessivos. Porque te amo muito. ── envolvi a sua cintura com meus braços e lhe dei um beijo bem na direção do seu coração e o ouvi suspirar, ao mesmo tempo que sua pele se arrepiou.

Um sorriso presunçoso deixou meus lábios por perceber que minhas ações também podem causar efeitos no corpo dele, assim como as suas causam no meu.

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• 11° DIA

Ontem, fomos ao cinema e jantamos em um restaurante chique com a mãe e o padrasto de Harry. Eles são super legais, foram muito receptivos e apoiaram a ideia de Harry me levar para patinar no gelo hoje.

Essa noite está fria em Londres, por isso, antes de sair, vesti umas roupas quentes e botas nos pés para não correr risco de congelar lá fora. ── Está pronta? ── Harry questionou e eu concordei. Segurei a mão dele e então, caminhamos para fora de casa. Nos despedimos da mãe dele e usamos o carro dela para ir ao nosso destino.

Ele dirigiu calmamente. Uma música tranquila toca baixinho na rádio e por reconhecer a melodia, comecei a cantarolar comigo mesma, prestando atenção nas casas e prédios passando rapidamente pela janela. ── Já patinou antes? ── questionou ele, me olhando por alguns segundos.

── Sim, uma vez na infância e outra na adolescência. ── o vi balançar a cabeça em concordância. ── E não, eu não sei patinar muito bem. ── deduzi que ele perguntaria isso.

Harry sorriu. ── Também não sei patinar muito bem, mas vou te ensinar o que sei.

── Tá bom. ── dei de ombros, sem me importar muito com isso. Não é tão aterrorizante quanto nadar.

• • •

Assim que chegamos, me impressionei com a beleza do lugar. Existem algumas barraquinhas ao redor, e outros compartimentos. Um deles, é uma espécie de “loja” de patins de gelo. ── Ali. Vamos. ── de novo, Harry segurou a minha não e me guiou até lá.

Ele alugou dois pares de patins e me entregou os meus. ── Escolhi brancos para você. Vai combinar com a sua roupa! ── sorri enorme e me sentei em um banco ali perto para calçá-los, enquanto Harry fazia a mesma coisa com os seus.

Por fim, ele terminou primeiro que eu. Tive dificuldade pois minhas luvas são um pouco grossas. ── Pronto? ── perguntou e eu neguei.

── Não consigo amarrar os cadarços. Me ajuda, por favor? ── pedi e ele assentiu, se pondo de joelhos em minha frente, rapidamente amarrando-os, com mais experiência e precisão que eu.

── Ok, agora levanta. ── Harry estendeu suas duas mãos para que eu as segurasse e assim o fiz. Me levantei devagar para não me atrapalhar e acabar caindo. Fomos bem devagar até a pista e então, me desesperei um pouco quando eu comecei a escorregar sem qualquer controle e com muita inexperiência.

── Meu Deus, Harry! ── eu resmunguei assustada e ele riu, ainda segurando firme as minhas duas mãos.

── Calma, mulher! Você não vai cair. ── ele foi se movendo devagar e me levando junto ── Você só precisa se equilibrar. Posso te soltar? ── perguntou todo paciente, rindo de mim ao mesmo tempo.

── Não! Por favor, não me solta. Eu vou cair. ── eu quase gritei e ele revirou os olhos, contra a minha vontade me soltando ── Harry!

── S/N, calma! Só se equilibra, você não vai cair! ── ele foi se afastando de mim, se movendo no gelo de maneira magnífica, me deixando com muita inveja.

Meu único feito incrível foi me manter em pé e não machucar a bunda no chão.

── Harry, eu te odeio... Vou cair! ── minha voz soou embargada e ele, depois que parou um pouco de rir, se aproximou de novo e me segurou pelas mãos.

── Observe! ── logo ele foi me puxando bem mais e pela rapidez dos fatos, me empolguei e comecei a mexer os pés. Arregalei os olhos e olhei para ele surpresa por estar conseguindo. Harry parece bem mais animado que eu, por isso fomos rodopiando alegremente. Eu não consigo parar de sorrir e ele também não. ── Está vendo? Sabia que você ia conseguir!

Só que, em certo momento, acabei me esquecendo de uma importante regra: Manter o equilíbrio. Foi aí que acabei escorregando e o Harry, para não me ver quebrar a cara ao ir de encontro ao chão, ficou na minha frente e obviamente não conseguiu me segurar. Caímos juntos, mas fiquei por cima dele e por causa do medo, acabei fechando os olhos com força e quando abri, percebi os de Harry me fitando em choque.

Nossos rostos estavam bem próximos e, por um segundo, me perdi nos seus lábios, na forma como sua respiração batia em meu rosto. Voltei a olhar em seus olhos e percebi que ele os arregalou minimamente e olhou de volta para minha boca. Então, todo o meu interior pareceu gritar “beija ele logo!” mas antes que fizesse isso, senti uma mão em meu ombro. ── Vocês estão bem? ── perguntou o rapaz, educadamente. Assustada, eu saí de cima do meu amigo e me ajoelhei perto dele, com medo de que possa ter acontecido alguma coisa.

── Estou bem! Harry, você está bem? ── perguntei extremamente preocupada e ele concordou, se sentando no gelo.

De repente, ele simplesmente começou a rir. Rir descontroladamente e isso me deixou confusa. Olhei para o rapaz que veio nos ajudar que também parece da mesma forma que eu. ── Você precisa de ajuda para levantar, amigo? ── perguntou ele ao Harry, que, em meio à sua crise de risos, negou.

Quando o homem foi embora, fiquei o olhando sem entender o seu comportamento. ── Harry, o que deu em você? Acabamos de nos esborrachar no chão e você está rindo?

── É que você tinha que ver o seu rosto, S/N. Estava em pânico por causa de uma pista de patinação?

── Seu cretino! Está rindo de mim? ── semicerrei os olhos e dei um tapinha em seu ombro, mas acabei não resistindo e comecei a rir também.

O ajudei a levantar e então, saímos da pista quando conseguimos nos equilibrar. Harry insistiu bastante para comprar cachorro-quente pra mim e eu aceitei. Antes de voltarmos para casa, comemos um pouco. Tiramos algumas fotos e eu não hesitei em postar no meu feed do instagram.

As fãs dele precisam me aturar agora.

• 13° DIA

Depois de nos “divertirmos” na pista de patinação, Harry ficou com dor nas costas e isso me preocupou bastante, ele ao menos consegue dormir direito. Fomos ao hospital, estava temendo que tivesse quebrado algum osso ou algo assim, mas graças a Deus não foi nada disso. Ele só se machucou, mas o médico passou alguns remédios aos quais ele está tomando mas não parece adiantar muito.

Ele tem dormido no meu quarto desde que voltamos da casa da mãe dele. Acontece que eu faço massagem em suas costas antes de dormirmos e ele acaba caindo no sono na minha cama mesmo e eu fico com dó de mandá-lo para o seu quarto. E também gosto de dormir com ele, o seu cheiro é maravilhoso.

── S/N, pode secar o meu cabelo, por favor? Não quero dormir com ele molhado, vai me dar muita dor de cabeça e quero estar disposto para viajar. ── um sentimento muito ruim se apossou do meu peito quando ele mencionou a viagem que fará em dois dias.

Tentei ignorar isso, no entanto.

── Claro! ── sorri tentando não demonstrar a minha tristeza por saber que logo serei só eu de novo.

Não terei mais o Harry nas manhãs, não vou acordar com a sua linda voz a ecoar do banheiro, não vou mais receber flores, chocolates todos os dias (não que eu me importe com isso, eu só quero ele comigo). Não vou mais receber cafuné quando estivermos na sala assistindo filmes e nem receberei seu abraço quando estiver com insônia.

── S/N? Está tudo bem? ── ele me acordou do meu transe e eu concordei, pegando o secador de suas mãos e o plugando na tomada.

── Está sim, senta aí. ── concordou e eu puxei a cadeira da minha penteadeira para que ele se acomodasse. Peguei uma escova e penteei seus cabelos, os dividindo para tornar a secagem mais fácil.

Comecei o meu trabalho e depois de um tempo, ouvi o toque do celular de Harry – este que está em cima da penteadeira. Ele o pegou e checou o ecrã, mas eu nem prestei atenção, estava bem focada em secar os cabelos dele. ── Ih, é o Niall. Vou atender. Tudo bem pra você? ── arregalei os olhos.

── É... bem, tudo. Tudo bem sim. ── tentei fingir naturalidade com o fato de Niall Horan estar ligando para ele.

Assim que percebi que era uma chamada de vídeo, quase infartei. ── Harry! Finalmente estou te vendo. Você prometeu que ligaria! ── ele falou do outro lado da linha, quase gritando com o Harry e eu reprimi a risada.

── Eu estava ocupado, Niall. Você sabe bem. ── respondeu sério e eu engoli a seco.

── Espera, quem é essa aí atrás de você? ── Harry mirou ainda mais a câmera na minha direção e eu quase bati com o secador na testa enorme dele.

É Niall quem está do outro lado da linha e eu só estou vestindo a droga de um pijama!

── A S/N! Diga “olá” para ela. ── Hazz pediu ainda com o celular no meu rosto. Sorri sem graça e acenei para o homem do outro lado da linha, que também sorri bastante mas não é pelo mesmo motivo que eu, aparentemente.

── Oi, S/N! ── Niall acenou de volta ── Harry fala muito de você, sabia? Eu estava louco para te conhecer.

── Ah, Niall. Não enche! ── ele afastou o celular e continuou conversando com o amigo, animadamente.

Niall só ligou para falar que está com saudades e avisar que, em dois dias (que seria o dia em que Harry vai embora) seus colegas de banda pousarão aqui para que possam ir juntos e economizar tempo.

Novamente, fiquei triste. Esses dias se passaram tão rápido, quase não notei. Vai ser doloroso ficar sem o Harry, sem o meu Harry... mas eu preciso me acostumar com essa ideia. Não posso ficar dependente dele (mesmo eu achando que já estou).

Terminei de secar o cabelo dele e desliguei o secador, me jogando na cama, sem conseguir esconder minha expressão insatisfeita. Quando Harry encerrou a ligação ele se deitou ao meu lado e obviamente perguntou, porque percebeu o meu comportamento. ── Não é nada demais. ── respondi, tentando engolir o choro. Mordi a parte interna de minha bochecha e até evitei olhá-lo nos olhos.

── Claro que há alguma coisa, querida. Diga-me, o que te aflige? ── Harry segurou o meu queixo e me fez olhar para ele. Um vinco se formou em suas sobrancelhas ao perceber meus olhos brilhando e quando ele me abraçou, não consegui me conter. Simplesmente desmoronei. ── S/N, o que está acontecendo? Você está me assustando!

── Vou sentir saudades, Harry. Não queria que você fosse embora. ── agarrei o seu corpo como se minha vida dependesse desse toque, como se fosse acordar a qualquer momento e perceber que tudo não se passou de um sonho e que ainda estou sofrendo pelo cretino do William.

── Ah, meu bem... ── ele acariciou as minhas costas, beijando o meu cabelo repetidas vezes ── Não pense nisso agora, mhm? Eu estou aqui, não estou? ── falou como se fosse fácil, como se ele não fosse me deixar em dois dias. ── Amanhã vamos jantar fora, quero que me faça companhia. Ok? Não chore, S/A!. ── me empurrou um pouco para que pudesse enxugar as minhas lágrimas ── Você é linda, sabia?

── Não! ── respondi ao revirar os olhos e ele sorriu.

── Pois saiba que pra mim, você é a mulher mais linda do mundo! ── meu coração acelerou com as suas palavras. ── Não te quero chorando mais, me ouviu? Vamos viver o hoje, não pensa no amanhã, S/N!

── Mas-

── Eu tô aqui, não tô? ── concordei ── Então. Me aproveita enquanto estou contigo hoje, meu amor. ── e, novamente, Harry Styles me fazendo derreter com simples palavras.

Dormi nos braços dele e me senti tão confortável, segura, protegida...

De repente, não haviam mais viagens, shows, banda, fãs, meu ex, ódio ou qualquer outra coisa. Só Harry e eu.

• 16° DIA

É hoje.

Antes de sair do banheiro, chorei tanto, mas tanto, que acho que nem somando todos os anos da minha vida até aqui, as vezes que chorei não chegam nem perto do tanto de lágrimas que derramei por saber que Harry está indo embora.

Vê-lo arrumando as malas dói. Doeu ontem quando chegamos do restaurante e ele precisou organizar tudo para sairmos cedo hoje.

A propósito, ontem foi incrível. Jantamos juntos, conversamos sobre tantos e tantos assuntos, caminhamos de mãos dadas sob a luz da lua... nesses dias que passei ao lado do Harry, eu me senti em um verdadeiro conto de fadas. Fui tão feliz que a cada dia que acordava, era como se estivesse sonhando. Eu dormia ansiosa pelo amanhecer, para que pudesse vê-lo e colocar em prática os seus planos mirabolantes.

Harry me fez esquecer o meu ex sim e não só isso... ele me fez feliz. Genuinamente feliz. Ele me fez esquecer da minha dura rotina, me fez esquecer que estou sofrendo por não saber qual faculdade cursar, estar em dúvida se cursar uma faculdade é o que eu realmente quero... Me fez esquecer o dilema que enfrento todos os dias.

E como se não bastasse apenas superar o meu ex... Também estou apaixonada pelo Harry.

E é por isso que dói tanto vê-lo partir. A incerteza, a dúvida... Dói tanto, como se fossem diversas facadas diferidas em meu peito. Fico o observando caminhar pelo aeroporto em busca de seus amigos (que não estão esperando-o aqui, mas no avião. Eles queriam evitar mais tumultos).

Ao pararmos em frente ao portão de desembarque, Harry para e me olha. Eu ainda estou com o rosto inchado por ter chorado tanto e por não conseguir parar. Nunca pensei que uma despedida poderia doer tanto. ── Ô, anjo... Odeio te ver assim. ── ele se aproximou e passou o polegar por meu rosto. Solucei e abracei o seu corpo, muito, muito forte.

── Vou sentir saudades, Harry. Já estou sentindo. ── falei com a voz mais baixa por estar com o rosto enfurnado em seu peito.

── Eu também, S/A... Eu também! ── ele acariciou os meus cabelos e deixou um beijo no topo de minha cabeça. ── Logo mais vamos nos ver de novo. O tempo passa muito rápido, você sabe.

── Eu espero que sim. Mas vai ser uma tortura esse tempo sem você. ── Harry sorriu e se afastou para olhar-me nos olhos.

── Eu quero que você me garanta que vai ficar bem, que vai se valorizar e não chorar mais por aquele moleque. Ele não te merece, S/N! ── ele segurou o meu rosto para que eu não desviasse o olhar ── Me prometa!

── Eu vou ficar bem, Harry. Prometo. E eu não vou mais chorar pelo William. Nunca mais. ── fui sincera em cada palavra, até porque, depois de tudo o que eu vivi, não poderia me contentar com menos de tudo o que Harry me proporcionou. Todas as sensações, os sentimentos...

── Então acha que já é mais fácil superá-lo?

── Não fale isso, Harry. Eu já superei o William. Você realmente fez tudo parecer mais fácil! ── seu sorriso alargou-se e, novamente, ele me abraçou.

── Fico tão feliz em ouvir isso, gatinha. De verdade.

── Obrigada por me proporcionar tudo isso, Harry. ── eu disse, olhando nos olhos dele.

── Ora. Estou aqui para te ajudar, querida! ── sorri em meio as lágrimas.

── Eu te amo, Hazz. Amo de verdade. ── eu falei de coração, mas sei que ele não entenderia.

Os olhinhos dele brilharam ao me ouvir.

Na verdade, acho que parte de mim sempre amou o Harry. De um jeito diferente... Sempre soube que havia algo errado. Só não queria acreditar.

── Eu também te amo, anjo! Amo muito! ── fez menção de falar alguma coisa, mas seu celular tocou e ao checar, ele suspirou. ── São os meninos. Eu tenho que ir. ── concordei e me afastei, acenando brevemente para ele.

── É... Nos vemos em breve? ── perguntei com um meio sorriso e ele assentiu, convicto.

── Mais breve do que você imagina, meu amor. ── surpreendendo-me, Harry se aproximou e me deu um selinho demorado, em seguida um outro. Depois de murmurar mais um “eu te amo” ele foi embora, rapidamente sumindo entre as pessoas.

Ah, Harry. Se você soubesse que meu problema já não é mais o meu ex...

[kiki-de-la-petite-flaque]

Ella era tan linda como

yo feo, era tan rica como

yo pobre y por si fuera poco,

tímido. Pero un día me animé

y cuando ya había pasado le

dije casi cobardemente: te amo,

ella se detuvo, se dio la vuelta y

me dijo, yo también, entonces;

Se me escaparon de las manos

los globos que vendía en la plaza

y el cielo del sábado se llenó de colores.

Facundo Cabral

[shemakesnoisefestival]

SHE MAKES NOISE FESTIVAL

IX Edición - del 19/10 al 22/10 - 2023

La Casa Encendida (Madrid) 

Entradas disponibles en:

https://www.lacasaencendida.es/festival/she-makes-noise-2023

Un proyecto de Playtime Audiovisuales y La Casa Encendida Comisariado por Natalia Piñuel y Enrique Piñuel

Gráfica diseñada por: Las Lindas Pobres x Juan Ramírez & Eduardo Mascías

[harrrystyles-writing]

Home

Sinopse — Onde Harry faz uns surpresa para sua esposa.

Personagens— Marido!Harry x Esposa!Leitora.

Pedido anônimo

Masterlist✨

Harry sabia muito bem que não era tão presente na vida de sua esposa quanto gostaria, mas sempre fazia o possível para compensar sua ausência, como esta noite em que ele nem mencionou sua chegada antecipada só para fazer uma surpresa para ela.

Ele estava preparando o jantar na cozinha quando ouviu a porta se abrir, sua linda esposa logo entrou parecendo um pouco cansada, mas assim que o viu um sorriso genuíno surgiu.

"Harry." Ela gritou. "Você está aqui, como?"

"Surpresa!"

Ele estava lá de pé com aquele avental fofo e seu sorriso com as covinhas em suas bochechas e S/n sentiu que poderia chorar de saudade. Ela correu até ele, Harry a envolveu em um abraço com amor, ela enterrou a cabeça na curva do pescoço dele sentindo o cheiro familiar que tanto fez falta.

"Está com fome?" Ele murmurou ainda em seu abraço.

"Muita, o que está cozinhando?"

"Lasanha."

"Essa é a minha comida favorita." Ela sorriu, os olhos enchendo de lágrimas.

Harry era o marido mais doce que S/n poderia desejar, ela se inclinou para beijá-lo, isso fez seu coração disparar.

Quando ela se tornou tão sortuda?

"Agora eu preciso terminar de cozinhar, a comida está quase pronta." Ele riu ao vê-la não se soltar.

"Eu quero ajudar." S/n fez um biquinho indo pegar uma colher e tentar mexer o molho na panela, mas Harry rapidamente envolveu seus braços musculosos em sua cintura, puxando-a para trás de forma que suas costas ficassem em contato com o peito dele.

"Não!" Ele a guiou para fora da cozinha. "Hoje é comigo, você só aproveita."

"Mas, Harry!"

"Não, não."

Assim que a lasanha estava no forno, ele serviu duas taças de vinho e ouviu-a falar sobre seu dia com um sorriso bobo. Um suspiro profundo e apaixonado saiu dos lábios dela ao ver a mesa tão bonita que seu marido havia preparado nos últimos 5 minutos, ela estava pensando em Harry o dia todo e não suportava ficar longe de dele, essa foi a parte mais difícil em aceitar ao se casar com ele.

"Está realmente lindo." S/n deixou beijos suaves nos lábios de Styles antes de se sentar e esperar ser servida.

"O melhor para você." Ele sorriu entregando o prato cheio a ela.

"Você pode se sentar ao meu lado hoje? Por favor."

Era um costume ambos sentarem frente a frente, mas a pobre mulher queria seu marido por perto um pouco mais.

"Claro." Ele riu e obedecendo.

E assim que ele sentou, imediatamente uma de suas mãos foram para a coxa dela, ela por um segundo abraçou seu braço enquanto descansou sua cabeça em seu ombro.

"Senti sua falta." Murmurou baixinho, mas ele ainda a ouviu.

"Eu também, não sabe o quanto." Seu peito doeu de saudade.

"Me beija." Ela sussurrou.

Ele sorriu, antes de seus lábios tocarem os dela em um beijo apaixonado que seus corações pareciam estar derretendo de puro amor.

"Eu te amo." Disse ele.

"Eu te amo mais."

Então pelos próprios 40 minutos ele contou de sua viagem, sobre seu trabalho, planos de novos projetos e lugares que viagou, também a ouviu falar sobre seus dias sem ele, seu emprego e o quanto estava se esforçando para uma promoção, Harry a animou dizendo o quão orgulhoso ele estava por ela ser bem-sucedida e incrivelmente boa no que faz e que com certeza aquela promoção seria dela.

Ela casou com o homem certo.

"Você sempre se supera, Sr. Styles." Ela acariciou sua nuca. "Um dos melhores jantares da minha vida, muito obrigada."

"Agradeça pela manhã querida, ainda não acabou."

"Não?"

"Não! Eu, você e nossa cama mais tarde, espero que não esteja com muito sono porque você terá uma longa noite, Sra. Styles."

"Nunca estou cansada para você meu amor."

Muito obrigada por ler até aqui! Se gostou fav, reblogue ou deixe uma ask, isso realmente é muito importante para mim 🥺♥️

[baki-tiene-un-simp]

¿Cómo serían Spec, Dorian y Shibukawa como abuelos? Pregunta rara pero necesaria

Contenido en español 💕 Mi pobre cerebro que apenas sabe escribir una oración con sentido en inglés quiere un descanso, así que escribiré esto.

Situación: Abuelos headcanons.

Personajes: Dorian, Gouki Shibukawa y Spec.

Dorian.

Es un abuelo tranquilo al que le diagnosticaron un cierto grado de demencia. Ya no es capaz de valerse por sí mismo, pero al menos es fácil tratar con él.

Dentro de lo malo de tener un familiar que padece de demencia, Dorian es bastante tranquilo y fácil de tratar, se entretiene cuando sus nietos se sientan con él a platicar.

Necesita cuidados y no es recomendable dejarlo solo mucho tiempo, puede lastimarse.

Su mente está al nivel de la de un niño, es un poco triste escucharlo hablar consigo mismo sobre lo feliz que se siente por ser un niño y como pide cosas que en el pasado no pudo tener.

No reconoce a sus nietos como tal, es decir, como los hijos de sus hijos, pero reconoce sus rostros y sabe que los quiere mucho, así que siempre está feliz de verlos.

Gouki Shibukawa.

Es un gran abuelo, muy bromista y relajado, pero extremadamente sabio. Está dispuesto a escuchar los problemas de sus nietos e hijos, consolarlos y regalarlos si es necesario.

Quiere mucho a su familia, pero a veces le divierte jugarles un par de bromas, ya sabes, cuando habla sobre el aikido y de la forma en que arrojo al suelo a un sujeto que le triplicaba el tamaño. A él le provoca mucha gracia los rostros que hacen sus hijos.

La clase de abuelo que le da dinero a escondidas a sus nietos, no es para nada malo, pero él solo les pasa un billete por debajo de la mesa a sus nietos como si fuera algo malo.

Se ve como la clase de abuelo que quiere muchas nietas, son tan lindas y su risa es la cosa más linda que ha escuchado, él es feliz con sus nietas.

Abuelo que cuenta anécdotas sorprendentes, sobre como ha derrotado a tantas personas, incluso a su edad.

Spec.

Él es extraño.

Es ese abuelo problemático que hace cosas muy peligrosas a su edad y le provoca sustos de muerte a sus nietos. Deben vigilarlo siempre o se meterá en problemas.

“¿Quién es el señor que se está bañando en la fuente?” Lo dejaste solo unos segundos, solo unos segundos.

No tiene demencia, de hecho, los médicos dicen que está tan sano como un hombre joven. A él solo le gusta causar problemas a los demás, cree que es gracioso.

Suerte al intentar dejarlo en una casa de ancianos, probablemente se escape para causar problemas, tampoco es buena idea dejar que viva solo. Alguien debe estar a su lado para que esté tranquilo.

[agsbf]

La Squadra Esecuzioni, mas eles são de um jogo otome. #1 (PESCI)

Faculdade AU!

Créditos de imagem

Sinopse: La Squadra Esecuzioni, os famosos párias dispensáveis da universidade. Um circulo social caracterizado por 7 homens com personalidades distintas que finalmente encontram um pouco de amparo em você.

PESCI:

Não possuindo muita confiança, Pesci é o clichê do garoto ofuscado pelo irmão junto ao estereótipo de personalidade tímida.

Provavelmente te conheceu em um trabalho que o professor te designou junto a ele.

Não falava muito no inicio, apesar de tentar ser o mais prestativo possível fazendo bem mais do que você pediu na parte dele do projeto.

A amizade floresceu após ver que tinham mais em comum do que pensavam, sua persistência em se tornar amiga dele fez seu pobre coração derreter, já que o rapaz estava acostumado a ser evitado como uma praga por sua aparência e personalidade reclusa.

Tê-lo defendido de alguns valentões mais velhos iniciou a rota romântica, embora vocês dois mais apanharam do que bateram.

Ao chegar em casa com ferimentos, recebeu um longo sermão do irmão sobre a falta de autodefesa e a necessidade de ser sempre protegido. Ele se sentiu envergonhado, não por levar uma surra, mas por te arrastar para essa merda junto.

No dia seguinte, bateu nos valentões ao ponto de serem hospitalizados. O rapaz sabe ser intimidador quando quer.

Quando você vem preocupada até Pesci perguntando-o por qual razão fez isso, seu coração acelera com sua expressão entristecida pela possibilidade dele ter se machucado.

A transição pro status de relacionamento de amigo para casal se mostrou lenta e sútil, começando com o estudante corando com mais frequência ao conversar contigo, aos poucos se tornando mais afetuoso até o dia da confissão.

Uma das clichês e fofas possíveis, a famosa carta anônima (escrita com a ajuda de Prosciutto) colocada dentro do armário revelando seus verdadeiros sentimentos:

" Sempre que fico perto de você me sinto o cara mais corajoso do mundo, não aquele covarde que demonstra pânico no menor sinal de perigo, nem aquele cujo qualquer um pode pisar; ao seu lado sinto capaz de enfrentar qualquer perigo a minha volta, pois nenhum se compara ao medo de te perder.

Por favor, se encontre comigo em frente a Vila Floridiana."

Ele estava com sua melhor roupa, esperando ansiosamente pela sua presença, todavia a inquietação era um sentimento igualmente presente e um amargo lembrete de como hoje tudo poderia dar errado, não só pela recusa que pressentia, mas em como suas emoções gerariam o fim de uma amizade significativa.

Ao te ver seu queixo caiu, você estava tão deslumbrante como sempre, não apenas no quesito de aparência, pois Pesci te acharia linda mesmo se estivesse no estado mais deplorável. Todavia sua expressão solene, seu olhar doce e sua expressão alegre o fez relembrar o motivo de te amar tanto.

Imediatamente pede desculpas por não se contentar em ser apenas seu amigo, tímido enquanto verbalizava toda sua paixão, e se preparando mentalmente para sua rejeição.

Exceto que ela nunca aconteceu.

Quando a resposta que recebeu foi que compartilhava os mesmos sentimentos, o rapaz ficou desacreditado, depois em puro êxtase, não entendendo como a garota era capaz de se sentir assim em relação a ele, mas extremamente feliz, te beijando e abraçando logo em seguida.

Foi o dia mais feliz da vida dele (e ele ficou horas contando ao irmão sobre como foi o encontro, pobre Prosciutto.)

Curiosidade: Apesar da rota dele ser a mais fácil, é aquela cuja a conquista mais difícil está presente, chamada de "duro de roer" se trata de obter 100% da aprovação do loiro no evento "Conhecendo o cunhado" em que o mais velho lhe faz 45 perguntas para ver se é namorada decente para Pesci, já que pessoas podem se aproveitar de sua ingenuidade.

[las-microfisuras]

El amor

... bello era trattare al quanto d’amore.                          (Dante, Vita Nuova) I No te quiero como una mancha inerme entre dos fechas con los habituales testigos que componen toda historia disueltos en la cruz de la ventana —transida vena—. No es el amor ni es negocio del alma, es un agradecimiento dispar y sin rigor, redención parapetada en los atardeceres que demora el aire muerto de los espejos, mi orgullo esquivo y tu aliento mojando la ciudad dormida y admirable. No es el amor ni es negocio del alma, es la acción particular del tiempo, y debes saberlo, porque las horas que declaro ciertas estaban gobernadas por el único metal que escucha: el fuego. Las magias empezaban, cuando la seda lejana de una corneta llegaba desde el río humoso, alzaba su voz, radiante aviso, y en las aguas mugían —¿por qué no? — los toros inmolados a Neptuno. Empezaban junto a los pudorosos y distantes versos ingleses donde el anónimo amador decía que el amor bueno es siempre moderado y dura toda la vida. Junto a la estampa representando la fantasía, esa mujer tan accesible y suntuosa, rondada su frente por las hojas. ¡Qué compacta cabellera! ¡Qué manos tan lindas crispadas sobre las telarañas! Estampas de la moda elegante ilustrada, con patos, sombrillas, perfectos jardines disfrazando la tierra, y los helechos finamente muertos. No es el amor ni es negocio del alma, es mejorar con palabras lo que creemos oír por primera vez. Las pruebas del amor, mitad esperanza, mitad sueño, varían desde la enajenación hasta una flor ciega, pero nos damos cuenta que ese seguro misterio está ordenado para que los hombres se crean iguales o mejores. No es el amor ni es negocio del alma, ahora, la hiedra del deseo, la revolución del deseo, la honradez del deseo, el deseo probando en su cárcel al cuerpo dócil. El deseo, mira que reinado tan triste. II Lo olvidan, porque el amor no es una quieta felonía hecha para deleitar la suficiencia. Y nadie sabe qué misteriosa costumbre de huérfano, qué sentenciado linaje de mentira, impulsa a cada cual a buscar su énfasis. Basta ser avizor y buen jinete del ocio para verlos subidos a los hombros semejantes, arder en mudos círculos, calculando sistemas de vida con egoísmo tan fino que por cada cosa pisoteada -la ausencia, la pasión de las manos- se desangran de respeto, mientras los convierten en una frecuentada vegetación de ejemplos vacíos, oráculos del cuerpo y nada más. Y casi todos piden justificación, si la verdad es blanca por hábito, si la bondad es apenas una sombra muy nombrada, piensa cómo duermen, duermen solamente, esas increíbles, rutinarias lombrices, que se llaman a sí mismas dedos de la tierra, oídos de la tierra, y son incapaces de recordar el camino hecho. Piensa que nacieron humanas, y que alguna vez merecieron la sombra algodonosa de un parque, el sagrado temor por ciertos olores, y aun el amor: sin detenerse, porfiado y ciego como un péndulo, o sea la forma más pobre de la soledad. Lo olvidan, porque el amor no es fácil, ni pronta demencia, ni oficio, y toda fe tiene sus despropósitos. Pero son valientes, son valientes sin saberlo esos bellos y feos espectros en su prolija abdicación del ánimo. - Alberto Girri, de Playa sola (1946), en Obra Poética I, Corregidor, Buenos Aires, 1977.]

[nucleo-sin-electron]

MUCHO MÁS GRAVE

Todas las parcelas de mi vida tienen algo tuyo

y eso en verdad no es nada extraordinario

vos lo sabés tan objetivamente como yo.

Sin embargo hay algo que quisiera aclararte,

cuando digo todas las parcelas,

no me refiero sólo a esto de ahora,

a esto de esperarte y aleluya encontrarte,

y carajo perderte,

y volverte a encontrar,

y ojalá nada más.

No me refiero a que de pronto digas, voy a llorar

y yo con un discreto nudo en la garganta, bueno llorá.

Y que un lindo aguacero invisible nos ampare

y quizás por eso salga enseguida el sol.

Ni me refiero a sólo a que día tras día,

aumente el stock de nuestras pequeñas y decisivas complicidades,

o que yo pueda o creerme que puedo convertir mis reveses en victorias,

o me hagas el tierno regalo de tu más reciente desesperación.

No.

La cosa es muchísimo más grave.

Cuando digo todas las parcelas

quiero decir que además de ese dulce cataclismo,

también estas reescribiendo mi infancia,

esa edad en que uno dice cosas adultas y solemnes

y los solemnes adultos las celebran,

y vos en cambio sabés que eso no sirve.

Quiero decir que estás rearmando mi adolescencia,

ese tiempo en que fui un viejo cargado de recelos,

y vos sabés en cambio extraer de ese páramo,

mi germen de alegría y regarlo mirándolo.

Quiero decir que estás sacudiendo mi juventud,

ese cántaro que nadie tomó nunca en sus manos,

esa sombra que nadie arrimó a su sombra,

y vos en cambio sabés estremecerla

hasta que empiecen a caer las hojas secas,

y quede la armazón de mi verdad sin proezas.

Quiero decir que estás abrazando mi madurez

esta mezcla de estupor y experiencia,

este extraño confín de angustia y nieve,

esta bujía que ilumina la muerte,

este precipicio de la pobre vida.

Como ves es más grave,

Muchísimo más grave,

Porque con estas y con otras palabras,

quiero decir que no sos tan sólo,

la querida muchacha que sos,

sino también las espléndidas o cautelosas mujeres

que quise o quiero.

Porque gracias a vos he descubierto,

(dirás que ya era hora y con razón),

que el amor es una bahía linda y generosa,

que se ilumina y se oscurece,

según venga la vida,

una bahía donde los barcos llegan y se van,

llegan con pájaros y augurios,

y se van con sirenas y nubarrones.

Una bahía linda y generosa,

Donde los barcos llegan y se van.

Pero vos,

Por favor,

No te vayas

- Mario Benedetti