#organizando mi maquillaje

[olee]

Mini Crush | Agustín Pardella

Para: @stuckwthem

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Admítelo, Agustín lleva más de dos horas mirándote durante el set. Incluso Bayona le ha pedido millones de veces que se concentre. Tú, como maquilladora, estabas ocupada organizando modelos de goma para la piel y mezclando pintura que simulara sangre. Tu compañera de trabajo te dice: "tómate un descanso. Yo me encargo y ve a almorzar". Siguiendo su consejo, decides ir a una cafetería cercana al set y pides un sándwich.

Al ordenar, te sientas en un banco y disfrutas de un poquito de sol con tu batido de mango. Después de tantas horas en el set, Bayona insiste en cambiar constantemente el maquillaje debido al frío y al desarrollo de los personajes, haciéndolos más pálidos. Incluso ha dado indicaciones a los maquillistas sobre la importancia de adaptarse a las condiciones y mantener la coherencia visual de la película. Mientras disfrutas de tu almuerzo, reflexionas sobre la exigencia del trabajo y cómo cada detalle contribuye al éxito de la producción.

Sentada, cierras los ojos y respiras profundo. De repente, entra Agustín del set, prendiendo un cigarrillo y con un tono tímido y casi temblando, dice: "eh… ¿cómo te llamas? Es que… como que lo había… esto… olvidado". Tú, con una expresión entre sorprendida y maternal, le respondes: "Creo que te he dicho mi nombre como tres veces hoy, pero, ni modo, mi nombre es (dices como una madre hablándole a su niño) (tu nombre)". Agustín te mira confundido y suelta un incómodo "Claro, eh… bueno, te veo luego en el set".

Te despides con un simple "te veo", y Agustín se va, pero como la puerta es de cristal, choca fuertemente con ella y suelta un sonoro "Me cago en tu puta madre!". Ríes mientras te levantas y le preguntas con preocupación, pero aguantando la risa: "¿Estás bien?". Él te mira, y luego te das cuenta de que está soltando sangre por el labio. Sin perder el humor, le dices: "Vente, creo que tengo algo para el labio". Él te sigue al set como un niñito, mientras intentas no reírte demasiado de la situación.

Al llegar al set, le indicas a Agustín que se siente, y de repente aparece Simón, diciéndole a Agustín: "¡Boludo! No tenías que irte tan profundo con el beso—" Agustín lo interrumpe rápidamente: "Cállate, que estás enfrente de (bajando la voz para que tú no escucharas) (tu nombre)". Simón responde con un tono juguetón: "Ay, deja esa bobería—" Agustín corta de nuevo: "Boludo, vete pa’ allá, y déjame tranquilo". Simón levanta los brazos diciendo: "Ay, perdón, cabrón", y se va. Mientras tanto, tú buscas alcohol, un algodón y una curita transparente, ya que vas a poner maquillaje. Pero te detienes y le dices a Agustín: "Sabes, no te tengo que echar maquillaje ahí, ya que lo tienes cortado, así que está perfecto. Déjame limpiarlo y voy a ver qué puedo hacer con ese labio", observas el labio de Agustín pensativamente.

Sin embargo, él te mira y se queda observando también tus labios. Cuando te das cuenta, sonríes nerviosamente y lo ignoras, buscando el alcohol en la mochila. La situación se vuelve un tanto incómoda, pero sigues concentrada en cuidar el labio de Agustín mientras intentas apartar cualquier pensamiento incómodo de tu mente.

Cuando ya tienes todos los ingredientes listos, escuchas la voz autoritaria de Bayona anunciando que la hora de descanso ha llegado a su fin. Sin perder tiempo, le aplicas un poco de labial a Agustín, quien te sigue mirando con timidez, su rostro aún enrojecido. Mientras le das un retoque al maquillaje, añades un toque de sangre seca y palideces ligeramente su tez para ajustarlo al estilo del personaje.

Cuando Agustín se prepara para dirigirse al set, te agradece con sinceridad: "Gracias... eh... eres la mejor". Antes de irse, como un gesto inesperado, te planta un besito en el cachete, dejándote sorprendida y sonrojada. Agustín se va saltando como un niño lleno de alegría. Quedas allí, con una sonrisa en el rostro, apreciando el gesto espontáneo y agradecida de haber logrado un toque especial en el maquillaje y en el ánimo de Agustín.

*thanks por la idea, lo terminé temprano por la emoción lol!

[humanspacevoltt]

Ya me tomé mi pastilla pero sigo pensando. Por qué no puedo crecer? Es maravilloso que aquí nadie sepa quién soy, porque es algo de lo que me avergüenzo. Mis papás me mantienen y no solo a mí, también a mi hija. En algún momento he hecho mi esfuerzo por generar también algo de dinero, pero siempre me desanimo cuando las cosas no salen como deben, cuando no llegan clientes y dejo todo de lado. Me tienen muy mimada, mi mamá me dice que es porque siente culpa de que ella me "robó" mi infancia pues pasé años muy difíciles a su lado, y ahora agradezco infinitamente que ella esté para mí porque sé que si no la tuviera quizás yo no tendría casi nada y tampoco sabría bien qué hacer con mi vida. O quien sabe, quizá si yo dejara de permitir esa sobre protección ya estaría más cerca de lo que se puede llamar éxito en la vida. No sé, una casa, un auto. Lo cierto es que no es así, no crezco, tengo 27 ya lo dije? Y no tengo casa, trabajo y tampoco un auto, tengo a mi mamá que me da todo lo necesario pero que yo cada vez siento más culpa. Y no crezco ni económicamente ni en personalidad. Me ofende cuando un niño, adolescente me dice señora, cuando ellos me ven mayor porque yo me siento una jovencita, temerosa, sin fuerzas para realizar trabajos rudos por ejemplo. Quisiera vestirme siempre como una muchacha, quisiera nunca llegar a la etapa donde una mujer se ve completamente como una señora, el cabello, el perfume, maquillaje, absolutamente todo las delata y yo no quiero envejecer. Sé que ahora que soy madre tengo que madurar, pero una vez más me pregunto, cómo? Si esa mujer no soy yo. Pero se que tampoco soy una adolescente, no soy una preadolescente, no tengo ni siquiera 20 añitos, tengo 27 y temo que no tengo logros. Ni siquiera fui a la universidad. Esta madre quiero darle a mi hija? Tengo una necesidad enorme de crecer, pero no quiero. Se entiende? Necesito pero no quiero... Quiero ser una bruja, una patinadora, sanar con mis manos, aprender todos los idiomas, estudiar licenciatura en idiomas, quiero bailar ballet aunque ya no sea profesionalmente, quiero tener un novio y vivir momentos románticos. Cuando le dije esto a mi psicóloga ella dijo "hablas de la edad, pero yo soy abuela y si me vieras danzando qué dirías?" Ella es abuela, es algo grande y es tan libre, que su actitud la hace ver más joven de lo que ella es. Ella sigue sus sueños y justo eso es lo que amo de que ella sea mi psicóloga, porque no me dice que lo que pienso o anhelo esté mal, al contrario, ella me anima a ser y hacer todo lo que está en mis sueños. Quizá en vez de pasar tanto tiempo mirando el celular, debería pasar más tiempo organizando mi día, si es verdad que quiero hacer todo eso, pero también soy madre y soy de las mejores madres que hay en cuanto a atención a mi hija así que tengo que dejar lo que no importa a un ladito y centrarme en mí y en ella. En los hubbies, en las metas, en la moda, en los idiomas, en que ella coma saludable y aprenda lo que es de acuerdo a su edad, en educarla, en que ella también se divierta. Y debo dejar de sentirme pequeña y de querer ser pequeña. Porque acabo de descubrir hace días que yo quiero tener un cuerpo pequeño (cosa que no tengo en cuanto a peso) con cara pequeña, facciones pequeñas, tal vez no quiero ser vista como una madre o como una señora sino como una niña pero NO LO SOY. Eso es algo importante, que no soy eso que tanto admiro, soy una mujer única que debería agradecer y enorgullecerse de quién le ha tocado ser. Una vez la psicóloga me dijo que notó que yo dije que tengo mis "sueñitos" como si fueran pequeños, pero no lo son. Son sueños grandes, de una mujer, de una madre. Hace cuatro años obtuve el título de madre y lo feliz que me hizo no se puede describir en palabras pero ahora quiero hacerle un homenaje en vida a la palabra mamá, que mi hija sienta de verdad una madre. Pero también quiero hacerle homenaje a la palabra mujer. Porque también soy una mujer, con anhelos, SUEÑOS con mayúsculas y metas, con diversiones y pasatiempos, con deseos.

Quizá deba leer esto cada día para recordarme lo que la mujer que hay en mí siente y desea.

[you-moveme-kurt]

Glee «Super alone»

Enero de 2012

-¡Señora Anderson!… —exclamo Kurt al encontrarse cara a cara con la mamá de su novio en la puerta de entrada de la casa, estaba a punto de anunciar su llegada con unos cuantos golpes pero Pam se había adelantado a aquello. -Hola cariño… estaba en la sala arreglando mi bolso y te vi pasar, aunque casi no te reconozco, debo decir… —respondió señalándolo con la tostada a medio comer que tenía en una mano. -¿Si?... -Obvio… —insistió Pam volviendo a lo de  señalarlo, esta vez con la taza de café que sostenía en la otra. -Ah… —exclamó Kurt cayendo en la cuenta del «outfit» que había escogido esa mañana— se que no es lo que usualmente llevo, pero… aun no estoy listo… —respondió arreglándose la sudadera con capucha que llevaba— tengo una idea de que usar  hoy, pero necesito tomar prestadas algunas cosas de su hijo… -¿Como eso que llevas ahora?... —pregunto masticando pan y bebiendo café. -¿Que?, ¡no!… bueno, si… pero él no lo sabe... -Oh…entiendo… nada mejor que robar ropa a tu novio, yo lo hacía todo el tiempo—dijo Pam haciendo un gesto cómplice con el novio de su hijo— pero pasa por favor… —agrego haciendo las señas respectivas, Kurt sonrió y cruzó el umbral que los paraba de la  calle de la casa de Anderson. -¿Esta atrasada?... —pregunta al  ver que la mamá de Blaine trataba de comer, arreglar su bolso, beber café y corregir su peinado y maquillaje, todo al mismo tiempo. -Un poco cariño… reunión de última hora… en realidad no es de última hora, pero con todo esto qué le paso a Blaine, perdí como 2 días de trabajo… —Kurt frunció el ceño— es decir, no quiero decir que cuidar a mi hijo sea una pérdida de tiempo, es solo… ¿me entiendes verdad?

-La entiendo, perdón por el gesto, fue inapropiado…—se excuso Kurt mirando hacia la sala— ¿el señor Anderson no esta? -No, ya se fue a trabajar… y yo sigo aquí… —respondió volviendo a mirar dentro de su bolso. -Claro… ¿Blaine esta dormido?... —pregunto apuntando hacia el segundo piso. -No lo se cariño, le di su medicación a las 5 y creo que después se volvió a  dormir… ¿qué tal si vas a ver?…—dijo antes de quedarse con el trozo de pan en la boca para usar sus dos manos y registrar una carpeta que tenía múltiples papeles de colores. -¿Necesita ayuda?, soy muy bueno organizando cosas… —se ofreció Kurt mirando aquel desorden con un poco de mala cara. -No  cariño… tranquilo, solo estoy revisando si tengo todo.. y lo tengo… ahora… —Pam tomó la taza y se bebió todo el contenido de un solo trago— quedas en tu casa cariño… —añadió tomando la carpeta, colgándose el bolso y terminando de comer lo que le quedaba de la tostada—gusto en verte… —añadió despidiéndose con un beso en la mejilla del novio de su hijo. -Igualmente Señora Anderson… -¡Pam!... ¡llámame Pam!… —exclamó mientras tomaba sus llaves desde el recipiente en la mesa del recibidor. -Que tenga un buen día… -Igual tu cariño… ¡ah!… y dile a mi hijo que ni su Papá ni yo almorzaremos aquí, así es que puede ordenar lo que sea, deje dinero en la puerta del refrigerador… detrás del magneto de flores… —terminó por decir con la boca llena, luego hizo la seña de adiós respectiva y desapareció tras la puerta. -Me pregunto cuanto dineros era ese… —murmuró Kurt sonriendo con picardía— ok… a lo que vine… —añadió dejando su bolso en una de las poltronas de la sala.

-Con un demonio Blaine Anderson, cuando creía que no podías ser más lindo… —murmuró al verlo dormido, soltó un suspiro y se acercó como en cámara lenta, se sentó en la orilla de la cama e hizo ademán de acariciarle el pelo, pero prefirió mirarlo otro segundo más— Blaine… — dijo pasando su mano por los rizos de la frente. -Un segundo… —respondió este sin abrir los ojos. -¿Estas soñando algo muy importante?… —pregunto de vuelta bajando su mano hasta tocarle la cara. -¿Que?… ¿Kurt?…—dijo medio abriendo un ojo— ¿eres tú?… -Lo soy... y toda la esperanza que tenía de que estuvieras soñando conmigo se esfumó en este instante… —añadió sonriendo, Blaine sonrió de vuelta y se incorporó para sentarse en la cama. -¿Que hora es?… —preguntó bostezando. -Las 6:30… -¿En serio?…. —pregunto estirándose para alcanzar la mesa de noche y su reloj pulsera -Mucho… ¿cómo estas? -Bien… un poco atontado, pero bien… -¿Como? -Pero es por el medicamento, no te preocupes… —se adelantó en decir al ver que su novio ponía cara de exponer la necesidad de correr  a la sala de urgencias -Ok… —dijo Kurt como cantando y sin convencerse del todo. -Es la verdad… me encanta despertar y que estés aquí… hola… —dijo inclinándose un poco para darle un beso. -Hola… —contestó de vuelta Kurt sonriendo embobado— ¿cómo estas? -Muy bien… ¿tú? -Bien también… -¿Tienes novedades de NYADA? -Aún no.. y no hablemos de eso… ¿cómo te has sentido? -Bien… ayer pude sacarme el parche… -¿En serio? -Si… —respondió Blaine echándose hacia atrás en las almohadas— veo un poco borroso pero el doctor dijo que es normal… hasta que me hagan la cirugía… -Lo se… estuve averiguando todo en internet… -¿De verdad?... que dulce… —dijo Blaine siendo él esta vez el que se sentía embobado. -Lo se también… me encontré con tu Mamá  y me dijo que te dijera que había dejado el dinero del almuerzo tras el magneto de flores en la puerta del refrigerador… —dijo Kurt de corrido como para olvidar ningún detalle -Ok… gracias, ¿no vas a ir a la escuela ? -Por supuesto que voy a ir… ¿por que lo preguntas? -Bueno… —dijo mirándolo de arriba a abajo— no lo tomes a mal pero… estás vestido como para ver una maratón de «Gilmore girls» en el sofá de la sala… —añadió arrugando la nariz. -Y esta en lo cierto… —dijo levantándose— lo que pasa Blaine Anderson es que cuando estoy en la escuela te extraño con el alma, y todo estos días me he sentido super solo, por lo tanto este día quiero sentirte a mi lado, así es que necesito tu ropa… -¿Como? -Lo que oyes… asaltare tu closet y tomaré un par de prendas…  solo de la parte de arriba estos pantalones son geniales y no quisiera quitármelos nunca… —dijo levantando una pierna para enseñar sus pantalones listados blanco y negro. -¿No puedo decir nada para contradecir eso? -Por supuesto que no… —añadió Kurt abriendo uno de los cajones del vestidor— ya te dije que todo lo que pasa en mi cabeza me pertenece y tu no puedes controlarlo… —añadió sacando un par de corbatas de moño, las miro por todos lados y las dejo a los pies de la cama, acto seguido abrió el closet y comenzó a mirar las camisas colgadas, Blaine se acomodó en las almohadas y se quedo mirándolo con un gesto divertido a la cara— ¿esto es tuyo?... —pregunto dándose media vuelta con un gancho que tenia una camiseta con una leyenda subversiva y punk -Por supuesto… -¿De una fase supongo? -De un gusto musical más bien… —añadió haciendo un movimiento con sus manos que indicaba que debía dar vuelta la pieza de ropa. -¡Ah!…«Sex pistols»… —leyó poniendo cara de ácido— mejor la pondré donde la encontré… -Mejor… ¿qué buscas?, puedo ayudarte… -¡Lo sabré cuando lo encuentre!... —grito pasando los ganchos— y ya lo encontré… —añadió girando sobre uno de sus pies con dos colgadores, una con una camisa blanca con ribete negro en el cuello y los puños y otra con un sweater grueso de punto en lo mismos tonos— ¿qué tal? -Muy combinado… -Obviamente… me cambiare…—dijo quitándose la sudadera con capucha. -¿Eso es mío?... —pregunto Blaine señalando. -No, obvio que no… ¿me ayudas con la corbata?...—dijo mientras se abotonaba la camisa. .Por supuesto… —dijo Blaine haciendo ademán de levantarse. -Pero no te levantes, no quiero que te de algo… yo me acerco a ti…—sentencio haciendo los gestos respectivos. -No soy un enfermo terminal Kurt… solo tendré una cirugía de córnea… —dijo Blaine alcanzando la corbata desde el final de la cama. -Lo se, pero debo preocuparme para que nada te pase, te quiero como nuevo en 17 días.. -¿17 días? -San Valentín… nuestro primer San Valentín… -Claro… haré mi mejor esfuerzo, te lo prometo... -Muy bien… —dijo Kurt levantándose el cuello de la camisa, Blaine se acerco lo suficiente y con ambas manos puso la corbata alrededor del cuello de su novio, acto seguido y con la pericia de años, hizo el nudo correspondiente. -Haz así… —pidió levantando su propia barbilla, Kurt hizo lo que le pidieran y se quedo mirando el cielo raso— listo… —añadió sonriendo. -Ok… gracias…—respondió levantándose— me veré en el espejo… —dijo parándose frente al espejo de cuerpo entero que Blaine tenía en un rincón de la habitación— creo que luzco bien… ¿no crees?...—preguntó mirándose de todos los ángulos posibles. -Luces más que bien… -También lo  creo… ahora… me iré… la semana de Michael sigue y no  quiero perderme nada… -¿Vendrás después de la escuela? -Por supuesto que sí… vi cuánto dinero dejó tu Mamá para tu almuerzo así es que no me lo perderé por nada…—dijo Kurt volviendo a sentarse a su lado. -Ok… gracias… te amo… -Lo se… —respondió dándole un beso de despedida, Blaine hizo lo posible porque ese beso durara más de lo que su novio había planeado— ¿qué parte de que debes cuidarte no entendiste Blaine Anderson?— preguntó apartándose. -Todas… —respondió Blaine queriendo repetir lo del beso. -Pues al parecer no… —rebatió Kurt levantándose— te veré en 7 horas… —añadió tomando de vuelta la sudadera— se bueno Blaine Devon Anderson…—advirtió apuntándolo desde la puerta. -Lo seré… llámame… -Consentido.. —dijo Kurt lanzándole un beso desde la puerta— adiós… -Adiós… —termino por decir Blaine echándose hacia atrás en las almohadas, se acomodó en uno de sus lados para tratar de dormir un poco más sin pensar en su inminente cirugía ocular.

[hirelingscenario]

VIII

Me recosté en mi asiento, satisfecha. Era sábado, me había despertado a las ocho de la mañana y me había encaminado hacia la biblioteca, decidida a no salir de ahí hasta no haber avanzado algo con mi tesis.

A las once de la mañana, mi estómago rugía, pero ya tenía un plan de ataque. Había encontrado todas las exposiciones temporales que habría y durarían los próximos seis meses. Algunas estaban en viajes en coche de tres horas, pero había enviado correos a todas y cada una de ellas, explicando que les escribía de la Universidad de Anteros y que quería entrevistar al comisario de su exposición. No había mentido, pero me había ahorrado el detalle de que solo era una alumna de la universidad, y de que mis entrevistas tenían como finalidad encontrar las deficiencias en su organización de exposiciones.  

Con una sonrisilla, me estiré y me puse en pie. Me había ganado alimentarme. Cogí mi portátil, pero dejé el resto de mis papeles en la mesa para que nadie ocupara mi sitio. Mientras caminaba hacia la máquina de comida que había frente a la entrada de la biblioteca, medité sobre la logística de mi proyecto. Mis padres me dejarían el coche siempre que fuera un fin de semana y les explicara para qué lo necesitaba, aunque era consciente de que habría alguna exposición a la que tendría que buscar otra forma de ir, puesto eran demasiadas y me sabía mal dejar a mis padres tantos fines de semana sin transporte. Casi treinta años después de casados, seguían haciendo escapadas románticas de fin de semana, cosa que en realidad a mí me alegraba mucho.

Mientras seleccionaba un sándwich empaquetado y un café, miré el calendario en mi móvil. Tendría que empezar tan pronto como me fuera posible y tuviera una respuesta de los museos, para que me diera tiempo a visitarlos todos. Empezaría la siguiente semana, puesto que ese mismo sábado ya era tarde y además tenía el concierto de Castiel donde debía hacer las fotos.  

Volví a mi mesa y dejé un reguerito de migas sobre mi portátil mientras comía mi sándwich, relleno de una ensaladilla gris y con un ligero regusto a plástico. Estaba organizando mis fines de semana de ahí hasta lo que parecía ser mi edad de jubilación, cuando una tenue voz me llamó.

– ¿Señorita Nielsen?

Alcé la mirada, sabiendo a quién me iba a encontrar. Le sonreí, y con un tono de voz ligeramente irónico respondí:

– Buenos días, profesor Zaidi.

Alzó una ceja, pero me devolvió la sonrisa. Después de la cena de cumpleaños de Leigh, habíamos vuelto a tratarnos con formalidad en un silencioso acuerdo. Sin embargo, había una especie de complicidad en nuestro saludo cuando nos cruzábamos por los pasillos. Era un cambio agradable respecto a mi situación con Nathaniel, que era un chat lleno de memes de gatos por mi parte y alguna respuesta muy ocasional por la suya.

Rayan se inclinó sobre la mesa y echó un ojo a todos mis libros y papeles.

– ¿Es para su tesis? – asentí, y él guardó silencio unos instantes, antes de sacar el móvil de su bolsillo– Eso me recuerda que he visto esto y he pensado que podía interesarle…

Me pasó su móvil, donde tenía un artículo sobre una exposición de pintores impresionistas en una ciudad cercana. Me reí, giré mi ordenador hacia él y le enseñé el calendario donde tenía marcada esa misma exposición como la primera de mis incursiones.

– Grandes mentes…– dije.

Riéndose suavemente él también, Rayan volvió a incorporarse sin guardar el móvil.

– Vaya, qué casualidad. Yo también estaba pensando en ir…

Sabía qué me estaba proponiendo, y noté un cosquilleo en el estómago.

– No es un museo muy grande, puede que nos crucemos por ahí– comenté en tono casual, mientras marcaba con un post-it un libro de forma despreocupada.

– Es cierto – asintió–, aunque puede haber tanta gente que me da miedo ponerme a parlotear con una completa desconocida por error. Imagine qué vergüenza pasaría.

– ¡Qué bochorno! ¿Cómo podemos evitar que haga usted semejante ridículo, profesor?

– Si hubiera una forma de saber que es usted quien está ahí…

Con una sonrisa traviesa, intercambiamos los números de teléfono. Como ya llevaba demasiado rato en mi mesa, Rayan se despidió con tono formal y se perdió entre las estanterías de la biblioteca. Al cabo de un rato, lo vi alejarse por el rabillo del ojo y abandonar el edificio. Me desilusionó un poco que no hiciera ni el más mínimo gesto para despedirse, pero entonces la pantalla de mi móvil se iluminó.

¿Me pareció ver una lista larguísima de museos y exposiciones?

Al parecer tengo en mente visitar un museo diferente cada fin de semana de aquí a que me muera

No me parece un mal plan de vida.

Sonreí como una idiota, escribiendo y borrando la misma frase hasta que por fin me armé de valor y le di a enviar.

Eres más que bienvenido a cualquiera de ellos

En un lapso deliciosamente aceptable, muy diferente a los ocho días hábiles que tardaba Nathaniel en dar señales de vida, llegó su respuesta.

Tendremos que repasar esa lista, entonces.

El día avanzó suave como la seda. Por primera vez en varias semanas sentí que todo iba en orden. Mi tesis por fin estaba encarrilada, Yeleen y yo habíamos alcanzado una especie de reticente tolerancia, estaba rodeada de amigos que me querían, esa noche iba a hacer unas fotos por las que me iban a pagar y encima tenía una cita programada.

¿Una cita con la persona de la que seguía enamorada? No, porque esa persona había decidido que la vida era más interesante apareciendo y desapareciendo sin previo aviso. De vez en cuando Nathaniel aparecía entre clase y clase con un café, un bollo (los baozi totalmente arrinconados en nuestras interacciones) y una sonrisa llena de ternura al verme hasta arriba de libros o con tres fundas de objetivos de cámara diferentes colgando hombro. Pero también había días en los que lo veía andar por la ciudad con paso acelerado, la mandíbula apretada y gesto hosco. En esas ocasiones, pasaba la mirada sobre mí como si no me conociera, y si yo hacía el más mínimo gesto de acercarme a él, Nathaniel fruncía aun más el ceño y se alejaba rápidamente.

No tenía ni idea de dónde venía esta versión suya de doctor Jekyl y señor Hyde, pero cada vez que ocurría recordaba a Rosalya y Castiel pidiéndome que no me acercara a él. Pese a ello no olvidaba aquella comida en el restaurante, así que me armaba de paciencia y esperaba la próxima vez que decidiera acercarse a mí.

Y sobrada iba de paciencia y buen humor al volver a mi habitación cuando la biblioteca cerró. Tenía que arreglarme para el concierto. El manager de Crowstorm, no totalmente encantado con la idea de que una fotógrafa amateur se hiciera cargo de su concierto, pidió ver algunos ejemplos de mi trabajo. Pero al parecer le gustó bastante lo que hacía, porque además de pagarme un pequeño sueldo, me dio entradas gratis para el concierto y se sumó a la oferta de Castiel de invitarme a todas las copas que quisiera.

Además, me habían asignado un pequeño casillero en el backstage para que dejara mis cosas. Así que cuando llegué a la prueba de sonido, vestida con zapatillas de deporte, vaqueros y una sudadera negra, también llevaba una mochila donde había guardado un vestido largo, maquillaje y unos tacones.

Castiel me presentó a los miembros de su grupo, cuya actitud iba desde la alegre simpatía hasta la más abierta indiferencia, pero al menos todos estaban acostumbrados a que les echaran fotos. Pudieron ignorarme y continuar con sus pruebas mientras yo probaba objetivos. Incluso el dueño del local fue tan simpático que, pese a ya haber hecho la prueba de luces, volvieron a apagarlas para que yo pudiera ver cómo quedaría el ambiente.

Como nunca había hecho fotos en un concierto tan abarrotado, decidí sentarme un rato en la barra del bar y elaborar un pequeño esquema. Tenía una copia de la lista de canciones que iban a tocar y las pausas, y como ya conocía la iluminación, podía decidir en quién centrarme y desde qué ángulo en cada canción.

– Eres muy meticulosa, ¿no?

Jim, el manager del grupo, estaba echando un vistazo a mi lista por encima de mi hombro. Sonreí, algo nerviosa.

– Maniática, es quizás el término adecuado– le pasé la lista para que pudiera verla mejor–. De todo el concierto pueden salir unas trescientas fotos, pero que valgan la pena, quizás cien.

– Cuantas más mejor. Como ya sabes, queremos material para promocionarnos.

Asentí, y aunque algo se revolvió dentro de mí, estaba tan nerviosa como emocionada. Podía hacerlo bien, solo tenía que dejar de dudar de mí misma cada cinco minutos. Algo se removió dentro de mí otra vez, y me di cuenta de que esta vez emitió un sonido.

Dios, ¿tanta hambre tenía?

– ¿Quieres… unos nachos, o algo?– preguntó Jim.

Me puse tan roja que noté cómo mis mejillas emitían calor. En realidad había comido muy poco ese día, porque los sándwiches de la biblioteca no eran precisamente un manjar. Pero me daba muchísima vergüenza que Jim creyera que tenía que alimentarme.

– No, no, estoy bien…– balbucí.

– Tranquila, no nos cuesta nada. Espera, ahora te traigo algo.

Me quedé en la barra, mortificada y avergonzada, pero salivando al mismo tiempo que pensaba en la salsa de queso. Seguí dándole vueltas a mi esquema hasta que mi móvil vibró en mi bolsillo.

Va a parecer ridículo que un profesor de una carrera de arte pregunte esto pero, ¿me recomiendas una película para ver esta noche?

Encantada, sonreí y me dispuse a responder. En las reglas no escritas del flirteo por mensajes, que Rayan me escribiera dos veces el mismo día dejaba muy claro su interés. Y quizás él, al ser mayor que yo, no lo vivía de la misma forma, pero yo no dejé de sonreír mientras escribía.

Depende, qué te gusta ver?

De todo. Pero la comedia francesa que me recomendaste me encantó…

A que es genial?? Pensándolo bien, en realidad a mí también me apetecería más un plan de peli y manta Qué pereza

¿Cuál es tu plan esta noche?

Le reenvié el cartel que anunciaba el concierto de Castiel, con un emoji de una cámara

No me pagan mucho, pero me hace mucha ilusión Y luego podré estar de fiesta gratis.

Ah, he visto muchos anuncios de ellos. De ahí a fotógrafa de la Rolling Stone hay un paso.

– Por favor, dime que esa sonrisa de idiota no es porque estés hablando con Nathaniel…

Alcé la vista del móvil para descubrir a Castiel con mis nachos, un refresco y un té. Le lancé una mueca desdeñosa.

– No estoy sonriendo como una idiota.

Castiel dejó los nachos y el refresco frente a mí, mientras él se sentaba a mi lado y daba un sorbo de su té caliente. Recordé con cariño una tarde en mi casa, tocando la guitarra y cantando los dos. Mi madre nos preparó un té con miel, y desde entonces Castiel siempre tomaba uno antes de cantar cuando venía a casa.

– Sí, sí lo estás. Es la misma sonrisa que ponías cuando ese estúpido delegado te decía cualquier cosa.

Sacrificando uno de mis preciados nachos, se lo tiré con desdén contra el pecho, rebotó y cayó en la barra. El gesto de Castiel era de sorprendida indignación.

– ¿Me acabas de agredir con un nacho?

– No es Nathaniel, pero no te voy a mentir: he quedado con él varias veces– Castiel me dirigió una mirada ceñuda. Yo suspiré–. Mira, todos me decís lo malo que es ahora, pero las veces que he estado con él, he visto al mismo chico de siempre. Vas a tener que decirme algo más que “ha cambiado”, si quieres que te crea.

Castiel dudó un momento, algo sorprendente. Siempre me había parecido muy dispuesto a echar pestes de Nathaniel cuando era mi novio.

– No voy a hablarte de los rumores, porque odio esas gilipolleces, pero sí te puedo decir lo que yo he visto.

Intrigada, asentí.

– Nos hemos cruzado poco, pero siempre que lo he visto de noche estaba borracho, o metido en alguna pelea. Dicen que trabaja de camello, y aunque eso no lo sé a ciencia cierta, siempre lo he visto con gente que sé que tiene la entrada prohibida a muchos sitios por vender droga incluso a menores…

Guardamos silencio. Pensé en Nathaniel diciéndome que todo había cambiado, pensé en su nuevo aspecto, en el abandono de sus estudios… Y no quise creerlo. No quise creerlo, pero tenía sentido. Como también tenía sentido la actitud de Castiel y Rosalía.

– No era Nathaniel, – repetí en voz baja– Pero él no es así…

– Castiel, Hall, ¿podéis venir?

Jim nos llamó desde la puerta del backstage. Castiel miró la hora en la pantalla de su móvil, y nos dimos cuenta de que quedaban poco más de diez minutos para que el local abriera. Cogimos nuestras bebidas y mis nachos y nos pusimos en pie.

– Solo… ten cuidad, ¿vale?– me pidió– Y respóndele a quien sea que te haga poner esa sonrisa de idiota que no es Nathaniel.

Me detuve un momento y cogí mi móvil.

Perdona, esto ya empieza The Affair Es una serie, pero está muy bien Dime qué te parece

Me dirigí al backstage y me preparé para lo que esperaba fuera una noche de trabajo, concierto y fiesta memorable.

Mi bendito esquema resultó ser muy útil. El público del concierto era de lo más variopinto, pero había una clara mayoría de chicas jóvenes que gritaban y saltaban con tanta intensidad que era sorprendente que se escuchara la música. Me había imaginado esa situación, y había encontrado la forma de moverme por el local evitando esa masa de gente que me habría impedido no solo obtener un buen ángulo, sino andar en general.

El concierto en sí fue impresionante, y aunque ya había escuchado a Castiel en más de una ocasión, no dejaba de sorprenderme lo bien que cantaba en directo. A medio concierto, el grupo hizo una breve pausa, que aproveché para enseñarles algunas de las que consideraba las mejores fotos. Todos parecían muy satisfechos, incluso el tipo de la guitarra con la actitud de indiferencia. Fue agotador estar correteando de un lado para otro del escenario, de una esquina a otra del local, agachándome, subiéndome a sillas y cambiando de objetivos como si no hubiera mañana, pero también fue muy divertido. Al final acabé con cuatrocientas veintisiete fotos del concierto y una selfie mía mientras ellos aun tocaban. Un recuerdo de mi primer concierto como fotógrafa.

La fiesta comenzó y yo me dirigí al backstage. Había invitado a Chani, a Rosa y a Alexy. Alexy no podía venir y Rosa, aunque tenía planes, me dijo que intentaría pasarse. A Chani sí que la vi durante el concierto, por lo que me apresuré para cambiarme de ropa. Después de casi dos horas correteando, me mataban los pies y no me apetecía ponerme tacones, pero mis zapatillas andrajosas me daban un poco de vergüenza ahora que no estaba trabajando.

Rosalya me había escrito para decirme que se le había hecho tarde, y que me llamaría si podía ir. Cogí mi móvil pero dejé todo lo demás en mi casillero del backstage. A fin de cuentas, esa noche invitaba Castiel.

Resultó que ser parte del círculo VIP del grupo tenía muchas ventajas. Para empezar, Chani y yo teníamos una mesa en la zona reservada, y aunque ella intentó negarse, tanto Jim como Castiel insistieron en pagar sus bebidas. Amber también había venido al concierto y de alguna forma terminamos juntándonos en un grupo enorme de músicos, sus invitados, Amber y sus amigos modelos. Me sentía en la cúspide de un día espectacular. También me sentía algo borracha, pero todos estábamos en diferentes grados de embriaguez, y yo no era ni de lejos la que peor iba.

Horas después, Chani dijo que se iba. Me desinflé un poco, porque estaba pasándomelo en grande, pero Chani me sonrió.

– No, tú quédate– señaló a los amigos de Amber, que llevaban un rato publicando vídeos y fotos en sus redes sociales–. Tienes a todos estos modelos encandilados con tus fotos, y te lo estás pasando genial.

– Al menos déjame que te acompañe fuera, tengo una app para pedirte un taxi– me dirigí a Castiel y le puse una mano en el hombro para llamar su atención–. Ahora vengo, voy a acompañar a Chani a que pida un taxi.

Castiel asintió y señaló una pesada chaqueta de cuero que había en una silla cercana. Mi sudadera negra se había quedado en el backstage, demasiado poco glamourosa para la noche de artistas y reservados que estaba viviendo.

– ¿Quieres mi abrigo?

Negué con la cabeza y le dije que no tardaría tanto. Tras despedirse todos se efusivamente (algunos más que otros) de Chani, cogí mi móvil y la acompañé a la salida.

Una vez estuvimos fuera, nos dedicamos a comentar el concierto hasta que llegó su taxi. Una ráfaga de aire frío me revolvió el pelo, era bastante reconfortante si lo comparaba con el calor humano que había en el interior del local abarrotado.

– Gracias por invitarme, me lo he pasado genial– dijo ella.

Nos dimos un abrazo de buenas noches.

– Te escribo mañana– respondí.

Chani subió al taxi y se despidió con la mano. Yo me giré y entré de nuevo al local. Antes de volver al reservado, me acerqué a la barra para pedir otra copa. Estaba esperando a que me la sirvieran cuando reconocí a Nathaniel en el otro extremo de la barra. Me sorprendió verlo ahí, pues no lo tenía por un gran fan de Castiel, aunque supuse que habría ido por Amber. Estaba hablando con otro chico y yo me debatía si ir a saludarlo. El camarero me tendió mi copa en ese momento, le di un breve trago para armarme de valor y decidí intentarlo.

A medida que me acercaba, el chico con el que hablaba Nathaniel se giró y pude verle la cara. Me detuve en seco. La primera vez que lo vi había bebido bastante, y la sensación de estar embotada por el alcohol hizo mucho más fácil revivir la ansiedad. Era el mismo tipo que me había agarrado por el brazo la primera noche que salí de fiesta al volver.

En medio de aquel local lleno de gente que bailaba, sudaba y gritaba, con la música ensordecedora y las luces de neón, recordé perfectamente el miedo de la primera noche. Recordé el dolor del brazo que me duró días, las arcadas de pánico, los largos dedos marcados en morado sobre mi hombro.

Y Nathaniel le estrechó la mano.

– ¿Estás bien, guapa?

Di un bote cuando alguien puso su mano sobre mi hombro. Mis dedos se crisparon sobre la copa, que se me resbaló y se rompió contra el suelo. La gente a la que salpicó se alejó un poco, pero me dio igual. Con el estrépito, Nathaniel me había visto. En a penas unos instantes pasó del esbozo de una sonrisa al desconcierto. Yo no me había movido, ni siquiera cuando más gente me preguntaba si estaba bien, solo podía mirar a Nathaniel totalmente relajado con aquel hombre.

Me di media vuelta y me alejé a paso apresurado.

Sabía que si iba con Castiel en ese momento, iba a tener que dar muchas explicaciones. Y sabía que Castiel no iba a reaccionar bien a nada de lo que le dijera en ese estado. No quería que montara una escena después de su concierto, en medio de sus fans, ni que se peleara con Nathaniel ni, mucho menos, que se enfadara conmigo.

Así que salí del local y eché a caminar por la calle. Dos bloques más arriba, me di cuenta de que mi respiración era errática. Respirar mal, el cambio de temperatura, el alcohol y los recuerdos… Todo aquello me desbordó y comencé a marearme. Me detuve. Tenía que calmarme, no podía ir a ningún sitio en semejante estado, con cinco trenes de pensamiento diferentes colisionando todos al mismo tiempo en mi cabeza.  Inspiré hondo e intenté soltar el aire lentamente, pero lo que me salió fue un sollozo.

Ahí fue cuando todo se vino abajo.

Las lágrimas empezaron a correrme por las mejillas. Daba igual cuántas veces me pasara la mano por la cara, el llanto no cesaba. Dos chicas que claramente venían del concierto pasaron a mi lado, pero antes de que pudieran acercarse a preguntarme si estaba bien, cuando era evidente que no, seguí andando por la calle hasta que las luces se atenuaron y la gente desapareció.

Me senté en un portal. Estaba sola. Tenía frío. No podía parar de sollozar. Y lo peor de todo, tenía miedo. ¿Pero a quién podía llamar? Todos mis amigos me lo habían advertido, todos me habían pedido que mantuviera la distancias. ¿De quién era culpa toda esa situación, si no mía?

Desconsolada, alcé el móvil que todavía tenía en la mano. Iba a escribirle a Castiel que me iba a casa cuando vi otro mensaje que había llegado veinte minutos antes.

Ya llevo cinco capítulos. Esta serie es adictiva.

Probablemente no se me habría ocurrido llamarle a esas horas de haber estado sobria. Pero pensé que quizás escuchar su voz tranquila me ayudaría a calmarme. Contestó al segundo tono.

– No creí que me fueras a responder esta noche, es tardísimo­– abrí la boca para decir algo, pero lo único que me salió fue otro sollozo roto. Joder, qué espectáculo–. ¿Hall? ¿Qué pasa?

Volví a intentarlo. Esbocé una sonrisa enorme, intentando transmitir alegría a mi voz.

– ¿A que es genial? Las otras temporadas empeoran bastante, pero la primera es genial.

Vale, seguía sonando rara, pero nadie diría que estaba sentada sola en un portal, de noche y con lo que empezaba a parecer un ataque de ansiedad.

Al otro lado de la línea, empecé a escuchar movimiento.

– Hall, ¿dónde estás? ¿Sigues en el concierto? ¿Qué ha pasado?

Estaba a punto de decirle que no había pasado nada, pero sabía que no era una respuesta creíble. ¿Y qué podía decirle? ¿“Tranquilo, solo me he topado con mi ex novio y su amigo, el tipo que me agredió hace unos meses”?

– ¡Hall!– la voz de Nathaniel resonó por la calle mientras él venía hacia mí– ¿Por qué has salido corriendo?

– Joder, esto tiene que ser una puta broma…– mascullé en voz baja. Rayan volvía a preguntarme algo, pero le corté apresuradamente– Perdona, te tengo que dejar.

Colgué antes de que pudiera decir o escuchar nada más. Alcé la mirada hacia Nathaniel, y descubrí que estaba viendo doble. La última vez que solo como sándwiches de máquina y nachos antes de una fiesta, me juré. Nathaniel llegó al portal donde yo estaba sentada y se acuclilló frente a mí.

– ¿Qué ha pasado?– preocupado, posó suavemente su mano sobre mi mejilla empapada de lágrimas– Estás helada, toma…

Nathaniel hizo un gesto para quitarse el enorme abrigo verde. Se me hizo un nudo en el estómago. Al mismo tiempo tuve dos impulsos: apretar su mano más fuerte contra mi mejilla helada y darle un empujón que lo tirara al suelo antes de alejarme.

– ¿Quién era ese hombre?

Nathaniel me miró a los ojos, y noté cómo se ponía a la defensiva.

– ¿Por qué quieres saberlo?

¿En serio me estaba preguntando eso? ¿En serio había significado tan poco para él que aquellos dos tipos me arrinconaran esa noche? ¿O es que a caso era algo tan habitual que no lo había registrado en su memoria? Me incorporé con tanta brusquedad que Nathaniel perdió el equilibrio y a mí se me torció un tobillo con los estúpidos tacones que llevaban matándome toda la maldita noche.

– ¡Da igual, Nathaniel, lárgate!

Eché a andar otra vez, pero él vino detrás de mí.

– ¡Hall! ¿¡Qué coño está pasando!? ¡Estás histérica!

Detrás de mí, Nathaniel intentó retenerme por la mano, pero yo sacudí el brazo y me revolví para encararlo, llorando ya sin saber si era rabia o pánico.

– ¿¡Y cómo demonios quieres que esté!?– grité– ¡Si te veo tan alegre con aquel tipo que…!

¿Que qué, Hall?, me pregunté a mí misma de pronto. En realidad tampoco había llegado a pasar nada. ¿Estaba haciendo todo este ridículo por una estupidez?

No. Algo en Nathaniel hizo clic, y sus mejillas perdieron color, como si tuviera miedo. Su voz pasó a ser a apenas un susurro.

– Hall, no es lo que parece…

– Entonces dime qué es– le pedí.

– No puedo, pero tienes que creerme…

Suavemente, Nathaniel volvió a coger mi mano. Esta vez se lo permití.

– Pues ayúdame a no creer todo lo que dicen de ti.

Los faros de un coche acercándose iluminaron el rostro de Nathaniel, y pude ver la desesperación en su rostro. Entrelacé mis dedos con los suyos y noté la delicadeza con la que Nathaniel se aferraba a mí

– Hall, no insistas.

– ¿Quién..?

Antes de que pudiera repetir mi pregunta, fue Nathaniel esta vez el que soltó mi mano de forma violenta.

– ¿¡No ves que intento protegerte!?– volvió a gritar.

– ¿¡De qué!?

– ¡De mí!

– Hall…

Nathaniel y yo nos giramos bruscamente. Durante un momento, temí encontrarme a Castiel. Pero me quedé muda de asombro cuando vi a Rayan unos metros más delante de un coche en marcha. A mi espalda, Nathaniel soltó una risotada cruel.

– Claro, cómo no– dio otro paso hacia mí, y noté el calor de su cuerpo acercándose al mío­–. Todo bien, profesor, pero gracias por el sumo interés en las actividades extraacadémicas de su alumna.

Rayan mantuvo la calma. Miró con fría indiferencia a Nathaniel antes de posar sus ojos sobre mí, esperando mi respuesta a una pregunta que no había formulado, pero flotaba en el aire.

– ¿Cómo… puedes decir que todo va bien?– pregunté, incapaz de mirarle a los ojos– ¿Entonces todo iba bien aquella noche? ¿Lo que ese tipo hizo, iba bien?

Nathaniel se inclinó un poco para poner sus ojos a mi altura. Intentó apoyar las manos en mis hombros, pero yo me sacudí y di un paso hacia atrás.

– Hall, por favor, confía en mí, sabes que yo nunca dejaría que te hicieran daño…

– ¿¡Y qué llevas haciendo todo este tiempo!?

Con un latigazo de dolor en el tobillo torcido, me encaminé cojeando hacia Rayan. Nathaniel me llamó casi a gritos e hizo ademán de seguirnos, pero cuando yo cerré la puerta del copiloto y me hundí en el asiento, Rayan se interpuso entre Nathaniel y el coche. Si le dijo algo, no lo escuché. Entre lágrimas vi la figura de Nathaniel darse la vuelta y perderse en la oscuridad de la calle.

Helada, me abracé a mí misma. Y como culmen de una noche esperpéntica, me dio hipo. Rayan subió al coche y me contempló en silencio un momento. Se giró hacia el asiento trasero y sacó una chaqueta de deporte de lo que parecía una bolsa de gimnasio. Me la tendió antes de asegurarme con voz tranquila:

– Está limpia…

Hipé, asentí y me cubrí el vestido, que ahora me resultaba obsceno, con la chaqueta como si fuera una manta. El coche se puso en marcha. Miré de reojo a Rayan, y por primera vez me fijé en que llevaba unos pantalones de chándal y una sudadera.

– La próxima vez que hagas algo así, necesitas un antifaz y una capa– la comisura de sus labios se dobló hacia arriba, pero no llegó a sonreír–. Siento haberte llamado. Ha sido una estupidez.

Los dedos de Rayan se crisparon sobre el volante, pero su voz se mantuvo tranquila.

– No ha sido una estupidez, Hall. ¿Qué te ha hecho?

Apoyé la frente contra la ventana, pero otro hipo hizo que me diera un pequeño cabezazo. Ya era todo tan ridículo que no pude sino reírme. El coche siguió avanzando suavemente por las calles mientras yo ponía mis ideas en orden. Rayan había salido de su casa a buscarme por los alrededores de un concierto a las dos de la mañana. Como poco, se merecía una explicación.

– Él, nada…

Nos detuvimos suavemente. No estábamos frente a la universidad, sino frente a un bloque de edificios elegante, con entrada de cristal. Rayan apagó el motor del coche y se giró para mirarme. Me incliné hacia adelante, apoyando la frente en las rodillas y la historia empezó a salir a borbotones. Otra vez le conté una historia que ninguno de mis amigos sabía. Le hablé de la primera noche, de los dos tipos y de Nathaniel apareciendo como un caballero de brillante armadura. De las advertencias de mis amigos y del cambio de Nathaniel. Le expliqué de dónde salían los moretones que él había visto, pero también le hablé del Nathaniel vulnerable que me pedía que lo viera como realmente era, y no como mis amigos lo describían. Del restaurante, de los cafés por los pasillos y del estúpido libro firmado que siempre llevaba encima, como si fuera el único amuleto que me aseguraba que Nathaniel no desaparecería para siempre sin decirme nada.

Cuando terminé de hablar, las lágrimas hacía rato que se habían secado. El gesto de Rayan era sombrío, cosa que me asustó. Sentí el impulso de cambiar totalmente de tema, así que me incorporé y forcé la más luminosa de mis sonrisas.

– ¿Entonces la serie te ha gusta..?

– Para. No hagas eso.

– ¿Qué?

– Siempre haces lo mismo. Cuando algo va mal, pones esa sonrisa enorme y pretendes que no pasa nada– Rayan se inclinó suavemente y subió el cuello de la chaqueta, que se había resbalado sobre uno de mis hombros–. No hace falta que hagas eso. Conmigo, no.

Bajé la mirada, sin saber qué decir. Rayan volvió a incorporarse y lanzó un hondo suspiro. Supuse que debía estar tan cansado como yo.

– Creo que si te llevo a los dormitorios, él podría estar ahí. Preferiría que te quedaras conmigo esta noche– entonces se apresuró a añadir:–. Pero puedo llevarte a donde tú me digas, si quieres ir a casa de Rosalya y Leigh, de tu amigo el cantante, o a casa de tus padres, yo…

Negué con la cabeza. A mis padres los mataría de un infarto si me veían en esa situación, y Rosalya y Castiel prenderían fuego a cada esquina de la ciudad si les contaba toda la historia.

Así que terminé subiendo a casa de Rayan, agotada y embotada. Rápidamente le envié un mensaje a Castiel, diciéndole que me había ido con Chani y que si podía recoger mis cosas, al día siguiente iría a su casa a por ellas. No esperé una respuesta.

Rayan me dejó toallas para ducharme, y al salir del cuarto de baño vi que me había abierto la cama y me había dejado una camiseta de hacer deporte y unos pantalones de chándal para que usara de pijama. Me asomé al salón, donde él ya se había acurrucado en el sofá y leía un libro.

– Rayan, no…

– Si crees que te voy a dejar dormir en el sofá después de la noche que has tenido, estás muy equivocada– replicó, sin siquiera levantar la vista de su libro.

Me apoyé en el marco de la puerta, demasiado cansada para discutir

– El próximo sábado conduzco yo y lloras tú, ¿te parece adecuado?

Durante un momento, Rayan me miró con desconcierto, hasta que comprendió que el próximo sábado íbamos a ir a la exposición sobre impresionistas. Cuando registró a qué me refería, se rio.

– Te lo prometo.

Le di las buenas noches y volví al interior de su habitación. El olor y la suavidad de la cama me envolvieron como un cálido abrazo, y dormí con un sueño sorprendentemente plácido.

[just-another-wretched-egg]

Reto creativo día 27

Hola a todos! Con un poco de demora les traigo el día 27!

Ayayay, casi no alcanzo a estar a tiempo este dia!

Pero aquí les dejo a unos protagonistas que ya conocen, creo...

Tema: días de universidad.

Advertencias: ninguna

Género: vida cotidiana, vida universitaria

Recuento de palabras: 2055

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Era el inicio de Julio, y Luciano comenzaba sus vacaciones de su ingeniería civil. Para ser su primer año como alumno universitario, se encontraba sin tarea ni estudios por el momento, disfrutando hasta el fondo del descanso entre semestres (había aprobado todos sus ramos con buenas notas), por lo que decidió pasar a conversar con su mejor amiga, Matilde (de la que no había escuchado mucho a lo largo del semestre).

Pudo haber hecho planes con Francisca, pero se quedó con material de estudio para los ramos que le seguían al segundo semestre, por lo que le dijo que estaría estudiando y haciendo las tareas hasta que terminara con ellas. Al salir del colegio, con tantas citas y tan seguidas entre cada una de ellas, Francisca no tuvo razones para sentir celos de Matilde. Durante el verano, el grupo de amigos con mucha suerte se pudo juntar dos semanas para pasarlas en la cabaña que habían arrendado el año anterior, de ahí, todas las veces que pudo, Francisca salía con Luciano.

Luciano se dirigía a la casa de su mejor amiga, cuando vio a gente que él no conocía llegar a la puerta. Uno de ellos, un varón, le preguntó si también iba a unirse al grupo de estudios. Luciano, desconcertado, le queda mirando raro y en silencio, sin saber qué responder.

Todos se voltearon cuando Matilde abrió la puerta, los desconocidos se acercaron y la saludaron con felicidad. Luciano fue el último en saludarla, pues seguía con la incertidumbre de saber quiénes eran los que habían llegado.

-          Pero, Luciano, ¿qué te pasa?

-          Mati, eeh, ¿quiénes son todos ellos?

-          Son mis amigos de la universidad, les dije que nos juntáramos en mi casa para estudiar para el segundo semestre.

-          Ya, y eeh, ¿te quedaste con tareas?

-          No, solo vamos a traducir unas páginas de nuestros libros favoritos. – Matilde decidió entrar a la escuela de lenguas para ser lingüista, o intérprete. –

-          ¿Y no quieres salir un rato a divertirte?

-          Es que ya llevo una semana de vacaciones, y estaba aburrida, por lo que decidimos entre todos hacer esto para matar el tiempo y practicar.

-          Pero, te venía a buscar para hacer algo, salir, ver películas… - Los viernes de película pasaron a llamarse sábados de película. Ambos descubrieron que era el único día al mes que tenían para poder ver películas juntos. Desgraciadamente, no siempre pudieron concretarlos. –

-          Lo siento, ¿puede ser otro día? Los chiquillos ya llegaron y no puedo decirles que no ahora. Pero cuando se vayan voy para tu casa a ver algo, lo que sea.

-          No te preocupes, voy a ver si Seba o Kote partieron las vacaciones.

-          Ya. Lo siento, Lu. De veras que me hace sentir mal no juntarnos, en especial cuando apenas hemos hablado este semestre, pero he estado estudiando todo el rato para pasar mis ramos.

-          Sí, lo comprendo, estaba igual que tú.

-          Veía la luz de tu escritorio encendida casi todas las noches.

-          Ja, yo igual te veía estudiando.

-          A todo esto, a que no sabes a quién vi el otro día en clase.

-          ¿A quién?

-          A Félix, ¿te acuerdas de ese compañero con el pelo corto, lleno de rulos? Es rubio oscuro con los ojos verdes.

-          Ah, cierto, ¿qué es de él? – Luciano no le tenía mucho cariño, pues hace un par de años, cuando estaban terminando la educación básica, Matilde había desarrollado un pequeño crush hacia Félix, pero él (que terminó enterándose) se burló de su cara llena de espinillas y la mandó a la punta del cerro. Pasó a ser persona non grata para Luciano. La cara de Matilde dejó de tener espinillas y ahora, que entró a la universidad, comenzó a usar maquillaje para arreglar las casi inexistentes imperfecciones de su cara. –

-          Pues, me enteré a mediados de semestre que entró a Lenguas, igual que yo. Me sorprendí cuando se sentó cerca de mí, comenzamos a hablar un poco. Viene a traducir en un rato más.

-          Ya, que bueno por él.

-          Después de salir del colegio se ve más centrado, ya no es el bruto que era en octavo básico.

-          De todas maneras, ya sabes lo que pienso de él.

-          Yo sí creo que las personas pueden cambiar… Ya, te dejo, voy a estudiar con los chiquillos. Después me voy a tu casa.

-          Ya, nos vemos…

Luciano no se quedó tranquilo al saber que iba Félix a la casa de su amiga. ¿Qué pasaba si salía con algún comentario sarcástico? ¿Si la molestaba por tener muchas cosas infantiles en su pieza? O algo peor (Luciano no se imaginaba qué podía ser peor, pero aun así), tenía que cuidar de su mejor amiga.

Por lo que decidió estar atento a cuando sonara el timbre, esperaría en la entrada de su casa, y luego escucharía por las hojas de taro que la mamá de Matilde plantó bajo la ventana de la cocina, bajo la pieza de Matilde. Sonaba mal, pero nada le impediría proteger a su amiga.

Y lo vio llegar, y se puso a escuchar lo que decían, pero con la ventana de la habitación de Matilde cerrada, no tuvo otra idea que ver lo que hacían desde su propia habitación. Al llegar no vio mucho, solo el pelo y la cabeza de Matilde organizando la sesión de estudio (como siempre que hacían en el colegio cuando se juntaban a estudiar). De vez en cuando reía, se ponía seria explicando, y miraba atenta lo que le decían.

Allí Luciano vio algo distinto en Matilde, vio otras caras que no conocía en ella. Vio un brillo en sus ojos que nunca había visto antes, y eso lo aturdió un poco. ¿Estaría cambiando su amiga? ¿Acaso sus nuevos amigos estaban viendo una Matilde que Luciano desconocía por completo? De repente le dio pena, por tener tantos años de amistad y que súbitamente vea a una Matilde que no había conocido nunca.

Decidió mandarle mensaje a los mellizos (Kote y Seba), para poder jugar en línea y contarles lo que sentía.

Ambos le dijeron que estaban ocupados con los estudios. Seba, que decidió estudiar educación física, estaba con los últimos exámenes (mañana tendrían uno de los ramos principales), y Kote, que optó por darse un año de preuniversitario, estaba con ensayos hasta esa semana, pero que el sábado estaría sentado en frente de su computador. Luciano se molestó un poco más.

Por lo que decidió jugar él solo hasta que se aburriera. Sintió desde su pieza el timbre de la entrada, pensando que sería un familiar, pero se sorprendió un poco al escuchar la voz de su amiga subir por las escaleras, agradeciendo la taza de té que le estaba ofreciendo su madre. Al entrar a su pieza, le saludó y pidió sentarse en la cama de Luciano, al lado de él.

Lo vio jugar un rato, pero pronto llegó la mamá de él con una bandeja con tazas y galletas dulces. Una vez que volvieron a estar solos, Luciano le preguntó por la sesión de estudios:

-          No estuvo tan mal. Conocí nuevas palabras.

-          Y ¿qué tradujeron?

-          Al principio yo les hablé del libro que estaba leyendo, y que opté por traducirlo al francés. Uno de los chiquillos me habló de su canción francesa favorita y nos la tradujo al español.

-          Ah, ya, no todos hablaron del mismo idioma.

-          No, no, porque nunca hablamos de traducir de un libro, siempre estuvo la opción de traducir lo que sea, libros, poema, canción, lo que les viniera a la mente.

-          Ya. – Dijo Luciano. Y para que pareciera casual, desvió su mirada a la tele que tenían al frente y le preguntó:- ¿Y qué tradujo Félix?

-          Pues, él nos sorprendió con un poema de una alemana.

-          Ya, ya, comprendo. Aparte de eso, ¿todo estuvo bien?

-          Sí, estuvo muy tranquilo.

-          Me alegro.

Después de un rato, se quedaron viendo la tele, saltando por los canales hasta que dieron con un viejo programa de su infancia que celebrara su décimo año de estrenarse en el cable. Se quedaron viendo hasta que Matilde le preguntó por las semanas que tenía de descanso.

-          Me dieron tres, en la subsiguiente tengo que ir a la sede a tomar ramos.

-          ¿Lo hacen presencial?

-          Sí, ¿por?

-          Es que nosotros lo hacemos en línea, nos metemos a la página de la universidad, y todo eso…

-          Ya. No lo sé, a nosotros nos dijeron que tenemos que ir para allá y decirles a los profesores los ramos que queremos tener este semestre. Y a ti, ¿cuántas semanas te dieron?

-          Mmm, a nosotros nos dieron cuatro. Ah, no espera, nos dieron tres también, pero yo salí antes porque me eximí de algunos exámenes.

-          Bah, qué suerte.

-          Me desviví estudiando para pasar todos mis ramos y para aprender, es un regalo que me haya eximido, así pude recobrar horas de sueño.

-          Cuida tu sueño, no quiero que tengas que ir al hospital de nuevo.

-          No me recuerdes.

Como Matilde no había dormido para estudiar para un examen, se desmayó al salir de la sala. Sus amigos tuvieron que llevarla a la pequeña sala de primeros auxilios que tiene su sede. Sus papás después tuvieron que buscarla en auto. Luciano estaba de vuelta de clases cuando vio a la familia salir del auto y a una Matilde caminando lento y despacio. Fue corriendo a ayudarla a subir las escaleras.

-          A todo esto, ¿cómo le va a Francisca?

-          Bien, hace unas horas me dijo que le habían dado tarea para estudiar para el segundo semestre.

-          ¿Me puedes repetir qué entró a estudiar?

-          Educación musical. Estudia en la misma universidad que Seba.

-          Ah, ya, ¿y le dieron tarea?

-          Es que tiene unos ramos anuales, por lo que le dijeron que, al volver de las vacaciones, iban a tener un control de uno de sus ramos, creo que de historia de la música.

-          Igual encuentro entretenido lo que está estudiando.

-          A ti te gusta todo.

-          Sí, podría aprender de todo.

-          Pero decantaste por las lenguas.

-          Porque descubrí que quiero poder traducir textos importantes, o a personas importantes que vienen por diplomacia a nuestro país.

-          Ya…

-          Es cierto, tengo ganas de unir a la gente, y si voy de vacaciones a algún lugar, que el idioma no sea una barrera.

-          Y hasta ahora, ¿cuál es el que más te gusta?

-          Mmm, inglés nos han enseñado en el colegio, por eso lo encuentro fácil.

-          Una vez me dijiste que cuando lees algo en inglés, como que se activa el lado en inglés de tu cerebro.

-          ¡Sí! ¡te acuerdas!

-          Por supuesto que me iba a acordar, si quedé muy extrañado con eso.

-          ¿Cómo extrañado?

-          Que no siento que el inglés sea así para mí, me demoro mucho más que tú en traducir algo que está en inglés. Recuerdo que me ayudabas muy seguido con las tareas en inglés.

-          Sí, qué tiempos aquellos.

-          Ahora que lo pienso, podría pedirte ayuda con algunos papers que tengo que leer para la universidad.

-          Ya, pero no te pases.

-          Aparte del inglés, ¿hay otro que te guste? – Le preguntó Luciano, medio divertido por la idea.-

-          Mm, el francés siempre lo he encontrado romántico. Ahora tomé unas clases para el segundo semestre, espero que sea fácil.

-          No creo que tengas problemas para aprender. Parte viendo películas y escuchando música.

-          Sí, me dijeron por ahí que leyendo libros para niños es una buena manera de partir aprendiendo un idioma.

-          Es buena idea.

-          Sí que lo es.

Siguieron así hasta que Matilde comenzaba a quedarse dormida en el hombro de Luciano. Él decidió que ella podría quedarse a dormir en su cama, y él ir a la de su hermano (que está trabajando en el sur desde hace por lo menos cinco años. Viene de visita para las vacaciones de verano), para que Matilde no saliera al frío de la noche y se resfriara. Lo que Luciano nunca esperaría sería a Francisca yendo a su pieza, temprano en la mañana, para darle una sorpresa.

¿Continuará…?

[halfofwhatisayismeaningless]

The stylist. // Joe Mazzello. Requested.

Requested by anon :) Thank you for sending it. I’m planning on doing some smut and the requests are open, so please, send some :) Remember you have the spanish version under the english one.

Words: 1k.

Warnings: none.

Summary: (Y/N) is Joe’s stylist doring Bohemian Rhapsody.

I hate to wake up early, it's something that surpasses me, it gets me angry. But not that day, because even if it was eight in the morning, I was climbing the stairs of the most famous studios of music history, Abbey Road.

After some weeks of rehearsals we were going to try some of our costumes, today was coming the costume and makeup team.

When I got to the room where we had been rehearsing I saw a girl that I had never seen before, but I was sure that I wanted to see her after that day.

Do you know when a person looks you in the eyes and light up your existence? That's what I felt that morning, a warmness that ran through my body.

- Hello, Joe Mazzello. - she got up. - I'm (Y/N) (Y/SN), your stylist.

- Oh, good morning. Nice to meet you. - I shook his hand.

- You are much more like John Deacon in person, it's awesome.

- Thank you... I guess. - I smiled.

- It's actually a compliment, Deaky was always my favourite. - (Y/N) winked the eye.

- So this goes away in a few hair washes, right?- I said looking my curly hair in the mirror.

(Y/N) looked at me with a weird look, even trying not to laugh.

- Joe, you know that "Perm" stands for "Permanent"?

- What?

- This won't go away until your hair it's long enough to cut it.

- Are you joking? - I asked her seriously, she laughed and suddenly that permanent was worth it if it made her laugh.

- No Joe, I'm not joking. Does your hair take long to grow?

- The same as the rest of the people, I guess. - I turned around to look at her eyes, I snorted, and she smiled. - For how many scenes I did this?

- For two.

I put my hand on my face, pinching my nose.

- If it makes you feel better, I think you look handsome.

"Of course it made me feel better, that was the only thing that mattered to me" I thought. I smiled at her through the mirror. Hoping that she understood that I would make anything to my hair if she liked it.

After some weeks of shooting, (Y/N) and I were inseparable. We both knew that we liked each other, but no one had make a move. I used to catch her out looking at me while we were shooting and she used to catch me looking at her in the meals, when the costume team walked one way to another organizing everything for the next scene.

One night, after shooting the scene of the creation of Bohemian Rhapsody at the studio, I offered of going out for dinner, no one liked the idea because they were tired. But when I arrived to the dressing room to remove my make up and keep the clothes in the wardrobe, (Y/N) asked:

- Hey, is the dinner proposal still standing? I heard no one wanted to go, but if it serves you with me, I'm in.

- Of course it serves me with you, you are much more than enough. - I smiled at her and she nodded.

After having dinner and going for a walk, we went to the hotel where we were all staying. I walked with her to her room and when we were in her door she turned around, we were very close.

- I've had an awesome time, Joe, thank you for the dinner. - suddenly, and without thinking it much, I approached to her lips and kissed her at last. For some moments she didn't kissed me back, but then she continued it, opening her mouth to let my tongue in. After some seconds we broke the kiss. She looked at me, but she wasn't smiling. - Good night, Joe. - she said getting into the room.

- Good night. - I whispered.

I didn't sleep much that night. Had I done it well? Maybe I misunderstood the signs, but she continued kissing me, there was even tongue. The next morning I felt a knot in my stomach, I was nervous. I went to gen my breakfast, hoping to find her but I didn't. I found her when I was going back to my room, she had arrived from the street wearing a pair of leggins and a t-shirt, sweeting, she had went for a run. When she saw me she changed her face, to a serious one. We went up in the elevator together with one of the most uncomfortable silences I've ever heard.

- Did you went for a run?

- Yes, I couldn't sleep. - I nodded, "me neither".

- See you later. - she nodded and I saw how she walked down the hall. I gave myself some seconds to look at her, her butt and legs looked amazing in those leggins.

The make-up and costume hour was silence, not like other days, we used to tell each other stuff. I looked how her mouth went half-opened while she putted on me make up. I could only remember how they felt on mine the night before. While she was picking up the things of the makeup desk after removing my makeup, I found the courage to face the problem.

- (Y/N), I'm sorry if I offended you kissing you yesterday, it wasn't my intention. - she sigh and turn to look me.

- You didn't offend me. On the contrary, I'm flattered. I also wanted that kiss.

- Then I don't understand why are you like that with me.

- Because I liked you a lot, Joe. - I interrupted her.

- And I like you. Are you scared that I think you are just a one-night stand? Because I don't think so.

- It's not that. Is that you are Joe Mazzello, actor and director. And I'm (Y/N)(S/N), stylist. - she said the last word with contempt. - I love what I'm, but I'm not made to be a public person, I couldn't handle the press pressure that other couples have.

I approached her and put my hand on her cheek.

- (Y/N), if you want to, I'm planning to be with you the maximum time until you can't bear with me anymore. - (Y/N) smiled. - We don't have to make it public, a lot of couples don't do it, it's not that complicated, I mean it. I like you a lot and I am willing to assume all of your conditions.

Finally (Y/N) closed her eyes and approached me, sealing the agreement with a kiss.

- My only condition is that you don't let them separate us. - she said after the kiss.

Odio madrugar, es algo que me supera, me enfada. Pero ese día no, porque, aunque eran las ocho de la mañana estaba subiendo las escaleras de los estudios más famosos de la historia, Abbey Road.

Después de varias semanas de ensayos por fin íbamos a poder vernos los unos a los otros vestidos de nuestros respectivos personajes, hoy nos visitaban el equipo de vestuario y maquillaje.

Cuando llegué a la sala en la que habíamos estado ensayando me encontré a una chica a la que no había visto nunca, pero estaba seguro de que iba a querer verla más.

¿Sabéis cuando una persona os mira a los ojos y os ilumina la existencia? Eso es lo que sentí esa mañana, un calor que me recorría el cuerpo de pies a cabeza.

- Hola, Joe Mazzello. – dijo ella levantándose. – Soy (Y/N) (Y/SN), tú estilista.

- Ah, buenos días. Encantado de conocerte. – respondí dándole la mano.

- Eres mucho más parecido a John Deacon en persona, es increíble.

- Gracias… supongo. – dije sonriendo.

- Es un cumplido, Deaky siempre ha sido mi favorito. – (Y/N) me guiñó el ojo.

--

- Entonces esto en unos cuantos lavados de pelo se va, ¿verdad? – dije mirándome al espejo el pelo rizado.

(Y/N) me miró con gesto extraño, casi intentando no reír.

- Joe, ¿sabes que “Perm” viene de “Permanente”?

- ¿Cómo?

- Eso no se va hasta que te crezca el pelo lo suficiente como para cortarlo.

- ¿Estás bromeando? – le pregunté seriamente, ella soltó una carcajada por la que mereció la pena hacerse esa permanente.

- No Joe, no bromeo, ¿tarda mucho en crecerte el pelo?

- Igual que al resto del mundo, supongo. - Me giré para mirarla a los ojos, resoplé y ella me dedicó una sonrisa. - ¿para cuántas escenas me he hecho esto?

- Para dos.

Yo me llevé la mano a la cara, pellizcándome el puente de la nariz.

- Si te sirve de consuelo, a mí me parece que estás muy guapo.

“Claro que me servía como consuelo, era lo único que me importaba” pensé. Le sonreí a través del espejo, en silencio durante unos segundos. Esperando que entendiera que se haría de todo en el pelo si a ella le gustaba.

--

Tras varias semanas de rodaje, (Y/N) y yo nos habíamos hecho inseparables. Ambos sabíamos que nos gustábamos, pero nadie había dado el paso todavía. Yo pillaba a (Y/N) mirándome mientras rodábamos y ella me pillaba a mi mirándola durante las comidas, que era cuando la gente de vestuario se paseaba de un lado para otro organizando todo para la siguiente escena.

Una noche, tras grabar la escena de la creación de Bohemian Rhapsody en el estudio yo ofrecí salir a cenar, a nadie le pareció una buena idea, ya que estaban cansados. Pero cuando llegué a mi camerino para desmaquillarme y guardar el vestuario, (Y/N) me preguntó:

- Oye, ¿sigue en pie esa propuesta de cena? He oído que a nadie le apetece, pero si te sirve conmigo, yo me apunto.

- Claro que me sirve contigo, eres muchísimo más que suficiente. – le dije con una sonrisa. Ella asintió.

Después de cenar y dar una vuelta nos dirigimos al hotel donde nos estábamos quedando todos. Yo le acompañé a su habitación, cuando llegamos a su puerta ella se dio la vuelta, y nos quedamos muy cerca el uno del otro.

- Me lo he pasado fenomenal, Joe, gracias por la cena. – de repente, y sin pensarlo mucho me acerqué a sus labios, y la besé, por fin. Durante unos segundos ella no respondió al beso, pero después lo continuó, abriendo su boca para dejar pasar mi lengua. Tras unos segundos nos separamos. Ella me miró, pero no había sonrisa. – Buenas noches, Joe. – dijo metiéndose en la habitación.

- Buenas noches. – susurré yo.

No dormí mucho esa noche. ¿Había hecho bien? A lo mejor había interpretado mal las señales, pero ella ha continuado el beso, incluso ha habido lengua. A la mañana siguiente sentía un nudo en el estómago, de nervios. Bajé a desayunar esperando encontrarla, pero no había rastro de ella. Fue cuando volvía a la habitación cuando me la encontré, venía de la calle, con unos leggins y una camiseta de manga corta, sudando, había salido a correr. Cuando me vio cambió su cara, a seria. Subimos en el ascensor juntos, con uno de los silencios más incómodos que he “oído” nunca.

- ¿Has salido a correr?

- Si, no podía dormir. – yo asentí, “yo tampoco”.

- Te veo luego. – ella asintió y vi cómo se alejaba por el pasillo. Me di unos segundos para apreciarla, esos leggins le hacían unas piernas y un culo precioso.

La hora de maquillaje y vestuario fue silenciosa, a diferencia de los demás días en lo que nos contábamos cosas. Yo miraba como se entreabrían sus labios mientras me maquillaba. Solo podía recordar cómo se sentían sobre los míos la noche anterior. Tras el rodaje esperaba poder hablar con ella, y así fue. Mientras ella recogía toda la mesa después de terminar de desmaquillarme encontré el valor para enfrentarme al problema.

- (Y/N), siento si te ofendió que te besara ayer, no era mi intención. – ella suspiró y se giró a mirarme.

- No me ofendiste. Todo lo contrario, me siento halagada. Yo también quería ese beso.

- Entonces no entiendo por qué estás así conmigo.

- Porque me gustas mucho, Joe. – yo la interrumpí.

- Y tú a mi también ¿te da miedo que solo piense que eres un lío más? Porque no lo pienso.

- No es eso. Es que tú eres Joe Mazzello, actor, director de cine. Y yo soy (Y/N) (Y/SN), maquilladora. – dijo esta última palabra casi con desprecio. – Me encanta lo que soy, pero no estoy hecha para ser una persona pública, yo no podría soportar la presión que tienen otras parejas por parte de la prensa.

Yo me acerqué a ella y puse mi mano en su mejilla.

- (Y/N), si a ti te parece bien, yo planeo estar contigo el máximo tiempo que me consigas soportar. – (Y/N) sonrió. – No tenemos por qué hacerlo público, muchas parejas no lo hacen, no es tan complicado, te lo digo de verdad. Me gustas muchísimo, y estoy dispuesto a asumir todas y cada una de las condiciones que pongas.

Por fin (Y/N) cerró los ojos y se acercó a mí, sellando el acuerdo con un beso.

- Mi única condición es que no dejes que nos separen. – dijo después del beso.

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Williston Force España heyyyyy, ¿estás pensando en tomar otro baño porque hace calor? ¿Te sientes inquieto por el calor? ¿Y está buscando una forma rentable de combatir el calor? Si es así, entonces esta revisión es para usted. Para que no me olvide, ¿se está cansando del costo de mantenimiento que conlleva el servicio de una unidad dividida o un aire acondicionado normal y quiere un descanso? Entonces ¡Eureka! esta revisión podría ser lo que ha estado buscando. El calor excesivo puede ser algo muy importante con lo que lidiar. Durante mi visita a Sudán en África para un pequeño proyecto de investigación, Williston Force España la agencia con la que trabajé estaba organizando. Sentí el calor y el calor de primera mano. Hacía tanto calor que decidimos concluir nuestro proyecto rápidamente para regresar a los Estados Unidos. El sol la mayor parte del tiempo es muy abrasador y el calor no es poca cosa con lo que lidiar. Además, descubre que áreas como esa tienen problemas de energía y, por lo tanto, brindan restricción para los dispositivos que ayudan a reducir el efecto del clima para que funcionen de manera efectiva. África no es solo el único continente con tal preocupación, tenemos que lidiar con Summer. El tiempo durante. El verano también es soleado y viene con un alto nivel de calor. Y para manejar el efecto del calor, nos vemos obligados a detener las actividades que realizamos, dejar de usar algunas prendas, reducir el maquillaje que usamos, reducir la ingesta de proteínas y mucho más. Eso provocó una pregunta: ¿No podemos todos hacer lo que siempre hacemos, a pesar del clima? Sin embargo, una cosa que todos disfrutamos en estos días es la tecnología y Williston Force la tecnología salvando el día. Los desarrollos tecnológicos han dado paso a diversos productos que brindan soluciones a los problemas que enfrenta el mundo y en el campo de la refrigeración y el acondicionamiento de la atmósfera, Web Oficial. https://www.espanasuplementos.es/williston-force-espana/ 

[juliaajimenez]

Semana dos (21 feb - 27 feb)

Esta fue la primera semana de clases y de salidas largas del viaje. Mi horario está muy ligero y es muy cómodo porque ni se siente. El martes salimos a pasear después de la cena y convivimos un rato antes de tener que regresar para cumplir con el check-in. 

Por lo general, me costó mucho trabajo levantarme temprano en estos días pero porque tuve una semana de despertarme más tarde, ya me iré acostumbrando. El conflicto de esto fue que el jueves y el viernes me quedé dormida. No fue un problema mayor ya que sí llegué a tiempo pero tengo que mejorar esa situación para no estresarme continuamente.

El viernes salí en la tarde después de la escuela y estaba un poco cansada, entonces en la noche me quedé en la casa luego de la cena, hice ejercicio y me preparé para dormir temprano. En cambio el sábado, estaba muy entusiasmada para salir y ser productiva, en especial porque era fin de semana. Así que me desperté temprano, desayuné, me bañé, me arreglé y fui al Palazzo Medici-Riccardi.

No estaba segura si me dejarían entrar porque aún no tenía la tercera vacuna pero no tuve problema. Me dieron turno de entrada a las 2:05 y era medio día, entonces tenía tiempo de pasear un rato. Entré a una tienda de maquillaje muy linda y compré un par de cositas. ¿Las necesitaba? No. Pero eventualmente se iban a acabar los productos que sí tengo, así que no le ví mucho problema. Y me gustaron bastante las nuevas adquisiciones.

Como no quería cargar con la bolsa para todos lados, decidí ir a mi casa a dejarla y regresar a la hora de entrada al museo. No es que esté muy cerca del centro, pero no me molesta caminar. Fui y regresé con el tiempo medido y salió perfecto. El Palazzo me gustó mucho, le tomé foto literalmente a todo y sentí escalofríos cuando entré en una de las habitaciones con cama porque fue como si en cualquier momento pudiera entrar un familiar Medici del siglo XV.

Tengo un gran spam de fotos que podría poner, pero escogí esta foto porque fue de mis salas favoritas, me veo yo (en el espejo, duh) y me gustó como salió la foto.

Considerando esto, el sábado fue el mejor día de la semana. En la mañana, Palazzo Medici y productividad, en la noche salida con un par de las niñas del grupo 3 y mis amigas de Ciudad de México, a las cuales no había visto mucho. Fuimos a un lugar muy lindo por el duomo, con música y nos la pasamos muy bien.

Lo malo, y lo peor de la semana fue que el mismo sábado en la noche, mi roomie tuvo una llamada con un amigo de 12:20 pm a las 7 y cacho de la mañana. Dormí como dos horas. Y al principio si estaba medio molesta pero cuando me dijo que había valido la pena que porque es bien lindo y estaban hablando en plan un poco más que amigos, mi corazón de pollo dijo ‘ok, no pasa nada.’ El lado amable de estar tan cansada el domingo fue que leí todo el día y me encantó mi libro, entonces no estuvo tan mal.

Mi aprendizaje personal de la semana es que es mejor perdonar a la gente y no gastar energía en cosas que ya no pueden cambiarse. Aunque no fue un gran momento y estaba muy cansada lo dejé ir luego luego y creo que yo misma me impresioné de cómo manejé la situación, porque en algún otro momento seguro lo hubiera hecho diferente y por eso estoy orgullosa de mi. Eso fue parte del aprendizaje de la semana y, creo, uno muy bueno.

La decisión más relevante que tomé esta semana fue, en general, como ir organizando mis tiempos, para llegar a la escuela o de regreso, qué hacer en mis tiempos libres y cosas por el estilo. Por lo cual no fue una decisión solo de un día. Toda la semana fui calculando y manejando cada vez mejor mis tiempos. Por último, considero que las emociones que más tuve presentes en la semana fue optimismo, tranquilidad y empatía. Optimismo porque estaba muy emocionada y curiosa con la ciudad, tranquilidad porque me da mucha paz ir y venir caminando, y si he caminado bastante, y empatía porque con la convivencia que tuve creo que estuvo muy presente porque me gusta ser empática con la gente y el momento en el que más se percibe fue en el mal trago del fin de semana. 

Ciao!

[a3-supeingo]

Feliz cumpleaños, Azami (2)

Diálogos del cumpleaños de Azami (25 de octubre)

Pantalla inicial: Quiero crecer... pero no convertirme en un anciano.

Sakuya: ¡Feliz cumpleaños, Azami-kun! Dicen que el otoño es la temporada para disfrutar el arte. ¡Creo que te queda a la perfección!

Masumi: Estoy haciendo la rutina de cuidado de la piel de Azami sólo por ti. Porque quiero que me elogies...

Tsuzuru: Feliz cumpleaños. El club de fútbol se hizo y funciona gracias a ti. ¿Qué tal si jugamos?

Itaru: ¿El cumpleaños de Azami? Ajá... Así que esa es la razón por la que Sakyo está nervioso. Felicidades, Azami.

Citron: ¡Feliz cumpleaños, Azami! ¡Tu rap siempre es fresco! ¡Debemos tener una batalla, yo!

Chikage: ¿El cumpleaños de Azami? Es bueno que esté creciendo, pero extraño nuestras charlas...

Tenma: Estas son herramientas de maquillaje certificadas por un profesional. Contaré con tu ayuda para el maquillaje, Azami.

Yuki: Feliz cumpleaños, Azami. Hay un traje que me gustaría probar... ¿Quieres hablar después sobre la estrategia?

Muku: ¡Este año conseguí algo de manga shojo para el cumpleaños de Azami-kun! Espero que disfrute leerlos.

Misumi: ¡Hoy haré maquillaje triangular para Azami! ¡Espero hacer un buen trabajo!

Kazunari: ¡Azamin, feliz cumple! ¡Algún día tenemos que ir a una cita grupal! Pero, espera, ¿necesitas la autorización de Frooch?

Kumon: ¡Feliz cumpleaños, Azami! ¡Usa este cupón para un juego de fútbol conmigo! ¡Casi no juego fútbol, así que es un ítem raro!

Banri: Azami, feliz cumple. ¿Puedes ver los resultados de esa rutina de cuidado de la piel que he estado haciendo?

Juza: Feliz cumpleaños, Azami. Estoy celoso de que hayas cumplido tu sueño tan rápido... Sigue así.

Taichi: ¡Feliz cumpleaños, A-chan! Mi regalo para ti es... ¡Grandioso Puño Mantou Ardiente!

Omi: Es el cumpleaños de Azami... Hice planes secretos con Sakoda para preparar pimientos verdes a la parrilla.

Sakyo: ¿Cuántas veces he celebrado con ese niño? ...Pero ha crecido muy bien. Feliz cumpleaños.

Azami: ¿Otra batalla de rap en el dormitorio? Hablando de caos... Pero tengo que agradecerles por los deseos de cumpleaños.

Tsumugi: Feliz cumpleaños, Azami-kun. Vayamos de nuevo a un festival, algún día. ¡Te mostraré mis habilidades al lanzar los anillos...!

Tasuku: Izumida, feliz cumpleaños. Estoy organizando algunos juegos de fútbol. ¿Vas a unirte?

Hisoka: Feliz cumpleaños, Azami. Deberías tomar siestas. Puede ser que tu piel mejore con ellas.

Homare: Así que es el cumpleaños de Azami-kun... He preparado el rap definitivo. No puedo esperar a que él lo escuche.

Azuma: Azami, feliz cumpleaños. Estoy agradecido por todos los consejos de belleza que compartimos. Gracias.

Guy: Feliz cumpleaños, Izumida. El cuidado de la piel es, de hecho, difícil. Espero poder venir a pedirte consejos.

[dentelladas]

(vía Black Rainbow Art, creaciones antirracistas)

Que no se trata solo de pendientes bonitos de arcilla y pigmentos vivos. Que hay mucho amor en las manos de quien los crea. Que cada una de las piezas hermosas que penden de las orejas de personas que también lo son ( y que vemos en las fotos de su perfil de instagram) narran historias de raza y racismo, género y disidencia sexual, salud mental, cuerpos no normativos y gordofobia. Que en esta entrevista, Vicky Fotabon, su creadora, una profesora en ciernes que entrelaza todos estos temas con ternura, fuerza y elocuencia nos recuerda que el individualismo en el activismo es un sinsentido. Que por todo lo anterior, lean, les merecerá la pena.

¿Qué es Black rainbow art?

Black Rainbow Art es un proyecto autogestionado de pendientes de arcilla cargados de ideas artísticas y políticas. También es un espacio de creación de contenido antirracista tiernamente radical, un espacio donde expresar las cosas que siento y que me han moldeado hasta convertirme en la persona que desarrolla este proyecto. Black Rainbow se formula también como un lugar seguro donde lxs hermanxs racializadxs queer  somos celebradxs y representamos el centro.

El nombre ya es toda una declaración de intenciones… ¿desde dónde creas?

Cuando estaba pensando cómo llamar al proyecto se me ocurrieron varias cosas y aunque todas incluían la palabra Black dudé por un momento sobre que debía acompañarla. La bandera LGTBQI+ incorporó las franjas marrones y negras hace unos años después de que personas negras y marrones que pertenecían a este colectivo luchasen en una batalla contra la invisibilización que sufrían dentro de esta comunidad disidente. Me pareció una idea genial llamar Black Rainbow a mi proyecto por esta historia pero también para representar el negro como un color bello, alegre, poderoso. Creo desde un cuerpo que ha sufrido mucha violencia sistemática y ha visto cosas horribles contantemente pasando a otras cuerpas parecidas, pero Black Rainbow es resistencia. Es un espacio que más allá de ayudarme a sobrevivir ecónomicamente en este sistema, tiene como objetivo crear una narrativa visual distinta. Cuerpxs negrxs y marronxs felices, sonriendo, disfrutando, existiendo en sus propios parámetros y amándose entre ellxs.

¿Quién está detrás de la marca?

Mi nombre es Vicky, soy una persona afrodescendiente, diaspórica, queer y gorda. Mi vida entera ha sido un camino de intentar encontrarme, no creo que lo haya logrado aún. Intento pensarme a mí misma desde la ternura negra, vivo intentando sanar traumas y mi salud mental ha jugado un papel importante en mi manera de habitar el mundo. Por eso resisto desde la lentitud de mi cuerpo, estoy muy cerca de convertirme en profe, me encanta pensar que lxs niñxs afro no solo se van a encontrar una profe que se parezca a ellxs, sino que también vamos a ser críticos y vamos a crear el futuro juntxs. Mi medio de expresión ha sido durante mucho tiempo la poesía, ahora me encuentro en un momento complicado y me gusta usar las manos para crear cositas que posiblemente hagan felices a otrxs ( y también a mí).

¿A raíz de qué comenzaste a crear?

Este año me encuentro viviendo en un lugar nuevo y este movimiento ha supuesto que mis redes cambien mucho. No he tenido mucha energía ni fuerza para salir de casa la mayoría de los días (acabemos con el estigma hacia los problemas de salud mental!!) y esto también ha reducido mucho mis posibilidades de trabajar mientras estudio. Por eso decidí buscarme un hobby y, así salir de mi cabeza. Me compré unas pastillas de arcilla de segunda mano y comencé a crear con tutoriales online y los colores que pasaban por mi mente. Decidí entonces abrirme una página de Instagram para compartir lo que iba haciendo y también para hablar de las cosas que pensaba y sentía en una plataforma que no me impusiera tanto como mi cuenta personal. Poquito a poco fui mejorando con la arcilla pero también fui atreviéndome a escribir más, a decir más lo que pensaba y sentirme menos culpable por hacerlo.

A veces, cuelgas fotos de pendientes junto a cuadros o ilustraciones, ¿qué te inspira?

¿Y en quién/quiénes piensas cuando los haces?

Siempre acompaño los pendientes de una imagen que me inspira, a veces es muy obvio como unos que hice que decían “no a las fronteras”. Esos pares en específico nacen de la situación tan confusa que ha creado el COVID-19 donde “las fronteras están cerradas” por una cuestión de salud. Pero, las fronteras llevan mucho tiempo cerradas para lxs hermanxs migrantes y el sufrimiento causado por estas es invisibilizado, tal y como se invisibiliza la colonialidad presente en las relaciones norte-sur global. Otros tienen imágenes de pancartas, de otrxs artistas, de comunidades negras… me inspira la fuerza de nuestras comunidades y siempre nos tengo presentes en el proceso de creación. Me gusta también el proceso de crear diferentes diseños, no solo un pendiente con un puño o la forma de África nos representa (obviamente también lo hacen) pero quiero escapar de las políticas de identidad que nos dictan que tipo de arte debemos crear o que debemos llevar puesto para ser lo suficientemente afro. Para mi crear unos aros con colores brillantes inspirados por mi madre y mi familia en días de fiesta es igual de afrocentrado que crear un puño en alto. Quiero escapar de esos cánones (in)visibles donde la gente blanca puede crear de todo pero lxs racializadxs solo tenemos un pequeño margen de movimiento.

Algunos de los modelos de tus pendientes vienen cargados: “organize”, “resist”, “fight”, puños o hasta “no” son mensajes que pueden leerse en ellos , ¿la moda/el arte que parte de las personas racializadas PUEDE ser un elemento de transformación social? ¿Y debe serlo cuando les creadores son personas que pertenecen a minorías o a comunidades minorizadas? ¿Eso genera una mayor responsabilidad o sientes que creas libremente?

Creo que cualquier proyecto llevado a cabo por una persona racializada es un proyecto de resistencia. No estamos acostumbrades a ver personas racializadas creando y eso es una transformación de por sí. Ahora, pienso también que debe de ir acompañado de una organización colectiva política y de base. Aprecio mucho las comunidades, las redes de apoyo hechas por/para personas migrantes y/o racializadas y los colectivos. Tampoco creo que debamos estar obligades a transformar la realidad con lo que decidamos crear (artísticamente o no), ya que en un sistema que nos persigue constantemente, sobrevivir ya es una revolución.

Por otro lado, últimamente aparecen muchas personas racializadas modelando en grandes marcas, o siendo influencers de moda, etc. Miro de reojo los discursos que buscan solo la visibilidad y la representación ya que ¿hasta qué punto es favorecedor para nosotres que una persona racializada sea la cara de una gran marca que explota a otras personas black y Brown en el sur global? Creo que debemos darnos cuenta de los privilegios que (algunes) tenemos al habitar este lado del mundo y ser responsables con las decisiones que tomamos ya que el capitalismo está constantemente reinventándose para poder incluir a la mayor cantidad de gente posible.

Pero es que el perfil de Instagram muestra mucho más que pendientes, también incluyes textos en los que se habla, por ejemplo, de lucha colectiva, ¿consideras que somos demasiado individualistas?

Totalmente. La sociedad occidental nos ha impuesto, con todas sus armas, el no pensarnos en comunidad. Por ejemplo, siento que hoy en día tenemos muchos referentes individuales mientras miramos muy poco a las luchas colectivas. Me parece peligroso que una persona hable por una comunidad entera. Confieso, no creo en les referentes individuales, más allá de las personas que han puesto el cuerpo en las calles o nuestras bellas madres pienso que las mayores victorias se han conseguido mediante un esfuerzo colectivo. Creo que nuestro individualismo está también muy influenciado por las dinámicas de ego que han creado las redes sociales. Hace no mucho leía un libro llamano “Aphro-ism” donde Aph y Syl Ko hablan de como el sueño americano ha cambiado para les jóvenes. La meta ahora es ser influencer y famoso. Conseguir una gran plataforma de seguidores donde la gente escuche lo que una persona concreta tiene que decir… y muchas veces este algo es sobre antirracismo, feminismo, gordofobia o cualquier otra opresión. ¡Ojo! No digo que esto no pueda hacerse, solo pienso que no sirve de nada si luego no nos estamos organizando con les hermanes del barrio, con las personas racializadas que están viviendo situaciones más complicadas que las nuestras, etc.

No recuerdo qué autora afroestadounidense habla del capitalismo negro. Como decía en la pregunta anterior, no creo que sea suficiente con que haya productos para nuestros pelos, maquillaje de nuestro tono o empresas que nos incluyan en sus plantillas… Aunque esto sea importante, desde mi punto de vista, debe de ser un paso intermedio para lograr el fin último, acabar con una manera de vivir que está basada en el extractivismo del norte al sur global. Y, aunque sea complicado, como personas racializadas viviendo en occidente también debemos mirarnos esto, ¿estamos dispuestes  a renunciar a nuestras comodidades capitalistas para crear un mundo verdaderamente justo?

También abordas la interseccionalidad, una palabra que se ha sustraído al activismo feminista afro y que se usa mucho, ¿crees que de manera correcta?

Pienso que, incluso dentro de nuestra comunidad, la interseccionalidad debe ser repensada. Nace en un contexto laboral donde K. Crenshaw busca que las mujeres negras puedan trabajar en lugares concretos. Y, aunque el acceso al ámbito laboral es esencial, no me parece adecuado que  una teoría creada para este ámbito sea usada como nuestro único marco de lucha ya que puede acabar convirtiéndose en un ideal liberal de inclusión más que de liberación.

Nuestras diferentes opresiones crean categorías distintas que deben ser pensadas como particulares y no universalizables, no como una unión de varios ejes que ya se piensan  de manera predeterminada. Por ejemplo, yo soy una mujer negra y gorda, entre otras cosas, ser mujer se piensa desde un parámetro muy específico (la blanquitud), ser negre se piensa muchas veces desde la masculinidad y los grandes hombres  negros como Malcom X y la lucha gorda se da muchas veces desde una universalización de lo que quiere decir ser gordx siendo blanque.. Yo no habito una realidad en la que los parámetros de mujer, los de negre y los de gorde se unan en un solo cuerpo y formen un mix predeterminado. Existo en una realidad distinta, mi negritud es distinta a la de los hombres negros, mi feminidad es diferente a la de las mujeres blancas y mi cuerpo gordo sufre otros señalamientos que no coinciden con la idea de gordofobia mainstream. Lo mismo ocurre con las personas a las que les atraviesan otras realidades.

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Otro tema complicado es cuando se saca a espacios blancos de manera descontextulizada. Creo que se utiliza muchas veces como una palabra parche aunque no se esté realmente haciendo el trabajo de deconstrucción, también pienso que para que las personas racializadas podamos habitar espacios mixtos racialmente debe haber un trabajo muy grande hecho anteriormente por las personas blancas. De lo contrario, existiría el riesgo de que fuésemos solo un objeto para que el espacio se ponga una chapa de interseccionalidad cuando los parámetros en los que está formulando siguen siendo eurocentristas y, en numerosas ocasiones, racistas.

En uno de los textos dices que la industria de la moda es racista, clasista y cruel, un mensaje fuerte con muy pocas palabras, ¡desarrolla, por favor!

El mundo de la moda ha impuesto durante mucho tiempo una idea de cuerpo perfecto muy específica: ser delgada, ser alta, ser elegante, no ser “demasiado”… Hoy en día, y gracias a la llamada de atención realizada por personas de estos colectivos, aunque todavía pasa,  cada vez vemos más diversidad en la moda: personas queer, gordes, trans… Aunque aplaudo y valoro lo que debe suponer estar en una atmósfera como esa, no olvido las otras caras de la moda. Gran parte de la ropa de las marcas famosas es cosida en países del Sur Global donde las personas (en su mayoría feminidades) son pagadas sueldos miserables y además trabajan expuestas a tóxicos durante largas horas. Las condiciones de los edificios son deplorables y en varias ocasiones se han desplomado matando a miles de personas. Por otro lado, es una de las industrias más contaminantes. ¡Ah! Y que no se nos olvide como en los últimos años hemos presenciado como marcas multimillonarias se han apropiado de elementos de la cultura negra de barrios pobres en esta idea de la moda “rachet”. La moda rachet del chándal, cadenas de oro gigantes, zapatillas, etc… ha tomado todo aquello que se entendía como vulgar en las personas racializadas pobres y lo ha convertido en una industria millonaria (dejándonos fuera, claro).

Con la llegada de la industria fast fashion, nuestros armarios cambian cada vez más rápido y las prendas se quedan obsoletas en meses. Seguir estos mandatos sobre lo que debemos ponernos es alimentar una maquinaria cruel, racista y clasista. Y no, que nuestras caras o cuerpos aparezcan en portadas o pasarelas, no cambia esta realidad.

Otro asunto al que le dedicas espacio es la gordofobia, acabas de subir un vídeo, de hecho, en el que explicas la vinculación existente entre la gordofobia y la negritud, ¿podrías explicarnos más?

Los procesos de colonización y esclavitud deshumanizaron por completo a las personas africanas. Esta deshumanización colocó un elemento de otredad y salvajismo en su manera de existir (costumbres, alimentación…) pero también en sus cuerpos. Numerosas feminidades fueron traídas a Europa para ser exhibidas (y otras muchas fueros pintadas con rasgos corporales exagerados). Sus cuerpos grandes, enfatizando algunas zonas como el culo, eran para la población blanca un ejemplo de su animalidad. También se hablaba de que les africanes eran propensos a comer en exceso y también a ser “pecaminosos” en general ya que no eran capaces de tener ningún tipo de control sobre elles mismes. Esto, junto con otros muchos factores, se utilizó como “evidencia” para justificar científicamente la inferioridad negra. Y, como se temía a les negres, y por supuesto parecerse a elles, estar delgade era una manera de mantener esta distancia y supuesta superioridad.

Este miedo , y mofa, hacia las feminidades negras gordas continúa, desde las películas donde aparecen representados personajes cómicos basados enteramente en reírse de la gordura, la feminidad y la negritud, hasta tradiciones racistas como los Indianos con “la negra Tomasa”.  Y, está bien si nuestros cuerpos no se asemejan a los cuerpos de las personas blancas, de hecho existe una gran diversidad de cuerpos entre la población afro. Pero para mí, existir en este cuerpo es resistencia y belleza, honor a todas las feminidades que existieron y resistieron antes que yo.

Me parece interesante que las modelos que aparecéis con los pendientes seáis tú y tu compañera, ¿a qué se- debe? ¿es una cuestión de visibilidad intencionada?

Como decía por ahí arriba, quiero que Black Rainbow sea un espacio donde las personas queer negres, gordes… Podamos sentirnos vistes, belles y querides. También lo pienso como un espacio afectivo y muchas veces terapéutico. Verme reflejada con mis creaciones, enfrentando todos los miedos que ha supuesto mi propia imagen por mucho tiempo, me hace sentir libre. Que mi compañera aparezca también lo es, me ha apoyado desde el principio con el proyecto y representa toda la fuerza y belleza que me gustaría que habitara Black Rainbow. De todos modos, me encantaría fotografiar a más gente en el futuro. Ya lo hice con un par de hermanas de Tenerife que portan toda esta #BlackGirlMagic que nos caracteriza.

¿Cuáles son tus próximos planes?

Me encantaría hacer colaboraciones con otras personas queer, afro, gordes… que estén creando cosas lindas. También quisiera desvirtualizar un poco Black Rainbow y acudir a mercados y eventos dentro de la comunidad.  Por último, y como sueño máximo, me encantaría lograr montar algún mercado de creadores racializades de donde naciese una red para apoyarnos colectivamente en este campo tan difícil de la autogestión.

¡Mucha suerte en todo lo que te propongas!

Vicky Fotabon

[clienteleturismo]

DESFILE INTERNACIONAL DE DÍA DE MUERTOS 2019

Fuente: Glenn Juárez Por: Glenn Anton Juárez 

El pasado 27 de octubre se llevó a cabo en la Ciudad de México el gran desfile internacional de día de muertos, por lo que Clientele no podía perderse este gran evento. Las calles de la Ciudad de México se llenaron de colores y fiesta con la cuarta edición del desfile, la cual hace tributo a la cultura mexicana y especialmente muestra al mundo con un impresionante espectáculo que celebra en grande el Día de Muertos.

Para ponerlos en contexto, el desfile llegó a México justo después de la grabación de la película de James Bond Spectre, donde tomaron escenas del carnaval de Catrinas y calaveras; se hizo tan emblemático en México y el extranjero que decidieron continuar con este evento en los siguientes años. Este año la temática fue acerca de “Un Regalo de Cantos y Flores de México para el Mundo”, dicho evento se dividió en cuatro secciones: Mictlán y Sincretismo, Carnaval de Calaveras, Arte y Cultura, y La Fiesta.

El recorrido comenzó a las 2:00 de la tarde y siguió la ruta a partir del Zócalo, avanzando por 5 de mayo, Avenida Juárez, Reforma, Ángel de la Independencia, Estela de la Luz, Arquímedes Masaryk y Parque Machado. Se presentaron carros alegóricos, enormes catrinas, marionetas, bandas, charros negros, personajes mexicanos importantes para la cultura como Diego Rivera y Frida Kahlo.

Durante nuestra visita logramos entrevistar a Sofía Rage de Valdés, gerente de marketing digital de NYX Cosmetics, quienes fueron invitados por TV Azteca a participar en el evento por tercera ocasión, ofrecieron maquillajes gratis de catrinas desde Reforma hasta Polanco, colocaron seis estaciones para catrinizar a toda la gente, debido a que realizaron una investigación de mercados, donde se dieron cuenta que a los mexicanos les encanta el día de muertos y no todos saben personificarse como catrinas. Su dinámica para obtener el maquillaje gratis era seguir el hashtag #Catrinízate, el cual logró ser viral hasta en plataformas como TikTok.

Incluso entrevistamos a Carlos Quirarte, reportero y presentador mexicano de TV Azteca, actualmente conductor de Venga la Alegría, quien se encontraba conduciendo en vivo el programa del desfile internacional, nos compartió una breve explicación de la importancia de eventos culturales, su opinión acerca del desfile y la difusión de este.

Checa las entrevistas en: https://youtu.be/o1wJmSTsZvA

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1. ¿Cuál es la importancia de eventos de alta magnitud como este?

-Obviamente que en otras partes del mundo conozcan lo bonito de las tradiciones mexicanas, que comenzó desde el 2016, colocando a México y a sus tradiciones en el foco, y mantenerlas generaciones y generaciones porque luego se nos olvida.

2. ¿Cómo es que los medios de comunicación se están organizando para hacer este evento tan masivo?

Nos ponemos con el gobierno de la Ciudad de México y la Secretaría de Cultura, que organizan este evento, se hacen o se piden los permisos necesarios para poder colocarlos estratégicamente a lo largo del kilómetro que dura el desfile o que va a recorrer el desfile y entonces ya cada televisora tanto Televisa como TV Azteca, en este caso pues elige los puntos que mejor le vayan a dar publico como esa sensibilidad para que puedan ver de muy cerca y mayor detalle el desfile, porque la gente que lo ve en vivo lo percibe muy diferente a la de la televisión, hasta a veces se ve más espectacular en la televisión y es gracias a la tecnología, pero sí se recomienda que si tienen la oportunidad de verlo en vivo, lo hagan ya que es lo bonito.

3. ¿Cuál es perspectiva personal del desfile?

La verdad te voy a ser muy honesto, es mi primera vez conduciendo el desfile como tal, desde el 2016 tenía muchas ganas de hacerla y a mi me gusta mucho la televisión en vivo, y es eso, solamente transmitir emociones, de eso nos encargamos, por ello somos conductores, el conductor de lo que está pasando aquí a la sociedad.

Lamentablemente, producción cortó la entrevista debido a que tenían que salir en vivo en un par de segundos, pero por otro lado también entrevistamos a vendedores, fotógrafos, mexicanos y extranjeros. Hubo muchas razones por las cuales estas personas decidieron asistir, los vendedores por fines económicos, fotógrafos para tomar fotos y subirlo a sus redes sociales, mexicanos que asistieron en familia sólo para disfrutar el desfile, y el que más nos llamó la atención fue el caso de dos extranjeros que se conocieron ese mismo día.

Mitchell, australiano y Annie, estadounidense, quienes se vieron motivados a visitar este evento mexicano para conocer y entender una cultura tan diferente como lo es la mexicana, ya que, por ejemplo, en Australia no tienen ningún festival como el día de muertos, pues tienen una perspectiva muy pesimista, mencionó Mitchell. Destacaron la alegre personalidad de los mexicanos y la pasión, perciben a los mexicanos como personas muy amorosas a la cultura y sus ganas de difundir su cultura. Mitchell, nos comentó que se enteró del desfile gracias a la película de James Bond Spectre, cuando en la escena de apertura se muestra caminando por el Desfile del Dia de Muertos y Annie se enteró por una amiga que le contó acerca del evento.

Así como Mitchell y Annie, miles de personas esperaron con ansias ver el hermoso desfile lleno de colores, catrinas, disfraces hermosos, arte y sobre todo vivir este increíble desfile, vivir la cultura mexicana.

Fuente: Glenn Juárez Por: Glenn Anton Juárez

[nsamanthac]

Mi primer tea party fue este domingo pasado (01-sep-2019) y les contaré como me fue.

La invitación

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ El look ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

Coord: Como mi madre ya era parte de la comunidad desde hace un tiempo tenia varios vestidos, use uno que me prestó, la blusa de ella también, los zapatos, las medias 😂 es genial cuando puedes usar la misma ropa. La cartera era de ella, tengo una muy bonita pero los colores no combinaban 😅

Cabello: Decidí no usar peluca y usar mi propio cabello, tengo una buena cantidad y es largo, tarde casi una hora planchandolo con una mini planchita porque la grande que tenía paso a mejor vida, para luego hacer los bucles que fue fácil al ser mi cabello rizado. Me gustó como quedó pero hacia demasiado calor, me lo hubiera imaginado y me hago dos colas o algo así.

Maquillaje: Super sencillito un par de sombritas naturales, un poco de brillito y listo, el reto era ponerme las pestañas, es la primera vez que me las logro poner bien, sin tardar demasiado, ni que se me despeguen los extremos o me queden muy arriba de la línea de las pestañas.

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ Pre-tea party ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

Como ya mencioné mi madre es parte de la comunidad desde hace un tiempo y también ayuda a organizar así que fuimos temprano al lugar y me tocó ayudar a decorar, también ayude a servir la comida y repartir los souvenirs (porque quise, nadie te obliga 😅).

  A las 12:30 comimos una lasagna que preparó una de las chicas, la cual sospechamos que nos enfermó a mi madre, a quien la preparó y a mí, pero si fue eso, no me arrepiento de nada porque estaba buenísima, me la volvería a comer aun conociendo los nefastos resultados.

El cuerpo del delito

Para cambiarnos fue gracioso porque estábamos como 4 en un cuarto dando vueltas de un lado a otro buscando lo que usaríamos, una parte de las chicas hicieron una pijamada así que estaban desde el día anterior organizando y preparando todo.

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ Tea party ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

La temática era Gala Estelar así que había mucho azul, brillo y estrellas. Cada asiento tenia una servilleta, un vaso, un sorbete y una bolsita con un chicle y un par de gomitas de fresa.

Comenzaron con un saludo y luego presentándose cada una, donde decías tu nombre, como conociste la moda lolita, quien te trajo y tus estilos favoritos.

Luego pasamos a la comida salada, el juego de “lo siento” intercambiando plantas que cada una trajo para la dinámica.

seguido de unas rifas, entre ellas las de un vestido, que no me saque :’D pero me parece que a quien le tocó no tenia vestido propio así que me parece bien. También se le dió un premio al coord favorito del tea party, esto fue por votación de esta mi madre terminó de 4to. Mientras sucedía todo eso yo estuve sirviendo la comida dulce que se dió luego de todas las rifas, y pasaron a las fotos, las despedidas, etc.

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ Post Tea party ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

Las plantas de los pies me dolían horriblemente y mi hombro izquierdo porque cargue un montón de cosas 😂 me divertí muchísimo y la verdad no puedo creer que sea anual, me moriré esperando. Debo decir que fuí solo por no quedarme sola en casa, aunque mi madre me había invitado antes no tenia ganas de ir, incluso fue el día antes que termine decidiéndome.

Una fotito del contenido de mi bolsita de souvenir ♡

Foto con mi madre ♡

Lolita & Tea party, por primera vez Mi primer tea party fue este domingo pasado (01-sep-2019) y les contaré como me fue. ＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ El look ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

[jonathan-foto]

Ekaterina @_sh.e_ en estudio #Jonathanfoto. Maquillaje y peluquería: @maquilladora_yuli_poz Organizando nuevas ideas para fotos en mi estudio #retrato #beauty #portraiture #portrait #photography #photographer #fotografovalencia #Valencia #valenciaenamora #valenciagram #igdaily #ig_portrait #headshoot #photoshoot #photooftheday https://ift.tt/2NyyCuI

[galaxystarblog]

Entre Sus Manos

Terminando de realizar la tarea en el cuarto, otra vez escucho los quejidos de mi madre a causa de las golpizas que le propina mi padre y nuevamente me tapo los oídos con mis manos. Siempre ocurre la misma situación, cada vez que mi padre llega sólo para descargar su furia en nosotros. Sin embargo, esta noche es diferente porque no sólo escuché los gritos de mi madre y los insultos de mi padre, sonó algo quebrarse y luego hubo silencio, un desesperante silencio.   4 meses atrás…   Cuando sonó la alarma de las 6:30 am, abro mis ojos y estiro la mano para que deje de sonar. Lentamente me levanto de la cama en busca de mis gafas y bajo a desayunar. Mi madre sonrió aquella mañana, se veía radiante y muy feliz a pesar de que hace algunos días se sentía como si ella estuviese perdida, tanto, que múltiples veces no se daba cuenta a qué horas salgo o llego de la escuela y se asusta al no encontrarme. La saludé con un beso sonoro en la mejilla y se me llevó de la mano hacia la mesa donde nos sentamos a comer.  Mi padre tardaba en llegar a casa, en uno de sus trabajos matutinos donde son muy escasos y con horarios nocturnos, o al menos así me lo explicaba mi madre. Cuando terminé de comer, le tomé la mano a ella y se la froté para tranquilizarla en cuanto ella asiente con la cabeza y desaparezco de su vista.   Al llegar de la escuela descargo mi mochila y busco a mamá, ella y mi padre se encuentran alterados y a punto de comenzar una discusión, por lo tanto, se percatan de mi presencia y lo único que escuché pronunciar de mi padre fue «tenemos que irnos».  Comenzamos a empacar la ropa en mi mochila y otra que tenía mi padre. Rápidamente de un lugar a otro sacaron todo lo indispensable y salimos cogidos de la mano; tomamos en primer tren y salimos de allá. Al asomarme por la ventana, vi a lo lejos a unos uniformados apuntando hacia las familias y matándolos unos a otros. Desvié mi vista al frente y mi madre se agarraba la cabeza mientras sus codos y mi padre la consolaba.  

Llegamos a una vecindad y encontramos un cuarto para hospedarnos. Organicé el lugar junto con mamá, ya que papá dijo que saldría a traer comida. Horas más tarde, volvió con comida para cenar y nos sentamos en el suelo a orar antes de digerir los alimentos.  Tres días después, mi padre consiguió un empleo en un bar atendiendo la clientela, mientras que mamá se quedaba en nuestro hogar organizando y buscándome colegio para seguir con mis estudios; así que ¡Sería como unas cortas vacaciones! —pensé —.

Pasaron las semanas y mi madre lloraba. No comprendía qué le ocurría, pero tampoco sabía cómo ayudarla. Mis padres discutían todo el tiempo, siempre después de la escuela escuchaba discusiones altas de tono, a veces oía decir de mi padre a mi madre que tenía que superarlo ya que había pasado bastante tiempo de su pérdida; otras veces, oía los reclamos de mi madre acerca de su trabajo y que dejara de beber. Sin embargo, quería gritar a los cuatro vientos que ya pararan de pelear.  

Un día en la escuela me dejaron de tarea realizar un ensayo sobre mi familia y, he de suponer que para cualquier niño de diez años sería pan comido, ya que quizás tienen una familia estable, sin gritos ni peleas, pero para mí no. ¿De qué hablare acerca de mis padres? Me pregunté en distintas ocasiones. Al llegar a casa, dejé mi mochila cerca del colchón donde duermo cada noche y busco a mamá para que me ayude a encontrar las palabras correctas para caracterizarnos como familia, pero no la encontré. Tomé un vaso y lo llené de agua porque sentía la garganta seca y, cuidadosamente tomo entre mis manos una nota y la leo: “Sam, si llegas y no me encuentras, en la olla tengo arroz con pollo… —hice una pausa y proseguí —…llegaré tarde, así que tu padre se encargará de la cena. Con amor, mamá.” Y como dijo en la nota le hice caso al pie de la letra y, cuando terminé de almorzar, me acosté a dormir.  

Papá llegó a casa casi a tropezones, no podía mantenerse en equilibrio por mucho tiempo, entonces le ayudé a sentarse en una butaca de madera y le quité el calzado; no estuve tan cerca como para darme cuenta que olía a alcohol y sabía que papá no me haría la cena. Por lo tanto, me dispuse a utilizar por primera vez la cocina. Divagué por mi mente recordando las múltiples veces que he visto a mamá por la cocina y se me vino a la idea preparar fideos. Terminando de preparar los fideos, oigo balbucear a papá, entonces suspendo la decoración del plato y me dirijo donde éste se encontraba y le hice saber que estaba cerca y preguntó que dónde se hallaba mamá, no pude responderle y me sinceré, le dije que no sabía, él frunció su ceño y dibujó en sus labios una fina línea recta. Luego, le alcancé su plato y le pasé un cubierto; probó los fideos y no dijo nada, se quedó por mucho tiempo callado y yo, terminando mi cena. Sin embargo, pronunció dos palabras «Lo hizo» ¿De qué hablaba papá? Me cuestioné y su vista aterrizó en sus manos, y las empuñó dejando sus nudillos blancos, yo procuro no hablar nada acerca del ensayo y opto por preguntar más adelante.

Son las 03:30am y mamá entra de puntitas para no hacer ruido ya que papá duerme y se supone que yo también debería de hacerlo, pero quise esperarla. Puede que no sea la hora más propicia para cuestionarla el porqué de su ausencia, tampoco quise hablarle del comportamiento extraño de papá, en vez de todo lo anterior la abracé y ella también lo hizo, se veía agotada así que le hice lo mismo que con papá, sólo que esta vez le hice un masaje para que no le dolieran más los pies mientras ella cenaba. Al otro día pasó lo siguiente, no entregué mi ensayo: no podía mentir acerca de una familia feliz porque en realidad no lo era y me colocaron una mala nota.  

Pasaron los meses, y las dificultades aumentan, ahora papá solo llega a casa para dormir, ha cambiado bastante y se ha vuelto mucho más agresivo. Para empeorar la situación, ya no trabaja en el bar y las deudas crecen. Cuando ellos discuten, mamá me dice que no me entrometa porque según para ella son problemas de adultos. Ella como siempre llega a las 03:30am puntual, y ha sido la única que ha traído la comida estos últimos meses, aunque para papá no cuenta con su aprobación al salir de noche. Esa madrugada la golpeó y yo lo vi todo, pero ¿Qué podría hacer un niño de diez años? Y sin pensarlo dos veces, defendí a mamá y recibí la golpiza en mi ojo derecho por parte de mi padre mientras nos gritaba que éramos unos desagradecidos, y constantemente lo decía así que no era una novedad. Mamá trataba de no sollozar y yo era el que la consolaba… ¿Cómo nos cambió la vida en sólo un par de años?

Actualidad… Esta mañana cubrí nuevamente mi ojo derecho con el maquillaje de mamá para ocultar el moretón que había dejado mi padre, no quiero que todo el mundo se diera cuenta de la brutal violencia que tengo en casa cada noche.  Mamá me dijo que no me preocupara, que ella no bailaría hoy para quedarse en casa conmigo. Me preparó la comida y nos sentamos juntos a orar, tomé su mano delicadamente y la froté.  

A la hora de la cena llegó mi padre, por lo tanto, yo me encontraba terminando mi tarea en el cuarto cuando escucho los quejidos de mamá, no podía soportarlo y mucho menos los insultos de mi padre hacia ella, pero sonó algo quebrarse hasta que pasaron unos minutos y no escuché ni un solo ruido. Llegué hasta la entrada, y en mi pecho se sintió un hueco muy vacío a causa de que me fallaba la respiración y mis ojos no podían asimilar lo que tenía en frente. Mi madre está en el suelo inconsciente y visualizo alrededor de su cabello bañado en sangre, noté sus pupilas dilatadas y la mirada de mi padre era obscura y penetrante, me aferré a ella y grité. Mis manos temblorosas trataron de inspeccionar la herida y apreté para que no se desangrara. Mi padre se tomaba del cuero cabelludo y gritaba dándome una última vista hacia nosotros y se fue. Cuarenta minutos más tarde llegó la ambulancia, pero para ese entonces ya era demasiado tarde.  

Siete años han pasado desde la muerte de mi madre y me encuentro terminando mi bachiller gracias a un orfanato, aunque en los días libres visito a los presos y justo hoy es día de visita, y me preparo para ellos.  

Cuando todos estamos organizados en círculo para dialogar, observo el rostro de todos, pero sólo uno contempla la misma mirada que dedicó la última vez que lo vi, entonces pensé que era el momento indicado para comenzar a narrar la historia, y cuando lo hacía, todos esos sujetos prestaban atención ante todo detalle que recordaba al decirlo, excepto él que a pesar de los años y algunas canas asomándose podría reconocerlo. ¿Y cómo no? Si había marcado mi vida. Al terminar, por el rabillo del ojo quiso asomarse una lágrima y por primera vez me miró a los ojos y tragó en seco.  

Y sin más, me levanté del lugar donde estaba y salí con la cara en alto aun sabiendo que tuve en frente al asesino de mi madre y al que una vez llego a ser mi papá.

#history

#historiacorta

#textos

#textos cortos

[madeofsirensoul]

7 minutes in heaven with Annabella | LVSRP.

2018 ha comenzado excelentemente para mí, debido a varias cosas, incluyendo mi ingreso a Loving Victoria’s Secret «RP» y mi pequeña loca entrevista con el equipo, la cual fue realizada a todos los Ángeles. ¡Han sido siete preguntas sumamente divertidas, nunca la había pasado tan bien! A continuación, las mismas.

7 minutos en el paraíso con Annabella Lindgard.

1. ¿A qué edad te diste cuenta que Santa no era real?

Es algo que recuerdo perfectamente. A los diez años, descubrí este gran “secreto” cuando vi a mis queridos padres organizando todo para la gran Navidad. En casa solían prepararlo cuando mi hermana y yo dormíamos, pero no pude aguantar la ansiedad y la curiosidad, quería ver a Santa dejando mis presentes. Aquí es donde perfectamente podemos aplicar el dicho “la curiosidad mató al gato” 

[risas]

2. ¿Cuál es tu signo del zodiaco?

Orgullosamente digo que soy Escorpio. Escorpiana. ¿Por qué esto? Simplemente, siento que todo lo que dicen de mi signo va conmigo. A veces digo ser una escorpiana diferente, pero al final del día soy como el horóscopo dice. Y pocas veces soy de creer en él, pero es como si todo encajara perfectamente.

3.  ¿Alguna vez has estado en una relación?

¡Creí que ya lo sabían! 

[risas]

He estado en una serie de relaciones que tuvieron sus altos y bajos, pero bueno, tuve la oportunidad de amar y ser amada. Creo que todas fueron lindas mientras duraron a pesar de ciertas cosas que me hicieron doler. Aún así, sigo diciendo que el amor es una de las cosas más lindas que existen.

4.  ¿A qué edad tuviste tu primer beso?

Mi primer beso fue a los diez años. Lo recuerdo perfectamente. Fue cuando, en la escuela que asistía en Macerata, jugábamos a la botella en momentos de receso. Me tocó con un chico rubio de ojos verdes al cual raramente le gustaba. Fue raro, pero lindo. De todas maneras, eso está en el pasado.

5. ¿Tienes algún piercing oculto?

¡Wow! Qué pregunta. Sí, o en realidad, tenía uno en mi ombligo. Siempre me gustaron los piercings, más si son delicados. Lo saqué por un tema de trabajo, pero solía ser muy discreto y hermoso. Antes de hacérmelo, mi pensamiento era todo lo contrario con respecto a los mismos, pero después me di cuenta que eran hermosos.

6. Si pudieras casarte con cualquier celebridad, ¿quién sería?

¿Tiene que ser solo uno? Verdaderamente me fascinan tanto algunas celebridades, simplemente me pueden demasiado. Si debo escoger uno, elegiría a Alex Pettyfer. Él es como mi primer amor, desde que lo vi actuar de pequeño, me enamoré al instante. Se ve una hermosa persona también. Es mi deseo imposible.

[risas]

7. ¿Qué película es la que siempre te hace llorar?

Excelente pregunta para finalizar. Definitivamente las películas de Disney son las que provocan eso en mi, las inmensas ganas de llorar. Una de las que me hace llorar es el Rey León, me encanta tanto pero me llena de tristeza por algunas de sus escenas. De hecho no es la única, pero digamos que es la que de peor manera me pone.

¡Gracias por este tiempo!

Cabello por Danielle Priano y maquillaje por Robert Sesnek

#7minutesinheavenwithLVSRP

[brekro-blog]

1: ¿Porqué tu última relación terminó? yo quería estar soltera 

2: ¿Fumas o tomas? tomo en ocasiones especiales y estoy intentando dejar el tabaco

3: ¿Qué harías tú si (…)?

4: La relación con mis padres es… vivo lejos de mi padre, nuestra relación siempre fue distante pero ahora que hay verdadera distancia de por medio, lo extraño.  Tampoco vivo con mi madre pero cuando nos vemos nos llevamos bien

5: ¿tu ex y tú se odian? no, de hecho estamos en paz mutuamente

6: ¿Cuándo fue la última vez que tomaste a alguien de la mano? la semana pasada

7: ¿Estuviste o has dejado en la friendzone? ambas

8: ¿Qué hacías antes de contestar esto? ver netflix

9: ¿Te gusta la playa o la piscina? ambas

10: ¿Alguna vez has hablado con alguien que está drogado? si

11: ¿Alguna vez dormiste en la misma habitación con alguien que te gustaba? si

12: ¿Duermes con la puerta de tu habitación cerrada? si

13: ¿Bebida favorita? jugo de arandano

14: ¿Cuál es tu signo zodiacal chino? no lo sé

15: ¿Has usado un arma? no

16: ¿Crees en fantasmas? no 

17: ¿En qué te consideras bueno? organizando cosas

18: ¿Sigues mal por “eso”? friendzonear a un amigo

19: ¿Hablas solo? si

20: ¿Es importante para ti el casamiento? no

21: ¿Te han soltado de la mano? ¿Te han tratado bruscamente? ¿Indiferentemente? si, si, si

22: ¿Te han cargado? no comrendo el término “cargado”, si es en peso, si.

23: ¿Hablas tonterías con él/ella? ya no

24: Lo más vergonzoso que les sucedió a los dos. no recuerdo

25: ¿Recuerdas lo que te hizo sentir peor hace 5 años? ¿Eso sigue teniendo el mismo significado? no recuerdo

26: ¿Vivirías en unión libre? si

27: ¿Qué te excita mas en una mujer, u hombre? (o ambos) musculo pélvico marcado y la espalda

28: ¿Como te gustaría que fuera tú nombre? luna

29: ¿Saldrías con alguien de 18 años teniendo la edad que tienes ahora? no

30: ¿Hay alguien a quien le moleste que salgas/hables con una persona? no lo se

31: ¿Crees estar casado(a) en 5 años? no

32: ¿A cuantos de tus ex parejas ya no les hablas? ¿Y porque? a todas les hablo

33: ¿Crees que la persona por la que tienes sentimientos, es celosa? ni

34: ¿Eras feliz con la persona que te gustaba en Marzo? si

35: ¿Y si la vida es un sueño y la muerte nos despierta? deberíamos hacer de todo para nunca tener que decir: “si ubiera”

36:Postea una foto tuya.

37: ¿Haz ido alguna vez con un psiquiatra/terapeuta? si

38: ¿Te despiertas de mal humor? cuando no duermo bien

39: ¿Show de televisión favorito? los que involucran danza contemporánea

40:¿Cuál es tu fruta favorita? mandarina

41:¿Cuál es tu animal favorito? delfín

42:¿Cuál es tu número favorito? 7 y 8

43: *Inserte aquí alguna otra pregunta* 

44:Recomiendame algo. vive tus sueños

45:¿Frío o calor? frio

46:¿Dulce o salado? dulce

47:¿Día o noche? noche

48:¿Fiesta o quedarte en casa? quedarme en casa

49: ¿Ves YouTube? ¿Qué canales te gustan? stand up 

50: ¿Cuántas veces has querido decirle algo bonito a alguien y te arrepientes al ver su actitud? muchisimas

51: ¿Cuál es tu recuerdo más doloroso? no poder mover mis piernas

52: ¿Volviste a dormir con la ropa que usaste anoche? no

53: ¿Hasta cuándo vas a dejar que te envenenen?… Sabes de qué hablo.

54: Y, ¿para cuándo el/la novi@? no en mucho tiempo, espero

55: ¿Con cuánt@s te has acostado? 15

56: ¿Sos virgen? no

57: ¿Alguna vez te has preguntado cómo se ve tu vida a través de los ojos de otra persona? no, pero es una pregunta interesante

58: ¿Puede continuar una amistad entre dos personas cuando una está profundamente enamorada de la otra? si, pero es difícil, requiere de paciencia, respeto y mucha fuerza

59: ¿He sido rechazado por alguien que me gusta? si

60: ¿Prefiero estar frente detrás de cámara? ambas

61: ¿Cuál fue la última mentira que dije? no recuerdo

62: ¿Prefiero una llamada o videollamada? llamada

63: ¿Creo en fantamas? no

64: ¿Creo en la magia? no

65: ¿Creo en la buena suerte? no

66: ¿Cómo está el clima ahora? nublado, no tarda en llover, hace fresco.

67: ¿Cuál es el último libro que leí? recuerdos prestados 

68: ¿Me gusta el olor de la gasonlina? si pero no muchos

69: ¿Tengo sobrenombres? si

70: ¿Cuál fue el peor accidente que tuve? nunca he estado en uno

71: ¿Gasto o ahorro el dinero? solia ahorrarlo, ahora solo lo gasto

72: ¿Puedo tocarme la nariz con la lengua? si :)

73: ¿Hay algo mal en mi? muchas cosas

74: Animal favorito. delfín 

75: ¿Qué estaba haciendo anoche a las 12 AM? reblogeando en tumblr

76: ¿Has intentado suicidarte? si, 2 veces

77: ¿Cuál es la canción que siempre me hace feliz cuando la escucho? no lo sé

78: ¿Cómo pueden ganarse mi corazón? confiando en mi

79: ¿Prefieres relaciones serias o aventuras? por el momento, aventuras. Toda mi vida he estado en lo serio

80: ¿Te has cortado a propósito? si

81: ¿Haz actuado para no ir al colegio? si, jaja

82:Si todo el mundo me escuchara ahora, ¿qué diría? conoce el mundo

83:¿Tengo parientes en la cárcel? no

84:Accidentalmente comí vegetales radiactivos. Estaban ricos y lo más genial es que ahora tengo un superpoder. ¿Cuál es ese poder? leer las mentes

85:¿Cuál sería una pregunta de la cual temería responder la verdad? ¿aún me amas?

86:¿Cuál es la imagen en mi desktop en este momento? mon lafferte

87:¿He tenido sexo? si

88:¿He comprador condones? no

89:¿He salido embarazada? / ¿He embarazado a alguien? no

90:¿He reprobado una clase? si, dos veces

91:¿He besado a un hombre? si

92:¿He besado a una mujer? si

93:¿He besado a alguien bajo la lluvia? si, es lo mejor del mundo

94:¿He tenido un trabajo? muchos

95:¿He salido de casa sin billetera? si

96:¿He bulleado a alguien en internet? no 

97:¿He tenido sexo en público? no

98:¿He jugado en un equipo deportivo? no

99:¿He fumado yerba? si

100:¿Consumí otras drogas? si 

101:¿He fumado cigarrillos? si 

102:¿He bebido alcohol? si

103:¿Soy vegano o vegetariano? no

104:¿He sido obeso? si

105:¿He estado muy por debajo de mi peso? no

106:¿He estado en una boda? si

107:¿He estado en la computadora por más de 5 horas seguidas? si

108:¿He mirado televisión por más de 5 horas seguidas? si

109:¿He estado fuera de mi país? no

110:¿Me han roto el corazón? un monton de veces

111:¿He participado en un juego profesional? no

112:¿Me he roto un hueso? no

113:¿Me he cortado? si

114:¿He ido a una graduación? si

115:¿He estado en un avión? si

116:¿He viajado en helicóptero? no

117:¿A qué conciertos he ido? mon lafferte, caloncho, allison, okills, caligaris, bronco xD, kinky, little jesus, comisario pantera, los romanticos de zacatecas, inspector, panteon rococo. 

118:¿Me ha gustado alguien del mismo sexo? si

119:Idiomas que he aprendido. Intento aprender ingles

120:¿Uso/he usado maquillaje? si, ambas

121:Perdí mi virginidad antes de los 18. si

122:¿He tenido sexo oral? si 

123:¿He teñido mi cabello? si

124:¿He votado en una elección presidencial? si 

125:¿He estado en una ambulancia? si

126:¿He tenido una cirugía? de terceros molares

127:¿He conocido a alguien famoso? si

128:¿He vigilado a alguien en redes sociales? si

129:¿He orinado en la calleo en un lugar público? si

130:¿He pescado? si

131:¿He ayudado a la caridad? si 

132:¿He sido rechazado por alguien que me gusta? si

133:¿He roto un espejo? si

134:¿Qué quiero para mi cumpleaños? ver a mi papá

135: ¿Sentiste alguna vez lo que es tener el corazón roto? muchas