Tumgik
#pero me tengo que poner las pilas en serio
huvtao · 10 months
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¿Recordáis que dije que iba a crearme un blog nuevo y todo eso? Pues apenas todavía lo tengo bc ✨ la vida ✨.
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queensecretblog · 3 years
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Domingo 22/10/2021
--------------- 09:40 PM --------------
Volvieron mis energías positivas de nuevo.
¿CÓMO LES VA GENTE BONITA DE TUMBLR?
Bueno como sabrán estaba muy sad ayer, y de la nada feliz.
Y queria hablar de lo que paso ayer, ustedes diran "en serio por esto te pusiste mal". Y yo solo les contestare que si.
Ayer mis queridos compañeros se pusieron las pilas para hacer carteles de promo medio tarde pero bueno.
Para resumen, hicieron un cartel de "no nos vamos hasta que" y ponen cosas que "JAMAS" van a hacer. A mi me pusieron que me corte el pelo (de lo largo que tengo) pero por eso no me iba a poner mal, me puse mal de lo que me iban a poner antes.
Iban a poner que deje de ser "tonta"
La verdad estaba por querer tirarme de la ventana del colegio cuando me dijieron que antes iban a poner eso. Si lo hubieran puesto yo les rompia todos los carteles y les iba a decir "porque ni se ponen cosas así ustedes"
Llegué al punto de volver a casa, contarles a mis papás y aguantar las lagrimas mientras mi mamá me decía muchos halagos. Llore al final en el baño y en la siesta porque era mucho para mí.
Volvían otra vez todos mis pensamientos horribles, estaba muy insoportable.
Sabía quién había sido que dijo para poner eso, me había dicho una de mis amigas mientras se burlaba.
Si buscamos el significado de eso, tonta no soy. Y es lo que menos tengo. ERA muy inocente (lo aclaro), sí, pero no rechazada, yo soy muy inteligente y apuesto que mucho más que ellos y no es por ser egoista o juzgar a los demás, es por la bronca que me da.
Aver, ¿quién no juzga al otro sin darse cuenta en vez de juzgarte a vos mismo?. Dicen que es más díficil juzgarte a vos mismo por conocerte que a los demás que no conoces. La verdad intento mucho no juzgar a los demás pero viví tanta mierda que me decían que uno dira que "no es para tanto", pero lo és. ¿Por qué ellos podían juzgarme y yo a ellos no?, ¿Por qué me dijieron tantas cosas y yo no dije nada?. porque era lo correcto.
Creo que fue demaciado, cada uno tiene su punto de vista, y este es el mio.
Hoy me levante tarde y llore otra vez en el baño y luego me fuí a desayunar con mis amigas. Tuve solo 2 horas de clase y volví a la casa de mi amiga y nos volvimos a ir por Ed. Física.
Jugamos al futbol y metí un gol gente.
estaba muy feliz
como debería estar
y ahí tienen a la "tonta" que les cerró el o*** a todos.
Buen fin de semana a todos gente, descansen bien y hagan sus cosas como yo que tengo que estudiar para la prueba de ingles.
Dale que se aprueba con un 7
Bye byee!
The Queen's Diary
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Notas: Amiga te adoro con toda mi alma
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No quería que fuera así el post, quería que fuera como siempre que pongo cada 2x3 memes... pero fue muy complicado.
Te dirán en muchas oportunidades que no les hagas caso. Si a alguién que quiero le hubieran dicho algo me armaría el valor para mandar a cada uno a la m*****.
Gracias @tiempoydestino por animarme :)
En serio muchas gracias!!
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mieltrabajos · 3 years
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Capítulo 7 - Encuentro desagradable (Ijiwaru na Deai).
-`ღ´-
( Haz click aquí para ir a la lista con el resto de los capítulos )
-`ღ´-
Pequeñas anotaciones: He pasado a poner los pensamientos en paréntesis en vez de comillas (igualmente, siguen en cursiva para distinguirlos) para que se pueda entender mejor ya que en este capítulo se volvía demasiado caótico el tema de la narración (mezclan tercera persona con primera y no indican con qué personaje pasan a primera, por eso es complicado). En una parte en concreto, alternan los pensamientos de Arisa y Ken en el mismo párrafo; no sabiendo como distinguir, he acabado por indicar directamente los nombres en esa ocasión. 
-`ღ´-
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—Entonces “pino” es la palabra para “esperar”. 
» Bueno, “¿por qué no vienes a pesar de que he estado esperando por mucho tiempo?” Esa es la canción del rencor.
» Sigue: “los hombres no deberían de llegar tarde si van a salir con ella. Y si los frijoles no son contactados, terminará siendo así”. » Recuerden no ser persistentes, ya que la clave está ahí. Voy a tomar examen de esto, no lo olviden. 
El profesor Akechi continuaba explicando con una voz somnolienta, pasando la tiza por la pizarra. Arisa miró por la ventana, escuchando la voz de su mente. Él debería haber asistido a esa clase suplementaria, pero no se encontraba en el aula. (Ayer vino...)
Abrió la nota que se encontraba doblada entre sus papeles, en donde se encontraba el número. No, Arisa no se animaba a contactarle. No tenía la confianza para ello.
-`ღ´-
¿Cuánto tiempo había estado esperando en los escalones de piedra del santuario, donde brillaba el sol?
Ken se levantó y vió a Arisa regresar. Arisa se detuvo en los escalones de piedra y le miró.
—Eh… —Podía sentir como su rostro estaba coloreado, avergonzada mientras desviaba la mirada. Ken levantó la cabeza para observarla mejor.
Recordaba que, en secundaria, había visto a Arisa la primera vez en las mismas escaleras. Él sabía que estaba en la misma clase que Kotaro, pero nunca le pudo decir nada.
Cuando la vio llorando en la azotea o cuando la vio recogiendo el contenido de las bolsas esparcidas en el patio, no pudo hacer nada tampoco. Solo mirar.
“Estoy segura de que sería aburrido….”
Él se encontraba molesto esas palabras. De hecho quiso reír en amargura, pero no podía de solo pensarlo. Sin embargo, cuando le dio el libro de texto, se sintió feliz. Y ni hablar de cuando intercambió los contactos, parecía un tonto extasiado de la emoción.
—¿Qué estás haciendo? ¿Recibiste una lección hoy? —Te estaba esperando, Arisa. Hmm… ¿Puedo confesar mi amor? —¿Estás bromeando? 
Ken se ríe de Arisa, quien parece tener una cara de disgusto.
(Arisa): (No es realmente serio, es tan idiota.
Tonto, ponte serio).
(Ken): (Aunque de la nada me conmovieron sus palabras y, sin darme cuenta, la estaba persiguiendo desesperadamente. Pensé que no había este tipo de fiebre en ninguna parte de mí.
Pensé que nadie podía hablar en serio conmigo. Bueno, eso era verdad…)
Durante mucho tiempo, ese amor no había sido reconocido ni correspondido. (¿Cuántos años habrán sido desde que nos conocimos?)
—¡No bromees con algo así! —No estoy bromeando. Cuando Ken dejó de reír y se puso serio, Arisa se quedó sin palabras.
(¿Hay alguna de mis palabras que sacudan tu corazón?) —Yo… estoy siendo serio. —Mentira… —Arisa murmuró. —No es mentira —Ken afirmó, mirándola directamente. —Así me siento, piénsalo…
Arisa observó el suelo mientras subía los escalones. Pasó por al lado de él sin decir nada. Ken intentó estirar la mano, pero detuvo el gesto con una expresión de inseguridad. Disimuladamente, metió la mano dentro de sus bolsillo y miró el cielo. —Mi corazón lo siente así…. —Ken puso su bolso en su hombro y baja lentamente los escalones de piedra. —Yo sé que tu corazón tiembla con mis palabras. Era amor, era un amor lleno de seriedad.
-`ღ´-
Con las cosas marchando de esa forma, Ken no tuvo oportunidad de cruzarse a Arisa de nuevo, y las vacaciones de verano ya habían terminado.
Como esperaba, no había recibido el contacto de ella. Ken miraba su teléfono. El corredor durante el receso estaba ruidoso y animado. Después de las vacaciones, volvió a encontrarse con sus compañeros de clase y amigos después de tanto tiempo. También volvió a sentir la tensión con la que antes caminaba. Ken se apoyaba en la pared mientras escuchaba las voces de los demás estudiantes.
—… No puedo hacer esto —murmuró la línea que algún día escuchó de Arisa. — Oh… Kana, no voy a jugar más a esto —respondió a la llamada, colocando el teléfono móvil en su oído.
-`ღ´-
—¡Oye, Shibaken! —Ken al acercarse a las escaleras, es detenido por una voz enojada.
Se trataban de dos estudiantes enojadas quienes se le acercaron.
—¿Cómo que no vas a jugar más? —Sí, Shibaken. ¿Por qué?
Para Ken, era realmente conveniente tirarlo todo y comenzar otra vez.
Y aún así, si volviera al juego, era tan inútil como siempre. Porque no era lo mismo. No era lo mismo estar obsesionado con otra persona ahora que sentía algo. Lo único que necesitaba era estar solo. Ken levantó la vista hacia las chicas y les sonrió. Solo podía pensar en Arisa.
-`ღ´-
Arisa caminaba por el pasillo y se detuvo de inmediato cuando vio a Ken y las chicas. Él parecía hablar alegremente con ellas, con esa sonrisa de siempre.
Arisa estaba disgustada o decepcionada.
(Después de todo, era una mentira…)
Vió entonces que Ken dejaba de hablar con las chicas y regresaba con una expresión dura en su rostro.
Ken se sintió aliviado al notar a Arisa.
—Arisa… 
Mencionándola, ella simplemente regresó al aula. 
(¿Por qué es así? No fue serio. Quiero creerle, pero no fue en serio). 
El pecho de Arisa dolía.
(Ey, dime....)
—¿Dónde está tu “serio”?
-`ღ´-
En el camino a casa después de terminar el club, Kotaro encontró a Ken y se detuvo.  
Enfrente de una librería frente de la estación, Ken estaba en cuclillas frente a una máquina de juguetes en cápsula. En el mismo lugar había un grupo de estudiantes de primaria, rodeándolo.
—¡Oh, todo esto es nuevo! Ken arrojó una moneda a la máquina y giró la palanca suavemente. —¿Será diferente?
—¿Esta vez lo lograremos?
—Oiga, ¿puede conseguirlo? —Levantando sus voces, los estudiantes de primaria llamaron la atención del de secundaria.
—Ah, ¡perdón! —Ken levantó la voz alegre y consiguió un peluche de panda. Entonces le dijo “sí” a la estudiante que se lo había pedido.
—Wow, ¡gracias, onii-chan! —La niña envolvió el animal de peluche con cuidado y sonrió alegremente. —Oh, entonces cuídate. Ve a casa —Ken pone su mano sobre la cabeza de la chica y levanta se estira. La niña se aleja con sus compañeros, sosteniendo una pila de cápsula. Ken los observa con nostalgia. —Shibaken, ¿qué estás haciendo por la escuela primaria? —Preguntó Kentaro. —¿Ah? —Ken de la nada recordó:— Ah… este muñeco era un tipo extraño, y quería conseguir uno —Ken muestra el llavero que está enganchado en su dedo. Era el mismo oso polar que Arisa llevaba siempre en su bolso.
—Bueno, ¿ese panda no lo lleva también Takamizawa en su bolso?
Ken recogió su bolso que estaba a sus pies.
Mientras caminaban uno al lado del otro, Kotaro miró a casualmente el perfil de Ken. Parecía estar como siempre: feliz y con una sonrisa. Su carácter coqueto no había cambiado, sin embargo sí había dejado de ir a la enfermería. Sabía que había perdido el contacto con su amiga, con la que hablaba frecuentemente. —Tú, ¿no hablas demasiado con Takamizawa, no? —¿Hmm? Creo que sí. Ken mira a Kotaro con una sonrisa, colocando sus manos detrás de sí.
(Así es, antes de mirarme a la cara y volar lejos)
Recientemente Kotaro notó la distancia entre ambos, incluso si solo los mira desde lejos. No los veía hablando en el aula, ni cuando los cruza. Le parecía tan antinatural y sucio. Recuerda que hubo una vez en el que Ken era ignorado e insultado por Arisa, pero en ese entonces él era diferente. —¿Todavía no se han hablado....? —¿Qué pasa? ¿Estás preocupado? Lindo Kotaro~ ¿Vas a llorar? —Ken habló en un tono ligero y se encoge de hombros. —¡Hablo en serio! —Dejó de hacerlo, eso es todo. —… ¿Y tú qué? Ken no respondió, sino que simplemente sonrió y levanto el brazo. —Korato, vayamos a tomar un raspado y después a casa. Como tu regalo para mí. —¿Eh? ¿Por qué? —Me quedé sin dinero. —… me vas a deber la mitad de tu soda la próxima.
Junto a Ken sonriendo, Kotaro se dirigió a una tienda.
-`ღ´-
Después de la escuela, Arisa, que estaba de guardia con los libros, los devolvió a la estantería.
El aire acondicionado parecía estar fuera de servicio y, en cambio, las ventanas estaban abiertas; pero el calor que permanecía en la habitación no se disipó en absoluto.
Cuando el estante superior estaba fuera del alcance y ella se estiró, alguien preguntó: 
—¿Te gustaría ayuda?
Dándose la vuelta vio a Kodai sosteniendo un libro junto a ella.
—Takamizawa-san, ¿estabas encargada de los libros? 
Cuando él recibió el libro de la mano de Arisa, Kodai lo empujó al estante superior. 
—Gracias...
—De nada.
Kodai miró los libros que sostenía Arisa.
—¿Eso es todo lo que debes guardar?
—Oh... sí. Tengo que cerrar la biblioteca.
—Te ayudaré —Kodai toma la mitad de los libros y lo devuelve a los estantes correspondientes mientras verifica el número de la etiqueta.
—... ¿Hablaste con Shibaken recientemente?
La mano de Arisa se detuvo a la derecha. 
—Si no estás involucrado, no contestaré.
—¿Por qué?
—No es con Yamamoto o Enomoto.
—Nosotros somos sus amigos, es lo normal preguntar.
—... ¿Shibaken sigue enojado?
—No está enojado. En absoluto.
Arisa se dio la vuelta, observándolo. Veía como Kodai seguía ordenando los libros. 
No entendía los sentimientos de Ken tanto como pensaba.
"Yo...  estoy hablando en serio..." 
(Mientras lo dice con su cara seriamente así, todavía está rodeada de chicas y se divierte.
Siempre esconde sus sentimientos detrás de sus risas y solo hace trampa con palabras rápidas y ligeras.
No quiero... debido a ese comportamiento caprichoso, mi corazón tiembla).
—Bueno, él parece a veces ser un idiota, pero ha cambiado.
 —No es a veces. La mayor parte. Siempre es divertido y tonto.
—¿Te ha dicho que salgan?
"Hablo en serio...”
Arisa, que se dio vuelta y trató de responder, se puso roja.
—¿Te lo dijo...?
—¿Eh? ¡Solo estaba bromeando! 
Cuando responde con disgusto, Kodai tuerce la cabeza. 
—¿Entonces... sí lo hizo?
 —Aproximadamente, yo y Shibasaki-kun...
 —Yo le creo.
 —Pero siempre está rodeado de chicas...
 (¿Por qué yo además?
Desde que conocí a Ken, "¿Por qué?" Porque me hablas ¿Por qué estás tratando de involucrarte? ¿Por qué sales conmigo? No se me ocurre ninguna razón para estar interesado en mí).
 —Shibaken, estaba preocupado por Takamizawa desde la secundaria.
 Arisa hace una voz que dice: 
—¿Qué? ¿Secundaria ...?
 (En ese momento, tuve poco contacto conmigo misma).
—Parece que ni siquiera te has dado cuenta. Por cierto, Kotaro me lo dijo durante la secundaria. Shibaken siempre se fijó en ti. 
(¿Desde entonces ...? ¿Pero por qué?
 ¿Aunque no se acercara?
¿Entonces le importaba?)
"¡No tienes porqué estar sola!"
 Arisa atrapó su propia boca. 
(Oh, claro .....)
 Fue a la escuela secundaria y él llamó porque estaba preocupado por Arisa, que todavía estaba sola. Cuando las chicas decían cosas a sus espaldas.
Lo sentía todo.
"Oye, ¿eres Arisa de la misma clase?"
 El que no notó la ternura en la terca sonrisa fue ella.
La sonrisa de Ken salió a la superficie y el corazón estaba lleno de calor.
 —¿Por qué... no digo está cosa importante correctamente?
 Arisa miró hacia el techo y se molestó. No lo dijo, así que notó esa sensación tan tarde. 
—Él no es tan fácil de entender como Kotaro.
 —¡A veces es muy difícil de entender!
 Kodai sonrió: 
—Sí.
 —Me alegra que haya estado preocupado por mí... pero por eso estoy hablando de todo esto de repente. ¡Realmente no sé qué es!
—Es complicado, pero no imposible.
—¿Por qué...?
—Porque él es un buen tipo.
—... Yamamoto dice lo mismo que Enomoto.
—¿Kotaro?
—"De alguna manera, Shibasaki-kun es un buen tipo". Eso.
Kodai mira un poco mientras hojea el libro en cuestión.
 —... Es que Shibaken es un buen tipo. Y tú deberías ser tú misma y encontrar lo que sientes —Kodai cierra el libro y mira directamente a Arisa.
(Oh, ¿qué? Él también piensa lo mismo...
Cuando lo llamé por primera vez, pensé que era similar a Ken. Pero él sonríe y cuida a Ken también. 
Y yo... que he querido borrar mi repugnante yo, reír y jugar a ser alguien diferente).
 —... No puedo evitarlo —murmuró Arisa, después de todo las imágenes se mezclaban en su mente.
—Devolveré los libros ...¿me das la llave?
 —Pero yo... no tengo la cara para igualar a Shibasaki.
 No puedo creer en sus palabra sin dudarlo antes.
(Sin embargo, ¿qué debo decir ahora?
Él parece decidido con volver a empezar de 0, después de esto...)
 —Lo importante es que tienes que contestarle correctamente, Takamizawa-san. —Cuando levantó la cara, Kodai sonrió
 (Sí ... si no voy ahora, lo lamentaré)
 —¡Lo siento, Yamamoto-san! —grió Arisa, dejando los libros con una sonrisa. —¡Gracias! —Afortunadamente, Arisa salió de la biblioteca.
 Cuando se cambió los zapatos y salió corriendo a la entrada, el cielo se encontraba en el atardecer.
Arisa notó que había un mensaje en su teléfono móvil, de Kodai. Este tenía un enlace con la dirección de la casa de Ken con mapa incluido.
—Yamamoto-san... gracias. —Arisa cerró el teléfono y comenzó.
 Él deseaba conocerme. Pero yo no puede evitarlo.
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you-moveme-kurt · 3 years
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Glee «Find someone who loves you»
Marzo de 2021
-«Papáblen», dame el «azzul»… —pidió Henry exacerbando la «z» mientras estiraba su pequeña manito, estaba en su silla de bebé a la mesa de la cocina donde pintaba diferentes dibujos que su Papá  había impreso para él, -¿El azul hijo?... espera un segundo…  —contestó Blaine buscando el color solicitado entre una docena posible— ¿vas a pintar al perro de ese color?... —pregunto entregando un crayón de color azul rey, acto seguido se levantó y se paro detrás de él para corroborar si aquello era cierto. -Si… —dijo Henry comenzando  a rayar el dibujo de un perro con más ganas que técnica. -Pues es algo original… —opino besándole la cabeza— bonito y original… —agregó sonriendo con orgullo al ver que Henry casi no se salía de las líneas— además, sea como sea y sea del color que sea… creo y al Papá le encantará… —dijo dándole mas besos— mira… a propósito de él… —añadió tomando su teléfono móvil desde el centro de la mesa— espero y sea para dar una explicación de porque ya siendo las cuatro, no ha llegado... -«Papáblen», el «amadillo»… —dijo Henry señalando hacia adelante— «Papáblen»… —insistió al ver que Blaine le ponía mas atención a su teléfono móvil que a él. -Un segundo hijo… —respondió leyendo el mensaje entrante de su esposo, sonrió un segundo al leer la anotación romántica al final del mensaje y volvió a poner toda la atención en su hijo — ahora si… —agrego guardándose el teléfono en el bolsillo— un crayón amarillo para el artista de familia Anderson-Hummel… —dijo entregando el lápiz con ademanes de ceremonia real, Henry rio divertido y comenzó a pintar  de color amarillo lo que faltaba por cubrir— si, definitivamente al papá le encantara… —agrego mirando el dibujo— ¿qué crees tú?
-Yo no sé dónde esta el Papá... —dijo el pequeño mientras pintaba. -Pues el Papá salió a almorzar con la tía Rachel… pero  me envió un mensaje diciendo que esta a una cuadra de aquí… —dijo sentándose en frente. -¿Y me trae regalo?, ¿para mi?.. —quiso saber Henry haciendo un pequeño baile de felicidad. -No lo se hijo… lo más probable es que sí, aunque debería traernos a los dos… pero no diré  eso porque no quiero que pienses que soy un padre egoísta o que tengo celos de mi propio hijo… —añadió mientras ponía un poco de orden en todo lo que había esparcido sobre la mesa— creo que no debí decir eso… —añadió para sí como reflexionando en voz alta— en fin… ¿puedo guardar todo esto hijo? -Si...—respondió el pequeño entregando el par de crayones que había usado, Blaine los recibió y  siguió con el orden partiendo por los lápices, luego tomo todas las hojas y las ordeno como si de un mazo de cartas se tratase dejando el perro amarillo/azul al tope de la pila. -Listo… —dijo terminando de acomodar todo— ahora procederé a darte la merienda que según el Papá no puede pasar de las cuatro y ya tenemos tres minutos de retraso...—agrego Blaine apuntado su reloj pulsera— ahora… —agregó abriendo el refrigerador— manzana o banana… —pregunto sacando las dos frutas, una en cada mano. -«Manzzana»… —contestó Henry señalando la fruta que dijera. -Manzana entonces… —repitió Blaine comenzando a preparar la merienda empezando por el lavado— ¿escuchaste hijo?... —dijo Blaine advirtiendo el ruido de la llave en la cerradura - ¿¡Papá!?... —exclamó Henry poniendo oído a la voz de Kurt que decía «¡llegue!», Blaine sonrió, se secó las manos  y caminó hacia la puerta  para hacer notar que era allí donde estaban para que se les uniera luego de la desinfección pertinente.
-Mis hombres favoritos en el segundo lugar favorito de mi casa… no puedo imaginar una recepción mas perfecta… —dijo Kurt dejando su bolso sobre uno de anaqueles, se acercó a Henry y lo saludó primero para luego hacer lo propio con su esposo. -¿Qué tal el almuerzo? —pregunto Blaine al tiempo que ponía en frente de su hijo un plato con fruta picada, más una cuchara y una servilleta que le colgó al cuello. -¡Ay por favor!… no arruines este momento perfecto hablándome de ese tal almuerzo… —dijo abriendo el refrigerador para sacar una botella de agua. -Oh, oh… ¿no fue un buen almuerzo?...—pregunto de vuelta sacando un vaso por él. -No… es decir si, pero ya sabes, es Rachel, hasta un almuerzo con ella es exponerse  a pasar por todos los estado de ánimo de una ser humano… y no uno de sus cabales… —respondió señalándolo con la tapa de la botella. -¿Qué pasó?... —dijo entregando el vaso. -Ya te contaré… mejor llena mis oídos con cosas positivas primero… —contestó sirviéndose un poco de agua— ¿que tal todo aquí?... —agrego sentándose en una de las sillas desocupadas. -Bien… termine lo que tenía que hacer y luego con Henry nos pusimos a pintar… y no se si sabes, pero creo y tenemos un artista en la familia.. —dijo Blaine enseñando el dibujo del perro bicolor. -¿Como? —preguntó tomándolo con cuidado— ¿Henry pinto eso?... cariño, ¿tú pintaste esto?... —agregó mirando a  su hijo, este sonrió mientras se echaba una gran porción de manzana  a la boca— ¿Blaine? -Por supuesto… él eligió los colores y todo… —respondió Blaine cruzando sus manos sobre la mesa. -Tal vez la paternidad nula mi imparcialidad aquí, pero… ¿no es este un dibujo muy avanzado para un menor de tres años?… —agregó mirando más de cerca los bordes casi perfectos. -No creo que tu imparcialidad este en problemas…  yo también creo lo mismo… -¿Cierto?... es perfecto... y muy combinado… —dijo mirando el dibujo de todos los ángulos posibles— ¿no deberíamos llevarlo a algún lado? -¿A qué lado?… -No se… a un psicólogo que nos diga si es superdotado o algo… ¿cierto bebé? —dijo haciéndole unos cariños que le provocaron cosquillas y risa. -Pues yo me conformo con que nos diga que es feliz… ahora cuéntame sobre tu almuerzo… ¿Qqué quería Rachel? -¡Que no quería!... —exclamó levantándose. -¿Cómo? -Lo que oyes… —dijo mientras tomaba su bolso y sacaba de dentro un cuadernillo de hojas tamaño carta  bien grueso y sujeto en el medio por una cinta rosa, Blaine  miro intrigado lo mismo que Henry— ¿recuerdas que el año pasado…?, ¿o fue este año?... —Kurt hizo una pausa para ordenar el calendario en su cabeza— en fin… mejor diremos que en algún momento esta zurumbática pandemia Rachel se quedó en Oregón… ¿recuerdas?... —dijo volviendo a su lugar con el cuadernillo entre sus manos. -Lo recuerdo… -Pues bien, durante ese tiempo… nuestra amiga se dedicó a escribir… —añadió dejando en la mesa lo que a todas luces era un guión de una obra. -¿En serio?... —pregunto Blaine acercándolo a  él. -Mucho… por eso me invitó a almorzar, bueno primero para contarme, luego para recriminarme y después para decirme que había escrito eso y que necesitaba de mi opinión y que luego se lo mostrara a los productores del teatro. -Vaya… un momento… ¿te recrimino dijiste? -Si.. -¿Por que? -Porque cuando nos llamó, no hice nada por ella  y la deje a su suerte en Oregon… —dijo Kurt blanqueando los ojos. -¿Y que quería?... ¿qué la fueras a buscar? -Algo así… -Rachel es una sorpresa tras otra… —dijo Blaine riendo. -Una sorpresa desagradable tras otra en realidad… —corrigió Kurt volviendo a lo de la mueca de fastidio. -Claro…  ¿puedo?... —preguntó su esposo haciendo ademán de comenzar a hojear el guión. -Obvio… —contestó dando la autorización con un gesto de su mano. -¿Y lo leíste?... -Lo leí, por eso me demore tanto… -Entonces.. ¿tú hiciste estas anotaciones?... —quiso saber Blaine apuntando  las pequeñas notas autoadhesivas de diferentes colores que se asomaban en varias  de las páginas. -Las hice… -¿Y?... ¿qué opinas?... —Kurt hizo una mueca como de ácido para luego mover su cabeza de un lado a otro como evidenciando algo que era y no era. -¿Que?... —agregó al ver que Blaine soltaba una pequeña risa. -Nada… bueno… no te contradeciré en nada porque siempre creo en lo que me dices, pero hace mucho, mucho tiempo que no te veía tan interesado en algo… creo que desde que empezó esta... ¿cómo llamaste a la situación sanitaria?...   -Zurumbática pandemia… -Exacto… te esmeraste en poner anotaciones y… -¿Y? -Y… tienes en tus ojos ese brillo espectacular que amo y  que solo se te pone cuando algo te gusta mucho… -Sera porque estoy aquí contigo… -Dulce… —dijo Blaine sonriendo—  y tal vez yo contribuya un poco a  ese brillo, pero creo que esta vez la mayor parte se lo lleva, «Busca a alguien que te quiera»… —dijo Blaine leyendo el título de la obra. -¿Cómo crees que ese título puede entusiasmarme? -¿Por qué es verdad?... -¡Bien!... lo reconozco, me encanto, es fresca, dinámica y el final es para una ovación de un par de minutos… -¿Entonces?... -Entonces… me aterra pensar como se pondrá  de diva si a su largo currículum ahora se le agrega el título de guionista… -Eso no lo sabes… —dijo Blaine levantándose para ayudar a Henry con los últimos trozos de manzana, Kurt alzó una ceja y lo miró como si lo reprendiera en silencio por negar lo innegable— ok, tiene razón, se pondrá diva, mil veces más de lo que es ahora, pero si ese es el precio que hay pagar para que te vuelva la alegría y ese brillo que mencione…  yo digo: “así sea” -Nunca he perdido la alegría, estamos bien luego de todo lo que ha pasado, además sería injusto para ti y para Henry que yo dijese que eso… -Tal vez no la alegría de estar casado y ser padre de esta belleza, pero sí la del talentoso e imprescindible actor de Broadway y afrontémoslo, no hay Kurt Hummel sin el uno o el otro… —Kurt sonrió de lo más complacido al sentir que su esposo lo conocía tanto que era capaz de tomar las decisiones que a él le complicaba tomar— así es que, ¿qué tal… si  tomamos nuestras mascarillas y los tres vamos a dar un paseo?, así, mientras yo alisto a este pequeño de aquí, tu llamas a Rachel y le dices que llevarás su obra donde tus productores… —dijo Blaine tomando a Henry en sus brazos. -No haré nada si no acepta mis notas… -La obra en sí no sería nada si no acepta tus notas… —sentencio de vuelta Blaine sonriendo— tienes 10 minutos… —dijo acercándose, le dio un beso y Henry se inclino hacia el para darle un abrazo bien palmoteado, Kurt recibió ambas cosas con la felicidad de siempre. -Gracias Blaine…  —dijo antes que ambos se fueran escaleras arriba. -Te amo… que mas puedo hacer… —contestó Blaine encogiéndose de hombros, Henry hizo lo mismo de manera exagerada y divertida causando la risa en todos.
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ssstarski · 4 years
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Cuarentena
Con: Jungkook x lectora
Género: smut
Número de palabras: 7k
Advertencias: menciones de engaño, masturbación, frustración sexual, olfateo de bragas (JAJAJAJAJA), hablar sucio, sexo oral (recepción femenina y masculina), palabrotas, follar con la boca. (JAJAJJAJX2)
Resumen: Pasas en cuarentena con el compañero de banda de tu hermano, ¿Que puede salir mal?
Resoplaste mientras cargaba tus compras en tu apartamento, definitivamente no estabas de humor para esto. Con el encierro implementado abruptamente que el gobierno anunció ayer, la gente estaba en pánico comprando en un grado extremo, y esto hizo que tus compras semanales de comestibles fueran una pesadilla.
Al abrir la puerta de tu apartamento, colocaste las bolsas en la mesa de la cocina y empezaste a desempacar todo apresuradamente, con la esperanza de terminar tus tareas rápidamente. Tenias un ensayo pendiente.
Te preparaste una taza de café y te dejaste caer frente a la computadora portátil, ya temiendo la tarea en cuestión.
Al abrir un documento de Word nuevo, sentiste que tu teléfono vibrar en el bolsillo. Contemplando no responder, te acercaste para comprobar quién era. Si era tu exnovio quien te había engañado recientemente, iba directamente al buzón de voz. Sin embargo, fue tu hermano, Jimin. Sonriendo levemente, hiciste clic en el pequeño botón verde y presionaste el teléfono contra tu oído.
"Jiminie", dijiste en voz baja en el teléfono como saludo.
"Oye, T / N". Él respondió: "¿Estás ocupada?"
Mirando hacia abajo a tu computadora portátil, contestaste. “Nop. ¿Qué pasa? ¿Está todo bien en casa? "
Jimin te llamó por teléfono desde que te mudaste a la tierna edad de 17 años, pero rara vez era para ponerte al día. Estaba demasiado ocupado para dedicar tres o cuatro horas al teléfono con su hermanita para hablar de sus respectivos días, más aún porque la popularidad de BTS se ha disparado. Además, tu conciencia pesó un poco: con el encierro que se implementó anoche, no tuviste la oportunidad de viajar de regreso a casa. Él, por otro lado, lo hizo. Lo que significaba que eras el único miembro de tu familia que no estaba actualmente en casa; y aunque amabas tu tiempo a solas, extrañabas a tu familia.
"Sí, todos estamos bien. ¿Cómo están las cosas por allá? ¿La gente realmente se está peleando por el papel higiénico? " preguntó, sonando bastante confundido. Lo cual era comprensible, quiero decir, ¿quién infligiría dolor a otro por el papel higiénico?
"También están peleando por el arroz, si eso te interesa". Dijiste, con un poquito de humor en tu voz. "Pero esta bien. Traté de conseguir algunos elementos esenciales para no tener que volver a la tienda pronto. Ahora voy a intentar escribir un ensayo sobre ética. Ética, Jiminie. ¿Cómo se supone que debemos centrarnos en los cursos cuando estamos en un estado de emergencia nacional? "
Pasan unos minutos, tú quejándote de la insensibilidad de los conferenciantes, y él escucha con paciencia. Finalmente, te detienes y él te dice la razón por la que llamó.
"Entonces, necesito un favor". Jimin murmuró, lo que te hizo sonreír y poner los ojos en blanco. Conocías demasiado bien a tu hermano. "Y eres mi última opción, T / N".
"Wow", dijiste secamente, principalmente solo para burlarte de él, "y pensé que solo querías ver cómo estoy".
"Vamos, te envié un meme antes y todavía estoy esperando una respuesta".
"Te acabo de contar sobre el día que tuve. No tuve tiempo de responder a ninguno de mis mensajes ".
"Sí, sí. Como sea... Entonces, te acuerdas de mis compañeros de banda, ¿verdad? él responde, volviendo a encarrilarte. Simplemente tarareaste en respuesta. Has conocido a los otros miembros algunas veces, y los conocías lo suficiente como para ser un nombre de pila, pero eso es todo. “Uno de ellos está en una pequeña situación en este momento, con todo el asunto del encierro. Necesita un lugar para quedarse, y estaba pensando que, dado que tienes una habitación adicional en tu apartamento y Min-Jung se mudó, no sería tan incómodo "
"Está bien, le dejaré habitación conmigo si no vuelves a decir ese nombre". Lo interrumpiste, frunciendo el ceño. Min-Jung fue tu primer novio serio, y hace aproximadamente un mes, lo encontraste engañándote. En consecuencia, lo echaste de tu apartamento y le hiciste saber a tu hermano que habias roto. Jimin todavía no sabe que te engaño, y es mejor mantenerlo así.
"Esta bien." Dijo felizmente. "Te enviaré el número de Jungkook. Envíele un mensaje de texto con su dirección. Y por favor, trate de no ser demasiado incómodos el uno con el otro. Podría ser tu compañero de cuarto durante los próximos dos meses ".
Frunció el ceño. “No será incomodo. Como sea, tengo que ir a preparar la habitación libre. Arrojé todas las cosas de Min-Jung allí ".
Después de despedirte, empujas la silla del escritorio hacia atrás y comienzas a limpiar la habitación, mueves todas las cosas al azar que Min-Jung había dejado en tu apartamento. Incluso limpiaste el armario para que Jungkook pudiera poner su ropa si quería. Mientras guardabas las mancuernas, le enviaste un mensaje de texto a Jungkook con la dirección. Casi de inmediato respondió:
[17:49] Jungkook: ¡gracias! :)
Volviste a guardar el teléfono en el bolsillo y decidiste comenzar una vez más con el ensayo. Una vez ya sentada en tu elegante escritorio blanco, de diste cuenta de lo incómodo que estaba a punto de ponerse el ambiente en tu propia casa. Literalmente habías conocido a Jungkook un monton de veces, e incluso durante esos momentos, realmente no habías hablado con él. Era bastante tímido, lo cual (según Jimin) se debía a que se sentía incómodo con las chicas. Suspiraste, bastante molesta porque era demasiado tarde para decirle a tu hermano que habías cambiado de opinión.
Una hora más tarde, cuando estabas profundamente concentrado con respecto a tu tarea, escuchaste un golpe en la puerta principal del apartamento. Al abrir la puerta, te encontraste con un Jungkook de aspecto cansado, que en su agotamiento no parecía incómodo.
"Hola", le dijiste en voz baja, dándole una pequeña sonrisa, y rápidamente te apartaste del camino para que él pudiera entrar. "¿Necesitas una mano con tus maletas?"
"Uhm ... No, gracias, T / N." respondió, devolviéndole la sonrisa. "Lo tengo. Creo que ya te he molestado bastante ".
"Mmm, no realmente". Te encogiste de hombros. Aunque iba a ser muy incómodo, estabas feliz de ayudar. "¿Dónde está el resto de tus maletas?" Preguntaste, espiando en el pasillo. Había otra bolsa de lona y una mochila allí. Antes de que Jungkook pudiera protestar, agarró la mochila y se la puso, para poder llevar la bolsa más grande libremente.
Regresaste a tu apartamento y cerraste la puerta detrás de ti, asegurándote de cerrarla. Te diste la vuelta y encontraste a Jungkook, parado allí, sin saber a dónde ir. Escondiste una risa y le mostraste el espacio extra que tenías. Mientras dejaba sus maletas, una vez más se disculpó por toda la situación.
"Jungkook, está bien". Dijiste, exasperado, antes de decir en voz baja: “Solo… trata de no ser incómodo conmigo, ¿no? Podrías estar aquí un tiempo y no quiero que camines silenciosamente a mi alredor ".
Jungkook abrió la boca, probablemente para defenderse y decir que no es incómodo, pero la cerró rápidamente, haciendo un leve puchero. Cruzaste los brazos y te apoyaste contra la pared, “De todos modos, te ves un poco cansado. Puedes darte una ducha y yo prepararé algo para cenar. Estaba pensando tal vez ramen? "
"¿Me vas a hacer la cena?" preguntó con incredulidad. Levantaste una ceja
"¿Quieres morir de hambre?"
“Quiero decir… No, obviamente. Es solo que ... Es algo muy agradable de hacer ". Dijo, radiante. Solo te reíste ligeramente y sacudiste la cabeza
"Duchate." Dijiste, tirándole una toalla. "Pareces exhausto".
***
Han pasado una semana o dos y, sorprendentemente, tú y Jungkook se llevan bastante bien. Bueno, por supuesto, te viste obligado a hacerlo, considerando que estabas confinado en un apartamento relativamente pequeño, pero, sin embargo, era agradable no estar solo las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Sin embargo, había un pequeño problema con el nuevo arreglo de vivienda: no satisfacía todas sus necesidades. Vivir solo tiene sus ventajas, como poder masturbarse cuando y donde quieras. Ahora, dadas sus circunstancias actuales, esos sucesos donde sea y cuando sea desaparecieron lentamente. Te sentías cada vez más frustrada, y consideraste utlizar tu vibrador de bala ahí abajo, pero tenías demasiado miedo que Jungkook te escuchara, accidentalmente dejaste escapar un gemido. Te congelaste, ¿por qué ese pensamiento de Jungkook escuchándote masturbarte, encendió una llama en tu núcleo?
“T / N... Oye, ¿T / N? ¿Estás bien?" Preguntó Jungkook, sacudiendo suavemente tu hombro para sacarte de tu confusa revelación. Una vez que te diste cuenta de lo que estaba pasando, saltaste ligeramente, alejándote de él, apenas tocando tu antebrazo en la tetera hirviendo. Casi dejas escapar una maldición, pero el área no resultó gravemente herida.
"¿Quieres enfriar eso?" Preguntó Jungkook, haciendo pucheros. Sacudiste la cabeza y trataste de mantener a raya cualquier pensamiento de él pillándote en el acto. "Siento haberte asustado... Parecía que estabas soñando despierta y te desconectaste".
"Estoy bien." Lo prometiste, sonriéndole. “Solo estaba… um… pensando en algo. Como sea, vamos a ver esa película ahora, ¿no?
Le entregaste el cuenco de palomitas de maíz que habías preparado para los dos y le dijiste que eligiera una película. Caminando hacia el salón, colocaste dos tazas de café en la mesa y te pusiste cómodo en el sofá, al lado de Jungkook. Por alguna razón, eras muy consciente de lo bien que olía. Te estabas obligando a no mirar hacia abajo y mirar sus pantalones de chándal grises. Dejaste escapar un profundo suspiro y decidiste que esta iba a ser una noche larga.
Aproximadamente a la mitad de la película, sus palomitas de maíz estaban terminadas, al igual que su café. Pero a ninguno de los dos les importaba: la película se estaba volviendo demasiado interesante para ir a buscar recambios ahora. Mientras soltabas el amarre de tu cabello, comenzó una escena de sexo. Te quedaste helada, sin saber qué hacer. Se sintió como si estuvieras viendo esto con tus padres, ¿sabes, la incomodidad que surge y no sabes cómo actuar? ¿Y pretendes usar el baño o sacar tu teléfono, solo para evitar la incomodidad? Asi es exactamente lo que se siente en este momento.
Por el rabillo del ojo, ves a Jungkook actuando normal, así que decides concentrarte en la película. “Somos dos adultos, y no tenemos porqué ser tan raros con estas cosas", Te regañas en tu cabeza.
Ahora enfocando toda su atención en la película, los dos personajes principales se besan bruscamente, la ropa se desecha antes de que lleguen al dormitorio. La siguiente escena es el hombre besando el cuello de la mujer, dejando mordeduras de amor de color púrpura oscuro. Tu boca se secó; encontrabas los chupetones muy excitantes. Se corta la escena y rápidamente pasa a los cuerpos de la pareja ocultos bajo una fina sábana de seda, que solo deja sus rostros descubiertos. El hombre empuja con firmeza a la mujer, lo que provoca que esta última suelte gemidos y gemidos. La siguiente escena es con la mujer en la parte superior, mostrándola montando a su contraparte y echándose el pelo hacia atrás. Te sientes, por lo que sutilmente cruzas las piernas, en un intento por controlarte.
Afortunadamente, la siguiente escena pasó al día siguiente. Disfrutaste el resto de la película, levantándote para estirarte una vez que termino. Ahora eran alrededor de las 11 pm, y Jungkook parecía que estaba a punto de desmayarse.
"Bueno eso fue divertido." Dijo bostezando.
“Si, buenas noches, Kookie. ¡Dulces sueños!" Respondiste, rapidamente caminando de regreso a tu habitación, con mucho más que la película en tu mente. La llama que se había encendido antes cuando estabas haciendo café no se había apagado en absoluto, y tu mente seguía volviendo a la escena de sexo de la película, lo que hacía que el calor entre tus piernas fuera bastante incómodo.
Cerraste la puerta de tu habitación detrás de ti y dejaste escapar un suspiro. Su frustración sexual reprimida estaba en un punto bajo. Mordiéndote el labio, abriste el cajón y buscaste hasta encontrar un vibrador rosa fuerte, decidiendo que lo usarías una vez que Jungkook estuviera dormido, de modo que si dejaba escapar un gemido accidental, él no estaría consciente de saber que algo pasó.
Una hora más tarde, cuando estabas segura de que se había ido a dormir, buscaste algo de porno y te pusiste los auriculares. Te acuestas en la cama sin nada más que tu sostén y tanga, hiciste clic en el botón de reproducción y luego pasaste gradualmente los dedos entre tus pliegues. Sorprendiéndose por lo mojado que estaba, cubrió el vibrador con jugos antes de encenderlo y presionarlo contra tu clítoris. Dejó escapar un suave suspiro; finalmente, sentiste algo de alivio. Mientras frotabas el clítoris con el vibrador, lo que casi te hacía arquear la espalda por completo, comenzaste a empujar lentamente dos dedos hacia tu entrada.
Mordiéndote el labio para no gemir, empujaste los dedos más adentro, casi hasta el primer nudillo. Había pasado tanto tiempo desde que algo había entrado en ti que tu coño se sentía como un vicio entre tus dedos. Dejando ir el labio inferior entre los dientes, dejas escapar un pequeño gemido y empujas los dedos hacia adentro. Comenzaste a meter y sacar los dedos lentamente, presionando el vibrador contra tu clítoris con más fuerza, moviéndolo en círculos. Sentiste un apretón familiar en la boca del estómago y dejaste escapar un suspiro irregular, moviendo desesperadamente tus dedos más rápido para poder llegar al clímax.
***
Jungkook había estado tratando de dormir, realmente lo había hecho, pero por mucho que daba vueltas y vueltas, simplemente no podía hacerlo. Finalmente, se rindió, se levantó silenciosamente de la cama y salió de la habitación que le habían prestado, con la intención de comer tal vez un bocadillo.
Se dirigió al pasillo, tratando de no hacer ruido para no molestarte. Se dio cuenta de que tu puerta no estaba completamente cerrada, por lo que hizo ademán de cerrarla, pero se congeló cuando escuchó un suave gemido. Sus ojos se dirigieron automáticamente a tu cama, donde estabas de espaldas a él. Al ver tu estado de desnudez, se le secó la boca.
Jungkook sabía que eras atractiva, diablos, cualquiera con ojos puede ver eso, pero siempre se aseguraba de no verte de esa manera… O al menos, lo inetntaba. En numerosas ocasiones, uno de los otros miembros llamó su atención después de haber pasado su mirada sobre ti. Él recuerda claramente la tercera vez que conociste a los miembros: usaste los jeans más ajustados que Jungkook había visto en su vida y una camiseta blanca sin mangas. Casi había dejado caer su mandíbula; desde entonces, había estado evitando tu mirada, nunca te había mirado directamente, hasta hace muy poco.
Pero aquí estabas, en tanga de encaje negro y sujetador con un vibrador rosa en tu clítoris. Sabía que estaba mal verte así, en tu estado más vulnerable, pero no se atrevía a apartar la mirada de ti. Estirando el cuello, vio tus dedos meterse en tu coño, tu entrada tragándose los dedos con avidez. Sintió que su polla comenzaba a palpitar, sin querer nada más que apartar tus dedos y hacerte correrte sobre su polla.
Sus ojos todavía estaban clavados en ti cuando dejaste escapar otro gemido entrecortado, moviendo tus dedos aún más rápido. Vio la forma en que tus muslos temblaban ligeramente, la forma en que tu pecho se movía ligeramente, y supo que estabas cerca. Ver cómo te corres fue una de las cosas más calientes que jamás haya visto: te temblaron las piernas y dejaste escapar una pequeño "joder".
Escucharte maldecir fue el despertar que necesitaba para darse cuenta de que fue testigo de algo que no debería haber hecho, y aunque lo disfrutó, invadió tu privacidad. El pequeño bocadillo de medianoche había quedado olvidado hace mucho tiempo, se movió rápidamente de regreso a su habitación, la mente corriendo con pensamientos inapropiados. Cada vez que cerraba los ojos, veía tu cuerpo cubierto de lencería, temblando por tu orgasmo, y solo deseaba que fuera él quien te hubiera hecho llegar al clímax así.
Dejó que su mente divagara sobre los gustos que tenias. ¿Dejarías que te atara las manos? ¿Hablarías sucio? ¿Te importaría estar sobreestimulada? Esa noche, Jungkook se fue a la cama, pensando en ti y en como sonarías si estuvieras gimiendo su nombre.
A la mañana siguiente, Jungkook se despertó pensando que la noche anterior había sido un sueño. Te escuchó hacer algo en la cocina y decidió que acababa de tener un sueño. Agarró una toalla, suspirando abatido, y se dirigió al baño para tomar una ducha.
Se quitó los pantalones de chándal grises y abrió el cesto de la ropa para tirar su ropa, pero se quedó paralizado al ver el encaje negro de su tanga. Así que anoche no había sido un sueño después de todo. Sabía que estaba mal, pero ya te había visto correrte, así que no se sintió tan mal por recoger el delicado material entre sus dedos. Mordiéndose el labio, se llevó la tanga a la nariz y aspiró profundamente: tu aroma realmente olía divino. Sintió como su pene comenzaba a endurecerse y soltó una maldición; él ni siquiera podía verte y aún tenías la habilidad de excitarlo. Simplemente no era justo.
***
Tarareas suavemente mientras preparabas el desayuno para ti y Jungkook. Después del desaojo de anoche, te sentías mucho menos tenso y mucho más feliz. Tan feliz, que decidiste que querías panqueques para el desayuno. Colocando un plato para Jungkook frente a ti, vertiste almíbar sobre tus panqueques y comiste. Mientras tomaste un bocado particularmente grande de tu pila de panqueques, Jungkook entró a la cocina, sin camisa, con otro par de sudaderas grises y con el cabello quieto. mojado de su ducha. Lo juras, casi te ahogaste por lo bien que se veía.
No pudiste mirarlo a los ojos cuando te saludó y se sentó en el lado opuesto de la mesa. Mantuviste tus ojos fijos en la menguante pila de panqueques, mientras Jungkook tomaba su primer bocado del panqueque empapado en almíbar.
"Entonces, T / N, ¿qué haras hoy?" Jungkook preguntó, casualmente, girando su tenedor, penetrando tu mirada con la suya. Se encontró incapaz de hablar por un segundo, sus ojos marrones oscuros aparentemente estaban mirando fijamente a tu alma.
"Yo, eh..." Te aclaraste la garganta. "No lo sé. Tal vez empiece a tomar notas de química o algo así. ¿y tu?"
Solo se encogió de hombros. Tomando otro bocado de comida, tragó saliva, su nuez de Adán se movía, te hacía sentir de alguna otra manera. Hubo un momento de silencio, que usaste para terminar tu café. Jungkook, por alguna razón, actuaba de manera diferente hoy, y no sabías si estaba bien o no.
"¿Cómo has dormido?" Preguntaste, tratando de entablar conversación, mientras te movías para poner sus platos sucios en el lavaplatos.
"Bien" Dijo secamente, girando su tenedor en su mano de nuevo. Frunciste el ceño ante su tono. Nunca antes había sido así; por supuesto, no lo conocías desde hacía tanto tiempo, pero este comportamiento es extraño. Miraste su plato de panqueques a medio comer y pensaste que tal vez solo estaba tratando de ser educado, pero que no lo habían gustado.
"Pareces un poco..." Empiezas, luego cambias abruptamente tu oración, "¿Están bien los panqueques?"
Se quedó callado por un segundo, luego dijo: "Están deliciosos, T/ N. Pero tengo muchas cosas en la cabeza en este momento ".
"¿Está todo bien?" Le preguntaste tímidamente, moviéndote para sentarte junto a él, mientras él continuaba comiendo su comida. "¿Hay algo en lo que pueda ayudar?"
Se quedó callado, haciéndote preocupar. Solo respondió cuando habia terminado sus panqueques. "Quizás nosotros... Quizás deberíamos hablar". Murmuró, pasando una mano por su cabello oscuro y ondulado.
Lo miraste con expresión interrogante. Suspiró antes de volverse hacia ti. "Solo quería decir que no hice esto a propósito". Dijo, rápidamente. "Yo... yo... te vi anoche mientras estabas..."
Sintiendo un torrente de sangre llegar a tus mejillas, casi lloraste de vergüenza. Jungkook, el compañero de banda de tu hermano, por el amor de Dios, te había pillado masturbándote. Antes de que pudieras abrir la boca para disculparte y correr a tu habitación, Jungkook levantó tu barbilla con un solo dedo y te obligó a mirarlo a los ojos.
Vio que tus ojos se llenaban de lágrimas y rápidamente dijo: "Oye, preciosa, no llores. Ni siquiera me dejaste terminar ". Ahuecó tu cara con ambas manos y se secó una lágrima que cayó con la yema del pulgar.
"¿Qué podrías decir para hacerme sentir menos avergonzada?" Murmuraste, bajando la mirada, queriendo nada más que el suelo te tragara.
"¿Te sentirías menos avergonzado si te dijera que nunca habia estado tan excitado en mi vida?" Preguntó, haciendo que tus ojos se fijaran en los tuyos. ¿Realmente acaba de decir eso? Se inclinó para susurrarle al oído: “¿Te avergonzarías menos si te dijera que me quedé dormido imaginándote gimiendo mi nombre? ¿O si me imaginara cómo te verías viniendote en mi pene? "
"Jungkook ..." Tragaste saliva, sintiendo tu núcleo inundarse de calor. Con solo sus palabras te hace sonrojar de un rojo más intenso. Te ignoró y siguió contándote sus visiones eróticas.
"¿Te sentirías menos avergonzada si te dijera que me pregunto a qué sabes?" Continuó, sin aliento, mordiéndote el lóbulo de la oreja.
"¿Por qué no lo averiguas entonces?" (ACHICHARRROOON) Preguntaste, EN una repentina oleada de valentía. Jungkook se congeló, luego se apartó y te miró a los ojos. No estabas parpadeando y sentiste, en lugar de ver, a Jungkook inclinarse para besarte. Su delicioso aroma te envolvió, mientras se tomaba su tiempo para conectar tus labios. Entendiste que te estaba dando tiempo para alejarte si querías, pero después de escuchar todo lo que imaginó, serías una tonto si lo hicieras.
En parte debido a tu impaciencia y en parte debido a tu valentía recién descubierta, te lanzaste hacia adelante y chocaste tus labios con los de él. Sus manos grandes y ásperas revolotearon alrededor de tu cintura mientras pasaba la punta de su lengua por tu labio inferior, pidiendo entrada. Dándole acceso a tu boca, su lengua inmediatamente encontró la tuya y comenzó a masajearla suavemente. Tus manos encontraron su camino hacia sus deliciosos mechones y se enredaron en ellos.
Demasiado pronto, Jungkook se apartó de ti, dejándote sin aliento y a él con tu bálsamo labial desordenado alrededor de la boca. Te miró a los ojos y preguntó: "¿Estás segura de que quieres hacer esto?
Inmediatamente asentiste con la cabeza tirándolo hacia ti para que puedas besarlo de nuevo, deslizó sus brazos por tu cintura y te sentó en su regazo, con manos ligeramente callosas tocándote en cualquier lugar que pudieran. Cuando te sentó en su regazo, inmediatamente sentiste su erección presionando contra ti, haciéndote jadear. Se aprovechó de esto y volvió a deslizar su lengua en tu boca. Tus piernas envueltas alrededor de sus caderas, lo que te permite aplastarte ligeramente contra él, haciéndolo sonreír contra tu boca.
Se puso de pie, soportando tu peso con sus antebrazos y caminó la corta distancia hasta tu habitación, sin apartar ni una sola vez sus labios de los tuyos. Gentilmente te acostó en la cama, antes de separarse solo para quitarte la camiseta sin mangas. Lo tiró descuidadamente a un lado y volvió a unir sus labios a los tuyos. Masajeando tu lengua con la suya, pasó sus manos por tus costados, antes de capturar la banda de la cintura de tus mallas y lentamente, sacárlas.
Ahora que estabas expuesta ante Jungkook con solo tu sujetador y tanga de encaje color menta, se separó de ti para mirar la extensión de tu cuerpo. Mirando hacia abajo entre tus cuerpos agitados, viste la huella clara de su pene contra sus pantalones de chándal grises, lo que liberó un chorro de excitación de tu coño y casi te hizo gemir en voz alta.
Jungkook se adelantó, uniendo su boca a tu cuello, mordiendo y chupando la piel sensible, haciéndote gemir. Lentamente bajó, dejando algunos moretones de color púrpura oscuro a su paso y, finalmente, lo sentiste deslizar un dedo por tus bragas empapadas, haciéndote morderte el labio.
"¿Ya estás tan empapada por mí, bebé?" Preguntó, bromeando ligeramente. Te sorprendió lo diferente que era en la cama; por lo general, era más tímido, pero ahora... Está muy claramente en su elemento. No esperó a que le respondieras, en cambio, colocó un beso en tu sexo vestido, antes de que, lenta y burlonamente, bajara la pieza de encaje, ahora completamente empapada, por la extensión de tus piernas.
Su atención ahora completamente entrenada en tu núcleo goteante, extendió tus pliegues con su dedo medio y el índice antes de lamer una raya desde tu entrada hasta tu clítoris, haciéndote suspirar por el ligero alivio. Tarareó ante el sabor de tu excitación, permitiéndose emerger por completo en el acto de comerte como si fuera su última comida. Jungkook sonrió cuando sintió que agarrabas sus rizos en un intento de que tu cuerpo liberara algo del placer.
Continuó con su asalto oral a tu empapada entrada, el pulgar frotando tu clítoris en círculos apretados mientras su lengua entraba y salía con fuerza de ti. Muy a menudo, Jungkook alternaba, chupando tu clítoris y bombeando lentamente dos dedos en ti, preparándote para su enorme pene.
"Jungkook ..." Susurraste, sintiendo una quemadura familiar en la boca del estómago. Simplemente tarareó y siguió sorbiendo ante el nuevo chorro de excitación que había logrado escapar de tu cuerpo. "¡Jungkook!" Lo intentaste de nuevo, luego dejaste escapar un gemido, echaste la mano hacia atrás y volviste a agarrar su cabello.
"¿Sí bebé?" Respondió, quitando la boca de tu clítoris, con una sonrisa en su rostro, tu excitación goteando por su barbilla. Empujó sus dedos dentro de ti con fuerza, curvándolos ligeramente para golpear tu punto G. Tus paredes de terciopelo apretándose a su alrededor, haciendo que Jungkook sonriera aún más.
"Quiero ..." Tragaste saliva. Te quiero en mí. Quiero correrme en tu pene, ¡oh, Dios mío! " Luchaste por respirar cuando lo sentiste agregar un tercer dedo a tu entrada melosa.
“Hmm… ¿Qué tal si te vienes primero en mi lengua, bebé? Joder, sabes tan bien. Tan dulce." Dijo, curvándose los dedos en un movimiento de acercamiento, haciéndolo presionar con fuerza contra tu punto G, dejándote un lío de gemidos debajo de él. "¿Te vas a venir para mi bebé?"
Gimoteaste, sintiéndolo quitarse los dedos, reemplazándolos con su lengua. Continuó follándote la boca y frotando tu clítoris. Estas acciones, combinadas, te llevaron al clímax, haciéndote correrte en su boca. Jungkook continuó sorbiendo y chupando tus jugos, bebiéndolo como si fueras su única fuente de sustento.
"Joder, sabes tan bien, T / N". Él gimió, extendiendo aún más tus pliegues para tener más acceso a tus jugos. Una vez que bajó de su altura, lo empujaste lejos de ti y llevaste su boca a la tuya, con las manos enredadas en su cabello. Probarse a ti misma en su lengua fue suficiente para enviar otro chorro de excitación a tu núcleo, sintiendo como si toda la prueba fuera pecaminosa.
Moviéndote lentamente para que Jungkook estuviera sentado en el borde de la cama y tú ahora estuvieras de pie, inclinándote para besarlo, mientras él amasaba tu trasero entre sus grandes manos. Descendiste lentamente, separando ligeramente las rodillas de Jungkook para que tuvieras mucho espacio entre sus piernas. Jungkook se quitó el lazo del cabello, de modo que su cola de caballo ahora estaba completamente suelta y su cabello ahora enmarcaba su rostro. Mientras hacía esto, le habías quitado los pantalones deportivos y su par de calzoncillos Calvin Klein. Una vez que su pene estuvo libre, trataste de no sentirte intimidado, porque era enorme. Le diste una palmada levemente, antes de mirar hacia arriba y hacer contacto visual con Jungkook.
"Joder", maldijo, haciéndote querer sonreír. Movió tu cabello para poder ver tu rostro correctamente. "Siempre quise verte así". Dijo, sin aliento, mientras lamías una raya desde su base hasta la punta, antes de escupir en tu mano para que pudieras moverla hacia arriba y hacia abajo por su eje fácilmente.
"¿Asi como?" Le preguntaste, inocentemente, haciendo contacto visual de nuevo mientras seguías bombeando su eje, la boca ligeramente húmeda por el deseo de saborear el líquido preseminal que se filtraba por su punta llorosa.
"Completamente desnuda, cabello suelto, tus tetas maracadas por mi y mi -" contuvo el aliento cuando finalmente cediste a tu deseo y chupaste su punta, tragando el pre-semen salado con avidez. Gemiste de satisfacción y comenzaste a tomar más de él en tu boca. Pasaste tus manos arriba y abajo por la parte de su polla que aún no tenías en tu boca.
"¿Y tu qué?" Le preguntaste, inocentemente, con la boca llena de su polla. El oxímoron hizo que otro chorro de excitación goteara por tus muslos. Jungkook gimió ante la vista, no queriendo nada más que meterse en su boca, cortar tu oxígeno por un tiempo y luego salir otra vez haciendo que las lágrimas corríeran por su rostro.
"Y mi polla metida en tu boca". Dijo, sin aliento, agarrando tu cabello en su mano. Sintió que tu boca se convertía en una sonrisa de satisfacción, decidiendo que habías disfrutado de la ligera charla sucia.
Desde tu ángulo, Jungkook nunca se había visto mejor: su cabello estaba desordenado por ti continuamente tirando de él cuando antes te diezmó por completo con su lengua, sus ojos estaban cerrados con fuerza y ​​su hermosa y maravillosa boca estaba entreabierta. Con solo mirarlo, sentiste que te mojabas aún más. Bajaste la mirada hacia su tonificado pecho y estómago; definitivamente no podías esperar a sentir sus abdominales definidos por encima de ti mientras empujaba dentro de ti.
Sentiste la tensión en sus caderas y podías decir que se estaba conteniendo. Al darse cuenta de que probablemente no quería presionarte para que hicieras algo que no querias, te diste cuenta de que el necesitaba la indicación de que te sentías cómoda con él siendo un poco rudo; de hecho, lo querías. Respiró hondo antes de tomarlo todo en la boca, enterrando la nariz contra su línea en V definida.
"Mierda, carajo". Él gimió en voz alta, haciéndote tararear, estando muy feliz de haberlo hecho reaccionar de esa manera. Tragaste saliva lentamente, respirando por la nariz para poder mantener su polla en tu boca por más tiempo.
Al final, te quemaron los pulmones y te alejaste de él, jadeando en busca de aire, un hilo de tu saliva conectando tus labios ahora hinchados con su enojada punta roja. Bombeaste su eje una vez más, permitiéndote obtener algo de oxígeno antes de mirar hacia arriba y hacer un puchero.
“Jungkook,” dijiste dulcemente, haciéndolo gemir y la falsa inocencia. "Quiero que me folles la boca ..."
Ni siquiera respondió, en cambio, envolvió su mano en tu cabello con fuerza, haciendo una cola de caballo improvisada, antes de meterse en tu boca. Seguía metiéndose en tu boca, haciendo que la saliva goteara por tu barbilla, haciéndolo gemir aún más ante el puro desorden de todo.
"Oh, Dios mío, cariño, te ves tan sexy así para mí". Jadeó, mientras giraba hacia tu boca. Disminuyó la velocidad después de unos momentos, su orgasmo pendiente. Cuando te diste cuenta de que apenas se movía, volviste a darle una garganta profunda, haciéndolo gemir con fuerza. Acariciaste sus bolas para aumentar la estimulación y esto hizo que Jungkook dejara escapar un gemido bajo.
"T / N, bebé, estoy a punto de..." no completó su oración, ya disparaba hilos calientes de semen blanco y espeso en tu boca y garganta. Con mucho gusto te lo tragaste todo, saboreando el sabor de Jungkook. A pesar de que ya se había corrido en tu boca, seguiste chupándolo, haciéndolo soltar una serie de maldiciones.
Levantó suavemente tu boca de su polla antes de llevar tu boca a la suya. Tus lenguas se acercaron inmediatamente para explorar la boca del otro. Te alegró ver que todavía podías saborearte en su lengua. Sin siquiera romper tu beso, Jungkook te levantó para sentarlo a horcajadas sobre él en tu cama, sus manos nunca dejaron tu trasero y tu cintura. Se quedaron así por unos minutos antes de que él se volteara de modo que stuvieran recostados contra las almohadas y él se cerniera sobre ti.
"¿Estás segura de que esto está bien?" preguntó en voz baja, lo cual era completamente diferente a como era hace unos segundos. Sus ojos buscaron los tuyos para tratar de averiguar qué estabas pensando. Cuando asentiste con la cabeza dejó escapar una sonrisa, él te la devolvió antes de volver a unir sus labios con los tuyos.
"¿Qué tal si me extiendes ese bonito coño, bebé?" preguntó, antes de morder tu labio. Lentamente abriste las piernas, haciendo que sus ojos se volvieran cada vez más oscuros con lujuria a cada centímetro que separabas tus piernas.
Jungkook colocó su antebrazo junto a tu cara, poniendo todo su peso en ese brazo, antes de agarrarse a sí mismo con su mano libre. Lentamente pasó la punta de su polla sobre tus pliegues y clítoris, dejando el más leve rastro de líquido preseminal, antes de alinearse en tu entrada y mirarte una vez más, pidiendo silenciosamente tu consentimiento.
"Por favor, Jungkook ..." Gimoteó; tu núcleo aparentemente se encendió. "Te deseo."
Él no respondió, en cambio, bajó la cabeza y te besó, antes de empujar lentamente en tu coño goteando. Jadeaste ante la sensación, sintiéndote estirarte alrededor de su longitud bastante grande, y agarraste sus antebrazos, que ahora estaban a ambos lados de ti.
"¿Estás bien, T / N?" preguntó, sin aliento, cuando estaba a medio camino dentro de ti. Asentiste con la cabeza, queriendo más. Continuó empujando el resto de sí mismo dentro de ti, hasta que quedó enterrado hasta la empuñadura y su hueso púbico presionó contra tu clítoris hinchado. Te dio unos segundos para adaptarte a su tamaño antes de sacar lentamente su pene fuera de ti, haciéndote apretar alrededor de nada. Realineó su punta en su entrada antes de empujar de nuevo.
"Dios, carajo, estás tan apretada". Siseó, una vez más arrastrándose fuera. Gimoteaste por la pérdida de él en ti, haciéndote apretar su punta. Él se tensó, "Estoy tratando de controlarme y tú lo estás haciendo mucho más difícil, nena".
"No lo hagas entonces". Susurraste, pasando tu mano por su espalda tensa. Se enterró en ti rápidamente, antes de agacharse y morder tu cuello.
"Puede que te arrepientas de eso". Advirtió, antes de que realmente comenzara a penetrar en ti. Sus caderas empezaron a chocar contra ti con dureza, provocando torrentes de gemidos y gemidos. Se movió con una velocidad increíble, haciendo que su hueso pélvico rozara tu clítoris rojo e hinchado, lo que solo amplificaba el placer que te estaba dando.
"¡Ah, Jungkook!" Gemiste, en voz alta, arañandole la espalda. Tarareó en tu cuello, mordiendo la carne mientras te follaba sin parar. Usó sus manos para envolver tus piernas alrededor de su cintura, lo que lo hizo profundizar más. Sin que lo supieras, Jungkook te había dejado chupetones por todo el cuello y las tetas mientras te empujaba. Una vez que estuvo satisfecho con su trabajo, miró hacia arriba y casi se corrió en ese momento.
Tenías los ojos cerrados con fuerza, la boca abierta, dejando escapar un chorro de gemidos, y había una capa más delgada de sudor brillando sobre tu cuerpo, solo haciéndote lucir mucho más tentadora. Verte tan jodida mientras te atraviesan la polla le dio una renovada ferocidad.
"Te ves tan bien para mí, bebé." Él gimió en tu oído. Sus embestidas ahora se habían vuelto tan duras que te empujaban un poco más arriba en la cama con cada uno. "¿Esto es mejor que tu estúpido vibrador?"
"¡Joder, sí!" Gritaste, sintiendo que la parte inferior del estómago se inundaba de presión, lo que indicaba tu orgasmo inminente. La polla de Jungkook estaba llegando a lugares de tu núcleo que definitivamente no habían sido explorados por tu juguete. Cada vena gruesa, cada grieta y cada cresta hizo que se conociera su presencia en tu coño, haciéndote gritar repetidamente.
Empezaste a apretar involuntariamente su miembro, haciéndolo gemir. "¿Vas a correrte para mí, T/ N? ¿Quieres correrte en mi enorme pene?"
Con tu orgasmo tan cerca, Jungkook giró más fuerte contra ti. Al arañarle la espalda, sentiste una ráfaga de humedad salir de ti y bajar por el miembro de Jungkook. Con muslos temblorosos y mejillas manchadas de lágrimas, tiraste a Jungkook hacia abajo para besarte, su cabello sudoroso se enredaba en tu cabello. Él te ayudó a sobrellevar tu orgasmo antes de calmarte, permitiéndote unos segundos para recuperarte.
"Lo estás haciendo muy bien para mí, T / N". Él arrulló, moviendo tu cabello fuera de tu cara. "¿Crees que puedes soportar un orgasmo más?" Inmediatamente asentiste con la cabeza, sin querer nada más que complacerlo. "¿Crees que puedes ponerte en cuatro, amor?"
Hiciste lo que te pidió, moviéndote rápidamente, haciéndolo reír. Empujaste tu trasero en el aire, haciendo que tu espalda se arqueara en la dirección opuesta. Al ver cómo estabas en esta nueva posición, Jungkook gimió. Se alineó en tu entrada antes de empujarse de nuevo, hasta que se presionó contra tu trasero. Llevó su mano a tu trasero y lo amasó rudamente, luego comenzó a empujar dentro de ti.
En esta nueva posición, de alguna manera fue más profundo y se sintió más grande. Continuó golpeándote contra el colchón, dadno repetidamente en tu punto G. Te sentías tan feliz, tan completamente jodida, que lentamente comenzaste a perder la voz por lo fuerte que estabas gimiendo.
"¡Jungkook!" Gemiste, atragantándote con tus lágrimas de placer. "Joder, me estás cojiendo tan bien".
"Debería haber hecho esto hace mucho tiempo". Él gimió, tirando de tu cabello con fuerza, haciéndote acercarte a él, con la espalda presionada contra su pecho. "Debería haberme follado este estrecho y húmedo coño tan fuerte que estarias gritando mi nombre hace años".
Jungkook seguía chocando contra ti, haciendo que sus bolas se rompieran contra ti. Tus gemidos y llantos iban acompañados del sonido de piel golpeando piel. Él tenía tu cabello tan apretado que tu cuello estaba pegado al suyo. Con su mano libre, deslizó dos dedos en tu boca, en los que chupabas con avidez. Sacó los dedos de tu boca y los volvió a colocar sobre tu clítoris, frotando con fuerza.
"¡Mierda, Jungkook, me voy a correr!" Gritaste, dejando que te empujara hacia el colchón, mientras él continuaba su asalto a tu coño.
“Correte,” espetó, “Correte en mi pene bebé. Joder, me haces sentir tan bien ".
Tus músculos se paralizaron, tu cuerpo tembló cuando tu orgasmo salió de ti por tercera vez hoy. Sentiste las caderas de Jungkook tartamudear cuando tu orgasmo goteó fuera de tu agujero, arruinando completamente tus sábanas. Te dio la vuelta para que estuvieras frente a él, y viste la forma en que apretó la mandíbula, que estaba cerca. Acercaste su rostro al tuyo y empezaste a apretarlo con más fuerza, sabiendo que necesitaba su liberación.
"Me cojes tan bien, bebé". Gimoteaste en su oído, haciéndolo jadear. "Ahora correte para mí, Jungkook".
Unos segundos después, dejó escapar un gemido ahogado mientras sus caderas detenían lentamente su ritmo implacable. "T / N, me voy a correr". Él advirtió: "¿Dónde quieres que venga?"
"Correte en mí, bebé". Lo animaste. "Correte profundo en este apretado coño".
Antes de que pudieras pronunciar otra palabra, lo sentiste tensarse encima de ti y luego sentiste cuerdas de esperma caliente y espeso cubriendo tu entrada, acompañado con los gemidos melodiosos de Jungkook. Te quedas ahí unos minutos, ambos recuperando el aliento.
Jugaste con el cabello empapado en sudor de Jungkook mientras se acostaba sobre ti, su polla todavía profundamente en ti. Ambos estaban agitados, lo que indicaba cuánta energía habían gastado ambos. Sin hablar, JK los volteó a ambos de modo que su cabeza descansara sobre su pecho y su mano recorriera la extensión de tus muslos.
Lentamente, levantó tu cabeza y te besó profundamente de nuevo. Su lengua masajeó suavemente la tuya, distrayéndote del hecho de que lentamente deslizó su pene medio ablandado fuera de ti, permitiendo que su semen se filtrara lentamente fuera de ti.
"Quería hacer esto desde hace ya mucho tiempo". Jungkook admitió, sin aliento, su cabello oscuro fue retirado de su rostro por ti.
"Bueno, ¿por qué no lo hiciste?" Preguntaste, curiosamente
“Nunca hiciste un movimiento conmigo. Nunca estuviste a solas conmigo para que yo hiciera un movimiento contigo. Además, tu hermano me habría matado ".
Te reíste en silencio, mientras Jungkook te abrazó más, de vez en cuando te besó. Unos diez minutos después, mientras estabas sentado en silencio, sintió curiosidad.
"¿En qué estás pensando tanto?"
"¿Honestamente? Me pregunto por qué usé un vibrador cuando te tenía en la habitación de alado"
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Preguntas por chat.
Hola Rosa. Espero que tengas un bonito día <3 he estado pensando en escribirte y hoy me arme de valor para hacerlo. Lo que pasa es que me gusta mucho un chico. Lo conocía por que es primo de un amigo, y estudia la misma carrera en la universidad que nosotros, él es un año mayor que yo. Durante dos años solo le hable como 2 veces pero hubo un viaje de la carrera, fue por ahí de agosto, tuve la oportunidad de conocerlo mejor. Se me hizo muy tierno pero no quería verlo más allá de “un crush”. Luego regresando empece a hablar más con él pero como conocidos, porque la verdad yo no buscaba nada más, aparte dudaba que supiera mi nombre porque siempre era en ambiente de grupo cuando le hablaba y nunca le llegue a mencionar mi nombre. Un día saliendo de clase yo y mis amigas íbamos a comer y el fue que menciono nuestros nombres, sé que conoce los de ellas porque una esta saliendo con su primo y con la otra siempre han sido amigos, así que si me quede de “:0 sabe mi nombre :000”. Luego nos regalo unas empanadas que él hizo, y la verdad, jaja, el camino a mi corazón es la comida. Después lo invitamos a él y a un conocido, que llego después, a comer con nosotras y ahí se dió cuenta que soy un desmadre de persona, por afuera parezco muy seria y así pero estoy medio loca. Descubrí muchas cosas de él y la verdad me estaba gustando más. Así que decidí conocerlo mejor y ser su amiga.Lo invite a eventos con mis amigos y pues él si asistía, saliendo de clases me ponía a hablar con él. A veces me traía a mi casa. Compartía mi comida con él y el conmigo. Empezó a vender sus empanadas y yo le ayudaba y hacíamos cosas locas como ver su resistencia y ver si se podían tirar desde el 3er piso del al 2do. Todo muy mono y guay. En mi cumpleaños, diciembre, me felicito y me trajo empanadas hasta mi casa, vive como a 1hora de distancia, la verdad, se me hizo muy lindo de su parte; aparte su primo me comento que, si enserio era su primo porque el no haría eso por nadie, pero yo se que si lo haría.Yo soy de recordarles a mis amigos que los quiero y haciéndoles dibujos o cosas así. Y para navidad pues les hice dibujos digitales y cartas animadas. Y aparte como se lo importante que son las empanadas para el por que es receta de su abuelita a la que quiere mucho, entonces, si para mis amigos les hice un dibujo y una carta pues para el fueron 3 dibujos (dos de el y uno de su perrita), la carta y aparte con las empanadas que me dio en mi cumpleaños les tome fotos y las edite para hacerlas stickers de WhatsApp. No sé si has visto las stickers de un pingüino con un letrero de “se vende pan” “ya no hay pan” “ya tengo más pan” y stickers randoms de pan; pues le hice eso pero con sus empanadas. Tenía nervios de enviárselos porque es muy cortante en los mensajes y deja mucho en visto, pero el sí envía muchos stickers sin sentido. Literal, también sus amigos cercanos me han dicho que es más seco que un desierto por mensaje y que no espere mucho de él. Bueno, la cosa es que lo invite a una posada con mis amigos. Me contesto que iba a llegar tarde pero sí iba a ir. Y ya fue que le escribí “la mitad de tu regalo de navidad adelantado” y le mande los sticker me dijo que lo hicieron muy feliz y envío muchos stickers.Ya después fue la posada, era en casa de mi amiga y todo cool. Cuando llegó el fue de que mi amiga estaba de siéntate junto a él y todo eso, pero no soy así de estar pegada a la persona que me gusta, así que no lo hice. Jugamos videojuegos. Pero poco a poco se fueron todos. Yo siempre me espero a que todos se vayan para irme. Y él seguía ahí. Mi amiga se enojo porque él nunca había visto el Grinch así que nos quedamos viéndola película y un rato más viendo videos graciosos en internet. Y luego me di cuenta que ya era la 1 am. El se ofreció a llevarme a mi casa y fue divertido, me dejo poner la música y hablamos un rato en el camino, me comento que las stickers lo hicieron muy feliz que muchas gracias y weas así. Fueron como de 10minutos el camino pero estaba muy nerviosa, y yo sentí como que fue media hora de camino. Le agradecí en persona y cuando me voltee a darle un beso en el cachete nuestros lentes chocaron fue muy gracioso porque me arme de valor para hacerlo y ni sé lo di porque chocaron los lentes; ya luego le agradecí por mensaje de texto. Y él fue de no es nada cuando quieras. Ya en navidad mande los dibujos y cartas que te mencioné, a mis amigos y pues a él. Me contesto más rápido de lo que pensé. Y decidí contestarle a los otros amigos hasta que se desconectara él. Ya cuando se desconecto vi el chat y si me escribió un mensaje muy largo, con cosas muy chulas y que en persona cuando me vea me daba un abrazo y un regalo. Y yo solo le conteste que no me debe de dar un regalo, porque yo hago esas cosas porque quiero y no espero nada a cambio. Y la verdad no quería que me diera nada ni el abrazo porque siento que solo me voy a enamorar más de él ¯\_(ツ)_/¯.Regresando a clases pues todo normal. Fue su cumpleaños y sé que el no se iba a acordar de que le había dicho que le iba a regalar paliacates por conversaciones random que hemos tenido y así, le pinte la caja como las cajas de un videojuego llamado smash, que es de sus favoritos, pero la cosa es que cada vez que le doy algo desde un dibujo con una notita de agradecimiento hasta este regalo con una notita, el lee las cosas justo cuando se las doy enfrente a todos. Cuando abrió la caja leyó la nota frente a todos. No en voz alta ni nada así, pero siento que esas cosas deberían ser algo que se lee después en la privacidad, pero así es él. Este cuatrimestre decidió ponerse las pilas en sus estudios porque pues ya casi se gradúa. Y trabaja en sus proyectos toda la semana se queda en el laboratorio desde la 1pm hasta las 8pm y luego va al gym hasta las 10pm y aun así hace las empanadas, siento que se pone mucha carga, aparte de que no esta comiendo bien solo come una vez al día y como media naranja o un sandwich y ya. La cosa es, que desde hace rato me le quería declarar pero no sabía como por qué sabía que si le daba una carta la iba a leer en el momento o en persona, el no sabía cómo reaccionar. Y yo solo quería quitarme esos sentimientos porque es muy buen amigo y si no siente nada por mí, pues poder continuar con nuestra amistad. Pero ya iba a ser San Valentin y no quería que fuera cerca de esas fechas. En San Valentin le hice una pulsera con su nombre y a mis amigos cosas similares. Pero ya necesitaba quitarme esos sentimiento así que el 18 de febrero le hice una carta que se abre mucho hasta llegar al mensaje que era “me gustas” y la envolví y luego la metí dentro de más cajas y envolví la caja final. El plan era dársela. Y salir corriendo, ese día iba a ir a comer con un amigo así que llegue a su lugar y él me dijo que noooooo, que porque más regalos que estaba muy feliz solo con la pulsera. Y yo le dije ammmm, esto es otra cosa pero ya me tengo que ir, adiós. Y me fui. Después me envió un mensaje con una foto de que no quería quitar la envoltura de la nota y matarlo, porque le había puesto ojos de los que se mueven a la envoltura, y yo solo quería morir de vergüenza si le quitaba esa envoltura, y deseaba qué mejor no abriera la envoltura. Así que le dije que no lo mateeee. Y ya después ni dejo en visto mi mensaje, y eso si es algo raro de el. Si no quiere contestar solo deja en visto.Ya al día siguiente como yo tenía su guitarra para grabar un cortometraje, él sabía donde encontrarme y pues me dijo si después podíamos hablar y le dije que sí, que en ese momento iba a grabar pero saliendo hablábamos. Luego fui a su lugar en el laboratorio y nos quedamos hablando tontería y media hasta que fue que el dijo “oh perdón pero yo no soy un cobarde que se declara por mensaje” y yo le conteste “oh perdón por darte tiempo para que pienses las cosas, y no fue mensaje fue una notita con dibujos chidos” y el “bueno si, pero ya vamos a hablar” y yo de “pues a eso vine”. Ya salimos a hablar y me pregunto que cuál era mi objetivo con declararme. Ya le dije que solo quitarme eso de encima y en dado caso pues poder superarlo y seguir con nuestra amistad antes que mis sentimiento sean muy serios, porque es muy buen chico y buen amigo y no quisiera perderlo de esa manera. Me comento que nunca se había planteado nuestra amistad de esa manera y que no es nada que ver conmigo pero que él no tiene el tiempo para una relación a largo plazo porque se dio cuenta que cuando salga de la carrera no tiene trabajos chidos que mostrar y quiere salir y trabajar y ser independiente. Pero qué no le molestaría con tener una relación casual. Y ya me quede pensando un rato y le dije, hummm okey, para ti ¿qué es una relación casual? porque para mí son como tu primo y mi amiga que aún no son novios pero llevan casi un año de ser pues no quedantes porque a tu primo no les gusta esa palabra, pero pues tampoco son novios. Solo salen de vez en cuando y así pero, yo no soy de cosas melosas y estar 24/7 con quien me gusta, no exijo mucho, como una “relación formal”. Pero pues si tu dices que no tienes tiempo pues tampoco para algo casual supongo. Así que ¿para ti qué es casual? Ya fue que se quedó pensando y luego vino un amigo de los dos y pues nos empezó a hablar de sus problemas amorosos y ya no retomamos la platica porque debían regresar al laboratorio.En el lab, yo me puse a hacer mis cosas a lado del chico que me gusta. Y a veces a fastidiarlo, como si no hubiera sido la platica de hace rato, ósea mi plan fue seguir tratándolo como antes. Y ya cuando me despedí lo abrace y me fui a mi casa, yo tardo mucho procesando las cosas, y ya cuando llegue pues sí me quede con muchas dudas y no sabía en que habíamos quedado. Así que el día siguiente fui a su lugar a decirle “me quedé con varias dudas de ayer, no se si ahorita tienes tiempo de hablar de esto”, y el fue que me dijo “pues básicamente no tengo tiempo y me quiero enfocar en esto (señalando a sus trabajos) y no tanto en eso” y yo me quede de pues no contesto mi pregunta pero pues si eso quiere pues para que le sigo insistiendo tal vez ya no quiere hablar de eso. Y le dije que pues adiós, me pregunto si ya me iba a mi casa y le dije que nope, pero adiós. En ese poco tiempo de esa conversación me confundí más que nunca. Y vi a su primo y me pregunto qué tal con mi declaración que como me fue. Y ya le comente todo. Y él me dijo que mejor me esperara a que él me busque que yo ya no lo busque a él. Ya luego me llegó un mensaje de el chico que me gusta, le vamos a poner Anacleto. El odio los mensajes y prefiere todo en persona así que sí me sorprendo que hiciera esto.Bueno el mensaje de Anacleto dicía “Ya me dejaste en incógnita con que tengas que evaluar algo (o lo que me hayas dicho orita jeje). Si necesitas dejar algo en claro o hablar de ello, nada mas búscame. Ya sabes dónde estoy jeje”. Y estaba de ._. para eso fui joder, a hablar, y ya después de tranquilizarme y pensarlas cosas le contesté: “Mira, jeje, no de si te diste cuenta pero mi pregunta de hoy fue, "me quedé con varias dudas de ayer, no se si ahorita tienes tiempo de hablar de esto". En fin, en esos 3 minutos me confundí más que nunca, así que analizando ya bien todo, solo me confundo entre más hablo contigo. Debido a esto he decidido lol hablar por mensaje y externarte que prefiero quedarme con las dudas a confundirme mas y siento que ya es mucha vuelta innecesaria al tema. Solo quiero dejar en claro que seguimos siendo amigos y todo good, todo normal, todo claro uwu”. Y el contestó: “Ok. Perdón si no atrape el hint de la pregunta, yo me llevo mas directo jeje así me hubieras dicho "eit! Tienes 1 min" y por mí no hay problema. Me gusta hablar de frente. Me agüita creer que las dudas puedan ser negativas nada más. Y perdón por no ser tan claro en lo que quería decir, sí me falto clarificar. Pero esta bien, lo que te haga sentir mas cómoda es mejor :)”. Pero yo siento que si fui bastante clara con lo que le había dicho y si prefiero hablarlo a quedarme con la duda así que le conteste: “Bueño buñuelo, eit, tienes un minuto mañana ? Tranquis manquis, no quiero que pienses que son cosas negativas, son sólo cosas que no entendí. Es que si fuiste claro en cuales son tus prioridades y eso. Lo que no entendí fue otra cosa. La verdad prefiero hablarlo uwu pero también como tu te sientas más mejor, ósea, más cómodo.”Ya al día siguiente fue que llegue y le dije buenooo vamos a hablar o quesos, y ya fue de que hablamos y concluimos que si hubo una falla en la comunicación yo le comente que mi duda era con cómo quedo el asunto. Porque no me contesto que es casual para él, porque si es sexo, no es lo que estoy buscando exactamente aparte de que no me dijo que si le gusto o no porque en base a eso ya sabremos cómo proceder. Ya el me dijo, que no sabe muy bien de identificar sus sentimientos y lo que le sirve a el es hacer listas, y me dice: “pues creo que eres bonita” y ya después me dice: “bueno no creo, se que eres bonita, se que eres muy talentosa, se que eres muy buena persona..” y muchos cumplidos y que sobre todo que le sigo el juego cuando dice tonterías y ya yo le conteste que yo digo más tonterías que el 😂 . Y en cuanto lo casual que precisamente no quería que pensará que era algo sexual, con eso se refería en el mensaje que no quería que pensara nada negativo y que él con casual se refería como conocernos más y ver qué onda, como tantear el terreno. Y vernos en la escuela porque ahí se la pasa todo el día y no tiene tiempo fuera de eso, y pues en eso quedó.La cosa es que siento que no le gusto de manera romántica. Yo siempre soy la que lo debe de buscar y luego cuando no lo encuentro le envío mensaje de que no lo encontré así que me fui a mi casa. Pero por ejemplo una vez saliendo lo busco y no estaba y volvía a ver cada 15 minutos, hasta que me fui. Así qu ele digo que no lo encontré así que me fui a la hora que siempre me voy todos los días (las 3pm) Y él me envía de que como acabo todo lo que tenía que hacer se fue pero sí me espero hasta las 2, pero yo desde la 1 lo andaba buscandolo. Y varios días es de que sí lo voy a buscar pero no esta y ni me avisa que no va a estar esos días o que se fue y no lo espere. Y con los días que si convivimos en el laboratorio si se distrae mucho cuando hablamos luego dice que vayamos a lugares que conoce las mejores hamburguesas y cosas así pero luego él tampoco come, se queda todo el día en la escuela. O también dice que va a venir a mi casa a cocinar que que día puedo y yo le digo pues todos los días, tú solo cáele cuando tengas tiempo. Pero al final nunca se concreta nada. También a veces me dice cosas de “no sé porque me aguantas tanto” y de ese estilo y yo le contesto “porque me gustas” y él solo contesta “gracias”.Un día nos tuvimos que quedar varios de la carrera a dormir en los laboratorios para terminar trabajos. Ese día descubrí que él también se quedaba. Todo iba bien. Hablamos un rato. Me puso una canción y compartimos audífonos y ya después me fui a trabajar al otro laboratorio(están uno a lado del otro, pero son distinto salones). Andaba haciendo unos ajustes a mi tesis pero luego me llegaron varios mensajes de un stalker que tengo. No sé como siempre consigue mi celular o datos. Si lo bloqueo me empieza a spamear en todas mis redes sociales. Pero estoy harta que yo deba ser la que cambie de numero celular, que tenga que eliminar mis redes, ósea porque no me puede dejar solo en paz. Te prometo que lo único que quería hacer a partir de ese momento era salir, e irme, a correr. Pero nos dejan encerrados en el piso. Y ya era la hora que no podemos salir del piso. Entonces me fui al otro laboratorio donde él estaba trabajando y pasar con él para distraerme. No quería entrar al otro laboratorio donde estaba trabajando, no quería entrar y llorar de la frustración, no quería trabajar en mis proyectos, solo quería salir y liberar todo el sentimiento de impotencia que sentía. Y use a Anacleto cómo distracción. Me siento mal por hacer eso. Ya después venían mis amigas a decir que debo trabajar y así. Y yo les decía que primero quería que el maestro me contestara el mensaje con los criterios de evaluación para no hacer trabajo en vano como el parcial pasado, lo cual si era verdad pero como ya era como la 1 am pues no me iba a contestar hasta que se despertará. Luego llego otra amiga, y yo cómo veía que Anacleto tampoco estaba trabajando y lo estaba distrayendo y no quiero que por mi culpa no trabaje, me fui con mi amiga. Luego pase como media hora en el baño salí al pasillo del piso y me quede ahí un buen rato. Luego algunos se fueron a dormir. Le preste a un amigo mi peluche para que lo usará de almohada. Y ya cuando Anacleto se quedó dormido en su escritorio se veía muy cansado y no tenía ni cobija ni almohada así y le iba poner mi chamarra encima pero no quería despertarlo así que lo deje así. Ya después cuando todos se empezaron a levantar me cambie. Quería ir a correr, llego el momento que tanto estaba esperando, el de irme. Fui con Anacleto un rato. Fingir que todo estaba bien. Mis padres desde hace rato no contestaban mis mensajes para que pasaran por mí que no me sentía bien. Y no podía irme a la casa porque cambiaron las cerraduras y aún no tenía llaves para regresarme y abrir. Anacleto se ofreció a llevarme pero le dije que no, que sí me espero a mis padres (7:0am). Y nos despedimos de abrazo. Y se fue. Ya eran las 10:00am y aún no llegaban fui por un café. Me sentía muy mal, esperaba desaparecer de la faz de la tierra. Ya después llegó por mí mi papá. Pero todos los días siguientes estuve muy mal. No comía, no hacia nada. Solo encerrarme en mi cuarto y llorar, esto fue semana de puente en la escuela. El martes era volver. Ya estaba mejor. Y no voy a faltar a clases solo por sentirme mal, aparte quería abrazar a Anacleto y contarle pues que no me siento muy bien que digamos. Y contarle pues no solo lo del stalker, hay problemas en mi casa, con mi familia, no puedo pagar la escuela y eso me genera mucho estrés. Contarle todo, ser autentica con él.Pero toda la semana lo fui a buscar saliendo de clases y no lo vi, ni me aviso que onda. Yo ya no le iba a preguntar o andar detrás de él, ya tengo suficientes problemas y también el nunca me busca siento que yo realizo todo el trabajo. Y el viernes lo vi. Lo iba a saludar pero se veía muy concentrado en su trabajo y decidí no saludarlo, tenía qué hacer un proyecto con el amigo con el que iba y ya casi me debía de ir. Llego otro compañero y grito mi nombre, todos se son quedaron viendo, así que Anacleto sí sabía que yo estaba ahí. Pero no me saludo, ni yo a él, y ya después me fui.El fin de semana salí con mis amigas, tomé videos con el cel de una amiga y los subí a sus historias de WhatsApp y él le envió un mensaje diciendo “jajaj me pregunto quién estará grabando” porque salí en el reflejo del espejo. Mi amiga no le contesto porque me dijo. Que yo siempre lo busco y él nunca a mi. Qué me debo de dar a extrañar. Y que no le hablara por una semana mínimo. Ella publico ella estados de “Sal con alguien que te mire como Nathy (es mi nombre) mira su comida” y así estados chuleandome para que el los viera y que viera que tengo vida aparte de él. No entiendo del todo el propósito de hacer eso, pero bueno. El plan de no hablarle una semana si se me iba a complicar. Luego ese domingo mencionaron que la semana siguiente se iba a hacer cuarentena y todas la escuelas también no hemos salido de casa desde entonces. Así que con que es muy cortante por mensaje, y ya no nos íbamos a ver pues el envíe unos mensajes de que no lo había visto toda la semana que paso y y ahora con lo del COVID-19 tal vez este cuatrimestre ya no leo veía así queeee y le envíe stickers de corazones y otro de *ya me voy putos (de los simpson) y el sticker de *c va volando. Él solo escribió “jajaja, Es cierto. La semana pasada fue ehhhhhh. En tu casa nadie esta saliendo? “ y ya le dije qué bueno sí lo vi, pero se veía concentrado así que no lo hable. Y que pues ese es el chiste de la cuarentena de ni salir. Pero me contesto medio enojado, no se, lo que me contesto fue: un stiker de una cara sacada de onda y diciendo “Es que yo ni te vi. Minimo para un "hola, como andas? voy a seguir trabajando bye" “. Y le conteste un gif con texto de *sounds fair y diciendo “Bueno, no sabía, ahora lo sé. A la siguiente lo haré”. Lo cual contesto “Hasta en 8 meses -.-“ por lo de la cuarentena, pero ya después de esos mensajes ya todo normal sacamos chistes y me envió videos de sus mascotas <3. Y después queda la conversación en visto pero no me envía mensajes ni nada desde eso. Yo siempre soy la que inicia las conversaciones. Me confunde mucho, porque no sé si le gusto. Porque no tiene tiempo, pero quiere que salgamos. Luego no muestra interés por mí pero a veces parece que sí otras que no también porque contesta gracias cuando digo que me gusta. No sé que hacer y quería hablar con él pero a el le gusta hablar en persona y no por mensaje lo cual entiendo totalmente pero yo siento que si le puedo gustar pero como amiga.Y pues quiero tu opinión porque siento que tu eres imparcial, dices las cosas como son y por eso te admiro tanto <3 muchas gracias por tomarte la molestia de leer todo esto. Según yo iba a escribir poquito pero termine escribiendo una biblia, intente resumir lo más que podía pero siento que te debo de dar contexto de muchas cosas, enserio gracias y espero tu respuesta. También si lo llegas a publicar ¿puede ser de modo anónimo? a pesar de llevar años usando esta plataforma, no se mucho como usarla pero me da vergüenza que la gente sepa quién soy, jeje, pero si no, no hay problema (•ө•)♡.
@nuncarueguesporamor-blog ❤
Hola Nath 🌷
Ha sido laaargo, pero relatando el tipo de conversaciones que tenéis entre ambos me ha ayudado a entender un poco mejor como sois, como es vuestra personalidad y el tipo de relación que os une. Cuando has escrito que eras un poco “loca” me esperaba ya cualquier cosa, pero lo cierto es que eres muy sensata, racional y te haces las preguntas correctas.
Yo creo que tu en el fondo sabes cual es la respuesta a todo esto, solo que te da miedo enfrentarla porque ese chico te gusta, pero ha quedado muy claro que su prioridad son sus estudios, que vive para ellos, su meta es conseguir un buen trabajo y hasta que no haya conseguido todo eso no va a tener tiempo para mirar mas allá.
Él te aprecia mucho como amiga, se siente bien contigo, lo haces reír, te interesas por sus gustos y aficiones, pero él está tan opacado con sus trabajos y estudios que cuando le preguntas que siente por ti o de que manera o forma te ve, no sabe que responder, porque ni se lo ha planteado, solo eres su mejor amiga y de momento con eso le basta.
Creo que ya no es necesario que sigas intentando entablar una conversación con él sobre este tema, la situación ha quedado clara. Él no puede ahora dar más que su amistad.
Sigue siendo su amiga pero no con tanta intensidad, no lo persigas tanto ,deja que te eche en falta, no te hagas ilusiones ni esperes que pase algo más de lo que ya ha pasado, como ves, él no tiene ninguna intención de cambiar sus rutinas.
Nath, esto tan solo es una bonita amistad.
Fastidia cuando las cosas no van por el camino que una quiere, pero para poder superar esto vas a tener primero que aceptar que así son las cosas ...al menos de momento, pero tampoco puedes poner en pausa tu vida esperando que él cambie de opinión o consiga sus prioridades para que luego se de cuenta de que estás ahí.
Has de seguir tu vida y sigue siendo tan buena amiga de todos y no pierdas ese toque de locura que te hace ser tan especial y única.
Besos Nath 💋
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calmasobrelapiel · 4 years
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9 de julio, feriado. Estuve todo el día trabajando. Trabajando en algo que elegí porque puedo, bah, porque no me quedó otra que decir que sí para tener una excusa de decir que hice algo productivo un día como hoy. Todos comen locro y festejan. Me harto de la virtualidad y de ver tanto espamento. Siento que en verdad nadie está disfrutando en serio. Me suena el timbre a las dos de la tarde, atiendo. Más regalos. Regalos que nunca voy a disfrutar. Pero quizás pretendo que sí, como todo el espamento que veo a diario. Saco fotos de todo el chocolate que nunca voy a comer. Presa del orgullo y de la pretensión, hago como si estuviera haciendo mil cosas, y siendo feliz. Bueno, ya sabemos que no, quienes necesito que lo sepan saben que, no. Capaz alejo a todos cada vez más, pero a veces me gusta creer que lo entienden. Perdón vale, capaz nunca leas esto (ojalá que no) pero espero encontrarte de nuevo en algún futuro y que coincidamos. Mientras tanto sigo trabajando. Animo unas placas para un tutorial. Qué pelotuda que es la gente, pienso a veces. Todo hay que explicarles. Pero sí, por suerte o por desgracia, hay que explicar las cosas. Escuché casí 20 horas ininterrumpidas de música. A nadie le interesa mucho cómo estoy, creo. Pero me gusta pensar que sí. Ahora son la una de la mañana y moqueo frente a la computadora, con el 70% del trabajo que todavía no puedo terminar pendiente, pensando en que extraño muchas cosas. Pongo la alarma para las tres pastillas, y para procurar no olvidarme ninguna, y las alarmas para comer también. Tengo en total siete alarmas en el día. “Vos siempre fuiste una persona muy solitaria, siempre aceptamos eso, es tu esencia, vos sos así, tarde o temprano, siempre es lo que elegís” Pienso en solitude is bliss, pero no la pongo, porque es como muy arriba para este momento. Pero me representa. No sé si amo u odio estar sola. No sé si amo u odio elegirlo. No sé si amo u odio priorizarme. No sé. Encuentro algo reconfortante en tanta tranquilidad, pero finalmente me aturde. Igual, estuve todo el día entero sin quebrarme, y es muchísimo para mí. Me quedan cuatro días más por delante sin rutina. Me descoloca. Sigo extrañando algunas cosas. Seguramente, dentro de poco, las deje de pensar tanto. Se me mueve la pierna un montón y pienso en todos diciéndome, “dejá esa pierna quieta!”. Como siempre, no me puedo dormir. No voy a poder dormir dentro de mucho tiempo más. Aunque estos últimos días, a decir verdad, pude dormir un poco más de lo habitual. Tengo esperanzas. Como también tengo esperanzas de dejar de comerme las uñas y tenerlas lindas de una vez. No sé que toqué que ahora todo el texto es chiquito pero no me voy a poner a arreglarlo ahora. Me frené un segundo a mirar todo el panorama que estoy viviendo en este momento, y me río. Me río de la desgracia y de lo ridículo que se ve todo. Un té sin terminar en la mesa, la botella de agua, el termo, el chucker, las pastillas desparramadas, una vincha, mi libreta de la facultad abierta en la última página donde tengo un nueve en el último final que rendí ahí recordándome que me quedan aún DOS más y la tesis para que todo este despelote se termine. La caja de alfajores que nunca voy a comer. Una galletita a medio terminar. Unas pilas abiertas desparramadas, también, que iba a poner en las lucecitas de la ventana que ya se están muriendo. Como yo, como todo esto. Compré un aromatizante difusor con unos palitos con olor a sandia pero sospecho que lo estoy usando mal. Tengo la tele prendida hace cinco horas con últimos cartuchos sonando de fondo. Bloqueo y desbloqueo el celular, como esperando que algo pasé, y no. Nada va a pasar porque yo tampoco hago que las cosas pasen. No quiero que las cosas pasen, no estoy preparada para hacer que las cosas pasen. Vuelvo al modo avión, me tiro en la cama, pero tengo los pies helados. Los pongo abajo de la canela, porque me da muchísima fiaca ir a cargar la bolsa de agua caliente. Sé que no voy a conciliar el sueño. Me levanto. Y estoy de nuevo en frente de la computadora. Me espera una noche larga, larguísima. “¿Te acordás de la última vez que fuiste, no sé si completamente feliz, pero, que realmente te sentiste a gusto y deseaste frenar el tiempo?” Me preguntó Mario la última vez que lo ví. Lo pensé, en mi cabeza, pero no se lo dije. No quería tocar el tema. Pero pensé en ese momento. Quise frenar el tiempo ese día de enero tirada en la arena del río de Nono, descostillandome de la risa, al borde del hipo (que es lo que siempre me pasa cuando me río mucho) con la cabeza entre sus rodillas, viendo y analizando un panorama lleno de gente haciendo el ridículo. Saqué una foto de una nena sacudiendo un toallón, muy contenta, como para nunca olvidarme de ese momento. Yo sabía que iba a ser efímero, me agarró una nostalgia futura. Hace mucho que no estaba en la cúspide de la felicidad como ahí, en ese instante, siete de la tarde viendo como el cielo se ponía rosita. “Montaña o playa?” Me preguntaba. A Mario le mentí, claramente. Y creo que se dió cuenta. No importa. Siempre ignorando lo que me resuena, pensé en ese momento, pero capaz que si hago de cuenta de que no me importa en un tiempo efectivamente me deja de importar. Capaz lo logro. Quién sabe. Me pregunto si funcionará. Me tomo la última pastilla del día y apago la alarma policia. Vuelo a mirar el panorama, y suena true love waits de fondo. Inviable. Pero ahí viene la cane, a cabecearme un poco y ronronearme en la cara. Uf, larga vida a todos los michis de este universo. Larga vida.
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punxroutine · 5 years
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Estás bien buena, pero quítate... vine a ver a Robert Smith
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Por Javier Ibarra
Con 25 años escuché por primera vez en vivo “Boys don’t cry”. The Cure se presentó en el Foro Sol de la Ciudad de México el 21 de abril 2013. Muchos esperaban esa canción con morbo. Para otros fue el detonante pop que los hizo comprar sus boletos con desesperación. Y no es que ese sencillo sea mi canción favorita. Tampoco quiere decir que la odie. Pero mentiría si afirmo que no sentí algo especial al percibir el primer acorde de guitarra que trajo un grito en conjunto de todo el recinto, cuatro horas después de un temblor igual de extasiado que los presentes.
 Melodías como “Push”, “Prayers for rain”, “Pictures of you”, “Lullaby”, “Fascination street”, “Let’s go to bed”, “Fire in Cairo”… lograron que, al reconocerlas, sintiera cosas espoleando mi cabeza. Era el momento perfecto para identificarme con lo que dicen.
Pero regresemos al principio de todo: al hit que me provocó escalofríos al aceptar que sí, era verdad, estaba viendo tocar a The Cure.
Todo se remonta a los primeros días de enero 2012. En una reunión familiar mis tíos Roy y Rodolfo me preguntaron si quería acompañarlos a presenciar a esos viejos vampiros de Inglaterra que, tocando ese sombrío estilo musical, junto con Siouxsie & The Banshees, Joy Division, Bauhaus, Killing Joke, The Psychedelic Furs, Violent Femmes… dieron pie a un cliché más de los ochenta: el post punk.
La oferta consistía en que tendría que poner la mitad de mi boleto. Acepté y reconocí que en ocasiones lo correctos y fastidiosos que son mis tíos, desaparece cuando una banda del tamaño de The Cure da a conocer que vendrá al país; incluso logrando que se olviden que son unos comprometidos padres de familia, quienes ejercen la mayor parte de su tiempo como profesionistas, midiendo su estilo de vida por viajes de negocios al extranjero, mensualidades escolares altas, automóviles del año, ascensos laborales, capacitaciones, anécdotas de traje y corbata, y chequeos médicos que sus presiones altas comenzaron a exigir.
Cabe recalcar que mis tíos no se imaginaban que The Cure me gusta mucho, aun cuando algunas veces me llegaron a ver con mi playera del álbum Disintegration que logré conseguir en el Tianguis de Las Vías, cercano al Metro La Raza. Pero tal vez por eso vino la invitación al tan inesperado concierto.
En cambio, yo sí recuerdo a mis tíos en los noventa. Mi tío Rodolfo fungía como el genérico fan que gustaba de las canciones felices, populares y que The Cure dejó para la posteridad en videos que, seguramente, comenzó a disfrutar en sus noches de antro en la Zona Rosa, bailando “Just like heaven”, ya que fue con la rola donde abrazó de una manera natural a mi tía Sandra; seguro recordaban su noviazgo.
Mientras que mi tío Roy era el darketo fan que disfrutaba de las canciones más oscuras como “One hundred years”. Él fue quien por primera vez me hizo escuchar “Boys don’t cry” en su habitación tapizada de posters de luchadores. De hecho, siempre he creído que les sugirió a mis padres que debía de ser un vampiro en todos los festivales del kínder; como si siempre hubiera visto algo en mí.
  Crecí y mis tíos ya no escuchaban a The Cure como antes. La habitación que compartían en la casa de mis abuelos, después de que ambos se graduaron en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y se comprometieron con mis tías, se convirtió en nuevos recintos con esposas, hijos y perros schnauzers.
Uno de los últimos recuerdos que tengo de The Cure y mis tíos, antes de la invitación al concierto, es el DVD de Greatest hits. Mi tío Rodolfo me lo obsequió en uno de mis cumpleaños. Pero aún eran fechas que The Cure no sonaba tanto como ocurre ahora en mi habitación. En aquel entonces el hardcore y sus subgéneros lo era todo para mí. Mis gorras llevaban parches con slogans como Chaos is me, la frase de batalla de Orchid, una de mis agrupaciones favoritas de toda la vida. Usaba una cadena para sujetar mi billetera al pantalón, un cinturón de estoperoles, una sudadera que tenía un estampado de Tragedy, había una arracada en mi labio inferior, mi cabello era como el de Spock, de Star trek, y los proyectos que descubría, mientras fueran cada vez más ruidosos y nihilistas, eran muchísimo mejor que escuchar clásicos del rock.
Por todo eso, más la imberbe llama de rebeldía que nos ilumina por dentro cuando somos adolescentes, en 2004 me negué a asistir al concierto de The Cure, en la Arena Monterrey de Cintermex. Ninguno de mis amigos que tenía gracias a la música irían, y mis tíos se encontraban a más de 900 kilómetros de distancia. Entonces yo no iba a ser la excepción.
El amor no existía entre mis círculos de esparcimiento. En mi habitación sólo había canciones de Los Crudos, Reversal of Man, Cementerio Show, Ekkaia, Satanic Surfers, Descendents, Eterna Inocencia, Fun People, Capn’ Jazz, Jawbreaker, Fugazi, Charles Bronson, Contrakaos, División Minúscula y Noches prohibidas de Golden Channel. Para mí era necesario ser una especie rara que odiaba todo, por lo que no iba a pagar una cantidad alta de dinero, y así escuchar decir a Robert Smith que ese concierto había sido el mejor de su gira, que amaba a sus fans de la Ciudad de las Montañas con todo su corazón.
  Pasaron los años y las baterías aceleradas, las estridentes guitarras y los gritos desesperantes, se iban quedando en el camino. Las letras de Robert Smith comenzaban a ser las piezas faltantes de mi rompecabezas, cada vez que mi vida se estrellaba con algo, y alguna canción de The Cure se encargaba de cicatrizar las heridas.
Comencé a pensar que jamás estaría en alguno de sus conciertos, que el líder de uno de los míticos grupos de post punk, tarde o temprano podría sufrir un paro cardíaco; o explotar por lo obeso que se ve ahora. La vieja escuela suele bromear con su fisionomía. Mis tíos mencionaron lo del ataque al corazón en los días previos al concierto, cuando las reuniones familiares eran atrapadas en el televisor por alguna presentación reciente de los ingleses.
Hasta el día de hoy, nunca he contado los días que faltan para acudir a algún concierto masivo. Creo que se debe a mi pasado dentro del hardcore, a mi afán de preferir bandas que se presentan en casas, sótanos, cafeterías, cuartos de ensayo, okupas, tiendas de discos, librerías y pequeños bares a donde ellos mismos llegan manejando sus camionetas, después de organizar sus giras.
Sigo sin tolerar a los fanáticos de los conciertos masivos que hacen la señal del rock con sus manos y gritan con desesperación el tema que desean escuchar. Esquivar vasos con orines me es algo desconocido: prefiero la sangre o el sudor a centímetros del cantante herido que, desgraciadamente, sufrió un accidente-amigable. Pero comprar souvenirs que venden mientras caminas hasta llegar a la pista o asiento asignado me es interesante: el ingenio mexicano y la manera de supervivencia no tiene géneros musicales predilectos. Y en el interior de los estadios o arenas, ya es todo un requisito que tengas un teléfono inteligente para hacerlo pasar como el primitivo encendedor que solía acompañar baladas de Guns N’ Roses.
Ciertos dispositivos de un tiempo para acá funcionan como un encendedor que graba, ilumina y reproduce el recuerdo, con la diferencia de que ese aparato muchas de las veces terminaba en las gradas o la pista del lugar, al momento de agotarse su gas y no contar con una pila recargable.
Pero mi completo sentir de aberración viene al escuchar a mi otro tío (Ricardo, el menor de los tres hermanos de mi mamá), decirme todas las cosas que suceden cuando Metallica viene a México. Siempre lo relata con tanta emoción que sus ojos se cristalizan. Siempre me he negado a acudir a ese concierto con él. Hace poco me armé de valor y le dije que por su culpa odiaba a esos pinches rockstars. Desde que tenía 5 años me obligaba a que pusiera atención en las canciones de esa agrupación que se convirtió en una empresa. A un primo menor, Roger (hijo de mi tío Rodolfo), sí logró lavarle el cerebro, y ahora a cualquier propuesta de rock no la ve más allá que de un estadio a reventar, demandas multimillonarias, pose, y sin una historia previa de picar piedra junto con otros proyectos, para que exista un interés de sumergirse en un movimiento, un género musical y buscar artistas similares, descubriendo que no todo lo importante tiene que ver con la mercadotecnia.
  Después de ciertas cosas que me llevaron al concierto de The Cure, mis tíos pasarían por mí antes de las seis de la tarde. Esperaba que mi tío Roy llegara vestido de terciopelo, y mi tío Rodolfo con su mejor camisa de vestir, evocando las fiestas donde Patrick Miller lo hacía bailar high energy.
Y también, entre todo lo superficial que dice mi otro tío (Ricardo, el obsesionado por Metallica) sobre las explosiones, los gritos de “fuck yeah” y todo lo que ocurre en los conciertos masivos, la única información que me sirvió fue saber que el precio de la cerveza (dos de media en un vaso de plástico que nunca me ha gustado el sabor que le da) rondaba los 100 pesos.
Así que, aparte de los 200 pesos que tenía que darles a mis tíos, tomé un ciego más para disfrutar de una chela viendo y escuchando a The Cure, cuando me encontrara más que extasiado. Sólo que la mejor opción era comprar dos caguamas y pre-copear en mi habitación, viendo alguna serie de televisión, hasta que me recogieran.
Nada de eso ocurrió: mi celular sonó como a las tres de la tarde y tuve que ir a encontrarlos al Metro Velódromo. Al escuchar el clásico chiflido que siempre han usado mis tíos para dar a conocer que ya llegaron, me percaté que habían elegido ir únicamente en el Jetta blanco de mi tío Roy.
Cuando vi sus prendas de vestir descubrí que ninguna traía de vuelta a su juventud. Lo que pensé fue que yo pude haberme puesto mi traje de vampiro, para tomarme más en serio todo el asunto de los conciertos masivos. Lástima que crecí y olvidé las coreografías de los bailes en el kínder.
Subí al Jetta y mientras intentábamos dar con el estacionamiento indicado, mis tíos me preguntaban por qué estaba espantado. A la cuarta ocasión que me cuestionaron, no dude en decirles que era por sentir emoción, e igualmente por lo raro de presenciar a The Cure con ellos y mis tías Norma y Sandra, quienes estaban a mis costados, en el asiento trasero.
  Tras dar tres vueltas por el mismo sitio, mi tío Roy terminó estacionando su carro en el deportivo que está de frente al Velódromo Olímpico Agustín Melgar. En cuanto el Viene-Viene advirtió que eran 100 pesos de cuota, mis tíos dejaron saber que hace mucho no iban a un concierto masivo: la cantidad que ambos recordaban era menos de 50 pesos. Yo no me espanté por la cantidad de dinero del estacionamiento, sino que me preocupé por el costo de la cheve.
Cruzamos la estación del Metro Velódromo. Subimos los escalones de un extenso puente peatonal donde aparecieron los revendedores, preguntando si traíamos o queríamos entradas para el concierto. Desde ahí se podía ver el Palacio de los Deportes y detrás suyo el Foro Sol a punto de convertirse en un inmenso ataúd sonoro de post punk.
Nos internamos en una calle que daba a otro puente peatonal. Los gritos de los vendedores ambulantes te hacían voltear a ver la extensa gama de playeras, tazas, llaveros, bufandas y demás objetos que inventan para generar dinero. Para ese momento mis tíos ya caminaban tomándose de las manos con mis tías, rejuveneciendo en un contacto natural, el poético estilo de canciones que escribe Robert Smith.
En cuanto los vi me arrepentí de no haber tomado ninguna chela en mi habitación. Yo caminaba solo y nadie me susurraría al oído “Close to me”, en cuanto estuviera iniciando.
Si quería dejar de ser parte de ese acto romántico de mis tíos, lo mejor hubiera sido subir a un bicitaxi, los cuales, como si ya conocieran la manera de trabajar en los conciertos masivos, esperaban a un costado del puente peatonal a los fanáticos más güevones. Hasta me imaginé a los bicitaxistas vestidos como darketos, con sus medios de trabajo pintados de negro y soltando un vapor espeluznante por la parte trasera. Se me hizo gracioso y me despejó de todo.
Caminaba observando los diferentes tipos de fanáticos que The Cure ha germinado. Al frente de nosotros iba una señora que pudo haber sido una de mis tías, la pareja perfecta de mi tío Roy; vestía de terciopelo, botas de charol que rozaban sus rodillas, y su cabello estaba explotado como el de Siouxsie Sioux. A mis costados, del lado derecho, iba un grupo de jóvenes aproximadamente de la misma edad que yo, con sus novias portando vestidos de dominatrices. Del otro lado caminaban padres de familia que, al parecer, llevaban por primera vez a sus hijos a un concierto: un pequeño como de 3 años lucía maquillado del rostro, como un Edward Scissorhands, sin aún saber el significado que dictan los decibeles de la música, tal vez creyendo que lo llevaban al Zoológico de Chapultepec.
En el otro puente peatonal que nos esperaba para subirlo y bajar ya sonaba, primero, la desconocida voz de Andrea Balency Trio. Mi tío Roy, justo en medio del puente, me señaló la playera roja de la chica que caminaba a unos cuantos pasos de nosotros. Me preguntó si conocía a The Chameleons. La verdad, nunca había visto una prenda de ellos, y le dije que sí los conocía, cuando en mi cabeza se volvían a formar los rostros deformes de algunos nuevos valedores de Chilangolandía bailando la canción “Second skin”, bajo los influjos de alguna droga psicodélica.
La chica con la playera de The Chameleons era un monumento de pies a cabeza. Tenía el cabello corto y, para combinar con su indumentaria, era un hermoso ser pelirrojo que se parecía a la actriz Rose McGowan, en Scream.
Estoy seguro de que no pesaba más de 50 kilos. Aun así, su figura hacia juego con su estatura como de 1.55 como máximo. Su trasero era hermoso con ese pantalón de mezclilla que hacía juego con sus botas tipo Dr. Martens y, también, caminaba con quienes aparentemente eran sus familiares.
Con la boca abierta y casi babeando, rebasé a la chica pelirroja y a su supuesta familia, para que, en ese mismo instante, al voltear a verla a la cara, me di cuenta de que sí, era idéntica a la actriz que llegó a ser la pareja de Marilyn Manson.
Creí dar con el prototipo de chica que debe escuchar melodías oscuras, melodías sensuales para seres pálidos. Volví a verla un par de veces más, hasta que desapareció en una de las puertas del Foro Sol.
  Subimos al palco número 1. Mi asiento asignado era el 6. Otra vez, quedé en medio de mis tías. El ambiente de los conciertos masivos hizo que hablara un poco con ellas. Conversamos de mi trabajo en una editorial independiente de arte contemporáneo y de mi fanzine literario-musical.
Puse atención a las últimas dos canciones de Andrea Balency Trio, y mis tíos volvían a ser lo que son en el presente: hablaban de los cursos que imparten por México, Sudamérica y el Caribe. Fue cuando mis tías me preguntaron el género musical de los teloneros de The Cure. Pude haberles dicho shoegaze, pero como ahora existen estilos inclasificables, opté por decirles que se trataba de canción-melodramática-popular.
Andrea Balency Trio, antes de finalizar su presentación, agradeció al público. Creo que a muchos les gusto. Me incluyó porque aplaudí. En medio de sus palabras mencionaron que Robert Smith cumplía 54 años, en el último concierto de su gira latinoamericana. Para ese momento el vendedor de cervezas se paseaba enfrente de mí: sentía que me señalaba, que me inducia para preguntarle el precio que tenían.
Elegí poner mis ojos en otra cosa, pidiéndole al aire una fotografía para la posteridad, para dejar en claro que había visto a The Cure tocar en vivo. Mi celular no era inteligente, por lo que mi tío Rodolfo se puso de pie y señaló dónde debía pararme. Sin mostrar alguna señal de felicidad, vi como tocó la pantalla de su teléfono que sí es inteligente y listo, al otro día me la envió por correo electrónico.
Fui al baño y estoy seguro de que mis tías pensaron que iba a inhalar o fumar algo. Para ellas, dedicarme a escribir y trabajar en algo relacionado al arte, estaba 100% ligado a la drogadicción.
En el interior del sanitario olía a cheve. Olía tan fuerte a orines de cebada que se me antojó aún más la única bebida alcohólica que pensaba comprar.
Tocó mi turno de desabrocharme el pantalón y sacarme la verga entre otras más que chorreaban los ritmos de las canciones que querían oír. No miento: escuchaba el característico teclado de “The walk”.
Con la mirada fija al techo, detecté que el pendejo que meaba a mi lado izquierdo apretaba de más el estómago. Salpicó mi pantalón y la playera que estrenaba de Décima Victima. El pendejo gemía. Era uno de esos fanáticos que van maquillados y vestidos como vampiros, no por convicción a la subcultura dark, sino que sólo lo hacen para llamar la atención. Seguramente pudo haber sido uno de esos tipos que venden rosas negras en el Tianguis Cultural del Chopo, o que piden cooperación voluntaria para el Periódico Machetearte.
Le reclamé con un tono de voz norteño. Varios voltearon a vernos. Le dije que no apretara tanto la panza y que orinara hacia abajo, no a la pared. El pendejo salió corriendo por sentir pena. No pensaba lavarme las manos y terminé haciéndolo por tanto asco.
  Anocheció. El público comenzó a silbar. Fingían ser una parvada de cuervos. La noche y The Cure siguen convergiendo. La luna llena lo avalaba. Era el momento indicado para que Robert Smith apareciera en el escenario. Comencé a sentir la boca seca. Tanto, que no resistí y compré la única cerveza que tenía en mente (mi tío Ricardo tenía razón, el analgésico costó 90 pesos).
Después de que el vendedor me dio la chela, y cuando ya le había entregado la cantidad exacta de dinero, me la empiné y un gordo en la fila de atrás, gritó con miedo y desesperación: “¡Está temblando!”. Pensé que había sido buena idea comprar esa bebida, porque al primer sorbo logró marearme. Sin embargo, el temblor creo que era la manera perfecta de decirle a Robert Smith “happy birthday”, en el momento exacto que lo vislumbré mordiendo su pastel de chocolate, en el backstage.
No me espanté como en otras ocasiones. Estaba relajado, ya que no había edificios alrededor. Lo único que iba y venía era una de las lámparas a la que muchos aplaudían, chiflaban o le tomaban video.
Todos vitoreaban el sismo de 5.8 grados Richter. Cosas así, pensé que suelen ocurrir en los conciertos masivos, convirtiéndose en la mejor introducción al show de unas leyendas como lo son The Cure.
Cuando el temblor se detuvo volví a darle otro inmenso trago a la cerveza: me di cuenta de que era la bebida alcohólica más pinche cara y horrible que había tomado en toda mi vida.
Pasadas las ocho y media de la noche todas las luces del Foro Sol se apagaron. The Cure salió al escenario con la canción “Open”, la que abre Wish, su noveno álbum, dándome a entender que se trataría de un concierto muy especial.
Después sonaron algunos temas más populares que hicieron que el Foro Sol fuera un inmenso teléfono inteligente. Por momentos me hizo sentir fuera de lugar.
En “Lovesong”, al ver cómo mis tíos ponían sus manos encima de las de mis tías, la luna llena me cegó. ¿Qué podría haber estado pensando? Aparte, un tumulto de gente se paró enfrente de nosotros, tapándonos la visibilidad al escenario, que de por sí se veía hecho una miniatura. No sabía que eso suele ser bastante común en las gradas de los conciertos masivos. Nuestros boletos eran de los baratos y no me imaginaba que tendría que lidiar con esas pendejadas.
Fueron veintiséis canciones las que tocaron antes del primer encore. Las fui apuntando en mi celular de 200 pesos. Pensé que habían sido demasiadas, que The Cure sólo volvería a salir una vez más. Ya están rucos, y me convencí de eso cuando interpretaron “A forest” demasiado lenta, alargando de una manera escalofriante la parte inicial de guitarra.
El encore trajo “The Kiss”, “If only tonight we could sleep” y “Fight”. Nada más esas tres canciones, afirmando que sí, es cierto, los años no pasan en balde. Fue el momento perfecto para intercambiar opiniones con mis tíos. Por naturaleza estuve de acuerdo en cuáles habían sido los mejores temas. Los dos se mostraban felices, como si volvieran a ser muy unidos y estuvieran otra vez en la habitación que compartían.
Mis tías ya lucían aburridas, observando la hora que era en sus teléfonos inteligentes, y tecleando cosas para que el concierto transcurriera más aprisa. Llegué a pensar que saldríamos antes de que finalizara el espectáculo. Mis tíos, aunque no lo quieran aceptar, son mandilones. Por eso debí haber llevado otros 100 pesos más, por si tenía que regresarme solo a mi hogar. No obstante, The Cure parece ser que tiene un poder que soporta y desvía las miradas de las esposas que nunca, en ninguna etapa de sus vidas, esa banda de post punk les hizo sentir algo.
 Con otras tres canciones (“Plainsong”, “The same deep water as you” y “Disintegration”) de mi álbum favorito que lleva el mismo nombre que el último tema, The Cure hizo el encore número 2. Fue mi momento preferido de la noche. Robert Smith jugaba con nosotros, debido a que los primeros temas del encore número 1 pertenecían al álbum Kiss me, kiss me, kiss me y, después, continuaron con el mismo método, pero trayendo de vuelta el año de 1989.
La gente se volvió a gestar frente a nosotros. Me molestó tanto que pensé en orinar en el vaso de plástico y arrojárselo a alguien. Los guardias de seguridad que estaban en esa zona no cumplían con su trabajo: un hombre y una mujer que pertenecían al contingente de vigilancia se encontraban romanceando, casi-casi tomándose de sus macanas. Otros dos de plano observaban con morbo el escote de una rubia operada.
El gordo en la fila de atrás no dejaba de gritar cosas. Era insoportable, buscaba ser el hazmerreír del concierto. Como entretenimiento previo a que saliera The Cure y momentos antes del temblor, estuve contando los hot dogs que se tragaba. Me quedé en el quinto, y sudaba las cuatro cheves que ya se había empinado.
Intenté tranquilizarme, pensando que Disintegration era el álbum más amado por el público, que por eso la gente se volvía loca y hacía todo tipo de cosas.
En el encore número 3, la mayor parte de las personas que estaban de pie, comenzaron a regresar a sus lugares. Inesperadamente sólo quedó la chica de la playera de The Chameleons que era idéntica a Rose McGowa: el ser más hermoso que había visto afuera del Foro Sol, esperando a que tal vez temblara más fuerte o saliera The Cure por última vez.
  La ovación del público vino nuevamente en cuanto The Cure apareció. Tocaron “Shake dog shake” y la Rose McGowan mexicana se emocionó, ocasionando que diera unos brincos un tanto chuscos. El gordo y su estupidez le gritaron: “¡Estás bien buena, pero quítate… vine a ver a Robert Smith!”. Enseguida se escucharon risas, silbidos, vulgaridades, seguido de “The hanging garden” que no esperaba escuchar. Comencé a temblar de nervios y apreté mis puños.
El encore número 4, el final, aportó la parte más colorida, gracias a “Lovecats” y “Why can’t I be you”. Fue el momento donde me armé de valor y fui a posarme a un costado de la chica pelirroja, en cuanto comenzaba “Close to me”.
A mí alrededor lo único que había eran parejas de novios, matrimonios y hasta amantes. El gordo seguía gritando lo que le viniera a la mente. Hasta me gritó a mí, ya estando al lado de la Rose McGowan mexicana: “¡Quítate… pinche Harry Potter!”, gracias a mis lentes de pasta y mi cabellera lacia y aún parecida a la del Capitán Spock, de Star Trek. Se volvieron a escuchar risas, otros chistes y, enseguida, reconocí la voz de mi tío Roy: “¡Vampiro del kínder… muévete a la chingada”.
La chica pelirroja volteó a verme con una sonrisa espectacular. Vencí mis nervios y con una expresión similar le respondí su gesto con otra mueca de alegría.
“Hot hot hot” dio inició y algo me preguntó. No alcancé a escuchar, le sonreí por segunda ocasión y dejé que terminara la melodía.
Me mantuve a su costado, deseando estar tocando su piel transparente, acariciando su cabellera de fuego.
Lo que me había dicho la Rose McGowan mexicana es que cuál era mi nombre, y que ella tenía una playera idéntica a la mía. Le respondí que Décima Victima era de mis agrupaciones favoritas, y que los vampiros del kínder no tenemos nombre, queriéndome hacer el interesante.
Era una casualidad que nunca iba a volverme a suceder: The Cure ya interpretaba “Boys don’t cry”, la Rose McGowan mexicana pasaba los últimos instantes del concierto a mi lado, y el pinche gordo no dejaba de gritarnos cosas.
La chica pelirroja y yo conversábamos. Al principio pensé que era interesante, aun cuando se trataba de algo superficial.
“10:15 saturday night” llegaba a su fin. Mi amargura detuvo mi deseo de hacer algo más por la Rose McGowan mexicana. Sentí que nuestro intento de conversación era un laberinto sin salida. El presente se basaba en su belleza haciendo resaltar la playera de The Chameleons, los gritos del gordo, y The Cure interpretando el soundtrack que muchos desearían fuera parte de sus vidas.
Mi reacción fue ir hasta el lugar donde estaba el gordo, increparlo, y pedirle que se callara la boca (después de cuatro horas de música).
Recordé cómo la música me fue guiando al mundo de la literatura, que comprara mi primer libro de Albert Camus. Entonces el señor Meursault entró a mi cuerpo. Le tiré una patada al gordo y desahogué todo lo que representan los conciertos masivos para mí.
Pensé que no había cometido nada grave. El gordo se puso de pie, se me vino encima, y no sé cómo fue que comenzó a caer por las escaleras después de esquivar uno de sus golpes.
La chica pelirroja, mis tíos, mis tías y la gente que disfrutaba del concierto de The Cure en esa zona, ahora se reían, pero del gordo que rodó por las escaleras del Foro Sol.
Los guardias de seguridad siguieron sin hacer su trabajo, no me dijeron nada. Ya más relajado seguí sintiéndome El extranjero, coreando “Killing an arab”, la última canción del concierto, disfrutando de esa noche en la que tembló, y desprendiéndome del estigma del vampiro infantil que fui, el cual jamás pensó estar en el mismo lugar con Robert Smith.
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lucydragneelft · 5 years
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Kingdom Hearts III [thoughts&review]
Primero de todo, no sabría cómo empezar a contar mis sentimientos sobre este juego. Por un lado son inciertos y un tanto confusos, sobre todo debido a ese final secreto que nos ha dejado a todos un poco confundidos y con ganas de una respuesta más concreta por parte de Nomura. Pero dejando esos pequeños detalles de lado, me gustaría centrarme principalmente en uno de los aspectos que más me ha "molestado" ¿por así decirlo? Durante el estrecho final del juego desde la escena donde los portadores de llave espada están todos juntos preparándose para la Batalla final. Durante todo el juego hemos disfrutado de la típica y básica linea argumentativa de KH con sus mundos Disney y algunos capuchas negras por ahí diciendo cosas que no entendemos y molestando a Sora. Lo he comentado con varias personas desde que me pasé el KH2 y la verdad me alegra bastante que arreglaran la dinámica de juego y el ritmo argumentativo porque, siendo sinceros, (no diré que es anti-climático) pero un ritmo argumentativo lento te hace tener más expectativas de las que deberías en un juego, que el 2 las cumple, no os voy a engañar, pero hasta que llegamos a destapar el pastel nos tenemos que comer 20 horas de juego básicamente relacionados con mundos Disney y que no nos van a aportar nada a la historia principal. El KH3 lo arregla bastante bien poniéndonos esos mini flash de cosas que están ocurriendo a la vez en otras partes de la historia y que nos hace mostrar interés por lo que se puede venir, además de que los mundos ya no son tan "seguir la historia de la película" sino mostrar cómo es ese mundo después de la película incluyendo a Sora en él. Un detalle por el que debo aplaudir a Nomura a parte de por el fantástico sistema de combate (pero en eso no voy a entrar porque no soy una critica de juegos ni de gameplays) Me estoy enrollando bastante para intentar llegar a mi punto de partida con esta pequeña reseña o como queráis llamarlo. A la vez que hay que alabar el trabajo bien hecho y los grandes esfuerzos que ha puesto todo el staff a la hora de crear este juego, también hay que señalar sus puntos malos, y en este caso para mi punto de vista, bastante malos. No me toméis como la mala de la película, no voy a jugar a ser el poli malo y decir que el juego es malo porque no lo es, el juego es esplendido en muchos factores y detalles; pero es por esto mismo que no comprendo los grandes errores que luego este contrae en la tira final del climax. Lo voy a decir bastante explícito y claro para que no se malinterprete después; el mayor problema del KH3 es el destiny trio. Si. Sora, Riku y Kairi son el mayor problema y fallo que tiene este juego con diferencia. Muchos diréis: "¡Pero criticas eso porque shippeas el soriku!" Bueno, igual tenéis razón y mi enfado puede provenir de ahí, pero no es del todo correcto. A todos aquellos que me pondréis cualquier excusa para intentar refutar mis palabras me gustaría, con mucha sinceridad y como un simple ánimo de curiosidad por mi parte, que me expliquéis qué os gusta de Kairi o al menos que me deis una razón para decir que estoy equivocada si os digo que es el peor personaje de la saga y en KH3 solo la ha vuelto peor. No quiero sonar a hater, que conste. Estoy siendo bastante objetiva porque a mi Kairi "me gustaba"; estaba en ese limbo entre el "me das igual" y "te aprecio porque eres una protagonista" (es complicado de explicar) Pero como dije solo unas pocas lineas antes, mi problema no es solo con Kairi y del reiterado mal uso de su personaje. Sino unos personajes como son Sora y Riku que resultan ser mis favoritos junto con Axel. ¿Diría que me gusta el Sora del KH3? Si, me gusta. Es Sora al fin y al cabo y el aprecio que le tengo después de tantos juegos no puede desaparecer tan fácilmente y es por eso, gracias a mi maratón de KH estos meses que puedo decir, que el Sora del 3 no era el Sora que conocemos. Suena muy poético pero es serio, estoy hablando de que Nomura ha sacado de personaje a Sora en repetidas ocasiones para darle motivos por los que sentir algo por Kairi. El mayor ejemplo de esto es la escena donde Riku protege a Sora con su vida antes de que luego este último fuese engullido por la masa de sincorazones. Cuando Sora usa el poder del despertar para llegar a los corazones de todos y poder salvarlos su primer pensamiento es "Kairi me ha hecho poder volver" o como dice en la versión inglesa mientras viajan por el túnel en el tiempo "Kairi, me siento poderoso a tu lado". Me imagino que no sois ningunos newbies en KH y habéis jugado al resto de juegos para daros cuenta de que 1. Sora no diría eso. Sabiendo de sobra que la premisa de Sora es que sus amigos le hacen fuerte y no solo Kairi y 2. Ha olvidado por completo el simple hecho de que Riku se sacrificara por él, en sus propias narices como ya hizo otras veces. Digamos que Riku para Sora en este juego queda bastante reservado a un lado, como si su relación no se hubiese fortalecido ni evolucionado y es que encuentro MUY molesto como han "suavizado" la presencia de Riku en este juego y de su relación con Sora, llegando a estar incluso fuera de personaje. De verdad que no quiero que suene muy biased esto ni muy pro x ships pero es lo que siento cuando veo este juego, siento que el destiny trío está vacío, como si todo lo anterior no hubiese ocurrido. La única relación entre ellos 3 que se ha forjado verdaderamente y ha crecido y se ha vuelto fuerte ha sido la de Riku y Sora, y muy sinceramente y desde el fondo de mi corazón, no pienso que el Riku que yo conozco dejara ir a Sora hacia su propia muerte él solo, ni que Sora fuese tan insensible de olvidar a todos los de su alrededor, más en concreto Riku, y centrarse solo en la existencia de Kairi y su TAN y REPENTINA buena relación, ya que no se hablaban desde el KH2 (?) Mientras que el resto de tríos han tenido su momento de reunión entre los 3, haciéndonos ver que los 3 son importantes para cada uno de ellos, ¿qué nos encontramos con el destiny trío? Una división que lleva presente desde el mismo KH1. Nos los presentan como un trío pero en realidad su relación se puede resumir en un Riku <-> Sora <-> Kairi Siendo la parte de Riku y Sora la única evolucionada y verdaderamente tocada durante la historia para hacerla crecer y demostrarnos que son amigos que se quieren y se protegen aunque eso signifique perderlo todo por el otro (Algo que ha demostrado Riku en repetidas ocasiones) ¿Por qué el destiny trio no compartieron una paopu los tres juntos? ¿Por qué Nomura insiste tanto en marcar esa división tan evidente que hay entre los tres y que no puede ser soldada por ningún lado? Tenia la oportunidad perfecta, la tenia al alcance de sus manos, el volver a demostrarnos que Sora, Riku y Kairi pueden funcionar como un conjunto y no como piezas separadas y es que Riku y Kairi parecen desconocidos, no hablaron, no compartieron ni una sola linea durante el KH3 y Riku jamás ha mostrado preocupación por Kairi. Solo debemos comparar su relación con Xion, Roxas y Axel, donde Roxas y Axel fueron los primeros en conocerse y los que más vinculo forjaron pero luego Xion fue incluida de todos modos y Axel la quiso por igual. La escena de Axel arrastrándose y sujetando a Xemnas por el pie para evitar que haga daño a Xion. Todos esos pequeños detalles son los que hacen al destiny trio un cascaron vacío como conjunto en comparación con los demás. En vez de vendernos la idea de una amistad, han decidido apartar a Riku (Uno de los personajes más increíbles de toda la saga) para simplemente hacer un forzoso (lo siento por la palabra) "romance" entre Sora y Kairi que contradice por completo el ideal de amistad pura y sincera de la saga y más cuando en este caso supone reducir a cenizas la amistad y vivencias de Riku y Sora a lo largo de juegos como el Dream Drop distance. Tengo aun más cosas que decir, pero para estas pocas palabras que me faltan, también me gustaría comentar parcialmente el increíble mal uso del personaje de Kairi en este juego. En los trailers nos la venden como una luchadora más que ahora será capaz de controlar su destino por si misma y luchar al lado de los demás y en su lugar nos vuelven a poner una Kairi débil, sin personalidad y que encima vuelve a ser secuestrada sin mostrar ningún tipo de resistencia. ¿Dónde está esa premisa que me diste? Eso no es lo que me vendiste cuando me presentabas el juego, Nomura. Pero el colmo de los colmos es cuando Kairi muere en manos de Xehanort simplemente para darle una motivación a Sora para enfadarse y luchar. En serio. ¿Usas un personaje, que querías darle un potencial, del mismo nefasto modo que llevas haciendo toda la saga? Me decepcionas, Nomura. La muerte de Kairi es comparable a la de Luna en FFXV, y si no lo habéis jugado, Luna, un personaje femenino completamente plano y que no te aporta nada, muere simplemente para darle un motivo al protagonista para ponerse un poco las pilas. Que si, Luna era importante para Noctis, al igual que Kairi lo es para Sora (aunque Kairi tiene incluso menos votos a su favor) Es una muerte estúpida. Luna y Kairi, dos personajes con potencial desaprovechado de esa forma (que encima Luna no es que fuera débil precisamente) ¿Así es como funcionan los protagonistas femeninos? Para concluir con este mini testamento de mi sal que os escrito, simplemente decir que en este juego se ha notado esa faceta de Nomura, el que él no es un escritor, simplemente un diseñador y concept artist. A pesar de esas cosas, el juego me ha encantado, lo he disfrutado a cada momento del día y cada unas de las 38 horas que lo he jugado. Espero bastante impaciente que nos deparará la saga. Si habéis leído esto o al menos llegado hasta aquí, simplemente deciros que gracias y podéis hablarme en cualquier momento para que podamos comentarlo y rebatirlo.
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masterpieceavenue94 · 3 years
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1 de octubre, 2021.
¡Hola!
Hoy estoy de muy buen humor, me siento totalmente idealizada y me siento taran bien. Hacía casi un mes que no me sentía tan bien. Y esto tiene su explicación.
Bueno todo se remonta al 30 de agosto; ese día tuve la primera reunión con Maxi, mi tutor de la tesis, y de primeras ese día iba como estresada, porque obviamente no había avanzado en nada con mi tesis y lo único que tenía era una pila de PDFs apilados en una carpeta esperando ser leídos. Bueno, el caso es que yo quedé con Maxi, hablamos sobre el contrato de tutoría para la tesis y sobre el tema de mi tesis, y al final quedamos en que estaba bien eso de que leyera los PDFs y que buscara teoría y tal, pero que debería centrarme en crear primero un corpus con todos esos términos nuevos que han aparecido relacionados con el coronavirus. Total que al final fijamos la siguiente reunión para el 4 de octubre.
La siguiente semana fui en sí productiva, estuve leyendo durante 4 días seguidos PDFs y me quité bastantes. Puse anotaciones en algunos de ellos y descarté los que no iba a necesitar para nada. Pero bueno, luego a partir de ahí todo se desmoronó. La siguiente semana no hice nada, creo que fue como una especie de "mini descanso" por haber leído tanto. Pero claro, little did I know que ese mini descanso se iba a convertir en un descanso de tres semanas casi. Como ya conté en su día me pilló una depresión y una crisis existencial que me duró como dos semanas. Y bueno, pasadas esas dos semanas me dije, "hora de volver a hacer algo". Esa semana fui a la piscina y al día siguiente busqué fuentes donde encontrar neologismos; a ver, yo ya tenía tres fuentes pero Maxi me dijo que buscara más. La búsqueda fue un poco fracaso, porque me informé como de 5 fuentes y ninguna me sirve porque como mucho solo tienen neologismos documentados hasta 2019 (y claro, yo me voy a centrar en los años 2020 y 20219.)
El caso es que yo me estaba dando cuenta de que el tiempo se me echaba encima y me repetía una y otra vez que tenía que ponerme ya en serio. A esto que el 22 de septiembre Maxi me manda un correo diciendo que no puede tener la reunión el día que dijimos porque no iba a estar, y me preguntaba si podía adelantar o posponer la reunión. Entonces yo pensé, "si lo atraso no voy a hacer nada, pero si lo adelanto de seguro hago cosas." Pues, así fue. Adelantamos la reunión para el 1 de octubre, entonces yo al día siguiente me puse a hacer cosas. Busqué unos neologismos, pero también sucedió que una de mis fuentes tiene como acceso restringido y no podía hacer una búsqueda en condiciones; a lo tonto luego me las apañé para buscar algunos neologismos de otras dos fuentes nuevas que encontré que daban la casualidad estar relacionadas con los neologismos que se encuentran en esta fuente de acceso restringido. Bueno, pues en general estos momentos de estudios fueron cortos, mi procrastinación me podía y cuando me llegaba la motivación de hacer algo, esta motivación me duraba como mucho una hora. Bueno pues creo que para ese momento ya tenía hecho algunas tablas con neologismos y sus respectivas fuentes, pero sólo eso. En sí todavía me quedaba como 6 días para la reunión así que no me preocupaba tanto, porque en sí ya había reunido algunas cosas. El fin de semana me di cuenta de que no sólo tenía que buscar neologismos. Maxi me dijo que también debía buscar la frecuencia que se dio entre 2020 y 2021 en CORPES XXI. Y eso iba a tomar tiempo, primero porque nunca había usado ese corpus, y segundo, porque tenía en sí bastantes neologismos que buscar.
El caso es que los días pasaban y no sé qué pasó pero la motivación tampoco llegaba y como ya dije, me duraba una hora, o incluso menos. Llegó ayer. Y obviamente ayer era el último día que tenía para preparar todo. Entonces decidí despertarme a las siete de la mañana, pero luego no me levanté hasta las ocho, desayuné y a las nueve me puse a hacer cosas. Hice un resumen de lo que había hecho días anteriores. Luego me di una pausa, porque la motivación s fue. A las 12 me puse de nuevo con ello y puse todos los neologismos clasificados por fuentes y frecuencia entre 2020 y 2021. Pero, pensé incluir también el año 2019, sólo por si acaso. El caso es que la motivación se fue de nuevo y hasta las 2 de la tarde no me puse de nuevo. Estuve una hora analizando cosas pero sólo me dio tiempo a 50 neologismos. 50 de 177. Iba a ser una noche larga, porque a las cuatro tenía que ir a trabajar y cerrar en la cafetería.
Justamente, de todos los días, el jueves fue el día con más gente y el día en el que más tarde salí de la cafetería. Total que me puse a las 11 de la noche a analizar. A lo tonto analicé todos. Me dieron las dos de la mañana, pero estaba tan motivada e inspirada que no quería parar. Suerte para mí que incluso encontré muchos más neologismos a través de CORPES XXI, ahora en mi lista tengo 188. ¡Quién me iba a decir que 188 palabras habían sido creadas en relación al coronavirus!
Bueno acabé durmiendo a las 3 de la mañana. Hoy me he despertado a las 8, me he vestido y a las 8 y media he salido de casa porque a las 9 tenía la reunión con Maxi. De camino seguía feliz, por así decirlo, creo que estaba todo orgullosa de mí por lo de anoche. Porque tiene mérito que todo el trabajo que supuestamente tenía que hacer durante 30 días lo hice en unas 10 horas, 6 el jueves y el resto fueron esos pequeños momentos de motivación en los diferentes días. Bueno de camino me di cuenta de que no tenía nada preparado para hablar con Maxi. Sólo tenía mi lista de neologismos y mis frecuencias. Entonces llego a la reunión me pongo en una silla y abro el ordenador.
No sé como, pero abro la boca y no paro de hablar. Empiezo a contar sobre la búsqueda de nuevas fuentes y mi fracaso porque no me vale ninguna. Hablo de la búsqueda de ellos de las dos primeras fuentes y comento la tercera fuente de acceso restringido. Maxi me dice que podemos intentar contactarles para ver si me dejan o no tener acceso al banco de datos. Luego continuo hablando de la lista que he hecho de todos esos neologismos y su clasificación por fuente, le enseño otra última table donde sí están todos los neologismos, incluidos los que encontré en CORPES XXI (los 188 neologismos), también le comento sobre diversos neologismos y algunas frecuencias, e incluso saco unas conclusiones que ni siquiera sabía que tenía en la cabeza, es más creo que a lo tonto improvisé porque me llegaban flashbacks de la noche anterior mientras buscaba las frecuencias. De verdad, que más sorprendida no podía estar yo. También le comento que he encontrado unos neologismos en otra página, y al final decidimos también usarlos.
Es gracioso porque Maxi, en principio, no me hacía mucha gracia como tutor. Sentía y bueno pienso que sus clases son flojas, pero como tutor me estoy sorprendiendo bastante, Porque no esperaba que estuviera tan al día y tan...no sé, como que siempre que quedo con él viene con su hoja A3 y empieza a hacer esquemas de cómo podemos seguir con la tesis, y la verdad ayuda bastante. Como que me ayuda a ver la luz. El caso es que me ha dicho qué podía llevar a cabo durante este mes.
Y bueno he salido de la reunión todo feliz, porque ósea, no me esperaba que fuera a estar tan activa en la reunión y encima que saliera de ella con taaantas cosas que puedo empezar a hacer. No hemos fijado fecha para la siguiente reunión, porque claro son demasiadas cosas las que tengo que hacer, pero quiero tener una reunión con él de nuevo para principios de noviembre.
Y eso es todo, estoy súper contenta y para festejarlo he ido a desayunar con mi madre, he ido de compras y luego también hemos comido fuera. Luego he llegado a casa y me he metido en mi cama para echarme la siesta, pero no he podido. Pero bueno, he estado toda la tarde en la cama. Y por un momento quería ponerme a hacer cosas, pero a la vez, no quería como dar demasiado de mí, así que mañana me voy poner a hacer algo.
Pero hoy, hoy es un día de celebración.
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nana-no-tsuki · 7 years
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Levi Ackerman Monólogo [Español]
¡Hola! El día de hoy les traigo el monólogo de Levi que viene incluido en el CD. Muchísimas gracias a @darlingpoppet por proveer tanto la transcripción en japonés y por tomarse la molestia de traducir en inglés (pues sin ella se me habría complicado bastante, mi japonés no es tan fluido /muere//) ¡Y gracias por leer! 
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 (SHINGEKI NO KYOJIN CHARACTER SONG SERIES 06: Levi) 
Levi Akckerman - Monólogo
En serio, ya tuve suficiente. Este mundo es una completa mierda, y la humanidad sigue siendo una presa sin defensa.
Esos feos titanes siempre van a darnos un mordisco, y entonces tenemos una muerte sin sentido.
Cuando ganamos contra los titanes por primera vez, cuando sellamos la muralla del distrito de Trost con una roca, pudimos lograrlo gracias al poder de Eren – el poder de un titán.
Los débiles mueren rápidamente. No importa cuánto poder usen.
Eventualmente toda la humanidad, cada persona terminará en el apestoso estómago de un titán, y mientras experimentamos la peor sensación que haya, quizás acabarán nuestras miserables vidas.
Me di cuenta hace unos cuantos años. El hedor de las alcantarillas llena el interior de estas murallas. Ha sido así por más de 100 años. Así es como están las cosas.
Porque he tenido que respirar este aire fétido desde que nací, porque no tuve más opción que vivir arrastrándome entre pilas de basura, pensé que era normal.
Pero cuando salí fuera de las murallas por primera vez, me di cuenta de lo poco que sabía sobre todo. Me impactó, cuánto lo odiaba.
El mundo fuera de las murallas era como el infierno con los titanes vagando por ahí, pero el aire que respiré allí era completamente diferente al del interior de las murallas.
Me di cuenta de que “allí afuera” es la libertad.
La libertad es algo que de ninguna manera puede ser obtenido entre las murallas.
Así que tomé una decisión. Continuaré matando a todos los titanes.
Si quieres enfrentarte a los titanes, la información nunca basta. Así que para sobrevivir, aprendí cómo vivir.
Actuar rápidamente y tomar decisiones siempre asumiendo lo peor es un esfuerzo necesario.
Un momento de duda, dejándote llevar por las emociones, y no serás más que carnada para titanes.
Si no quieres morir, deberás tener eso siempre en mente.
Y las pequeñas decisiones se acumularán.
Esta es la forma de vivir que he aprendido.
No arriesgar nada, no hacer sacrificios- semejante discusión no existe.
Incluso si existiera, sería una invención.
Hasta ahora, he perdido numerosos subordinados.
Si mi elección fue la correcta en esos momentos, no lo sé. Siempre ha sido así.
Incluso si creo en mi propio poder, incluso si creo en mis camaradas en quienes confío plenamente, ninguno de nosotros sabrá el desenlace.
Luego de eso, todo lo que quede es la realidad.
En ese caso, ¿qué más puedo hacer aparte de un esfuerzo desesperado?
¿Qué más puedo hacer aparte de continuar obstinadamente?
Si tengo tiempo de pensar en el pasado, en el si hubiera tomado una elección distinta en ese entonces, mataré tantos titanes como sea posible con mi poder.
En ese instante, en ese momento, un súbito y ridículamente fuerte poder hierve desde mis entrañas, y entonces sé lo que tengo que hacer.
Cuando llega ese momento, ya no puedo regresar a mi antiguo yo.
Con estas manos manchadas de sangre, acepto a mi nuevo yo, me endurezco y sólo hago lo necesario.
¿Estaba en lo correcto? ¿O cometí un error? Ese es el tipo de cosa que nadie sabe, así que no vale la pena preocuparse.
Todo lo que puedes hacer es mantener la boca cerrada y tomar una decisión sin remordimientos.
No entender cosas de este mundo es una verdad para todos.
Así que escogí al hombre en el que quiero poner mi fe.
Erwin también es así. Nadie sabe qué está pensando en realidad.
Pero confío en su juicio.
Podrá estar causando el peor de los escenarios, pero él no le teme a eso, es capaz de decidir algo. Ese es el tipo de hombre que es.
Es por eso que decidí seguirlo. Y decidí luchar.
Para poder luchar contra este mundo de mierda, con esta mano tomaré la libertad de ir más allá de las murallas por primera vez.
He decidido por mí mismo.
Incluso si soy guiado al infierno, no siento remordimientos.
Ni un poco.
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lareinadelplata · 7 years
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Pelis: Wakolda, Blade Runner, Ex Machina, Y tu mamá también ah esa trampa porque ya sé que te gusta
Wakolda
never seen | want to see | the worst | bad | whatever | not my thing | good | great | favorite | masterpiece
nunca la sentí nombrar?? pero googleándola sí la juno será que escuché al respecto???
Blade Runner
never seen | want to see | the worst | bad | whatever | not my thing | good | great | favorite | masterpiece
es difícil porque la vi y me gustó mucho pero al mismo tiempo tiene muchas cosas que me generan mucho odio y el tipo de gente al que en general le gusta esta película No Me Agrada pero también es una de las películas preferidas de una de mis personas preferidas y al mismo tiempo Esa Estética no sé tiene muchas cosas que me encantaron y cosas que me parecieron inmundas it’s an amazing movie and i enjoyed it and will probably watch it again but it also made me angry.
Ex Machina
never seen | want to see | the worst | bad | whatever | not my thing | good | great | favorite | masterpiece
siempre veo gifs acá me re tienta pero soy muy fiaca para mirar cosas, primero me tengo que poner las pilas para bajarla y como diez años más tarde me pongo las pilas para mirar lsdkjfskldjl
Y tu mamá también
never seen | want to see | the worst | bad | whatever | not my thing | good | great | favorite | masterpiece
UNA OBRA DE ARTE QUÉ PELÍCULA DEL BIEN CÓMO LA AMO ok ahora en serio tiene sus... cosas tipo más objetivamente it’s Good. pero le tengo un amor tan pero tan profundo por tantas cosas diferentes que nada. magia. cómo amo esa película
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Preguntas por chat.
@saiver22
Hola que tal
Puedo contarte algo aunque ya haya pedido la opinión de mis mejores amig@s
Me ah gustado tu sinceridad y consejos
Hace unos meses lo unico que estamos haciendo es pelear ,y reconciliarnos y no solo eso sino... nuevos pensamientos q surgieron de el , como querer vivir separados ..no querer empezar a ahorrar para una casita juntos ..(cosa q nunca significó querer amarrarlo ) ,otra cosa fue que si bien ahora lo entiendo ,fue que pongo todo en sus hombros (cosa que no es poco cuando una anda tan sola) ,mi timidez para hacer amistades ,mi falta de actividades , ..es muy triste dar la razon ahora que ya habian pasado las ultimas chances (aunque en esas las entendi cuando me lo dijo y yo no lo veia) . Reaccione violentamente al tirar la notebok en una ocasion y en otra revolear un mouse y mi celular (obviamente q jamas con intencion de dañarlo sino de descargarme.). Una no recuerdo porq fue (seguramente celos de su amiga), al igual q la otra ,en la que despues de haber estado un poco enojada porq olvido nuestro cumple mes y senti que no le importo tanto como cuando estabamos lejos , osea y nada me enoje unos dias sin saludar con besos y solo limitarme a hablar algo seria , un par de dias antes habia tirado el comentario de que queria ir a ver una pelicula y no respondo por ...colgada o como diciendo bueno ya la veremos , y al no decir nada (no por enojada sino porq no parecia pregunta calculo) , dice : así sea solo la voy a ver" ,y digo bueno como quieras,y a los dos dias le digo si queria reinvindicar lo q no festejamos el mes y cae un miercoles y yo despertadome de la siesta no queria arreglarme a las apuradas porq ya era la hora q practicamente estaba saliendo y a lo q respondo mejor mañana y me dice: mañana no puedo y digo ok . Al rato cuando llega a casa le pregunto porq no me dijo el porq no podia el jueves y me dice q iba a ir al cine y como q le tengo q ir sacando las respuestas y no sale de él, le pregunto si era solo y me dice con Gerli ..y a lo q respondo algo ofendida : " ah mira vos ", y en el silenciio me empieza a venir un llanto de celos y bronca porque me sentí en segundo lugar una vez más y sentí que era una actividad que no es que sea necesario ir en pareja, sino que se puede ir de amigos pero sí sentí que es con ella la que es su amiga y que no fui yo la primera opción siendo que no me preguntó formalmente si quería o no o mínimamente invitarme también después de haberle preguntado con quién iba, cosas de querer cuidar que no me ponga mal o celosa, siendo que sí planea actividades a solas con ella(despues hablando supuestamente nunca fue a solas esas actividades) ,no me van a venir los celos o sea yo no la conozco No sé cómo és ella. Es alguien con quien el va al gimnasio en las mañanas y trabajan juntos casi todo el día y y salen a juntadas y esperan hablar ahí tranquilamente y tomar no siempre son juntadas de trabajo, sino que son entre amigos y bueno tampoco digo nada me ofende un poco pero no digo nada ,Creo que eso fue lo que fuí juntando que explotó en ese ratito y revolea un mouse lo rompí era lo primero que tenía a mano (que quería romper sin lastimar a nadie obviamente ) enseguida revolee mi celular para la pared justo él estaba en la cama le dije Descargandome :" porque yo soy la que tiene que sacar turno (Por así decirlo) ,para salir con vos porque no me preguntaste a mí porque no me invitas Porque yo fui la que la que estuvo cinco años y medio a distancia yo fui ,cualquiera te hubiese gorreado , la q estuvo hasta tardes y madrugadas escuchando cada cosa,la q se moria porq lleguen los veranos para verte unos dias y recargar pilas para el resto del año y asi mutuamente ,la distancia me puso muy triste y unas veces hasta quise terminar y por tu pedido seguimos porq pemse que era de verdad y q podia arrepentirme. . Al medio dia del jueves me dice q no iba a ir al cine. A lo que respondo Okay y nada más ,no me quise quedar "tranquila" Por así decirlo porque no me gustan las personas manipuladoras en ningún sentido sólo quise Descargarme , ese dia llegó con facturas cosa que me sorprendió porque no esperaba un detalle,sino q esté serio y dispuesto a terminar, o sea la charla iba hacer para dejar las cosas más en claro yo sentía que ya me había ido a la mierda pero al menos me había descargado y había dicho Lo que no sé si se acordaba o no de lo que hice por nosotros, y nada.. hablamos de que quien tenía que cambiar qué Y si estaba dispuesto a hacerlo y ahí empecé a admitir que estoy celosa y explicar qué es lo que no me hubiese molestado tanto si Simplemente no hubiese ido a llorar c9n ella, o algo por el estilo,...... cómo pedirle de hacer cosas con ella a todo lo que yo rechace o no pueda o no me guste, vas a ir corriendo a pedirle a ella ? , y nada soy re celosa lo repito pero no con toodas lo vuelvo a repetir ,es ella, todo empieza como amigos nosotros empezamos así y no nos importó nada y seguimos a pesar de todos los problemas que nos trajo, nosé me siento como viendo todo el proceso en el que estoy quedando de lado Y eso es lo que me está doliendo si bien no hay razones concretas puse otros ejemplo como : que pasa si te invita a su casa solamente a vos a tomar algo a solas, yo me tengo que quedar acá no más tranquila sín saber qué pueden pasar cosas?, porque no la conozco y entonces qué sé yo... para mí no somos objeto que le pertenecemos a nadie, pero tiene actitudes que sí molestan Sé que soy una exagerada Pero intento contar todo Con lujo de detalles para no parecer víctima porque un poco sí esta todo en mi cabeza, exagerando las cosas bueno que así son los celos pero no es con todo el mundo ,es cierta persona que parece que es su único amigo y no busca a alguien más para esas cosas .
@nuncarueguesporamor-blog ❤
Me ha sido un poco confuso leer el mensaje, ibas un poco acelerada 🚗
Entiendo o he entendido que tras estar 5 años de novios solo viéndoos los findes , ahora ya estáis juntos y parece que han comenzado los problemas.
No es lo mismo verse los findes apasionadamente que convivir juntos.
Lo primero que hay que entender es que nadie es perfecto y antes de vivir juntos ambos ya sabíais los gustos y hobies de cada uno, esto significa que si algo no te gusta, tengas que ir o hacerlo siempre porque a él le guste, pero no puedes prohibirle, simplemente intentar interesarse ambos por los gustos del otro y compartir.
Si ya veíais que erais incompatibles ha sido una verdadera locura estar juntos, porque luego pasa esto y no es porque la persona cambie, ambos ya erais así, el problema es que uno espera que sea el otro quien cambie, así que no es cuestión de cambiar si no de aceptarse cada cual como es.
Si se le ha ocurrido la genial idea de vivir separados !cuidado! ,esto es un aviso de que quiere alejarse, quizás se está agobiando, noto que eres muy impulsiva, intensa, además de celosa y esto son malas combinaciones.
Las discusiones son normales, pero NO dando gritos y lanzando objetos, hay que ser más civilizados y educados, ante todo respeto y sentarse tranquilamente a hablar las cosas.
Da la sensación de que buscas un control sobre la relación y te enoja mucho el no conseguirlo ya que él sigue contigo o sin ti disfrutando de la vida, te aconsejo que no estés contra él y te unas a su equipo, no seas tan quisquillosa, involúcrate en sus cosas y su ambiente y no te quedes en casa esperando con la zapatilla en la mano.
Has de relajar ese carácter, si quieres cariño has de dar cariño, si solo ofreces relámpagos solo recogerás truenos.
También te recalco algo, no hay nada más sucio en una relación que echar las cosas en cara, eso no se hace nunca ni permitir que el otro lo haga, una relación es un 50% ,ambos debéis de unir fuerzas para seguir adelante, nadie a de tirar del otro.
Amiga, según trates serás tratada, vete a tomar una copa con él y que te presente a su amiga, comienza a participar en su vida e invítalo a participar en la tuya y basta de discusiones, esto solo os alejará más ..la relación se comienza a enfriar por su parte así que vas a tener que poner de tu parte y modificar tu actitud.
Según lo que me has contado o yo he entendido, no veo que él haya echo nada fuera de lo normal, solo quiere vivir ..vive con él amiga 😘
psdt: tus amigas evidentemente te van a dar la razón a ti, porque saben lo que quieres oír, yo soy alguien neutra a vosotros.
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iurisfacilblog · 4 years
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Estamos muy acostumbrados/as a ver fotos en Instagram y otras redes de apuntes perfectos, habitaciones perfectas y casas más que perfectas que nos llenan la cabeza de ideas. Muchas de estas fotos nos motivan para “el cambio” y creación de nuestro lugar de trabajo o estudio adecuado. Pero lo más normal es que sea difícil mantener en perfecto orden ese lugar. En esta entrada, trataremos distintas ideas de organización de tu escritorio o lugar de estudio/trabajo, para poder hacer de una forma simple que sean agradables y motivadores.
Cada persona es un mundo y es probable que en algunas cosas coincidas totalmente y te funcionen, que en otras coincidas parcialmente y que en otras digas: “queee vaaa”. Como lo más adecuado es siempre hablar desde la experiencia propia, no voy a poneros ejemplos de psicólogos, de otras personas o de cuentas que hablen sobre el orden y demás, sino que, como otras veces, os voy a hablar de mi forma de ordenar o colocar el escritorio, de mi forma de ordenar apuntes, de colocar las cosas…etc. ¡Vamos allá!
El lugar de estudio
Opinión personal
He vivido ya en varios pisos de estudiantes y puedo decir que…”como en casa en ningún sitio”. Esa es la primera idea que quiero compartir con vosotros/as, porque la primera vez que te mudas (en este caso siendo a piso compartido) contiene una variedad de sensaciones distintas positivas como: excitación, alegría, independencia personal…pero otras sensaciones totalmente distintas, sean negativas o neutrales, como: “morriña”, (una sensación tan utilizada por los/as gallegos/as para definir esa pena por no estar en casa, ese recuerdo de la tierra de la que procedes, el recuerdo de lo propio…y con muchos significados más sensoriales que explicables). También puedes sentir con el paso de los días algo de incomodidad, miedo a lo desconocido, rechazo al cambio. Y si tienes que convivir con desconocidos/as…ya ni te cuento.
Photo by Curtis Adams on Pexels.com
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Pero bueno, como iba diciendo…”como en casa en ningún sitio”, porque ahí es dónde se encuentra tu zona de confort y dónde tienes todas tus cosas, tu orden o desorden y tu vida en general. En este caso, como ahora en casa no estoy, pues no hablaré sobre mi orden allí, sino sobre cómo tengo ordenada la habitación en el piso de estudiantes.
En primer lugar, estudiar en la biblioteca o en lugares compartidos no me resulta cómodo por estos motivos: siempre hay alguien que hace ruido, no puedes estar en pijama, no puedes repasar en voz alta, no puedes caminar dando vueltas mientras que estudias… es decir, no puedes hacer todo aquello que te define como estudiante con sus hábitos y manías. Pero para gustos colores y está claro que hay un número muy elevado de personas que prefieren la biblioteca mil veces a otras opciones.
Siempre estudio en mi habitación porque:
Es un lugar tranquilo,
Puedo estudiar con ropa extra-cómoda.
Puedo tener la luz que quiero.
Puedo comer lo que quiera y cuando quiera.
Puedo desplegar todos mis subrayadores, folios, pos-its, carpetas, libros…etc ocupando el espacio que quiera.
Puedo estudiar con o sin tapones dependiendo del día y del ruido.
Puedo regular la temperatura de la estancia.
Puedo ventilar la habitación cuando quiero, poner velas o incienso…
Tengo mi sitio fijo y no tengo por qué preocuparme de irme y volver cuando quiera.
Puedo despejarme escuchando música, echando una siesta, viendo una serie…
En definitiva, porque me da más libertad y porque personalmente me gusta más. Y, a parte, no me desconcentro cada vez que alguien se sienta o se levanta de la silla o cada vez que alguien se toma selfies, o se pone a hablar…etc.
Si quieres centrarte en hábitos de estudio o manías de estudiantes tengo las entradas perfectas para ti: Hábitos de estudio: pack 1 de esenciales para aprobar o Hábitos de los estudiantes antes de un examen, también disponible en el blog: Hábitos de estudio: pequeñas manías de los estudiantes
Cómo debería ser el lugar de estudio
Dicho todo esto, y ahora siendo más serios/as, tu lugar de estudio debería ser un lugar silencioso, cómodo, relajante, con la luz adecuada para la vista, con una temperatura normal (las temperaturas extremas nos hacen reaccionar estando incómodos/as y nos desconcentran). Debería ser un lugar ordenado, con espacio suficiente.
Seria interesante que si eres una persona nerviosa o curiosa tengas incienso, velas o algo que te relaje para crear un ambiente placentero. También es muy importante pero que MUY IMPORTANTE tener la estancia ventilada. Cuando estamos en un ambiente cargado se hace más complicado centrarse. Estaría bien ventilar la habitación cada vez que descanses del estudio (eso sin contar las épocas de verano). 
Todo lo que pueda motivar a nuestro cerebro debería ser bienvenido tanto al hábito de estudio como a la estancia.
El orden de los muebles
El escritorio:
Es importante que esté orientado de una forma adecuada para la correcta visión de los documentos, libros o de tu ordenador. Aprovechar la luz natural al máximo tiene efectos muy positivos no solo físicamente por el descanso de la vista, sino también psicológicamente, ya que te motivará y te proporcionará energía. (Puede que no me creas al leer esto, pero la gente que me rodea coincide conmigo en que los lugares en los que hay poca luz natural suelen tener efectos negativos en el humor a largo plazo. Un ejemplo lo puedo dar esto días de noviembre que lleva lloviendo muchos días en Galicia y que llevo sin ver el sol pues…ya no me acuerdo, al menos de la última vez que el cielo era completamente azul….¡¡qué dramático!!, pero es cierto.)
Para aprovechar la luz es muy importante que el escritorio esté en una zona en la que la luz natural entre por el lado opuesto a la mano con la que trabajamos. Por ejemplo, siendo yo diestra, mi escritorio tiene la ventana situada a la izquierda. Esto…¿por qué? pues para que la mano al escribir no haga sombra y podamos ver bien en todo momento lo que escribimos.
En cuanto a la luz artificial, pues lo mismo. Igual teniendo la luz general de la habitación en el techo la consideras suficiente, pero sería interesante iluminar más tu escritorio teniendo un flexo o lámpara situados de la misma forma que la ventana a ser posible. En el tipo de luz, pues cada persona es un mundo. Conozco a gente que estudia en la cocina con luz más “fría” y otra gente que prefiere luz “cálida” que es la más común en las habitaciones.
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Lo que rodea al escritorio
Silla
Que la silla sea muy cómoda es importante por las horas que vamos a estar estudiando. En este suele haber una contradicción entre las sillas de casa y las sillas de los colegios y universidades. A mí las sillas de la universidad me “matan”, pero s�� que hay varios motivos para que sean de un tipo u otro. Se supone que las sillas de los colegios son duras para no perjudicar la formación de los huesos de los/as niños/as por la etapa de crecimiento, algo que viene siendo la “ergonomía” y que puedes leer con calma por ejemplo en este enlace:
https://silleriaaragonesa.com ergonomia-mobiliario-escolar
Pero no obviando lo anterior, la silla debe ser cómoda y no solo cómoda, sino adecuada. A poder ser no estudies en una silla de cocina, en un taburete, en un sofá o tirado/a en cama. Todo por el bien de tu espalda, porque sufrir de dolor de cervicales o espalda es terrible, y muchas personas terminan su etapa de estudiantes con una cosita conocida coloquialmente como “chepa” y que viene siendo una joroba más o menos ligera.
Lo que yo uso es la mítica silla de escritorio con ruedas y respaldo ajustable que es algo mullidita pero no lo suficientemente acolchada como para dormirme. Mantiene la espalda recta pero con una ligera curva en la zona baja en el respaldo para la acomodación y descanso de la espalda. También es práctico utilizar un cojín pequeño para poner en la zona de la curva baja de la espalda, notarás como se relaja y no te tensa tanto.  
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Muebles alrededor
Sería interesante no sobrecargar la habitación con una pila de libros o muebles en exceso. Que sea un ambiente sin exceso de elementos visuales para no sentirnos atrapados/as.
Si eres de esas personas que son muy minimalistas, pues genial. Si no lo eres y te encanta tener miles de cosas por todas partes, pues también está bien, aunque es mejor que al menos el escritorio lo tengas con lo mínimo esencial. Ejemplo de imagen 1 y 2.
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A mi parecer, cuantas más cosas en frente mientras estudias, más distracciones tendrás y más se desviará tu atención de los folios.
  Aun así, teniendo el mobiliario perfecto es imposible no cansarse y sobrecargarse. Es por eso que te recomiendo:
Ejercicios para descansar
En esta entrada puedes ver ejercicios, estiramientos o ideas para descansar esos músculos tensos tras largas horas de estudio:
Estudiar mejor y sufrir menos: deporte y ejercicios
  La estancia perfecta para estudiar, parte I Estamos muy acostumbrados/as a ver fotos en Instagram y otras redes de apuntes perfectos, habitaciones perfectas y casas más que perfectas que nos llenan la cabeza de ideas.
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aura-r-a · 5 years
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El cordero
Hay sangre en mis manos, reviso que no me duela algo: nada. Esta sangre no es mía. Mi corazón late muy rápido por no comprender lo que está sucediendo, siento que quiere salir de mi pecho. “Mis libros no están en mi repisa, esto no puede significar nada bueno” pienso en voz alta. El levantarme tan rápido del suelo causa que me maree, respiro profundamente hasta que se me pasa, miro hacia abajo y mi vestido blanco está manchado salpicones de sangre, mi instinto es correr para ver si se encuentra alguien que me pueda explicar que es lo está sucediendo. De repente siento un ardor en el brazo, reviso y es un tipo de cicatriz, parecen unas letras, pero no puedo comprender lo que dicen. Recuerdo lo último que escuché y sé que tarde o temprano van a venir por mí, tengo que salir como pueda de este lugar.
“Inés” escucho esa voz tan peculiar, una voz que no podría confundirla, aunque quisiera “¿Qué te sucede?”. Volteo a verla, me mira con esos ojos verdes grandes que tanto me llaman, “No te preocupes, Leo. Solo estaba pensando en unos pendientes”. ¿Cómo le puedo explicar a la chica que me atrae que llevo días con esos sueños tan extraños? Son las 3:55 p. m, cinco minutos y termino estos borradores que me pidieron. Los logro terminar a tiempo y me voy a casa, estoy exhausta por el trabajo, estar sentada 8 horas todos los días no es lo que me gustaría estar haciendo todos los días, pero de algo hay que trabajar. “Ya llegué”, le aviso a mi hermano mientras asiento las llaves en la mesa, no hay respuesta por su parte, como de costumbre. Entro a mi cuarto y pongo música para relajarme un poco, aunque ni sé para qué me acomodo si en 30 minutos tengo que salir otra vez, no es fácil tener dos trabajos y un hermano que mantener.
Esa sensación de caminar por la ciudad de noche es de mis cosas favoritas, no me gusta recorrer el mismo camino todos los días, hay tantas posibilidades de hacer las cosas ¿por qué hacerlas de la misma manera? La rutina me abruma, me hace sentir atrapada por algo que me controla. Llego a mi destino. Mi trabajo es simple, soy recepcionista en un hotel de mala muerte, lo único que tengo que hacer es atender a los que lleguen, lo común: dar información, asignar habitación, esperar a que algo interesante suceda. Me cambio al uniforme de color ámbar que hace resaltar mi piel oscura, me acomodo mi cabello rizado en una trenza y salgo a atender a los huéspedes. No me quejo del hotel, tiene una cierta esencia gótica que te atrapa, por lo menos hace más disfrutable las horas que paso aquí. Todos los huéspedes que llegan tienen un aire de misterio, para pasar el tiempo me imagino a lo que se dedican en la vida: asesinos seriales, traficantes, todo tipo de oficio oscuro que se me ocurra, así es como me distraigo todos los días. “Te he estado observando, Inés” regreso al presente, delante del mostrador hay un hombre alto, delgado, que aparenta estar en sus 40, semblante serio y vestimenta de tonalidades oscuras, logro ver sus ojos y son de color azul, cautivadores. “¿Disculpe?” le respondo extrañada a lo que acabo de oír, “Pregunté si tienen mi reservación de las diez” me contesta con una voz grave y lenta. Reviso las reservaciones, hay una a las diez a nombre de Nicolás. Le doy la llave de la habitación 21 y él se va.
“Te digo que lleva días quedándose en la misma habitación, Diego. Hay algo extraño en él”. Todos los días es lo mismo con Nicolás, ya hasta lo llamo por su nombre, se sienta en el lobby por horas leyendo un libro extraño con algunos símbolos escritos, más bien finge leer porque lo he atrapado mirándome fijamente, no es una mirada acosadora, más bien una mirada de fascinación. Justo tengo un libro parecido al de él en la repisa de mi cuarto, sé que pertenecía a mi tía, pero nunca he sabido que significa y es lo único que me dejó. Termino de contarle a Diego todo lo extraño que me ha pasado con relación a Nicolás. Llevo un año trabajando en este hotel y desde que entré me ha gustado Diego, siempre me digo que es algo pasajero, todos los días me digo eso desde hace un año. Reviso el reloj, son las 2:00 a. m, hora de irme, poder dormir solamente 5 horas para ir al otro trabajo a las 8:00 a. m, ya es algo normal para mí. Estoy acostumbrada a caminar sola a altas horas de la madrugada, hasta podría decirse que es un tipo de relajante, solo son 20 minutos del hotel a mi departamento. Pienso en que ruta tomaré hoy para irme, elijo la más larga, hoy no estoy tan cansada. Estoy caminando mientras pienso en ese sueño tan raro que tuve hace unos días, me alegro que se haya ido. Sigo caminando y siento una presencia extraña detrás de mí, como cuando sientes que alguien está detrás de ti persiguiéndote, volteo, no hay nadie. Tal vez sean solo los nervios. Continúo caminando, doy vuelta a la derecha y de reojo me parece ver una persona vestida de blanco, no logro distinguir de quien se trata, apresuro el paso, lo único que quiero es llegar a casa. Y de repente ¡bam! Una luz brillante me despierta, abro los ojos lentamente, me duele la cabeza, apenas me levanto y me doy cuenta que me encuentro en mi cuarto ¿cómo es que llegué aquí? Me convenzo a mí misma que estaba tan cansada que no recuerdo en qué momento llegué. Me siento en la cama y miro el reloj las 8:00 a. m, se supone que ya debería estar en el trabajo, bajo de un brinco de la cama y me empiezo a alistar.
Mi jefe me reprocha que vuelvo a llegar tarde, pero la verdad es que solo sigo en este trabajo por Leo, Leonor se llama. Ella es mi única razón para seguir aguantando todo esto, ojalá y pudiera decirle esto de frente. Me encanta su forma de vestir, su estilo es bohemio, a veces hasta llego a pensar que es una ninfa por lo etérea que se ve. Somos todo lo contrario. Mi ropa es oscura, eso sí, la moda es lo que más me gusta y a lo único que me dedicaría si pudiera. Me voy enajenando en mis pensamientos, me pierdo en ella y escucho una voz que dice mi nombre, la escucho muy tenue, es una voz aterciopelada de mujer, no había escuchado una igual, mi vista se empieza a nublar y siento como alguien me empieza a sacudir los hombros. Cierro los ojos y veo unos ojos grises que me miran, me sacuden más fuerte de los hombros hasta que reaccionó, es Leo con la cara preocupada “pensé que te desmayarías, Inés”. Le digo que no se preocupe, solamente es el cansancio que me tiene así, me mira con cara de incredulidad y se va. No comprendo nada de lo que acaba de suceder y regreso al trabajo pendiente, son pilas de hojas que debo revisar una por una y todas son para hoy, estoy harta de hacer esto todos los días, pero lo acepto. Total, todavía me faltan muchas horas por trabajar y puedo soportarlas viendo a Leo.
Agarro la pluma y empiezo a dibujar lo que se me ocurra, eso es lo que hago cuando estoy aburrida y este es el caso, hoy ha sido un día bastante tranquilo, demasiado para lo que estoy acostumbrada, debe ser porque es entre semana. Alguien me toca el hombro, volteo y veo esa sonrisa que me trae loca desde hace un año “¿Qué pasó, Diego?” trato de disimular lo sonrojada que me he puesto, “un huésped se está quejando de la habitación 21” me responde extrañado. Es en ese momento donde reparo en que hoy no he visto a Nicolás, reviso el sistema de habitaciones y avisa que él sigue en esa habitación. Suena el teléfono de la recepción, al otro lado de la línea hay una mujer enojada quejándose que desde hace horas lleva escuchando golpes en la habitación 21, como si estuviera dando martillazos contra la pared y no la dejo dormir, “lo lamento mucho, iré en seguida a verlo. Buenas noches” y cuelgo el teléfono. Solo estamos Diego y yo disponibles para ir a ver qué es lo que está sucediendo, pero justo llego un huésped pidiendo informes, así que soy yo la que tiene que ir a ver qué es lo que está sucediendo en la habitación 21. Toco la puerta y espero respuesta, pasan dos minutos y no hay respuesta, toco la puerta un poco más fuerte y escucho unos pasos, por fin me ha escuchado Nicolás, pienso. Espero a que abra la puerta, nada aún. Ya estoy cansada, solo voy a tocar una vez más, sino me contesta me voy, decidida vuelvo a tocar la puerta de la habitación y en el primer golpe se abre la puerta sola, sin poner la más mínima resistencia al tocarla. Con curiosidad asomo mi cabeza por la rendija de la puerta y veo una luz tenue, pero no hay nada que indique movimiento de alguien que se encuentre adentro “¿Señor Nicolás? Soy Inés, de recepción, me han llamado a la recepción por la cuestión de…”, antes de que termine la frase siento como si alguien me jalara de los hombros hacia atrás y caigo sentada en el pasillo, la puerta se azota en mi cara y no puedo comprender nada de lo que acaba de pasar.
Corro, corro lo más rápido que puedo y aun así siento que no avanzo, me están persiguiendo y ya están muy cerca. Doblo a la izquierda en un callejón oscuro, tan oscuro que ni siquiera puedo ver mis manos delante de mi cara, ya los perdí, aquí no podrán hacerme daño, trato de convencerme a mí misma. Siento una respiración en el cuello, “No puedes escapar del destino” me dicen en un susurro en la oreja. Tengo la respiración agitada, me siento en la cama y trato de calmarme, miro el reloj son las 5:40 a. m, el único día que me puedo levantar tarde es el que más temprano me despierto. Ya no puedo recuperar el sueño así que decido salir a la sala y preparar café, paso tan poco tiempo en el departamento que hasta se me olvida como es. Las cortinas blancas van dejando entrever tenues rayos de sol, prendo la cafetera y me siento en el sofá mientras que el lugar se va a llenando a ese delicioso aroma a café. Hoy se siente como un día diferente, hay algo extraño, lo puedo sentir. No digo que sé algo malo, pero sé que pasará algo. Bajo las escaleras del departamento, quiero caminar mientras observo el amanecer, la ciudad está tan tranquila, ojalá y fuera así siempre.
Respondo las llamadas de los huéspedes, especialmente quejas ¿qué les puedo decir? Es un hotel de mala muerte, pero tiene lo suyo. No recuerdo un día tan movido como este, gente va y viene, tal vez sea por festival anual de arte que se expone en el centro de la ciudad, leí en algún lado que la temática sería sobre la magia durante el paso de los años, me encantaría poder verlo. Después de mucho tiempo vuelvo a ver Nicolás, se ha dejado crecer la barba, debo aceptar que le queda bien. Está sentado en su sillón favorito, es un sillón individual de terciopelo rojo con detalle en dorado tiene el libro en la mano, pero no lo ha abierto, mueve levemente los labios como si murmura algo para sí mismo. Yo sigo atendiendo a los huéspedes que van llegando, gente extrajera y gente del país, llegan de todos lados. Diego y yo estamos atendiendo en la recepción, hay una fila larga esperando a ser atendidos, hacemos lo mejor posible por atender a cada uno de ellos. De repente cesa la gente y Diego está atendiendo a un señor que pregunta los precios de las habitaciones, Nicolás se levanta del sillón de terciopelo y camina con paso decidido hacia la recepción, para ser exactos camina decidido hacia a mí, no tengo como escaparme. “Hola Inés, buenas noches.” Me saluda él cordialmente “Tengo unos problemas con mi habitación, quisiera que fueran a revisarlo, es urgente”, le contesto que con mucho gusto alguien irá en seguida, pero todo el personal está ocupado y la única disponible en este momento soy yo “Creo que tendrás que ser tú quien vaya a revisarlo, lamento las molestias” me dice Nicolás con un aire de complacencia en su rostro.
Estoy frente la puerta de la habitación 21, otra vez. Nicolás abre la puerta y entró al cuarto, prende la luz y observo alrededor, todo está ordenado, demasiado para ser verdad, no hay ni una sola cosa tirada y no hay a la vista ninguna de sus pertenencias personales, como si estos tres meses que lleva no hubiera dormido aquí. “Te decía, Inés, por aquí he estado escuchando unos sonidos. Espero que no sean ratones” suelta una risita burlona y regresa su semblante serio. Reviso donde me indica y no encuentro nada de lo que me dijo. “Debo estar escuchando mal, discúlpame por haber hecho perder tu tiempo.” Le contesto que no se preocupe y me paso a retirar, ya estoy por girar la manija de la puerta, siento una punzada en mi cabeza y me desplomo en el suelo.
“Ese vestido blanco la hace ver hermosa, ¿no te había dicho ya que es la más hermosa? No pudimos haber elegido a alguien mejor” logro distinguir que lo dice la voz de Nicolás. Por más que quiero no puedo abrir los ojos. Siento un chorro caliente en mis manos, se siente como líquido espeso, me quiero mover, pero no puedo, estoy acostada bocarriba completamente inmóvil sin ninguna posibilidad de moverme. Escucho varias voces, pero no logro distinguir cuanta gente está hablando, solo escucho barullo. De la nada se escucha silencio, ya no hay nadie conmigo. Logro ir moviendo las manos, puedo moverme otra vez, voy recuperando movilidad y me recuesto de lado para levantarme poco a poco, me siento cansada.  Hay sangre en mis manos, reviso que no me duela algo: nada. Esta sangre no es mía.
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perroprensa · 6 years
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Cronobiología: por qué tu vida corre más peligro después del mediodía
IRENE HDEZ. VELASCO (ElMundo.es)
No da igual a qué hora vamos al médico, si hacemos un examen o somos juzgados por la mañana o por la tarde. Ni siquiera es irrelevante cuando escribimos un tuit
Miles de estudios avalan la importancia de elegir el momento preciso para cada decisión. En su nuevo libro, el pensador Daniel H. Pink reivindica la relevancia del cuándo
Cronoterapia: por qué la hora a la que te medicas puede ser más importante que la dosis
Sólo si es absolutamente inevitable, si no queda otro remedio, si se trata de una auténtica emergencia, de un asunto prácticamente de vida o muerte ante el cual no hay alternativa posible, Daniel H. Pink pondrá el pie en un hospital o acudirá a una consulta médica por la tarde.
Pero si puede evitarlo, por nada del mundo este pensador estadounidense de 54 años de edad, autor de varios libros y, entre otras muchas cosas, redactor jefe de los discursos del ex vicepresidente estadounidense Al Gore, se someterá a una prueba médica, a un control sanitario y muchísimo menos a una operación quirúrgica a partir del mediodía.
«Ni hablar. Si uno puede elegir en qué momento acude a un hospital o la hora en la que va a ver a un doctor, debe absolutamente evitar las tardes. Yo desde luego las evito completamente. Yo y toda mi familia. La semana que viene, por ejemplo, tengo una cita con un doctor, y me he encargado de programarla para las nueve y cuarto de la mañana. Y hace un par de meses a mi hija pequeña le tuvieron que sacar las muelas del juicio en una intervención que requería anestesia. Le dieron cita para las 19.30 horas de la tarde pero absolutamente imposible. De ninguna de las maneras, iba yo a permitir que anestesiaran a mi hija por la tarde. No, jamás, imposible. Cambiamos la cita».
Pink tiene un poderosísimo motivo para eludir los centros sanitarios en cuanto la mañana toca a su fin: quiere seguir viviendo. Según él, a medida que el día avanza y las horas transcurren, entrar en un hospital se vuelve un acto peligroso que entraña graves riesgos para la salud.
Y pone ejemplos. Por las tardes hay tres veces más posibilidades de que un paciente reciba una dosis de anestesia potencialmente letal. Por las tardes las personas que son operadas tienen bastantes más posibilidades de morir en los 40 días siguientes a la intervención que quienes pasaron por el quirófano por la mañana. Por las tardes es 26 veces más probable que los médicos prescriban antibióticos innecesarios (facilitando así el crecimiento de virus resistentes a los fármacos). Por las tardes el personal sanitario es diez veces más propenso a no lavarse las manos que sus colegas de las mañanas. Por las tardes las colonoscopias que se realizan detectan directamente la mitad de pólipos (pequeños tumores en el colon) que las que se llevan a cabo por las mañanas.
Son algunos de los aterradores datos que Pink ofrece en ¿Cuándo? La ciencia de encontrar el momento preciso, un ensayo que ha sido un auténtico bestseller en Estados Unidos y que ahora aterriza en España de la mano de la editorial Alienta.
El libro, basado en alrededor de 700 estudios y análisis científicos relacionados con el tiempo, revela lo trascendental que puede resultar hacer las cosas en un determinado momento o en otro. Y no sólo hablamos de entrar en un hospital...
NOS TOMAMOS MUY EN SERIO LOS 'QUÉ', LOS 'QUIÉN' Y LOS 'CÓMO' PERO NO NOS TOMAMOS EN SERIO LOS 'CUÁNDO'
Daniel H. Pink, autor de '¿Cuándo? La ciencia de encontrar el momento preciso'
Comparecer ante un tribunal después del mediodía también es muy arriesgado. Un estudio que analizó en 2011 numerosas sentencias de dos tribunales en Israel que, juntos, procesan alrededor del 40% de las peticiones de libertad condicional de ese país, sacó a la luz que en las primeras horas de la jornada los jueces fallaban a favor de los presos un 65% de las veces, mientras que a última hora de la mañana esos veredictos caían prácticamente a cero...
Por no hablar de ese otro experimento, citado también en el libro de Pink, en el que unos investigadores pidieron a un grupo de personas que valoraran la culpabilidad de un acusado ficticio en un proceso penal, leyéndoles a todos exactamente los mismos hechos. Lo único que cambiaba fue que para la mitad de los jurados el acusado se llamaba Robert Garner y, para la otra mitad, Roberto García. Pues bien: mientras que por la mañana no había variaciones entre los veredictos de unos y otros, por la tarde los participantes eran mucho más propensos a declarar a García culpable y a Garner inocente.
«¿Aterrador, verdad?», concluye Pink.
La mayoría de la gente incluso es más ética por la mañana, tiende a decir menos mentiras en las primeras horas del día... Hasta tuiteando ofrecemos nuestra mejor cara por la mañana. Dos sociólogos de la Universidad de Cornell, en Estados Unidos, analizaron gracias a un potente programa informático más de 2,4 millones de tuits escritos durante dos años por usuarios de 84 países distintos, y observaron que la gente generalmente se mostraba más positiva por las mañanas, mientras que por las tardes el buen rollo se desplomaba.
Y qué decir de los exámenes. Un estudio en Dinamarca en el que se analizaron durante cuatro años los resultados de los exámenes anuales para medir el rendimiento de los estudiantes arrojó que los alumnos sacaban bastante mejores notas cuando eran evaluados por la mañana que por la tarde.
«No, no es casualidad que la mayoría de las grandes catástrofes provocadas por errores humanos (léase, por ejemplo, la tragedia de Chernobil, el accidente nuclear de Three Mile Island o el desastre de Bopal) se desataron entre la 1 y las 3 de la madrugada», asegura Juan Antonio Madrid Pérez, catedrático de Fisiología de la Universidad de Murcia y uno de los mayores expertos españoles en Cronobiología, la ciencia que estudia la organización temporal de los seres vivos y los mecanismos que los regulan. De hecho, es el director del laboratorio de Cronobiología de la Universidad de Murcia.
La pregunta es: ¿qué demonios ocurre conforme avanzan las horas?
«El poder del cerebro no es igual a lo largo del día. Nuestras capacidades mentales no son estables durante toda la jornada, cambian», aclara Pink . «Y lo que sabemos es que hay determinados momentos a lo largo del día en los que los seres humanos estamos más vigilantes, más en estado de alerta. Y esos son momentos en los que tenemos mayor capacidad de concentración, de focalizarnos en algo sin distraernos. Alrededor del 80% de nosotros somos diurnos, estamos más vigilantes durante las mañanas. Pero hay cerca de un 20% de personas que, sin embargo, son vespertinas, están más vigilantes mucho después, por la tarde. Lo que es extremadamente importante es saber qué tipo eres y qué trabajo en concreto debes hacer a una hora en concreto».
«Hay momentos en los que nuestra capacidad de razonamiento o nuestro tiempo de reacción ante asuntos que requieren una respuesta inmediata entran en declive», explica Juan Antonio Madrid, al tiempo que subraya que en España, por cuestiones de hora y por motivos culturales arraigados, el número de vespertinos es superior a la media habitual del 20% que se registra en otros países.
NO ES CASUALIDAD QUE LA MAYORÍA DE LAS GRANDES CATÁSTROFES PROVOCADAS POR ERRORES HUMANOS SE DESATARAN ENTRE LA 1 Y LAS 3 DE LA MADRUGADA
Juan Antonio Madrid (laboratorio de Cronobiología de la Universidad de Murcia)
Todos los seres vivos tenemos un reloj interior que regula de manera natural nuestros ritmos biológicos. El profesor Madrid acaba de terminar ahora un documental para la BBC en el que eso queda palmariamente demostrado: durante diez días, monitorizaron a un voluntario que permaneció aislado, sin saber qué hora era y sin poder ver la luz natural. Su propio cuerpo le indicaba cuándo se hacía de noche y debía irse a dormir con gran precisión. «Lo único es que cada día retrasaba unos 40 minutos el momento de acostarse, porque su reloj biológico era de 24 horas y 40 minutos. Pero para eso sirve entre otras cosas la luz natural: para poner en hora tu reloj biológico».
El problema es que es tan consustancial a nosotros el saber que nos regimos por un reloj biológico, lo asumimos como algo tan natural, que no le damos la más mínima importancia. «Y necesitamos tomárnoslo en serio», sentencia Pink.
«La hora del día afecta a las calificaciones de los estudiantes en el colegio, a las decisiones que toman los jurados, al modo de actuar de los médicos. Son todas cuestiones fundamentales. Yo no sé por qué es ni a qué se debe, pero el caso es que nos tomamos los qué muy en serio, nos tomamos los quién muy en serio y nos tomamos los cómo muy en serio, pero no nos tomamos en serio los cuándo. Yo no creo que los cuándo sean más importantes que las otras cuestiones, pero creo que son tan importantes como ellas».
Nuestros órganos presentan valores distintos según las horas del día. Los linfocitos, por ejemplo, se duplican en la sangre a las 2:00 de la madrugada. Durante la noche nuestro cuerpo se repara, y para ello nuestro sistema inmunológico se activa. Es por eso por lo que la eficacia de los medicamentos depende del momento en que sean administrados. «Y es por eso por lo que, como prueban los estudios, los efectos secundarios adversos de los tratamientos de quimioterapia se pueden aminorar notablemente teniendo en cuenta la hora a la que se administren», destaca el profesor Juan Antonio Madrid.
Tomar pausas reconstituyentes, sobre todo por la tarde, ayuda a cargar las pilas del reloj biológico y a amortiguar esa caída del estado vigilante que la mayoría de la gente experimenta con el pasar de las horas. Y, por supuesto, dormir bien también es fundamental para el cerebro y el cuerpo.
En ese sentido, Juan Antonio Madrid advierte con preocupación de los efectos sobre el sueño que están provocando los dispositivos electrónicos. «Esos aparatos tiene luces blancas brillantes o enriquecidas en azul que engañan al reloj biológico, le hacen creer que todavía es de día. El resultado es que cada vez estamos viendo más escolares y universitarios que no duermen lo suficiente. Y aunque los fines de semana tratan de recuperar el sueño, eso no es posible, el sueño perdido no se puede recuperar».
Y, por cierto, no traten de paliar la falta de sueño atiborrándose a café nada más levantarse. Es un error, no sirve para nada. Nada más despertar nuestro cuerpo empieza a producir cortisol, una hormona del estrés que nos activa. Y resulta que la cafeína interfiere con la producción de esa hormona, así que empezar el día con una taza de café apenas sirve para estimularnos. «Lo mejor es beber esa primera taza de café una hora o 90 minutos después de haber despertado, una vez que la producción de cortisol ha alcanzado su pico y la cafeína puede obrar sus milagros», concluye Pink.
Hasta en eso interviene el factor tiempo.
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