Tumgik
#Amor en tiempos difíciles
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¡Noticia extraordinaria en Kansas City!
Las superestrellas de los Chiefs, Patrick Mahomes y Brittany Matthews, han demostrado ser más que héroes del campo de juego al llevar alegría y esperanza a niños heridos en el hospital después de un trágico tiroteo durante el desfile de la victoria. La escena estaba lista para la celebración cuando los Chiefs desfilaban por las bulliciosas calles de Kansas City tras su épica victoria en el Super…
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voces-en-letras · 7 months
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Que difícil es soltar a alguien especial cuando nuestras visiones del futuro no coinciden.Aunque tratamos de encontrar un punto medio, parece que nuestros caminos están destinados a separarse.
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donntt · 2 years
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La vida me ha hecho entender de maneras muy tristes que yo soy la única persona que debe importarme.
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stuckwthem · 8 months
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HOLAA para lo de las canciones con los chicos del cast: gold rush de taylor swift con enzo 😭😭 siento q es muy accurate.
gold rush | enzo vogrincic
summary: tu lucha contra sus sentimientos de celos y la creciente atención hacia su amigo, temiendo perderlo en medio de la fama y las chicas. friends to not yet lovers. 3k.
tw: inseguridad, angst, consumo de alcohol
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cuando enzo se hizo famoso, no fue una gran sorpresa. siempre había sido talentoso, determinado y esforzado en todo lo que se proponía. además, cumplía todos los requisitos para convertirse en la nueva estrella de la pantalla: guapo, culto, carismático y gracioso. 
así que cuando volvió al teatro, estrenando otra obra brillante, era de esperar que se abarrotasen todas las secciones. y se llenaron, con gente y más gente, todos tras otro pedacito de enzo. mujeres, hombres, jóvenes y mayores, todos estaban deseando por más. 
para enzo no había cambiado gran cosa, aparte del leve acoso, seguía sintiéndose igual, actuando igual, teniendo los mismos mejores amigos y tomando el café en la misma cafetería sencilla, pero ahora era reconocido en la calle y tenía más seguidores de los que podía registrar en instagram. eso era diferente, sin duda, tener la atención de todo el mundo después de tanto tiempo rogándola. pero a pesar de eso, era reconfortante pensar que por fin lo había conseguido. 
a ti te parecía asfixiante. era extraño ver cómo el chico con el que habías pasado los últimos años se convertía en una estrella de la noche a la mañana. para muchos era enzo vogrincic, un actor en una película nominada al oscar. para ti, sólo era enzo, tu mejor amigo. y tu antiguo amor. así que aunque admirabas la creciente fama de tu amigo, las cosas podían ser un poco confusas a veces. la fama atraía todo lo bueno que podías desearle como actor, pero también traía todo lo que te asustaba a muerte: chicas. 
todas guapas, con magníficas sonrisas, actitud y presencia magnética, podían tener fácilmente una oportunidad con enzo. fácilmente cualquiera menos tú. eso era lo que pensabas. 
era difícil reprimir tus celos, un sentimiento idiota que intentabas ignorar a toda costa. controlar tus propios sentimientos era una tarea ardua y agotadora. no te gustaba cómo se te calentaba la cara cuando él estaba cerca, ni cómo te sentías cuando alguna chica se acercaba demasiado. y te sentías fatal por eso. estabas siendo infantil y celosa, pero tú estabas allí primero, ¿no? 
no era una carrera, pero pensabas que ya te habías asegurado el primer puesto. eras el confidente de enzo, su compañera en casi todo momento y la persona más cercana a él. aun así, era como correr por el oro. y no te gustaba nada tener que competir.
cuando enzo te invitó a la fiesta posterior al estreno de su nueva obra, pensaste en declinar la invitación. por supuesto, verías toda la sesión, te volverías a enamorar durante hora y media, felicitarías a tu mejor amigo y volverías a casa, acompañada de una botella de vino y penas que ahogar.  pero el actor no aceptó un no por respuesta, de hecho, enzo estaba aún más confuso, ya que en las últimas semanas parecías muy distante. no respondías a sus mensajes, no contestabas a sus llamadas. por un momento se culpó a sí mismo, pensando que tal vez te estaba dejando de lado con su apretada agenda, pero en realidad, tú sólo estabas actuando como una cobarde.
sabías que era cobardía. contigo mismo, con enzo. estabas siendo una idiota. pero no tenías la valentía de abrirte y contarle tus sentimientos, especialmente con todos los focos girando ahora en su dirección. así que empezó a alejarse, pensando que no le afectaría con sus celos repentinos o sus sentimientos contradictorios. sus palabras sonarían superfluas al lado de toda la atención que él estaba recibiendo ahora. ni siquiera le importaría, otra razón más que se dijo a sí misma para sabotearse. probablemente arruinaría nuestra amistad. ¿y si piensa que intento aprovecharme? pensamientos que pasaban por tu cabeza por la noche.
"¡enzo, este es tu momento, tu obra acaba de estrenarse y tu película va estupendamente!", le dijiste a tu mejor amigo, con un tono de resignación poco convincente. "¡tendrás gente a tu lado toda la noche!".
estabas en el camerino después de la obra, mientras enzo se cambiaba la ropa de su personaje. la habitación olía a perfume fresco, a madera vieja y a una pizca del sudor del chico. con los brazos cruzados, mirabas fijamente el tabique donde enzo se cambiaba, sentada en el viejo sofá.
cuando salió de detrás de la barrera de madera, enzo te miró como si estuvieras bromeando, con los ojos muy abiertos, las cejas levantadas, y luego sacudió la cabeza, abrochándose los últimos botones de su camiseta negra.
"¿y qué tiene eso que ver con el hecho de que quiera a mi mejor amiga conmigo en una noche importante?", preguntó, como si lo que estabas diciendo fuera una tontería, y luego se detuvo frente al espejo, limpiándose el maquillaje.
te pusiste a su lado y cogiste uno de sus pañuelos, limpiándote suavemente el maquillaje blanco del cuello, incapaz de mirarle mientras enzo te observaba en el reflejo. mordiéndote el interior de la mejilla, te sorprendiste a ti misma con un torbellino creciendo en tu pecho.
"no quiero estorbarte" tu confesión salió en un susurro, a lo que enzo respondió con una risa suave y despectiva. "en serio, me quedaría ahí como una idiota, ¡ni siquiera me echarás de menos!".
enzo te sujetó la muñeca con calma, mientras tú te concentrabas demasiado en limpiarlo, pero hacía tiempo que el maquillaje había desaparecido. se giró para mirarte, con los ojos fijos en toda tu expresión ceñuda, que llevaba una insistente preocupación en el pliegue de las cejas, que le pareció adorable.
"deja de decir tonterías, sabes que te necesito siempre a mi lado. ¿o qué sería de mí?", declaró el moreno, con una voz tan firme y dulce como la sonrisa que se deslizaba por sus labios cuando le miraba. 
y así era imposible rebatirlo, simplemente era demasiado difícil resistirse a él y al sentimiento que la consumía por dentro, que la traía a este momento, en el salón de un piso grande y desconocido, lleno de actores y gente importante, críticos de teatro y alguna que otra gente insignificante. reconoció algunas caras, amigos comunes, compañeros de trabajo y, por supuesto, fans y admiradores de enzo. el ambiente es un zumbido de carcajadas, conversaciones animadas y copas que se alzan en señal de celebración. la gente aplaudió cuando enzo entró en el piso, llevando su mano, que pronto soltaron para que pudiera saludar a los demás. me parece justo. pensó, aunque el hormigueo entre los dedos causado por la ausencia de enzo empezaba a molestarle.
él irradiaba confianza, saludando con la cabeza a quienes le saludaban y respondiendo a cada cumplido con una modesta sonrisa.
intentaste mantener una expresión neutra y comprensiva, apreciando el esfuerzo de enzo por incluirte en su nuevo mundo. sin embargo, la sensación en el fondo de tu mente persistía. todo el mundo quería saber cómo era tocarlo, cómo era amarlo, y usted no tenía ningún privilegio en ser experta en esto. poco a poco, cuando el actor entabló conversaciones, usted se dispersó en un minuto, fue a por una copa de vino y pronto se vio fuera de lugar, enzo cada vez más rodeado en un pequeño círculo alejado de usted, y una hermosa chica riendo a su lado, intentando llamar su atención. 
a la cuarta copa, después de observarle desde lejos, estabas algo intoxicada por el alcohol y decidida. le daría espacio, tanta distancia como necesitara, para que pudiera disfrutar de su noche sin obstáculos. sobre todo, no quería ser su sombra ni sentir que le molestaba, aunque enzo no diera señales de aquello. 
el enorme balcón del enorme piso, ocupado apenas por unos pocos fumadores, tenía una escalera de incendios en la esquina y a través de ella descubriste la terraza, vacía y tranquila, con una vista increíble de las luces de la ciudad. te pareció una buena forma de alejarte de todo, un escondite perfecto para ti y todas esas sensaciones. 
mientras te alejabas por la terraza, enzo notó tu ausencia. alguien acababa de soltar un chiste estúpido y él se giró para intercambiar una mirada cómplice, dispuesto a ver tu sonrisa en su rostro, pero todo lo que obtuvo fueron rasgos desconocidos y sintió una inmediata incomodidad. enzo puso fin a la conversación bruscamente, disculpándose con los demás invitados, y empezó a buscarte entre el montón de gente en que se había convertido el salón. cruzó el piso, saludando rápidamente a quien se cruzaba en su camino, la preocupación en su rostro se hacía cada vez más visible al no haber rastro de ti.
¿te habías ido sin despedirte? ¿por qué estabas tan... diferente? enzo podía dejar que cambiaran muchas cosas, no todo lo que podía controlar, pero cambiar lo que existía entre ustedes no podía tolerarlo, y eso lo aterrorizaba. incluso después de todo, tú eras la persona que él quería a su lado. como amiga, como algo más. como cualquier cosa que te mantuviera cerca. a tus brazos corría cuando el mundo parecía tragárselo, cuando todo le abrumaba, cuando tenía noticias felices o tristes, cuando tenía planes o necesitaba un momento de paz escuchando tu voz. la vida de enzo, a pesar de todo, giraba en torno a tu órbita. podía sentir que te le escapabas de las manos, y no podía permitir que eso ocurriera. 
sus ojos vislumbraron entonces la puerta abierta del balcón y la atravesó, encontrándose con la misma escalera por la que habíais subido minutos antes. se conocían lo suficiente como para que enzo estuviera seguro de que iba en la dirección correcta cuando subió a la terraza. la brisa helada le golpeó en cuanto subió el último escalón, y sintió que se le formaba un nudo en el estómago.
la vista panorámica de la ciudad se fue revelando a medida que avanzaba por la terraza, pero lo que captó su atención fue usted, de pie en el borde de la misma, mirando al horizonte con expresión pensativa, con un vaso vacío en las manos. al actor le dio un vuelco el corazón, respiró hondo y se rascó la garganta.
"¿estás bien?" la voz de enzo cortó el silencio como una suave melodía, sobreponiéndose a la música apagada del piso justo debajo de sus pies, sorprendiéndole mientras contemplaba la ciudad desde arriba, absorbida por sus pensamientos. era una voz profunda y cálida, con una nota de preocupación delicadamente entretejida. 
no esperabas que llegara tan rápido. te giras hacia él e intentas sonreír, pero el gesto no llega a tus ojos.
"estoy bien, enzo. sólo necesitaba un poco de aire fresco". intentaste sonar despreocupada, pero había una notable tensión en el ambiente. 
realmente te sentías sofocada, un poco acalorada, atascada por el vino y la ansiedad.
el actor asintió, sus ojos buscaban los suyos, en busca de respuestas que usted no estaba dispuesta a dar. se acercó a ti lentamente, metiendo las manos en los bolsillos, dando un paso cada vez, como si temiera que cualquier movimiento brusco pudiera alterar el delicado equilibrio entre vosotros.
enzo no sabía cómo empezar a desentrañar las preguntas de su cabeza, y tú no sabías cómo retener las palabras dentro de tu mente cargada y ebria.
"las cosas están un poco raras", dijisteis los dos a la vez, generando un ligero estado de shock con la revelación al unísono. estabais en la mente del otro todo el tiempo.
intercambiasteis miradas divertidas, repentinamente tímidas, y enzo se rió, balanceando el cuerpo, sin saber muy bien cómo acercarse.
"empiezo a pensar que tenemos que repasar nuestras habilidades telepáticas", bromea él, tratando de aliviar la tensión del ambiente. 
su sonrisa era genuina, pero sus ojos seguían buscando algo más en los tuyos. la brisa nocturna jugaba con el pelo de enzo mientras se acercaba, creando una atmósfera de vulnerabilidad compartida.
dejas escapar una suave carcajada, disfrutando del ligero toque de humor. sin embargo, esa extraña electricidad entre vosotros no desapareció del todo. enzo parecía querer entender lo que estaba pasando, mientras que tú luchabas por expresar sentimientos confusos bajo la influencia de más vino del que deberías tener en tu organismo. 
"sí, podría ser una buena idea invertir en un curso de comunicación mental", respondiste, tratando de mantener un tono ligero, pero esa expresión algo desesperada seguía delatando lo que ocurría en tu interior.
enzo asintió, de pie a tu lado en el borde de la terraza, ambos contemplando la ciudad iluminada ante vosotros. había algo mágico en la noche, pero también algo incierto en la forma en que os mirabais.
"entonces, ¿qué está pasando?" enzo finalmente rompió el silencio una vez más, sus ojos te miraban con una intensidad que hizo que tu corazón se acelerase. sus orbes marrones invitan a sumergirse en ellos. estabas atrapada, sin ningún lugar al que huir. su mirada te recorrió como si fueras transparente, incapaz de ocultar nada a su atención.
dudaste un momento, mordiéndote el labio inferior antes de encontrar el valor para hablar. "es que... me he sentido un poco perdida. con todo lo que ha estado pasando, los cambios, tú haciéndote famoso, y yo... no sé dónde encajo". apartaste la mirada, sintiendo un nudo en la garganta. "no sé si podré soportarlo, en".
una sensación punzante pareció atravesar el pecho del chico, que sinceramente se esperaba muchas cosas, pero no esto. no su mirada huyendo de él a cada momento y la forma en que su cuerpo parecía repudiar la manera en que se apartaba inconscientemente. enzo perdió el aliento ante el golpe, y tardó unos segundos en procesar tu honestidad directa.
"¿no puedes lidiar... conmigo?", preguntó, con la voz baja, dolida. tu había bebido demasiado, se notaba. enzo no sabía si se sentía ofendido o preocupado. sus manos se tensaron en los bolsillos del pantalón, ansiosas por encontrar las suyas. de tocarte, de romper esa barrera.
"i... no sé si podré soportar la idea de perderte" la afirmación le salió, cortándole la garganta. dios, qué tonta y ridícula se sentía. toda una fiesta para él allí abajo y él perdiendo el tiempo con su drama.
la mirada de enzo pasó gradualmente del perplejidad a la comprensión, y a algo más profundo, más vulnerable. la noche que había parecido tan prometedora se teñía ahora de una nube de incertidumbre.
"¿perder...?" enzo repitió la palabra, como si tratara de comprender plenamente el significado que encerraba. sus ojos oscuros se clavaron en los tuyos, una mezcla de confusión y de inquietud pintada en su expresión.
tragas saliva, incapaz de responder inmediatamente. las emociones bullían en tu interior, y era difícil discernir qué era miedo, celos o simplemente inseguridad.
"sí, perder". bajaste la cabeza, tus dedos rodeando el borde de la taza en una huida nerviosa. riéndote para ti misma, cerraste los ojos, sintiendo el ligero mareo y la falta de control en la forma en que tu mente maquinaba las siguientes palabras, transformada por el alcohol. "y tambien estan los celos, esta cosa amarga que me esta carcomiendo. de adentro hacia afuera, parece volverme loca cada maldita vez que una chica se acerca... y nunca he sido posesiva, pero es tan difícil cuando se trata de ti, enzo. es como competir por el oro".
durante un rato no pasa nada. enzo permanece en silencio, inmóvil, observándola con expresión seria y atónita. la oye resoplar y, de repente, sus ojos se enrojecen, ardiendo por contener las lágrimas. 
" ¿tienes celos?" pregunta finalmente enzo tras una pausa que parece durar una eternidad, como si no pudiera creer lo que acaba de salir de su boca. su voz es baja y tranquila, como si intentara no asustar a una criatura frágil. su mirada permaneció fija en ti, tratando de comprender cada giro de la situación.
asentiste como una niña pequeña contrariada, sintiendo que se te quitaba un peso de encima al compartir algo que habías estado ocultando durante tanto tiempo. "sí, y lo odio. sé que es irracional e infantil, pero es más fuerte que yo".
una sonrisa crece en los labios de enzo, como si la situación le divirtiera. levantas la mirada, sintiéndote traicionada, cuando él empieza a reír. tu mano busca el pecho del actor, dándole un torpe puñetazo y el moreno asiente, sin importarle la repentina agresión.
te atrae en un espontáneo abrazo, colocando su barbilla sobre tu cabeza cuando no te resistes a aceptar su tacto, a pesar de sentirte insultada. toda la tensión se disipó de enzo cuando se dio cuenta de todo lo que estaba pasando. y de lo inconsciente que eras de sus sentimientos. pero eso no lo revelaría ahora, no cuando parpadeabas lentamente y visiblemente alterada por el vino. enzo quería que lo supieras, que lo recordaras.
enzo te abrazó un poco más fuerte, en un intento de transmitir consuelo. su pecho descendía y ascendía con calma, ayudando a que sus propios latidos se calmaran. 
"no necesitas ponerte celosa, y definitivamente no necesitas competir por nada, especialmente no por mí", susurró, sus ojos oscuros fijos en algún punto de la terraza mientras su mano acariciaba tu espalda. "siempre has sido la persona más importante para mí, desde el principio. nada de eso cambia por un poco de fama y atención. y menos por chicas que no eres tú".
las palabras de enzo eran suaves, y la sinceridad en ellas era innegable. quería que supieras que, a pesar de todos los cambios, seguías siendo la constante de su vida. y la única para la que tenía ojos. pero tú no lo asimilaste enseguida, sino que retrocediste un poco y lo miraste con ojos pesados y labios apretados, recelosa. 
enzo notó, con una mezcla de ternura y diversión, una sombra roja que denunciaba el contacto con la copa de vino en la comisura de tus labios. un destello de encanto apareció en su mirada, y un suspiro involuntario escapó de los labios del actor. 
"venga, vamos", te llamó, extendiendo la mano entre los dos. su mirada se detuvo en tus dedos abiertos y, tras evaluarlos unos segundos, los entrelazó con los suyos.
"¿adónde?", tartamudeaste, frunciendo el ceño. la sensación de su cálida mano contra la tuya era reconfortante y segura.
"fuera. necesito una noche a solas con mi chica, por los viejos tiempos" enzo se encogió de hombros, sin dudar en tirar de ti a través de la terraza para marcharse.
te detuviste bruscamente, confusa e incapaz de entender por qué estaba dispuesto a dejar todo aquello atrás tan fácilmente.
"pero... enzo, la fiesta y tus amigos..." insististe, y enzo asintió.
"tengo prioridades esta noche, asuntos más importantes que tratar hoy que perder el tiempo con aduladores. todos ellos sólo sobre ti"
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what must it be like to grow up that beautiful, mr. vogrincic?
hola!!! dios, como me quede obsesionada a esta ask. simplesmente, es la cancion que traduce los sentimientos de todas nosotras!!! muuuuy accurate muchas gracias!!!
espero haber conseguido transmitir la vibra de la canción 😭
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Mi amor eterno:
“Me encanta haber coincidido contigo en este preciso momento de nuestro joven universo.”
La vida desde que te conocí ha sido maravillosa y plenamente feliz, el amor y la alegría que has traído a mis días es algo que jamás lograré de terminar de agradecerte. Tomaste mi mano en los momentos más difíciles y te quedaste conmigo aún en medio de las dificultades. Tu amor se ha sentido como una cálida gota de lluvia en momentos de una terrible sequía. Las probabilidades de encontrar a tu alma gemela en una persona increíblemente hermosa son de una en un millón y es increíble que de entre trillones de personas nos hayamos encontrado. Sé, sin importar qué tantas cosas difíciles vengan, que mi corazón, mi alma y mi vida entera fueron hechos para amarte y que el universo nos trajo aquí, nos dirigió al instante en el que vimos nuestros ojos por primera vez, al instante en que nos miramos y supimos que éramos las personas con las que queríamos pasar el resto de nuestras vidas.
Estar contigo siempre se ha sentido como estar en una película romántica, con todos sus desenlaces, sus dramas y sus cursilerías, se ha sentido como caminar en una nube rosa, como volar por los cielos siendo un pajarito amarillo. Estar contigo, en pocas palabras… se ha sentido como se siente el amor verdadero: cálido, dulce, con un aroma a tu comida favorita (pero cuando la hacía tu abuelita), desenfrenado, intenso, fuerte como las olas y al mismo tiempo suave como las caricias llenas de cariño después de una noche loca. Estar contigo es como vivir. Vivir de verdad.
Las situaciones difíciles son parte de la vida y el aprender a sobrellevarlas es complicado, pero no imposible. Hemos pasado por tantas cosas juntos que el pensar en llegar a rendirnos no es posible. Nuestro amor es grande y las ganas de seguir juntos lo son aún más. No existe manera en la que no quiera seguir creciendo contigo, eres todo lo que siempre he querido, todo lo que siempre he soñado y la manera en la que cambiaste mi vida es algo que jamás podría llegar a olvidar. Tu esencia, tu personalidad y tu carisma me envolvieron y enamoraron de una manera que llevaré tatuada en mi alma por siempre. La magia que desprendes es tan maravillosa, simplemente perfecta. Eres hermoso, amable, bueno, entregado, inteligente, fuerte, colaborador, honesto, gracioso, increíblemente magnífico. Eres tan precioso, Jhorvin, en todos los sentidos posibles de la palabra. Cada parte de ti me tiene tan locamente enamorada, tan jodidamente extasiada.
La manera en la que mi corazón late cuando estás cerca, cuando me tocas, cuando me miras… es algo que no puedo explicar. Necesito tenerte cerca todo el tiempo, necesito sentirte, amarte, tocarte, lo necesito de la misma forma en la que todos los humanos necesitamos respirar. Es tan extraña la forma en la que me siento cuando me rodeas con tus brazos, cuando me besas, cuando me jalas hacia ti y me dices con la mirada que me amas, que siempre me amarás.
“Debo resignarme a conjugar el verbo amar, a repetir por milésima vez que nunca quise a nadie como te quiero a ti, que te admiro, que te respeto, que me gustas, que me diviertes, que me emocionas, que te adoro” — Adolfo Bioy Casares, Carta a Elena Garro.
Te amo, Jhorvin. Te amo tanto y no existe manera de describir este sentimiento de una manera en la que pueda entenderse completamente, porque yo te amo así: con locura, con fuerza, sin entendimiento, sin cordura. Te amo con valentía, con fortaleza, con ímpetu. Te amo como se ama a la vida aunque a veces ésta duela, te amo como se ama a los recuerdos felices, te amo como se ama al cielo, al sol, al viento. Te amo como se ama en los libros, en las películas, en las historias viejas. Te amo como se ama a todo aquello que te hace feliz.
Amo tu voz, tu sonrisa, tus ojos, tus manos, tus brazos, tu pecho, tus piernas, tus pies, tu cabello, tus mejillas, tus orejas, tus pestañas, tu corazón. Amo cuando te miro y después de un rato volteas, amo cuando tomas mi mano y empiezas a saltar, amo cuando ríes después de decir algo chistoso, amo tu coraje, tu manera de hacer las cosas sin tomarle importancia a los riesgos, amo que me impulses a hacer cosas que jamás en mi vida me creí capaz de hacer, amo tus bailes de la nada, amo tus ganas de tenerme cerca siempre, amo como me cuidas, como me respetas y me amas, amo tu manera de hablar, bailar y caminar, amo tus chistes, tus mensajes, tus audios, tus llamadas, tu manera de decirme de 100 mil maneras distintas que me adoras y que deseas estar conmigo siempre.
No quiero imaginar una vida en la que no estés, en la que tú y yo no existamos. No quiero y, definitivamente no puedo imaginar una vida sin tus besos, sin tus abrazos, sin ver tus ojos, sin tu calidez, sin tu magia alrededor. No puedo siquiera concebir un día en el que no estés a mi lado.
Las diferencias que tenemos han sido un punto clave en nuestra relación, no han hecho tener problemas, nos han dado risa y nos han hecho llorar múltiples veces, pero jamás podría verlas como algo que quisiera cambiar o algo de lo que me sienta arrepentida. Nuestras diferencias, aunque muchas veces nos han hecho dudar, son de las cosas más únicas que tenemos, son de las cosas que hacen que sigamos juntos a pesar de todo. Tú y yo, somos como el ying y el yang, la luna y el sol, el mar y la arena, los árboles y la tierra. Cosas completamente opuestas pero que se necesitan la una a la otra para poder sobrevivir, para poder subsistir.
“Te quiero a las 10 de la mañana, y a las 11; y a las 12 del día. Te quiero con toda mi alma, y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia” — Jaime Sabines
Nos hemos prometido incontablemente que nos quedaremos juntos en las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad, en la risa y en las lágrimas, en la felicidad y en el enojo. Es una promesa que mantengo conmigo cada día, porque me quedaré contigo siempre, amor. Me quedaré contigo cada día, incluso en medio de la tempestad, en los malos momentos, en las situaciones complicadas porque nuestro amor es así, porque nosotros somos así. No damos un paso atrás cuando las cosas se ponen difíciles, sino que es ahí cuando nos volvemos más fuertes.
Hay tantas cosas por las quiero y debo pedirte perdón, tantas cosas que he hecho mal y que cuando pienso en ellas sólo siento una tristeza y un arrepentimiento profundo. Te pido perdón por todo aquello que aún me cuesta mejorar, por todas esas cosas en las que aún piensas y que te siguen lastimando, por todo eso que hice inconscientemente pero que al final, hicieron daño. Te pido perdón por la parte de aquella persona que fui que te lastimó y te digo que ahora estoy creciendo, estoy mejorando y todo bajo la promesa de brindarte un mejor futuro, de brindarnos a ambos una buena vida y una buena relación. Mis ganas de sanar y seguir adelante se volvieron más grandes y fuertes desde que te conocí, porque me diste el valor suficiente para hacerlo, porque me impulsas, me animas, me motivas, me haces bien. Porque conocerte y amarte ha sido de las pocas cosas en mi vida que han salido bien. El que me ames ha sido la gran bendición de cada uno de mis días.
No sé qué nos depara el futuro, no sé qué nos tiene el universo preparado, pero sí sé que quiero averiguarlo mientras tomo tu mano, sé que quiero estar contigo y sé que quiero seguir creciendo a tu lado. Las cosas no se harán más fáciles a partir de ahora, pero nuestro amor sí se seguirá haciendo más grande y soy afortunada, porque estoy compartiendo todo de mí con la mejor persona que he podido conocer.
Eres tú el único chico con el que quiero vivir, dormir, llorar, reír, bailar, soñar, discutir, disfrutar, comer, brincar, viajar, coger, experimentar, brillar, crecer. Eres tú el único al que quiero contarle mis más locas anécdotas y chismes, el único al que quiero besar por siempre, el único con el que quiero correr por los senderos de lo que llamamos vida. Eres tú el único chico con el que quiero seguir viviendo esta loca pero increíble película romántica. 
Así que no me sueltes, amor. No me dejes, no dejes de mirarme con todo ese amor que parece sólo querer desbordarse hasta llegar a mí y envolverme con ternura, no dejes de tomar mi mano con fuerza, no dejes de sonreírme antes de besarme, no dejes de hacerme reír con tus locuras, no dejes de abrazarme en medio de la noche, no dejes de decirme cuánto me amas a cada momento, porque te juro, mi sol, que yo jamás dejaré de hacerlo.
Gracias por ser el sol que me da calor cuando muero de frío, gracias por ser la mantita que ahuyenta mis miedos en medio de la madrugada, gracias por ser la brisa por las tardes que me recuerda que estoy viva y que eso es increíble, gracias por mostrarme que siempre existirán las buenas oportunidades, gracias por extenderme tu mano en todos esos momentos en los que creí que todo seguiría mal, gracias por besar mis cicatrices y por secar mis lágrimas, gracias por salvarme, gracias por ser tú.
Te amé ayer, te amo hoy y con toda la seguridad del mundo… te prometo que te seguiré amando mañana.
Con amor, Tu Fany Lu.
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depoesiaypoetas · 1 year
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La maleta se hizo más rápido de lo que se había desempacado. Olvidé el bote de champú, el cepillo de pelo, una falda y un scrunchie, las sandalias también. El hogar que creía mío ya no se siente más hogar. La familia ya no se siente familia. Tomé la mochila y salí con lágrimas en los ojos y dolorcito de pecho. Nadie me siguió. De alguna forma hubiera deseado que alguien lo hiciera o al menos dijera algo tras la discusión familiar. La puerta no se abrió para decirme que me quedara. Si no hay cumpables, hay heridas familiares de las que nadie se responsabiliza, y he tomado una decisión quizás apresurada, pero necesaria, y no di la vuelta atrás. No soy católica pero creo en Dios y caminando por una hora me detuve en el parque de la iglesia lleno de aves y palomas donde el viento pega fuerte y los árboles murmuran con vaivén, he llorado por dos horas, el dolorcito en el pecho seguía ahí, hubiese querido que el aire me secara los ojos, pero como se sabe, cuando empiezas a llorar por una cosa lloras por todas las veces anteriores, y es difícil cerrar las fuentes. Una señora creo que intentó acercarse pero me hice bolita sobre mis rodillas y dejé que siguiera el raudal, ni siquiera la respiración me ayudaba. Y esperé un rato. Me despedí de los planes cuando me hube calmado un poquito, que había hecho con los amigos y familiares. Y recibí en el chat familiar un único mensaje de "ojalá algún día me entiendas", y el corazón se arrugó más, y seguí llorando un rato lentamente como quien quiere quedarse dormido y olvidarse un ratito. Tomé un autobús a la central para cambiar mi boleto y tomar el siguiente en regresar, debía esperar 4 horas y me quedé sentadita en la terminal, viendo a los familiares despedirse y a los amantes con besos en la frente y lágrimas en los ojos: la terminal sigue siendo de mis lugares favoritos, sigue habiendo amor honesto del que no hay en otro tipo. Y mi autobús salió de noche, con nada en mi estómago, los ojos hinchados y la opresión en el pecho. Llegué a la terminal norte y esperé 20 minutos para trasbordar. Viajo ligero pese a que mi mochila parece caparazón de tortuga, sólo tengo ropa, libros y dulces en sus bolsas. Son más historias las que me pesan al hombro que la carga física la que llevo. Dormí más tiempo y, al despertar me sentí extraña creyendo que todo había sido un sueño, pero ya estoy acá de nuevo; he llegado a un hogar que no se siente hogar por ahora llamaré mi casa. El dolorcito en el pecho tomará su tiempo en desaparecer, dicen mis amigos cardiólogos que es un Síndrome de Takotsubo, yo digo que el amor romántico no es el único que puede romperte el corazón.
Clara Ajc
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livistud · 2 months
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Hay cartas románticas y luego están éstas que te hago cuando siento que el corazón me va estallar de amor, y no, no siento que sea mi debilidad ni mucho menos; me hace recordar que podría sentir muchas cosas pero hoy mi amor es por ti. Puedo decirte que no soy poeta, pero la mayoría del tiempo siempre había sido de escribir para mi misma, ahora mis noches suelen ser de crear versos para ti o tratar que algo rime con lo que me haces sentir. Eres la poesía que no sabía que podía escribir, el suspiro que no sabía que podía dar y sé hoy todas las veces que he hablado con Dios orando por un amor donde me brindara sus brazos como mi refugio y en sus besos mi hogar encontrar no han sido en vano; y aún así, si pudiera reescribir mi destino, cada línea llevaría tu nombre y cada capítulo hablaría de nuestro amor. Así que hoy a Dios le pido que por favor te proteja, porque realmente no importa como acabe esto pero que él no te pierda de vista, que no te desanimes, que siempre te de fuerza para levantarte; y que toda las personas que conozcas sean gentiles, gente cálida, porque sé que muchas personas se han dado cuenta pero eres muchas cosas buenas y sé que mereces más que eso en tu vida. Mereces tantas cosas buena, mereces todo lo bueno que la vida pueda ofrecerte y aun así quedaría en deuda contigo. Y sé que no será fácil, que va ser difícil y que habrá noches donde el pensar si es lo mismo aún seguirá ahí, pero hoy con seguridad te puedo decir que te querré con todo lo que soy y todo lo que tenga, sea bueno, malo, tristeza o felicidad, todo. Porque sin ser gato, ni nada que se le acerque, sin poseer más de una vida, moriría siete veces por una sola vida contigo. Genuinamente te puedo decir, D, es hermoso; pensar que te adoro tanto.
l i v i s t u d
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stjaen24 · 3 months
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No es que no te quiera, te quiero en demasía. Pero me duele quererte y si me duele, entonces no es amor.
Se que suena duro, se que es difícil de aceptar, pero debo soltarte y debes soltarme. Tanto acercarnos también puede hacernos daño.
Te quiero ver feliz, antes quería que esa felicidad fuera de alguna forma producto de mí, pero nuestras vidas no se conjugan de la misma manera.
Yo voy por mi rumbo y tú vas por el tuyo; ambos lo sabemos, no vamos hacia el mismo lado. Y no es que rechace tu amistad, tan solo deja que mi corazón libere todo eso que sentía por ti, dale tiempo.
Para darte una amistad pura, genuina y real debe ser así. Llámame loco o exagerado, pero por ahora no puedo verte, tampoco puedo hablarte. Por ahora solo quiero estar conmigo.
Y no espero mucho que lo entiendas, agradecería que lo hicieras, porque te quiero y no quiero apartarme de tu vida, pero valoro la mía y esto me duele en lo más profundo.
Las despedidas no siempre son fáciles y aunque no parezca, despedirme de ti es algo que me va consumiendo por dentro. Es un dolor insoportable, un dolor que no sana de otra forma más que con el tiempo...
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neuroconflictos · 5 months
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Te dejo y no es porque ya no te ame, es porque te di mi mejor versión, alma, cuerpo y corazón, y haberlo hecho me consumió.
No estamos destinados por mucho que lo quise forzar. El destino fue tan hijo de puta que me presentó a alguien que me aniquilaria con su indiferencia.
Te dejo. Si.
Porque me obligaste a elegir entre amar(te) y amar(me), nuestras vidas jamas encajaron, cuando estábamos juntos sentía que mi vida se me escapaba entre los dedos. Y aunque intente mil veces buscarle una solución, siempre me convencias que sólo vos podrías tomar esa decisión.
Te dejo; porque no es justo permanecer al lado de alguien que sabe que daría mi vida por él y que actúa como si no le importara que esté o no en la suya.
Te dejo porque lejos de sentir paz me sentía en guerra conmigo, era nadar contra la corriente, agotando siempre toda mi energía.
Te dejo; porque al cuidar más tu fragilidad que la mía, me termine rompiendo, y a fin de cuentas de vos me lleve la peor versión.
Me pusiste tantas veces al límite que ya no puedo más, abusaste de mi paciencia pero sobre todo de mi amor, simplemente nuestro tiempo culminó.
Jamás pensé que sucedería, lo veía imposible, te amé con cada fragmento que quedaba de mi corazón. Me estabas destruyendo y parecia que disfrutas de ese espectáculo.
Te dejo; porque si me quedo con vos, acabarás con lo poco que queda de mí y no hay nada más doloroso que el silencio de una persona que te ama eligiendo irse, porque amarte a vos hace que ella se pierda.
Te dejo; porque jamás vas a poder dimensionar cuánto te amé y cuánto amor me costó dejarte ir, porque tú corazón; no tiene capacidad para tanto.
Te dejo; porque te amé incluso cuando no me elegías, cuando me hacías llorar por tus actitudes o por la falta de ellas, te amé sabiendo lo complicado y difícil que era amarte, estar con vos, te amé sabiendo de tus desaires y de tu desinterés, con tus mil defectos, tus mil y un mentiras y con todas esas palabras que me destruían.
Te amé aunque me llenaste de inseguridades, me rompiste el alma, y luego de eso me hablabas como si yo fuese la culpable. Te dejo, sí, yo grité; lo que vos por cobarde quisiste hacer en silencio.
Créditos: Pipina 2.0 ♡
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dokebeto · 11 months
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7 de noviembre, 2023.
Buenas noches, antes que nada.
Recien terminé mis tareas y he venido a dedicarte mis últimos pensamientos de la noche, sé que ya pronto amanecerá y quizá veas esto... Sí lo ves al despertar, déjame decirte que te quiero.
Ojalá y este día esté lleno de cosas grandiosas para ti, sé lo difícil que pueden ser las rutinas, el trabajo o el estrés. Pero quiero decirte que lo haces muy bien, yo no soy bueno recibiendo ese tipo de cumplidos, pero cada vez que vienen de ti, es como sí la tormenta de mi mente se aclarara, como si un destello de luz atravesara la nube más oscura y hoy quiero decírtelo yo, lo haces muy bien día con día y estoy orgulloso de ti, así como te admiro mucho.
Sé que mis sentimientos por ti no son una sorpresa, pero no dejemos morir los detalles, las cartas, los buenos días y las buenas noches, te quiero mucho.
Me gusta mucho escribir para ti, me hace imaginarnos como esos dos enamorados de un libro que leí hace tiempo, “Cartas a Chepita” o “Los Amorosos” cualquiera de sus dos nombres.
Adoro escribir para ti, porque es un acto de amor más, es un recordatorio y una manera de decirte que pienso en ti, que te extraño. Y te escribiré hasta que las palabras bonitas se me terminen para decirte lo mucho que te quiero.
Descansa mucho y recuerda cuidar de ti
Te quiero, te amo.
D.
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caostalgia · 1 year
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269 días sin ti.
Como pasa el tiempo, ¿no? Ayer estaba llorando después de colgar la llamada que me apagaría el corazón y hoy van casi 270 días sin ti. Faltan menos de 100 para que vaya un año.
Un año sin tu sonrisa o tus bufidos. Un año sin tus canciones en inglés y tu emoción por un nuevo capítulo de tu serie favorita. Un año sin tus chistes, que eran horribles, y tu risa. Un año sin todo lo que te conformaba, sin tus aristas, sin tu brillo.
Ha sido una tortura y sigue siéndolo. Todo este tiempo sin ti abrió un hueco en lo más hondo de mi corazón que ni mengua, que duele. No veas como duele no tenerte cerca, no escucharte, no sentirte. Es duro seguir intentándolo y que tú no veas los pequeños pasitos que estoy dando en esa dirección de la que tanto hablamos.
¿Sabes? La abuela te habría querido, sé que sí. Te habría querido por el simple hecho de que yo te quería, pero, además, te habría querido porque era fácil hacerlo. Porque quererte era una de esas cosas inevitables de la vida. Ojalá la hubieras conocido, pero no, porque ya van 269 días sin ti y a la abuela la vi hace poco.
¿Sabes? Me habría gustado enseñarte esos lugares que me vieron crecer; esos árboles especiales, esa cabaña derruida, ese taller lleno de estornudos y aprendizaje, ese parque, esa poza.
¿Sabes? Me habría gustado que conocieras a mi gigante invencible, al pilar de mi vida. A ese adolescente que hizo de padre cuando papá no lo hacía. A ese loco.
¿Sabes? Me habría gustado decirte, hace 269 días, que te quería. Pero no lo hice y sigo viviendo en el "y si...?" Sé que no estás orgulloso de eso, pero esta herida va lenta. Y no siquiera intento, no de verdad, conocer a alguien a fondo. Enamorarme. Porque me da miedo querer y que un día, como hoy, tenga que escribir algo así. Un título de "100 días sin ti". Porque me da miedo, como cuando te conocí, que mis defectos eclipsen lo bonito que sé que puedo ofrecer.
Y, sobretodo, me da miedo dejar de quererte algún día. Que desaparezcas de lo poco que queda de mí corazón. Que tu sonrisa deje de habitar en mi memoria. Que los sueños le pertenezcan a alguien más. O que, como contigo, nuestra historia sea difícil y lenta. Que esté llena de kilómetros y ganas. De sueños que no se cumplirán. No. Lo que me da miedo es querer y que mi corazón ya no lo soporte. Que se rompa y no haya arreglo.
Entonces, aquí me encuentro. En el día 269 sin ti, con ganas de llorar. Y con dudas y con miedos. Con inseguridades y poca esperanza. Creyendo cada vez menos en el amor y con mucho dolor todavía en mi pecho.
Entonces, te echo de menos. Como todos los días. Pero hoy quizá un poquito más. Y te quiero, como todos los días, pero quizá hoy un poquito menos. (y eso me duele).
Katastrophal
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cartas-de-luchi · 10 months
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30/11
Para ti estrellita:
Hoy van 365 días desde que no estás, llevo contándolos todo este tiempo. No hay día en el que asumir tu pérdida sea fácil, no creo que lo haya nunca.
El universo me obligó a borrar las conversaciones, los audios y el registro de llamadas, pero al menos me dejó la música y las fotos, que es a lo que todavía me aferro. Me aferro a esa sonrisa un poco torcida y a la primera canción que compartimos.
A veces se me olvida que no estás, me despierto y mi cerebro me manda la orden de escribirte, y luego el golpe duele más. Porque quererte sigue siendo un tanto desgarrador y un tanto masoquista.
¿Sabes? Tu número está dado de baja, estoy segura que desde hace meses, pero antes de quedarme sin conversaciones todavía podía escribirte. El universo también me quitó eso. Y no es justo, porque ahora solo me quedan los poemas y las cartas.
La gente dice que debo pasar página, que ya está bien de llorarle a un fantasma, pero es que no saben lo que yo te quería y lo que me duele todo esto. No lo entienden y a veces siento que ni yo puedo hacerlo. Me hundo en un amor que me hace daño y en una pena interminable, no avanzo.
A veces, me asomo a la ventana y miro las estrellas. Allí estás tú, en la sonrisa de la luna creciente y en el brillo de la luna llena. Estás en las cordilleras de la izquierda y en el griterío de la derecha. Estás en las flores, en las espinas, en la tierra. Estás por todos lados y así, es imposible seguir.
El otro día recordé nuestro primer San Valentín: la llamada, las risas, la sorpresa, el que me descubrieras, la carta interminable, el amor. Luego pensé en el siguiente: la distancia, el tiempo, los enfados, los reproches, el amor innegable que seguía ahí. Al final, recordé el amor que siempre nos tuvimos y que nunca murió, ni siquiera ahora.
También estuve pensando en nuestras únicas navidades juntos, fuiste lo más bonito de aquel diciembre. Tu risa fue el mejor villancico y tu sonrisa la mejor iluminación, ni siquiera Caballero podía competir contra ti. Me gustaría volver a vivir esas noches interminables donde las anécdotas no tenían fin.
También pienso mucho en los sueños que teníamos, siguen siendo los más bonitos. Pienso en las metas que nos habíamos puesto, en las promesas que no cumplimos, en el amor otra vez. Nunca dejo de pensar en el amor.
Al final, supongo que me paso las horas, los días y los meses pensando en ti y todo eso que fuimos. En la vida que deberíamos tener y que no tenemos, en qué 2023 sin ti ha sido difícil, porque era nuestro año.
Ojalá sobrevivirte fuera más fácil o tuviera un manual de instrucciones, pero la pena es eterna y yo te voy a querer siempre niño estúpido. Ojalá te hubiera dicho una última vez lo tanto que te quería. Porque ahora solo son palabras susurradas al viento que no tienen respuesta.
Te echo de menos Andrés, siempre voy a hacerlo, pero espero que con los años sea menos difícil. Te quiero, en esta vida y en las que vendrán.
Descansa estrellita, yo seguiré luchando un poco más, gracias por ser mi Boulevard, Tu Weigel.
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deepinsideyourbeing · 2 months
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Sub!Enzo headcanons 🖤
Pequeñas aclaraciones: yo ya había terminado tu regalo (el miércoles pasado) justo antes de que empezaras a publicar como festejo antes de tu cumple. Así que antes de empezarlo me había decidido por sub!Enzo como tema para tu regalo (porque vi que hasta ese momento no se había escrito mucho de él) y justo subiste más fics sobre sub!Enzo 🤡 Pero leyendo tus nuevas historias sobre él me alegra ver que coincidimos en muchos aspectos kjsdfkjs.
Advertencias: uso indiscriminado de • con la excusa de no escribir un fic entero. 18+. 
En fin, feliz cumple Lu! Espero que te guste tu regalo (y que la espera haya valido la pena) y que la pases re lindo hoy 🖤
⋆⁺。˚⋆˙‧₊☽ ◯ ☾₊‧˙⋆˚。⁺⋆
• Pequeñas demostraciones de afecto en público que provocan que se sonroje (y que secretamente le encantan): que le agarres de la cintura mientras caminan, que lo agarres/lo abraces por la cintura mientras él rodea tu cuello con sus brazos cuando comparten un beso (no importa si sos más baja, de la misma altura o más alta que él), que le muerdas un cachetito de forma juguetona simplemente porque podés (o como una advertencia implícita para que se comporte), que le agarres la cara con una mano y lo obligues a mirarte cuando querés su atención o que cuando comparten un abrazo o un beso tus manos desciendan por su cuerpo hasta meterse dentro de los bolsillos de su pantalón y que le des un buen apretón.
• No importa en qué posición se vayan a dormir la noche anterior, cinco de cada siete mañanas despertás con Enzo con su cabeza apoyada en tus pechos y con tus brazos envolviéndolo.
• La forma más rápida para que se excite son las caricias suaves en las partes más erógenas de su cuerpo: su espalda, la parte interior de sus brazos y la de sus muslos y su cuello. Rozás esas zonas apenas con las puntas de tus dedos, tus uñas o tus labios y ya lo tenés temblando. 
• Cuando es él el que quiere tomar la iniciativa sabe que no hay forma más efectiva para provocarte que poniéndose uno de sus sweaters holgados, de esos cuyas mangas le cubren casi por completo sus manos, y debajo de este solamente unos boxers. Es consciente de la forma en que ese look te provoca cosas. Y si esto no funciona porque por algún motivo te pintó hacerte la difícil y no querés darle el gusto de ceder tan rápido, sabe que con dejar que sus ojitos te transmitan lo que necesita de vos sin decir una palabra mientras se muerde el labio con desesperación es suficiente para doblegar tu voluntad. 
• Las posiciones favoritas de Enzo son cualquiera que le permita ver tu rostro mientras cogen (con el tiempo pudiste deducir porqué había tantos espejos en su casa) pero si tiene que elegir una sola, seguro elige con vos arriba de él como su posición favorita. 
• Si le preguntás qué tipo de sexo le gusta más (suave, apasionado, brusco, etc.) va a escoger suave e intimo. Sin embargo, hay días en los que realmente necesita que lo uses pura y exclusivamente para tu propia satisfacción, que utilices su cuerpo como si fuera un juguete cuyo único objetivo es el de darte uno o más orgasmos (y también que no seas muy delicada al momento de maniobrar su cuerpo a tu gusto).
• Tiene una debilidad por los apodos cariñosos que le das como “bebé”, “amor”, “ángel”, “muñeco”, entre otros (ya sea cuando están cogiendo o no). 
• Kinks/qué lo calienta: praise kink, dirty talking, hair pulling (enredás las raíces de su pelo entre tus dedos, le das un tirón firme y Enzo se desconfigura por completo), barebacking (posible breeding kink, pero todavía no está listo para esa conversación), breath playing/choking, CNC, oral sex (prefiere más dar que recibir y le encanta cuando te sentás en su cara), sensation play, oral fixation, teasing (hay ocasiones donde le encanta ser un calienta pijas y provocarte sutilmente, y si vos se lo echas en cara él se va a hacer el boludo y te lo va a negar, diciendo que no sabe a qué te referís), marking/biting/scratching.
• Tengo que hacer otro punto dedicado exclusivamente al marking/biting/scratching porque este va para largo. Le encanta que lo marques, ya sea con tus uñas o con tu boca, le fascina verse al espejo al día siguiente antes de tomarse una ducha y ver los diferentes tipos de marcas y tonalidades que dejaste a lo largo de su cuerpo. Eso sí, prefiere que lo marques en lugares que no sean tan visibles. Si bien es capaz de poner una cara neutra gracias a sus habilidades de actor, por dentro se muere de la vergüenza cuando al día siguiente las maquilladoras se tardan más tiempo en la zona de su cuello tratando de tapar las marcas que le dejaste. Sus lugares favoritos para que dejes tus marcas son zonas donde la piel es más sensible, como por ejemplo la de la zona entre sus piernas y sus caderas -bien cerca de su miembro- y la zona donde su cuello se une con su hombro (sabe que va a tener que usar ropa con cuellos un poco más cerrados en comparación a lo que está acostumbrado a usar pero no le importa). También lo acostumbraste casi de manera inconsciente a que una mordida en su hombro o tus uñas arañando con fuerza a lo largo de su espalda se vuelvan el último empujoncito que necesita para alcanzar su orgasmo. En cuanto a marcas sobre tu piel, le gusta dejarte chupones. Dónde te va a poder marcar va a depender de qué tanto se lo permitas, pero si tiene el pase libre para marcar cualquier parte de tu cuerpo, se va a encargar principalmente de decorar todo tu cuello y tus tetas con sus marcas. También va a dejarte unas media lunitas rojas en tus caderas o cintura como producto de sus uñas aferrándose con firmeza a tu cuerpo. 
• No tiene ningún problema con coger (o darte una mano o su lengua) en lugares públicos si ninguno de los dos puede controlar las ganas, pero si tiene la opción de elegir prefiere hacerlo en la intimidad de su hogar.
• Tiene buena estamina, lo cual va de la mano con el hecho de que Enzo es de los que no van a parar hasta estar seguros de que quedaste completamente satisfecha. ¿Terminaron de coger pero te querés volver a correr? Decíle con qué, si con sus dedos, su lengua o que te coja otra vez y lo hace (y si al terminar aún querés más, te da otro orgasmo casi con el mismo entusiasmo con el que te dio el primero). 
• No digo que sea un insaciable, pero casi siempre está dispuesto a tener sexo con vos. Ya sea en la cama antes de que se levanten, o en la ducha antes de empezar con el desayuno o un rapidito cuando vuelve de correr o entrenar si nota que todavía no te fuiste, entre otros ejemplos. Creo que las pocas ocasiones que puede llegar a rechazar tus intentos de iniciar algo sería porque se encuentra muy cansado físicamente luego de estar todo el día haciendo entrevista tras entrevista o participando de una interminable sesión de fotos, o porque pasó todo el día interpretando un papel que le exigió demasiado tanto emocional como mentalmente, por lo que prefiere esperar un tiempo a que termine de salir por completo de dicho personaje y sentirse él mismo otra vez. 
• Este hombre sabe exactamente qué tiene que hacer y cómo debe hacerlo para poder complacerte, pero aún así le encanta que le des ordenes de cómo querés que te complazca: “besáme”, “tocáme”, “sacáte la ropa”, “levantáme y sentáme en la mesada”, “haceme acabar con tus dedos, dale”, “arrodilláte y usá tu boca”, “acostáte, quiero usar tu boca”, “cogéme”, “más fuerte”, “correte adentro”.
• En cuanto a comportamiento y obediencia, Enzo es casi un ejemplo a seguir. Casi. Hay días en que la calentura realmente le puede más que su necesidad de ser un buen chico para vos, la cual en sí es bastante fuerte. 
• Una mañana despierta sólo en su cama, ya que ese mismo día tus obligaciones te obligaron a levantarte más temprano e irte mientras él aprovechaba su día libre para dormir unas horas de más. Cuando rueda en la cama perezosamente para abrazar tu almohada, el olor de tu perfume y otro olorcito mucho más rico invade sus sentidos. Sabe que no debe desobedecer esa regla -la más importante- y aún así, su mano derecha se desliza tentativamente a lo largo de su abdomen hasta encontrarse con la semi erección provocada por provocaron la fricción de las sábanas contra su entrepierna y los recuerdos de la noche anterior.
• Luego de acabar y todavía algo atontado por las endorfinas producto de su orgasmo -y por los restos del sueño-, agarra su celular y se saca una foto. Sabe que si no te lo confiesa ahora, luego el castigo será mil veces peor (aún no está seguro de cómo, pero vos siempre te das cuenta cuando él rompe esta particular regla). Enfoca la cámara para que en la foto salga su torso -desde su cintura hasta su cuello-, el cual está adornado con las gotas blancas de su semen. Va al chat que tiene con vos y sin agregar ningún texto envía la foto. Con el pulso levemente acelerado, observa la pantalla fijamente esperando tu reacción hasta que ve cómo las dos tildes de su foto se vuelven azules. Aquello es lo único que recibe como respuesta. Muerde su labio inferior y vuelve a abrazar tu almohada con fuerza como si estuviera abrazando tu cuerpo, enterrando su rostro en ella para esperar a que vuelvas y le implementes el castigo que él mismo se buscó. 
• La mayoría de las veces sus castigos consisten en él acostado boca arriba en la cama con sus brazos atados a la cabecera de esta bien separados para que no pueda esconder su rostro en ellos.
• Cuál va a ser el castigo va a depender del humor en que te encuentres esa noche. A veces elegís que te mire mientras te tocás, sin que él pueda hacer nada al respecto más que retorcerse debido a la frustración e impotencia que invade su cuerpo, mientras trata de zafarse del agarre que lo tiene atado a la cabecera para poder tocar tu cuerpo. Luego de que te volvés a correr frente a sus ojos, te pide que lo liberes o te ruega que por favor lo toques vos a él. "No bebé, vos ya te corriste hoy sin mi permiso, ¿te acordás? Ahora me toca a mí." Otras veces optás por hacerlo correrse varias veces sin darle tiempo entre orgasmos a que se recupere. Te recostás junto a él sin dejar de acariciar su miembro para hacer que se corre otra vez mientras le susurrás en el oído lo putita que es -entre otros apodos degradantes- por andar tocándose sin tu permiso, provocando que se junte aún más sangre en sus mejillas. Las plegarias que salen de sus labios -rojos de tanto morderlos- para que por favor pares mueren cuando, ante su asombro e incredulidad, vuelve a correrse con un quejido lastimero. Sin poder controlar del todo su respiración rápida y superficial, te mira con sus ojitos brillosos para rogar con voz temblorosa tu perdón por desobedecerte. 
• Si te parece que realmente está arrepentido le das un besito en la frente, empezás a deshacerte de aquello que lo mantiene atado a la cabecera y comenzás con el aftercare. Por otro lado, si la disculpa no te parece lo suficientemente genuina, le sonreís con ternura y volvés a agarrar su miembro para empezar a acariciarlo de arriba a abajo otra vez, provocando que Enzo niegue rápidamente con la cabeza mientras podés observar cómo la desesperación empieza a apoderarse de él una vez más (obviamente sólo vas a parar si lo escuchás decir su palabra de seguridad o si sentís que ya fue suficiente castigo). 
• Si algo tienen en común todos sus castigos es que nunca va a poder predecir qué es lo que le vas a hacer.
• El aftercare por lo general consiste en la misma rutina a la que ya estás más que familiarizada, la cual aplicás al terminar una escena o un castigo. O si al final de dichas actividades notás que Enzo tiene una herida no tan superficial o que siente una molestia en algún músculo que no habías previsto antes de empezar, entonces empleás un poco más de tu cuidado. Cremas suavizantes para cualquier tipo de quemaduras que hayan provocado el material de lo que hayas elegido para atar alguna parte de su cuerpo y te cerciorás que los rasguños que dejaste en sus brazos, hombros y espalda sean solamente superficiales. Si siente molestia en algún músculo, le indicas que se siente o que se acueste en la cama y masajeás dicha zona hasta que notás que la tensión en sus músculos se desvanece y su cuerpo se relaja por completo. Si la escena fue muy intensa para él y todavía se siente demasiado sensible (o directamente entró en el subspace) preparás un baño para los dos y te concentrás en lavar su pelo y enjabonar su cuerpo hasta dejarlo impecable, mientras le murmuras cumplido tras cumplido, asegurándole de lo bien que se portó y cuánto lo amás. Una vez que ya está completamente limpio y seco, lo guiás a la cama y enredás tus brazos alrededor de su cuerpo -siempre vigilándolo bien de cerca- hasta que sentís que finalmente su respiración se vuelve más lenta y profunda. 
• Uno de tus placeres culposos -o no realmente tan culposo si te lo ponés a pensar mejor- es ordenarle a Enzo que se frote contra vos hasta que se corra. Hay algo en la forma en que está dispuesto a humillarse ante vos con tal de hacer lo que sea necesario para poder correrse que nunca falla en elevar tu pulso u obligarte a cruzar tus piernas en busca de un poco de alivio. 
• Te sentás en el borde de la cama o del sillón mientras él se arrodilla frente tuyo, mordiéndose el labio ansiosamente esperando tu siguiente órden. 
• “¿Te querés correr?” le preguntás con un tono que borda en lo casual, como si no fueran evidentes la notable -y seguramente dolorosa- erección dentro de su ropa interior y la desesperación que brilla en sus ojos oscuros. Sonreís cuanto asiente rápidamente con la cabeza. “Frotáte contra mí hasta acabar.” 
• En cualquier otra ocasión probablemente te hubiera hecho un puchero como protesta o te hubiera suplicado que le ofrezcas otras opciones menos bochornosas para conseguir su clímax. Pero cuando deseás complacer este capricho personal tuyo, te asegurás de tomarte tu tiempo para llevarlo a un estado de excitación sin retorno en el cual su único objetivo es correrse, sin importar si para conseguirlo debe perder su dignidad frente a vos y rebajarse a comportarse como un animal en celo. 
• Sin pensarlo dos veces, se sube a tu regazo y acomoda uno de tus muslos entre sus piernas. Apoya sus manos en tus hombros -la única parte de tu cuerpo que sabe que tiene permitido tocarte- y no pierde el tiempo en hacer movimientos tímidos o fingir vergüenza para empezar a frotarse contra tu muslo con desesperación. Suspira de alivio el segundo que su entrepierna hace contacto con vos. Percibís a la perfección el contorno de su miembro firme contra tu músculo y sentís cómo el calor que proviene de esa zona te empieza a afectar. 
• “Mirá lo que sos.” murmurás maravillada mirando hacia arriba para poder hacer contacto visual con él. Notás que sus mejillas se enrojecen aún más, casi dándole un aspecto febril, y sabés esto no es causado exclusivamente por el esfuerzo físico que está haciendo. 
• “Amor, tocáme, p-por favor.” te ruega entre jadeos luego de varios minutos de haber comenzado, apoyando su frente delicadamente contra la tuya. Vos te relamés los labios con hambre, incapaz de poder apartar tu vista de la visión frente a vos. Te preguntás fugazmente si siempre tuviste este lado sádico del cual nunca fuiste consciente y llegás a la conclusión de que no, sólo Enzo es el único responsable que logra que este lado tuyo surja. 
• “No.” 
• Aprieta los labios con fuerza para evitar que un lloriqueo de frustración escape de sus labios, pero cuando ve tu mirada de advertencia automáticamente deja que su boca se abra y un sonido que podría considerarse un gemido obsceno mezclado con un sollozo resuena en la habitación. El agarre en tus hombros se vuelve más firme, volviéndose casi doloroso. 
• Sus embestidas empiezan a disminuir la velocidad para volverse más fuertes contra tu cuerpo, indicio de que se está acercando a su orgasmo e inconscientemente está tratando de alargar lo más que pueda la placentera sensación. Totalmente ido, sus párpados se cierran y deja caer su cabeza ligeramente hacia atrás, sus labios apenas entreabiertos.
• “¿Vas a acabar, lindo?” le preguntás y asiente como puede con la cabeza. Agarrás la suave superficie bajo tu cuerpo y apretás con fuerza, tus uñas arañando la tela en un intento de controlarte. “Miráme cuando te corrés.” le ordenás. Vuelve a conectar su mirada con la tuya y sus embestidas retoman el mismo ritmo acelerado de antes. Son sólo segundos los que le toma a Enzo para correrse con un gruñido que termina convirtiéndose en un gemido roto, mientras su cuerpo empieza a sacudirse con violencia. Sabés que está haciendo un esfuerzo inhumano para no volver a dejar caer su cabeza hacia atrás o cerrar los ojos.
• Cuando el movimiento de sus caderas se vuelve cada vez más lento hasta detenerse por completo, permanece inmóvil sobre tu regazo. Tu vista baja a su entrepierna, donde te encontrás con la evidencia de su clímax oscureciendo la tela de sus boxers. No le das tiempo a que recupere el aliento. Agarrás su rostro con una mano, lo besás con fuerza -casi con violencia- y no dudás en meter tu lengua en su boca, haciéndolo lloriquear contra tus labios. Le mordés el labio inferior y tirás ligeramente.
• “Sos hermoso, ¿sabías?” le decis una vez que lo soltás, tus palabras apenas son audibles debido a la falta de aliento por culpa del beso. “Te amo.” Enzo, súbitamente tímido, te abraza y oculta su rostro en tu cuello, grabando esas mismas palabras en tu piel mientras vos le acariciás el pelo con movimientos suaves. 
• En cuanto a juguetes yo creo que Enzo es de mente abierta y está dispuesto a probar todo aunque sea una vez para decidir si le gusta o no (aunque en la mayoría de los casos le va a gustar más el hecho de que seas vos la que esté usando el juguete con él que el juguete en sí).
• Creo que un no por parte de Enzo podría ser el heavy degrading kink. Si lo usás en él un poco durante sus castigos no tiene problema (al fin y al cabo sabe que es parte del castigo y muy dentro suyo sabe que no creés en las palabras hirientes que le estás diciendo en ese momento), pero si lo llegás a usar fuera del contexto de un castigo creo que tus palabras podrían llegar realmente a lastimarlo emocionalmente (soft boy, please do not harm). Lo mismo aplica pero con vos. No puede referirse a vos con nombres degradantes, simplemente no le nace. Por algún motivo no lo imagino muy emocionado con el roleplay, y los tríos tampoco son una opción (no piensa compartirte con nadie, ni siquiera por una sola ocasión).
• Las vendas y todo aquello que amortigüe los sonidos provenientes de Enzo son un rotundo no por tu parte. Querés ser capaz de poder escuchar cada sonido que se escapa de sus labios, y también poder presenciar cómo su mirada se vuelve cada vez más desenfocada debido al placer. En el caso de que se encuentren en una situación donde ser silenciosos es más una obligación que una opción, pero Enzo es incapaz de contener los sonidos obscenos que salen de sus labios, siempre podés meter tus dedos en su boca para silenciarlo. 
• A estas alturas me parece que ya quedó más que claro, pero Enzo es ruidoso cuando coge y es algo que frecuentemente lo hace (o lo hacía) sentir inseguro de sí mismo. 
• Cuando ustedes comenzaron a compartir momentos cada vez más íntimos a medida que su relación progresaba, notaste cómo Enzo se mordía los labios o los apretaba con el objetivo de no hacer ningún ruido, con la excepción de algún gruñido que producía de vez en cuando. No te gustó para nada notar ese pequeño detalle ya que amabas su voz grave y estabas ansiosa por poder escuchar qué tipo de sonidos indecentes podía llegar a hacer. 
• Te preguntaste si esto se debía a causa de una mala experiencia previa con alguna de sus ex parejas o simplemente era producto de una timidez por su parte que desconocías.
• “Te quiero escuchar, Enzo.” le dejaste bien en claro un día mientras usabas tu boca para llevarlo al borde del orgasmo, pausando tus movimientos por completo cuando sentías que estaba a nada de correrse, solamente para volver a empezar. “Si veo que te volvés a morder los labios para no hacer ningún ruido, me voy a ir de la habitación y te voy a dejar con la pija al palo.” tu tono de voz era demasiado casual en comparación con la amenaza que le estabas dando. “Y pobre de vos si me llego a dar cuenta de que te tocaste sin mi permiso.”
• En ese momento no pudiste adivinar qué fue lo que hizo que temblara bajo tus manos, si fueron tus crudas palabras o el hecho de que habías vuelto a envolver su miembro con tu boca y a retomar el mismo ritmo que habías estado usando durante los últimos veinte minutos.
• El primer gemido que escuchaste salir de su boca fue directo a tu entrepierna, empeorando la molestia que se había hecho presente en esa zona desde que comenzaste a degustarlo. Emitiste un sonido de apreciación al escucharlo. Las vibraciones alrededor de su miembro hicieron que otro gemido, un poco más alto que el primero, resonara en toda la habitación. 
• No te tomó más de unos pocos minutos hacer que se corriera, tu nombre saliendo de sus labios en forma de un prolongado gemido. Observabas como trataba de calmar su agitada respiración que escapaba por su boca entreabierta y sus ojos parcialmente cerrados estaban clavados en el techo. Gateaste hasta que sus rostros se encontraran a la misma altura. Sus cansados ojitos marrones te miraron con reverencia. 
• “No vuelvas a callar nunca más esos sonidos hermosos que hacés, ¿me escuchaste?” le susurraste contra sus labios, para luego darle un ligero beso cuando lo viste asentir con la cabeza. 
• Te tomó un buen tiempo pero eventualmente lograste domesticarlo a tu gusto, consiguiendo que se olvidara de aquellas inseguridades que tanto lo atormentaban. Si hay días en que aquellos pensamientos negativos vuelven a querer plantarse en su cabeza, tus reacciones fisiológicas provocadas por sus gemidos y lloriqueos de placer siempre le van a servir de recordatorio de que realmente te fascina lo ruidoso que es. 
• Debido a las exigencias de su ocupación laboral, hay ocasiones donde Enzo se ve obligado a viajar a otras partes del mundo por un período de tiempo considerable. Si bien hablan casi todos los días en los que se encuentran separados, hay noches en las cuales Enzo te llama -siempre teniendo en cuenta la diferencia horaria para no llamarte en un momento inoportuno para vos- desesperado por escuchar tu voz (prefiere llamarte por encima del sexting). 
• Cuando está realmente desesperado, no hace falta que diga muchas palabras para que seas capaz de detectar el ligero temblor en su voz cuando te pregunta cómo estás o te cuenta sobre su día. 
• Ese tipo de llamadas -o videollamadas en caso de que la diferencia horaria entre ustedes no sea mucha y ambos tengan la posibilidad de compartir la noche juntos- son de esperarse cuando Enzo viaja porque no importa dónde se encuentre, las mismas reglas todavía aplican (sobre todo la que le prohíbe tocarse sin tu permiso).
• En algunas llamadas empezás dándole órdenes simples. De qué prenda se tiene que deshacer, cómo posicionarse en la cama del hotel donde se está hospedando, qué parte de su cuerpo tiene que acariciarse mientra él se imagina que son tus dedos y tus manos las que lo están tocando y no las suyas, el ritmo de sus caricias (primero con toques suaves y lentos porque sabés que eso lo frustra y sólo retrasa lo que realmente necesita). 
• “Por favor amor, ¿me puedo tocar?” “Mmm, no, todavía no.” “Pero-” “Enzo.”
• Si notás que la necesidad en su voz es realmente verdadera, simplemente permitís que sea él el que hable, dejando que te cuente cuánto desearía que estuvieras en su cama junto a él y detallándote todo lo que le gustaría hacerte. 
• “Necesito tenerte acá conmigo,” te murmura con su voz grave quebrándose ligeramente. “Extraño tu sabor, n-necesito volver a tener mi cara enterrada entre tus piernas y no salir de ahí hasta que deje tus piernas temblando de t-tanto correrte.” escuchás el inconfundible y obsceno sonido de su mano deslizándose fácilmente por su miembro gracias al líquido preseminal, provocando que el hormigueo entre tus piernas empiece a ser realmente molesto. “¿S-Sabés lo que duele estar todo el día con la pija parada y no p-poder tocarme?” te reclama con un hilo de voz. 
• Si estuvieran en cualquier otra situación te encargarías de ponerlo en su lugar por el tonito con el que te está hablando, pero dadas las circunstancias en las que ambos se encuentran, se lo dejás pasar. Por ahora.
• “La cogida que te voy a dar cuando vuelvas, bebé.” le prometés, prácticamente imaginándote todo lo que le vas a hacer el segundo que lo tengas nuevamente a tu lado (sumado al castigo que le vas a dar si insiste con esta actitud desubicada). Te mordés el labio cuando un gemido ronco suena directo en tu oído. 
• Si en ese momento te encontrás disponible te unís a él desde tu propia cama. Pero si no es el mejor momento para vos, te asegurás de que la llamada de Enzo no haya sido en vano. Al fin y al cabo, esta es su recompensa por haber sido un buen chico para vos al haberte llamado para pedir tu permiso en vez de haberse tocado sin decirte nada. 
• Cuando se corre y los efectos del orgasmo terminan por desaparecer, lo golpea la familiar ola de emociones que suele abrumarlo cuando se encuentra lejos de vos por mucho tiempo. 
• “Te extraño.” te confiesa con su voz ahora más bajita y carente de la necesidad y deseo con la que te había estado hablando hace tan sólo unos minutos. Te lo podés imaginar abrazando su almohada en busca de consuelo, y esta imagen hace que tu corazón se encoja un poco. 
• “Ya sé amor, yo también te extraño. Mucho.” le asegurás. “Ya quedan pocos días para que vuelvas.” le recordás con la esperanza de que tus palabras lo puedan sacar de aquel estado melancólico. Darías cualquier cosa para poder estar junto a él acariciando su pelo con movimientos lentos hasta que se quede dormido en tus brazos. No podés evitar que las comisuras de tu boca se eleven cuando escuchás solamente un leve sonido de afirmación como respuesta. “Estás cansado, lindo. Andá a dormir.” 
• “Bueno,” sabés que debe estar realmente agotado cuando no te pide que sigan hablando unos minutitos más. “Mañana hablamos.” te promete, el sueño haciendo que arrastre un poco sus palabras. “Te amo mucho.”
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slowy-love · 1 month
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Fue un verdadero placer conocerte; créeme que estoy profundamente agradecida con la vida por haberte encontrado.
Sé que, aunque hubo momentos complicados, hoy prefiero quedarme con los más bello. Es tiempo de seguir caminos distintos, es momento de distanciarnos, es hora de soltarnos y dar las gracias por el amor tan intenso que compartimos juntos.
Y créeme que mi corazón siempre te recordará como lo más hermoso que he tenido, y quiero que sepas que en él te llevas mi cariño. Serás ese amor que sera difícil de aceptar que ya no estas, me dolerá pero mi alma se que se va a recuperar.
Te digo adiós, deseo que disfrutes plenamente de tu vida y que vuelvas a amar.
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flan-tasma · 6 months
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Hello, could you do some kissing scenarios with Furina?
I love your writing so much and hope you are having a great day
💖~ Furina is so pretty that I couldn't help but get excited when I saw this request. Thank you very much for your nice words and I hope you have a wonderful day too!
Warning: Nope now💖, GN!Reader | English is not my native language, so if I have made any mistakes in the translation, I am open to corrections | Content in spanish and english!
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Spanish:
Furina jamás demostró el interés y el amor que sentía por ti antes, cuando tenía su papel como Arconte Hydro y se veía obligada a mantener una imagen gloriosa y política. Ella creía que una pareja amorosa sería difícil de mantener por su posición, por eso nunca hizo nada oficial ni dijo nada, pero siempre te lo demostró. Te mantenía a su lado, se aseguraba que tuvieras una vida cómoda y tranquila, te cuidaba mucho porque te amaba.
Cuando ya no era necesaria para ser la regente de la nación, por fin pudo respirar tranquilamente. Se tragó todo el aire que no pudo respirar en quinientos años y sintió que sus hombros caían por el cansancio, pero te miró a su lado, presenciando a los ciudadanos de Fontaine sobrevivir a lo que podría haber sido su muerte, y la miraste también. Puede que haya parecido asustada en un inicio, pero sus dedos que sostenían tus codos solo te decían que estaba pensando en todo lo que estaba pasando, y cuando la viste sonreír entendiste que no era algo necesariamente malo.
Te sostuvo, por fin, en sus brazos y te abrazó, se tomó un largo minuto para finalmente memorizar tu aroma que antes solo se había permitido de manera accidental. Se bebió tu perfume y la textura de tu cuerpo bajo tu ropa, se permitió ver tu rostro de cerca, con todos tus lunares y marcas, y acarició tu mejilla antes de besarte como siempre había hecho en sus sueños. Sus ojos lagrimearon, como alguien que come después de haber pasado hambre por años, y casi se suelta a llorar más cuando le correspondiste. Ese día había aprendido que le gustaba besarte más que a nada en el mundo.
Como humana, Furina amaba la tranquilidad de una vida doméstica. Le gustaba principalmente aprender de ti a “ser humana”, y entre esas miles de lecciones resulta muy difícil para ella no simplemente acercarse y buscar un nuevo beso. Como las costumbres son difíciles de dejar morir, siempre tiene algún comentario astuto con el que puede reclamar tus labios, como simplemente excusarse porque tú querías el beso primero y ella es tan amable que te lo concedió.
Un beso de buenos días y de buenas noches, y un beso se transforma en dos, luego en tres y al final ya no recuerdas cuantos besos compartieron, solo sienten la felicidad de la compañía. En secreto, disfruta más cuando tú te acercas a besarla, sin que ella te lo pida o sin tener una obligación. La amas porque así lo dice tu corazón, y Furina no puede evitar sentir su corazón derretirse ante la idea de que la ames hasta el punto en que aceptas su cercanía e incluso tú la inicias. Tu aceptación, tu reconocimiento es algo por lo que podría correr hasta el fin del mundo por tratar de conseguir, pero tú se lo das sin pedir algo más a cambio que no sea lo mismo. Ella está de acuerdo.
Es una romántica empedernida. Ha pasado mucho tiempo imaginando y fantaseando miles de escenarios románticos contigo hasta que grita contra la almohada y se contiene, está muy feliz de que no tiene que esconder su amor, por lo que trata de siempre cumplir con alguna de sus ensoñaciones o las tuyas; en un pícnic, mientras sirven té y pasteles, te roba un beso corto antes de que sirvas sus porciones; durante la hora del té, le gusta cuando te ofrece algo de comer, te lo quita y te besa en su lugar; o bajo la lluvia, cuando en vez de correr a refugiarse, bailan y levantan gotas de agua antes de besarte mientras te hace hacia atrás. Parece que no se queda sin ideas, y tal vez esa es la mejor parte.
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English:
Furina never showed the interest and love she felt for you before, when she had her role as the Hydro Archon and was forced to maintain a glorious and political image. She believed that a loving partner would be difficult to maintain because of her position, that's why she never made anything official or said anything, but she always showed it to you. She kept you by her side, she made sure you had a comfortable and peaceful life, she took great care of you because she loved you.
When she was no longer needed to be the regent of the nation, she was finally able to breathe easy. She took all the air she couldn't breathe in five hundred years and felt her shoulders droop from exhaustion, but she looked at you next to her, witnessing the citizens of Fontaine survive what could have been the death of her, and you looked at her too. She may have seemed scared at first, but her fingers holding your elbows only told you that she was thinking about everything that was happening, and when you saw her smile, you understood that it wasn't necessarily a bad thing.
She finally held you in her arms and hugged you, taking a long minute to finally memorize your scent that she had only allowed herself accidentally before. She drank in your perfume and the texture of your body under your clothes, she allowed herself to see your face up close, with all your moles and marks, and she caressed your cheek before kissing you like she had always done in her dreams. Her eyes watered, like someone who eats after being hungry for years, and she almost burst into tears when you reciprocated. That day, she had learned that she liked kissing you more than anything in the world.
As a human, Furina loved the tranquility of a domestic life. She mainly liked to learn from you how to “be human”, and among those thousands of lessons, it is very difficult for her not to simply reach out and look for a new kiss. Since customs are hard to let die, she always has some sly comment with which she can claim your lips, like simply making excuses because you wanted the kiss first and she is so kind that she granted it to you.
A good morning kiss and good night kiss, and one kiss becomes two, then three and in the end you no longer remember how many kisses you shared, you only feel the happiness of the company. Secretly, she enjoys it more when you approach her for a kiss, without asking you or having an obligation. You love her because your heart says so, and Furina can't help but feel her heart melt at the thought of you loving her to the point where you accept her closeness and even initiate it. Your acceptance, your recognition is something she could run to the end of the world to try to get, but you give it to her without asking for anything else in return that is not the same. She agrees.
She is a hopeless romantic. Has spent a lot of time imagining and fantasizing thousands of romantic scenarios with you until she screams into the pillow and holds back, she is very happy that she doesn't have to hide her love for you, so she always tries to fulfill some from her daydreams or yours; at a picnic, while serving tea and cakes, she steals a short kiss from you before you serve her portions; during tea time, she likes it when she offers you something to eat, she takes it from you and kisses you; or in the rain, when instead of running for cover, you dance and raise drops of water before kissing you while she pulls you back. She doesn't seem to run out of ideas, and maybe that's the best part.
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Nada vuelve a ser lo mismo dos veces.
Ni el Amor.
Ni las Personas.
Ni la Vida ...
Con el tiempo todo pasa.
Tos cambian
Nada ni nadie es lo mismo...
He visto, con algo de paciencia, a lo inolvidable volverse olvido, y a lo imprescindible sobrar, el amor en odio y resentimiento.
Al final todo termina siendo difícil...
Pura maldad ❄️
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