#conversación en la red

[blissy91]

Herramientas y consejos básicos para sobrevivir en redes sociales (Twitter, Instagram, Telegram y Twitch).

Esto es una transcripción del hilo que he hecho originalmente en Twitter y que puedes consultar en este enlace https://twitter.com/blissy/status/1465652088227119110 

👉En este post hablaré brevemente de:

🔹Bloquear

🔹Silenciar/limitar

🔹Mensajes privados

🔹Filtros

🔹Amigos/as

🔹Otros consejos y estrategias

🔹Twitch

⚠️ Bloquear: 

Ya he explicado numerosas veces las ventajas de bloquear frente a silenciar o ignorar, así que aquí solo recordaré herramientas de bloqueo masivo, una vez más. Las dos primeras herramientas bloquean por followers o followings de una cuenta, la segunda a los usuarios que han dado like a un tuit.

 ♦️Twitter block chain (extensión)

♦️Red Block (extensión)

♦️Nuke a tweet ➡️megablock.xyz/

Si vuestra lista de bloqueados no es infinita como la mía, podéis compartir vuestra lista de bloqueados exportándola. La herramienta externa que usé en el pasado ya no está activa y solo conozco la oficial de Twitter; aquí enlace con más info al respecto e instrucciones.

https://blog.twitter.com/official/en_us/a/2015/sharing-block-lists-to-help-make-twitter-safer.html

En Instagram el tema está peor, porque hasta donde sé no existe de momento forma de bloquear de forma masiva, solo de forma manual. Eso sí, aunque no sabemos los criterios que se usan (IP, dispositivo…), ahora cada vez que bloqueamos podemos darle a la opción de bloquear potencialmente, como veis en la imagen de ejemplo.

 ⚠️ Silenciar

En Twitter hay varios tipos de “silenciar”:

-          Silenciar usuario

-          Silenciar conversación

-          Silenciar hashtags y palabras

Y, desde hace poquito, está la opción de ocultar respuesta si es un reply a un tuit o hilo vuestro (al darle os pregunta si también queréis bloquear a ese usuario).

En Instagram tenemos las opciones que llaman: restringir, ocultar y la más reciente, limitar. La primera restringe los comentarios públicos a un usuario, de manera que solo los ves tú y ese usuario (y sus DMs también quedan ocultos). La segunda oculta tus stories a un usuario concreto. La tercera es especialmente útil en caso de una ola de acoso y si no queremos por el motivo que sea ponernos candado. En las capturas se entiende bastante bien cómo funciona.

⚠️Mensajes privados.

Como ya sabréis, en Twitter podéis capar los DMs a solo mutuals, y es lo que yo encarecidamente recomiendo. Si los tenéis abiertos, los mensajes de no mutuals aparecerán como solicitudes, pero sabed que una vez permitís ese mensaje una vez aceptas un MD de alguien no puedes volver a restringirlo a no ser que le bloquees (lo mismo con Instagram, además sale a la otra persona que has abierto/leído el mensaje).

 En Instagram podéis capar DMs a solo mutuals, como ya adelantaba antes. Por otra parte, podéis no permitir comentarios/mensajes privados tanto en las stories como en los posts fijos (o caparlo solo a mutuals). También en la opción de controles en comentarios podéis bloquear comentarios de alguien concreto, como veis en la captura.

⚠️Filtros

Esto solo para Twitter de momento, y va bastante relacionado con la herramienta de silenciar. Lo tenéis en configuración de cuenta y lo podéis ir cambiando según vuestra situación. Básicamente dejáis de ver respuestas de determinadas cuentas con equis características y, aunque suele dar bastante paz mental recordad que si os amenazan de forma seria desde una de estas cuentas no os vais a coscar.

Por ello, y según la gravedad de vuestra situación, aquí entran en juego los/as amigos/as. Con algunas de estas herramientas que he citado no podéis detectar si os amenazan de forma real muchas veces.

Para ello, la situación ideal es tener a alguien muy de confianza haciendo un rastreo/seguimiento periódico de lo que os dice la gente (mencionando, sin mencionar, usando motes para referiros a vosotras, etc) para poder detectar e ir a denunciar en caso de amenaza seria. La columnas de Tweetdeck son bastante útiles para esto.

⚠️Otros consejos (pero no menos importantes)

❗️❗️❗️❗️Cuidado con las fotos que publicáis, especialmente mujeres y activistas:

                ❌ No grabéis o mostréis vuestras ventanas/balcones➡️ os pueden geolocalizar

                ❌ No publiquéis dónde estáis en el momento que estáis, sobre todo si es un sitio reconocible público y no seguro (mejor publicar la foto después)

                 ❌ No publiquéis fotos de sitios que frecuentáis y que sean reconocibles (ej. gimnasio)

 ❗️❗️❗️❗️contraseñas y seguridad de vuestras cuentas:

                - Usad doble autenticación

                - Contraseña muy segura y/o gestor de contraseñas como KeePass

                 - Cuidado con los engaños para robar contraseñas y cuentas

❗️❗️❗️❗️Otros:

🔸Tener cuentas candado/privadas para redes de confianza

🔸Poner candado en momentos de acoso o mayor exposición/hipervigilancia

🔸 No mostrar la ubicación de tus tuits

🔸Usar la herramienta de Twitter de que no se pueda contestar al tweet si creéis que puede ser una publicación polémica

 ❗️❗️❗️❗️Con agresiones, amenazas:

🔸Certificar agresiones: E-garante (es gratuito certificar dos tuits al día por cuenta de correo electrónico) https://www.egarante.com/eg-social-certificacion-redes-sociales/

🔸Haceos con el control de cuentas si sois un poco visibles y especialmente si tenéis un nick por el que os conocen. Esto significa pillar usuarios con variaciones de vuestro alias en las diferentes plataformas para que no os puedan suplantar fácilmente.

Por ejemplo, la L minúscula puede confundirse con un 1, la o mayúscula por un 0, etc. Truco: Gmail no distingue entre cuentas de correo con puntos.  Es decir, le puedes decir a Twitter que tu correo es sandragarcia@gmail.com, Sandra.garcia@gmail.com y sand.ragarcia@gmail.com. Te llegarán a tu correo esos mensajes para verificar tus diferentes cuentas sin tener que hacer múltiples correos para esto.

⚠️Y ya por último y fuera de Twitter e Insta:

➡️No uséis en Telegram un @ que coincida con vuestro Twitter, Instagram o nick reconocible.

➡️Si usáis Whatsapp, activad la opción de que solo puedan ver vuestra foto contactos que tengáis en la agenda.

 ⚠️Para Twitch:

Lo primero de todo: clicamos en nuestro avatar arriba a la derecha en Twitch  configuración  seguridad y privacidad.

Ahí vamos a revisar varias cosas.

 Importante tener activadas: la autenticación en dos pasos. 

 bloquear susurros de desconocidos. 

 bloquea la recepción de regalos en canales que no sigues .

Lo de la A2P evidentemente es para que sea más difícil que os roben la cuenta, lo de bloquear susurros de desconocidos para que no os envien mensajes potencialmente desagradables y lo último... para que no os pase esto... (sí, además del tiempo les sobra la pasta).

También importante: la herramienta de bloqueo está bastante escondida en Twitch. Tenéis que introducir el nombre de usuario de forma manual aquí (también dentro de configuración ➡️seguridad y privacidad). Bloquear además hace que no os salga ese canal en portada ni sugeridos.

Nos vamos a panel de control del creador➡️configuración➡️stream➡️raids. Para evitar hate raids os recomiendo tocar esos parámetros. Activar la de 'compañeros de equipo' y 'canales que sigo' creo que es una buena medida de protección.

Siguiendo en el panel de control del creador➡️configuración➡️moderación➡️bloquear hipervínculos. Recomendado tener esto también activado (vuestros moderadores, vips y admins siguen pudiendo poner enlaces). Y el retraso en el chat puede ayudar también a los mods.

No voy a entrar en el tema de los controles de automod, no soy nada experta y he de trastear más, pero añadir términos clave (tipo f3minaz1) puede ser también de ayuda. Al final del hilo os dejaré un enlace con una guía muy completa al respecto.

Siguiendo en el panel de control del creador➡️configuración➡️moderación  ➡️privilegios del canal. Recomiendo mínimo tener activada la verificación de correo electrónico. Si queréis seguridad extra, podéis añadir la del teléfono (totalmente o para algunos, como veis en la imagen).

En el mismo apartado, recomiendo tener desactivado lo de la solicitud de anulación de veto. Y luego, también bastante clave, lo del modo seguidores. Depende de vuestro caso, situación, momento, etc podéis cambiarlo, pero entre 10 y 30 minutos creo que está bien.

Y hasta aquí lo que considero más básico e importante para protegerse en Twitch. Para una guía completa os recomiendo esta web: https://gameshotline.org/hateraids/ 

Si queréis más detalles sobre moderación en Twitch, os recomiendo este hilo de @irenenaruba en Twitter.

 Si os ha parecido útil, compartid para que llegue a más gente

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Aclarar que no soy experta en ciberseguridad, tan solo he recopilado consejos y herramientas que he aprendido a la fuerza, por desgracia. Os dejo en los siguientes tuits enlaces con fuentes que os pueden ser de utilidad y que profundizan mucho más en ciberseguridad.

•      https://gendersec.tacticaltech.org/wiki/index.php/Manuals_with_a_gender_perspective

•       https://onlinesafety.feministfrequency.com/es/

•       https://donestech.net/files/kitviolencies2019_cast.pdf

•       https://akelarreciberfeminista.noblogs.org/category/kits/

•       https://ciberseguras.org/

•      https://www.academia.edu/32199540/Violencia_contra_las_mujeres_en_red_vigilancia_y_el_derecho_a_la_privacidad

•       https://crashoverridenetwork.tumblr.com/post/114270394687/so-youve-been-doxed-a-guide-to-best-practices

•       http://www.crashoverridenetwork.com/

•       https://acoso.online/ar/4-resiste-y-toma-control-sobre-la-tecnologia/

•       http://lab.pikaramagazine.com/violenciasdegeneroenlinea/

•       https://www.youtube.com/watch?v=pUSctMLLNUE

•       https://myshadow.org/es

•       https://securityinabox.org/es/

•       https://ssd.eff.org/es

•       https://www.youtube.com/watch?v=7Alen-p6_ak

[laupassa]

Si no posteo, existo?

Estuve tres dias encerrada en casa, con faringitis y muy intencionalmente aislada y en silencio nivel vipassana para darle descanso a mi garganta y poder recuperarme.

Fue un fin de semana bellísimo, fresco y otoñal, soleado, lleno de naranjas y azules, con festivales musicales multitudinarios, cafecitos de autor, juntadas familiares, algunos fuegos urbanos, vinos y festejos de cumpleaños. Lo sé porque lo vi en las fotos e historias ajenas en mi teléfono.

Me estoy yendo a dormir y le pido al teléfono me de un shot más de "información".

Me doy cuenta, o sea ya lo se con mi mente, pero recién lo sintió mi cuerpo también muy claramente, lo intoxicada y afectada que estoy por ese consumo automático.

Al final de los tres dias de descanso y recuperación, ademas de estar mejor de la garganta, concluyo gracias a la evidencia que me provee instagram que no tengo vida, que mi vida es una mierda, que es aburrida, que estoy perdiendo en alguna carrera invisible, que nada de lo que tengo o hice o hago vale, que lo de lxs demás es mejor.

Veo en el feed de una amiga su posteo de una experiencia en la que participé, otra que provoco una conversación en twitter a raíz de algo que hablamos hace unos días, otra que por no aclararlo se adjudicó algo que dije yo… estas tres muestras al hilo me provocaron y por eso escribo ahora.

A quien o a que le estoy dando el poder de contarme que me pasa, de que se trata mi vida, quien soy y que valoro y que es lo valioso en mi?

Si no aparezco en IG, si no lo muestro, si no me likean, si no me retwitetean no existo?

Me voy a dormir con bronca de sentirme así, de sentir que si no lo miran no existe. Quiero recuperar o regenerar la sensibilidad para percibirme más allá de la triangulación que me devuelve mi proyección en esa pantalla adictiva.

(imposible escaparle al hecho de que estoy publicando esto en una red social... quiero conexión, quiero ser vista y leída, y ojala generar algo en otrx, pero no quiero hacerlo o medirlo con la vara que se impone en forma y en ritmo tan bestialmente en otras plataformas)

[gubler-me-up]

Lost in Translation

Request(s): Hey :) Can i make a Spencer request? Something like that episode in Mexico, with a bilingual reader please <3 Like a trip and he realizes that the reader can speak Spanish, he's kinda mesmerized and she helps the team to get more information about the unsub

hey beautiful :) could u write something (literally anything) where the reader speaks another language or like they have an australian accent or smthg and they have to like translate for the team and spencer just thinks it’s the hottest thing in the world and then the reader gets real worked up and starts yelling in the other language and spencer is just like skdkdmend,,,,u don’t have to if u don’t wanna but like i love u sm ur amazing 

A/N: Thanks for the first request @cryingforwill​ and shout out to the anon who sent the second request! Can y’all believe this is my last fic of 2020? Being posted early? New year, new me (maybe)! Thank you to everyone who has been reading and supporting my work for the last four months of 2020 you literally ROCK 🗣 btw I am by no means bilingual (maybe a lil French but that’s it) so all the Spanish being spoken in this fic is straight from Google Translate so pls forgive me if it doesn’t translate properly and if you’re like me and don’t know Spanish pls have Google Translate on deck while reading

Couple: Spencer Reid/Fem!reader

Category: Fluff

Content warning: Swearing, semi-nudity, mentions of violence 

Word count: 2k

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It was rare that the team travelled abroad for a case but when an unsub was on the run to Mexico they had no choice to follow their tracks. The team landed in Mexico within a day of finding out the unsub had fled. They didn’t waste time scoping out places the unsub could possibly be according to eyewitness reports.

Unfortunately for Spencer he got stuck with surveilling at the beach with Morgan in the hot sun. They made sure to dress for the part by wearing swim trunks and sunglasses. Well, that’s what Morgan was wearing. Spencer opted to wear a white t-shirt,  brown khaki pants and a pair of black converse.

Morgan had begged him to change into something else so he wouldn’t stick out like a sore thumb. Spencer insisted that if he just stayed on the outskirts of the beach he would look like a tourist sightseeing. The explanation earned him an eye roll and look of disappointment from Morgan.

No matter the amount of disappointment Morgan felt, the surveillance plan went as planned. Morgan went on the beach to blend in with locals and tourists so he could ask people if they had seen the unsub as well as scoping the area for him. Spencer stayed just at the border of the beach surveilling the area. Whenever someone would pass by he would ask them if they had seen the unsub.

From a handful of people ignoring him to them just giving him a weird look, he felt as if he actually did look a bit weird in his attire. He sighed and decided it might be best if he did some surveillance from the car with his pair of binoculars. Before he could turn around to leave, a volleyball hit his feet.

He looked down and picked it up. He had no idea why he picked it up considering he didn’t know who to give it to. Even if he did he wouldn’t embarrass himself trying to hit it back to the person it belonged to. Volleyball was apart of his long list of sports he wasn’t good at.

“Hey, sorry, that’s mine.”

He looked in the direction of where the voice was yelling. He raised his eyebrows in surprise as he saw a gorgeous woman running towards him. He tried to be respectful and not stare for too long considering she was wearing a bikini. He didn’t want her to think he was a creep or even worse, the unsub.

She smiled as she made her way right in front of him. She held out her hands for him to give her back the ball. He looked down at her hands and then at his. He silently went “oh” as he realized he still had the ball in his hand.

“Sorry,” he said as he handed her the ball.

She looked him up and down with a questionable look. She looked back at his face. Spencer for sure thought she was going to treat him like the rest and pretend he just wasn’t there. To his surprise she smiled at him.

“¿Eres de eta zona?” She asked.

He shook his head. “No, no lo soy.”

She giggled. “Por la forma en que mataste tu sentencia, puedo decir que eres de los Estados Unidos.”

He raised an eyebrow. “Supongo que eras de la zona.”

She nodded her head. She reached into her bikini top. He watched carefully to see what she was about to pull out. He then realized there’s no way she could be hiding a weapon in her bikini top so he strayed his eyes away from her breast.

She saw how flustered he had become and laughed at how his pale face turned red. She pulled out her I.D. card to show him who she was. He looked at her surprised when he read her identification.

“My name’s Y/N Y/L/N. I’m originally from America myself but I opted to work for the Policía Federal after serving my time as a special agent at the FBI California headquarters. I’m here to be of assistance to you and your team, agent,” she said.

“How did you know I was-”

“My team was informed by your unit chief, Aaron Hotchner, that an unsub had crossed over to our borders, so we know everyone on your team. Also, no one dresses like that unless they’re undercover.”

Spencer looked down at his attire. He guessed Morgan had a valid point of him sticking out. She laughed and grabbed his hand to escort him onto the beach. He hesitantly held back.

“I hate sand in my shoes,” he complained.

“Well, you should have worn sandals. Aren’t you the genius of the group? Dr. Spencer Reid? How come you didn’t think of that?” She questioned as she yanked him onto the beach.

Spencer trailed behind her unwillingly. He could already feel the sand seeping into his shoes already. He would have been more upset but he was entering the beach for some reason Y/N hadn’t explained to him yet. Since she was on their side, there wasn’t a direct reason not to trust her.

“I wasn’t going to go onto the beach. My partner, Derek Morgan, is surveilling the beach,” he explained.

“The beach is the best part to surveil though. Seems to me you got the short end of the stick,” she said.

“It’s the stick I chose and I’m fine with it,” he said.

She giggled. “Tonto, tonto chico.”

“Uh, gracias?”

She led him over to an area where there was a blue beach towel set up with a cloth bag on it. She let his hand go and kneeled on the towel. He looked at her strangely as he watched her ruffling through her bag. She pulled out a bottle of sunscreen.

“Can you apply sunscreen to my back please?” She asked.

“I-I don’t know if-”

“Do you want to blend in or not, khaki pants?”

He looked down at his pants before looking back at her. She reached the bottle out to him and he didn’t feel as if he had a better option so he took it from her. She smiled as she scooted down to make some room for him to kneel behind her.

He went behind her and kneeled. He opened it up and squeezed a good amount on his hands. He rubbed his hands together before he started applying it to her lower back. He had to admit her skin was the softest thing he had ever touched.

“Crees que puedes seguirme si hablo español durante esta conversación?” She asked

“Intentaré,” he said.

“Excelente. Tengo un hueso personal que elegir con su sospechoso,” she said.

“Que hizo…Wait, what are you doing?” He asked.

Y/N reached one hand to the back of her bikini top and untied it. She held the front of it with her free hand so her breasts wouldn’t spill out, flustering Spencer anymore than he already was. She looked back at him with a smile as she saw him turn red again.

“You need to get the whole of my back,” she said.

“Uh…I guess?” He said.

“You sound unsure. Wait until you have to do the front,” she said.

“I what?” He choked.

“I’m kidding. We’ll save that possibility for another time,” she said with a wink before turning her head.

Spencer’s mouth was gaped open but he couldn’t find the words to say back to her. He honestly didn’t know what would be the appropriate way to respond to her. If Morgan was there he probably would have been even more disappointed by the way he was acting around Y/N.

“Your unsub, Eric Brown, almost killed my partner,” she said.

“I heard,” Spencer softly said.

“Ese hijo de puta nos sorprendió. Le disparó a mi compañero en el cuello y si no estuviera allí para evitar que se desangrara, habría estado muerto,” she said, gradually becoming louder in her tone.

“Lamento que tu y tu pareja hayan sido víctimas de él,” he said.

“¿Ser víctima de él? Si vuelvo a ver a ese hijo de puta voy a hacer que me caiga víctima,” she yelled.

He let her have her little moment because he knew how upsetting being in that type of situation could be. Even though he was upset for her, he couldn’t help think her yelling was tantalizing. It didn’t help he was enjoying rubbing her back with sunscreen and feeling her soft skin over and over again.

“Estamos aquí para ayudar en todo lo que podamos. Queremos hacer justicia a su pareja y a las otras víctimas de Brown,” Spencer said.

She turned around to look at him with a smile. He smiled back at her as he took his hands off of her. She looked down at the string that dangled at her side and then looked back at him. He didn’t need her to say anything and grabbed both strings on both sides of her to tie it around her back.

“Eres muy dulce, Spencer. Le devolveré el favor diciéndole esto: escuché de un informante hoy que Brown intentará esconderse en un carro de cargamento de drogas que se dirige a Cuba,” she said.

“Really?” He asked in shock.

“Sí. The shipment leaves in six hours, but the dock isn’t too far from here. If my hunch is right, he isn’t staying too far from the dock,” she said.

“Reid.”

They both looked up to see Morgan walking their way. Spencer immediately got up and dusted the sand off his pants. Y/N also got up and picked up all of her belongings off of the ground.

“Morgan, I-uh…I know what this might seem like but I was-um.”

“Hi, my name’s Y/N Y/L/N. I’m with the Policía Federal. I was informing agent Reid about Brown’s possible whereabouts,” she said.

“Yeah, apparently, he’s going to get on a drug shipment to Cuba in six hours,” Spencer whispered.

“He’s most likely hiding out somewhere north of Cancun,” she said.

“Great. Thanks for the information. Are your units scouting the area out?” Morgan asked.

She nodded. “Yes, but we’re not trying to penetrate the area directly. We have no idea what kind of people Brown has paired up with and he’s already attacked one of our own before, so we’re treading lightly.”

“Fair. I guess we’ll meet in six hours to catch him,” Morgan said as he reached out his hand.

Y/N grabbed it and shook it. “We definitely will, agent.”

As she let go of his hand, she looked over at Spencer. She smiled and reached out her hand. She noticed his hesitation to grab it, so she did him the favour and latched into his hand. She pulled him in and gave him a light kiss on the cheek.

“Gracias por aplicarme protector solar en la espalda. Tal vez después de atrapar a este hijo de puta, podamos ser más íntimos,” she said into his ear.

She pulled away from him and saw that confused yet intrigued look on his face again. She laughed before waving them both goodbye. They both watched as she walked off from their sight into the overcrowded beach.

Morgan flopped his arm around Spencer’s shoulders. Spencer looked at Morgan to see a grin spanning from ear to ear. He sighed as he already knew what Morgan was going to say.

“So you spent the time you were supposed to be surveilling rubbing on a hottie’s back?” Morgan asked

“How about we don’t talk about it?” Spencer said as he shrugged off Morgan’s arm and started to walk away.

“You can’t keep your secret move from me,” Morgan said as he walked behind him.

“What secret move?” Spencer asked.

“The “standing there out of place but yet attract all the ladies to me” move,” Morgan said.

Spencer smirked. “I would teach you if I knew why it happened.”

Morgan chuckled. “You know what, I think I’m more content with you finally not knowing an answer for something than I am with you getting a potential date.”

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MASTERLIST

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[alanxietatem]

Hoy es una de esas madrugadas en las que me pregunto si es bueno seguirle el rollo a las redes sociales... es tanto caos, tanto amarillismo, tanta violencia, sufrimiento por doquier y tantos individuos de mi edad y otros más viejos sumergidos en una trampa tecnológica que nos convierte a todos partícipes de un escenario que enfatiza la guerra, la poca conciencia y la falta de empatía ante distintas facetas ideológicas, estoy tan frustrado cansado de ver tanta información mal percibida y tanta mierda desconcertante, en ningún momento creí que algo como el tener acceso a internet se transformaría en una entropía causante de ansiedad y estrés.

Quisiera abandonar por un rato todas esas vertientes en mi vida social, quisiera tener unas vacaciones sin tecnología pero mi maldito hábito por vivir (también mi trabajo y mis proyectos) dependen de todo eso, me da miedo cerrar mis cuentas de aquellos sitios que algunas vez fueron divertidos o entretenidos para mí, no sé por qué es tan tóxica esa mentalidad mía, no dudo que también se produce un exceso de preocupación en mi cabeza por sobreanalizar y disociarme gracias a mi trastorno de ansiedad, no obstante, ya en cualquier red social estás sometido a un peligro desconocido [sigue existiendo la gente malnacida y subnormal y te lastimarán por ese medio], igual siempre fui más apegado a las situaciones asociadas a la interacción frente a frente con las personas de mis círculos, incluso la gente en la que confío sabe que amo verlos más en persona que enviar mensajería pero desde la pandemia para acá mi forma de comunicarme y de recibir noticias se vio devastada, ya no fui el mismo y el adaptarme sigue siendo bastante complicado, odio ser parte de los espectadores que contemplarán ese fin del mundo del que todos polarizan sentado desde mi casa mientras tengo una videollamada con alguien, ¿qué me espera a mí y a los demás?, ¿dónde están aquellas personas que te visitaban en un día casual para planear un compromiso o que simplemente les importaba saber novedades a cerca de ti y no de muertes, accidentes o catástrofes que ya todos obviamente interiorizamos por lo que dejan las redes sociales?, ¿dónde quedaron esas experiencias en bibliotecas, auditorios, museos, parques, festivales o reuniones que terminan en temas de conversación mucho más sanos?, ya nadie se preocupa por desconectarse de ese suburbio supuestamente intelectual y digital porque ahora ya todos tienen un papel que cumplir o tienen que resguardarse en lo que dice la jodida web, cuando allá afuera está esa verdadera realidad que anhelamos, pero es cierto, la ignorancia humana incrementa con el tiempo y el tiempo ya ni siquiera es de nosotros y con "ingnorancia" me refiero a la ingenuidad pura del ser humano, nuestro planeta nos llora por descuidarlo y sólo queda despedirse de ti mismo y del mundo porque a nadie le interesa qué le sucede a la naturaleza por ver videos de 15 segundos o posts absurdos que incentivan el capitalismo y clasismo.

Pero eso me hace reflexionar más y siento que nos comportamos como sobrevivientes, ¿pero sobrevivientes de qué?, ¿de los juicios que tienen las personas sobre nosotros?, ¿de la opinión de la vox populí?, ¿de quién nos protegemos?, lamentablemente aquí en México tu vida cuelga en una cuerda floja y la desconfianza o inseguridad siempre ha flotado en el aire, pero que se engrandezca ese peligro en redes sociales con noticias sensacionalistas es lo que nos dispone a crear mecanismos de defensa de manera inminente, formando una coraza de lo que es políticamente correcto e incorrecto.

Incluso he pensado en que así como a nuestros padres les lavaron el cerebro con la televisión, a mi generación la atolondran con tanta desdicha en internet, no es un orden mundial ni la meca de la irreverencia, es nuestro legado como seres pensantes buscando aprobación o algún tipo de inclusión y todo por la influencia que tienen las grandes potencias y la arrogancia de gente sin escrúpulos frente nosotros, actualmente muchas personas exponen su dolor o abusos como libre albedrío y eso nos exhorta a volvernos más sensibles por los estigmas tecnológicos ya que es más fácil que se extraigan datos personales y cosas íntimas de nuestra vida privada, cualquier signo de amenaza para nosotros ahora lo nombramos un red flag, lo cual hace que nuestra sociedad estereotipe las formas de interacción y señalen a la primer persona que discrepe de un tema controversial o popular como alguien del que debemos de protegernos (tema que nadie le gusta tocar porque todos seguimos un rol dentro de ese metaverso y perseguimos siempre las reacciones de los demás, hasta la inteligencia artificial puede llegar a arruinarle la vida a alguien por las reacciones en internet), [y ni se diga del contenido que nosotros deseamos ver y que ese sistema juegue con nosotros para que salgan cosas repulsivas y que nos generan incomodidad].

Esto nunca va a parar y como espectador, seguiré temiendo y sintiendo miedo por la evolución social y virtual, hoy me pongo a velar por aquellos que viven en una situación muy deprimente y que han perdido seres queridos durante este proceso, hoy velo por el futuro que nos depara y por aquellos que luchan con enfermedades tanto mentales como físicas y que han sido víctimas por los menesteres del internet, hoy velo por aquellas personas que sufren por miedos irracionales provocados por el algoritmo tecnológico y la tendencia actual de defender lo que nos atañe en redes sociales, hoy velo por aquellas personas que han desaparecido o que han sido asesinadas y que los medios lucran con su pérdida con sentido de morbo, hoy velo por aquellas personas que han sufrido una humillación cibernética y que toleraron burlas y bromas pesadas que se volvieron traumas insuperables, si en algún momento desaparezco de este sendero, sé que otra persona reafirmará lo que expreso y velará o tal vez no, pero todos merecemos un descanso de nuestros celulares o computadoras, todos merecemos una vida tranquila y normal.

[larn-solo]

[ Ácratas ] Cap. 1

[ Esta es una historia que empecé hace más de 20 años atrás, y quedó inconclusa, y fue en donde surgió el personaje Larn Solo, que terminé usando de pseudónimo. La rescato a fin de que no muera en el olvido, aunque no sé si tendrá conclusión. ]

El rojo atardecer empieza a impregnarse en el cielo, penetrando en todo lugar en complicidad con los espejos que revisten los edificios de la ciudad. Debería llamarse a veces Red City, pero en verdad hace honor al apodo de Gran Manzana, pues su color refleja también el mejor momento para devorarla. Ella mira hacia su izquierda y ve el mar que deja el rojo para tornarse más oscuro, y piensa tan rápido como conduce que los atardeceres deben durar más tiempo. Él sólo mira su reloj parado en la esquina, esperando. Una pequeña sonrisa le recuerda algo irónico: ser impaciente cuando se tiene todo el tiempo de lado; pero esa sonrisa es leve.

Todos se asombran, incluso se puede decir que se maravillan. Una bella mujer conduciendo un Corvette del año tan rojo como el atardecer que se desvanece no es un espectáculo de todos los días. Los silbidos, los piropos y las miradas son cosas que a ella no le interesan; sólo piensa en él y se pregunta si sus deseos serán correspondidos. Pero ya no le queda tiempo para continuar absorta, pues frena delante de aquél que la esperaba.

— Perdón por la demora... — No te preocupes. Me extrañaría si llegaras temprano. — ¿Con qué eso crees tú, Eh? — ella esperaba su típica respuesta ácida, mordaz; pero no dijo nada. Sólo subió al auto con su mirada tajante, no para el mundo, sino para sí mismo. Realmente detesta esa mirada, sabe lo que significa: problemas para él, que solo los sabe y afrontara él. — Si te sientes mortificado podemos ir a la recepción un momento, saludamos y nos vamos... — ¿Es la premiación de tu mejor amiga cierto? — Sí. — No puedes estar entonces solo un momento ¿O no? — Pero tú estás... — ¿Cómo estoy? — No lo sé. Tú dímelo. — Nada. No tengo nada; como siempre. — y otra pequeña sonrisa se esboza en su rostro, mientras prende un cigarrillo. — Cierto. Nada. — dijo ella, como si no se diera cuenta de que le oculta algo, pero nadie puede fingir consigo mismo. Él sabe todo de ella... ¿Por qué ella no sabe todo de él? Su joven corazón se agita. Sabe que él le miente. Decide enfrentarlo, pero al verlo ensimismado con su cigarro piensa al final hacerlo en otra ocasión.

Lana McGovern es la novelista más joven y laureada en Manhattan y el «New York Times» no podía dejar de reconocerla. La recepción estaba espléndida. Un amplio salón con grandes ventanas y unas pinturas renacentistas alternaban con sus pares contemporáneas adornando las paredes. La cristalería, de primera. Pero todo el lujo y el glamour se opacaron cuando el Corvette con sus peculiares ocupantes llegó. Lana sale del salón hacia la puerta emocionada.

— Pensé que no ibas a venir. — ¿Cómo crees? Jamás me perdería tu gran momento. Lana mira a su amiga quien lleva puesto un vestido negro largo hasta los tobillos muy entallado, que dejaba ver su delicada pero bien proporcionada silueta, con unas aberturas que dejan ver sus piernas y sus zapatos de tacón alto con detalles de delicadas cintas atadas entre sus piernas.

— ¿No te han dicho que la mujer despampanante debe ser la agasajada? — No exageres... — Vamos querida... ese vestido que traes puesto arrancará más de un suspiro... — sin querer mira sobre el hombre de Haydee y divisa a su acompañante — Claro, si tan apuesto galán te lo permite... — Él es un amigo nada más. — Gracias por la noticia, quizás mi noche mejore entonces. — su picardía siempre le hizo gracia a Haydee, quien al intentar presentarlos se percata que él, muy groseramente por cierto, ya había ingresado al salón.

Dentro del salón Haydee efectivamente llamó la atención no sólo de los caballeros sino también de las damas presentes. Pero ella buscaba a su preocupado y serio acompañante, y al ubicarlo divisa que conversaba con Marcell Denove, su amigo y socio de negocios. "Mejor para él" pensó; y se dispuso a ingresar y departir con sus amistades de una buena charla. Es que a veces los amigos hacen olvidar las penas, pero sólo a veces. En esta ocasión, Haydee no dejaba de seguirlo con la mirada. Mientras sus labios soltaban comentarios sobre lo último de la moda, música e incluso política, su corazón se retorcía recordándolo con esa expresión dura y cerrada durante el viaje hacia la recepción; más fuerte que otras veces. ¿Qué le estaría pasando que no le comentó nada a ella?

Marcell es un espigado hombre de negocios de importación y exportación de artículos automotores al que este tipo de reuniones le hartaban hondamente; sin embargo, asistía por la facilidad de pactar con otros exportadores y empresarios a beneficio de su empresa, pero una vez que cumplía con dicho objetivo, esperaba encontrarse con alguien conocido, en este caso a su mejor amigo, ya que siempre tenía algo de qué conversar. Estaba sentado en una mesa solo, con un vaso de brandy al que hacía girar sobre su base en la mesa sin derramar ni una sola gota. De pronto se sintió un poco extraño, levantó la vista y vio a su amigo llegar con Haydee, pero al ver la expresión de su rostro, su alegría de verlo se tornó preocupación.

— ¿Por qué ese rostro amigo? — ¿No sabes? Charles y Mark están muertos. — ¡E... Eso es imposible! — Ssshh... No seas tan notorio... — Pero tremenda noticia... ¿Qué rayos pasó? — Digamos que el Tigre ha desplegado sus garras... — Pe... pero... el Tratado... — Obviamente roto. — ¿Y la unidad de la Orden? — La Orden se volvió corrupta desde que ingresamos a ella. — Lo dices por... — Por los occidentales. Todos nosotros. Así que prepárate Marcell. — Malditos Demonios — refunfuñó Marcell entre dientes. — ¡Ja! Ni siquiera sabes con certeza qué eres tú.

Marcell se queda callado pues él tenía razón. Nadie conoce su origen cabalmente. Su pasado es tan oscuro como los ojos que le hablaban entre las sonrisas y comentarios de los legos que los rodeaban. La noticia recibida era en verdad inesperada. Charles y Mark Smith, los gemelos más fuertes, muertos... la única opción es que los hayan asesinado en un duelo. Marcell seguía callado y pensando sobre la información brindada por su amigo. Los únicos enemigos de los gemelos eran los que servían al Tigre. Eso no podía merecer nada más que una sola actitud: la venganza.

— ¡Hey! Reacciona...— Marcell levanta la vista y su vaso de brandy le es ofrecido — Si te lo cuento es para que te prepares, no para que llores. — ¿Y qué vas a hacer tú? — Esperar. Debo ser su 'trofeo'... creo... ja, ja, ja... — Marcell recordó entonces el gran respeto que tenía a su interlocutor, ya que siempre tenía una ironía y sarcasmo macabramente divertido hasta en las situaciones más serias. Bebió un trago de brandy y miró hacia la mesa donde estaba Haydee. — ¿Lo sabe ella? — fría pregunta que detiene la sonrisa de su amigo. — No. Y no tiene por qué hacerlo. — Pero si a ti te pasa algo... Vamos, me conoces lo suficiente como para saber que no caeré así de fácil. — Pero ¿Cómo quedará ella? — Haré lo mejor para que esté bien. — ¿Meterla en una burbuja fuera de esta realidad? — comentario no muy bien aceptado —. Mira viejo, no dudo que la protejas, sólo pienso que sufrirá al enterarse de todo. — Sin embargo, he venido esta noche para pedirte un favor Marcell. — Pide lo que quieras. Te debo mi vida. — Curioso. No creo que nosotros podamos tener vida. — Vamos... ¿Qué quieres? — Cuida de Haydee si ellos me buscan a mí. — Recuerda que también me buscarán... — Sabes a qué tipo de protección me refiero. — ¡Ah! Sobre ello no debes tener ningún cuidado. Tengo todos tus negocios bien manejados... claro, los que se pueden declarar... — Confío en tu astucia para declararlos todos tranquilamente. — Mis habilidades no llegan a tanto. — Pero si agregamos un 10%... — Podría esforzarme un poco más, pero necesito incentivarme bien, ¿No crees? — 20% y no más. — Sabes que es un placer hacerte favores... palabra de Marcell Denove. — Sí, como no; maldito usurero. — Negocios son negocios... — Y se supone que eres mi amigo. — Digamos que tengo ideas positivas, y pienso que vamos a salir bien de toda esta tempestad. Y cuando eso suceda no solo mi corazón sino también mi billetera gozará de alegría. — Creo que eres el único que antepondría el dinero al sexo. — No exageres... — No lo hago.

La broma detuvo la conversación. Marcell se percata que su interlocutor mira hacia Haydee de manera extraña, y no puede evitar la estúpida pregunta:

— ¿Qué sientes por ella? — ¿Yo? Solo un cariño muy especial... de amigos... de padre incluso... bueno, tú sabes. — No te sonrojes. — No lo estoy, es el calor de este salón. — Sí, claro. Además, piensa que ustedes dos son contemporáneos. — Físicamente. — Y tú le gustas... — ¿Y eso qué? — ¿Acaso no quisieras estar con ella? — No se nos permite amar. — No te lo permites, que es otra cosa. — ¿Cuántas veces tocaremos este tema? — Hasta que te convenzas... — Yo no puedo, no debo; y no hay más que decir.

Marcell calla. Ve que Haydee, tan bella como siempre, se acerca a ellos.

— Señores... ¿Se han dado cuenta que han premiado a mi querida Lana, han brindado por ella y ustedes bien gracias, conversando? — Discúlpanos preciosa. Pero como le decía a este individuo, negocios son negocios y hay que aprovechar cualquier hora y lugar. — Te disculpo Marcell, pero tú, ¿Qué me dices? — No tengo nada de qué disculparme. — Marcell y Haydee se miraron y no supieron que decir.

De regreso, Haydee no se preocupa mucho por el volante, su mente trata de descifrar la frialdad y conducta de su acompañante en las últimas horas. Trata de penetrar la muralla de humo azul que forma con su cigarro. Mira hacia delante y mira el puente, tan famoso, tan espléndido... y tan extrañamente sin tráfico. Estaba tan absorta que no se percata que él la obliga a frenar intempestivamente.

— ¿Qué pasa? — tonta pregunta si ya esperaba un silencio cruel. Sigue la mirada hacia delante igual que él y ve que el camino está bloqueado por cinco motociclistas. — Maldición, no tenía que ser tan pronto. ¡Da la vuelta Haydee! — muy tarde pues detrás también los han rodeado.

Haydee no soporta más y se vuelve desesperada hacia él:

— ¿Puedes decirme que demonios sucede?

Silencio devastador. Él se agacha y de su abrigo retira una Magnum de 9mm que revisa cuidadosamente, de la cual Haydee no tenía idea de su existencia; la guarda tras su espalda mientras los motociclistas se aproximan; abre la puerta y se dirige al costado de Haydee y sin mirarla le hace una difícil petición:

— No temas, nada te pasará mientras esté a tu lado.

Haydee no podía pensar en nada. Los fieros motores de las motos dejan de rugir al acercarse, mientras tanto llega un auto oscuro de lunas ahumadas que se dirige en sentido contrario al Corvette de Haydee, cegándola con los faros delanteros. Del auto baja alguien y Haydee sospecha que debe ser el líder, quien sin dejarse ver señala hacia el compañero de Haydee.

— ¿Tú eres Larn Solo? — No. — se apresura en contestar Haydee — Él se llama Chris... — Cállate Haydee — replica el aludido bajándose del auto —. Sí. Soy Larn Solo... Haydee, vete de aquí. — Haydee no entiende nada. — Entonces sabes el porqué de mi presencia Larn Solo... — Déjame adivinar... intentarás matarme. ¿O me equivoco? — No lo intentaré. Lo haré. — Podría replicarte eso, pero lo arreglaremos nosotros solos, así que aleja a tus hombres y deja ir a esta chica. — ¿Es acaso tu querida? — Para nada. Solo es una chica que recogí en un bar, y por lo poco que ha visto sabe que si abre la boca se muere...

Haydee no podía creer lo que escuchaba, quiso contestar, pero no podía decir palabra alguna.

— Está bien. Solo deseo ver correr tu sangre. ¡Déjenla ir!

Larn mira a Haydee y se despide con su mirada. Ella siente escuchar su voz, pero él no mueve los labios. "No te preocupes de nada y vete ahora, yo estaré bien". Haydee desea hablar. "No lo hagas". Otra vez la voz de Larn en su mente. "Vete y cuéntale a Marcell de esto, él sabrá que hacer". Haydee sin saber por qué, le obedece; enciende el auto y pone reversa para retirase del lugar, pero no puede hacerlo, uno de los motociclistas le impide el paso.

— No puedo dejarte ir... es que quiero divertirme esta noche...

Un sonido seco y manchas de sangre sobre el vestido de Haydee. Un certero balazo en medio de los ojos interrumpió las palabras del maleante. Haydee voltea horrorizada junto con Larn y el resto de motociclistas sorprendidos aún más; y uno de ellos reacciona:

— Jefe... ¿Por qué...? ¿Por qué hizo eso...? — He dado mi palabra que ella se iba, y se va.

Larn sonríe, satisfecho de la honorable actitud de su rival. Todos dan paso para que Haydee se retire. Ella solo atina a acelerar sin escatimar en reglas viales, peatones, semáforos y demás; pero no da más; frena en seco y enciende su teléfono móvil. Su vista nublada por el llanto a duras penas le permite marcar un número telefónico. Con la faringe llena de aflicción y exprimiendo sus ojos balbucea:

— ¿Aló...? ¿Marcell?

***

[ continuará ]

© Ͼʜʀɪʂᴛɪᴀɴ 木下 ┤Lima/Perú • 1998├

[thedaughterofhades94]

Carta para el estúpido de mi ex.

Escribo esta carta para el estúpido de mi ex-novio, aquel que me hizo creer que nuestra relación siempre fue perfecta y yo era la única en su vida.

Querido ex-novio, fuiste un estúpido si, pero yo lo fui más por creer que cada palabra que salía de tu boca era verdad, como aquella vez que te pregunté sobre aquella chica con la que siempre te etiquetabas, tu dijiste que solo era una buena amiga, y yo te creí, o al menos eso quise hacer, pero en el fondo yo sabía que había algo más y así fue porque ahora sales con ella a unas semanas de nosotros haber terminado.

Debo admitir que me siento traicionada, pero también me siento aliviada por qué una persona como tú ya no está en mi vida.

Ahora que terminamos me he dado cuenta de todo lo que me desagradaba de ti, y vaya que son muchas cosas, incluso puedo decir que son más que las que me gustaban de ti, como el hecho de que tenía que sexualizarme para sentir que me querías o para atraer tu atención, como indirectamente me culpabas de todo lo malo en la relación, tus mensajes tan aburridos que no hacían fluir la conversación, que siempre que me prestabas tu celular cerrabas todas tu aplicaciones, que nunca subiste una foto conmigo a ninguna red social sin en cambio tú si querías que yo lo hiciera, tu aires de superioridad, que nunca me hiciste sentir bien con mi cuerpo, que me hacías sentir presionada para tener sexo, entre otras cosas más. Comprendo ahora porque siempre te fue mal en el amor y tus ex-novias huían de ti, no se porque pensé que conmigo sería diferente.

Ahora que ya no estamos juntos más veo todas tus "Red Flags", que tonta fui, sin en cambio debo admitir que también me diste cosas buenas como algunos buenos recuerdos de nuestras salidas, algunos mensajes bonitos, o aquel monopoly y la lámpara hecha por ti que me diste en mi cumpleaños.

Cómo sea te agradezco por lo bueno y por lo malo, de cualquier manera he aprendido cosas de ambas y ahora que he sacado todo esto de mi pecho, me despido de ti.

Espero que en esta nueva relación que inicias te vaya bien y por fin encuentres el amor que tanto buscas y que no sigas dañando a más personas como a mi, ojalá ella si pueda llenar el vacío de tu corazón ocasionado por tus daddy issues, aunque ahora que lo pienso eso es tu responsabilidad así que espero puedas solucionar todos esos problemas por ti mismo y puedas aprender abrazar tu soledad como lo hago yo y así no dependas tanto de una pareja.

En fin, me despido de ti ex-novio estúpido, ten una linda vida.

Atte. Tu ex-novia, la más bonita.

[tengomilpalabrasparati]

Cada 13 de febrero celebramos el Día de los Amigos de Internet, una ocasión muy especial para todos los internautas.

No solo compartimos información con otros usuarios, sino que interactuamos con personas alrededor del mundo, a un solo clic de distancia. Son personas que brindan compañía virtual a través de la pantalla y sin pedir nada a cambio: solo amistad.

En la denominada "red de redes" o "autopista de la información" puedes conectar con millones de personas a través de las redes sociales de manera rápida y efectiva.

A través de las plataformas de redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, Linkedin, Tik Tok, Youtube y otras aplicaciones es posible encontrar amistades por internet que comparten los mismos gustos, intereses y preferencias.

¿Cómo hacer amigos en internet de manera segura?

A continuación mostramos algunas recomendaciones básicas acerca de cómo conseguir amigos en la red, de forma segura:

Desvela solamente datos personales básicos en tu perfil. Evita incluir información privada, tales como números telefónicos, direcciones de trabajo y de habitación.

Participa en foros temáticos con temas de conversación de tu interés. Ello contribuirá con una interacción más fluida y natural con otros usuarios.

Revisa periódicamente las cuentas o perfiles que tengas activos. Es muy probable que puedan suplantar tu identidad, especialmente en cuentas con poca actividad o interacción.

Interactúa con cautela, a fin de evitar fraudes y engaños.

Evita participar en descalificaciones personales que pueden suscitarse en foros, chats y otros espacios de redes sociales. Ello es debido a que algunos usuarios o participantes pueden participar de manera anónima, propiciando dinámicas negativas, contrarias a la buena educación y a una sana interacción.

No compartas tus datos personales, tales como ubicación, números de teléfono, lugar de trabajo, dirección de habitación.

Verifica los perfiles de las solicitudes de amistad que recibas de las redes sociales, ya que puede tratarse de una cuenta falsa o que utilice los datos de otro usuario conocido.

Aplicaciones para conocer personas en Internet

Mostramos a continuación algunas aplicaciones, aparte de las ya tradicionalmente conocidas, para interactuar y hacer muchos amigos en la red de redes: internet.

Ablo:

Ha sido premiada por Google Play en el 2019, como aplicación del año.

Puedes conocer a personas de cualquier parte del mundo. Es por ello que incluye un chat con traducciones instantáneas.

Permite subir videos e iniciar transmisiones en directo.

Tiene una opción de "retos", para entretenimiento.

Bumble:

Ofrece tres categorías: Bumble (para encontrar a una persona especial), Bumble BFF (para conectar con nuevos amigos), Bumble Bizz (para encontrar mentores, hacer networking y desarrollar tu carrera profesional).

MeetMe:

Es una aplicación que permite conocer a personas cercanas a tu ubicación.

Puedes chatear y publicar contenido a tu perfil.

Se creó en el año 2005 como myYearbook. Actualmente cuenta con más de 4,5 millones de usuarios activos.

Meetup:

Esta app permite buscar grupos de personas cercanos a ti y con gustos similares.

Algunas de las categorías de intereses más buscadas en esta aplicación son: tecnología, familia, naturaleza y aventura, salud y bienestar.

Puedes crear nuevos grupos.

Skout:

Puedes agregar a personas conocidas o por conocer.

Permite hacer eventos en vivo.

Patook:

Es una aplicación para "amigos platónicos" (Platonic Friends App).

Garantiza un control estricto de los usuarios.

Utiliza inteligencia artificial para sugerir temas de conversación y perfiles de amigos.

El usuario puede elegir los datos que desea compartir y los usuarios.

Yubo:

Fue creada en el año 2015 en Paris.

Tiene comunidades temáticas basadas en los gustos de los usuarios.

Incluye juegos in-app multijugador.

Cuenta con una modalidad de pago "Power Pack".

Filmografía sobre el tema

Compartimos algunos títulos de películas sobre los amigos en internet, para compartir y disfrutar en buena compañía:

Searching (EEUU. Director: Aneesh Chaganty. Año 2018): en este thriller cinematográfico un hombre busca desesperadamente a su hija adolescente desaparecida. Encontrará todas las pistas en su ordenador portátil, rastreando todos sus movimientos y amistades en las redes sociales.

Eliminar Amigo 2 (EEUU. Director: Stephen Susco. Año 2018): un joven encuentra archivos escondidos en la memoria caché de su nuevo ordenador. Él y sus amigos serán víctimas de una amenaza en línea. Morirán irremediablemente si se desconectan o llaman a la policía.

Verdad o Reto (EEUU. Director: Jeff Wadlow. Año 2018): un juego de verdad o reto que circula por las redes sociales se convierte en una verdadera pesadilla para un grupo de universitarios, que se encuentran de vacaciones en México. Deberán seguir dos simples reglas: decir la verdad o morir.

Nerve: Un Juego Sin Reglas (EEUU. Director: Henry Joost. Año 2016): los juegos online son un arma de doble filo. Unos adolescentes deberán atravesar una serie de pruebas arriesgadas y mortales en un juego de red inusual y peligroso, basado en verdad o atrevimiento.

Eliminar Amigo (EEUU. Director: Levan Gabriadze. Año 2014): en una charla animada vía Skype entre 6 amigos se incorpora una misteriosa compañera, quien se suicidó un año antes ¡de terror!

Hombres, Mujeres y Niños (EEUU. Director: Jason Reitman. Año 2014): en esta historia se investiga el efecto de internet sobre un grupo de estudiantes de secundaria y sus padres, especialmente en la forma de relacionarse con las personas.

Her (EEUU. Director: Spike Jonze. Año 2013): un hombre solitario que trabaja en una empresa como escritor de cartas para terceras personas adquiere un Sistema Operativo basado en un modelo de inteligencia artificial. De manera sorpresiva crea una relación romántica entre el y Samantha, la voz femenina de dicho sistema.

La Red Social (EEUU. Director: David Fincher. Año 2010): un estudiante de Harward crea una de las redes sociales más importantes y controversiales de todos los tiempos: Facebook. Basado en hechos reales.

Catfish (EEUU. Director: Henry Joost. Año 2010): un fotógrafo de 24 años que reside en Nueva York es contactado a través de la red MySpace por una niña de 8 años que vive en Michigan. Ambas familias entablarán una amistad que se profundizará cada vez más.

Comparte información útil e interesante en las redes sociales acerca del Día de los Amigos de Internet, con el hashtag #InternetFriendsDay

[avedemar]

Hello again...

Me encanta esta interacción que hemos logrado mediante los Ask de esta red social.

En cuanto a su respuesta de aburrirme... Lo veo complicado, no suelo aburrirme fácilmente y menos con lectores y escritores como usted que, entre líneas muestra más de lo que escribe en palabras.

En cuanto a mi recomendación de libros solo puedo hacer 3.

1.- El huracán lleva tu nombre. De Jaime Bayly. Fue de los libros que marcó un precedente en mi ánimo de lector/escritor aficionado. Creo que le gustará.

2.- Ernesto Guevara, también conocido como el Che. De Paco Ignacio Taibo II. Lo leí en un momento de mi vida, donde me encuentraba solo, en una ciudad nueva y sin nadie que me consolara. Por el contrario, fui señalado de "paramilitar" por alguien que era casi un ilodolo para mi.

3.- Los amigos que perdí. De Jaime Bayly. Al igual que los anteriores, me hizo comprender, muy a mi modo, la etapa de mi vida que transitaba.

Espero le guste mi recomendación.

Y nuevamente, saludos, también, desde el sur de México.

Hola, Mr. S, ¿puedo llamarlo así? Supondré que sí. Es raro, ¿sabe? Esto de hablar de esta forma, no suelo responder ininterrumpidamente los ask, normalmente los dejo pasar después del segundo ask consecutivo. Ya veremos qué pasa.

En cuanto a lo de aburrirse o no también lo veremos. Por otro lado sus recomendaciones literarias son libros nuevos para mí, no creo haber escuchado sobre ellos. Elegiré alguno al azar y voy a leerlo cuando termine el que tengo ahora atascado entre las pestañas. Ya le comentaré después qué sabor me deja en el paladar.

La curiosidad se acomoda en el sillón de la esquina y me ve atenta mientras yo le pregunto con cara de asombro, ¿qué tan al sur?

¿Seguimos la conversación en otro lado lejos de ojos extraños?

[tazadegatoproducciones]

SÓLO UN DÍA [one-shot ESP] Agatha x lectora

Este es un one-shot que se me ocurrió en medio de una crisis como método para lidiar con el dolor xD

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Sólo un día

One-shot, SFW, uso de magia, friends to lovers (a veces estos tags se me hacen como spoiler) Agatha protectora, Agatha celosa, Agatha un poquito "red flag"

(T/N: tu nombre)

Sinopsis: La bruja Agatha y tú se conocen desde hace un tiempo y son muy cercanas. Una noche, le pides un favor que ella no desea hacer pero accede sólo para verte feliz y, de paso, enseñarte un par de cosas. Después de todo, como Agatha no hay dos.

- ¿T/N?

Adorabas y atesorabas los momentos que pasabas junto a Agatha. La amistad que forjaron en sólo un par de meses se hacía cada vez más fuerte y la confianza que la mujer mayor te transmitía te hacía querer compartir muchos de tus sueños, deseos y a veces, hasta tristezas porque siempre tenía algún consejo que darte de la manera más sabia con el toque de atrevimiento y sarcasmo que tanto te fascinaba. Sólo habían un par de cosas que jamás compartirías con ella por el temor de arruinar el vínculo hermoso que tenían.

Lo primero, algo bastante precedible, era que te enamoraste completamente de tu compañera bruja y estabas cien por ciento segura que eso era lo que sentías. Nunca en la vida le confesarías algo como eso, sería sabotear la amistad que inició con una interesante conversación de dos desconocidas en un parque sobre magia, vida y caos así te estés muriendo de amor por ella, sonrías al verla y pienses en ella cada que escuches canciones románticas.

Lo segundo era la relación conflictiva que tenías con tu auto-imagen (por no decir que odiabas tu cuerpo y todas las imperfecciones que veías en el espejo). Ustedes no solían hablar del tema y no tenían por qué tocarlo, pero cada que Agatha te sugería abrir una cuenta en alguna aplicación de citas, usar ciertas prendas o te preguntaba si alguien te atraía en la oficina donde trabajabas, tú cambiabas automáticamente el tema (la idea de que Agatha jamás correspondería tus sentimientos te causaba dolor y por eso, mantenías tus sentimientos hacia ella como algo platónico) porque muchas veces escuchabas el dicho de que la gente se aleja cuando percibe negatividad y eso te hacía sentir peor contigo misma.

- ¿T/N? ¿Tierra llamando a T/N? Parece que hay algún tipo de interferencia de señal...- Agatha te sacó de tu laguna mental, cambiando ligeramente el tono de su voz por uno un poco más agudo y suave.

- ¡Lo siento!- Sentiste la mirada preocupada de tu amiga cuando volviste a verla y a su mano posarse en tu hombro. - Lo siento, Agatha, últimamente me pierdo más seguido, tengo que corregir esto...

Ambas estaban sentadas en un tronco caído y viejo de un árbol, Agatha te había llevado de nuevo a uno de sus lugares preferidos (y secretos) y era ahí, en esa especie de jardín alejado de la realidad, donde pasaban el rato charlando por horas sin que nadie las moleste. Tu amiga te confesó que era una bruja varias semanas atrás, la primera vez que te llevó a su lugar preferido, escondido de los otros mortales (pero totalmente accesible para ti cuando desees descansar un momento siempre y cuando no se lo comentes a nadie) y te dejó encantada con todo lo que te enseñaba.

Agatha te mostró los conjuros que podía hacer, cómo lanzaba hechizos de control mental a algún mortal que intentaba asaltarte o hacerte algún otro tipo de daño, las pociones que podía preparar y la cantidad de libros que poseía (te prestó algunos). Pasar una tarde con esa mujer era un regalo del universo y no cambiarías eso por nada, así te ponga triste el no poder llegar a una relación romántica con ella. La idea de que tal vez ni siquiera seas su tipo revoloteaba por tu mente y te molestaba, así que tus más profundas y secretas fantasías giraban en torno a verte físicamente atractiva para que ella se fije en ti de la forma que soñabas.

- ¿En qué piensas, cariño? tú me dijiste que estar aquí te hacía feliz - Dijo Agatha, con la mano aún puesta sobre tu hombro y la otra tomando tu mentón con delicadeza, girando suavemente tu cabeza para que ambas caras queden frente a frente. Sus hermosos ojos azules estudiaban tu rostro como si fuese uno de sus libros de hechicería.

- Lo soy, no sabes cómo me encanta venir aquí.- Respondiste con una débil sonrisa pero la bruja de 300 años de edad no se dejaba engañar tan fácilmente, sobre todo cuando había un aspecto de ti que le intrigaba, ella lo averiguaba como sea.

- Pues mi "sentido arácnido" me indica que te sientes triste ahora. Cuéntame qué te trae así, noto esa melancolía desde que te conocí querida, pero nunca me has querido contar a qué se debe.

La única desventaja de tener a una amiga bruja, era que las brujas podían ser muy intuitivas. Se daban cuenta de las cosas al instante y no podías mentirles. Bueno, podías ocultar un par de cosas, o al menos eso creías.

- Hay algo que te molesta, pero yo te puedo ayudar, yo quiero ayudarte.

No podías, de ninguna manera, hablar de tus sentimientos por ella ni lo que pensabas cada noche antes de acostarte, mucho menos tus sueños con ella, ese era un NO definitivo. Sin embargo, había algo de lo que tal vez podrías hablar.

- No sé cómo decir esto, Agatha, es algo que guardo desde muy joven y está afectando negativamente mi vida pero no sé cómo decirlo.

Tal vez Agatha te pueda ayudar con ese problema.

- Sólo escúpelo, cariño. Soy toda oídos, además aquí nadie nos escucha y lo que me cuentes será información clasificada. - Agatha hizo un gesto de cerrar su propia boca con un zipper y lanzar la llave al vacío con las manos. - Lo prometo.

- Soy horrible, Agatha. Eso es lo que me...entristece. - Diste un largo suspiro. - Bueno, eso no es nuevo, siempre me he sentido así pero me molesta, ¿sabes? desde siempre y no sé qué hacer porque siento que si hago un esfuerzo por verme mejor se va a notar demasiado y eso me hace sentir peor, siemplemente no hay remedio...y...yo me preguntaba si...-

Agatha, indignada ante lo que acababa de escuchar, no te dejó terminar la oración.

- ¡¿Pero qué diablos estás diciendo, T/N?!- Exclamó Agatha con los ojos muy abiertos, mirándote sin parpadear como si lo que le contaste fuese el sacrificio de un Golden Retriever bebé. - ¡Quién te dijo eso! Dímelo, ¡dímelo ahora! para hechizarlo desde aquí, ¿o hechizarla?- Agatha se veía alterada. - ¡Quién ha sido! ¿Fue en tu trabajo?

- Vamos, Agatha, esto es en serio...

- ¿Te parece que estoy bromeando, princesa?- Preguntó Agatha, desafiante, con las manos listas para lanzar un conjuro y los ojos llenos de furia, trató de calmarse y tomó aire. - Eso no es verdad, querida, quien quiera que te haya dicho semejante idiotez merece la lengua rebanada en mil pedazos y pulverizada ante sus ojos.

- Oye...Agatha...espera...- Agatha había formado con sus manos una pequeña bola de energía pero desapareció cuando éstas dejaron de moverse.

- ¿Te puedo pedir un favor?- La miraste fijamente y ésta bajó las manos, se veía decidida a desaparecer la lengua de cualquier mortal que pudiste haber mencionado si así lo querías.

- Por supuesto, corazón, ¿en qué te puedo ayudar?

- ¿Existe algún hechizo, conjuro, encantamiento, o... algo que me cambie la apariencia física?- Aquello último lo solicitaste con un hilo de voz, tímidamente, pero la bruja te escuchó a la perfección.

Agatha frunció el ceño, podrías jurar que estaba hasta un poco enojada. Comenzó a ponerse el sol y temías que te mande a casa o te diga algo grosero.

Muy lejos de eso, sólo suspiró y preparó lo que te iba a decir, la intriga te ponía nerviosa.

- T/N, querida, ¿escuchaste lo que te acabo de decir hace unos minutos? No hay nada qué cambiar, te ves preciosa así como estás ahora. - La bruja sostuvo tus mejillas con ambas manos pero tú no dejabas de mirarla suplicante, como un cachorrito que pedía salir al parque.

- Por favor, Agatha...no tiene que ser algo permanente...es que yo nunca me he visto como quería y en todos estos años no he...-trataste de ordenar tus ideas. -...podido experimentar algunas cosas, tú entiendes, como verme bien usando vestidos...o buscar citas...por favor...

- ¿Entonces por qué no lo haces?- Agatha extendió los brazos invitándote a un cálido abrazo y tú, instintivamente, accediste sin dudarlo aunque insististe con tu pedida de auxilio.

- Detesto como me veo, Agatha, por esto no lo hago.

- No quiero hacer esto, T/N...Me han dicho que soy una mujer de "moral cuestionable" y si...puede que lo sea, pero no te haría algo así.- La voz de Agatha sonaba seria y grave aunque te seguía envolviendo en sus brazos. Tú hiciste un último intento.

- Por favor Agatha, sólo necesito un día de belleza. Un día, y no vuelvo a pedirte algo como esto nunca, ¡por favor, por favor, por favor!- Suplicaste.

- ¿Pero qué es lo que quieres hacer con otra apariencia, querida? No lo entiendo...

- Te sorprendería - Dijiste, tratando de causar intriga, Agatha no te soltaba pero no se veía muy contenta. - Pero no te preocupes Agatha, está bien si no deseas hacerlo...

De pronto, entre la corta pausa, Agatha dirigió la mirada hacia ti pero parecía analizar algo. Había un brillo en sus ojos.

- Okay...escucha, T/N, que te quede claro que no quiero hacer esto, me parece algo horrible y estoy muy en contra de este tipo de magia a menos que tenga un propósito realmente importante, pero hay un hechizo que te puede modificar la apariencia por cierta cantidad de horas, ¿si lo hago prometes nunca más pedírmelo?

- ¡Sí! ¡Lo prometo!- Exclamaste al instante. Tu mirada comenzó a iluminarse y Agatha a sonreír un poco.

- Sólo hago esto porque no quiero verte triste, y estoy corriendo un riesgo grande, pero si este estúpido hechizo de revista de brujería es realmente lo que quieres, te voy a ayudar.

Casi soltaste un grito de alegría, abrazaste fuerte a la bruja y no dejabas de agradecerle por su gesto.

- ¡Eres la mejor, Agatha! ¡muchas gracias! ¡Te debo una, en serio!

Agatha tomó tus manos entre las suyas y clavó su mirada en ti.

- Lo único que te pido es que esta sea la primera y última vez que me pides modificar tu apariencia. ¿Está bien? No sé qué deseas lograr con esto pero si te hace feliz te lo concederé.

Estabas tan emocionada y contenta que no pudiste contenerte y le diste un pequeño beso en la mejilla a tu amiga bruja. Si la inmensa alegría no te hubiese consumido en aquel momento, tal vez hubieses notado que su rostro se sonrojó ligeramente y sus ojos se fijaron en tus labios. Te sostuvo con la misma firmeza cuando volviste a lanzarte a sus brazos, la sensación era maravillosa pero debías dejar de pensar en ella de ese modo.

...........................

- Bien, "cenicienta"...- Dijo Agatha sacudiendo ambas manos. - Empecemos con esto de una vez porque necesito un café, ¡agh! me siento en Salem cuando tenía unos... ¿110 años?...¡Maldición, una araña!- Ambas habían regresado al jardín secreto de Agatha unas horas antes del amanecer, de tal forma que el hechizo duraría las 24 horas. Se sentaron una frente a la otra en un área alejada entre los árboles y Agatha llevó consigo uno de sus libros.

- ¿Alguna vez hiciste este hechizo o hechizaste a alguien?- No dejabas de hacer preguntas pero por suerte Agatha era muy paciente cuando se trataba de ti.

- Por supuesto querida, este hechizo fue muy popular en mi antiguo aquelarre, era como lo que hoy son los filtros de Instagram pero en 3D. La mayoría los utilizaba para seducir hombres pero tenían que hacerlo todo el tiempo porque no duraba mucho y bueno... algunas se olvidaban de ese detalle y ahí venía el caos y la destrucción.

- ¿Las descubrían...?

- Oh, sí, a las idiotas que se dejaban llevar por sus romances de turno y después tenían que correr con los hechizos de pérdida de memoria como unas frenéticas, pero yo estaba muy ocupada para ponerme a pensar en citas a esa edad. Sin ofender, cariño.

- ¿Y qué sucedía cuando las descubrían?

- Mejor dejemos el story time para después de hoy, ¿si? Tengo anécdotas geniales de esos tiempos y merecen ser contadas con un buen vino, además ya se está haciendo tarde y necesito ese café. - Asentiste con la cabeza, estabas más que preparada para poder vivir un día como una chica hermosa. Perfecta. Exactamente como te querías ver en tus más profundos sueños.

Agatha te había pedido que pienses en las características físicas que deseabas tener para el conjuro porque ella insistía en que no tenías nada que se "deba" modificar así que tú hiciste un cuadro completo en un papel con todos los detalles que deseabas en tu apariencia: El color, suavidad y brillo del cabello, la estatura deseada, la forma y color de ojos, la piel, la nariz, las cejas y la sonrisa, incluso habían muchas partes de tu cuerpo que quisiste cambiar así que incluiste todo. El resultado sería verte como una persona totalmente diferente.

- Ni las Kardashian han llegado a tanto, corazón, ¿No quieres también cambiarte el nombre? Esto no tardará pero es riesgoso ¿estás segura de que quieres hacer esto?

Como la buena amiga que era, Agatha observaba el cuadro ilustrado que te pasaste haciendo toda la madrugada como si fuese un ensayo mal redactado y con errores ortográficos.

- Si, estoy segura. - Dijiste, muy convencida.

- De acuerdo...a trabajar, entonces - Dijo Agatha acomodando las mangas de su sweater púrpura y colocándose unos anteojos para leer bien el hechizo, el libro ya estaba abierto.

Antes de empezar, Agatha formó las runas alrededor de ustedes dos y colocó el cuadro que habías dado justo al lado del libro. Comenzó a caminar en círculos alrededor tuyo murmurando algunas palabras en latín que jamás habías escuchado junto con tu nombre (tenías que concentrarte en tu nueva apariencia pero con Agatha susurrando y el sonido de su voz se te hacía complicado no sonrojarte)

El timbre de voz de Agatha se iba haciendo más fuerte conforme repetía lo mismo una y otra vez, tú repetías las palabras al mismo tiempo hasta que éstas se conviertieron en gritos y un resplandor color púrpura te cubrió por completo. Pudiste ver cómo tus manos se encendían como focos y empezaste a levitar. Quedaste suspendida en el aire y el resplandor también se hacía más fuerte hasta que nubló tu vista por completo.

El viento corría más fuerte de lo normal, algunas de las hojas se desprendían de los árboles para dar vueltas alrededor tuyo y cuando Agatha dejó de repetir el hechizo, detuvo sus pasos justo frente a ti para evitar que caigas de bruces al suelo.

- ¿Te conozco, querida?¿Puedo ver tu identificación? - Bromeó Agatha mientras te ayudaba a poner los pies en el suelo tomando tus manos. Tú reíste ante el chiste y sacaste de tu mochila un pequeño espejo. Efectivamente, el hechizo había funcionado.

- ¿Cómo me veo? ¿No me veo increíble? ¡Oh, por Dios! ¡Mira este rostro, es el de una celebridad!- Exclamaste, toda hecha una nueva persona.

- Tú eres la que decide eso, querida, yo sólo hice el trabajo sucio.

Pasaste los dedos por tu nuevo cabello y tocaste tu nueva nariz, te viste de frente y de perfil, Agatha te había convertido en lo que siempre quisiste ser y no podrías estar más feliz.

Corriste a abrazarla y ésta correspondió el gesto pero no con la misma intensidad, su mirada se veía un poco apagada a pesar de que sonreía.

- ¡Gracias, Agatha! ¡Eres la mejor! ¡Gracias, gracias, gracias!

- No olvides que la muñeca inflable desaparece a las 12, querida, así que ve a sacarte selfies o lo que sea que quieras hacer.- Dijo Agatha sacudiendo una mano.

Le diste un último abrazo a la bruja y corriste, eufórica, casi brincando, al centro comercial a comprarte lo que encuentres.

Al principio no podías creerlo, te mirabas en todos los espejos de las tiendas y aún así la imagen era nueva para ti. Te fascinaba tu nueva estatura, tu nueva figura, tu nuevo cabello (al que comenzaste a llevar suelto) y tu nueva sonrisa. Tanto, que sonreías todo el tiempo en todo el camino. La calle, el centro comercial, el parque y todos los lugares por los cuales pasabas parecían nuevos, te sentías una especie de turista y habías vivido en ese lugar casi toda tu vida.

Te probaste todos los vestidos que pudiste en el menor tiempo posible y todos te quedaban a la perfección con la nueva figura que tenías, pero había uno con estampados florales que viste semanas atrás y te lo llevaste apenas lo viste escondido entre muchos otros. Tu plan era el siguiente: Primero irías a la playa, después a caminar por el parque y en la tarde irías al primer bar que encuentres con la esperanza de tener una aventura de una noche. Le habías pedido a Agatha que te acompañe durante el día pero la bruja te dijo que estaría ocupada, aquello no te gustó mucho pero no podías pedirle más, te había cumplido tu mayor sueño y tal vez conociendo a más personas dejarías de pensar tanto en ella. Sólo tenías un día para hacer todo eso.

Caminaste en bikini por la playa, nadaste en el mar sin ningún tipo de temor, complejo o inseguridad de que tu cuerpo esté expuesto a la vista de otros, tomaste sol, sentiste los rayos en tu nueva piel e incluso una mujer rubia muy guapa se acercó a hablar contigo.

Saliste a la calle con tu vestido nuevo y te sentiste poderosa, "tal vez así se sentiría Agatha cuando usa su magia" pensabas, porque la sensación era completamente nueva para ti. Sola, en público y con un vestido corto, ese era el único día en el cual podías hacer algo así.

Las personas eran amables contigo en los restaurantes y te sorprendió la diferencia abismal en el trato de los demás con tu nuevo rostro y cuerpo. Las únicas veces en las cuales te sentías apreciada antes del hechizo eran cuando visitabas a Agatha, pensaste en invitarla a cenar como agradecimiento y en miles de formas de compensar lo incómoda que podría estar (Por supuesto que no pasaste por alto que ella mencionó más de una vez que no quería hacer ese hechizo).

Ser una chica bonita por un día fue el regalo más preciado que pudiste soñar (fantaseabas con ser atractiva todo el tiempo) y Agatha merecía saber lo mucho que apreciabas el noble gesto hacia ti, muy aparte de todo lo que hizo por ti desde que se conocieron y la cantidad de veces que te ha salvado el pellejo con sus poderes, definitivamente se lo ibas a compensar.

Eras feliz, te sentías animada, libre y sin esa incomodidad que te atormentaba a diario por no ser suficiente. Sin embargo, toda esa alegría sin Agatha al lado haciendo alguna broma de mal gusto se sentía algo vacía.

Comenzó a ponerse el sol y sabías que debías cerrar el "mejor día de tu vida" con broche de oro: Era hora de conocer a alguien.

Sabías perfectamente que tenías pocas horas para terminar tu lista así que lo mejor era tener una aventura de una noche lo más rápido posible y no volver a ver a la persona nunca más cuando se termine el hechizo. Finalmente podrías tener esa experiencia al menos una vez, ya no volverías a pedir nada, jamás. Corriste a tu departamento, sólo retocaste un poco tu maquillaje y caminaste hacia el bar más cercano con la seguridad de una modelo de pasarela; es que era precisamente así cómo te sentías, así no sepas manejar muy bien los zapatos de tacón alto.

Tal vez pasar la noche con alguien más te quitaría a Agatha de la cabeza, sus ojos, su voz, sus manos, su carácter y la gentileza con la que te trataba, tal vez comenzarías a verla sólo como una amiga muy querida y ya no como un amor platónico o alguien inalcanzable. Todo eso lo averiguarías cuando alguien se te acerque en ese lugar.

"Así como en las películas" te repetías "sólo dices que sí a todo y listo"

Te sentaste en la barra a punto de pedir un trago y "qué maravillosa es la magia de Agatha" pensaste, alguien se aproximó.

Era la misma mujer rubia que habías visto en la playa. Llevaba un saco color verde oscuro sobre un corset negro y botas en punta. No sonreía mucho pero al parecer te había estado observando desde que llegaste porque sentiste que alguien te había estado espiando.

Pediste el trago y la mujer, automáticamente, dejó escuchar su voz. "Yo invito" dijo apenas terminaste de hablar.

- ¡Oh!- exclamaste, sin tener idea de cómo reaccionar ante ese tipo de situaciones, habías visto tantas películas con escenas así pero no lograbas recordar nada que te guíe. - Uhm...¡gracias!- Continuaste con una sonrisa. La mujer era bastante guapa, sería una lástima que no vuelvas a verla después del hechizo pero las cosas sólo podían funcionar de esa forma.

- No nos presentamos correctamente en la playa. - La mujer tenía una voz profunda que te agradaba. - Soy Sylvie.

- T/N, Oh...lo siento, tenía que atender un asunto muy importante - mentiste.

- Vaya, creí que estabas de vacaciones o algo así, te veías muy contenta. Mis amigos y yo queríamos invitarte a un paseo en moto acuática pero saliste corriendo. ¿Tal vez en otra ocasión?

- Uhm...es que...yo debo viajar mañana, me mudo a Westview, pero me hubiese encantado ir con ustedes. - No quisiste ser grosera con ella pero tampoco podías continuar la mentira. Sabías que sólo podrías pasar tiempo con ella unas horas en caso de que te proponga algo.

- Oh, así que te mudas a Westview, qué pena...- Sylvie se veía bastante relajada en ese lugar, casi inexpresiva mientras que tú no parabas de sonreír, te sentiste un poco fuera de lugar pero no podías dejar que esa sensación arruine tu día.

- Sí, es una pena, pero es por...trabajo.- bebiste un sorbo de la piña colada que habías pedido. Sylvie pidió otro trago del cual desconocías el nombre.

- ¿Y en qué trabajarás? En "Westview"...- Sabías que sólo lo preguntaba por cortesía pero ¡qué difícil era seguir con la mentira!

- Bueno...uhm...voy a trabajar en una compañía de...

El teléfono de Sylvie comenzó a vibrar, la mujer sólo le echó un vistazo y lo guardó nuevamente en su pequeño bolso. Pudiste notar sus uñas pintadas de un verde metálico y oscuro.

- ¿Estás esperando a alguien? - Preguntó Sylvie de pronto, su mirada parecía querer atravesar tu cráneo. Estabas segura de que si esa mujer tuviese poderes, te hubiera matado sin querer.

- No...- Respondiste. A pesar de la belleza que poseías gracias al hechizo de Agatha, eras bastante mala con ese tipo de situaciones, no esperabas que todo se ponga tan extraño. - No espero a nadie.

- Ven conmigo. - Ordenó Sylvie con una media sonrisa y extendiendo a mano.

"Es la hora" pensaste. De hecho, el momento había llegado. Todo salía de acuerdo a tu plan del día, Sylvie sabía que no te volvería a ver y aún así decidió seguir con la charla. Tomaste la mano de la mujer y te llevó por un pasadizo esquivando a la gente, le dijo (no muy amablemente) a una pelirroja y un alto rubio besándose en un rincón que se marchen y se detuvieron en uno de los cubículos del baño.

"Definitivamente, sí, llegó la hora" Sylvie te colocó sin mucho esfuerzo contra la pared y sostuvo tu mejilla con una mano, a punto de acercarse y besarte mientras que su otra mano estaba apoyada en el muro, bloqueando tu salida. Estabas nerviosa porque jamás te había sucedido algo así pero había algo extraño en el ambiente (aparte del olor del lugar), habías caminado junto con Sylvie hacia ese lugar y no recordabas verla tan alta.

Sylvie estaba a milímetros de ti cuando el ruido de la puerta del baño cerrándose de golpe e hizo que Sylvie y tú salten del susto. ¿Acaso Hulk había entrado al baño de mujeres?

- ¡Qué demonios!- Exclamó Sylvie, saliendo del cubículo pero algo la lanzó con fuerza hacia el otro extremo de la habitación. Tú saliste de inmediato para ver que no fue Hulk quien entró, sino Agatha.

La bruja se veía furiosa, parecía haber perdido totalmente el control sobre sí misma.

- ¡AGATHA!- Exclamaste, pero Agatha no te dirigió la mirada. - ¡Qué diablos!

- Vete - Dijo Agatha hacia Sylvie. Trataste de ayudarla a reincorporarse pero ésta no te dejó.

- ¡Quién diablos te crees que eres! - Exclamó Sylvie, igual de enfurecida. Se había golpeado en la cabeza con la pared y estuvo a punto de saltar a atacarla.

- Lárgate, AHORA. - Agatha continuó.

- ¡Agatha, cuál es tu probl...!- La bruja no te dejó terminar de hablar.

- TÚ, quédate ahí, ¡¿Qué demonios estás haciendo aquí?!- Preguntó Agatha, esta vez acercándose hacia donde estabas y señalándote con el dedo.

- ¿Tú qué haces aqui? - Respondiste, indignada. - Sylvie...cuánto lo siento...

- ¡¿Me pediste que realice un hechizo peligroso para ESTO?!- Gritó Agatha extendiendo los brazos y señalando el lugar mientras que Sylvie, desde el otro extremo, levantaba las cejas.

- Oye, ¿Estás borracha?, váyanse al diablo...¡AAHH!- Comenzó a decir Sylvie, pero Agatha la empujó con magia hacia la puerta del baño y la cerró con la misma fuerza, dejándolas a la bruja y a ti, solas. Aún se escuchaba la voz de Sylvie desde afuera.

- ¡Me las vas a pagar, maldita bruja! ¡¡Está loca, miren lo que me hizo!! ¡No sabes con quién te has metido! - Gritaba Sylvie desde afuera, pero sus dos amigos la convencieron para irse.

- ¡¿Por qué hiciste eso, Agatha?! ¡¿Qué pasa contigo?!- Tú también habías perdido por completo la compostura, estabas prácticamente gritando pero Agatha se veía tan imponente que no te atreviste a decir mucho.

- No puedo creerlo, T/N. ¿Me pides que haga un hechizo de cambio de forma a las 5 de la mañana para que vengas a besuquearte al BAÑO de un bar de mala muerte?- La bruja se iba acercando hasta que quedaste atrapada en el cubículo. - ¡Lleno de ratas!

- ¿Y qué hay con eso? ¡No es tu problema! - Exclamaste ¡Es mi vida, soy una adulta y estaba en medio de...! ¡No tienes derecho a reclamarme nada, Agatha...!

- He intentado cuidar de ti desde que te conozco, T/N, y lo primero que haces es exponerte a millones de peligros apenas piensas que tienes la oportunidad, YO debería preguntarte ¡¿qué demonios pasa contigo?!

Habías olvidado algo importante, y esa era la hora. A la medianoche el hechizo se rompería y tú volverías a ser la misma de antes, tenías que salir a disculparte con Sylvie.

- Agatha, tengo que ir allá y disculparme con Sylvie...tú también deberías...

- ¿SYLVIE?- Exclamó Agatha, iracunda. - Pues, ¿Sabes qué? ¡Al diablo con la tal Sylvie! ¡No vas a ir!

- ¡¿Qué?!

Intentaste salir del cubículo pero Agatha te detuvo sosteniendo tus hombros. Podías ver la ira en su mirada.

- No irás.

- Agatha, déjame salir...- Dijiste enfadada pero tratando de mantener la calma, no querías causar más escándalo en un lugar público.

- ¿Quieres salir? ¡salgamos!- Dijo Agatha con un aire sarcástico y las hizo desaparecer para llevarlas al estacionamiento totalmente vacío. Su respiración se oía agitada.

- Oye, Agatha...- Diste un largo suspiro. - No te entiendo - La mujer mayor estaba parada junto a ti cruzando los brazos.

- Tú misma fuiste la que me sugirió buscar citas, ¿y ahora pierdes la cabeza cuando estoy en una? Yo quería que esto suceda, Agatha, ¿no lo entiendes? No me estaba atacando...¡y ahora me hiciste perder mi única oportunidad!

- ¿Tu única oportunidad para qué exactamente, T/N? ¿Dejar que una desconocida te manosee en un sucio baño público? ¿Eso era lo que querías hacer con tantas ganas?

- ¡Ese no es asunto tuyo! - Tomaste aire e intentaste mantener la calma porque las lágrimas comenzaron a salir. - Y en primer lugar, no sé qué hacías aquí y cómo me encontraste, ¡tú ni siquiera quisiste venir conmigo...!

- Sí, lo es. - Dijo la bruja secamente, sin quitarte la mirada furiosa de encima pero notaste que sus ojos estaban acuosos.

- ¿Por qué sería asunto tuyo? ¿Y quién eres tú para decirme qué hacer?

- Te estabas poniendo en peligro. - Agatha continuaba con el tono áspero que parecía más una reprimenda. - Viniste hasta aquí por voluntad propia, yo te ví, ¿Qué intentabas hacer, cariño? Si querías salir con alguien...- La bruja se detuvo por un instante. -...no necesitabas este estúpido hechizo. No lo necesitas ¿y sabes por qué? ¿quieres saber por qué?

Tenías un mal presentimiento. las lágrimas todavía corrían por tu rostro.

- Modifiqué el hechizo. Va a sonar un poco a cliché, pero estaba harta de esos comentarios horribles que hiciste sobre tu figura...y tu hermosa cara...así que hice unos cambios.

- ¿Qué hiciste, Agatha? - Estabas comenzando a asustarte.

- Algo un poco complicado pero por suerte funcionó...sólo tú podías ver a esa...muñeca inflable que creaste para el conjuro. - Dijo Agatha suavemente. Sabía que había traspasado un límite porque empezaste a sollozar sin poder controlarte. - Lo siento, cariño.

- ¡¿QUÉ?! - Exclamaste, pudiste jurar que el grito se escuchó hasta Westview. - Entonces...todo este tiempo...no, no puede ser...

- Sí, querida...todo el tiempo fuiste tú la única que se veía así, y estabas a punto de hacer algo sólo porque creías que te veías como otra persona...

Hubo una corta e incómoda pausa. Agatha miró hacia el suelo por unos segundos y no entendías qué sucedía. Lo único que dabas por hecho era que Agatha te mintió con respecto al hechizo e hiciste cosas que no harías en tu forma original.

- ¡¿Por qué me hiciste esto?! - No podías parar de llorar por más que lo intentes y las palabras que decías eran algo difíciles de entender - ¡Dijiste que me ayudarías!

- Yo te dije desde un inicio que no quería hacer el hechizo, T/N, ¡pero ahora viste que todo el tiempo no lo necesitaste!- La bruja colocó suavemente una mano sobre tu hombro, se veía tentada a abrazarte pero tú retrocediste.

- Agatha, escúchame...yo...- Fuiste interrumpida por Agatha. Se abrió la puerta del estacionamiento pero no viste los interiores del bar adentro llenos de luces tenues, sino un ambiente de exterior en plena tarde, justo al atardecer. "Magia" asumiste. La bruja dejó salir un largo suspiro.

- T/N, tengo algo que mostrarte...- Dijo Agatha con voz grave y frunciendo un poco el ceño. La pobre iluminación del estacionamiento no te permitió notar que sus mejillas se habían teñido ligeramente de rojo. Extendió la mano con la intención de que la tomes y así lo hiciste. Ni siquiera lo pensaste, o dudaste, simplemente diste un paso y tomaste su mano, la bruja entrelazó sus dedos con los tuyos y comenzaste a tener palpitaciones.

Te condujo hacia la puerta donde se encontraba el ambiente de atardecer y apenas pusiste un pie en el lugar, pudiste reconocer el parque donde Agatha y tú se conocieron. Tú la miraste con extrañeza pidiéndole silenciosamente que te explique qué sucedía.

- Es el día en que nos conocimos...- Dijiste con un hilo de voz, tu voz hizo eco en el lugar a pesar de ser un espacio al aire libre. La bruja asintió con la cabeza y caminó contigo hacia la banca donde una "tú" del pasado estaba sentada con la mirada perdida.

- Esa soy yo...el día en que nos conocimos...

- Así es, cariño. - Dijo Agatha, quien aún no soltaba tu mano.

De pronto, se oyeron unos pasos sobre el césped. Saltaste del susto cuando viste a la Agatha de ese momento aproximarse y saliendo justo desde donde estaban paradas. La bruja del pasado caminó muy confiadamente hasta la banca donde la T/N del pasado estaba sentada y tomó el asiento de al lado quedando justo a su lado.

- Recuerdo esto...- Le dijiste a Agatha. - Tu viniste y sólo te sentaste a leer...¿Por qué me estás mostrando esto?

Aquel día habías sufrido el rechazo de una mujer que te gustaba mucho y aquello era algo que siempre te sucedía, la habías conocido en una aplicación de citas y ese había sido tu último intento de salir con alguien. No sabías realmente si necesitabas estar sola pero tampoco querías dejar que tu entorno se entere de lo que había pasado. Estabas harta de que siempre te pase lo mismo y en ese momento decidiste poner un alto a la búsqueda de una pareja, sabías que no podías hacer más al respecto y sólo podías resignarte a la soltería por tiempo indefinido.

- Sigue mirando, cariño. - Dijo Agatha, mirándote de reojo.

"Disculpa la intromisión..." Dijo la Agatha de pasado mientras cerraba su libro. "Pero está oscureciendo querida, y este lugar no es muy seguro de noche..."

"Estoy bien... gracias" Respondió tu versión pasada secamente, aún sin mirarla. "Me está...¿echando?"

"¡Soy Agatha!" La bruja del pasado buscó la mirada de tu versión del pasado con la suya y le ofreció una amplia sonrisa. La T/N del pasado quedó impactada no sólo ante su respuesta, sino también hacia la increíble belleza de la mujer.

-No tenía la más mínima idea de qué te había pasado, no podía leer tu mente, sería grosero, pero si no te decía algo ese día, tal vez no podría hacerlo nunca.- Te dijo Agatha inclinándose un poco hacia ti, como si sus versiones del pasado pudiesen escucharla.

"Soy...T/N..." La T/N del pasado contestó como si no hubiese pasado ningún evento anterior a ese momento.

"¿Todo bien con ese rincón del parque, T/N? No dejas de mirar hacia allá." Dijo la Agatha del pasado. "¿Acaso viste algo?"

"Oh...no, disculpe es que...suelo perderme en mis pensamientos, lo siento mucho, es algo que a veces no controlo..." Dijo la T/N del pasado a la Agatha de ese tiempo, quien para ese entonces era una completa desconocida.

"Puedes contarme lo que estás pensando si deseas hablar" Dijo la Agatha del pasado.

- ¿Por qué me dijiste eso ese día?- Le preguntaste a Agatha. Aún seguían con las manos entrelazadas.

- Sólo te vi ese día y... quise hablar contigo. Eso es lo que haces cuando alguien te interesa, ¿Cierto? Además, me pareció que no seria un mal momento para que te desahogues, creo que lo habías pasado mal y no me gustó verte así...

Volteaste a mirarla rápidamente apenas procesaste lo que acababa de decir.

- ¿Agatha?- La bruja no contestaba, con un movimiento de la mano libre las transportó a otro momento dónde tú y Agatha interactuaban. Esta vez el lugar era su sótano y la bruja te mostraba algunos de sus libros.

" ...Y ten cuidado con este, cariño, este es el libro de los condenados, yo lo mantengo aquí porque nadie más puede usarlo". Decía la Agatha del pasado mientras te realizaba una especie de tour por su sótano, era la primera vez que lo visitabas.

- Ese día me mostraste tus libros, fue increíble...- Le dijiste a Agatha con una sonrisa mientras la T/N del pasado observaba todo con curiosidad. Agatha te miraba de reojo.

"...Este libro de aquí tiene hechizos simples, cosas básicas, creo que hasta los mortales pueden intentar un par de ellos sin terminar mutilados, ¡pero no le digas a nadie!" Dijo la Agatha del pasado guiñando un ojo.

"¿En serio? ¡Excelente!" Exclamó la T/N del pasado con entusiasmo.

"Sólo te lo permito a ti querida, después de todo te has convertido en mi mortal favorita" Dijo Agatha del pasado con una tierna sonrisa y las mejillas de una feliz T/N del pasado se tiñeron de rojo al instante.

"¿De...verdad?" Preguntó tímidamente la T/N del pasado.

"¿Qué no es obvio?" Contestó Agatha del pasado, continuando con su recorrido y disfrutando la vista de una T/N con el rostro sonrojado, tratando de forzarse a no sonreír demasiado.

- Lo es. - Dijo la Agatha que tomaba tu mano, de pronto. Tú volteaste a mirarla y tratabas de atar los cabos. - Lo fuiste desde entonces y lo sigues siendo, incluso ahora...

- Agatha...yo... ¿tú siempre...?- Fuiste interrumpida nuevamente porque la bruja las llevó a otro momento antes de que pudieras ordenar tus preguntas.

Las había llevado al momento en el cual le pediste como favor que cambie tu apariencia con magia. La Agatha del día anterior tenía la misma expresión preocupada y disgustada que la bruja que tomaba tu mano.

"T/N, querida, ¿escuchaste lo que te acabo de decir hace unos minutos? No hay nada qué cambiar, te ves preciosa así como estás ahora." Agatha del pasado sostuvo las mejillas de esa T/N con ambas manos pero la mortal siguió insistiendo. Ambas estaban a muy poca distancia la una de la otra y tú comenzaste a darte cuenta de qué estaba pasando.

Agatha hizo desaparecer el ambiente del día anterior con un chasquido de dedos y volvieron al presente. Al estacionamiento. Dio unos pasos y tomó tu otra mano mientras se aproximaba hasta detenerse justo frente a ti.

- Agatha...al comienzo yo sólo quería...- Intentaba explicar todo lo que corría velozmente por tu cabeza pero era muy difícil.

- ¿Ahora puedes verlo?- Dijo Agatha, las cortas pausas que hacía al hablar te causaban mucha angustia.

- ...Yo sólo quería sacarte de mi cabeza - Respondiste. Agatha quedó casi boquiabierta. - Aparte del cambio de apariencia.

- ¿Qué? ¿De qué estás hablando?

- No sé cómo explicarlo...- intentaste soltar las manos de Agatha suavemente pero ella no las dejaba. - ...pero pensaba que no me querrías del mismo modo que yo a ti...- Continuaste. - ...porque yo siempre estuve...¡estoy! muy enamorada de ti, Agatha...y...no creía que tú corresponderías...

Lo habías dicho y no había vuelta atrás, pero por suerte Agatha te había mostrado que estaba lejos de no corresponder tus sentimientos.

Agatha tenía la vista perdida en ti. Sólo te escuchaba con atención pero en el momento en el que hiciste una pequeña pausa para pensar bien en qué dirías exactamente, la bruja cortó la distancia entre ustedes dos en un solo movimiento capturando tus labios con los suyos en un tierno beso. Soltó tus manos para envolver sus brazos en tu cintura y tú te aferraste a su cuello, la única fuente de luz en la calle las iluminaba mientras todo alrededor se hizo pura oscuridad. Los labios de Agatha se movían con delicadeza pero sus manos estaban firmemente puestas sobre ti, una en tu cintura y la otra acariciaba tu cabello.

- Oh, querida...debiste habérmelo dicho - Dijo Agatha rompiendo el beso por un instante para respirar y juntando su frente con la tuya - No tienes idea de cuántas ganas tenía de hacer esto desde que nos conocimos.

- Yo también, pero creí que tú no sentirías lo mismo...

- Shh...- Agatha te besó nuevamente y tú pudiste seguir sus pasos, jamás habías besado a nadie y sólo con el toque de los labios de la bruja viste estrellas. - No vuelvas a pedirme que modifique tu apariencia, no pienso hacerlo, eres perfecta así.

- Lo siento...- Respondiste con un hilo de voz y Agatha plantó un beso en tu frente. - Por todo esto, fue una estupidez.

- Yo también cariño, te hice pensar que realicé un conjuro de verdad y no debí hacer eso, de hecho creí que no volverías a hablarme, ¡Ja, ja! aunque te diste cuenta de que no lo necesitas.- Dijo Agatha dulcemente. - Sólo quería verte feliz...y darte una lección de paso.

- Yo insistí, no tenía idea...

- Bueno, ¡parece que por fin el día ya terminó! para ser honesta, ¡ese vestido te queda mucho mejor que a esa muñeca inflable horrible que creaste! No creas que no lo he notado.

- ¡Oh, Agatha! - volviste a abalanzarte sobre la bruja con el rostro encendido y ésta te sostuvo nuevamente entre sus brazos, aquella sensación maravillosa continuaba, jamás se iría y lo mejor era ya no tenías que esconder nada. - Te extrañé hoy.

- Y yo a ti. Será mejor que nos vayamos de aquí cariño, tengo muchas otras cosas más que mostrarte, mucho mejores que ese sitio de mala muerte y seguro tu amiga la tal Slyvie nos está buscando con policías.

- ¿Qué clase de cosas? - De un momento a otro quedaste cargada en los brazos de Agatha, quien te llevaba lentamente y levitando hacia su casa. Soltó una risa fuerte para finalmente contestar.

- Te sorprenderías, querida.

[aurovear]

10/09 ᴇʟ ᴅɪ́ᴀ ᴍᴜɴᴅɪᴀʟ ᴅᴇ ᴘʀᴇᴠᴇɴᴄɪᴏ́ɴ ᴅᴇʟ sᴜɪᴄɪᴅɪᴏ

Es dos días tarde, lo sé, últimamente he estado muy ocupada; igualmente quiero ayudar respecto al tema, quizás no ayude publicando un dibujo en una red social, pero tengo cercanos que realmente han intentado suicidarse, por lo que me interesa dar el mensaje de que hay esperanza: siempre hay solución para todo menos la muerte.

A continuación pondré algunas medidas de prevención del suicidio para que apoyen a quienes lo necesitan:

• Sean empáticos, no ignoren las señales; recuerden que aunque hayan muchas personas que sólo dicen tener depresión por atención uno NO debería de ignorarles, aveces es mejor hacerle caso y que sólo haya sido una boludez, a que sea cierto y uno no haya hecho nada al respecto.

• Hablen del tema, investiguen e informen a los demás, el que lo hablen o lo investiguen no les dará la idea de suicidarse, esto abre paso a que se inicie una conversación de ayuda, también lo previene porque si se informan sabrán como llevarlo de una mejor manera.

• El sufrimiento emocional que tiene el suicida no es voluntario, no se trata de tener la voluntad suficiente para salir de ello, simplemente algunas cosas son demasiado para una persona. Den apoyo, no culpen a la persona por estar ahí, si ustedes no saben tratarlo compartan números de apoyo y locaciones donde le pueda atender un profesional.

Números de atención psicológica gratuita en México:

Números nacionales de atención en crisis

• Locatel 24hrs: 55 5658 1111

• Servicio de urgencias: 01 800 227 4747

Números de prevención de suicidio 24hrs:

Coahuila:

• 800 822 3737

Guanajuato:

• 800 290-0024

Jalisco:

• 33-3833-3838

Ayuda en horas de oficina:

Morelos:

• 777 314-5188

Puebla:

• 800 716-6575

Terapia a BajoCosto:

Atención psicológica de la UNAM

Horario: lunes a viernes de 8:00 a 18:00hrs.

Número: 55 5025 0855

Asistencia de la UNAM

Horario: Lunes a viernes de 9:00 a 17:00hrs.

Número: 55 5804 6444

Apoyo a quienes sufren violencia

Horario: 8:00 a 22:00hrs. Todo el año

Número: 800 015 1617

Realmente espero que si se encuentran en esa situación puedan salir de ella, es un dolor que nadie se merece; evitemos que se tenga que llegar a ese punto 💛

[loslunaresdemargaret]

Hace cinco años conocí al amor de mi vida.

Era un hombre perfecto.

Trabajo envidiable, camioneta, casa y familia perfecta.

Dios al fin había atendido mis oraciones.

Mi novio, mi amigo, mi futuro esposo. Mi todo.

Regalos, cenas caras, dos o tres viajes, chucherías, adaptarnos a sus tiempos, relojes, café, todo lo que el quisiera... encontraría la manera de que lo tuviera. Desde hacerle la tarea hasta pagarle la afinación de la camioneta, él lo merecía, merecía todo de mí.

Lo puse en un pedestal.

Me prometió la casa, el perro y el jardín verde.

Me llevó a ver departamentos, me alimentó la fantasía del para siempre, porque él sabía que la necesitaba.

Yo comencé a estar loca, exageraba mis emociones, ellas solo eran amigas, mujeres necesitadas de un hombre como él, que las abrazara, que escuchara como sus novios las habían dejado, como habían abortado, como eran las amantes... él era el consolador de sus madrugadas, el salvador que curaba sus heridas y quizás, las besaba. No significaba nada. ¿Estaba conmigo, no?

Dejé que borrara mis ideales, pues él era demasiado bueno para ser real, valía cada desgaste mental, cada mentira que me decía, cada mujer nueva que llegaba a su trabajo.

Era insegura, celosa, no tenía autoestima... él me diagnosticó sin ser personal de la salud. Me mandó a terapia.

Seguía siendo el amor de mi vida.

Debía de cambiar, de entender que así era su estilo de vida, que yo debía de serle fiel, demostrarlo en cada acto, en cada red, en todos los espacios, pero no podía exigirle lo mismo, porque yo lo había provocado, yo lo había llevado con mis inseguridades a no ser merecedora de su amor.

Adiós a la casa, al perro, al jardín, lo eché a perder por idiota, porque no le puedo demostrar que valgo la pena.

Avienta el celular para no golpearme a mí, arroja limones a mi cara, a mis pies, para no darme con el puño, me menosprecia en público para no llorarle en privado.

Me compra mis flores favoritas, el celular del año, pero no puede estar con una mujer tonta como yo, que no tiene presencia, que no demuestra fortaleza.

Pido en terapia modificar todo lo que a el le molesta, me vuelvo lo que pedía... entonces ya no valgo nada, ya no sirvo, ya no le soy útil. Debo de aceptar que hay mujeres mejores que yo en su vida, por el simple hecho de tener una mejor camioneta, me lo dice en tono burlón.

Me rompo.

Pienso en la muerte. En arrojarme del vehículo, el suicidio suena más placentero que seguir escuchando cómo es que soy insegura, mala mujer y que no valgo nada.

Le doy una bofetada.

SOY LA PEOR PERSONA DEL MUNDO.

¿Cómo me atreví? Tantos años de relación, lo herí, le partí el alma, le destrocé el corazón, la vida. Merezco irme al infierno, me lo recordará siempre: no soy capaz de escuchar que otra mujer es mejor que yo y por eso exploto con violencia, necesito tratamiento psiquiátrico, necesito cambiar todo de mi, porque él no merece estar con una mujer como yo, el no merece esto, sabe cuanto vale y yo me he convertido en un monstruo.

Estoy loca.

Él viene y se va.

Me castiga con semanas de silencio.

Ley del hielo.

Pero sigue siendo encantador, sigue siendo una cortina muy costosa, muy hermosa; en público me envidian por cómo me trata, cuando me enfermo está conmigo, porque vivo con mis padres, porque mis amigos pueden enterarse del increíble novio que es. Pero tras bambalinas, es lo contrario.

Cuando dejo de mostrar en Instagram lo que me obsequia se molesta, me reprocha. Ya no le interesa estar conmigo en privado.

Necesito ir al ginecólogo, quizás sea un problema de ambos.

Nadie puede halagarlo, porque no es algo de presumir en redes sociales, le da igual el día, la hora o con quien vaya.

Le da igual el resultado.

Me desmorono.

Estoy loca y en el abismo.

Soy tonta, por no saber de su trabajo, por no conocer bien el tema de conversación, porque no conozco los términos. No importa que yo tenga un título universitario, que haya leído trescientos libros, todos mis diplomados, eso no vale, soy una ignorante, una burra, por ello no puedo ir con sus conocidos, aunque me haya empapado del tema, porque siempre hablarán de la misma cosa: aviones y mujeres.

Pero he leído los libros para hacerle sus trabajos, para que pueda crecer laboralmente.

No me debe nada, él lo hizo solo.

Le vale madre.

Se esfumó.

En menos de un mes consiguió una nueva novia, en menos de un mes presumió en redes a una mujer de las que habíamos hablado, a la cual me dijo yo no podía conocer, porque era SU AMIGA, NO MÍA.

En todo me metía.

No le daba privacidad.

Por eso me dejó.

Siento culpa. Yo lo cambié. Si hubiera tolerado, si hubiera tenido confianza ciega. Si hubiera...

Si hubiera sabido que salí con un NARCISISTA, me hubiera ahorrado cinco años de lágrimas, noches de insomnio, semanas de culpa y mucha violencia.

[purplepaus]

Hola a todos! Para el martes 19 de octubre tenemos el tema " Flores" en el @flufftober2021 y he traído un trabajo viejito pero sabroso, para ser exactos un fic que publiqué el año pasado. Sin ser más iniciamos!!

Fandom: Yowamushi Pedal Ship: Izumida Touichirou x reader Tema: Flowers- flores (Flufftober 2021 versión Tumblr) Proyecto: Rebel reindeers: Un musical de navidad. (Terminado en wattpad ) Categoría: AU teatro musical, idols, conciertos, Navideño. Sinopsis: Conoce la historia de dos renos novatos que se rebelarán contra alguien muy importante en el universo de la Navidad y su búsqueda por el mundo a pocos días de esta gran celebración. Será un gran espectáculo con las influencias del teatro musical, eventos de idols y seiyuus, conciertos y música de diversos tipos. Toma tu asiento en primera fila y a divertirse!

Omake 1: Red roses: - Izu-chan!! - Exclamaste apenas lo viste desde la lejanía y en medio de la grama del estadio solitario corriste a abrazarlo con felicidad. Se estrecharon como si no se hubieran visto en años, él sin dudarlo aferrado a ti te dio vueltas lleno de dicha. Tuviste que ahorrar mucho dinero con el fin de obtener tu boleto en las primeras filas, ahora que disfrutaste del gran espectáculo y tu amado se encuentra frente a ti sabes que tus esfuerzos valieron la pena: viajar temprano desde Hakone a Yokohama, las largas filas y aguantar hambre y frío no eran nada ante la felicidad de reencontrarte con Izumida luego de semanas sin encontrarse debido a la gira nacional del show. Decidieron ir a cenar a un restaurante de ambiente muy íntimo y en una esquina con luz tenue se ubicaron los dos. - Itadakimasu! - Dijeron ambos y empezaron a comer, poco a poco él cubría tu mano y la acariciaba suavemente, durante la conversación te miraba a los ojos con aprecio. - Esa caja de rosas rojas... te la obsequiaron? T/N - san? Son muy hermosas y....-   Te preguntó y tú lo interrumpiste porque en realidad las rosas eran para él. Tal vez él amaba las flores pero jamás imaginó que su novia le obsequiaría unas. En ese momento sintiéndose agradecido quiso pararse de la mesa y darte un gran beso por tan bella atención, aún así prefirió guardar la compostura y se manifestó tomando tu mano y entrelazando sus piernas con las tuyas. Se hizo tarde, el transporte público ya no funcionaba y tampoco trajiste tu bicicleta, por tanto debías alojarte en algún sitio. Tenías dinero en caso de que eso pasara, sin embargo Touichirou leyó tu mente e hizo una propuesta indecente. - Quédate esta noche conmigo, estoy alojado en una suite exclusiva. Tú puedes dormir en ... la cama y yo ...abu... en el sofá.- Te propuso y sus mejillas se ruborizaron. Aceptaste sin dudarlo. Ya en el solitario ascensor que los llevaría a la suite te abrazó y encerró en un rincón, tú esperabas más, sin embargo él sólo te besó castamente porque todavía no quería dar muestras desbordadas de pasión... Si no hubiera cámaras dentro del elevador el final podría haber sido un poco más intenso. Era una noche otoñal y el frío se alcanzaba a sentir en la enorme habitación, él prendió la calefacción y te ofreció una lata de chocolate caliente mientras lo esperabas en la sala; para Izumida el simple hecho de recibir por primera vez flores de parte de una chica lo había motivado a darte una sorpresa. Justo cuando acabaste la bebida él regresó a la sala. Del saco azul de lana y sus vaqueros verde oscuro ha pasado a solamente tener puesto un corbatín y pantalón de vestir negro y zapatos charolados a juego. Tú no le quitabas la vista de encima, se veía tan elegante y tentador a la vez! En el momento que pensaste ir a abrazarlo y así sentir la piel de su torso desnudo él te dedicó la rutina de tap dance que haría. - Deseaba haberte visto al hacer mi presentación y más en mi duelo contra Teshima, yo... cuando bailaba te pensaba. Esto es para ti T/N - san!!! - Dicho esto te besó en la mejilla y puso una canción de sugerente jazz, tú ruborizada por el obsequio no dejabas de observarlo. Él danzaba usando el carácter de los "bailaores" españoles, agregado a una tácita sensualidad y coquetería, el profesionalismo de las grandes estrellas de Broadway y una mirada un tanto imponente atenuada con una ligera sonrisa. Él finalizó su rutina e hizo una reverencia ante tí, lo aplaudiste de pie y después de erguirse te acercaste, tomaste su cintura morena con tus brazos y lo besaste apasionadamente, él se unió a tí y duraron juntos por varios minutos. - Te ves hermoso así Izu-chan!! Estás muy... provocativo.- Le dijiste con algo de vergüenza cuando lograste respirar después de ese beso poderoso. Él, entrado en calor dejaba de ruborizarse con tanta facilidad y agradeció tus cumplidos. Tú recordando las épocas en que casi lo llevaste por la fuerza a aquel curso de baile para que se olvidara de la depresión por fracasar en su primer interescolar le pediste que te cumpliera un capricho: -

Izu-chan, bailemos un tango juntos como en las viejas épocas. - Tus deseos son órdenes, T/N- san!!! Él reprodujo en su celular " A media luz" y rodeándote empezaron a pasear por toda la sala, las caderas de ambos se rozaban silenciosa y sugestivamente ostentando un magnetismo indescriptible; él te miraba con un sutil dominio lascivo que confundía y excitaba tu mente. Sus inquietas manos acariciaban tu espalda y cintura o de forma sorpresiva una de ellas tomaba tu pierna con la intención de levantarla y sentirla a través de la yema de sus dedos reprimiendo un gemido lujurioso. Ambos desparramaban pasión por donde iban y conforme avanzaba la tonada se sincronizaban los acercamientos e intentos hacia un beso pero ninguno se lanzaba a dar el toque final; los últimos acordes empezaron a sonar y el pestañudo capturó tu cintura, siguiendo tus instintos te inclinaste hacia atrás esperando a que posara sus labios sobre tu escote, mas no recordabas que traías un buso de lana con cuello alto y unos gruesos pantalones de mezclilla, él también se confundió y al detenerse sobre tu busto prefirió subir unos centímetros más para aterrizar en tu boca. " Maldito saco de lana, malditos pantalones, maldito otoño!!" Tu mente odió esa estorbosa ropa que te impedía sentir bien sus caricias, al mismo tiempo él cambiaba el rumbo de su boca. Sin embargo olvidaste todo eso cuando Izumida te besó con una sed de ti que no vivías desde su último Interescolar. Nuevamente quedaron sin respiración después del  enérgico contacto. Recuperando la calma él te miró a los ojos deseoso de poseerte y te contó ilusionado que en la habitación de la suite tenía más sorpresas para ti. Touichirou te llevó en sus fornidos brazos hasta el lujoso dormitorio, aunque el camino fue breve lo disfrutaste recostando tu cabeza sobre Andy y sintiendo su textura suave y tibia mientras cerrabas los ojos dulcemente. - T/N - san, abre los ojos por favor y mira hacia la cama.- Te ordenó con amabilidad el pestañudo. Sobre las impecables sábanas de la mullida cama resaltaba un corazón hecho de pétalos de rosas rojas y rosadas representando la pasión y la ternura que le inspirabas, al lado se veía una tarjeta mediana con un sincero mensaje escrito por él: " Eres la flor más bella de todo el universo. Te amo, mi hermosa T/N-san." Tú querías abrazarlo mas estando todavía entre los cincelados bíceps de Izumida sólo pudiste refugiarte eternecida en su pecho cálido y darle las gracias casi en un susurro.  Él colocó sus labios sobre tu frente y minutos después gentilmente te bajó de su regazo para besarte, esta vez con una ternura que de a pocos se fue transformando en deseo.

[flordecerezo]

EL DILEMA DEL ERIZO

Lorenzo y su padre pasaban las vacaciones en un pueblo cercano a Sevilla. Luis había comprado recientemente una casa allí porque siempre había tenido una mala opinión de las ciudades. Pretendía que su hijo no se pasase las tardes frente a la videoconsola o frente al ordenador, sino que saliera a correr por los campos, viera las estrellas y no se intoxicara como él siempre decía, con las modas de las redes sociales.

A Lorenzo le encantaba ir al pueblo porque su padre le dejaba ir a donde quisiera con sus amigos, algo que en la ciudad no ocurría. Hacía algunas semanas habían descubierto una casa abandonada a la que solían acudir para hacer investigaciones sobre ovnis en el lugar que ellos denominaban “tierras altas”. Luis no le había puesto hora de recogida pero al ser muy tarde y aún no haber llegado Lorenzo salió a buscarlo. Fue a la feria que había por aquel entonces y a la casa de Alberto, con quien siempre solía estar. Recorrió el pueblo pero ni rastro de Lorenzo.

Pasó el tiempo y parecía que a Lorenzo se lo tragó la tierra y por algún motivo, el padre siempre estuvo entre los sospechosos y punto de mira para la policía y vecinos del pueblo; mientras que para Luis siempre fue sospechoso su vecino. Luis simplemente buscaba calmar su sed de incertidumbre, todos sus esfuerzos iban por buscar a un culpable más que a buscar a su propio hijo.

Pasaron los años y Alberto estaba ya en la Universidad. Se cogió el turno de tarde porque solía tener problemas de sueño. Solía soñar con Lorenzo, una pantalla de ordenador y una chica con un vestido blanco y un lazo mirando hacia el precipicio. Nunca le dijo a la policía que Lorenzo se hizo una cuenta de Messenger en un locutorio, a veces hablaban por ahí cuando él se encontraba en Sevilla entre semana. Eso le aliviaba a Alberto las tardes puesto que buscaba huir de las continuas peleas que sus padres tenían en casa cuando era niño. A ojos de Alberto su padre era la perfección pero su madre era el mal que traía frialdad y peleas a casa. A la edad de veinte años conoció por Internet a una chica llamada Lila, le hacía gracia su nombre. Esa relación se extendió por Internet durante dos años hasta que llegó el momento de conocerse. Ella vivía lejos, sin embargo, momentos antes de la supuesta llegada de Lila, ésta le dijo que no le esperara porque ella nunca existió y nunca fue la persona que dijo ser. Alberto empezó a dar vueltas por el salón, empezó a fumar y fue el comienzo de una espiral que a la edad de los 30 años aún no se ha resuelto. Durante 10 años se vio involucrado en relaciones de idas y venidas y relaciones de dependencia atormentado por sus miedos. También había tenido varios intentos en el cine y la música buscando la fama de forma obsesiva como forma de sentirse escuchado y atendido, pero nada resultó.

Alberto había pasado años inmerso en el mundo del alcohol y las drogas, luchando por ser un personaje público. Un día por Internet, conoció a Blanca, una chica diagnosticada de “hipersensibilidad emocional”. El nivel de profundidad de esa primera conversación les asombró a ambos. Alberto pensaba que era mágica, que era la oportunidad de ser feliz y a la misma vez eso le atormentaba, le recordaba a su padre, ella era la perfección. Esa conexión tan fuerte hizo que al mes, Alberto desapareciera de la red asustado. Pensaba que ella era demasiado buena para él, no quería hacerle sufrir con sus adicciones y su inestabilidad.

Entonces, Alberto trazó un plan, buscó enamorar a alguien que le diera certezas de que no lo iba a dejar. Tenía la necesidad de confirmar de que era capaz de tener una relación de pareja y de ser una persona sana para conseguir estar con Blanca. Empezó a salir con Rosa una chica muda de quien en realidad no estaba enamorado pero que sabía que el amor que ella sentía por él era tan grande que nunca lo dejaría. Esta chica dejó de hablar a la edad de los 8 años, sin embargo ningún médico encontró anomalías en su aparato fonoarticulatorio. Pasó un año y Alberto estaba totalmente limpio, durante ese tiempo no volvió a consumir alcohol ni drogas y se consideraba una persona estable emocionalmente y sana. Por ello, decidió volver a contactar con Blanca. El ciclo de seducción y atracción se volvió a dar y decidieron esta vez materializar y verse por primera vez. Tras el encuentro íntimo, Alberto vio una fotografía de carnet en su cartera y por la que preguntó sin más. Ella le respondió muy alegre que era su hija que había cumplido un año recientemente. Alberto salió corriendo del piso y se compró un paquete de tabaco. No podía creer cómo el amor de su vida le había engañado de esa manera.

Rosa había encontrado hacía tiempo el diario de Alberto, donde exponía lo enamorado que estaba de Blanca y la ansiada cita que tenían aquel día. Rosa había estado estudiando los movimientos de Blanca desde hacía algún tiempo, planeó entrar en el piso y asesinarla dejando pistas que pareciera que fue Alberto quien cometió el asesinato.

La primera vez en 10 años que Rosa habló fue en un plató de televisión para hablar de la infidelidad de Alberto y el asesinato de Lorenzo a manos de su padre, quien abusó de ella a la edad de los 8 años y quien vio el cuerpo de Lorenzo en una caja de juguetes en el sótano. Luis había descubierto que Lorenzo tenía una cuenta de Messenger y obsesionado con luchar en contra de los tiempos modernos y mantener la infancia, en un arrebato mató a Lorenzo de un mal porrazo con un cenicero.

Por primera vez en 10 años Rosa fue visible, que es lo que realmente ansiaba.

[satorugojowidow]

Lulubaiiii te extrañé. mi red no me dejó entrar a este sitio web como por tres meses hasta ahora 😭 nunca contesté ni te agradecí por responder mis preguntas y misconceptions sobre H/historia, las he tenido muy en cuenta y he querido volver a leer tus opiniones pero no he podido 😭💜

ya, eso era todo. gracias por existir ✨

Hola!

Que bueno tenerte de vuelta <3 De nada! Fue una conversación muy interesante.

que lindo mensaje, gracias!!! <333

[tastaturean]

Así pasan las semanas hasta que un buen día nos encontramos con medio colegio congregado alrededor de lo que parece un cartel al pie de las escaleras del gran recibidor. Como no podemos avanzar todos entre la multitud, Ernie, que es el más corpulento, se hace un hueco rápidamente a modo de avanzadilla. Sin embargo, pronto encuentro otra vía y le sigo. Potter y sus acólitos ya están allí, en primera fila. A ver... la semana que viene, el viernes, a las 6... Durmstrang y Beauxbatons... ¡Las clases acaban media hora antes! ¡Genial! Banquete de bienvenida y todo. Mmm.

"¡Dentro de una semana!" exclama Ernie con los ojos brillantes por la emoción. No me ha visto, creo que se lo ha dicho a Potter y Weasley. Que va a avisar a Cedric de inmediato. Weasley no parece acordarse de quién es Cedric y, cuando lo hace, la sarta de estupideces e injurias que profiere contra mi capitán hace que me entren ganas de ir allí a sacudirle un guantazo. Por suerte Granger sale en defensa de nuestro prefecto, (sí, porque es prefecto, claro) y me ahorra problemas. ¿Y qué pasa por que le gustara Lockhart? A mí también me gustaba antes de descubrir que era un fraude. Cedric no es un fraude, ¡Cedric vale su peso en oro! Más que tú, Weasley. Él no necesita estar a la sombra de nadie para hacerse notar. Pero estoy tan enfurecido que prefiero no decir nada. Tampoco parecen haberme visto ellos. No sé ni por qué los he seguido escaleras arriba, si mi sala común está abajo. Retrocedo. No tengo por qué defenderle, ¿no? Él ya no es asunto mío. Bah.

Salgo fuera a tomar el aire y me encuentro de frente con Luna Lovegood.

"Bonito día para sacar a pasear a los escregutos, ¿no crees?"

"¿Mande? ¿Te gustan esos bichos?"

"Me recuerdan a una mascota que tenía de pequeña. Le he dicho lo que yo le daba de comer a ver si crecen rápido y fuertes. ¿Crees que podremos montarlos algún día?"

"La verdad, aprecio demasiado mi trasero."

"Lo que yo quisiera montar de verdad es un Thestral. Tú no has visto ninguno, ¿verdad?"

"Eh... no. ¿Tú sí?" pregunto extrañado. Para ver un Thestral...

"Sí, claro. Todos los años aquí en Hogwarts. Oye, ¿por qué hay ese revuelo?"

"Ya se sabe cuándo vendrán los otros colegios: el viernes que viene."

"Me pregunto qué clase de transporte utilizarán. ¿Te imaginas un dragón balcánico o una red de hadas de los Pirineos?"

"No..." Me siento estúpido respondiendo sólo con balbuceos y monosílabos, pero es que esta chica no me da cancha a una conversación más coherente por mi parte. No sé si me toma el pelo o se golpeó la cabeza cuando era pequeña, o una de esas mascotas le explotó en la cara, la dejó flipada y-

"¿Tú eres...?"

"Justin, Justin Finch-Fletchley. Hufflepuff."

"Bueno, eso ya lo veo en tu túnica, Justin. Yo soy Luna. Ahora voy a ver si puedo leer entre líneas cómo van a venir los otros colegios."

"No dice nada de-"

"Un día de estos, vente a ver los escregutos conmigo. Hagrid se alegrará. Cree que a nadie más le gustan," me dice, se despide con la mano, y entra.

Yo me quedo parado, tratando de asimilar el intento de conversación que he mantenido con la Ravenclaw pirada.

— Extracto de ¡Hufflepuff Existe! Capítulo 9 -  No llores por mí, Justin Finch-Fletchley      [AO3] [Ffnet]      

Comienza el cuarto curso y antes de que Justin pueda aclarar qué hay ahora entre Cedric y él después de aquel beso furtivo junto al Lago Ness, el prefecto y capitán de Hufflepuff se ve arrollado por el Torneo de los tres magos y las expectativas puestas sobre los campeones de cara al baile de Navidad.

[cloyder]

Mimar mi espacio.

Quiero estar lejos de toda red social por 90 días, me cansé de consumir lo mismo, las mismas estupideces, las mismas personas, me estaban consumiendo debo decir, esperando el algo de alguien, pero que este final de año me enseñó en unos pocos días lecciones muy poderosas. Quiero renovar mi circulo, estar y saber de las personas que realmente quieren saber de uno. A la mierda todos los que no conozco al final, lo que les pasa o no les pasa. Necesito calma, necesito estar fuerte; me cansé de la gente que solo resta, que solo le preocupa problemas como “es que me dijo", “es que no me dijó”, “es que me llamó ” o “es que no me llamó ”; me cansé de ser quien escucha siempre antes que ser escuchado, me cansé de ser quien quiere darle soluciones a los demás y aun no soluciona sus propias cosas ¿Por que siempre tengo un respuesta y consejo para el resto y el resto no lo tiene para mi? o lo tienen pero son ideas absurdas enfrascadas en conceptos estúpidos que no me sirven. Me cansé de recordar cosas que al final ni tengo por que hacerlo, o tener presente gente de hace años que al final solo les interesa que uno este para ellos pero no ellos para uno. Corremos en la medida que avanzamos con gente que vamos a contar con una mano, que aprecian cada pequeña cosa que uno haga por ellos, un chiste, un consejo, una palabra. y quiero siempre recordar o preguntarme cada vez que entable una conversación con alguien si realmente estamos conversando o si yo estoy conversando con alguien, cosa que no es lo mismo. ¿conversamos o converso? ¿estamos hablando o estoy hablando? ¿nos  estamos aportando o te estoy aportando? por que solo Asi funcionan las cosas y se pueden tener relaciones sanas. Nunca servirá un 70/30. ni un 50/50   hay que buscar relaciones que sean 100/100. Aplica para todo, amistades, amores etc. Necesito Calma, ejercicio, crear, aprender, cambiar ... construirme y destruir todo lo que no me sirve.