En el campo de las técnicas de presentación gráfica, la selección y uso adecuado de los materiales de impresión en papel juega un rol fundamental. Estos materiales no solo afectan la calidad y el aspecto final de las presentaciones, sino que también pueden potenciar la comunicación visual y el impacto de los diseños.
Tipos de Papeles y Marcas
Existen una amplia variedad de papeles disponibles…
“¡Oh! belleza de la nieve blanca y pura, cómo te pareces a la belleza del alma en gracia; a la belleza del alma, rehabilitada por la sincera confesión, adquiere nuevamente su blancura perdida. Y si tanto nos encanta ese sublime espectáculo de la naturaleza, ¿qué no será el de un alma pura hecha a imagen y semejanza de Dios, y destinada a amarle eternamente en el cielo?”
Blancura de nieve.
El gay Salustio frunce el ceño, está tenso.. pensando que se había pasado la vida evitando los detergentes con componentes activos. Pensaba que denotaban pasivofobia. Pero, finalmente, ayer probó el detergente Oxígeno Activo Blanco SuperPaco de DIA™. Se ha quedado maravillado. La blancura salta a los ojos. Para comprobarlo ha tenido que utilizar sus gafas de sol.
Moraleja: Nunca subestimes a un activo, tenemos mucho que ofrecer al mundo.
No hay nadie aquí,
y el cuerpo dice: todo lo dicho
no debe ser dicho. Pero nadie
es un cuerpo igualmente, y lo que el cuerpo dice
nadie lo oye
excepto tú.
Nevada y noche. La repetición
de un asesinato
entre los árboles. La pluma
se mueve sobre la tierra: qué ocurrirá
lo ignora, y la mano que la sostiene
ha desaparecido.
No obstante, escribe.
Escribe: en el principio,
entre los árboles, un cuerpo vino caminando
desde la noche. Escribe:
la blancura del cuerpo
es del color de la tierra. Es tierra,
y la tierra escribe: todo
es del color del silencio.
Yo no estoy aquí. Nunca he dicho
lo que tú dices
que he dicho. Y, cada noche,
desde el silencio de los árboles, sabes
que mi voz
viene caminando hacia ti.
Paul Auster, de Desapariciones 1970 – 1979
Traducción de Jordi Doce. Ed. Pre-textos – 1996
Las nubes parecen perder guedejas de blancura a medida que la brisa las va despeinando.
Si aquel azul pudiera durar eternamente, si aquel hueco entre las nubes pudiera durar eternamente, si este instante pudiera durar eternamente…
Tomo a los árboles y a las nubes como testigos de mi completa integración.
—¿Quiere usted decir que el desierto sería el verdadero lugar de la palabra?
—Sí. La palabra tiene permiso de residencia únicamente en el silencio de las demás palabras. En primer lugar, hablar es apoyarse sobre una metáfora del desierto, es ocupar una blancura, un espacio de polvo o ceniza, donde la palabra victoriosa se ofrece en su desnudez liberada.
—Edmond Jabès, «El núcleo de la ruptura» en Del desierto al libro. Entrevista con Marcel Cohen. Traducción de Ana Carrazón Atienza y Carmen Dominique Sanchez.
La última vez que me sentí así, tenía en los ojos el brillo de su blancura. Era algo parecido a mí en cuanto a frialdad e introversión, aunque él dijese que era más extrovertido que yo. Me hacía sentir nubes bajo los pies... y el pecho colmado de gerberas. Era tanto lo que le sentía... que no podía evitar llorar mientras reía; hoy así me pasa... pero por ti.
The last time I felt that way, I had the gleam of his whiteness in my eyes... He was somewhat similar to me in terms of coldness and introversion, even if he said he was more extroverted than I was. He made me feel clouds under my feet... and my chest full of gerbera daisies. I felt so much for him... that I couldn't help crying while laughing; today it's like that for me... but for you.
milleiros de horas nas tempas da soidade
sol lembro é a súa fondura doce de tribo
reflicto das ondas golfiños esperando
como anxo de cruceiros entulleiras da tenrura
choiva e dorso dos remos do azucre ebrias de sentir
follaxe da ollada outonal do mar alcol e eixo da carne
reverberan xunto ao equilibrio do amor dependencias da lediza
hálito extenuación azul da escuma na súa blancura
trigal oceánico e sesta de novas oídos tendidos en fuga
puntiaguda fauna dos faros convertidos en mans
fraxilidade do torno hoxe voz da luz onda da pel que nos bebe
roto marco centra este todo
de árbol castrado llorando
medir cada paso a lo largo
si no se perturba la luna
la luz redondea blancuras
de nabos rallados
tirar cada envoltura
si no se distorsiona lo negro
la música enrojece la ruta
de cada pequeño húmedo
girar girar girar
percibir junto al marco roto
sentires de tacos y muelas
querer agarrarlo todo.
Un callejón abierto
entre altos paredones grises.
A cada momento
la boca oscura de las puertas,
los tubos de los zaguanes,
trampas conductoras
a las catacumbas humanas.
¿No hay un calosfrío
en los zaguanes?
¿Un poco de terror
en la blancura ascendente
de una escalera?
Paso con premura.
Todo ojo que me mira
me multiplica y dispersa.
Un bosque de piernas,
un torbellino de círculos
rodantes,
una nube de gritos y ruidos,
me separan la cabeza del tronco,
las manos de los brazos,
el corazón del pecho,
los pies del cuerpo,
la voluntad de su engarce.
Arriba;
el cielo azul
aquieta su agua transparente;
Ciudades de oro
lo navegan.
Sea usted mi novia eterna, lancémonos en un vaivén entre el enamoramiento y el amor... Porque, verá usted, yo quiero conquistarla a diario y así mismo desearía ser conquistado a diario por usted... Probar su boca como si fuese la primera vez, le prometo que cuando usted pruebe la mía le otorgaré en cada momento nuevos sabores. Sea usted mi novia eterna y embelecese con la calidez de mi piel que la aguarda bajo estas oscuras prendas protegiendo la blancura que es. Permítame llevarla al altar todas las noches y beber de su cuenco la vid, emanciparla de sus errores humanos y trenzar nuestros nombres alrededor de la Cruz. Quiero pasar la vida a su lado y anhelo que usted quiera lo mismo. Sea mi novia eterna y le aseguro que ya no volverá a sentirse sola jamás.
Como un ciego valiéndose del braille con la punta de los dedos recorre y repasa mi anatomía, leyendo cada reacción que la piel tiene bajo su tacto lector.
Sucumbo a los placeres táctiles, es un maestro de las caricias, adora la sutileza como preludio de un doloroso extasis.
Caricias de terciopelo que preceden a pellizcos que erectan mis pezones o nalgadas que sonrojan encantadoramente la blancura de mi piel y humedecen los labios.
No hay límite que sus manos no sean capaces de sobrepasar, sus dedos trabajan sin descanso para provocar el máximo placer en mi exterior e interior...🖤🖤🖤
Te he visto ir y venir, alejarte y acercarte a mí, te he visto ausente y también cercano… Y he sentido en cada uno de esos espacios al corazón desgarrarse en la esperanza de poder tenerte completo, de poder ser la totalidad de la mujer que soy —en ti.
He observado allá, en el horizonte de zarco celaje, tu mirada que irradia hacia la mía, que besa todos mis rincones y de pronto se apaga dejándome los más atezados sinsabores.
Le he pedido al viento la compasión del beso, que te robe un poco de tu aliento y me haga beber de él para ya no sentir que me asfixio en la blancura de este papel, esperando por tenerte, esperando por a la distancia vencer.
Y el reloj avanza… Como los sueños se arrullan.
Y la lágrima danza para después desperdigarse en la penumbra.
Y tu nombre repica en la atmósfera, me hace creer que te alcanzaré con sólo abrir mis manos para en mis palmas resguardarte. Pero… No estás… No estás y el alma ya no puede seguir extrañando.
No estás… Y me atrevo a detener al tiempo y a su paso tras la mampara que vigila tu sueño, allí en la alcoba donde todavía un sollozo nos recuerda, que a pesar de todo, estamos el uno para el otro hechos.
—Paloma Zerimar
Dentro. Muy dentro de mí, algo vibra y me susurra al oído del alma, que eres mío sin aún ser mío pues la vida nos ha jugado así.
En febrero de 2007 se presenta con el título de "Samana"
En un vestido rojo, muy corto, insinuante, en una escalera, con el intenso contraste del blanco de los escalones y el rojo bramante de su traje. La blancura de su piel añade más intensidad.
Samaná es un municipio de la República Dominicana, situado en la provincia de Samaná.
Hoy en día, Samaná, con frecuencia abreviada para referirse a toda la península, está bien conectada por tierra y aire, sin embargo, sigue siendo el paradisíaco y remoto escape de playas salvajes, plantaciones de cocos y selvas tropicales de República Dominicana. Sus montañas ondulantes y valles forman los ríos cristalinos que desembocan en el Atlántico mientras se precipitan hacia brillantes playas de arena blanca que se extienden cientos de kilómetros alrededor de la costa rocosa de la península.
En febrero de 2007 Milena decidió hacer un viaje a la República Dominicana, por invitación de Daktari Lorenz. Este es el fotógrafo de Nadine Jansen, de otras mujeres similares y de Milena. Aquí aparece en primer plano, arrodillado, y al fondo, el marido de Milena, que destaca siempre por su calvicie y gran vientre.
El motivo del viaje fue hacer coincidir a Miosotis con Milena.
Miosotis Claribel nació el 16 de septiembre en Monte Chisti, Republica Dominicana. Su primera aparición fue en la página de Nadine Jansen con este modelo de bikini, en agosto de 2006.
En sus principios aparece con esta indumentaria. Posiblemente seria su ropaje auténtico, previo a ser atriz, y cambiar su estilo.
Un top, un pareo como falda, descalza y llevando en su cabeza una cesta de frutas, lo típico de las áreas rurales dominicanas.
En este encuentro, Miosotis invita a dos amigas más para valorar la posibilidad de participar en el reportaje. Sin embargo, el requisito fundamental es tener grandes pechos, asunto que solo lo cumple Miosotis.