Tumgik
#destino-de-papel
destino-de-papel · 2 years
Text
Cada día más es más difícil tratar de estar bien, aveces no terminar de castigarte la vida , ya tu mundo está destrozado y sigues desvaneciéndose más
2 notes · View notes
purpuraasd · 2 months
Text
SENTIMIENTO INCORRECTO
Te quise tan incorrectamente
Pensé que podrías ser mi destino
Anhele tu cariño sin habernos conocido
Idealice en ti todo lo que siempre había querido
Nadie me dijo que esto era enfermo y dolió que solo eras un espejismo.
6 notes · View notes
ocasoinefable · 2 years
Text
Cientos de palabras, en un solo silencio.
17 notes · View notes
ax-dark · 2 years
Text
Soy una persona solitaria, y no es que no trate de conectar con otras personas, solo que no lo logro, y si que me esfuerzo de no ser yo mismo.
Tumblr media
Lo único que tengo son mis creaciones, por eso creo que dibujo, y ago retratos de quienes conozco, es una forma de tener una parte de esas personas, una parte de ellos que si me quiere o eso quiero creer.
Lástima que el papel no abraza, pero si se destruye con las lágrimas.
2 notes · View notes
stuckwthem · 8 months
Note
hihi i love your writing so muuuuch💖 i was wondering if you could do a smut work for matias recalt, imagine this:
both of you being high on weed and extremely needy, horny for each other with soda stereo blasting in the living room of the department (it could be in a party you choose), you guys have a steamy makeout session then yknow… !!
i would appreciate dom!mati, petnames, extremely sub!reader <3
you get me so high | m. recalt
summary: cada fiesta sabes exactamente cómo termina, hasta que sucede algo diferente. 3.7k
tw: smut, sexo desprotegido, dirty talking, no sé mas me sinto sucia
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
"nada personal" de soda stereo sonaba en el speaker de algún rincón del departamento de matías, mientras algunos de los chicos bailaban entre la nube de humo que se formaba alrededor del lugar, iluminado sólo por un led violeta. la mayoría de los invitados a la fiesta ya se habían marchado y eran más de las cuatro de la madrugada, pero juani, pipe y santi, totalmente borrachos, seguían bailando —tambaleándose — por el salón, condenados al mismo destino que blas, dormido sobre la alfombra. te reías viéndoles, rechazando las miles de invitaciones a unirte a ellos, ya demasiado colocada para bailar, cuando mati volvió al sofá, acomodándose a tu lado, sorbiendo algo.
"¡qué idiotas!", dijo, riendo como tú, siguiendo los saltos de los bailarines frente a él. luego te tendió el vaso. "¿quieres un poco?"
asentiste con la cabeza, cogiendo lo que fuera el brebaje rojo de su mano. la bebida sabía dulce y te entró por la garganta, pero estaba buena, calentándote rápidamente. mientras tanto, mati aprovechó para sacar algunas cosas de su bolsillo, y tú observaste atentamente cómo preparaba otro porro. probablemente el tercero de la noche.
observar el trabajo de sus manos mientras sujetaba con destreza la seda entre los dedos era casi hipnotizante y, a estas alturas, ya se había convertido en un hábito. trabajaba en silencio, sólo moviendo la cabeza al ritmo de la música, lanzando de vez en cuando miradas divertidas en dirección a tu. de hecho, esas miradas se prolongaban en la noche.
"mierda, se me ha olvidado la boquilla". mati maldijo, envolviendo cuidadosamente la hierba en el fino papel. "¿puedes cogerla de mi bolsillo, por fa?".
parpadeaste un par de veces antes de asimilar lo que te pedía, mientras él levantaba las caderas para que pudieras meter la mano en el bolsillo de su pantalón. rápidamente dejaste el vaso bajo la mesita y deslizaste la mano en su bolsillo, sintiendo el calor del cuerpo de matías. le diste la boquilla, que te agradeció con un guiño y volvió a terminarse el porro.
mientras mati encendía el porro, observaste cómo las chispas brillaban en la oscuridad, iluminando momentáneamente su rostro, resaltando el contorno de su cara. era raro, pero el mero hecho de verle encenderlo con tanta destreza te producía sensaciones cálidas. sensaciones que la hicieron morderse los labios y suspirar con más fuerza.
el característico olor a hierba invadió el aire, mezclándose con el humo del cigarrillo que ya llenaba la habitación cuando el chico a su lado dio una profunda calada antes de pasárselo. quizás era arriesgado, teniendo en cuenta que ya estabas bastante colocada, pero aun así aceptaste, sintiendo el calor entre tus dedos y apretando los labios bajo la seda que matías acababa de marcar con su saliva. 
le imitaste, aspirando todo el humo, inhalando lentamente y soltándolo poco a poco, sintiendo la mirada del actor fija en tu rostro. la música seguía sonando, ahora a un ritmo más tranquilo, y los ojos de matías te observaban atentamente mientras os pasabais el porro el uno al otro. nunca tuvisteis que intercambiar muchas palabras en esos momentos, era un "silencio" cómodo mientras os rodeaba esa sensación de relajación que, al fin y al cabo, sabíais perfectamente hacia dónde iba. no hacía falta mucha conversación ni estudiar el lenguaje corporal para predecir que al final de ese porro, estaríais uno encima del otro, enrollándoos. como todas las fiestas era igual. era casi un mutuo acuerdo silencioso, nunca realmente discutido. 
matías se acomodó en el sofá, cogiendo de nuevo el porro de tu mano y llevándoselo a la boca relajadamente. te recostaste contra el cojín, tus ojos siguieron cada uno de sus movimientos hasta que se acercó a tu cara, con el brazo apoyado detrás de tu cabeza, y soltó provocativamente el humo con la boca casi pegada a la tuya. sentiste el vapor caliente contra tus labios y aspiraste, inhalando obedientemente, sin apartar la mirada el uno del otro ni un segundo. era una tensión tan deliciosa que era imposible escapar, imposible no sentir la química que emanaba de los dos.
"me encanta cómo te miran los ojos cuando te colocas". matías dice, en voz baja, pero lo suficientemente audible para los dos.
sueltas una risa, sintiendo como tus párpados se vuelven más pesados y todo tu cuerpo ligero, siendo tomado por la ola de embriaguez. tus sentidos se aflojaban cada vez más, tu visión se nublaba y tu percepción se volvía borrosa, pero sentías cada pedacito de la cálida piel de la mano de matías en tu muslo, simplemente descansando casualmente allí.
no suficiente, su otra mano tocó suavemente tu nuca, las yemas de sus dedos en un agradable sube y baja, haciéndote dejar colgar la cabeza hacia el otro lado, disfrutando de su tacto. entre sus piernas, era difícil ignorar la sensación de humedad que le provocaba.
"tus pupilas se ponen enormes", dijo, todavía examinando sus dilatados orbes con una sonrisa.
"siempre se ven así cuando estoy contigo", su confesión no pretendía sonar tan descarada, pero era sincera, y pilló por sorpresa a matías, que reaccionó alargando la mano para tocar su muslo y apretarlo un poco.
era curioso como siempre estabais sedientos el uno del otro, nunca necesitabais mucho para llegar a esa capa más íntima, más sincera. vuestra compañía siempre estaba llena de caricias, conversaciones pretenciosas y sonrisitas tontas, envueltas en una burbuja que sólo os pertenecía a vosotros.
"¿esto es por la marihuana o por mí?", te pregunta matías, en un tono juguetonamente coqueto, y te pasa la lengua por el interior de las mejillas, esperando tu respuesta.
le das otra calada al porro y te quedas pensativa mirando al techo, como si intentaras encontrar una respuesta. riendo suavemente, volviste a él, soltando el humo.
"digamos que es una buena combinación de ambas cosas", te encogiste de hombros, recorriendo con tu mirada el delicado rostro de matías, inclinando tu cuerpo más cerca de él "ayuda a intensificar lo que quiero contigo".
la expresión de matías era impagable y completamente engañosa de ver, sus ojos en blanco de sorpresa y su sonrisa intensificándose, justo lo que necesitabas para aumentar tu deseo. se acercó un poco más, y sus labios estaban ahora a centímetros de los tuyos. la habitación estaba impregnada de una electricidad sensual, y podías sentir cómo tu corazón se aceleraba. los chicos que bailaban en medio de la sala fueron completamente ignorados, olvidados.
"supongo que podemos considerarlo un efecto secundario bastante agradable", dijo, rozando ligeramente tus labios.
sin embargo, antes de que nada más pudiera suceder, un golpe resonó en la habitación.
juani, completamente desequilibrado, tropezó con la mesita, tirándola a un lado y cayendo encima de blas en el suelo, que se despertó sobresaltado. los chicos intercambiaron miradas alarmadas, visiblemente alterados, y volvieron a estallar en carcajadas. matías negó, riendo, y dio una ligera patada a la pierna de juani a sus pies.
"¿vamos a mi pieza?", preguntó, reaccionando rápidamente susurrándole al oído. "parece más seguro allí"
asentiste, medio riéndote de la situación, y ambos os levantasteis, cogiéndole de la mano mientras os guiaba, dejando atrás el caos momentáneo del salón. el sonido de la música se hizo más lejano mientras cruzabais el pasillo hacia la habitación de mati. la puerta se cerró tras vosotros, ahogando las risas y la música, dejándoos por fin en intimidad.
"debería echarlos a patadas a estas alturas", bromeó, mientras te rodeaba la cintura con el brazo. 
"son tus mejores amigos", te reíste, y el actor pareció apreciar lo que habías dicho.
"no finjas que no son tuyos también", replicó, y os reísteis, más juntos ahora, con tus piernas entre las suyas.
mati, que seguía sujetando el porro entre los dedos, se inclinó hacia él, sus miradas se encontraron en un silencioso juego de deseo mutuo mientras las sonrisas se desvanecían. la música sonaba suavemente, más baja ahora, al ritmo de sus acelerados corazones. antes de que nadie pudiera decir nada más, matías acercó suavemente su mano a su rostro, acariciándolo con suavidad. la distancia entre sus labios disminuyó gradualmente, y se perdieron en un beso, el mundo exterior desapareciendo a medida que la intensidad del momento se apoderaba de ellos.
en cuestión de segundos, sus piernas rodeaban las caderas de él, mientras las manos de mati la sujetaban por el culo, haciéndote gemir contra el beso cada vez que la apretaba. no tardó en tumbarla en la cama, frotando contra el suyo su cuerpo caliente y empapado de porros, que se había olvidado en algún rincón. 
sus manos se apresuraron a sujetar la cara de matías mientras él se esforzaba por besarla y bajarle la falda al mismo tiempo, sin tener mucha dificultad ya que la tela se deslizaba fácilmente por sus piernas. acarició sus muslos, apretando la parte más suave de su piel y acariciándola, tragándose cada uno de sus jadeos en medio del beso repentinamente desesperado. recalt colocó su muslo entre sus piernas, haciendo que la tela de su pantalón rozara su clítoris aún cubierto, provocando que todo su cuerpo se estremeciera. parecía imposible ponerla aún más cachonda, pero le excitó por completo. 
"me encanta oírte debajo de mí así, nena", murmuró matías, jadeando contra sus labios mientras frotaba su cuerpo contra el suyo. "eres tan fácil de hacer gemir, ¿lo sabías?".
mierda, cuando matías empezaba a hablar así era suficiente para volverte loca, completamente enérgica, deseosa de tener cada centímetro de él dentro de ti. sus manos subieron hasta tu pelo, tirando con fuerza como reacción a la provocación del chico. 
sin perder tiempo en darse cuenta de su estado, matías se quitó apresuradamente el resto de la ropa, con un pequeño deja vu de todas las demás docenas rondando por su cabeza. su polla se estremeció al pensarlo, sólo de recordar lo delicioso que era sentirte dentro, apretándote contra él. estaba hambriento. quería sentir tus bolas golpeando contra su culo hasta marearse, para ser honesto. y joder, le encantaba lo adorable que parecías así, con los ojos medio perdidos y completamente en paz. 
le ayudaste a quitarse los pantalones, desabrochando el cinturón de sus jeans, lamiendo toda la longitud de su entrepierna mientras se arrodillaba frente a ti. mientras matías se quitaba la camiseta, tu mano se aventuró dentro de su bóxer, encontrando su miembro extremadamente duro y empapado de pre-cum, y sólo la sensación de abrazarlo así te hizo frotar los muslos entre sí. matías palpitó al sentir sus dedos contra su sensible piel, e incapaz de contenerse, echó la cabeza hacia atrás, murmurando su nombre entre maldiciones.
sus hábiles dedos bordearon la circunferencia de su polla, bajando y subiendo tranquilamente por su longitud, mientras sus ojos se clavaban en cada reacción del chico, que le sujetaba la cara con suavidad, acabando por pasarle los dedos por su pelo. cuando sus movimientos se intensificaron, matías bajó sus dedos a tu boca, presionando sus dedos índice y corazón contra tu lengua para que pudieras chuparlos, y naturalmente, lamiste y chupaste sus dedos, sedienta, sin romper el contacto visual con el actor, que te observaba con ojos oscuros y concentrados. las huellas de sus dedos sabían a hierba y no hacían más que aumentar la sensación de dolor entre tus piernas, suplicantes por él.
matías empujó sus caderas contra tus manos, gimiendo, y entonces sus rodillas casi cedieron, y fue cuando de repente apartó tus manos de él y presionó sus dedos con saliva contra tu mandíbula. le miraste fijamente con mirada suplicante, sintiendo la fuerza de su mano contra tu cara. 
"si sigues así me voy a correr", admitió y luego bajó sobre ti, empujando tu espalda sobre el colchón y tumbándose debajo de ti una vez más. "pero quiero correrme dentro de ti, bonita".
suspiraste, sintiendo que tus entrañas se congelaban de forma placentera, y sonreíste perversamente a matías, que ahora se concentraba en tu cuello, chupando con fiereza tu piel, mientras la cabeza de su polla se frotaba frenéticamente contra tu entrada, provocando pequeños espasmos en tu cuerpo, que instintivamente trataba de encajarlo. 
"mati" gemías su nombre, casi ardiendo por la expectación que te provocaba aquella sensación, dejándote casi frustrada. pero matías parecía decidido a torturarte, dispuesto a tomar de ti exactamente lo que quería y como lo quería. "matías, por favor"
escuchar tu nombre con su voz desesperada y necesitada le hizo desear correrse en ese mismo instante, pero matías se obligó a contenerse, gruñendo contra su garganta, saboreando tu perfume, tan familiar para él que rondaba bajo su lengua como un sabor conocido. jadeó cuando tu coño se frotó contra su dura longitud una vez más y entonces sujetó tu cintura con fuerza para que mantuvieras tus caderas quietas.
"usa tus palabras, mi amor. sé que puedes hacerlo", ordenó recalt con paciencia, bajando el cuello para mirarte a los ojos. te follaría de todos modos, pero le gustaba que se lo pidieras amablemente. le volvía loco oírte así.
"quiero que me folles", obedeciste a su petición, las palabras salían de tu boca en angustiosos susurros de deseo. "por favor, mati"
"no te estoy escuchando, nena" matías rodó un poco más sus caderas, frotando su polla contra tu clítoris y casi pierdes el control allí mismo. "no seas tímida, me encanta que me lo pidas".
"fóllame, matías", exclamaste en un tono más alto, abrazándote a su nuca, intentando moverte contra las manos del mayor en tus caderas. "es que te necesito".
satisfecho y con una soberbia sonrisa en los labios, matías se acomodó entre tus piernas y mantuvo su polla en tu entrada, rodando dentro de ti con una calma inicial. ambos cerrasteis los ojos con fuerza, y por un momento fue posible escuchar vuestras exaltadas aspiraciones por encima de la música amortiguada. matías llegó hasta el fondo dentro de ti y se detuvo, sólo sintiendo cómo tus cálidos músculos se tensaban contra él, lleno de algo casi parecido al orgullo al ver tu expresión de placer en silencio, o cómo encajaba tan perfectamente en tu coño. 
tus movimientos comenzaron lentamente y fueron acompañados por pequeños gruñidos del chico, que respiraba con fuerza en tu oído. disfrutabas de cada sensación con un gemido sensual, moviendo tu cuerpo contra el suyo, capaz de alcanzar tu punto máximo con cualquier embestida más fuerte. matías empezó entonces a moverse más rápido, susurrándote al oído lo hermosa que eras, lo bien que te sentaba estar dentro de ti, lo patéticamente que gemías, y entonces te ordenó que hicieras más.
"abre más las piernas, princesa", te ordenó, dándote ligeras palmadas en el muslo, y luego dejó escapar gemidos guturales cuando le obedeciste. empujaba cada vez más profundo, follándote hasta el punto en que podías sentir el líquido filtrándose entre tus piernas. "más"
cuando rodeaste las caderas de matías con tus piernas fue suficiente para que él comenzara a comportarse casi sin delicadeza, follándote sin sentido. dos o tres veces, su polla se deslizó fuera de tu entrada, perdiéndose en los movimientos, y la cuarta vez, cuando estiraste la mano para sujetar su miembro y ayudarle a entrar en ti una vez más, la detuvo, sacándose de ti.
"no, mati" tu cuerpo se retorció ante la inesperada ausencia, mientras gemías, deseando más. 
matías sonreía, cansado y sudoroso, observando tu cuerpo y tu ansiedad con admiración. nunca se cansaría de todas las noches que pasasteis así, siempre deseando la próxima fiesta, el próximo momento, como éste. entonces el actor acercó sus labios a tu cara, besando tu mandíbula, tu mejilla, tu nariz, tu sien, una delicadeza que contrastaba con su siguiente petición.
" gírate", su voz sonó ronca y autoritaria. matías retiró las manos de tu cintura para dejarte espacio para moverte, y oíste los latidos de tu corazón estallar en tus oídos.
mientras asimilabas lo que te decía, sentiste al instante un calor que te subía por las piernas y te llegaba a la cabeza, haciéndote hervir la sangre de deseo. era algo nuevo, completamente sucio y excitante de una forma que nunca imaginaste que pudiera ser.
y una vez más, sin concurso, le sonreíste, embargada por una versión de la lujuria y recibiste una risa perversa a cambio, matías sabía exactamente lo que estaba haciendo. moviéndote lentamente, ante el asombro del actor, te arrodillaste en la cama, de espaldas a él. oíste la bofetada antes de sentir el cosquilleo en tus nalgas, tardando unos segundos en asimilar la bofetada acompañada de perversos gruñidos. matías ya dominaba de nuevo tu cuerpo, algo ya habitual en él que tan bien conocía cada parte de ti, y astutamente dobló tu torso hacia delante, dejándote apoyada sobre los codos.
a cuatros patas, respiraste hondo cuando sentiste su mano recorriendo tu espalda hasta llegar a la base de tu nuca, y luego su otra mano se posicionó en la base de la parte baja de tu columna. 
" ¿puedes tomarlo, princesa?" murmuró, inclinándose a lo largo de tu cuerpo para preguntarte al oído.
"yo..." sentiste como pasaba su mano por tu nuca hasta tu pelo, y se balanceaba. "joder, puedo tomarlo".
dándote tiempo para acostumbrarte a la posición, matías empujó lentamente hacia tu entrada, dejando besos por tu columna mientras lo hacía, alabando lo bien que te estabas portando, lo que sirvió de estímulo para que tus caderas rodaran sobre su polla, llevando a matías a agarrarla con fuerza, gimiendo tu nombre. te sentías como si fueras a derretirte en cualquier momento mientras él empujaba contra tu cuerpo, y trataste de ahogar tus gemidos enterrando la cara en las sábanas, dejando que la tela se mojara con tus babas.
"me he pasado toda la noche pensando en este momento". enunció matías, su voz mezclándose con los sonidos de su cuerpo chocando contra su culo, las pequeñas pausas disminuyendo de repente. "y es mejor de lo que podría haber imaginado"
tus gemidos eran suaves y contenidos, reaccionando cada vez que él llegaba a un punto sensible, y cada vez que movías un poco más las caderas hacia arriba, una sensación de calor blanco se apoderaba de tu vientre, transmitiéndose al resto de tu cuerpo, que estaba a punto de derrumbarse en cualquier momento. era incluso mejor que la sensación de estar colocado, más relajante que todo el cannabis que habíais compartido aquella noche.
"me voy a correr" anunciaste, exasperada, inundada por la creciente sensación en el fondo de tu estómago, incendiando tu cuerpo. matías se lo tomó como un reto, ralentizando sus movimientos hasta follarte tortuosamente despacio, golpeando justo en el punto exacto de tu coño.
agarraste con fuerza la sábana, sintiendo como el escalofrío te invadía y provocaba poderosos espasmos en todo tu cuerpo, debilitando todo tu sistema nervioso. matías te sujeta con prontitud, deslizando sus brazos bajo tu vientre, y tira de ti hasta que quedáis tumbados torpemente juntos hasta que tu cuerpo empieza a recuperar fuerzas de nuevo. 
matías besa la curva de tu hombro y puedes sentir lo caliente y sudoroso que está, resultado de la locura que acababa de tener lugar allí. subes la mano hasta su brazo alrededor de tu cintura y entrelazas su mano con la tuya, sonriendo satisfecha contra el colchón.
"ha sido... intenso", admites con una risa casi tímida.
"maravilloso, tú has estado maravillosa", te elogia él, sonriendo tiernamente contra tu cuello. " ¿realmente tenemos que esperar hasta la próxima fiesta?"
te ríes, todavía atontada y un poco fuera de sí, y respiras hondo, recuperando el aliento. todo tu cuerpo se siente demasiado sensible, aún ardiendo, susceptible a cualquier estímulo.
"técnicamente, aún estamos en una", te encoges de hombros. no era una regla, pero el hecho de que fuera casual hacía que la tensión fuera aún más deliciosa. pero era imposible negar cuánto anhelabas más, fuera de esos momentos.
siguiendo tu ejemplo, te diste la vuelta en la cama, encontrándote cara a cara con matías. te apartó suavemente los mechones sudorosos de la frente y te encaró con una sonrisa que decía "no vales nada, y me gusta".
el silencio tras la tormenta de sensaciones os permitió a los dos recuperaros, envueltos en el calor que quedaba entre sus cuerpos. matías seguía dejando suaves besos en tu clavícula, mientras tú te deleitabas con la reconfortante sensación de estar tan cerca de él.
se quedaron un rato en ese pequeño envoltorio, disfrutando del tacto reconfortante del otro. tu respiración empezó a normalizarse y la habitación se sumió en una calma post-intimidad. los efectos del porro mezclados con la intensidad del momento crearon una atmósfera casi onírica.
"¿estás bien?" preguntó matías suavemente, dejando un suave beso en tu mejilla.
asentiste, con los ojos entrecerrados por el placentero cansancio. "más que bien".
matías rió suavemente, acariciando con dulzura la mano que seguía entrelazada con la suya. juntos disfrutaron del silencio, como si el tiempo se hubiera alargado para abrazar aquel momento.
con el paso del tiempo, la realidad comenzó a infiltrarse de nuevo. los sonidos lejanos de los chicos en la habitación, las risas apagadas y el suave murmullo de la música más baja llegaron a vuestros oídos. la luz del día empezó a filtrarse por los pequeños resquicios de las contraventanas, y ahí supiste que era hora de marcharse. tu compromiso terminaba junto con la fiesta.
"quédate", dijo matías socarronamente, apretando su brazo alrededor de tu cintura, atrayéndote de nuevo contra su cuerpo. "quédate, por favor".
dudó un momento, sorprendida por el repentino cambio. no era un pendejo, siempre te cuidaba después del sexo y atendía tus necesidades posteriores, ¿pero quedarse? eso era nuevo.
tus ojos volvieron a encontrarse con los de matías y pudiste ver el brillo de la súplica en sus ojos, del deseo y de algo más.
así que obedeciste una vez más.
━━━━━━━ ★ ━━━━━━━
tampoco se como llegué aquí pero hola ¿cómo están? 🤰
muuuchas gracias por esta ask, espero haberlo hecho bien <333
solo hice una light prof read entonces díganme si algo esta raro porfaaaa
366 notes · View notes
olee · 8 months
Text
Fina | Enzo Vogrincic
Tumblr media
*3000 words (me inspiré) & mini s*x scene
Corrías con desesperación por el bullicioso aeropuerto, el eco de tus pasos resonando en los pasillos abarrotados. El tiempo apremiaba, y tu corazón latía al ritmo frenético de la prisa. El billete se aferraba en tu mano, como un talismán que te conectaba con tu destino. "¡Espera! ¡Ya voy!" gritabas, entre jadeos, mientras sorteabas a la multitud con determinación.
El reloj avanzaba implacablemente mientras te abrías paso entre la maraña de viajeros. Las luces parpadeaban sobre las pantallas indicadoras de vuelos, recordándote cada segundo que se escapaba. Al llegar al gate, una sensación de alivio temporal te invadió, pero rápidamente se desvaneció al notar que el área estaba desierta, como un escenario abandonado después de la función.
Te dirigiste apresuradamente hacia el empleado de la aerolínea, tu aliento agitado y la esperanza titilando en tus ojos. "Tengo un vuelo a Madrid ahora, por favor, dime que he llegado a tiempo", imploraste, con la voz entrecortada. El empleado, con un gesto comprensivo, te miró con seriedad y dijo: "Señorita, el vuelo se fue hace diez minutos".
Un nudo se formó en tu estómago, pero no te diste por vencida. Con determinación, preguntaste sobre cualquier opción disponible. "¿Hay algún otro vuelo a Madrid pronto?" El empleado, consultando la pantalla con un semblante compasivo, respondió que el próximo vuelo no sería hasta dentro de 15 horas. Asentiste con resignación, consciente de que el tiempo ya no estaba de tu lado.
Entonces, con la mente fija en tu compromiso ineludible, mencionaste la reunión crucial con la agencia de producción. "Tengo una reunión muy importante en Madrid. Aceptarán mi guión para una obra de teatro, y no puedo perder esta oportunidad", le expresaste al empleado, esperando encontrar alguna solución. El hombre tras el mostrador comprendió la urgencia en tu voz y te informó sobre la posibilidad de esperar.
Te refugiaste en un acogedor café ubicado en algún rincón del aeropuerto de Londres. El aroma del café recién hecho flotaba en el aire, pero tus sentidos estaban inmersos en la música melancólica de Guitarricadelafuente que fluía a través de tus audífonos. Con gestos automáticos, conectaste tu celular para cargarlo, buscando consuelo en las notas de tu artista favorito.
Sin previo aviso, una lágrima solitaria escapó de tus ojos, una expresión palpable de la desesperación que te embargaba por haber perdido el vuelo. La música parecía resonar en sintonía con tus emociones, como si Guitarricadelafuente compartiera tu dolor a través de sus cuerdas y melodías. Mientras las lágrimas seguían su curso, te sumergiste en un mar de pensamientos, contemplando el giro imprevisto que había tomado tu día.
Con resignación, extrajiste el guión de tu bolsa, sosteniéndolo entre tus manos temblorosas. El papel, ahora manchado por las lágrimas, representaba más que un simple texto; era la culminación de tus esfuerzos y sueños. Te encontrabas en una ciudad ajena, lejos de casa, y la realidad de estar varada por 15 horas en Londres se apoderaba de ti.
Las palabras del guionero, antes tan llenas de promesas, se volvían borrosas a través de tus lágrimas. De repente, te sentías como una niña de cinco años que había perdido su globo de cumpleaños, la tristeza reflejada en tus ojos y en cada línea de tu rostro. La ironía de la situación no pasaba desapercibida, y una mezcla de frustración y vulnerabilidad te envolvía mientras te aferrabas al guión como a un salvavidas en medio de la tormenta.
Sumida en la tristeza de tus pensamientos, te diste cuenta de repente de una mano amable que se acercaba a tu rostro con una servilleta. Entre la neblina de lágrimas, apenas pudiste vislumbrar la acción generosa de un desconocido que, con empatía, te ofrecía un medio para secar tus ojos. Agradecida por el gesto, aceptaste la servilleta sin poder identificar a la persona detrás de ella.
La bondadosa presencia a tu lado pasó desapercibida hasta que lograste controlar las lágrimas lo suficiente como para ver a quien te había brindado consuelo. Descubriste que había estado sentado junto a ti durante un buen rato, observando silenciosamente tu situación con comprensión. Sorprendida por su amabilidad, solo lograste articular un simple "thanks", incapaz de distinguir completamente sus rasgos.
En un giro inesperado, el hombre respondió en español. "De nada, yo espero que todo se recupere", dijo con una sonrisa tranquilizadora. Al levantar la mirada para agradecerle debidamente, te encontraste con la visión de un hombre extraordinariamente atractivo. Su piel canela destacaba bajo la luz del café, su cabello despeinado le daba un aire casual y sus ojos, de un caramelo puro, irradiaban calidez y comprensión.
Aunque te sentías vulnerable y con el corazón aún apretado por la situación, la presencia reconfortante de este hombre te hizo sentir un atisbo de consuelo. No sabías exactamente cómo reaccionar ante su belleza, pero la curiosidad y la necesidad de conexión humana te impulsaron a romper el silencio. "¿Hablas español?" preguntaste, con la esperanza de que la respuesta fuera afirmativa. El hombre sonrió y respondió con una risa contagiosa, "Creo que sí".
A pesar de la tormenta de pensamientos que te asaltaba, la visión de este joven que parecía salido de tus sueños generó un apretón en tu corazón. Sin embargo, la realidad chocó contra la fantasía cuando notaste que llevaba una sudadera y tenis Nike, una imagen más casual y terrenal que la que habías imaginado.
El chico, notando tu evidente perturbación, rompió el hielo al expresar su intriga ante la combinación de un guión en tus manos y lágrimas en tus ojos, “No te conozco, pero al ver que tienes un guión en mano y estás llorando, ahora estoy muy intrigado por lo que te ha pasado," dijo el chico guapo con una mezcla de curiosidad y empatía en su voz. Te sumiste en un silencio momentáneo, tratando de procesar la situación y, al mismo tiempo, preguntándote si este encuentro era producto de tu imaginación o si realmente estabas frente a alguien especial.
Finalmente, el chico reveló ser actor y confesó su amor por el teatro, aunque actualmente se encontraba inmerso en proyectos cinematográficos. La conexión con el mundo del teatro hizo que tus ojos se iluminaran con un atisbo de reconocimiento, y una sospecha empezó a formarse en tu mente.
Con un tono casual, le preguntaste: "¿Espera! ¿Tú eres Enzo, Enzo Vogrincic? ¿De 'La Sociedad de la Nieve'?" La confirmación en su expresión te dejó boquiabierta. "Ese mismo", respondió con una sonrisa, añadiendo con humor, "desde hace tiempo no veía a alguien tardarse tanto en reconocerme". Tu corazón latía con emoción mientras intentabas procesar la realidad de tener a un actor reconocido a tu lado.
Con entusiasmo, le confesaste: "Es que... ya he conocido a tantos actores que me da igual, pero... yo amé tu actuación y las otras obras que has hecho en Montevideo, es que amé".
Enzo, aún intrigado, te agradeció con sinceridad. "Gracias, escuchar esto me da más ánimo en hacer lo que hago," expresó con una sonrisa genuina. Sin embargo, no dejó que el agradecimiento se interpusiera en su deseo de conocer más sobre tu historia.
"Pero… no cambiemos el tema, ¿por qué estabas llorando? ¿Eres actriz o…?" preguntó con un gesto de interés. Tomaste un momento para recobrar la compostura y compartir parte de tu vida con este actor que, de alguna manera, se había convertido en un confidente inesperado.
"Soy prácticamente guionista, y me gusta escribir tragedias, dramas y todo lo Lorca," comenzaste a explicar, revelando tu pasión por la escritura teatral. "Pero últimamente no he tenido la suerte, y ahora que tengo una gran oportunidad en Madrid, el vuelo acaba de irse, y pues…" La frustración y la tristeza se reflejaban en tus ojos mientras compartías la historia de tu día caótico, sintiendo que Enzo podría entender el peso de tus aspiraciones y desafíos creativos.
"Qué horrible, pues no estás sola, porque yo también perdí el vuelo para Madrid," compartió Enzo, revelando un inesperado giro en su propia situación. Tus ojos se abrieron con sorpresa ante la revelación. "No jodas?" respondiste, dejando escapar tu incredulidad. Enzo rió ante tu reacción y, con un tono resignado, comentó: "Así es la vida". La ironía de la situación resonó en la conversación, creando un lazo instantáneo basado en las coincidencias y desafíos compartidos.
Después de pasar varias horas inmersos en el café, tú y Enzo continuaban deleitándose en una charla apasionada sobre el teatro y todo lo relacionado con sus amores creativos. El tiempo parecía volar mientras compartían anécdotas, descubrían similitudes en sus carreras y exploraban sus visiones artísticas.
A medida que la conversación fluía, el reloj recordó que era casi la hora del almuerzo. Enzo, con una sonrisa, sugirió: "¿Qué te parece si nos damos un respiro y vamos por unas hamburguesas?" La idea resonó contigo, y juntos se dirigieron a un lugar cercano para disfrutar de un almuerzo casual y reconfortante.
Después de saciar el apetito, la tarde avanzaba y la diversión no se detenía. Enzo, con su sentido del humor intacto, los condujo a un bar cercano. Cómicamente, se dirigió al bartender diciendo: "Denos dos cognac, que nos hace bastante falta". La ocurrencia sacó una risa de tu parte mientras observabas la escena con complicidad.
Mirándolo con una sonrisa, bromeaste: "Sabes, se supone que no esté borracha, pero si es así, no me importa".
Entre risas y la atmósfera relajada del bar, tú y Enzo continuaban disfrutando de la compañía mutua. El ambiente festivo se intensificaba a medida que ambos tomaban innecesariamente, sumiéndose en conversaciones que abordaban cualquier tema que se les ocurriera.
En un momento de confianza, decidiste compartir un secreto que habías guardado durante mucho tiempo. "Enzo, te tengo que confesar algo," dijiste, con un tono cómplice. Él, intrigado, respondió con un "Dale, dime".
Toda roja y riéndote, soltaste la confesión: "Yo te re amaba, like cuando saliste en 'La Sociedad de la Nieve', no pude aguantar mi fanatismo y pues, ahora que lo pienso, creo que hasta escribí un fanfiction de ti". La expresión de Enzo era un cóctel de sorpresa y diversión mientras esperaba a escuchar más detalles.
Con una risa nerviosa, Enzo te pregunta: "Y... de qué era ese fanfiction?" Entre risas y complicidad, respondiste, "Eso mejor no lo hablemos pero... ya tú sabe". Enzo, con una sonrisa pícara, te desafió: "Yo no sé, dime tú".
Entre risas y anécdotas compartidas, el tiempo parecía desvanecerse mientras ambos continuaban disfrutando de la velada. Sin embargo, la realidad del horario de su vuelo a Madrid interrumpió la burbuja temporal en la que se encontraban. El intercom anunció que era hora de abordar, generando una pausa en su divertida conversación.
Enzo, con una mirada juguetona, sugirió: "Quédate conmigo, así te sientas al lado mío y charlamos más". Tú, recordando la asignación de asientos, expresaste tu preocupación: "Pero, el asiento está designado". Sin embargo, Enzo, con confianza, respondió: "Eso me lo dejas a mí". Ante su propuesta, no pudiste evitar sonreír y ceder: "Pues, ¡vale!"
Al entrar al avión, Enzo abordó con confianza y se dirigió a una de las azafatas. "Perdona, pero hubo un error con los asientos, ella se supone que esté al lado mío, además que es my fiancé," dijo con una sonrisa juguetona, dejándote boquiabierta y bastante ruborizada. La declaración tomó por sorpresa a la azafata, quien, a pesar de la confusión, asintió amablemente y te acompañó hasta el asiento asignado al lado de Enzo.
Mientras te acomodabas, una mezcla de asombro y nerviosismo se reflejaba en tu rostro. Enzo, con su actitud desenfadada y una chispa de complicidad, te guiñó un ojo antes de sentarse a tu lado.
Al sentarte, no pudiste evitar comentarle a Enzo: "Estás demente, ¿cómo que fiancé?" Él te miró con una sonrisa pícara y respondió: "Ay mira, estos son cosas que pasan, y además esto, ehh..." Tratando de mantener la compostura, le interrumpiste: "Mira, ya, que estás re tomado, que ni sé de qué estamos hablando."
Él, con un tono cómico y sarcástico, te dijo: "De que eres mi fiancé y punto." En respuesta, le diste un pequeño puño juguetón en el brazo, y Enzo, dramáticamente, exclamó: "Ay, eso dolió." Tú, riendo, le reprochaste: "Ay no seas bobolón."
Ya cómodos en sus asientos, Enzo te mira con la expresión de quien necesita más alcohol, mientras tú le devuelves la mirada con gesto de ya no más. Sin embargo, al pasar una azafata, Enzo, con su característico sentido del humor, le dice: "Perdona, ¿nos podrás traer dos champán? Es que como nos vamos a casar pronto." Tu rostro se torna más rojo de lo que ya estaba ante la inesperada declaración de Enzo.
La azafata, acostumbrada a situaciones peculiares, asiente con una sonrisa y se apresura a cumplir la solicitud. Mientras tanto, Enzo se relaja en su asiento con una expresión de triunfo, mientras tú intentas ocultar tu sorpresa y diversión ante la ocurrencia.
Se tomaron el champán con un "¡Salud!" y el ambiente se llenó de risas y un toque festivo. Sin embargo, a medida que disfrutaban de la bebida, comenzaron a notar que el efecto del alcohol se estaba haciendo más evidente, sumergiéndolos en un estado de relajación profunda. Enzo te mira con complicidad, y con una sonrisa pícara, comenta: "Y de qué era el fanfiction? Es decir, me imagino que era bueno."
Tu rostro refleja una mezcla de pensamiento y vergüenza, y le respondes: "Ay Enzo, por favor, no hablemos de eso, ya te dije que no te voy a contar." Sin embargo, Enzo persiste con curiosidad: "Pero me imagino que fue creativo." Lo miras con incredulidad, como si sus palabras fueran más serias de lo que aparentaban, y le contestas: "Cómo que creativo, I mean, era normal, como una chica empezando sus veintes y todo eso."
La conversación da un giro inesperado cuando Enzo, con sorpresa, pregunta: "Espera, no jodás que… ¿cuántos años tienes?" Lo miras directamente y le respondes con humor: "Bastante mayor, ¿por? ¿Me veo vieja?" Enzo, tratando de explicarse, menciona: "No... es que yo pues, ya sabes que estoy en mis mediados de treinta." Tú, con una sonrisa traviesa, le dices: "Estás bien, ¿o mejor te digo que estás viejo?" Las risas se mezclan con la complicidad, creando un ambiente ligero y divertido mientras continúan su viaje a Madrid.
Después de la conversación sobre el fanfiction, Enzo ya estaba medio dormido, o mejor dicho, parecía cansado o sumido en sus pensamientos. Mientras tanto, sentías la necesidad apremiante de ir al baño. Decidiste levantarte del asiento y dirigirte al baño del avión. Sin embargo, al llegar, te encontraste con una fila larga para el baño de mujeres, y la urgencia no esperaba.
La azafata, al notar tu situación, te tranquilizó diciéndote que podías usar el baño de hombres, ya que estaba vacío en ese momento. Agradecida, aceptaste la oferta y te aventuraste en una larga caminata a través del amplio avión. Al final, encontraste el pequeño baño del avión, donde pudiste aliviarte y refrescarte las manos.
Justo cuando estabas a punto de salir, te diste cuenta de que Enzo estaba a punto de abrir la puerta del baño. Ambos se miraron con asombro, creando un momento de sorpresa compartida. Sin embargo, lo que más te ponía nerviosa era el silencio incómodo que se instaló entre ustedes. Aunque no era incómodo en sí, había una tensión que no podías ignorar.
Tus ojos se encontraron con los de Enzo, sus labios y sus ojos endormecidos brillando en la penumbra del avión. Era como si el tiempo se hubiera detenido por un momento, y la conexión entre ustedes se manifestaba en el silencio compartido. Ambos parecían estar atrapados en la atmósfera íntima del instante, sin palabras pero con una comunicación palpable entre las miradas.
Ligeramente afectada por los efectos del alcohol, observabas cómo el brazo de Enzo estaba recostado en la puerta del baño, como si te invitara a pasar. Sin embargo, te quedaste mirándolo, notando que sus venas sobresalian, un detalle que capturó tu atención de manera inusual.
De repente, Enzo miró a ambos lados y se introdujo al baño contigo, a lo cual respondiste incrédula, diciendo: "Mijo, pero—" Antes de que pudieras terminar la frase, Enzo te agarró de los muslos y te hizo sentar en el mini lavamanos. Te sentías un poco incómoda, sin estar segura de cómo reaccionar, pero permitiste que Enzo guiara la situación.
Él te agarró suavemente del cuello y empezó a besarte apasionadamente, como si ambos tuvieran una sed desesperada de conexión. Respondiste a sus besos de manera igualmente intensa, sumergiéndote en el momento. La pequeña cabina del baño se convirtió en un espacio íntimo donde las emociones y los deseos se expresaban libremente entre ambos, desafiando la lógica del apretado espacio.
Después de tantos besos, Enzo te tocaba apasionadamente por todos lados, más — soltás un suspiro largo y él hace lo mismo, como medio agitado. "Me parece que ya es hora de pegar una cabeceada," te dice. Tú, con cierta preocupación, le tirás, "Pero capaz hay gente esperando afuera, ¿cómo hacemos para salir del baño?" Él te responde con un "Solo tenés que seguirme," agarrándote de la mano. Enzo abre la mini puerta del baño del avión, echa un vistazo a los lados y, medio incómodos pero satisfechos, se encaminan hacia sus asientos.
Al sentarse, tú y Enzo quedan en un largo silencio, procesando todo lo que había pasado en esos largos minutos en el baño del avión. Mientras tanto, Enzo te agarra de la mano y te da un besito en la misma. "(Y/N), me tendrías que pasar tu número de celu, quiero volver a verte," te dice, y tú, ya un poco cansada y recostada en el hombro de Enzo, le respondés, "Cuando aterricemos, te paso mi número," y él asiente con un "Dale."
Fin
Tumblr media
363 notes · View notes
Text
I'll crawl home to her - Rhaenyra Targaryen x reader
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
disclaimer these gifs are not mine, they belong to @clixsmxdernxs and divider @dingusfreakhxrrington
Resumo: Rhaenyra Targaryen x fem reader; hozier; angst, fluff; não revisado ainda
I'm not sure if I liked how it turned out, maybe I'll redo it
Tumblr media
Do alto da parca torre em um longo planalto, uma mulher observa o horizonte. Seu rosto é cansado e suas vestes causam estranhamento em seus companheiros de batalha, não era filha de uma casa digna de lembrança, muito menos esposa de um alto cargo, mas mesmo assim sua mortalha de guerra lembrava aquelas dos velhos reis e rainhas.
Sob o olhar de muitos era um ato de desrespeito, mas lhe fazendo justiça, a própria rainha dragão colocara a malha sobre seus ombros, gostava de pensar que o toque de Rhaenyra ainda pesava lá. Olhando para suas mãos sujas de sangue ainda fresco ansiava por sua presença
"Boys workin on empty Is that the kinda way to face the burning heat? I just think about my baby I'm so full of love, I could barely eat"
...............................................................................
Após ter certeza que ninguém as observava tomava em suas mãos a de sua amada e a puxou para um quarto ainda mais reservado. O dia havia amanhecido silencioso enquanto todos iniciavam seus caminhos para guerra, havia chegado a hora, era possível sentir no ar o pesar, principalmente naquela sala. A rainha Negra já havia se despedido de seu primogênito, ato que ainda a sufocava, todos que amava estavam partindo e mesmo que o destino fosse de certa forma o mesmo, alguns jamais se veriam novamente.
Por um breve momento apenas se olharam em um silencio confortável, até que a rainha com um soluço o quebrou.
“já me desfiz em lagrimas com a partida de jace, mas parece que ainda restam muitas lagrimas em mim” o tom emulava a alegria, era seu papel manter todos os seus solados dispostos para a guerra, mesmo para os mais íntimos
Levando a mão cálida da targaryen aos lábios, a mulher de um beijo casto também tentando sorrir
“não sofra por mim alteza, não a primeira vez que encaro espadas inimigas, e em seu nome? O faço com honra”
Seu olhar se tornou régio
“agradeço sua intenção, mas não é o momento para me poupar, nossas baixas já são significativas, Daemon também era bravo e caiu em batalha e nós sabemos que muitos outros homens honrados também vão. Não há uma vitória garantida no futuro, só os deuses sabem o que pode vir acontecer” a fitando enquanto inspirava “eu mesma sou uma variável e- exasperada a lady de armas soltou as mãos de rhaenyra  
“Não fale assim! Não vê que agoura nosso caminho? Nem eu nem ninguém permitiria que a rainha legitima seja morta, possuímos mais dragões com montadores, exércitos aliados!”
Mas assim como já havia acalmado criaturas maiores, a rainha segurou seu rosto em ambos os lados, buscando a atenção dos olhos da mulher que agora eram arregalados e nervosos com a nova perspectiva
“então apenas me diga que entende, hm? Que entende o perigo que todos nós corremos, que a coroa e a sucessão correm, não aceito discutir na despedida do que talvez seja a nossa mais longa separação. Apenas me diga isso, meu amor” pediu tão docemente com aqueles belos olhos expressivos que mais uma selvagem criatura se viu domada e sem ressalvas um “sim, entendo” saiu sério dos lábios da outra.
Satisfeita e com pressa a rainha se virou e caminhou em direção a uma das camas do aposento, próxima a ela se inclinou e revelou o que um pano de veludo preto cobria, uma rica e nobre armadura da casa da Targaryen.
“posso saber o que significa isso, vossa graça” seu tom era quase divertido, também não desejava brigar
Virando-se segurando as peças nos braços se pôs diante da lady, colocou as vestes em um descanso próximo e delicadamente começou a tirar a armadura comum de soldado que a cavaleira usava, essa apenas observava os movimentos da rainha.
“quando eu era criança minha mãe me contava como preparava meu pai para suas pequenas batalhas”
“achei que o reinado do falecido rei fora pacífico a sua maneira”
“é verdade, mas há momentos onde uma armadura pode passar uma mensagem mais efetiva que palavras de conciliação. Ela dizia que ato era para dar sorte, uma forma de faze-lo se lembrar dela, mesmo que em campo, uma forma de acompanha-lo a distância” agora já fazia os ajustes na nova armadura.
“acha que eu poderia esquecê-la? Jamais”
“eu acredito” disse sorrindo após fazer o ajuste final, realmente lhe caia bem “gosto de pensar que de alguma forma uma extensão de mim protege seu peito do fogo da batalha” agora tocava o local, se sentia cansada e seus olhos voltaram a marejar, eram tempos cruéis.
Tocando seu rosto de forma melancólica quase nostálgica, sentia que a hora da partida havia chegado de vez, doía “deuses, sentirei falta de olhar para esse rosto”
Pegando para si a mão de nyra a cavalheira aproveitou sua deixa “não importa o que aconteça, eu voltarei para casa” nyra inclinou a cabeça, com um olhar conhecedor “e mesmo que eu tombe isso não ira me impedir”
Agora havia confusão no rosto da rainha
“você me deu honras que não sei se mereço, o comando de uma tropa, as vestes de uma nobre, então lhe confidencio o único pedido que farei aos meus homens que já marcham conhecendo seus possíveis destinos, pois já não faço questão de esconder meu amor e apreço por você Rhaenyra.  Peço que quando minha hora chegar deitem-me suavemente na terra fria e escura, pois nenhum túmulo pode segurar meu corpo, eu vou rastejar para casa, para você”
A rainha respondeu a agarrando em um beijo febril, se pudesse a manteria em seu lado longe de todo o perigo. Queria ter a conhecido antes, queria demonstrar melhor como a amava, queria não temer tanto por sua vida, queria não sentir que a ela caminhava para a morte.
Encerrando o beijo para respirar ambas continuaram abraçadas, forte, uma podia sentir o coração da outra bater em sua pele, era como se o mundo tivesse parado e apenas o calor do momento existisse. Antes de se separarem, a Targaryen deu mais um aperto na mulher e sussurrou em seu ouvido em tom de promessa “eu a amo mais do que um dia sonhei ser possível amar”
................................................................
Após cortar com sua lamina o pescoço de tantos homens a mesma mulher se encontrava caída sem forças no chão, respirar doía e podia sentir o gosto de cobre na boca, pensava na sua promessa, parecia próxima agora
"When my time comes around Lay me gently in the cold dark earth No grave can hold my body down I'll crawl home to her"
Porém com o resto de força que sobrava em seus braços se virou e se pôs de quatro enquanto segurava firme o punho de sua espada, pronta para se levantar, pois mesmo a memoria do toque quente e amoroso dos lábios de vossa graça afastava o abraço frio da morte
"When I was kissing on my baby And she put her love down soft and sweet In the low lamp light I was free Heaven and hell were words to me"
72 notes · View notes
caotizante · 8 months
Text
Querido T,
Mais uma vez meus pensamentos descontrolados me dominam e me encontro outra vez espalhando palavras eu um papel branco tendo plena consciência que este nunca chegará a ti.
Me pego pensando se todas as palavras jogadas ao vento trariam algum impacto sobre você caso algum dia, por ironia do destino algumas dessas folhas manchadas com resquícios de minha alma chegassem a ti.
Termino esta dizendo, mesmo que nossos corpos não habitem o mesmo espaço, mesmo que nossas vozes não transmitam o mesmo sonar, mesmo que nossos olhos não olhem na mesma direção, meu coração ainda vibra na mesma intensidade que o teu.
Com amor, Katherine.
tauc.
140 notes · View notes
dejuncullen · 8 months
Text
Cariño
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Esteban Kukuriczka x reader
rating +18
PT - BR
Notas da autora : quero dizer que o meu rascunho excluiu umas duas vezes e por fim o resultado foi esse. Preferia a primeira versão, infelizmente perdi metade. 🥲
Esteban tentou a todo custo entrar sorrateiramente na casa em que vocês dois dividiam. Chamar a sua atenção era o que ele menos queria no momento, não queria lhe preocupar com nada.
Mais cedo, ele decidira ir a um casting para um filme que seria lançado na TV local. Sua esperança estava baixa devido os últimos retornos negativos.
Ultimamente só recebera "Não" atrás de "Não", o que fazia o homem cada vez mais desacreditar no seu talento na atuação.
Entretanto, você conhecia o seu noivo muito bem e sabia identificar os suspiros tristes que ele soltava pela sala conforme se acomodava em uma poltrona e encarava o seu cacto de estimação.
— O que aconteceu, mí amor? O teste não deu certo?
Os olhos cabisbaixos lhe encararam por breves segundos e ele voltou a atenção ao cacto, encolhendo os ombros e abaixando a cabeça.
— Não — a voz saiu engasgada, como se segurasse as lágrimas — Escolheram o Santiago para preencher o meu papel. Ele é muito bom, não posso desmerecer o talento dele.
— Você é tão bom quanto ele — enfatizou e o homem balançou a cabeça negativamente — Não fique assim, Esteban, são tempos ruins para todos os que trabalham com arte. Uma hora tudo irá melhorar — tentou ser positiva, mas o homem continuava a negar
— Cariño, como posso simplesmente aceitar esse destino vendo que você está praticamente sustentando sozinha tudo nessa casa? — os olhos marejados se voltaram aos seus e você decidiu abraçá-lo, sabia que ele precisava disso — Estou sem emprego a meses, e não importa o quanto eu tente nunca me dão uma chance.
Uma lágrima escorreu pela bochecha do homem, seguindo para o queixo e pingando na calça jeans que vestia. Seus dedos evitaram que mais lágrimas deslizassem, e com os próprios lábios, beijou a pele salgada até que Esteban se acalmasse.
— Não se culpe por isso. Esse mercado é famoso pelos "QI's" (quem indica), mas isso não diminui o seu talento. — beijou a testa do homem e passou a acariciar a mandíbula dele com os polegares, sentindo a maciez da pele recém barbeada — Esteban, você é o homem mais talentoso que pude conhecer na vida, e não digo isso por ser sua noiva, mas porque é a realidade, é o que vejo e posso comprovar.
— Não me engane assim, cariño, sei bem o que seu pai pensa sobre mim. Eu deveria estar te dando uma vida luxuosa agora.
— E está! — o interrompeu e encostou a testa na dele — Minha maior riqueza é tê-lo ao meu lado, todos os dias. Ver o teu sorriso pelas manhãs, te abraçar e me impregnar com o teu cheiro, sentir o teu calor junto ao meu, olhar e admirar os teus olhos, beijar a sua boca... — lentamente o beijou, um beijo leve e sem maldade — Minha maior riqueza é você, Esteban.
Lentamente, o homem enlaçou sua cintura e a puxou para mais perto dele. Retribuiu o beijo, a princípio roçando os lábios minimamente enquanto os dedos se encarregavam de acariciar a sua cintura por debaixo da camisa de algodão.
Anos poderiam se passar, mas você teria plena certeza que beijá-lo seria sempre como na primeira vez. Era impossível conter as borboletas no estômago, a forma como ele a abraçava te fazia sentir-se em um outro universo, onde existiam apenas vocês dois.
Ele a puxou mais para perto e fez com que você sentasse no colo dele, aproveitando para subir mais os dedos, e dessa vez, eles apalparam os seios desnudos.
— Yo te quiero tanto, cariño — sua voz saiu abafada entre o beijo e você entendeu isso como um passe livre para prosseguir.
Com as mãos livres puxou a camisa para cima e retirou do seu corpo, libertando o tronco para que ele tivesse acesso total a ele. Não demorou muito para que Esteban depositasse os primeiros selares em sua clavícula, deslizando a língua até que estivesse no vale entre os seios.
Uma das mãos subiram até sua nuca, e com a palma aberta, ele capturou um punhado dos fios e os puxou para trás, te obrigando a tombar a cabeça junto.
Ele continuou a carícia lambendo a pele e rodeando os botões com a língua, ao passo que os dedos se enterravam cada vez mais nas mechas e as puxavam até que você estivesse impossibilitada de retornar a cabeça na posição inicial.
Esteban aproveitou para sugar a pele do pescoço, mordiscou e marcou alguns centímetros que encontrara. Subiu um pouco até encontrar seus lábios novamente, e ali, aproveitou para lamber e mordiscar também.
Era um homem extremamente sensual e libidonoso, dificilmente conseguia fugir dos seus encantos e dessa vez não seria diferente.
— Eu te quero tanto... Tanto — voltou a puxar a sua nuca e, com a outra mão, puxou seu quadril para baixo para que sentisse o tamanho do seu desejo, pulsante e tão quente.
Com a destra você desceu até chegar no botão da calça alheia, desabotoando e puxando o tecido da cueca para baixo.
O membro rijo saltou para fora e você foi rápida ao agarrá-lo, deslizando o polegar pela fenda e distribuindo a lubrificação.
Sentiu a própria calcinha molhar com a visão e foi impossível segurar o gemido assim que ele impulsionou o quadril para cima, iniciando a masturbação.
Notando o seu desespero, Esteban, subiu sua saia e sem nenhuma dificuldade afastou sua calcinha, rodeando os dedos entre as suas carnes.
— I-isso — gemeu baixinho e arrancou um sorriso do homem
— Você me quer dentro, cariño, ou prefere que continuemos assim? — a sobrancelha se ergueu em dúvida e você gemeu assim que o anelar do homem deslizou em sua fenda.
— Por favor... — não conseguiu terminar, dado que ele introduzira mais um dedo
— Por favor, o quê? — sugou um mamilo e soltou em um estalo — Preciso que me diga o que quer que eu faça.
Sua cabeça estava um turbilhão de sentimentos, ao ponto de não conseguir processar nenhuma frase. Prosseguiram assim por alguns instantes até que o seu corpo não aguentasse mais a tortura.
— Coloque em mim, Esteban, por favor — suplicou e isso foi o suficiente para que ele entrasse em você, fundo e forte.
Naquele cômodo se ouviam apenas os gemidos e choques dos corpos. Era incrível a forma como ele conseguia dominar todos os seus sentidos, te deixando a mercê dele.
Os dedos prosseguiram puxando as mechas do seu cabelo e seu corpo se encontrava completamente curvado, entregue a ele.
Dos seus lábios, gritos contidos escapavam enquanto dos deles escapavam urros de prazer.
Seu mel escorria pelas pernas e sujavam também o jeans do homem, mas isso não o incomodou, apenas o incentivou a aumentar a pressão e levar os próprios dedos até a sua boca, implorando mentalmente para que você os sugasse.
Sem nenhuma dificuldade ele a levantou e a levou no braço até encontrar a parede mais proxima, onde a virou de costas para ele e voltou a se enterrar em você.
A lateral do seu rosto subia e descia na parede em sua frente, mas nem mesmo isso foi capaz de fazê-la desistir daquilo.
— Vamos juntos — disse e levou o indicador até o seu botão, acariciando e lhe fazendo tremer dos pés as cabeça — Goze para mim, querida.
O quadril do homem batia cada vez mais forte contra as suas nádegas, seguidas de tapas que deixavam toda a região avermelhada. Sentia as pernas perderem as forças, a cabeça começava a rodar e sentia que poderia explodir a qualquer instante.
Bastou mais alguns segundos para que ambos se desmanchassem, e sem forças, você quase caiu de joelhos, isso caso ele não tivesse te alcançado antes disso acontecer.
Vocês riram mediante a situação, os corpos ainda tremiam em prazer e no rosto dos dois o sorriso de satisfação se fazia presente.
— Eu te amo muito, meu bem — disse ele e lhe roubou um beijo, puxando-a para deitar no chão e apoiar a cabeça em seu braço — Te amo muito.
— Eu também te amo, querido — respondeu e o beijou com desejo, sendo interrompida pelo celular do homem que começou a vibrar.
Ele então se levantou para atender, ajeitou a postura e a voz e atendeu. A ligação demorou alguns minutos, Esteban parecia um pouco nervoso e isso a deixou aflita, mas tudo mudou quando ele encerrou a ligação.
— Eu passei no teste! — sorriu abertamente — Voltaram atrás e decidiram que eu deveria ficar com o papel.
— Espera. No teste de hoje? — você o questionou e ele concordou sorridente — Oh meu Deus, meus parabéns, querido! — pulou em seus braços e o beijou novamente, até que os lábios doessem de tanto beijar.
— Obrigado por sempre acreditar em mim, mesmo nas dificuldades — abraçou-a e beijou o topo da sua cabeça — Eu não sei o que eu seria sem você.
— Eu também não sei o que seria sem você, Esteban — sorriu e o abraçou mais forte — Você merece isso e muito mais — o beijou outra vez e ele a tirou do chão, rodeando pela sala — Acredito que isso merece uma comemoração, não é verdade? — disse assim que seus pés encontraram a terra firme outra vez.
— Sim. E iremos comemorar da melhor maneira — Os olhos do homem ficaram mais escuros e o aperto na sua cintura se intensificou, indicando que aquela noite estava apenas começando.
129 notes · View notes
hipermnesia · 1 year
Text
se relacionar comigo é como correr uma maratona debaixo do sol do 12am e sem previsão de chegada.
é saber que eu mesma vou colocar os obstáculos no caminho pra que você caia ou desista antes do fim.
é entender que antes de te dar tudo de mim eu vou testar até a última gota se você está realmente comigo nessa pra saber se você vai continuar aqui quando tudo estiver ruindo e caindo aos pedaços
(principalmente eu)
a maioria das pessoas dizem que eu valho o risco mas sempre desistem antes da metade do percurso.
eu entendo. o sol do meio dia cansa e nem dá pra saber se o destino final realmente vale a pena. eu desistiria se pudesse também.
eu não sei te explicar o porque eu complico tanto algo que pode ser simples, leve, bonito. eu não sei explicar o porque eu dificulto o caminho e coloco pedras onde só tem flor.
você vai dizer que me ama e eu vou rir e te dizer que você ainda não sabe da vida, não sabe de mim. você vai dizer que me quer pra sempre e eu vou te dizer que o pra sempre tem prazo determinado, que o nosso pode ser amanhã. você vai me dizer que estou em todos os seus planos e eu vou fazer questão de te mostrar como cada um deles são frágeis feito papel
(como se tudo na vida não fosse).
é por isso que eu convenci a mim mesma que tenho que ficar sozinha. é por isso que eu digo que não é bom estar comigo. é por isso que eu digo que eu sei que você vai desistir. é por isso que eu digo que poucas pessoas seriam capazes de me amar. é por isso que eu digo que eu sou um caos muito grande pra me querer por perto. eu destruo tudo com meus medos improváveis e minhas inseguranças gigantes.
é como se poucas pessoas tivessem a sutileza e a sensibilidade para perceber que todos os obstáculos só são colocados ali pelo medo de alguém chegar no fim do percurso e ver que eu não sou essa muralha inatingível, que eu sou essa coisa frágil que se desmorona com qualquer vento que sopra, e que precisa ser cuidada muito mais do que qualquer coisa que você possa imaginar. (e que não sabe receber cuidado) e é por isso que eu não deixo o caminho livre com flores e sol. é por isso que eu construo obstáculos, é por isso que eu complico, é por isso que eu faço chover.
me desculpa, p. eu queria tanto que você ficasse.
te encerro aqui, algo bonito mesmo no fim.
(tu merece tão mais).
602 notes · View notes
destino-de-papel · 7 months
Text
COMO ALGUIEN A QUIEN TU QUIERES MUCHO TE PUEDE MENTIR TAN SINDICALMENTE EN TU CARA CUANDO TU SABES TODA LA VERDAD.
MENTIRAS TRAS MENTIRAS QUE NUNCA VAN A TERMINAR, TODO EL AMOR QUE UNA VEZ SE MURIENDO ANTE TUS OJOS
Y LA PERSONA CON LA CUAL TENIA MUCHAS EXPECTATIVAS SIMPLEMENTE FUE UNO MAS DEL MONTO.
TAN MIERDA DEBO SER PARA QUE ME PASA TODO ESTO, HASTA DONDE MAS
LO PEOR ES QUE POR MAS QUE MATES EL DOLOR MIL VECES LO REVIVES UNA Y OTRA VEZ DONDE SOLO ME TERMINO DE DESTRUIR.
PERDON POR SER HUMANA Y SENTIR TANTO AMOR POR ALGUIEN QUE JAMAS SE DARA CUENTA QUE LO AME COMO NUNCA NADIE EN MI VIDA
LO AME MAS QUE A MI MISMA QUE AHORA LA QUE SE DESTRUYE SOY YO POR AMOR
MENOS MAL NUNCA ESO LO SABRAS.
0 notes
notasfilosoficas · 5 months
Text
“Si te insultan descubrirás la paciencia, ante el dolor descubrirás la resistencia, y ante la tentación descubrirás el autocontrol. Con el tiempo conocerás todo lo que puedes enfrentar”
Epicteto
Tumblr media
Fue un filósofo griego nacido en Heriapolis, ciudad Helenística hoy en ruinas, ubicada en la actual Turquía.
Perteneciente a la escuela estoica, doctrina filosófica basada en el dominio y control de los hechos, cosas y pasiones que perturban la vida, valiéndose de la valentía y la fuerza de carácter para afrontarla.
Hasta donde se sabe, no dejó ninguna obra escrita, pero sus enseñanzas se conservan en la obra de su discípulo Flavio Arriano, quien además de la filosofía de Epicteto, narró las conquistas de Carlo Magno.
En su infancia, llegó a Roma en calidad de esclavo, no se sabe ni cuándo ni cómo llegó como esclavo a Roma, y a instancias de su amo Liberto Epafrodito, estudió filosofía con el estoico Musonio Rufo.
El filósofo estoico Musonio Rufo ejerció en Epicteto una gran impresión convirtiendo al esclavo en un gran misionero del estoicismo.
Cerca del año 94 Nerón desterró a Musonio Rufo cuando la proscripción senatorial fue dirigida contra filósofos, matemáticos y astrólogos.
Se sabe que alrededor del año 93 fue exiliado de Roma por el emperador Domiciano, y se trasladó a Nicópolis en el noreste griego, en donde fundó su propia escuela.
Según Epicteto, el papel del filósofo y maestro estoico, consistiría en vivir y predicar la vida contemplativa o estado espiritual que aparece en el ser humano cuando practica el silencio mental, centrada está en la noción de la felicidad.
Además del autoconocimiento, la virtud de la razón estoica consiste en la imperturbabilidad, la apatía o des apasionamiento y los buenos sentimientos, en donde, la virtud consiste en no guiarse por las apariencias de las cosas, sino en guiarse para actuar racional y benévolamente aceptando el destino individual tal y como ha sido determinado por Dios.
Muere en el año 125 en Nicópolis a la edad de 85 años.
Fuente Wikipedia y “Como ser un estoico” (Massimo Pigliucci), biografiasyvidas.com
49 notes · View notes
ocasoinefable · 2 years
Text
Seré del bosque y su silencio
Allí mis sueños y risa...
Allí olvidada por el mundo y las personas, leeré una sonrisa de sus letras.
Soltaré raíces entre colinas. Escribiré lo que pueda pensar, lo que logré soñar... [Cantico y grito a mi voz en silencio]
(Más a veces sonrojare en mis cuerdas por ti, y te susurre ave ... como un secreto) - "Te quiero" diré en susuros y seré feliz de que habitas mi corazón y sonrisa. Más seré en musgo y las flores, ellas me llaman-
12 notes · View notes
dornasentrelinhas · 4 months
Text
Não somos Romeu e Julieta
Não tenho a delicadeza e a pureza da Julieta, muito menos a ingenuidade e a formalidade de como conversar, me sento largada em uma cadeira e não com a postura reta e pernas cruzadas, não tenho etiqueta de como me comportar e como usar os talheres em uma mesa de jantar, existem dias que estou arrumada, mas os outros dias visto uma camiseta velha e um short confortável, não tenho vestidos e joias para usar todos os dias e muito menos a postura de uma dama em busca do seu primeiro amor, não tenho a pele perfeita e não uso perfumes feitos com essências de flores, minha mão não está em disputa para o homem que conseguir arrancar a cabeça de um dragão ou matar o inimigo de outra família, não frequento bailes e jantares chiques para mostrar a reputação da minha família e como sou uma mulher pura e com uma reputação a zelar. Você não é o Romeu, não é um cavaleiro em um cavalo branco, não é um príncipe e não usa roupas para festas fantasias, não tem espada, não mata ninguém por amor e não bate de frente com os inimigos por causa de uma mulher, mas sabe o que temos em comum? O destino resolveu nos apresentarmos e isso não aconteceu durante uma festa fantasia com pessoas desconhecidas, nos conhecemos quando precisávamos nos conhecer e viver algo diferente. Meu coração nunca esteve como recompensa para homens que se vencerem a batalha ficaria com ele, meu pai nunca ofereceu a minha mão para um homem por conta da riqueza e a reputação, mas meu coração ficou em jogo assim que você entrou no meu caminho, ofereci minhas mãos para você segura-las caso caísse ao seus pés, meus olhos sempre estão a sua procura, assinei a minha sentença várias vezes para não correr o risco de passar algo em branco. O amor que sinto por você não está escrito em livros antigos ou lendas, minhas cartas não são escritas com tinta em um papel amarelado, meu jeito de conversar não é culta e épica, mas a história que quero viver com você é algo que quero falar para os nossos filhos e fazer o Willian Shakespeare ficar com inveja pela forma que escrevo sobre nós. Não existe porção do amor para ambos tomarem e se apaixonar instantaneamente, não viajamos de barco ou navio para chegarmos ao nosso destino, mas pegaria todos os aviões possíveis para chegar até você, trocaria de carro quando acabasse a gasolina quantas vezes fossem necessário, mas tomaria algum chá com receita que pessoas antigas fizeram e esperaria o efeito desejado acontecer, porém me apaixonar por você não teve a necessidade de tomar algo, meu coração escolheu você sem avisar, ele te acolheu e cuidou de vocês deis do momento em que você apareceu na minha vida e o nosso amor pode até não ser épico ou ter um livro contando a nossa historia de como lutamos para ficarmos juntos, mas tenho a certeza que cada página, capitulo e palavras escritas quero escrever junto com você, seremos amigos dos inimigos, usaremos fantasias, lutaremos contra dragões, não teremos postura e etiqueta em um jantar, será apenas nós dois fazendo a nossa história para ser lembrada por nossos amigos, familiares e deixaremos Romeu e Julieta no chinelo, porque o nosso amor ele não é contemporâneo e sim o encontro de duas almas que estavam perdidas. 
Elle Alber
40 notes · View notes
silencehq · 4 months
Text
Tumblr media
Nem mesmo ser da geração que salvou o Olimpo duas vezes está sendo o suficiente para que Percy Jackson e seus amigos tenham acesso a real situação que está assolando o Acampamento Meio-Sangue. Vale lembrar que apesar de antigos no refúgio, apesar de assumirem cargos de liderança e serem figuras importantes para os irmãos, eles são apenas semideuses. Lidar com o silêncio de Quíron e Dionísio não é algo novo para todos, Percy Jackson tinha seu nome envolvido em uma Grande Profecia e mesmo assim precisou aprender a viver com o que tinha em mãos.
Os sete meio-sangue que estavam atuando ativamente na Profecia da Última Grande Guerra não foram informados de tudo o que iriam enfrentar no segundo que foram reclamados por seus parentes divinos. As profecias se cumprem aos poucos e, às vezes, nem mesmo Quíron consegue prever o que vai acontecer ou tem informações o suficiente para ser útil.
A paciência é uma virtude e, para os semideuses, geralmente é a única coisa que precisam ter em abundância. Acima até de coragem.
PERCY JACKSON
Quatro anos de paz não foi o suficiente. Percy Jackson teme que Annabeth e ele sejam atraídos mais uma vez para um destino que nenhum dos dois pode evitar. Cair no Tártaro parece ter sido o ponto alto de todo o perigo que correu, mas a mera ameaça do Olimpo cair como dito na nova Profecia, lhe assombra. Afinal, viu com os próprios olhos o que está abaixo deles, sem o Olimpo para manter o que está no Tártaro e o próprio Tártaro sob controle… a terra não terá chance. Se sacrificar pelos amigos é algo que está disposto a fazer, então tem sido imprudente quando surgem monstros. Não tem desempenhado um papel muito importante na luta contra os monstros que atacam o acampamento justamente por ser impulsivo demais.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Ele não concorda com os métodos de Quíron, desconfia que Dionísio está aprontando alguma coisa mas se compadece com Petrus. Ele sabe o que é estar sem memória, sentir-se sozinho e saber que existem peças faltando, mas não conseguir lembrar o que é. Na visão de Jackson, Petrus é apenas uma marionete nas mãos dos deuses.
ANNABETH CHASE
Annabeth está pronta para defender o Acampamento custe o que custar… exceto colocar em risco seus amigos. Colocar Percy Jackson em risco. Annie é a líder dos estrategistas mas até agora não conseguiu prever nenhuma situação e tem sido pega de surpresa por tudo. Isso é uma novidade não só para os irmãos, mas para ela também. Não está acostumada a estar dois passos atrás de qualquer ameaça que esteja pairando sobre a cabeça de todos. Ela tem certeza de que algo grande está se preparando para atacar todos, como Gaia e Cronos. Para Annabeth, é apenas uma questão de tempo para que eles comecem a sofrer perdas e está tentando preparar o Acampamento para isso, criando estratégias que ajudem a proteger o refúgio caso não sobrem Patrulheiros ou Filhos da Magia, por exemplo.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Ela concorda que Quíron está sendo omisso demais com tudo, mas entende que às vezes o silêncio é necessário. Não julga a escolha do centauro pois confia que ele sabe o que é melhor para todos, ela não tem dúvidas de que se Quíron soubesse como acabar com toda a confusão sem que vidas fossem perdidas, ele faria. Petrus é uma incógnita para ela, não gosta muito do rapaz desde o primeiro momento. Usou algumas vezes o chapéu para tentar ficar de olho nele mas o garoto é entediante e não fez nada de estranho enquanto ela vigiava. Sobre os deuses em geral, ela não confia que os semideuses terão ajuda quando precisarem. Acha que quando clamarem, receberão silêncio dos pais.
NICO DI ANGELO
Sendo a única pessoa capaz de transitar entre os dois Acampamentos, Nico DiAngelo está receoso. Acontece que desde o chamado de Dionísio, seu passe livre para o Acampamento Júpiter foi revogado. Nico consegue ter visitas esporádicas com a irmã e apenas com ela. Hazel não tem sido uma fonte muito boa de notícias já que não consegue dar nenhuma informação ao irmão, todas as vezes que ela tenta falar sobre o assunto, os olhos ficam vidrados e automaticamente outro rumo tenta dar a conversa. Hades também não ajuda em nada, já que mesmo suas visitas ao submundo agora já não acontecem com frequência. Depois da visita do pai ao Acampamento, Nico tentou fazer a viagem nas sombras para o reino dele e não conseguiu. Os fantasmas estão inquietos, dizem que o deus dos mortos está diferente. Nico não conseguiu arrancar nenhuma informação nem dos fantasmas, nem de Quíron. Ele teme que uma guerra esteja perto de eclodir pois não consegue imaginar o que poderia ser pior do que Cronos e Gaia. Nico não se orgulha que quando soube da visita de Hades ao acampamento, tentou convencer Will a saírem dali e irem para longe do refúgio. Até hoje não sabe o motivo mas ouvir que o pai e Hécate estavam tramando juntos, sentiu um pânico incomum tomar conta de si.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Odiar é até uma palavra boa para o que sente sobre Petrus. Desde o primeiro segundo, não gostou do semideus. Antes mesmo de saber que era seu irmão, já desconfiava que algo não estava certo. Sentia-se incomodado na presença dele antes, um vazio que parecia lhe sugar. Os fantasmas não se aproximavam de Petrus quando este foi morar no chalé de Hades, nunca interagiram com ele. Nico odeia o silêncio de Quíron e tenta de toda forma fazer com que isso mude, mas até agora não obteve sucesso.
WILL SOLACE
Como chefe da enfermaria, Will está esgotado. Ele sabe que as coisas vão piorar, que os leitos ficarão mais cheios em breve e que nenhum deles poderá evitar a quantidade de mortes que vão acontecer quando a guerra começar. Ele já não acha mais que é uma questão de “se” mas sim de “quando”. Will tem vivido quase vinte e quatro horas por dia dentro da enfermaria cuidando dos amigos que voltam de missões feridos, que enfrentam os monstros que atacam o acampamento; apenas Nico consegue tirá-lo desse transe para que ele coma um pouco e durma por algumas horas. Os Curandeiros nunca viram Will tão frenético na enfermaria, o filho de Apolo geralmente é uma figura apaziguadora mas agora tem se mostrado agitado e nervoso. A cada ataque, isso piora. A cada ataque, se sente mais perto da guerra. Quando Nico ofereceu a chance de escaparem ele quase aceitou, mas nunca se perdoaria de deixar os amigos para trás. Espera não se arrepender da decisão de ficar no Acampamento.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Quíron e Dionísio podem não saber o que está acontecendo, na visão de Will. Mas esconder deles a origem de Petrus? Isso foi um golpe baixo. Não acredita um segundo sequer que Quíron não sabia quem era o garoto. Contra o cunhado ele não tem nada contra, exceto que se recusa a tratar dele sozinho. Não gosta de ficar em uma sala sozinho com Petrus desde quando ele ainda estava em coma meses atrás. A enfermaria parecia assombrada com vozes e vultos, nunca tiveram uma noite tranquila enquanto ele estava lá. Por causa disso, se acostumou a forçar Nico a permanecer na enfermaria de noite já que quando avisou a Quíron, recebeu apenas uma ordem de afastamento por três dias para descansar. Desde esse momento, não está confiando em Quíron para nada.
CLARISSE LA RUE
Uma guerreira sempre está pronta para a guerra. Clarisse, obviamente, dorme com a lança ao seu alcance pois sabe que a qualquer momento o alerta pode soar. Líder dos Patrulheiros, é provavelmente a pessoa mais ativa do Acampamento nesses últimos meses. O fogo em seu olhar é ardente e está claro para todos que objetivo dela: proteger seu lar. Não importa se para isso tem que passar por cima das ordens de Quíron e de Dionísio, Clarisse apenas quer marchar direto para a guerra e evitar toda a ladainha que antecede a batalha. Todo mundo já sabe que uma guerra está se aproximando, certo? Então para que evitar? Não sabe contra quem irão lutar, mas tem se esforçado ainda mais para preparar seus irmãos e todos os outros semideuses, eles não podem ser pegos de surpresa.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Está sem paciência com Quíron e já perdeu as esperanças com Dionísio, por ela, o deus deveria voltar para o Olimpo já que ele claramente está do lado dos deuses, não dos semideuses. O silêncio de Ares é maçante para a semideusa, ela já esperava que o pai se recolhesse mas uma guerra está a caminho! Ares deveria estar a frente disso! A história de haver um novo traidor entre eles lhe dá calafrios pois lembra-lhe de Silena, são memórias dolorosas que mesmo após anos ainda atormentam sua mente. Têm desconfiado então de todos os amigos, colocado eles a prova e se tornou um pouco paranoica. Petrus para ela é um traidor claro. O culpa pela morte de Aidan, o culpa pela fenda, pelo cão infernal, pelo Drakon, por tudo!
LEO VALDEZ
Saber a opinião de Valdez é sempre a parte mais difícil. O semideus é um mestre em esconder suas verdadeiras emoções por trás de um sorriso sapeca, um flerte ou uma brincadeira divertida. Claro, quando exigido de si, a seriedade vem à tona, mas é óbvio que dentre todos, Leo tem se mostrado o mais leve. Seu tempo é quase todo gasto no Bunker 9 ou nas forjas. Está sempre fazendo um protótipo novo de arma ou equipamento para os semideuses, adora criar novas armadilhas e itens de proteção. Se realmente eles forem enfrentar uma guerra, Leo irá garantir que todo mundo tenha uma arma potente em mãos e algum meio de se proteger. Ninguém sabe mas Leo também acha que ouviu vozes logo quando a fenda foi aberta. Elas pararam, mas ele ficou tão perturbado que tentou criar protetores de ouvido potentes para se proteger. Claro, isso não deu certo contra as vozes, mas ele conseguiu criar um que é a prova de fogo e pode usar quando está nas forjas!
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Se Quíron está guardando informações deles é porque ele sabe o que faz, diria Valdez. Mais da metade do acampamento é composto de crianças, são poucos os adultos presentes, então para que assombrar tantas crianças com a notícia de uma guerra e que todos vão morrer? Ele já tem ansiedade o suficiente sem ter que se preocupar com isso, muito obrigado! Leo é protetor com mais jovens então se tiver alguma chance de evitar que os semideuses menores tenham a mesma adolescência e infância que ele teve, ele fará. Se isso quer dizer com Quíron e Dionísio em silêncio escondendo tudo deles? Bem, ele apoia. Petrus é uma figura triste para Leo. Sem memória, sem família, com todo mundo atacando e desconfiando dele? Péssimo! Sempre tenta defender Petrus quando ouve algo ruim sobre o rapaz.
EXTRAS
THALIA GRACE
Fora do Acampamento as coisas não estão muito boas. Os ataques de monstros a civis têm aumentado significativamente. Antes, as caçadoras só precisavam lidar com monstros atacando semideuses ou fazendo alguma besteira, mas agora alguns também atacam mortais. Ártemis está sem contato há cinco meses e nenhuma das caçadoras sabe o que está acontecendo. A deusa sumir e ficar em silêncio não é tão novidade assim, não quando os deuses estão recolhidos. Mas dessa vez é diferente. Há grupos de Caçadoras espalhadas em todo o mundo em busca de Ártemis e Thalia está começando a perder as esperanças. É como se a deusa tivesse sumido sem deixar rastros. Thalia sabe que terá que ir até o Acampamento investigar Quíron e Dionísio, mas está protelando essa decisão pois isso causará alarde nos semideuses. Ela quem lidera as Caçadoras mediante o sumiço de Ártemis, ter a Tenente não só visitando o Acampamento mas pressionando os diretores não será algo tão bom de se ver, então ela espera que a deusa apareça antes que isso seja preciso fazer.
AOS OLHOS DO PÚBLICO(apenas das Caçadoras):
Thalia não sabe que Quíron e Dionísio estão sendo tão restritos com as informações para os semideuses, ela sabe que há uma fenda no Acampamento pois está sempre em contato com as caçadoras presentes no local. A Tenente mantém a guarda de longe não só sob as suas Caçadoras quanto também para os colegas semideuses, mas não entende a profundidade da gravidade da situação. Petrus não aparenta ameaça para Thalia que está acostumada a lidar com pessoas desaparecidas voltando à vida ou surgindo em séculos que não deveriam pertencer. Contudo, desconfia que o semideus também esconde algo.
PETRUS GRAVESEND
Petrus está cansado. Num dia estava correndo no meio de árvores, no outro… encarava rostos desconhecidos e era chamado de filho de Hades. Ele genuinamente ainda não recuperou suas memórias, não sabe o que seu pai quis dizer quando falou sobre Hécate e não sabe como aquele maldito apito foi parar consigo. Petrus não tem as respostas que as pessoas tanto procuram porque ele sabe tanto quanto qualquer um ali. As vozes que ele ouve ainda não pararam, a poção não funcionou. Seus sonhos continuam sombrios e confusos, ele não conheço suficiente do mundo dos semideuses para saber se estão em perigo ou não, mas algo dentro de si grita que sim. Que o destino não vai ser gentil porque a cada dia que passa, a cada ataque no acampamento, a sensação de déjà vu lhe acomete. Ele já viveu isso antes? Não tem lembranças. Apenas sabe como reagir, como lutar.
AOS OLHOS DO PÚBLICO:
Ele confia em Quíron, confia que Quíron não sabia quem ele era porque as visitas à Casa Grande o centauro parecia tão confuso quanto ele, tão perdido e sem respostas também. Quíron foi a única pessoa que acreditou em sua inocência no início, que lhe tratou bem, então ele confia no centauro. Em Dionísio, no entanto, ele não confia. O deus tem sempre um olhar pesado para si, está sempre à espreita e desde o princípio, não agia como Quíron. Dionísio não parecia surpreso com nada como Quíron ficava. Cada descoberta, era como se nada conseguisse arrancar do Sr.D. uma surpresa genuína. Sobre si mesmo… Petrus não confia em si. Ele não sabe o que fez com Aidan, só sabe que acordou com o semideus morto e o sangue manchando todos os lugares; ele não sabe o quão profunda é a fenda que abriu, ele não sabe se foi ele quem abriu a fenda. Quem ele era no passado? Como pôde morrer quase cem anos antes e retornar agora? O que fez ele morrer no passado? Ele não sabe se é confiável. Não com tantos buracos em sua história.
OOC
Aqui está um resumo de como os campistas mais famosos do Acampamento estão lidando com a situação. Apenas informações extras para mergulhar mais no universo!
Todas as informações "Aos olhos do público" podem ser usadas em plots na dash sobre como essas figuras estão reagindo. Partimos da percepção de que a fofoca corre solta então essas opiniões são conhecidas de todo mundo.
APENAS a de Thalia Grace é limitada às Caçadoras. Já que a Tenente de Ártemis só mantém contato com suas Caçadoras.
Adorei fazer isso então caso alguém tenha mais ideia sobre ângulos que desejam ver, informações extras que desejam saber sobre o passado, os deuses, os semideuses, por exemplo, estamos dispostos a trazer mais coisas extras para vocês! Nunca sabemos o quanto estão dispostos a ler, então não queremos encher vocês de informações dispersas. Mas amamos expandir o universo, então caso desejem... só falar que damos um jeito!
Esperamos que gostem da espiadinha!
29 notes · View notes
lisaalmeida · 11 days
Text
Na margem de uma folha.
Papel atirado ao vento,
Escrevi o céu que me olha
E a chuva de me ser tanto…
...Tanto destino rasgado
Tantos versos lá perdidos
Tanto sonho resgatado
À dor solta nos sentidos…
...Sentidos de asas presas
No silêncio, nas palavras
e no vento que se move…
… Num bailar de raras penas
Por esse céu, onde poemas
São meus olhos, quando chove...
jorge du val
Tumblr media
17 notes · View notes