Tumgik
#la primera muerte
supernova-rsrcs · 1 year
Text
Cecilia lidiando con el discurso de Dario por un lado y viendo cómo Eider se acerca a TOCAR a su esposo por el otro
Tumblr media
39 notes · View notes
meduz-z-za · 11 months
Text
I think the reason why Izzy's death isn't even making me sad or angry la because is just so out of place with the rest of the series, it feels like reading an ooc fanfic.
7 notes · View notes
sweetsweethate · 2 years
Text
i can't explain how sad i felt when i read the lost hero
13 notes · View notes
harryjamesp · 2 years
Text
Tumblr media
0 notes
yurnu · 3 months
Text
||🔱💮Reincarnation AU 💮🔱||
Beautiful Monster
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Cuando su amorío con Lilith fue descubierto. Lucifer y la primera mujer en vez de ser expulsados para caer al infierno, son condenados a reencarnar una y otra vez sin sus poderes, memorias. Siendo castigados a estar siempre juntos, si tanto se aman pues que estén juntos en todas sus reencarnaciones para ver si su amor es tan verdadero como tanto presumían.
Resultó no ser así, en cada vida en la que renacian, se juntaban pero luego se separaban cuando Lilith obtenía lo que quería de Lucifer, ya sea riqueza, poder o tierras.
Eso siempre terminaba con Lucifer suicidándose por la depresión, por su corazón roto.
Adam, el primer hombre, tuvo un romance bastante fructífero con su Eva a pesar de haber sido expulsado del Edén cuando ella mordió la manzana (influenciada por Lucifer y Lilith antes de que esos dos fueran castigados) y lo forzó a comerla también, pero terminó ahogándose y con un trozo de dicha manzana en su garganta.
Cuando murió y se fue al cielo, él se enteró de que Eva no podía ingresar al paraíso, que su alma estaba infectada por el pecado de la manzana. Adam se ofreció a contener el pecado para que así Eva entrara al paraíso, aunque él fuera condenado al infierno.
Así se hizo, los pecados dentro del alma de Eva fueron almacenados dentro de Adam, justo en su garganta en dónde se alojaba ese trozo de la manzana que no había sido expulsada. Esto provocó que Adam se deformara un poco, siendo afectado por los males del fruto prohibido. Pero debido a que su alma era bastante pura su apariencia humana se mantuvo, al igual que sus alas doradas en señal de su pureza.
Fue expulsado del paraíso y cayó al infierno, siendo ahora un híbrido entre ángel y demonio, siendo ahora una mezcla de pureza y el mal primordial.
Hizo del infierno un lugar sin reglas, un lugar en dónde la lógica no tiene sentido y las leyes de la razón desafía lo lógico.
El infierno era el lugar de nadie, en dónde sobrevivía el más fuerte.
(Imagínense el Mundo Distorsión de Giratina de Pokémon Platino)
El infierno era un lugar distorsionado con la gravedad cambiante y con islas flotantes, en dónde en lo más profundo de ese lugar lo habitaba él, Adam, el monstruo con él cual nadie tenía que meterse.
Cuando llegó la época moderna ocurrió algo sorprendente. Comenzaron a aparecer mazmorras de forma aleatorias cuyo interior tenían mundos de fantasía y como toda fantasía tiene sus monstruos.
Debido a eso también comenzaron a aparecer "despertados", personas con poderes que se dividían por rangos.
El más débil era el de rango F, no se diferenciaba mucho de un humano común, después estaba el rango D, no eran del todo sorprendente pero podía hacer algunas cosas, después estaba el C, el cual ya era el más fuerte que el humano común y podía catalogarse como "súper humano" , lo mismo aplica para él rango B.
Luego tenemos a los rangos A. Los cuales son los más fuertes y por último los de Rango S, siendo considerados semi-dioses por sus poderes.
Para despejar las mazmorras se construyeron gremios, siendo liderados por los cazadores de rango S o A, cuando una mazmorra es despejada (matando al jefe de ese lugar) está desaparece o se logran mantener abiertas para extraer sus recursos para el consumo humano.
Para que una persona pueda "despertar" tiene que estar en una situación de vida o muerte, no importa el rango, si o si tiene que ser así. Debido a eso se creo un centro de despertado en dónde se ponen a las personas en simulaciones realistas para que así puedan despertar sin poner en riesgo su vida, luego son enviados a un psicólogo para poder ser tratados si adquieren algún trauma durante la experiencia del despertar.
Lucifer Morningstar es un despertado de rango S y es líder de un gremio de cazadores llamado "Estrella del Alba". Es un hombre divorciado de 30 años con una hija de 6 años llamada Charlie Morningstar.
Desgraciadamente esta pasando por un caso de depresión debido a su divorcio con su ex-esposa Lilith, una cazadora de rango A. Realmente pensaba que se amaban, pero al parecer ella solamente lo buscaba por su riqueza, quedándose con la mitad de sus cosas, por suerte no logro quedarse con el gremio, pero si con algunos de sus terrenos, riquezas y mansiones.
Un día es secuestrado, debido a que cayó como un tonto en una trama muy elvadorada de un grupo de cazadores, que al parecer tenía entre sus filas a un cambia formas que se hizo pasar por su hija. Siendo atado por unas cadenas especializadas para contener a los de rango S (solamente las autoridades tenían el derecho a usar eso, así que esas cadenas eran de contrabando) .
Fue maltratado para que estuviera débil y así no ofrecer resistencia para un ritual.
Querían invocar a un tal "Rey de la nada". Un ser de lo cual no se tienen registros.
Cuando llegan al portal de la mazmorra y se adentran en ella comienzan los preparativos. Escribiendo signos desconocidos y hablando en una lengua muerta mientras que Lucifer está en el centro del círculo y un anillo de oro con una joya violeta está frente a él.
El tiempo pareció relentizarse y cantos en un idioma desconocido comenzaron a resonar dentro de la cueva oscura de la mazmorra, los cazadores dejaron de hablar cuando un enorme portal tan negro como el abismo se presentó frente de ellos. El silencio gobernó el lugar, pero no ocurrió nada. Uno de esos cazadores camino hacia el portal oscuro y miro dentro de ella por un rato, antes de que dicho portal oscuro le regresará la mirada y de repente emergiera una enorme figura humana cubierta de una luz dorada.
Antes de que el líder de esos cazadores hablara sus almas se vieron absorbidas por el ente y sus cuerpos cayeron como peso muerto en el terroso suelo.
Todo esto ocurrió siendo observando por un anonadado Lucifer, el cual no pronunció ni una sola palabra.
"No tengas miedo. Humano." pronunció la criatura, mientras que la luz que lo cubría desaparecía, dejando ver su apariencia monstruosa.
Pero para Lucifer era el ser más hermoso que alguna vez existió.
Adam destruyó las cadenas que aprisionaban a Lucifer con un vago gesto de su mano. Y antes de poder volver a su mundo descubrió algo que lo dejo en shock.
Todo su ser se vio ligado a ese anillo dorado con una joya violeta, la misma que estaba frente de Lucifer. Haciéndole imposible volver al infierno a menos que su alma se viera libre de esa joyería.
Al parecer ese grupo tenía pensado usar el poder de Adam como un arma para su propios beneficios. Para eso el ritual.
Y así comienzan las aventuras del duo para desligar el alma de Adam de ese anillo. Siendo Adam tratando de adaptarse a las nuevas costumbres de sus descendientes y con Lucifer a su lado tratando de cortejarlo mientras que ambos crían a una pequeña niña de 6 años.
Y lo más gracioso de todo es que Adam no sabe que este Lucifer aunque es el mismo Lucifer que alguna vez arruinó su vida y solamente cree que este pobre diablo tiene la desdichada suerte de tener su apariencia, como un doppeltgänger.
(Este es un Au AdamsApple)
168 notes · View notes
Text
The Early Photographs of Bettie Page III
[Las primeras fotografías de Bettie Page]
Tumblr media
In 1951, young art student Jack Faragasso hired a model for a photo shoot–Bettie Page, early in her career. Jack Faragasso American Artist: He is known nationally and internationally as an art instructor, fine artist, illustrator and author. He has been teaching students of all ages, to draw and paint in the time-honored realistic manner, at the Art Students League of New York since 1968. He has also taught at the Woodstock School of Art and the Scottsdale Artists School in Arizona. As an instructor of the Frank J. Reilly School of Art, he then became its director after the death of Mr. Frank Reilly in 1967. Frank J. Reilly was and still is regarded by many as one of the finest teachers of drawing and painting in the country. Faragasso, who studied with and worked under Reilly for many years, is the foremost authority on the Reilly system of drawing and painting. As a thoughtful and knowledgeable teacher, the author has carefully researched and practiced every phase of the subject. He spent much time in the great museums of Europe and America studying the works of the Old Masters. The author uses many of the drawing and painting principles of the Reilly system, and over the years, he has elaborated upon these principles, and added to them. His subjects include portraits, figures, still life, landscape and meaningful paintings.
En 1951, el joven estudiante de arte Jack Faragasso contrató a una modelo para una sesión fotográfica: Bettie Page, al principio de su carrera. Jack Faragasso Artista estadounidense: Es conocido nacional e internacionalmente como instructor de arte, artista plástico, ilustrador y autor. Ha estado enseñando a estudiantes de todas las edades a dibujar y pintar en el tradicional estilo realista en la Art Students League de Nueva York desde 1968. También ha enseñado en la Woodstock School of Art y en la Scottsdale Artists School en Arizona. Como instructor de la Frank J. Reilly School of Art, se convirtió en su director después de la muerte del Sr. Frank Reilly en 1967. Frank J. Reilly fue y sigue siendo considerado por muchos como uno de los mejores profesores de dibujo y pintura del país. Faragasso, que estudió y trabajó con Reilly durante muchos años, es la principal autoridad en el sistema Reilly de dibujo y pintura. Como profesor reflexivo y erudito, el autor ha investigado y practicado cuidadosamente cada fase de la materia. Pasó mucho tiempo en los grandes museos de Europa y América estudiando las obras de los viejos maestros. El autor utiliza muchos de los principios de dibujo y pintura del sistema Reilly y, a lo largo de los años, ha ido ampliando y ampliando estos principios. Sus temas incluyen retratos, figuras, naturalezas muertas, paisajes y pinturas significativas.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
85 notes · View notes
dramaticcrow · 5 months
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
(Eng Prompt List)
Day 1: Moon and Sun | Space AU | Royal AU - “My Missa”
Day 2: Vampires | Mermaids | Gods - “I'll be here when you're ready”
Day 3: Mafia | Past lives | Cat Missa and Crow Philza - “As long as you are with me you will never feel alone”
Day 4: Confession | Emergency | Murder - “The sky is the limit”
Day 5: Language of flowers | Hanahaki | Spy X Family AU - “No one ever told me that love hurt”
Day 6: First times | Emergency room | Separation - “It's not goodbye, it's see you soon”
Day 7: Disease | Hot chocolate | Comfort - “The family is forever”
Extra prompts:
Pirates
Anniversary
Red thread of destiny
“I love you, I'm sorry I couldn't tell you sooner”
Family
Ghibli
Lullaby
“I would never choose to love another”
New parents
DeathDuo/Pissa Week
Reglas/Rules:
(Esp)
Entonces eh decidido que haré este reto agradezco a mi amigo Irl y a los chicos de Discord por apoyarme y darme ideas para la lista! Así que aquí vamos…
Las dos primeras imágenes contienen los prompts para esta Pissa/DeathDuo Week, contiene dos prompts y un diálogo. Puedes elegir el prompt que más te guste o combinarlos para darle tu propio toque personal :D
Las reglas de este reto son las siguiente:
1. La escritura y el arte están permitidos, puede ser solo uno o ambos como más se le acomode a cada uno.
2. No @ a los cubitos irl, tanto en vuestro arte como en vuestros fics (en el caso de que lo suban a X o Insta)
3. El contenido Dark y sensible como; Yandere, Personajes posesivos, Daño a uno mismo, Sangre, Muerte, Etc… está permitido siempre cuando se etiquete correctamente. (En caso de que tengas una idea y no sabes si está permitido puedes enviarme un mensaje)
4. No es necesario hacer los siete días, puedes hacer cuantos quieres y con los que te sientas cómodo.
5. Este reto es tanto de Pissa (pareja romántica) como DeathDuo (pareja platónica) por lo que los prompts están hechos para que sean cómodos para los dos lados de la comunidad, solo por favor etiqueten debidamente si es Pissa o DeathDuo.
6. La semana que he escogido para este reto es del 1 de Junio al 7 de Junio, aunque pueden tener todo el mes de Junio para publicar su arte/escritura
7. Y la última regla pero no menos importante… no olviden divertirse!
(Eng)
So I've decided that I will do this challenge I thank my friend Irl and the guys on Discord for supporting me and giving me ideas for the list! So here we go...
The first two images contain the prompts for this Pissa/DeathDuo Week, it contains two prompts and a dialogue. You can choose the prompt you like the most or combine them to give it your own personal touch :D
Also, if one of the days doesn't suit you or you don't feel comfortable with that prompt there is a list of nine extra prompts that you can also choose from.
The rules of this challenge are this:
1. Writing and art are allowed, it can be just one or both as it suits you best.
2. no @ to the irl, in your art and in your fics (in case you upload it to X or Insta) 3.
3. Dark and sensitive content such as; Yandere, Possessive characters, Self harm, Blood, Death, Etc... is allowed as long as it is tagged correctly. (In case you have an idea and don't know if it is allowed you can message me).
4. You don't have to do all seven days, you can do as many as you want and as many as you feel comfortable with.
5. This challenge is both Pissa (romantic couple) and DeathDuo (platonic couple) so the prompts are made to be comfortable for both sides of the community, just please tag properly if it's Pissa or DeathDuo.
6. The week I have chosen for this challenge is from June 1 to June 7, although you can have the whole month of June to post your art/writing.
7. And last but not least rule... don't forget to have fun!
146 notes · View notes
latinotiktok · 2 years
Text
Tumblr media
Bienvenidos a un torneo mal hecho, poco serio, casi inentendible que incluye: una enorme cantidad de personajes de procedencia dudosa, muchisimas encuestas y una final que va a incluir 3 personajes porque SOY TAN MALO EN MATEMÁTICAS QUE NO CALCULE NADA
AH Y SORPRESA! Metí algunos personajes más creyendo que resolvería el error matemático (no lo hizo)
anyways comenzamos con la primera ronda: Iré colocando acá bajo los links de las encuestas (si me acuerdo JAJSJSJS)
EDIT: Gustavo Fring reemplaza a Namor
Yaolt es reemplazado por Aldeberan de Caballeros del Zodiaco
Primera Ronda
Guillermo de la Cruz vs Coco
Lucas Amato vs El Profesor Jirafales
Dr Flug vs El Mandalorian
Carlos vs Panchito Pistoles
Tulio Triviño vs El Chapulín Colorado
El canario de la película de Rio (2011) vs Rodolfo Rivera
Goku vs El condorito
Lobo/La muerte vs Joaquín
José Carioca vs Isidoro Cañones
Lúcio vs Bruno
Carlitox vs Juandisimo
Lalo vs Compayito
Julio vs Kronk
El papa de Mafalda vs Ravenna
Adrián Seidelman vs Colgate 360
Roberto da Costa vs Don Ramón
Don Armando vs Pacha
Homero/Gomez Addams vs Juan Carlos Bodoque
Héctor vs Mr Trance
Black Hat vs Gabriel Reyes
Locutor/The Host vs Manolo
Guillermo de la Cruz vs Coco
Lucas Amato vs El Profesor Jirafales
Carlos vs Panchito Pistoles
Tulio Triviño vs El Chapulín Colorado
El canario de la película de Rio (2011) vs Rodolfo Rivera
Goku vs El condorito
Lobo/La muerte vs Joaquín
José Carioca vs Isidoro Cañones
Lúcio vs Bruno
Carlitox vs Juandisimo
Lalo vs Compayito
Julio vs Kronk
El papa de Mafalda vs Ravenna
Adrián Seidelman vs Colgate 360
Roberto da Costa vs Don Ramón
Don Armando vs Pacha
Homero/Gomez Addams vs Juan Carlos Bodoque
Héctor vs Mr Trance
Black Hat vs Gabriel Reyes
Locutor/The Host vs Manolo
Gus vs Adelbarán
Doctor Simi vs Santos
Yasutora Sado/Chad vs Albertano
784 notes · View notes
mondosalamone · 1 year
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Es invierno en Azul, pero el sol brilla y los arquitectos, los fans y los aficionados de Francisco Salamone andan correteando entre el Teatro Español, el hotel y los bares. Son las primeras Jornadas Salamone y, claro, se hacen en esta ciudad, donde el arquitecto dejó la más desmesurada de sus obras: una portada de 22 metros de altura para el cementerio. El cuerpo central tiene las letras RIP en gigantes placas de mármol negro y, delante, el brutal ángel de hormigón, su escultura más famosa, obra maestra del art déco y presencia maldita. En Azul la llaman «El Ángel Exterminador» o «El Ángel Vengador». Dicen que, cuando Salamone se la presentó al intendente, en los años treinta, el pobre funcionario murmuró que parecía algo maligno, una obra del Demonio. Eso parece. En cualquier caso, el Ángel no da ninguna idea tranquilizadora sobre la muerte, no es una imagen de alivio ni de pasaje, sino un juez severo, como una deidad egipcia dispuesta a arrancar y pesar un corazón. La escultura es enorme y cambia según la luz el sol: sus alas facetadas, sus ángulos, producen sombras que dan una ilusión de metamorfosis. Aparece tan de repente, además, al doblar la esquina en esta ciudad de casas bajas, muchas lujosas, en plena rica pampa húmeda. Es una aparición inesperada que no tiene nada que ver con el barrio, que no se anuncia, que parece depositada ahí, abandonada, como un artefacto de otro mundo.
📖Alguien camina sobre tu tumba · Mariana Enríquez 📷 2021
245 notes · View notes
compahuitzil1416 · 20 days
Text
Susano’o x Okita
Fanfic AU. Pedido especial por telegram de Lariza Tv.
Fem. Por:Huitzil1416
Tumblr media
Durante el Ragnarok al final de la batalla como se suponía la muerte no se le otorgaba al perdedor y de hecho una vez que termino todo y los humanos se vieron perdiendo la oportunidad de salvar a la humanidad la muerte no fue lo que les aconteció sino un destino peor. Zeus pervertido convirtió a los hombres en mujeres con tal facilidad y burla para humillarlos a todos, a algunos más y a otros quizás menos, pero el castigo era claro, ser la esclava sexual del contrincante en su pelea.
Capítulo especial  Susano'o x Okita
Susano’o no Mikoto sentía una emoción como nunca en su corazón al ver al asesino de humanos sobrevivir al doloroso cambio de hombre a mujer, porque ella no lo sabía,  quizá nunca lo creería pero para él, Soji Okita era la criatura más hermosa que había visto en toda su existencia.
Como el dios de las espadas, apreciaba más una buena batalla que a una mujer. No era un misterio que No Mikoto encontrara más emocionante entregarse en cuerpo y alma a un combate que a alguna amante.
Siendo honestos, Susano'o nunca había tenido  una erección por una persona, deidad o criatura pero si que sentía su cuerpo explotar cuando se encontraba con un campo de batalla que incluía a algún espadachín o guerrero fuerte así que haber peleado con Soji Okita fue un completo sueño cumplido.
El dios sabia de la leyenda de Okita, quien fuera Capitán de la primera división del Shinsengumi y tenía conocimiento de sus habilidades superiores e incluso el sobrenombre de este al ser llamado “El demonio de la espada” lo que significaba su contrario, así que sí. Susano’o, no iba a negarlo a esta altura,  él  admiraba a Soji de sobremanera, se podría decir que era un fan de aquel joven quien había sido llevado al final de su vida por una enfermedad y no ocultaba su deseo largamente acariciado por Susano'o de poder conversar ampliamente con quien  estaba en la cima de los homicidas durante el Bakumatsu, Soji Okita.
Susano sabía absolutamente toda la historia de Okita, había leído con mucho interés todo documento que hablaba del humano, así como también había escuchado historias y leyendas que lo incluían o lo mencionaban. No es como si se hubiera obsesionado con un simple humano por su trayectoria existencial, su valor, sus habilidades con la espada,  su alma, su corazón y su hermosa sonrisa ¡Por su puesto que no!
El dios se decía así mismo que simplemente sentía una genuina admiración y respeto por un humano, solo eso. No había nada de malo en encontrar a una persona interesante y atractiva aunque se tratara alguien del mismo sexo,  así como tampoco tenía nada de malo  pensar en lo mucho que deseaba ser mas cercano para conversar, reír, bromear y ¿Por qué no? Entrenar juntos.
Es por ello que para Susano'o  tener al  humano que tanto admiraba  como “esclava sexual “ era la fantasía de todo admirador, aunque a Okita no le gustará, ahora era propiedad de un loco demasiado entusiasta.
En verdad Susano'o estaba muy emocionado de tener a Okita para él,  tanta era su felicidad que no le dijo al humano sobre qué prefería conocerlo personalmente que ocuparlo simplemente como un objeto sexual. Además no había parado de hablar sobre lo impactante y sorprendente que había sido su pelea durante el Ragnarok mencionando que él había exigido ser su contrincante molestando a Anubis en su disputa por ver quien seria el siguiente peleador.
— Cuando supe que seguirías durante el Ragnarok, no dude en ofrecerme para pelear ya que estuve esperando impacientemente a que fueras el elegido porque quería conocerte y pelear contra ti ya que eres una leyenda —
Okita iba caminando con su habitual apariencia incluso como si se tratara de una burla de dios y que definitivamente  lo había abandonado, la humana seguía viéndose igual como cuando era hombre, su apariencia de mujer no difería mucho pues a simple vista seguía siendo bajito, sus senos no habían crecido demasiado así como tampoco tenía unas prominentes caderas ni largas y hermosas piernas, a excepción de su vagina todo lo demás parecía igual.
— Te ves demasiado feliz con el dictamen de ese viejo — dijo Okita.
Susano'o no borro su feliz sonrisa — ¿Por qué no estaría feliz? — cuestiono — han revivido a todos los peleadores del Ragnarok y podemos estar juntos, es la oportunidad perfecta para conocernos mejor y poder llevarnos bien, además los dioses ahora respetan más a la humanidad y no los exterminaron como debía ser. Así que yo creo que aunque los peleadores del Ragnarok hayan perdido en sí fue una victoria para la humanidad porque siguen vivos que era por lo que pelearon tan fervientemente todos ustedes —
Okita se detuvo un poco sorprendida, era cierto lo que decía ese dios aunque ellos eran esclavas, la humanidad seguía existiendo por otros mil años y ahora existían dioses que protegían a los humanos de la ira de otros pues vieron durante el Ragnarok lo sorprendente que podía ser la humanidad.
— Vaya… de alguna manera cuando lo dices así me parecer que ser una esclava sexual es un pago mínimo por salvar millones de vidas — la humana miro el piso pensando en su compañero Kondo Isami  ¿Qué haría él en su lugar?
De alguna manera Okita se sentía perdido de nuevo sin Kondo. Sin un camino, sin una meta y el vivir como un objeto le hacia sentirse miserable.
No había tenido en vida la oportunidad de enamorarse como todos los demás. No hubo jamás una persona en su corazón por la que sintiera la misma pasión que por el arte de la espada. Y durante todo su solitario camino siempre el único que quizá lo entendía era Kondo, a quien necesitaba más que nunca.
Susano'o se regreso a ver a Okita al notar que no lo seguía y vio una expresión triste en el rostro joven de este por lo que se le acercó llamándole varias veces sin recibir respuesta alguna por lo que se agacho para que la humana lo viera.
Los ojos de Okita se abrieron mucho y la mujer dio un salto hacía atrás cuando vio tan de cerca al dios.
— ¿Qué estás haciendo? — le preguntó Okita.
— Te estuve llamando — respondió Susano'o seriamente viendo como la humana intentaba ocultar sus emociones de él pero ya fuese porque Susano'o lo había estudiado a fondo o por el simple hecho de ser un buen observador no paso desapercibida la expresión de la humana — Creo que no me di a entender antes cuando fuiste convertido en mujer y designado a mi como tu amo — el dios dejo salir un suspiro — la verdad es que me hace mucha emoción tenerte para mi Okita, sin embargo jamás haría algo que tu no quisieras ¿Entiendes? —
Okita trago saliva llevando su mano a la cintura en busca de su catana porque, aunque no estaba en peligro sostener la empuñadura de su arma le hacía sentir menos ansiedad.
— En tu transformación a mujer se que sufriste mucho, fui yo quien estuvo cuidándote y calmando tu dolor, quizá por eso no recuerdas cuando te dije que no quiero tener una relación de esclavo-amo contigo, sino que de verdad quiero conocerte y tener una relación amigable y armoniosa contigo.  Tengo tantas cosas que aprender de ti y me gustaría enseñarte muchas cosas que yo sé, así  que siento que pronto nos haremos grandes amigos —
La humana asintió con la cabeza — No logró comprender del todo a los dioses, fuiste mi enemigo durante el Ragnarok y se supone que deberíamos ser rivales pero justo ahora dices cosas que contradicen las órdenes de un dios jerárquicamente más poderoso que tu y ni siquiera dudas de tus palabras —
El dios vio media sonrisa en el rostro de Okita y esa simple acción hizo que el corazón de Susano'o latiera más emocionado y feliz que nunca.
— ¿Por qué dudaría de algo en lo que fervientemente creo y quiero? Sería patético que no peleará por mis propios sueños y tu Okita siempre has sido un sueño para mi ¿Por qué debería hacerle caso a un dios que no pudo ver lo sorprendente que eran sus creaciones? —
El dios se reincorporó para acercarse a Okita y le tomo de la mano amigablemente — Ven, de ahora en adelante yo te guiare para que descubras todo lo maravilloso del Valhalla y por su puesto que tendrás de vuelta tu espada —
Con eso dicho ambos continuaron caminando ya sin dudas en sus corazones y tal y como había dicho Susano'o, Okita aunque fuese mujer disfruto mucho de la compañía del dios ya que este era amable, divertido y bondadoso. Le mostraba y contaba sobre sus aventuras, del cómo había visto a varios espadachines famosos e incluso como es que se transformaba y viajaba, entre ellos dos se formó rápidamente una sólida amistad e incluso una poderosa atracción.
La humana y el dios  les gustaba demasiado pasar el tiempo juntos haciendo cualquier cosa e incluso sin hacer nada  buscaban sin darse cuenta más contacto físico  cualquiera que fuese por pequeño que se tratara les hacia sentir cómodos y a gusto.
Okita no sabía si lo que sentía por la deidad podía ser llamado amor pero quería hacerle saber lo mucho que le apreciaba y valoraba. Sabia bien la humana lo que el dios sentía por ella, no era estúpida. El dios babeaba por ella y aunque nunca le faltó el respeto no pasaba desapercibido el sonrojo que este tenía cuando ella se acercaba demasiado a él.
La humana de alguna manera pensaba que el dios era algo “lindo” su alegre personalidad y su nata amabilidad combinadas con  su personalidad torpe y descuidada lo hacían a su parecer demasiado lindo.
“Deben ser las hormonas de mujer” se decía a sí misma Okita porque nunca había pensado que un hombre fuese lindo “Sí… definitivamente tienen que ser las hormonas de mujer”
Y aunque la humana pensaba de esa forma realmente quería que el dios la abrazara por más tiempo, la mimara e incluso pensó que no estaría mal si la besaba.
Así que una noche después de que Susano'o y Okita  tomaran cada uno un baño acabando de entrenar es que sin saber exactamente a donde iban es que por la provocación de Okita terminaron besándose fervientemente en una habitación tipo oriental arriba de un muy cómodo y fino futon.
Las lenguas de ambos se entrelazaron audazmente y lo que debía ser algo tierno pues era el primer beso de los dos se convirtió rápidamente en una pelea de dominio y pasión.
Susano’o fue quien al sentir como su miembro comenzaba a ponerse duro como si estuviera en una pelea es que detuvo el beso abruptamente alejando con ambas manos a Okita sin soltarla de los hombros pensando.
“Esto es peligroso.”
Un grueso trago de saliva dio la deidad  al ver la confusión en los ojos abiertos de la humana frente suyo, con aquellos  suaves y dulces labios aterciopelados, rosados e hinchados por su culpa. ¡Joder tan hermosa imagen tenía Susano'o frente suyo!
Okita tenia los labios entreabiertos. Su ropa estaba desarreglada dejando ver sus pálidos hombros y el inicio de sus tiernos y apetitosos duraznos ¿Qué no daría el dios por besar aquellos pequeños montes cual recién nacido destetado?
La mujer se había quedado con ganas de continuar con el beso. Detestaba que un hombre u otro ser marcara el ritmo de lo que ella quería, no permitiría que aquel dios le detuviera en algo que ella sin saber que quería ahora necesitaba.
— ¿Qué sucede? – pregunto con su voz baja —  Acaso ¿Hice algo malo? — la pregunta la hizo con un deje de dolor tan solo para ver si podía manipular al dios.
Claro esta que Susano'o, reacciono a esa sensual voz que le provocaba la sensación de mil mariposas en su estomago. Todo el cuerpo del dios se estremeció de placer y sonrió nerviosamente pues no quería lastimar a su rival.
— ¡No! — contesto apurado el dios — No haz hecho nada malo, p-pero es que… — los nervios del dios de la espada eran obvios tanto así que comenzaba a titubear algo que jamás pensó que le fuera a pasar al hablar — es q-que quiero dormir temprano —
La mirada fría que le dedico Okita al dios fue un reclamo sin palabras pero que calaba fríamente al corazón acelerado de Susano'o.
— Yo no quiero dormir todavía — ronroneo la pelinegra cambiando su personalidad  nuevamente como si el dios estuviera tratando con dos personas distintas — hazme compañía —
— D-debemos ir a dormir, mañana  quedamos de a ver a la señora Sasaki debido a su embarazo ¿Recuerdas? —
No podía Susano'o creer que estaba sudando como si hubiera hecho mucho ejercicio porque, de alguna manera pensó que la humana frente suyo iba a enojarse y sacar al demonio que tenía dentro sin embargo aquella que se había acercado estaba apoyada en sus muslos y sonreía con un deje de malicia siendo esa sonrisa algo que preocupo tanto al dios que no se atrevía a mirarla.
“Si no la miro no caeré en sus encantos, he tenido que enfrentarme a peligros y adversidades mas grandes. Vamos Susano'o no Mikoto, si no la miras estarás bien, estaré bien si no cruzo miradas con ella”
Okita tocó al dios para acercarse a su rostro para pedirle un solo beso más pero su sorpresa la hizo estremecer al notar la enorme erección que tenia Susano’o no Mikoto. Era enorme pese a estar oculta en la bata que usaba y de alguna manera saber que ella era la que provocaba los nervios y esa erección en la deidad llenaban de un orgullo siniestro a la humana.
Las finas manos de quien fue el denominado demonio de la espada buscaron lentamente el miembro duro del dios quien seguía balbuceando cosas sin sentido sobre deberes y obligaciones.
Susano'o cerro su boca de golpe al notar como las pequeñas manos de Okita tocaban su duro y adolorido miembro.
La mirada del dios se clavo en ella mientras el rostro de este se pintaba meramente de carmín y daba un grueso trago de saliva.
— O-O-Okita… — La humana sonrió al escuchar su nombre salir de los labios de este hombre.
— ¿Si? — ronroneo la guerrera al oído de su deidad — Susano'o —
De solo escuchar su nombre ser pronunciado por la pelinegra con ese tono de voz tan tierno y sensual hicieron que el dios casi se corriera en las prendas que llevaba; el dios quería llamar a Kondo Isami,  a Adán o a la señora Sasaki para que Okita se le quitara en encima pero eso no sucedió.
Para empezar Okita estaba maravillada de todas las reacciones que hacía Susano'o, y al meter las manos dentro de la ropa del dios pudo notar lo mojado que estaba, el presemen que sacaba la deidad era pegajosa y blanquezca muy similar al color de las perlas.
— Dices que  no por la boca pero esta espada de aquí exige ser atendida y lustrada — Okita no podía borrar su sonrisa pese a que no sabia que mierda estaba haciendo simplemente estaba siguiendo sus instintos y estos le decían que debía engullir aquel enorme y delicioso trozo de carne caliente que tenía enfrente.
El miembro del dios era glorioso a los ojos de Soji Okita quien no pudo hacer la comparación de su antiguo  pene con el del dios, aunque ahora la humana ya no fuese un hombre sabía perfectamente que incluso entre su especie aquella envergadura no era de tamaño normal.
La pelinegra se relamió los labios, se ato por completo el cabello hacia atrás y se agacho para engullir el miembro de Susano'o, todo lo que podía en su boca sin embargo en cuando su lengua tocó la punta de la cabeza rosa del miembro del dios este gimió por lo alto dejando salir toda su hombría en el rostro de la humana.
Okita se alejo para notar lo caliente que era el semen del dios, tan espeso como si nunca se hubiera masturbado en su vida y cuando estaba a punto de probarlo el dios le limpio la cara con la bata, pero lo hizo rápido aunque eso sí,  con cuidado de no lastimarla.
— Por eso te dije que mejor fuéramos a dormir — Susano'o parecía enojado y dejó de sonreír.
La humana lo pensó un poco y tomó al dios de la muñeca  — Quiero hacerlo — exigió.
— No quiero lastimarte — respondió el dios teniendo nuevamente una erección.
— No soy una débil muñequilla que puede romperse con unos cuantos golpes además, es mi decisión y quiero hacerlo contigo  pero solo quiero si tu estas listo —
Cuando dijo eso Okita pareció que el dios cambió su expresión a una más obscura fue cuando la humana sintió como los labios del contrario le besaron con brusquedad y deseo, rápidamente la pelinegra abrió su boca para recibir la húmeda lengua del dios en su boca en un beso asfixiante y excitante que los dejo sin aire a los dos.
Mientras se besaban Susano'o, uso una mano para masajear los pequeños senos de la humana mientras que con la otra comenzó a masturbarla acariciando y presionando la vagina de la guerra hasta que comenzó a sentír como esta movía sus caderas y que los dedos que ocupaba jugando con la vulva de su mujer estuvieran mojados por completo.
Okita comenzaba a gemir y a hacer ruidos con la boca, suspiraba largo y tendido cuando sentía los largos dedos del dios entrar en ella y salir masajeándola con maestría.
¡Dios quería más!
Fue entonces que el dios la tomó de los cabellos alejándola del beso, la examino con la mirada cuidadosamente y la sometió rápidamente en el futon subiéndose arriba de ella haciendo que la sangre de Okita se encendiera y su corazón latiera rápidamente.
— Pensar que intentarías seducirme a mi, Amanoma-Gaeshi… ¿No es un poco imprudente? — pregunto el de cabellos ondulados.
— En la próxima ¡Yo lo haré mucho mejor! — aseguro la pelinegra excitada como en su combate.
Con cierta brusquedad el dios abrió la piernas pálidas de la humana situándose en medio de ellas acomodándose mientras dejaba expuesto su gran miembro masculino chorreante de líquido seminal, erecto,  duro, deseoso de entrar en su humana porque aunque la oriental lo fuese a negar ella le pertenecía e iba a hacer de ella un desastre por completo sin contenerse.
Aun cuando Okita sentía miedo también sentía su cuerpo lleno de adrenalina. No iba a acobardarse solo porque la expresión de ese masculino dios había cambiado a una seria, casi siniestra lejos de la de una piadosa deidad.
— Ya usa esa maldita espada para cortarme — susurro Okita en una orden  — métemela —  sonrió de media vela sonrisa que no le duraría mucho tiempo.
— Cómo era de esperar del cazador de hombres más fuerte del periodo “Bakumatsu” —
La humana definitivamente no sabía las consecuencias de las palabras que ella acababa de decir, de saberlo jamás las habría dicho así que cuando la oriental le hizo aquella invitación exponiendo su vagina abriéndola con sus dedos incitando al deseo, el dios perdió toda racionalidad.
Inclinándose como un animal Susano’o mordió con fuerza a Okita del hombro derecho mientras que usaba su mano  para levantar hasta sus propios hombros la pierna de la humana, con la otra mano guio salvajemente su miembro a la entrada jugosa de la pelinegra hasta forzar su entrada en aquel apretado coño humedo.
Okita se aferró a las sabanas mientras se quedaba sin voz ante la intromisión violenta del dios en su interior. La impresión de ser penetrada fue un verdadero shock para ella pues un fuerte dolor atravesó todo su cuerpo desconectando su cerebro por un momento. Fueron solo unos segundos en los que incluso olvidó respirar y vio borroso , sin que siquiera por su cabeza cruzada algún pensamiento.
El dolor de la fuerte mordida que dio Susano’o con la estocada repentina arrancaron de la humana unas lagrimas y cuando volvió en sí se dio cuenta que nada la había preparado para semejante dolor, y aunque ella no era una cobarde ni mucho menos una débil mujer quizá no debió incitar al dios tanto.
Okita no tuvo tiempo de reponerse cuando Susano’o comenzó a moverse dentro de ella, era como si no le importara que la acabara de desflorar, como si solo de su propio placer se preocupara. Sentir el enorme trozo de carne entrar y salir dentro suyo le fue incomodo pero como la guerrera que era, apretó las muelas con fuerza soltándose de las sabanas para llevar sus manos al cuello de su rival y trago saliva dibujando una sonrisa en su rostro.
— ¿Por qué si soy yo la que esta sufriendo eres tu el que llora? — pregunto Okita viendo como Susano’o derramaba lagrimas y estas caían en sus mejillas sonrojada — dime… ¿Por qué lloras? —
El dios tembló al escuchar la suave voz de la humana sabiéndose derrotado — Para ser justo… realmente, desearía que este momento durará para siempre… — el de cabellos ondulados beso la frente de Soji con cariño y amor — este momento de felicidad, desearía que durará para siempre, mi corazón esta ardiendo —
Susano’o  sonreía ilusionado haciendo que esa ilusión se contagiara a la humana bajo suyo relajándola por completo calmándola, mientras esperaba sin decirlo a que ella se acostumbrará a tenerlo dentro.
— Tu también haces arder mi corazón y me haces sentir la sangre hervir — Okita quito las lagrimas del dios mientras comenzaba a frotarse en su dios.
Susano’o continuo moviéndose rápidamente  ambos como en su pelea no iban a dejar que el otro tuviera el control definitivo así que comenzaron a besar, morder y rasguñar en el ardiente momento de hacer el amor.
Durante su pelea ambos habían disfrutado de la gran batalla que llevaron juntos hasta el punto en que los dos habían deseado con todo su corazón haberse conocido en diferentes circunstancias.
El dios era algo violento pero descubrió como su humana disfrutaba con algo de dolor mientras la penetraba. Su gran miembro podía verse entrar y salir del vientre de Okita mientras ella gemía volviéndose sumisa a sus besos y caricias.
— Voy a correrme — gruño el dios cuando sentía como su miembro bombeaba dentro de ella y las paredes internas de su mujer lo apretaban como negándose a dejarlo escapar — Voy a fecundarte — le aseguro.
Okita negó con la cabeza sin dejar de gemir deseando que el dios siguiera penetrándola para continuar disfrutando de sus caricias mientras que su coño no dejaba de hacer ruidos húmedos cuando los testículos del dios chocaban con su piel baja mojándola aun mas ¿Cuántos orgasmos hasta este momento habia tenido?.
— No dentro — suspiro Soji sin dejar de moverse para que la verga tocara su punto más dulce mientras también sentía su cuerpo temblar anunciando el orgasmo.
— Soji… Okita  —
Fue entonces que el dios comenzó a moverse más erráticamente enterrando tan profundamente su pene en la humana mientras sentía como todo su cuerpo le abandonaba y vertía toda su semilla en el interior de su humana, lanzando un gran chorro de semen que no tardó en desbordarse e hinchar el vientre de su amada al ser disparado justo en su órgano femenino fecundándola inevitablemente mientras ella lanzaba una fuerte maldición  teniendo un escandaloso orgasmo .
Los dos se quedaron temblando ante la nueva experiencia sexual que habían tenido juntos, respiraban agitadamente tratando de componerse. El primero en hablar y quien estaba justo a lado de Okita fue Susano’o quien sonrió acariciando la mejilla sonrojada de la humana.
— Lo hiciste genial — dijo con su corazón alegre y feliz — Por favor Okita Soji, quédate conmigo y descubramos juntos este nuevo camino —
Okita le miro aun jadeando sin recuperar del todo el habla y asintió con la cabeza — Ya no estaremos solos nunca mas — le dijo devolviéndole la sonrisa, lista para otro raund con aquel adorable dios.
No era raro para nadie que el dios Susano’o pidiera ayuda a los humanos ene l pasado o presente, pero si fue una sorpresa verle tan enamorado de Okita pues nadie jamás pensó que el dios de la espada fuese a adorar tanto a una humana incluso más que a las espadas o al arte de la esgrima.
Gracias a todos por su apoyo y amor incondicional pero sobre todo a Lariza quien realizo este hermoso pedido especial y sin su paciencia este capitulo no estaría hoy entre nosotros.
29 notes · View notes
hidropost · 11 months
Text
Hallan muerto a Ociel Baena, magistrade que se convirtió en la primera persona en obtener un pasaporte no binario en México. Baena era un activista de la comunidad LGBT que se identificaba como persona de género no binario. De acuerdo con los reportes iniciales difundidos por la prensa local y colectivos activistas, junto con el cuerpo de Jesús Ociel Baena también fue localizada sin vida otra persona que sería su pareja sentimental, identificada como Dorian Herrera. Ociel Baena contaba con protección y fue precisamente uno de los guardias de seguridad quien se percató del suceso. Los primeros reportes señalan que el elemento de seguridad llamó a la puerta del domicilio y al no recibir respuesta decidió entrar. Fue en ese momento que identificó a le magistrade y alertó a las autoridades.
En redes sociales, el Movimiento por la Igualdad en México lamentó el deceso y lanzó un llamado a las autoridades para que investiguen lo ocurrido de manera debida.
“Lamentamos profundamente la muerte del magistrade Ociel Baena. Su legado en la lucha por la igualdad y contra la discriminación, a través del litigio estratégico y acciones incansables en favor de la diversidad sexual y de género, es invaluable. Exigimos el esclarecimiento total de los hechos. Su memoria y su obra seguirán iluminando nuestro camino”, fue el mensaje que acompañaron con el hashtag #JusticiaParaOciel.
Fuentes: Infobae, BBC,
Síguenos en: Instagram Tik Tok
133 notes · View notes
Text
Tumblr media
Escribiré los versos
que me dictes sobre tu piel,
y al terminar,
revisaré cada palabra
de tus labios con los míos.
Corramos pues,
el riesgo
de consumir el deseo,
antes que por no usarlo
nos consuma.
Ya vivimos
la inmortalidad
que vive
entre la primera mirada
y el primer beso.
Ahora,
ya nada
puede matarnos.
No hay miedos
más allá del néctar
de tu aliento.
No hay destinos
ni caminos perdidos.
Ni tan siquiera elegimos
los huesos
que nos mantienen
erguidos.
Nada hay,
que le ponga fin
al horizonte,
más allá,
de una línea fingida.
No hay paraguas
que proteja de la lluvia
que humedece los recuerdos.
Tú sabes,
que hay algunos momentos
que no pertenecen
a los tiempos,
y que viven tan cerca,
que no negocian
con olvidos.
No,
yo ya no quiero verte
y sentir
que algo muere
por dentro,
y que a trozos,
la vida me llevas.
Sé que es la falta
de tacto
la que roba la salud.
Que la vida entonces,
ya no es vida,
sino una muerte lenta.
Pero si me tocas,
si vuelven a volar
tus manos
sobre mis cielos,
ya no temeré a la muerte.
Y desde ese mismo cielo,
deseará un ángel
mi cuerpo mortal,
el mismo,
que no puede
por sus cielos volar,
que sólo andar puede
por la tierra
de tus credos,
y que sentir quiere
lo que yo siento,
cuando asoma
por mi alma
la yema de tus dedos.
66 notes · View notes
dakota-zen · 1 year
Text
Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.
Julio Cortázar
Tumblr media
206 notes · View notes
caostalgia · 1 year
Text
Todos los lamentos me llevan hacia ti, decía lo que debía decir para que no termináramos así, todos los caminos me alejan de ti, de tu indecisión, de tu falta de querer, de tu falta de saber apreciar todo lo que dé, ya aprendí que a la primera me debo ir después de haberme quedado hasta la muerte en otro lugar, qué tristeza que no puedas ni imaginar la vida tan bella que juntos podemos formar.
-Tinx
158 notes · View notes
danielac1world · 4 months
Text
Silencio.
Devoro silencio,
mastico el silencio,
grito en silencio,
¿ piensas en el silencio ?,
destruyo el destello
de un palpitar en la tarde,
reconstruyo la no-palabra,
escucho a los pájaros
amar a quien no ama,
lloro en silencio,
aprendo en silencio,
respiro silencio,
vomito mariposas de media estación,
armo momentos,
destruyo rituales,
adoro el calor caótico de aquellos despertares,
digo silencio,
me responden,
"ya basta",
guardo el silencio,
denuncio la herida,
y me tiro a rodar,
con la frente baja.
Adoro tu piel contra mi miedo,
la estufa piensa también en el silencio
cuando no digo tu nombre...
¿ sabrás aún mi nombre ?;
el mosquito grita al otro lado...
el silencio no nombra al silencio,
¿qué no hay del otro lado ?
tus manos cortan el hielo,
mis ojos dividen el aire,
el silencio sabe de nombres
que nunca callaron,
las voces de los últimos pájaros.
Y puedo mirar a través de tus ojos,
miro el mar tomándome despacio,
la arena no sabe del silencio,
las huellas no saben del pasado,
las plumas conocen el recuerdo,
y de tus pies suaves a la luz del sol...
no se sabe nada
más que tu no-voz llamándome
en la eternidad de las velas;
silencio amor,
siempre se trata del silencio,
y la música alta cuando baila el desorden de quererme,
silencio,
y tu boca ausente prendida a mi cuello,
silencio,
y la mano justa,
para enredar mi pelo.
¡Ay amor!,
¿qué sabes tú del silencio?,
si callar es tan difícil,
habitando el llanto del mundo en tu pecho...
cuando las flores callen el perfume de tenerte,
con sólo abrir los ojos,
sabremos nuestros nombres,
gritar en el eco
de nuestra primera muerte.
-danielac1world ~Regreso~
35 notes · View notes
hellokittywrites · 2 months
Text
MOONSTRUCK
teeth, tercera parte.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
¿se sellará la indescriptible atracción que sentías hacia Park Sunghoon con el pinchazo de un colmillo?
pair: vampire!park sunghoon x f!reader
summary: park sunghoon volvió a por ti y esta vez, selló lo que debería haber sellado desde que hace tres meses.
warnings of part 3: sangre, mordiscos, besos en el cuello, menciones de dios, traición de una amistad, lenguaje malsonante y si veis alguno más decidme pls
words: 4587
quick note: esta es la penúltima parte escrita escuchando compulsivamente moonstruck y folklore porque estoy obsesionada, de ahí el cambio de título! disfrutad <3
primera parte segunda parte cuarta parte
Tumblr media
Park Sunghoon miró a la Luna desde aquella azotea, lejos del lado por el cual podías llegar a verle desde la entrada. La miró con un corazón tembloroso y entrañas temerosas. Se sintió un niño, aquel que una vez fue él, mirando desde una de las grandes ventanas de su cuarto a la misma Luna que ahora todavía le proporcionaba esa simpatía que muchas veces, sintiéndose la criatura más horrorosa del mundo, necesitaba.
Te extrañaba.
Su pequeñez e iluminación de plenitud le provocaban paz, la misma que junto a ti minutos antes, dentro de toda la excitación y nerviosismo de vuestro primer encuentro, sentía. Porque os pertenecíais. Erais uno del otro.
Con una mano en su boca, intentando notar la relajación de sus colmillos, se dio cuenta de que todas aquellas veces de niño que hacía lo mismo, mirar a la Luna buscando una compañía específica, ya no se repetirían. ¿Por qué? Porque tú eras esa compañía que siempre su solitario corazón necesitó.
Tú eras su Luna. Y no podía perderte.
Tus manos, agarradas a los soportes laterales que tenía la moto en su asiento trasero, empezaban a congelarse mientras Park Jay conducía por la autopista.
Su camiseta holgada de tirantes sufría cada golpe del viento con pasividad, moviéndose descontroladamente mientras su pelo se revolvía al mismo ritmo. Tu corazón se relajó en tu pecho tras notar la prudencia con la que este ser que suponías inmortal conducía, preocupándose por seguir las normas de tráfico correspondientes pese a conducir una moto, conducta no muy seguida por la mayoría de los mortales.
Y, en verdad, mientras Sunoo te peinaba escasas horas antes preparándote para la fiesta, el trayecto no te había parecido tan largo.
Recordaste lo emocionada que te sentías entre las risas de Sunoo y los comentarios de Aerin y tu estómago se revolvió, rememorando por algún motivo muy claro, el sabor a sangre de animal que habías ingerido pensando que era ese vino de mala calidad que Aerin te recomendó -con ella las recomendaciones son prohibiciones- no beber.
Volver a pensar en ellos, en tus hasta el momento amigos, no te produjo buenas sensaciones. Aerin no estabas del todo segura pero Sunoo sí... Sunoo era lo mismo que el chico que te llevaba a los dormitorios sin pedir aparentemente nada a cambio; un vampiro. No sabías si por esa similitud Jay te había recordado a Sunoo, o si eran sus acciones amables. Comportamientos de Sunoo contigo que ya no te parecían tan bondadosos.
El frío de tus manos empeoró mientras salíais de la autopista, volviéndose sumamente doloroso. El frío quema, y no sentías las cenizas de tus manos mientras Park Jay al entrar en la carretera que dirigía hacia el pueblo cercano a dónde se situaba la Academia Bram Stoker, era parado por un semáforo en rojo.
Rápidamente, tras él sacar sus pies de los soportes de la moto apoyándolos en la tierra para estabilizarla y cuando tuviste la seguridad de que la gravedad no te haría caer, llevaste tus manos a tu pecho, intentando de alguna forma calentarlas. Jay giró la cabeza hacia ti, notando tu movimiento y, tras chasquear la lengua -gesto que te asustó al relacionarlo con molestia por ti cuando en verdad era hacia él mismo por no haberse dado cuenta de que probablemente hacía un frío de muerte- desató la sudadera que tenía atada a la cintura y te la entregó.
Guiada por esa percepción de molestia causada por ti en ese ceño fruncido suyo, negaste con la cabeza efusivamente. El semáforo se puso en verde pero Jay siguió tendiéndote aquella prenda de ropa. Gesticulaste hacia el semáforo -considerabas que al tener el casco no te escucharía si hablabas, en fin- pero Jay ni se inmutó. Pese a coches pitando o adelantándole, la mano de Jay seguía dirigida hacia ti con la sudadera. Tus mejillas se calentaron de, lo que supusiste, frío y decidiste aceptar la oferta, poniéndotela rápidamente. Mañana seguramente te despertarías con fiebre.
Tras terminar de ponértela, te diste cuenta de que Jay seguía girado hacia ti y, antes de que pudieras comentarlo, agarró una de tus manos que llevó consigo hacia delante mientras el volvía a mirar al frente, colocándola en su abdomen, rodeándolo. Tu primer instinto fue apartarte, pero volver a pensar en estar en la posición de antes cuándo ésta era mucho más cómoda te hizo replantearte la situación hasta acabar aceptando, rodeando el otro lado de su abdomen con tu otro brazo.
Además, Jay no tenía intenciones de arrancar y seguir con la marcha hasta que te situaras de esa forma. No viste su sonrisa satisfactoria después de que lo hicieras y antes de encender el motor al sus anchos hombros bloquear tu campo de visión.
No pudiste evitar darte cuenta de lo relajado que estaba tu corazón y pensar en a cuánta velocidad latiría si tus manos estuviesen sobre los abdominales de Park Sunghoon y no sobre los del capitán del equipo de béisbol.
Buscando distraerte de cómo la adrenalina se instauró en tu diafragma ante el mero pensamiento de tener a Park Sunghoon a esta mínima distancia, pensaste en las preguntas que le harías a Jay una vez llegado a la Academia.
Toda las dudas que te podría provocar esta situación (tener pruebas de la existencia de vampiros) se podrían ramificar de muchas maneras, centrándose en diversos efectos. Pero, por tus vivencias y tú ya existente sospecha de la Academia y los alumnos SSR, tus se centraron en la identidad: ¿Quién era vampiro y quién no? ¿Eran todos los alumnos SSR vampiros? ¿Era la Academia una Organización secreta de vampiros? ¿Era Aerin... un vampiro? 
Sunoo, Jay, Jake y Heeseung lo eran. También Sunghoon aunque no necesitaba morder a nadie para demostrarlo. No eras estúpida, la atracción que sentías hacia Sunghoon no era una conexión posible entre dos meros humanos. Ni siquiera os conocíais ni habíais hablado más de las palabras que hacía menos de una hora habíais intercambiado... ¿Cómo podías sentir que lo necesitabas para existir cada vez que vuestros ojos se encontraban y amar semejante disparate? No, los vampiros tenían que tener algún  tipo de poder atrayente o de manipulación física y mental de la que los cuentos de hadas no hablaban. 
Esta era otra de las preguntas que le harías a Jay con confianza y seguridad pero... ¿Entrarías en detalles? Una especie de poder como el mencionado tenían que tener los vampiros y el hecho de que el colmillo de Jay estuviese partido podría ser una explicación de por qué con él no sentías ese indescriptible que se volvía una droga con Sunghoon.
Aunque luego pensabas en Jake y Heeseung, incluso en Sunoo, y te dabas cuenta de que tampoco lo sentías. Sólo con Sunghoon. Recapitulando algunos momentos de vuestra interacción, a veces Sunghoon ni siquiera parecía atraerte voluntariamente, frunciendo su ceño como si no pudiera controlar sus acciones pese a querer la anulación de ellas cuánto antes.
Tenias una pieza de un puzzle que no era parte del que Park Jay podía darte pistas sobre su colocación exacta. Eso sí, el resto de alumnos veían a los SSR con esos ojos de admiración que no solía provocar el simple hecho de una capacidad adquisitiva mayor, no. Eso normalmente daba envidia y no admiración.
Así que llegaste a la conclusión de que los propios alumnos SSR tenían algo que ver siendo ellos los responsables de la actitud de los azules.
Justo cuando ibas a dejar que tus pensamientos buscaran alguna otra cuestión o que simplemente tuviesen la oportunidad de recordar lo bonitos y definidos que lucían los lunares de Sunghoon a la corta distancia a la que habías llegado a estar de él, en el camino oculto por grandes árboles que llevaba directamente a la verja gótica que conformaba la entrada de la Academia, Jay bajó súbitamente de velocidad hasta quedaros parados en medio de naturaleza.
Le miraste extrañado pero antes de que pudieras preguntar, Jay te indicó bajar con la cabeza. Así hiciste, con su sudadera en tu cuerpo, apoyando los tacones en la gravilla de la carretera. Tras unos intentos de encender el motor, un Jay frustrado se dirigió a ti.
—Parece ser que nos hemos quedado sin gasolina de repente. Lo que no tiene ningún sentido porque este cacharro suele avisarme casi horas antes— y no dudabas las palabras de Jay pues aquella moto parecía haber costado una fortuna.
Jay se llevó una de sus manos cubiertas por guantes de cuero a la frente, resoplando mientras bajaba del vehículo y se dirigía a tu figura de brazos cruzados y mirada inocente.
—Creo que vamos a tener que seguir andando, menos mal que estamos cerca— Estableció mientras observaba. Asentiste sin remedio y comenzasteis a caminar: tú más cerca de los árboles y Jay tirando de la moto situándola en la carretera, caminado a tu lado izquierdo. Tras unos pasos de silencio cómodo hablaste.
—Es hora de mis preguntas— Tus palabras sonaron más serias de lo que esperabas y te sentiste una detective en una novela de Poe. Jay sonrió.
—¿Qué es lo que quieres saber?— Ladeó la cabeza mirando al frente mientras seguíais caminando.
—Antes de nada, ¿por qué me has ayudado?— Jay susurró algo entre las líneas de sabía que ibas a decir eso. Te miró de soslayo, girando su cabeza para conectar sus ojos rasgados con los tuyos, dijo — Cuando vives tantos años, los actos pierden mucho significado. Te ayudé porque vamos los dos al mismo destino. Además de que va en contra de mis valores dejar a una chica tirada en la calle rodeada de vampiros a estas horas—.
Te sorprendió sus largas respuestas al tener en tu cabeza la idea de que Park Jay era bastante reservado. Hasta su comentario final te había hecho sonreír.
—Que yo sepa, tú también eres un vampiro—.
—Sí, pero soy algo así como un retirado de guerra— El movimiento burlesco que realizó con sus cejas te hizo reír. Jay te miró con una expresión indescriptible.
Sorprendentemente, te sentías a gusto en la presencia del vampiro, demasiado a gusto. Deberías desconfiar de este sentimiento, de él, ya que no lo conocías. Pero no, seguiste con tu sonrisa, volviendo a mirarle tras tu explosión de risa. Hiciste contacto visual con esa mirada tan extraña y decidiste falsear tu antes verdadera sonrisa.
—No voy a preguntar acerca de vuestra condición porque ahora no podría procesarlo todo. Sólo necesito saber ahora mismo dos cosas, pues mi madre me enseñó a no ser avariciosa y la verdad siempre acaba saliendo a la luz— Tu mirada se tornó un tanto oscura, sorprendiendo a Jay. Ni de broma ibas a aceptar su amable gesto hacia ti como insignificante. Los vampiros no tenían tan mala fama en los cuentos sin razón.
Rápidamente ocultaste tu verdadera desconfianza al continuar con tus preguntas. —Bram Stocker es un refugio de vampiros, ¿verdad? Y manejáis vuestra identidad como secreto a través de la manipulación, ¿verdad? Tal y como ahora lo estás haciendo. Para que sienta confianza contigo sin apenas conocerte—.
Jay permaneció pensativo durante unos segundos mientras miraba al frente, ya distinguiéndose las verjas de entrada a la Academia. No te lo demostró, pero en el fondo estaba sorprendido porque no se esperaba esta forma de actuar por tu parte. Sin duda, eras estudiante becada por alguna razón. Después de varios pasos, habló.
—He de ser honesto, no eres la primera alumna azul o, en general, humana en descubrirnos porque la Academia no es un refugio, no es un escondite. Es nuestro lugar, somos nosotros los que tienen el poder. Si te das cuenta, mira de quiénes somos hijos los alumnos SSR. — En tu cabeza apareció el recuerdo de Aerin relatándote su primer encuentro con su ahora ex suegro, el presidente del país —Básicamente, tu sociedad está gobernada por mi sociedad. Pero no hay nada que temer, no nos interesa acabar con los humanos ya que ellos mismos podrían acabar con nosotros al conocer las formas de matarnos y porque siguen siendo nuestro mayor placer— Evitaste hacer contacto visual con Jay mientras seguíais caminando, reflexionando en sus palabras. Tras aclararse la garganta, Jay prosiguió.
—La paz existente es esta. También está relacionada con lo que acabas de decir. Los vampiros os atraemos, pero no conscientemente como piensas. Hay algunos que sí que lo hacen, al fin y al cabo somos manipuladores por naturaleza, pero lo que tú estás sintiendo ahora, esa confianza, no te la estoy produciendo voluntariamente. Nosotros, por nuestra complexión y físico, hasta por la propia voz, atraemos a nuestras presas sin mover un dedo. Sois vosotros los que venís hacia nosotros— El contacto visual fue ahora inevitable y la sudadera de Jay ya no servía para protegerte del frío mientras un brillo rojo parpadeaba en sus pupilas. —Por eso los que descubren lo que somos, no se escandalizan, porque les gustamos. Quieren más de nosotros. Salvo tú, claro. No sé por qué desconfías. No deberíais y esa condición tuya, sólo aparece en estúpidas leyendas imposibles—.
Sólo se escuchaban el ruido que tus tacones provocaban al entrar en contacto con la gravilla de la carretera y las suaves pisadas de las botas de Jay mientras, pensativa, masticabas sus palabras internamente, siendo consciente de las respuestas que indirectamente te estaba aportando.
La primera, todos los SSR eran vampiros, incluyendo a Aerin. La segunda y que deriva de ésta, nuestro mundo parecía gobernado directa o indirectamente por ellos. La tercera, no había forma de resistirse o denunciar o nada. Parecía ser que su existencia en verdad era un secreto a voces. La cuarta, había una aparente paz que era mejor que no rompieras. La quinta y última, tal y como temías, eras diferente y Sunghoon lo sabía mejor que nadie. 
Buscando poder especificar qué era esa diferencia que te separaba del resto, decidiste preguntar más.
—¿Qué leyendas?— Tras tu pregunta, el capitán del equipo de béisbol te miró por un momento guardando silencio. Un silencio que notaste lleno de secretos.
—Eso yo no te lo puedo decir— Su tono de voz sonó un poco frío, lo que te hizo captar el mensaje que se escondía detrás de éste. Por ahí no podías seguir con tus preguntas.
Finalmente, llegasteis a la entrada de la Academia y la hora de separarse al Jay tener que dirigirse al aparcamiento destinado a los coches y motos de los alumnos SSR.
En silencio os situasteis cara a cara. Te quitaste su sudadera.
—Gracias Jay— Dijiste devolviéndole la prenda de ropa. Jay esbozó una misteriosa sonrisa después de fijarse por unos segundos en tu cuello.
—No hay de qué, amiga de Aerin— Se giró y su oscura figura empujando su moto desaparecieron en la niebla nocturna que se había empezado a formar.
¿Acaso no sabía tu nombre? Aquello te había molestado, especialmente tras el tono de burla que había empleado para designarte como amiga. Ya no sabías muy bien si podías encajar en esa categoría y no necesitabas que alguien como él te lo especificara.
‧͙⁺˚・༓☾  ☽༓・˚⁺‧͙
Mientras caminabas a paso ligero por la bóveda central a partir de la cual se elevaba el resto de la estructura de la Academia, las palabras de Jay te perseguían mentalmente. ¿No era muy pronto para llegar a una conclusión exacta? Sí, te había dejado sola en la guarida del lobo, formando parte ella de la manada, además de todas aquellos comentarios o actuaciones que podían cuestionar perfectamente su moralidad como tu amiga. Siempre fuiste consciente de ello, pero a la vez, Aerin fue quién nunca te dejó sola y quién te hablaba de su vida con una elocuencia un tanto íntima. ¿Verdaderamente no significabas nada para ella? Y, si te lo esperabas, ¿por qué te dolía tanto?
Pero, ¿cómo de buena amiga eras tú si te encontrabas suspirando por su exnovio?
Seguiste caminando inconscientemente, sumergida a gran profundidad en tus pensamientos y emociones. Toda aquella noche había sido digna de las historias más fantasiosas del mundo y, aún así, era tu realidad. Giraste una esquina, acercándote a la salida trasera del edificio de piedra, donde se situaba el camino al aire libre hacia los dormitorios de los alumnos azules.
Pensar en Aerin te hacía pensar inevitablemente en Sunoo y en la proximidad en la que estos dos se habían encontrado durante el evento. Imagen que te hizo recordar la existencia de los vampiros y las palabras de Jay y... Era definitivamente demasiado.
La idea del mundo estar gobernado por vampiros no te hacía sentir muy cómoda. Aunque Jay habló de paz, la Academia te parecía ahora una granja en la que los depredadores criaban a sus presas con amor para después matarlos con esos colmillos. Podía ser que estuvieras exagerando un poco, pero ahora estaba todo demasiado reciente. La necesidad de estar con tus padres casi te atragantó.
Saliste del edificio principal hacia los soportales de los dormitorios, siendo bañada por una lluvia repentina y la luz de la Luna. Mañana definitivamente tendrías fiebre y un resfriado.
Tus pisadas hacían contacto con la hierba y tus pies estaban sufriendo demasiado en aquellos rojos tacones. Sin pensártelo mucho debido a lo agobiada que te encontrabas por toda la situación necesitando tumbarte en tu querida cama cuánto antes, te quitaste esos tacones, liberando tus pies para que hicieran contacto con la húmeda hierba. Estaba muy fría y, si no tuvieses esas heridas en los pies, correrías para resguardarte de la lluvia.
Con cada ligera pisada eras más consciente del silencio que te rodeaba. Con la nieblilla que se había instaurado y la ausencia de luz artificial, la escena que te rodeaba era bastante tenebrosa. Digno de Poe, otra vez.
Cuando tu imaginación empezó a crear sombras oscuras semejantes a seres extraños o personas con la nieblilla, decidiste caminar más rápido y lo escuchaste. El eco de tus pisadas que semejaban otras.
Sentiste los pelos de tu nuca erizarse. Caminaste todavía más rápido, intentando convencerte de que era una ilusión provocada por tu cerebro, que nadie te estaba siguiendo. Pero ahora ese eco que decidiste pensar que era de tus pisadas empezó a sonar más fuerte, diferenciándose de tus pasos. ¿Alguien estaba caminado detrás tuya?
Probablemente sí, pero llegaste a la tranquilizadora conclusión de que seguramente era otra alumna o alumno que volvía de la fiesta. Hasta que tu corazón empezó a latir a una velocidad sólo conocida en momentos determinados y sólo provocada por un único estímulo.
Dejaste de caminar súbitamente, rezando a Dios o a alguien esperando que el alumno o la alumna que te seguía pasase de largo, demostrando que no eran quién creías que era.
Pero con el fin de tus pasos vinieron el fin de los pasos que te seguían. Respirabas lenta pero profundamente mientras lo único que se movía eran las gotas que resbalaban por tu frente hasta decorar tus pestañas, junto con los árboles lejanos por el baile del viento. Con el corazón en un puño, las manos temblando y la boca repentinamente seca pese a la humedad de tus labios mojados por la lluvia, giraste tu cabeza lentamente para después acompañar el movimiento con tu cuerpo, dando un paso hacia atrás, apoyando la punta de tu desnudo pie derecho en la hierba. Dejaste de respirar, forzando los huesos de tu cuello y tu clavícula en un frío instante.
Un Park Sunghoon con la cabeza baja y el flequillo húmedo de la lluvia te recibió. Al escuchar la detención de tus pasos, él también se había parado, esperando con paciencia. Sus piernas ancladas en la tierra con firmeza, sus manos todavía en sus bolsillos. Escuchando como cesó el ruido de tu respiración, levantó la cabeza, dejando de mirar simplemente las huellas que tus pies habían dejado en la hierba para mirarte.
Unos ojos de sangre te recibieron entre las cortinas que su húmedo pero luminoso flequillo formaban. Hiciste contacto visual y tragaste la sequedad de tu garganta, pasando tu lengua brevemente por tus labios, frunciendo levemente el ceño en un gesto de puro anhelo.
Las indescriptibles sensaciones volvieron pero, buscando que no consiguieran dominar tu mente y hacerte perder el sentido, en medio de la adrenalina de su repentina aparición te provocó, hablaste.
—¿Qué haces aquí? Por aquí no se van a tus jodidos dormitorios— Intentaste sonar distante, cortante, fría. —No te acerques ni un segundo, Jay me ha contado todo y esto no es normal. Yo no debería...— Tus palabras finales sonaron débiles llenas de oxígeno más que de sonido mientras el anhelo que sentías por él incrementaba demasiado. Estabas cansada de toda la situación, de sentir incomprensibles.
En medio de tus agotadas palabras pestañeaste y Sunghoon, un vampiro con la antinatural velocidad que los caracterizaba, apareció a un sólo paso de ti, paso que cerró rodeándote con un brazo la cintura y con una mano acariciarte el cuello. Su tacto era gélido. Su voz sonó con el mismo cansancio y el mismo anhelo que habías impregnado en la tuya.
—Jay... Jay... Después de meses, meses aguantando esta estúpida necesidad de tenerte en mis brazos y de que por fin me hicieras el caso que necesito, que necesitamos, te pones a hablar de otros. Lo tuyo es— Se acercó a tu cuello, oliéndolo y sentiste como todo su cuerpo temblaba de necesidad —... Absolutamente increíble. ¿Crees que yo quería sentirme así hacia una mera humana aun sabiendo mi propio disgusto a gustaros, a probaros, a... —Su voz calló y sin fuerza alguna susurró con el limitado aire de una última respiración —¿morderos? Dime, ¿tienes alguna absoluta idea de esto? Hasta romper con Aerin sacando de quicio a mi padre para que luego huelas a ese capitán de pacotilla— Se apartó de tu cuello, haciendo contacto visual contigo.
Este era el momento de apartarlo. Separarte de un vampiro, del ex de tu mejor amiga, del maldito Park Sunghoon hijo del presidente del país. Deberías apartarlo, ¿no? Empujarlo y llamarlo asesino, llamarlo frío y egoísta y narcisista y... —¿Por qué sólo me siento así contigo, Sunghoon? ¿No era que todos los vampiros pueden..?— Tus palabras quedaron apagadas ante la jodida sonrisa y el leve movimiento hacia atrás que Sunghoon realizó tras tú llamarle por su nombre. —Dios, hoy ya no sé quién soy— Murmuró y tus cejas se fruncieron, no entendiendo ninguno de sus actos pero sintiendo un gran aprecio hacia él, pese a ser un desconocido. Sunghoon levantó la mano de tu cuello, acariciándote la mejilla. Su voz sonó rota. —Porque soy jodidamente tuyo y me acabo de dar cuenta—.
Una frustración interna desconocida se desató al verlo en ese estado y, sin darte cuenta, te acercaste a él mientras la lluvia te dificultaba ver claramente sus ojos ahora rojos, su cuerpo entero. Sunghoon, notando aquello, inclinó su cara hacia la tuya y llevó la mano que estaba en tu cuello a tu mejilla, rozando con su pulgar pestañas, quitándote el agua de éstas que no te permitía ver la sinceridad de sus palabras en su rostro, que no te dejaban observar la puerta a sus honestas emociones que sus ojos eran, que toda su expresión era. Lentamente dejó de rodear tu cintura para con la mano de ese brazo, hacer lo mismo en tu otra mejilla, en tu otro ojo.
Tras segundos de este íntimo cariño silencioso, susurró débilmente —Me vuelves loco. Dime que tú también sientes lo mismo, por favor—Notaste el temblor de unas manos que luchaban por no perder el control, por no expresar al cien por cien su deseo.
Aún en las últimas, Sunghoon quería escucharte. Quería saber si esto también lo sentías como él, que tú también compartieras el momento con la misma pena. Porque no deberíais desearos, necesitaros. Te anhelaba de una forma que iba más allá de algo terrenal, casi parecía una unión del destino y él no había elegido esto. Tú no habías elegido esto. Él odiaba notar el fuego de sus ojos ahora carmesís, lo puntiagudo de sus colmillos y el temblor de sus manos. No quería ser lo quién era y toda su vida se había comportado como un humano hasta que tú llegaste y activaste sus más olvidados sentidos. Tú odiabas tu incapacidad de separarte porque lo necesitabas y ¿quién era él? Un vampiro y además, el exnovio de Aerin, de tu maldita mejor amiga.
Pero, ¿cómo podíais resistiros a vuestro propio destino cuando él tenerte en sus brazos y tú estar en ellos se sentía tan correcto? Porque si Sunghoon quitaba su propio miedo a dejarse llevar contigo, ese futuro presentándose como suyo jamás se había sentido tan perfecto, encajando con el resto de su vida sin imperfecciones ni esquinas forzadas, la verdadera pieza de su puzzle existencial.
Lo mismo sucedía contigo. Él te proporcionaba la compañía que en tu solitaria infancia habías buscado en libros con personajes tolerantes y relatos apasionantes. Sunghoon era tu historia.
—No te conozco Sunghoon y aún así..— Te miró con unos ojos rotos de necesidad— Aún así, es como llevase toda la vida buscando tu compañía—.
Sunghoon tras tu confesión perdió cualquier tipo de control.
—¿Puedo probar una cosa que realmente nos ayudará a saber si esto es puro deseo o pura necesidad?— Sunghoon te miró como si te fueras a romper, hablándote con una intimidad muy personal. Tragaste tras escuchar un relámpago y, con tu corazón latiendo de emoción, asentiste mordiéndote el labio. Sabías perfectamente qué es lo que iba a hacer, qué es lo que necesitaba, cómo se podría probar esto.
Así Sunghoon, con una velocidad demasiado lenta buscando grabar cada segundo de este encuentro en su memoria, se acercó con cuidado, como si temiera romperte si actuase con toda la fuerza con la que te deseaba, como si de ti dependiera el silencio, como si necesitase concentración en semejante tiro para que su flecha encajara perfectamente.
Tu mente, cuándo sintió su gélido aliento sobre tu mojado cuello, se bloqueó. No hubo miedos, no hubo nerviosismo. Estabas a absoluta merced de su contacto, sintiéndote lo más segura que te habías sentido nunca. Sunghoon acercó sus carnosos labios casi violetas por la temperatura a tu cuello, permitiéndose rozarlo con ellos, mientras uno de sus brazos volvía a rodearte la cintura, acercándote a él. Vuestros cuerpos chocaron suavemente.
La delicadeza con la que te tocaba no era para nada la de un depredador hambriento, siendo consciente de cada uno de sus movimientos para negar cualquier posibilidad de dañarte. ¿Era verdaderamente deseo si a la hora de la verdad podía ser tan racional?
Notó tu acelerado pulso en sus labios y con el brazo que te rodeaba ejerció más presión, empujándote un poco más hacia él, besándote el cuello con más presión, gesto que hizo que emitieras un sonido ahogado que fue directo a su propio control, desafiándolo. Con una de tus manos, agarraste el bíceps del brazo que te rodeaba, necesitando un soporte.
Sunghoon escuchando tu petición desplazó la mano que había quedado en una de tus mejillas hacia tu otro brazo, deslizando sus dedos por tu desnuda piel hasta llegar a la palma de tu mano, juntándola con la suya y entrelazando vuestros dedos. Cuando apretaste su mano como respuesta, supo que eras suya y así lo selló.
Sus imposiblemente afilados colmillos penetraron tu piel y nunca habías sentido tanta satisfacción en tu vida. No era un placer sexual pero te sentías completa de una manera que sólo eso podía dar. Y Sunghoon, cuando probó tu sangre, sólo supo una cosa.
Estaba destinado a ella.
‧͙⁺˚・༓☾  ☽༓・˚⁺‧͙
taglist (open!): @strxwbloody @baaamkyu
notes: omg la parte 3 está aquí!! espero haberos acelerado un poco el corazón JAJSJAJAJ me gustaría saber vuestras impresiones so... comentarlas pls!!! ilysm <3
22 notes · View notes